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356 TRATADO DE ANATOMIA HUMANA El sentido del gusto se halla loealizado en la mucosa lingual, div id ida en dos partes por la V lingual, de los cuales una es an te rio r y o tra posterior. E l nervio glosofaríngeo recoge las sensaciones sápidas de la p a rte posterior de la V. E n el bulbo form a el fascí culo solitario, cuyo núcleo es el centro bu lbar del glosofaríngeo. E l nervio lingual del trigém ino recoge las sensaciones de la p a rte an terio r de la lengua. Sus fibras, que van p r'm ero a la cuerda del tím pano y después a l ganglio geniculado, pasan más ta rd e al in term ediario de W risberg que term ina en el núcleo del haz solitario.Centro gustativo. E l fascículo que se desprende del núcleo del haz solitario cruza el eje encefálico y llega a la corteza cerebral sensorial. Se han señalado la circunvolución del hipocampo, el cuerno de Ammón y el cuerpo dentado como centros reflejos del gusto, cuya función sería m otora y secretora. U ltim am ente se ha afirm ado que el centro del gus to sé encuentra en la p a r te in ferio r de la circunvolución parie ta l ascendente. VIAS OPTICAS Das vías ópticas se inician en las cé lu la ; visuales represen tadas po r los conos y los bastones de la retina, de donde se con tinúan po r las células bipolares, integrantes tam bién de la retina, po r medio de los cuales se transm iten los in flu jo s visuales a las dendritas de las células ganglionares, que constituyen la capa celu lar m ás in terna de la re tina . Los cilindroejes de las células ganglionares convergen p a ra form ar el nervio óp tico, que del polo posterior del globo ocular se in troduce en la cavidad craneana a tra vés de l agu jero óptico, pfira alcanzar el ángulo an te rio r del cuadriláte ro del quiasma óptico. A quí las fib ras del nervio se entrecruzan parcialm ente de m anera que las pro cedentes de los dos tercios in ternos de la re tin a pasan al lado opuesto, en tan to que las del tereio externo continúan del mismo lado. F ib ra s cruzadas y directas, a p a r tir del án gulo posterior del quiasm a óptico, constituyen la cin ta óptica. E sta contiene, además, fi b ras com isurales que corren po r su p a rte in te rn a y que, orig inadas en el cuerpo genicu lado in terno de u n lado, pasan po r el borde posterior del quiasm a óptico, para continuar se en la c in ta óptica del lado opuesto y te rm in a r en el cuerpo geniculado in terno del otro lado, constituyendo en conjunto la comisura de Gudden. E stas ú ltim as fibras no tienen relación con la visión. L a c in ta óptica, al d irig irse hacia atrás, form a cuerpo con el tálam o óptico y se di vide en u n a ra íz in te rn a y o tra externa. L a prim era, constitu ida principalm ente por las fib ras comisurales de Gudden, va a te rm inar a1 cuerpo geniculado interno. La segunda, for m ada po r las fib ras ópticas directas y cruzadas, se d irige a l cuerpo geniculado externo, al pu lv inar y a l tubérculo cuadrigém ino anterior. De las neuronas del cuerpo geniculado externo y de las del p u lv in a r parten axones que van a in teg ra r la porción re tro lcn ticu lar de la cápsula in terna, donde constituyen las radiaciones ópticas de G ratiolet. (Yéase fig . 240.) E stas fo rm an u n a lám ina que sigue po r la cara externa de la prolongación occipital del ventrículo lateral, ocupando antes la cara p rofunda del lóbulo tem pora l; van a te rm inar a la corteza cerebral que cubre los labios y el fondo de la cisura calcarina. L a zona visual de la corteza calcarina em ite fib ras corticotectales destinadas al cuer po geniculado externo, a l tubérculo cuadrigém ino anterior, y otra", con las que se pone en relación con los núcleos de la protuberancia. •Ya se indicó anteriorm ente que del tubérculo cuadrigém ino an te rio r p arten fibras que constituyen el haz longitudinal posterior, p o r medio de las cuales se relacionan los núcleos bulboprotuberanciales con las funciones visuales, principalm ente con los motores del ojo. D ichas fib ras tam bién establecen conexiones con los núcleos m otores del bulbo y de la m édula espinal (haz teetoespínal) constituyendo así las rías reflejas de la visión. VIAS ESTATOACUSTICAS Son éstas de doble naturaleza, ya que un as recogen la s im presiones acústicas y las otras están encargadas del equilibrio del cuerpo. L as p rim eras se transm iten por la raíz
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