Logo Studenta

Conocimiento y percepción sobre los reptiles, por parte de personas que habitan el Bosque Seco Tropical en el área rural del Municipio de Girardot_Natalia Novoa Salamanca

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

1 
 
Conocimiento y percepción sobre los reptiles, por parte de personas que 
habitan el Bosque Seco Tropical en el área rural del Municipio de Girardot 
(Departamento de Cundinamarca, Colombia). 
 
 
Natalia María Novoa Salamanca 
 
Trabajo de grado para optar por el título de Magíster 
en Conservación y Uso de la Biodiversidad 
Modalidad: Investigación 
 
Director: José Nicolás Urbina 
Co-director: Sebastián Restrepo Calle 
 
 
Pontificia Universidad Javeriana 
Facultad de Estudios Ambientales y Rurales 
Maestría en Conservación y Uso de la Biodiversidad 
 2021 
2 
 
Conocimiento y percepción sobre los reptiles, por parte de personas que 
habitan el Bosque Seco Tropical en el área rural del Municipio de Girardot 
(Departamento de Cundinamarca, Colombia). 
 
 
 
Natalia María Novoa Salamanca 
 
Trabajo de grado para optar por el título de Magíster 
en Conservación y Uso de la Biodiversidad 
Modalidad: Investigación 
 
Director: José Nicolás Urbina 
Co-director: Sebastián Restrepo Calle 
 
 
 Evaluador Evaluador 
 (Hernán Granda) (Pablo Ramos) 
 
 
Pontificia Universidad Javeriana 
Facultad de Estudios Ambientales y Rurales 
Maestría en Conservación y Uso de la Biodiversidad 
 2021 
 
3 
 
Nota de Advertencia: Artículo 23 de la Resolución N° 13 de Julio de 1946 
“La Universidad no se hace responsable por los conceptos emitidos por sus alumnos 
en sus trabajos de tesis. Solo velará por qué no se publique nada contrario al dogma 
y a la moral católica y por qué las tesis no contengan ataques personales contra 
persona alguna, antes bien se vea en ellas el anhelo de buscar la verdad y la justicia” 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
4 
 
Resumen 
El estudio sobre las dinámicas de interacción entre reptiles y humanos es un 
instrumento esencial para orientar acciones de conservación de especies poco 
carismáticas. La presente investigación determinó a partir de métodos mixtos, cómo 
varía el conocimiento y la percepción sobre los reptiles, por parte de personas que 
habitan y trabajan en zona rural de Girardot. Se evaluó el efecto de factores 
sociodemográficos y actividades productivas, sobre la interacción con estas especies. 
Se encontró que la interacción entre el sexo y edad de la persona tuvo un efecto en el 
conocimiento que tienen sobre los reptiles. La percepción varía entre los grupos 
taxonómicos y entre sexos, siendo las serpientes las que generan mayor miedo 
especialmente a mujeres, pero los hombres presentan una reacción más hostil al 
encontrárselas. Tanto mujeres y hombres, presentaron un bajo conocimiento 
ecológico, pero mencionaron que los reptiles cumplen un papel importante en los 
ecosistemas como controladores de plagas. Factores como la edad, la religión, y 
características como la presencia o no de plantaciones y la riqueza de otros animales 
domésticos, influyen en el conocimiento y la percepción que tiene las personas sobre 
los reptiles. El conocimiento que tienen las personas, es clave para generar alertas 
tempranas sobre el posible declive de poblaciones de reptiles en la zona, enfocando 
esfuerzos en estudios demográficos para ciertas especies involucrando activamente 
a las comunidades. El presente estudio propone temas críticos que deberían ser 
abordados en estrategias de educación ambiental en pro de la conservación de los 
reptiles de la región. 
Palabras claves: conocimiento local, percepción, factores sociodemográficos, 
actividades productivas, acciones de conservación. 
Abstract 
The study of human-reptile interaction dynamics is an essential tool for guiding 
conservation actions for uncharismatic species. The present study determined, using 
mixed methods, how knowledge and perception of reptiles varies among people living 
and working in the rural area of Girardot. The effect of sociodemographic factors and 
productive activities on the interaction between these species was evaluated. It was 
found that the interaction between sex and age of human individuals had an effect on 
their knowledge about reptiles. Perception varied between taxonomic groups and 
between sexes, with snakes being the most feared, especially by women, but men had 
a more hostile reaction when encountering them. Both, women and men, presented 
low ecological knowledge but mentioned that reptiles play an important role in 
ecosystems as pest controllers. Factors such as age, religion, and habitat 
characteristics including presence or absence of plantations and richness of other 
domestic animals influence people's knowledge and perception of reptiles. People's 
knowledge is key to generate early warnings about the possible decline of reptile 
populations in the area, focusing efforts on demographic studies for certain species 
and actively involving local communities. This study highlights critical issues that 
should be addressed in environmental education strategies for the conservation of 
reptiles in the region. 
Keywords: local Knowledge, perception, sociodemographic factors, productive 
activities, conservation actions. 
5 
 
Capítulo introductorio 
La interacción entre las personas y el resto de la naturaleza ha establecido la conexión 
en todas las sociedades a través de la historia (Alves & Souto, 2011). Los valores 
sociales, percepciones y actitudes de los humanos frente a la fauna, pueden cambiar 
entre diferentes realidades (Hunter, 2007). Ulloa (2002) menciona que, en la cultura 
material, la fauna se representa en diversos usos, ya sean medicinales, simbólicos, 
rituales o alimenticios. Entendiendo como cultura material, aquella idea que se 
transforma a una manifestación física, que representa esa tradición, conocimiento e 
historia y que hace parte del inventario material de una cultura representando la 
concretización de una idea o secuencia de ideas (Ulloa, 2002). En ese sentido, es 
importante diferenciar la actitud de las personas frente a la fauna, en función de su 
edad, educación, género o religión (Kellert, 1996). 
Las interacciones entre la fauna y las personas generan un conocimiento ecológico 
tradicional o local, el cual es el enlace entre un sistema social y un sistema ecológico, 
que permite monitorear, interpretar y responder a las señales de cambio del 
ecosistema (Olsson & Folke, 2001). El conocimiento ecológico local, hace referencia 
a los saberes adquiridos a partir de la interacción entre las personas, la fauna silvestre 
y su medio ambiente, sin hacer referencia a una acumulación cultural que puede ser 
transmitida en el tiempo (Olsson & Folke, 2001). Así mismo, esta interacción de los 
humanos con la fauna se da en diferentes contextos, por lo que la percepción que 
tenemos de éstos y la actitud que tomamos hacia ellos, dependerán de un conjunto 
de factores ecológicos, económicos, sociales y culturales (Turbay, 2002). 
La percepción es biocultural, puesto que depende tanto de estímulos físicos y 
sensaciones involucradas, como de su selección y organización (Vargas, 1994). 
Adicionalmente, las percepciones son impresiones que cada persona tiene respecto 
a una cosa o sobre alguna idea; donde el individuo tiene su propia verdad (no hay 
unas mejores o peores), la cual adquiere mayor similitud entre grupos y culturas 
(Segarra, 2002). Las investigaciones en ciencias sociales tienen la habilidad para 
influenciar y modificar los valores negativos que pueden tener las personas frente a 
ciertas especies de fauna, enfocando la educación ambiental hacia actitudes y 
percepciones positivas sobre la importancia de la biodiversidad (Veríssimo, 2013). 
Se ha encontrado que la percepción, actitud y conocimiento quelas personas tienen 
frente a la fauna juega un papel importante en la protección de ciertas especies 
(Ceriaco et al., 2011; Alves, 2012). Adicionalmente, autores como Sudarmi et al., 
(2001) y Miller & McGee (2001) mencionan que, conocer la percepción de las 
personas frente a una especie, es posible plantear y establecer acciones de 
conservación efectivas. Sin embargo, muchas veces las preferencias sobre ciertos 
atributos de la biodiversidad, ha ocasionado que los recursos para la conservación se 
hayan sesgado hacia especies carismáticas (Martín-López et al., 2007), como lo son 
algunos mamíferos y aves que son aceptados socialmente (Stokes, 2006; Ceriaco, 
2012), mientras que grupos como anfibios y reptiles son menos atractivos (Ceriaco, 
2012; Knight, 2008; Reimer et al., 2013). 
En este sentido, la biología de la conservación, debe ir más allá de la preservación de 
las especies, adentrándose hacia debates más contextuales de las ciencias sociales, 
que permitan involucrar a las personas, quienes finalmente son los que deciden sobre 
dichos objetos de conservación (Stokes, 2006), y pueden implementar acciones 
concretas de manejo en paisajes transformados (Robinson, 2006). Por lo que, las 
6 
 
estrategias de conservación deben tener una visión más amplia donde incluya un 
análisis del papel que juega la población local, su conocimiento e intereses, así como 
el contexto y sus necesidades sociales y económicas (Turbay, 2002; Ream, 2013). 
Por otro lado, la apropiación del territorio y el uso del suelo se relacionan directamente 
con factores socioculturales, que determinan el uso de los recursos de la naturaleza 
(Valdés, 2005). La demanda de recursos naturales por parte de los humanos para 
satisfacer sus necesidades básicas, ha ocasionado la transformación del paisaje, 
reemplazando coberturas vegetales nativas, por otras relacionadas con la producción 
agropecuaria, configurando paisajes rurales (Lozano-Zambrano, 2009). Los cuales 
son porciones de la superficie terrestre donde la matriz del paisaje constituye un tipo 
particular de cobertura antrópica o un mosaico de sistemas productivos con 
características socioeconómicas y biológicas propias (Lozano-Zambrano, 2009). La 
biología de la conservación, como disciplina, le ha dado cada vez más importancia al 
estudio de los sistemas agropecuarios como elementos claves en paisajes 
transformados (Lozano-Zambrano, 2009; Driscoll et al., 2013; Melo et al., 2013; 
Arroyo-Rodríguez et al., 2020). En Colombia, las zonas que presentan mayor 
transformación están en la región andina, donde se concentra la mayoría de la 
población buscando tierras cultivables, originando una fuerte presión sobre los 
sistemas ecológicos; esta transformación se ha dado de una forma paulatina, pasando 
de ecosistemas naturales a paisajes rurales (Rojas et al., 2012). 
Pregunta de investigación 
¿Qué factores influyen en el estado del conocimiento y la percepción de reptiles por 
parte de las personas que habitan el área rural del municipio de Girardot 
(Departamento de Cundinamarca, Colombia)? 
Objetivo general 
Determinar qué factores influencian el estado de conocimiento y la percepción de 
reptiles por parte de las personas que habitan el área rural del municipio de Girardot 
(Departamento de Cundinamarca, Colombia), con el fin de que los programas de 
conservación y educación ambiental, modifiquen las percepciones negativas de los 
habitantes rurales a través de instrumentos o estrategias que reconozcan las 
diferencias de género y edad, así como la ocupación de las personas. 
Objetivos específicos 
1) Determinar el efecto de las características sociodemográficas de las personas, 
sobre la identificación de las especies de reptiles y sus grupos taxonómicos 
(serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos). 
 
2) Caracterizar el estado del conocimiento ecológico local y la percepción de las 
especies de reptiles, entre mujeres y hombres. 
 
3) Comprender el estado del conocimiento de reptiles por parte de las personas, en 
función de sus características sociodemográficas y las actividades productivas que 
desarrollan en sus predios. 
 
 
7 
 
Introducción 
En Colombia, las tradiciones culturales de muchas comunidades humanas, han sido 
influenciadas por la alta riqueza faunística del territorio que habitan (Baptiste-Ballera 
et al., 2002). Los estudios de etnozoología se han enfocado principalmente en grupos 
sociales como indígenas y afro, pero son pocos los que se orientan hacia los 
campesinos, los cuales provienen de la mezcla de diferentes grupos humanos y su 
proceso de formación es relativamente reciente (Vargas, 2008; Montero, 2004; Forero, 
1994). En el desarrollo de las actividades productivas que realizan los campesinos, 
ellos coexisten con diferentes especies de animales silvestres, puesto que comparten 
y utilizan el mismo espacio y recursos (Montero, 2004). Sin embargo, la mayoría de 
las investigaciones que tratan sobre el contexto cultural campesino andino, se han 
concentrado en temas como economía rural y desarrollo agrícola, dejando de lado el 
estudio de las interacciones con la fauna silvestre (Montero, 2004). 
Colombia es el tercer país con mayor riqueza de reptiles en el mundo, con 
aproximadamente 743 especies según el Sistema de Información sobre Biodiversidad 
de Colombia -SIB, (2019) y hay 626 especie según la base de datos de Uetz (2020), 
distribuidas en cuatro grupos taxonómicos serpientes (suborden Serpentes), lagartos 
(suborden Sauria), tortugas (Orden Testudines) y cocodrilos (orden Crocodylia). No 
obstante, actualmente esta enorme diversidad enfrenta diferentes amenazas donde, 
según el libro rojo de reptiles, de las 510 especies evaluadas, 43 especies y una (1) 
subespecie se encuentran bajo alguna categoría de amenaza: 11 en peligro crítico 
(CR), 16 en peligro (EN) y 17 en vulnerable (VU) y otras 31 especies en casi 
amenazadas (NT). Dentro de las principales amenazas, se encuentran la pérdida, 
transformación y degradación de sus hábitats, la fragmentación de las poblaciones, la 
explotación no sostenible como consumo y tenencia como mascotas, la introducción 
de especies exóticas y la contaminación ambiental (Morales-Betancourt et al., 2015; 
Páez et al., 2006). 
Para el caso del grupo de las serpientes se han identificado cinco (5) amenazas 
puntuales: 1) La destrucción de los hábitats naturales, 2) tráfico de animales con fines 
comerciales, 3) la recolección científica, 4) la matanza de serpientes por vehículos 
sobre las carreteras, 5) la matanza de serpientes por parte de campesinos en el curso 
de sus labores diarias (Lynch, 2012). Con más de 109 millones de individuos 
sacrificados por año en Colombia, la matanza de serpientes por campesinos y otros 
trabajadores es la principal amenaza y muchos municipios de Colombia carecen de 
información, por lo que los estimativos pueden estar subrepresentados para 
departamentos como Cundinamarca (Lynch et al., 2014). Adicionalmente, se sabe 
poco sobre la interacción humana con la herpetofauna en América del Sur y Colombia, 
así mismo, existe un desconocimiento por parte de las personas, sobre los aspectos 
biológicos y ecológico de las herpetofauna, de acuerdo con un estudio realizado por 
Ríos-Orjuela et al (2020), en la Reserva Forestal Protectora Cerro Quininí ubicado en 
Cundinamarca. 
En cuanto a la percepción y actitud de las personas frente a los anfibios y los reptiles, 
esta suele estar influenciada por valores negativos, los cuales hacen referencia a una 
mezcla de aversión, repugnancia o miedo (Esteban, 2013) y por el “folklore”, 
compuesto por las tradiciones, creencias, costumbres que tiene un pueblo (Ceriaco, 
2012). Para el grupo de los reptiles, se ha visto que las personas tienden a mostrar 
una mayor valoración negativa en comparación con los anfibios, además son animales 
que inducen una mayor fobia que los anfibios, porque incluso desde un punto de vista 
8 
 
evolutivo, los reptiles representaban amenazas realespara los mamíferos, mientras 
que los anfibios no (Ceriaco, 2012). 
Teniendo en cuenta, lo anteriormente descrito, resulta interesante determinar qué 
factores influencian el conocimiento y la percepción de reptiles por parte de las 
personas que habitan el área rural del municipio de Girardot (Departamento de 
Cundinamarca, Colombia), con el fin de que los programas de conservación y 
educación ambiental, modifiquen las percepciones negativas de los habitantes rurales 
a través de instrumentos o estrategias que reconozcan las diferencias de género y 
edad, así como la ocupación de las personas. El presente estudio busca 1) determinar 
el efecto de las características sociodemográficas de las personas, sobre la 
identificación de las especies de reptiles y sus grupos taxonómicos (serpientes, 
lagartos, tortugas y cocodrilos); 2) Caracterizar el estado del conocimiento ecológico 
local y la percepción de las especies de reptiles, entre mujeres y hombres; y 3) 
comprender el estado del conocimiento de reptiles por parte de las personas, en 
función de sus características sociodemográficas y las actividades productivas que 
desarrollan en sus predios. 
Materiales y métodos 
Área de estudio 
La presente investigación se realizó en el municipio de Girardot (4°18´18´´N – 
74°48´06´´W), ubicado en el departamento de Cundinamarca – Colombia (Figura 1). 
El municipio tiene una extensión de 13.032,00 hectáreas de las cuales 5.053,07 
hectáreas corresponden a suelo rural, se encuentra a una altitud de 289 m.s.n.m y la 
temperatura promedio es de 33.3°C (Alcadía de Girardot, 2011). Dentro de los 
ecosistemas estratégicos que presenta el municipio de Girardot, se destacan los 
humedales (388 hectáreas) y el bosque seco tropical (219 hectáreas) (DNP, 2020). 
Según el Censo Nacional de Población y Vivienda realizado por el DANE en el 2018, 
la población total del municipio de Girardot es de 109.792 habitantes, de los cuales el 
96,45% (105.896 personas) corresponde a población urbana y 3,55% (3.896 
personas) a población rural; así mismo, del total de habitantes el 48,6% (53.405 
personas) son hombres, mientras que 51,4% (56.387 personas) son mujeres (DANE, 
2018). En el municipio, la economía sigue siendo, en principio, productiva dentro del 
área rural, donde se crían toda clase de bovinos, porcinos, ovinos y caprinos para 
autoconsumo, comercialización o transporte y además se desarrollan actividades 
turísticas (Alcadía de Girardot, 2011). En cuanto a la producción agrícola, los 
principales cultivos transitorios son sorgo, maíz y algodón; y los cultivos permanentes 
son de plátano, sábila, mango y otro (DNP, 2020). 
 
9 
 
 
 
Figura 1. Ubicación del municipio de Girardot en el departamento de Cundinamarca. 
 
Este estudio, se enfocó en las personas que viven y trabajan en el área rural del 
municipio de Girardot, por lo que la recolección de datos se realizó en las siguientes 
veredas: Barzaloza Cementerio, Pubenza Alta, Acapulco (Zumbamicos), San 
Lorenzo, Guabinal Cerro y Plan, Agua Blanca, Berlín y Presidente (Figura 2) teniendo 
en cuenta los criterios de selección de los participantes (ver sección diseño de la 
investigación y variables descriptoras). 
 
 
Fuente: Elaboración propia. Mapa base: Google Earth Pro (Google, 2020) 
2 
3 5 
4 
6 
13 
12 
8 
7 
11 
10 
9 
14 
1 
Leyenda 
 Vereda 
 Persona 
Fuente: Elaboración propia. Mapa base: IGAC. 
 
 
 
Cundinamarca 
Colombia 
Girardot 
10 
 
Convenciones: 1. Cabecera Municipal; Veredas: 2. San Lorenzo; 3. Acapulco; 4. Potrerillo; 5. Santa Helena; 6. Agua 
Blanca; 7. Guabinal Cerro; 8. Guabinal Plan; 9. Barzaloza; 10. Piamonte; 11. Presidente; 12. Berlín; 13. Barzaloza; 14. 
Pubenza Alta. 
 
Figura 2.Personas encuestadas y entrevistadas en el área rural del municipio de 
Girardot. 
Prueba piloto 
Se diseñó una encuesta, la cual consistió en una serie de preguntas específicas, 
cortas y cerradas sobre el conocimiento ecológico acerca de los reptiles encontrados 
en los predios, las actividades productivas realizadas allí, y datos sobre 
características sociodemográficas como: sexo, edad, religión y ocupación (Anexos 
“El presente artículo se podría someter a la revista Ethnobiology and Conservation 
(https://www.ethnobioconservation.com/index.php/ebc/guidelines), puesto que este 
estudio es una contribución para entender como es la relación entre los humanos y 
los reptiles en un área rural específica en el municipio de Girardot, analizando 
aspectos como el conocimiento y la percepción que las personas tienen frente a este 
grupo y como estos pueden variar de acuerdo con aspectos sociodemográficos y 
características de los predios. Lo cual, puede ser un insumo relevante a tener en 
cuenta en los programas de conservación y educación ambiental que se quieran 
realizar para para este grupo biológico, en esta zona del país”. 
 
Anexo 1). De manera complementaria, se diseñó una entrevista semiestructurada 
que indagó sobre la percepción que tienen las personas en el área rural de Girardot 
sobre los grupos taxonómicos de reptiles (serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos), 
que se encuentran en su predio, resaltando aspectos como: sensaciones, 
experiencias y beneficios (Anexo 2). 
Se realizaron pruebas piloto con diferentes personas durante mayo de 2018, con el 
fin de evidenciar que tan claras estaban las preguntas en la encuesta y la entrevista 
semiestructurada. Para ello se aplicaron ambos instrumentos a los estudiantes de la 
asignatura de “Sistemas de Uso de Biodiversidad” dentro del plan de estudios de la 
“Maestría en Conservación y Uso de Biodiversidad” de la Pontificia Universidad 
Javeriana, así como a familiares y a personas que laboraban en el lugar de 
residencia del investigador principal. Dada las observaciones realizadas por las 19 
personas, algunas de las preguntas se ajustaron, buscando ser más claras y 
evitando que fueran repetitivas, disminuyendo así el número de preguntas en ambos 
instrumentos. 
 
Reptiles potenciales en el área de estudio 
Para realizar el listado de especies de reptiles con distribución potencial en el 
departamento de Cundinamarca entre los 200 - 1.000 m.s.n.m, se revisó información 
secundaria. La primera versión del listado se generó a partir de la base de datos de 
la colección científica de reptiles del Instituto de Ciencias Naturales (ICN) de la 
Universidad Nacional de Colombia (ICN, 2004), el SIB (2015) y The Reptile Data 
Base (Uetz, 2020). Adicionalmente, se revisaron investigaciones en las que se 
realizó levantamiento de información primaria sobre la herpetofauna presente en el 
11 
 
municipio de Girardot y en la subregión del alto Magdalena (García Pérez et al., 2016; 
García Pérez et al., 2016; Morales Betancourt et al.,2015). Una vez consolidado el 
listado de especies, se realizó una guía visual incluyendo fotografías desde 
diferentes ángulos, para cada especie (Anexo 3). La guía sirvió como material de 
apoyo para la identificación de las especies de reptiles por parte de las personas del 
área rural de Girardot. 
Diseño de la investigación y variables descriptoras 
La presente investigación social se realizó bajo una aproximación mixta, que captura 
datos cualitativos y cuantitativos (Johnson et al., 2007), los cuales se analizan con el 
propósito de profundizar en el entendimiento de la interacción entre reptiles y 
personas que habitan en el área rural de Girardot, y corroborar los hallazgos. La 
principal característica de la investigación cualitativa es que puede captar la realidad 
social “a través de los ojos” de la gente que está siendo entrevistada, es decir, a 
partir de la percepción que tiene la persona de su propio entorno o contexto (Bonilla 
Castro & Rodríguez Sehk, 2005). Busca conceptualizar sobre la realidad, con base 
en los conocimientos, las actitudes y los valores que guían el comportamiento de las 
personas estudiadas (Bonilla Castro & Rodríguez Sehk, 2005). Como herramientaspara la recolección de datos, se utilizó la encuesta (método cuantitativo) y la 
entrevista semiestructurada (método cualitativo), dado que permiten obtener gran 
cantidad de información y los resultados se pueden articular usando análisis 
cuantitativos y cualitativos (Newing, 2011). 
Para la identificación y selección de las variables a tener en cuenta, tanto en la 
encuesta como en la entrevista semiestructurada, se revisaron estudios previos 
sobre el conocimiento y la percepción de las personas frente a la herpetofauna y los 
efectos de las actividades agropecuarias sobre este grupo (Rojas-Sánchez et 
al.,2012; Larson, 2014; Cano & Leynaud, 2009; Tarrant et al., 2016; Ceriaco, 2012; 
Alemán et al., 2011; Balaguera Reina & González Maya, 2010; Nates Jimenez & 
Lindemann Matthies, 2015). 
La captura de datos se llevó a cabo del 23 al 28 de septiembre de 2019 y el 8 y 13 
de enero de 2020. Para la selección de los participantes se tuvo en cuenta los 
siguientes criterios: (1) que el predio no tuviera uso recreativo o de veraneo, sino que 
fueran predios para producción o vivienda; (2) que las personas hayan estado 
viviendo o trabajando en ese predio por un tiempo mayor o igual a 5 años, con el fin 
de asegurarse de que reconocen los reptiles del predio; (3) que las personas 
estuvieran dispuestas y tuvieran el tiempo para participar en la totalidad de las 
encuestas y entrevistas. Todas las personas que aceptaron participar de la 
investigación leyeron y firmaron un consentimiento informado en el cual se les explicó 
el objetivo de la investigación, la confidencialidad sobre su identidad y el manejo que 
se le iba a dar a la información reportada (Anexo 4). Luego de seguir los criterios de 
selección de participantes, el presente estudio contó con un total de 46 personas 
encuestadas y entrevistadas (26 mujeres y 20 hombres) que viven o trabajan en el 
área rural, y representan nueve (9) de las 13 veredas que conforman la zona rural 
de Girardot (Anexo 5). 
Durante la aplicación de ambos instrumentos, se grabaron las conversaciones y 
luego se transcribieron las ideas e información expresada por cada uno de los 
participantes. Toda la información de las encuestas (Anexos 
12 
 
“El presente artículo se podría someter a la revista Ethnobiology and Conservation 
(https://www.ethnobioconservation.com/index.php/ebc/guidelines), puesto que este 
estudio es una contribución para entender como es la relación entre los humanos y 
los reptiles en un área rural específica en el municipio de Girardot, analizando 
aspectos como el conocimiento y la percepción que las personas tienen frente a este 
grupo y como estos pueden variar de acuerdo con aspectos sociodemográficos y 
características de los predios. Lo cual, puede ser un insumo relevante a tener en 
cuenta en los programas de conservación y educación ambiental que se quieran 
realizar para para este grupo biológico, en esta zona del país”. 
 
Anexo 1) fue tabulada y algunas características sociodemográficas fueron 
agrupadas por categorías, así: (a) la ocupación se separó en actividades del sector 
primario (agricultura, pesca y ganadería), servicio doméstico (ama de casa, todero, 
jardinero, empleada doméstica y cocinera) y otras (construcción, estudiante, 
pensionado, comerciante y mecánico); (b) para la edad de las personas, se 
consideraron los siguientes rangos adolescencia (15-20 años), adultez inicial (21-40 
años), adultez madura (41-65 años), senectos (≥66 años) (Craig & Baucum, 2009). 
Las actividades que desarrolla cada uno de los participantes, se caracterizaron en 
función de las siguientes variables: el uso del predio (vivienda, producción o ambos), 
presencia o no de plantaciones, tipo de plantaciones, número de plantaciones 
diferentes (riqueza), destino de la producción (consumo doméstico, consumo animal 
y/o comercialización), tipo de agroquímico (insecticida, herbicida, fungicida, 
fertilizante, otro), tipo de animales para la producción (vacas, cerdos, peces, cabras, 
avícola, otros), uso de otros animales (alimento, transporte y mascota) y número de 
especies de animales por cada tipo de uso (Anexos 
“El presente artículo se podría someter a la revista Ethnobiology and Conservation 
(https://www.ethnobioconservation.com/index.php/ebc/guidelines), puesto que este 
estudio es una contribución para entender como es la relación entre los humanos y 
los reptiles en un área rural específica en el municipio de Girardot, analizando 
aspectos como el conocimiento y la percepción que las personas tienen frente a este 
grupo y como estos pueden variar de acuerdo con aspectos sociodemográficos y 
características de los predios. Lo cual, puede ser un insumo relevante a tener en 
cuenta en los programas de conservación y educación ambiental que se quieran 
realizar para para este grupo biológico, en esta zona del país”. 
 
Anexo 1). 
Análisis de datos 
Para cumplir con los objetivos propuestos en la presente investigación, se definieron 
cuatro variables de respuesta: (1) número de especies de reptiles identificadas; (2) 
composición de especies de reptiles; (3) número de grupos taxonómicos conocidos 
(serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos); y (4) composición de grupos 
taxonómicos. 
13 
 
A partir de las variables de número de especies, así como el número de grupos 
taxonómicos, se generaron matrices de Distancias Euclidianas; mientras que, para 
las variables de composición de especies y composición de grupos taxonómicos, se 
calcularon matrices de similitud de Jaccard. Para cada una de la cuatro (4) variables 
de respuesta se realizó un análisis multivariado de varianza basado en 
permutaciones (PERMANOVA), con una suma secuencial de cuadrados tipo I y 
9.999 permutaciones de los residuales bajo un modelo reducido. El diseño 
experimental consistió en dos (2) factores fijos: sexo (niveles: mujer y hombre), rango 
de edad (niveles: adultez inicial, adultez madura y senectos) y su interacción; y se 
incluyeron dos covariables sin interacción: religión (niveles: católica, cristiana y 
ninguna) y ocupación (niveles: actividades del sector primario, servicio doméstico y 
otros). 
Adicionalmente, se realizaron gráficas de cajas y bigotes para visualizar la 
variabilidad que presentan las personas al identificar diferentes números de especies 
y de grupos taxonómicos en función de las variables de sexo y rango de edad. Para 
las variables de composición (de especies y grupos taxonómicos), se realizaron 
análisis de coordenadas principales (PCoA), con el fin de visualizar las similitudes 
entre las personas, teniendo en cuenta su sexo y rango de edad. 
Para caracterizar el estado del conocimiento ecológico local de las especies de 
reptiles encontradas en su predio (Preguntas del Anexos 
“El presente artículo se podría someter a la revista Ethnobiology and Conservation 
(https://www.ethnobioconservation.com/index.php/ebc/guidelines), puesto que este 
estudio es una contribución para entender como es la relación entre los humanos y 
los reptiles en un área rural específica en el municipio de Girardot, analizando 
aspectos como el conocimiento y la percepción que las personas tienen frente a este 
grupo y como estos pueden variar de acuerdo con aspectos sociodemográficos y 
características de los predios. Lo cual, puede ser un insumo relevante a tener en 
cuenta en los programas de conservación y educación ambiental que se quieran 
realizar para para este grupo biológico, en esta zona del país”. 
 
Anexo 1 sección E), se calculó para cada especie el índice de asociación de 
Whittaker (1952) y se generó un mapa de calor. En este análisis se realiza una 
clasificación multivariada de las especies, y su validación estadística (mediante la 
prueba de perfiles de similitud - SIMPROF Clarke et al., 2014), con base en la 
frecuencia de las respuestas por parte de las personas. Esta frecuencia, se visualiza 
en una escala de colores en la cual los colores más oscuros y cálidosreflejan 
respuestas más frecuentes y los colores fríos representan una baja frecuencia de 
respuestas por parte de las personas. Las respuestas se agruparon acorde al tipo 
de preguntas, así: (a) la abundancia actual y pasada (hace 10 años) de la especie, 
(b) su hábitat, (c) si presenta actividad diurna o nocturna, (d) la época reproductiva, 
(e) si sabe diferenciar entre hembras y machos (dimorfismo sexual), (f) su papel en 
el ecosistema, y (g) si al encontrar un individuo lo mata o lo deja en su hábitat sin 
causarle estrés. Este análisis se realizó por separado para hombres y mujeres con 
el fin de visualizar cambios en el conocimiento ecológico de las especies en función 
del sexo. 
14 
 
Con el propósito de complementar los análisis cuantitativos sobre las variables de 
respuesta, se realizaron nubes de palabras para evidenciar palabras descriptoras del 
conocimiento y percepción que se tiene sobre los reptiles a nivel de grupos 
taxonómicos (serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos) y de especies. La nube de 
palabras, es una técnica que sintetiza términos importantes de un cuerpo de texto 
en una representación visual que captura ideas relevantes de un fenómeno de 
interés (Cidell, 2010). Para complementar el análisis cualitativo sobre el 
conocimiento y la percepción, se realizó un análisis de contenido manual de la 
información recolectada mediante la entrevista semiestructurada, en el que, se 
extrajo testimonios de las personas entrevistadas, representando hombres y mujeres 
de diferentes edades; usando como categoría de análisis las variables respuestas 
tenidas en cuenta en las pruebas estadísticas. 
Se realizaron modelos lineales basados en distancias (rutina DistLM) para explicar 
cómo varía el conocimiento de reptiles, en la identificación de las especies y de 
grupos taxonómicos (serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos), en función de 
variables sociodemográficas (sexo, edad, religión y ocupación) y las actividades 
productivas que se desarrollan en los predios (uso del predio, presencia o no de 
plantaciones, cuáles plantaciones, riqueza de plantaciones, destino de la producción, 
tipo de agroquímico, animales para la producción, otros animales y la respectiva 
riqueza para cada grupo). Para seleccionar los mejores modelos ajustados para cada 
variable de respuesta, se usó el proceso de selección Best y se clasificaron los 
modelos a partir del criterio de información de Akaike para muestras pequeñas 
(AICc). Las variables binarias fueron convertidas a presencia y ausencia (sexo y 
presencia o no de plantaciones), para un total de 13 variables predictoras. Todos los 
análisis estadísticos se realizaron en el programa PRIMER v7 y PERMANOVA+ add 
on (Anderson et al., 2008; Clarke et al., 2014). 
 
 
Resultados 
De las 46 personas que participaron en este estudio, 23 se encuentran en el rango 
de edad de adulto maduro (41-65 años), seguido de los senectos (≥66 años) con 16 
personas y, por último, el rango de adulto inicial (21-40 años) con siete (7) personas. 
La mayoría de las personas que participaron en el estudio son católicos (41 
encuestados) y en menor proporción cristianos (3 encuestados) o no pertenecen a 
ninguna religión (2 encuestados). La variable de ocupación estuvo representada por 
29 personas que se dedican a actividades relacionadas con el servicio doméstico, 
11 a otras ocupaciones y seis (6) personas trabajan en actividades del sector 
primario. 
Identificación de especies de reptiles 
De acuerdo con la revisión bibliográfica que se realizó, se obtuvo un total de 34 
especies de reptiles potenciales para el área de estudio (15 especies de serpientes, 
12 especies de lagartos, 2 especies de tortugas y 1 especie de cocodrilo), de las 
cuales 31 especies fueron reconocidas por las personas encuestadas (Anexo 6). Sin 
embargo, solo seis (6) especies fueron reconocidas y observadas comúnmente por 
las personas en sus predios. Para el caso del grupo taxonómico de las serpientes, 
la bejuca (Leptophis ahaetulla - Linnaeus, 1758), fue reconocida por 18 personas de 
15 
 
sexo femenino ♀ y 15 personas de sexo masculino ♂ y la mitao (Boa constrictor - 
Linnaeus, 1758), la reconocieron 14 ♀ y 11 ♂, éstas fueron las especies más 
reconocidas por las personas; mientras que, para el grupo de los lagartos, 43 (25 ♀ 
y 18 ♂) y 37 (22 ♀ y 15♂) personas identificaron las especies de iguana (Iguana 
iguana - Linnaeus, 1758) y salamanqueja (Hemidactylus brookii – Gray, 1845), 
respectivamente. Para el caso de las tortugas, tanto la morrocoy (Kinosternon 
leucostomum- Duméril, Bibron y Duméril, 1851) como la icotea (Podocnemis lewyana 
– Duméril, 1852), fueron identificadas por seis (4 ♀ y 2 ♂) y tres (1 ♀ y 2 ♂) personas, 
respectivamente. La babilla (Caiman crocodilus fuscus – Cope, 1868), fue 
reconocida por nueve personas (2 ♀ y 7 ♂; Figura 3). 
 
 
Figura 3. Número de especies de reptiles identificadas por mujeres y hombres. 
Cabe resaltar que ni las serpientes Imantodes cenchoa (Linnaeus, 1758) y 
Stenorrhina degenhardtii (Berthold, 1846), ni el lagarto Lepidoblepharis 
xanthostigma (Noble, 1916) fueron reconocidas por ninguna persona. 
De las 34 especies de reptiles con distribución potencial para el área de estudio, tres 
especies (S. degenhardtii, I. cenchoa y el lagarto L. xanthostigma) no fueron 
identificadas por ninguna de las 46 personas participantes. A parte de las especies 
mencionadas anteriormente, las mujeres tampoco identificaron a la serpiente 
Pseudoboa neuwiedii (Duméril, Bibron y Duméril, 1854) y al lagarto Gonatodes 
albogularis (Duméril y Bibron, 1836) reconociendo un total de 29 especies de reptiles; 
mientras que los hombres no identificaron tres serpientes (Sibon nebulatus - 
Linnaeus, 1758, Mastigodryas danieli – Amaral, 1935, Micrurus mipartitus - Duméril, 
Bibron y Duméril, 1854) y dos lagartos (Basiliscus galeritus – Duméril, 1851 y 
Polychrus marmoratus - Linnaeus, 1758), reconociendo un total de 26 especies. 
La mayoría de las mujeres encuestadas dentro de los tres rangos de edad (adultez 
inicial, adultez madura y senectos), identificaron dos lagartijas (I. iguana y H. brookii) 
y dos serpientes (L. ahaetulla y B. constrictor). Para el caso de las mujeres adultas 
maduras, otra especie importante fue el lobón (Cnemidophorus lemniscatus - 
Linnaeus, 1758), donde de las 26 mujeres encuestadas diez (10) respondieron 
haberlo visto en su predio (Figura 4). De igual forma, para el caso de los hombres, 
las especies más reconocidas por los tres grupos de rango de edad fueron las 
mencionadas anteriormente, y de manera adicional la especie C. crocodilus fuscus 
fue identificada por cinco hombres senectos (≥66 años) (Figura 5). 
16 
 
 
Figura 4. Número de especies de reptiles identificadas por mujeres y su rango de 
edad 
 
Figura 5. Número de especies de reptiles identificadas por hombres y su rango de 
edad 
El número de especies de reptiles conocido por las personas participantes no varió 
entre hombres y mujeres (Pseudo-F=0.0708; p-perm=0.7927, entre los diferentes 
rangos de edad (Pseudo-F=2.8904; p-perm=0.0671), ni tampoco en su interacción 
(Pseudo-F=2.0947; p-perm=0.1352). Lo mismo ocurrió para las covariables de 
religión (Pseudo-F=1.961; p-perm=0.1756) y ocupación (Pseudo-F=1.4373; p-
perm=0.2408) (Tabla 1). Es decir que estas variables sociodemográficas no tuvieron 
efecto estadístico sobre el número de especies de reptiles que identificaron las 
personas que trabajan o habitan en el área rural de Girardot. 
Aun así, fue evidente la variabilidad en el número de especies que identificaron las 
personas de diferente edad y sexo. Los adultos maduros de ambos sexos 
presentaron mayor variabilidad en la identificación de especies con respecto a las 
demás edades (♀= 3 a 14 especies identificadas y ♂= 3 a 16 especies identificadas) 
(Figura 6). 
17 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 6. Gráfico de cajas y bigotes que describe la variabilidad (rangos y cuartiles) 
y tendencia central (medianas)en el número de especies de reptiles identificados 
por las personas. 
El conocimiento sobre la composición de especies de reptiles no varió entre hombres 
y mujeres (Pseudo-F=1.0556; p-perm=0.392), ni entre los diferentes rangos de edad 
(Pseudo-F=0.70345; p-perm=0.8449), ni tampoco para las covariables de religión 
(Pseudo-F=0.75284; p-perm=0.7077) y de ocupación (Pseudo-F=0.44255; p-
perm=0.9466). Sin embargo, hubo diferencias significativas en la interacción entre 
sexo y rango de edad (Pseudo-F=1.745; p-perm=0.0158), (Tabla 1). Estas 
diferencias fueron evidentes únicamente entre hombres y mujeres senectos 
(Pseudo-t= 1.26; p(perm)= 0.045; 7). Así mismo, en el PCoA, se puede observar que 
a lo largo de ambas coordenadas (PCO1 y PCO2) las mujeres y hombres adultos 
maduros, presentaron un conocimiento más disperso en cuanto a la composición de 
especies de reptiles que se encuentran en el área rural de Girardot (Figura 7). 
Con respecto al conocimiento de las especies de reptiles, algunas de las personas 
adultas maduras, mencionaron rasgos que les permiten identificar algunas especies. 
Para el caso de la salamanqueja (H. brookii), dos personas indicaron que: “las 
salamanquejas tiene esas cosas que se pegan a uno entonces dan nervios”- mujer 
de 51 años; “dicen que la salamanqueja que se le pega a la piel de uno y hay que 
quitarla con cuchara caliente de plata” – hombre de 60 años. En cuanto, a la bejuca 
(L. ahaetulla), un señor de 48 años expresó que “la bejuca que es pura verde ella es 
agresiva le tira a uno e intenta ahorcarlo a uno, pero esa no es venenosa, el peligro 
de las bejucas es que son verdes y no se ven cuando uno está podando los árboles, 
vaya uno y no le echa machete y no la mate y verá que lo ataca”. 
 
h
o
m
b
re
a
d
u
lt
e
z
 m
a
d
u
ra
h
o
m
b
re
a
d
u
lt
e
z
 i
n
ic
ia
l
m
u
je
ra
d
u
lt
e
z
 m
a
d
u
ra
m
u
je
rs
e
n
e
c
to
s
h
o
m
b
re
s
e
n
e
c
to
s
m
u
je
ra
d
u
lt
e
z
 i
n
ic
ia
l
Sexorango edad
0
5
10
15
20
ri
q
u
e
z
aR
iq
u
e
za
 
H
o
m
b
re
 a
du
lt
ez
 m
ad
u
ra
 
H
o
m
b
re
 a
du
lt
ez
 in
ic
ia
l 
M
u
je
r 
ad
u
lt
e
z 
m
ad
u
ra
 
M
u
je
r 
se
n
ec
ta
 
H
o
m
b
re
 s
en
ec
to
 
M
u
je
r 
ad
u
lt
ez
 in
ic
ia
l 
Sexo – Rango de edad 
18 
 
 
Figura 7. Análisis de Coordenadas Principales -PCoA para la composición de 
especies de reptiles identificados por las personas participantes. El porcentaje de la 
variación total inherente a la matriz de similitud, que se explica por los dos primeras 
coordenadas principales, es del 31.1% 
En lo que respecta, al estado del conocimiento de las personas sobre el número de 
grupos taxonómicos (serpientes, lagartos, tortugas y cocodrilos) que identifican, este 
no varió entre hombres y mujeres (Pseudo-F=0.63196; p-perm=0.4341), ni entre los 
diferentes rangos de edad (Pseudo-F=0.38901; p-perm=0.6767), ni tampoco en su 
interacción (Pseudo-F=1.4464; p-perm=0.245) (Tabla 1). El conocimiento sobre el 
número de grupos taxonómicos tampoco varió dentro de las covariables de religión 
(Pseudo-F=2.2101; p-perm=0.1471) y ocupación (Pseudo-F=0.52056; p-
perm=0.4794) (Tabla 1); es decir que estos factores sociodemográficos no tuvieron 
efecto estadístico sobre el número de grupos taxonómicos que identificaron las 
personas participantes. Sin embargo, se puede observar que la tendencia central es 
que las personas, sin tener en cuenta su sexo o rango de edad, identificaron dos, de 
los cuatro grupos taxonómicos que corresponden a serpientes y lagartos; por lo que 
muy pocas personas reconocieron a las tortugas y cocodrilos (Figura 8). 
Dentro del grupo de personas que reconocieron los cuatro (4) grupos taxonómicos 
hay dos (2) mujeres, una de 31 años y la otra de 45 años, quienes mencionan que 
les gustaría que las serpientes como la cascabel (Crotalus durissus -Linnaeus, 
1758), la mitao (B. constrictor) y la coral (Erythrolamprus bizona - Jan-1863), no 
existieran en sus predios porque las consideran muy peligrosas y así podrían 
caminar tranquilas por el potrero y que sólo se quedaran las cazadoras mansitas; 
cabe resaltar que estas dos últimas no son serpientes venenosas. Por el contrario, 
mencionan que les gustaría que los lagartos como la iguana (I. iguana) y los lobones 
19 
 
(Anolis auratus – Daudin, 1802 y C. lemniscatus) se quedaran en sus predios, porque 
se divierten viéndolos y alimentándolos, al igual que a las tortugas (K. leucostomum) 
que para ellas les trae un beneficio recreativo. En cuanto a la babilla (C. crocodilus 
fuscus), expresan que ahora ven más que antes, tanto en los pozos como en el río 
Magdalena. Con respecto a los hombres, solo una persona de 70 años, reconoció 
todos los grupos taxonómico, mencionando que hoy en día se ven más tortugas y 
babillas en época de verano, donde salen a calentarse en las piedras o al borde del 
río Magdalena, y que le gustaría que se quedaran en el predio; contrario al grupo de 
las serpientes, ya que prefiere que no estén en su pedio, y de las cuales ha matado 
varias como así lo expresa: "era una coral rojita con pintas negras, la mate y la 
enterré porque las espinas va y se las entierra uno al pisar". 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 8. Gráfico de cajas y bigotes que describe la variabilidad (rangos y cuartiles) 
y tendencia central (medianas) en el número de grupos taxonómicos de reptiles 
identificados por las personas. 
 
La composición de grupos taxonómicos de reptiles identificados por las personas no 
varió entre hombres y mujeres (Pseudo-F=2.2754; p-perm=0.0997), tampoco entre 
los diferentes rangos de edad (Pseudo-F=0.80224; p-perm=0.551), ni en su 
interacción (Pseudo-F=2.2428; p-perm=0.0631); así mismo, no varía para las 
covariables de religión (Pseudo-F=1.8506; p-perm=0.1733) u ocupación (Pseudo-
F=0.19445; p-perm=0.8446) (Tabla 1). Sin embargo, en el análisis de coordenadas 
principales - PCoA (Figura 9), es evidente que la mayoría de las personas sin 
importar el sexo y el rango de edad, identificaron los mismo grupos taxonómicos pero 
se resalta que los hombres adultos maduros tienen un conocimiento más disperso 
de estos grupos en el área rural de Girardot. 
h
o
m
b
re
a
d
u
lt
e
z
 m
a
d
u
ra
h
o
m
b
re
a
d
u
lt
e
z
 i
n
ic
ia
l
m
u
je
ra
d
u
lt
e
z
 m
a
d
u
ra
m
u
je
rs
e
n
e
c
to
s
h
o
m
b
re
s
e
n
e
c
to
s
m
u
je
ra
d
u
lt
e
z
 i
n
ic
ia
l
Sexorango edad
1.0
1.5
2.0
2.5
3.0
3.5
4.0
G
ru
p
o
s
 t
a
x
o
n
o
m
ic
o
s
H
o
m
b
re
 a
du
lt
ez
 m
ad
u
ra
 
H
o
m
b
re
 a
du
lt
ez
 in
ic
ia
l 
M
u
je
r 
ad
u
lt
ez
 m
ad
u
ra
 
M
u
je
r 
se
n
ec
ta
 
H
o
m
b
re
 s
en
ec
to
 
M
u
je
r 
ad
u
lt
ez
 in
ic
ia
l 
Sexo – Rango de edad 
G
ru
p
o
s 
Ta
xo
n
ó
m
ic
o
s 
20 
 
 
Figura 9. Análisis de Coordenadas Principales -PCoA para la composición de 
grupos taxonómicos identificados por las personas. El porcentaje de la variación 
total inherente a la matriz de similitud, que se explica por las dos primeras 
coordenadas principales es del 83.4% 
Tabla 1. Resultados del análisis de PERMANOVA de las cuatro variables de 
respuesta en función de los factores de sexo rango de edad y su interacción, así 
como las covariables de religión y ocupación. 
Variable 
respuesta 
Factor o fuente de 
variación 
Grad
os de 
Liber
tad 
Suma de 
Cuadrados 
Suma 
de 
cuadra
dos 
media 
Pseudo-F P(perm) 
Númer
o de 
permu
tacion
es 
Componente estimado de 
Varianza 
Estimado 
Raíz 
cuadrada 
Número de 
especies de 
reptiles 
identificados 
Religión 1 21.69 21.69 1.961 0.1756 9826 0.23107 0.4807 
Ocupación 1 15.898 15.898 1.4373 0.2408 9849 0.10618 0.32585 
Sexo (Se) 1 0.7831 0.7831 0.0708 0.7927 9850 -0.46473 -0.68171 
Rango de Edad (RE) 2 63.939 31.97 2.8904 0.0671 9954 1.5878 1.2601 
Se x RE 2 46.338 23.169 2.0947 0.1352 9951 1.9322 1.39 
Residuales 38 420.31 11.061 11.061 3.3258 
Total 45 568.96 
Composiciónde especies de 
reptiles 
identificados 
Religión 1 1851.7 1851.7 0.75284 0.7077 9917 -13.215 -3.6353 
Ocupación 1 1088.5 1088.5 0.44255 0.9466 9935 -30.098 -5.4862 
Sexo (Se) 1 2596.3 2596.3 1.0556 0.392 9915 6.1816 2.4863 
Rango de Edad (RE) 2 3460.4 1730.2 0.70345 0.8449 9901 -55.39 -7.4424 
Se x RE 2 8584.1 4292 1.745 0.0158 9897 292.41 17.1 
Residuales 38 93.464 2459.6 2459.6 49.594 
Total 45 1.1104E+05 
Religión 1 1.0466 1.0466 2.2101 0.1471 9805 0.012458 0.11161 
21 
 
 
A pesar de que en los análisis cuantitativos (ej. PERMANOVA), se evidenció que no 
hay diferencias significativas en cuanto a la identificación de los grupos taxonómicos 
entre mujeres y hombres, la aproximación cualitativa permitió entender, que para el 
caso del grupo de serpientes (Figura 10 A - B), la percepción si presenta algunas 
diferencias. Por ejemplo, para el caso de las mujeres al preguntarles con qué 
palabras relacionaban a las serpientes o qué es lo primero que se les viene a la 
cabeza cuando ven una serpiente, la mayoría de ellas respondió que sienten asco y 
fobia, y en menor medida que son bonitas y que se encuentran relacionadas con la 
mala suerte, como lo expresó mujer de 29 años durante la entrevista realizada: “las 
culebras no nos gusta verlas por acá, porque alguien nos dijo que si uno se las 
encuentras es que iba haber problemas en la familia o con alguien y mire que si es 
verdadero”; mientras que la mayoría de los hombres las relacionan con la vida y con 
la naturaleza ( “son parte de la naturaleza, todavía hay ecosistemas” - hombre de 23 
años), o las asocian con peligro (“todas las culebras son venenosas, esos animales 
hay que darles en la cabeza porque eso es rápido que lo muerden”- hombre de 46 
años; “hoy en día casi todas las culebras son venenosas” - hombre de 60 años). 
Ambos sexos coincidieron en que les genera miedo ver una serpiente y que se deben 
matar; por ejemplo, mencionaban frases como “si hay modo de matarlas se matan” 
(hombre de 65 años) o “las culebras no sirven para nada porque una culebra es 
brava antes toca matarlas" (hombre de 76 años). 
Así mismo, al preguntarles sobre qué sensación tuvieron al tocar una serpiente, la 
mayoría coinciden sin importar el sexo, que sintieron escalofríos, que son animales 
fríos, lisos, corronchosos y ásperos (“como hay tanta culebra yo creo que unas 
pueden ser lisa y otras ásperas” – mujer de 64 años; “nunca he tocado una pero ellas 
se deben sentir ásperas por las escamas” – mujer de 46 años; “se sienten fríos y 
escamosos” -hombre de 60 años). Respecto, al beneficio que perciben por parte de 
las serpientes, a pesar de que la mayoría respondió que no perciben ningún 
beneficio, ciertas personas respondieron que ayudan al control de plagas como los 
ratones, expresado por una señora de 40 años: “las culebras son control de plagas 
como los ratones, entonces si desaparecen abundarían los ratones en la casa”. 
Algunas mujeres mencionaron que se sienten vinculadas emocionalmente a estos 
reptiles ya que las consideran compañía, como lo expresó una mujer de 50 años: “yo 
me la paso sola aquí todo el día entonces me siento a ver los animalitos en cambio 
Número de 
grupos 
taxonómicos 
conocidos 
Ocupación 1 0.24652 0.24652 0.52056 0.4794 9830 -0.0049841 -0.070598 
Sexo (Se) 1 0.29927 0.29927 0.63196 0.4341 9842 -0.0078809 -0.088775 
Rango de Edad (RE) 2 0.36844 0.18422 0.38901 0.6767 9946 -0.021973 -0.14823 
Se x RE 2 1.3699 0.68496 1.4464 0.245 9953 0.033734 0.18367 
Residuales 38 17.995 0.47356 0.47356 0.68816 
Total 45 21.326 
Composición 
de grupos 
taxonómicos 
conocidos 
Religión 1 1026.3 1026.3 1.8506 0.1733 9952 10.255 3.2023 
Ocupación 1 107.84 107.84 0.19445 0.8446 9959 -9.807 -3.1316 
Sexo (Se) 1 1261.9 1261.9 2.2754 0.0997 9967 31.983 5.6554 
Rango de Edad (RE) 2 889.83 444.91 0.80224 0.551 9940 -8.3288 -2.886 
Se x RE 2 2487.6 1243.8 2.2428 0.0631 9941 109.98 10.487 
Residuales 38 21.074 554.59 554.59 23.55 
Total 45 26848 
22 
 
de ver la televisión, son como una compañía” y que sienten emoción: “uno se 
emociona al ver cazar las culebras como las bejucas que comen huevos y ranas” 
(mujer de 51 años); “a veces es bonito mirar a las gorditas cuando se reproducen y 
se divierte uno verlas cuando se caen" (mujer de 60 años). Con respecto a los 
hombres, varios mencionaron que el beneficio es a nivel recreativo (“uno se sienta a 
mirar a los animalitos uno los contempla, digamos como hizo mi diosito para que las 
culebras se arrastren" – hombre de 60 años). 
A. 
 
B. 
 
Figura 10. Percepción de las personas frente al grupo taxonómico de las serpientes 
(Suborden Serpentes). A. mujeres; B. hombres. 
Para el caso de los lagartos (Figura 11 A -B), la percepción entre hombres y mujeres 
también difiere, ya que para las mujeres en general, los lagartos les generan nervios 
y asco; mientras, que la mayoría de los hombres los consideran tiernos, inofensivos 
y los relacionan con la palabra de vida. Adicionalmente, ambos sexos mencionaron 
que para ellos es normal ver un lagarto en su predio, pero a diferencia del grupo de 
las serpientes, pocos mencionaron la palabra de matarlos. Al igual que para el grupo 
taxonómico de las serpientes, la mayoría de las personas respondieron que al 
tocarlos se siente frío y ásperas, aparte de pegajosas y húmedos. 
En cuanto, al beneficio que les ofrecen los lagartos, la mayoría tanto hombres y 
mujeres dijeron que no reciben ningún beneficio, pero un señor de 60 años expresó 
que: “todos los animales tienen una función importante en la naturaleza, de pronto 
que no sabemos cuál es la función de culebras o lagartos en el momento porque no 
estamos encima de ellos estudiándolos, pero ellos están cumpliendo una función” y 
en menor proporción mencionaron que reciben un beneficio recreativo. A diferencia 
de los hombres, las mujeres si consideran que reciben un beneficio por parte de los 
lagartos, al ser controladores de plagas, puesto que varias mencionaron por ejemplo 
que: " si se acaban algo en la naturaleza o en el ambiente cambiaría, porque son 
controladores, abundarían los insectos " (mujer de 44 años); “habría más insectos y 
roedores porque ellos se los comen" (mujer de 62 años); "daría lástima porque ellos 
controlan muchos bichos" (mujer de 60 años). Así mismo, los consideran compañía: 
“seria triste que se acabaran porque no hacen ningún mal y son compañía” (mujer 
de 70 años). Por su parte, la mayoría de los hombres consideran que el beneficio 
que reciben es comida para los gatos y perros como lo expresó un señor de 35 años. 
 
23 
 
 
A. B. 
 
 
Figura 11. Percepción de las personas frente al grupo taxonómico de los lagartos 
(Suborden Sauria). A. mujeres; B. hombres. 
 
A diferencia de los grupos taxonómicos anteriores para el caso de las tortugas 
(Figura 12 A -B), tanto hombres como mujeres mencionaron que al ver una tortuga 
lo primero que se les viene a la cabeza es atraparlas y protegerlas; las relacionan 
con la naturaleza, la vida y como mascotas (“mi hijo la encontró por ahí y la trajo, eso 
le quito un alambre que tenía amarrada y con lo alicates le quito eso y la cuido”- 
mujer de 50 años). Además, al tocarlas mencionan que se sienten ásperas y duras. 
Para la mayoría de los hombres, las tortugas no les generan ningún beneficio, en 
cambio las mujeres expresaron que ayudan a controlar las plagas (“si estos animales 
están aquí en la tierra es porque tienen algún beneficio, ayudan a controlar insectos” 
– mujer de 80 años), son fuente de recreación y les generan emoción cuando las ven 
en su predio: “cuando vienen los niños a mirar se divierten viendo las tortugas” 
(hombre de 60 años). 
 
 
A. 
 
 
B. 
Figura 12. Percepción de las personas frente al grupo taxonómico de las tortugas 
(Orden Testudines). A. mujeres; B. hombres.Con relación, a la percepción que tienen las personas que participaron en esta 
investigación sobre el grupo de las babillas (Figura 13 A -B), ambos sexos 
24 
 
mencionaron que son animales de textura dura y áspera, sin embargo, para las 
mujeres estos reptiles les trae un beneficio alimenticio (“las babillas una la ve 
caminando por ahí y metiéndose de nuevo en los pozos, nosotros comemos babilla, 
eso frito sabe muy rico, eso sabe cómo a pollo, mi papa les pone una presa en un 
gancho y eso dura para agarrarlas y después les da un palazo.”- mujer de 31 años); 
en comparación con los hombres que no les ofrece ningún beneficio. 
 
 
 
A. 
 
 
 
B. 
Figura 13. Percepción de las personas frente al grupo taxonómico de los cocodrilos 
(orden Crocodylia). A. mujeres; B. hombres. 
Conocimiento ecológico local 
El mapa de calor permitió agrupar a las 31 especies de reptiles identificadas por las 
personas, a partir de las ocho variables de conocimiento ecológico local evaluadas. 
Estas especies fueron agrupadas en ocho grupos, dado el conocimiento local de las 
mujeres, mientras que a partir del conocimiento de los hombres se agruparon en seis 
grupos (Figuras 14 y 15). Uno de los grupos de especies, constituye reptiles 
ampliamente reconocidos por las personas, reflejado en la alta frecuencia de 
respuesta para las diferentes variables de conocimiento ecológico local. Este grupo 
estuvo compuesto por la salamanqueja (H. brookii), la bejuca (L. ahaetulla) y la 
iguana (I. iguana), pero para las mujeres también se encuentra el lobón (C. 
lemniscatus), mientras que para los hombres se incluye la mitao (B. constrictor). 
 
25 
 
 
Figura 14. Mapa de Calor que representa el grado de asociación de las especies a 
partir del conocimiento ecológico local de las mujeres. Colores más oscuros 
representan mayor grado de asociación en el índice de Whittaker (1952). 
 
 
Figura 15. Mapa de Calor que representa el grado de asociación de las especies a 
partir del conocimiento ecológico local de los hombres. Colores más oscuros 
representan mayor grado de asociación en el índice de Whittaker (1952). 
26 
 
La frecuencia de observación de estas especies, se ve reforzado por los testimonios 
dados durante las entrevistas: “Las iguana se ven mucho en los palos de los mangos 
comiéndose las hojas” (hombre de 74 años); “esos bichitos (salamanqueja) sí que 
son más aburridores, porque eso se la pasan cagando por todo lado y manchan todo, 
uno fumiga y salen por todo lado” (hombre de 48 años). En comparación con la mitao 
(B. constrictor) y la bejuca (L. ahaetulla), que se ven menos seguido, como también 
la culebra ciega (Epictia goudotii – Duméril y Bibron, 1844)) (“La Tatacoa se la pasa 
enterrada en áreas húmedas y con sombra”- hombre de 46 años; “esa siempre se 
encuentra cerca de cosas húmedas y cuerpos de agua”-mujer de 69 años) y la babilla 
(C. crocodilus fuscus), según lo mencionado por algunos hombres. 
Al indagar por la frecuencia de observación histórica de reptiles hace 10 años, la 
mayoría de las mujeres respondieron que la cascabel (C. durissus), se ve más en la 
actualidad que hace 10 años, y varias de ellas comentaron durante la entrevista las 
experiencias que han tenido con la cascabel: “Estaba bañando a mi hija, cuando vi 
una cascabel comiendo un ratón, llame a un vecino y la mato (mujer de 31 años); “en 
el día salen a cazar y en la noche uno las ve durmiendo (mujer de 51 años); “la 
cascabel, se amaña en los pastizales, en los pastos que son todos peludos, siempre 
me la encuentro cuando uno está rozando” (mujer de 60 años). Así mismo, para el 
caso de la salamanqueja (H. brookii), la mayoría de las mujeres y hombres 
respondieron, que ahora se ven más (“hace unos años para acá que llegaron y 
abundan” hombre de 48 años). Mientras que, la Iguana (I. iguana) comparado hace 
10 años ahora se ve menos, posiblemente debido a que como lo mencionan varias 
personas: “Las iguanas ya casi no se ven, eso los gatos los matan, hay gente que 
come iguana, pero yo no he comido” (hombre de 90 años); “La iguana se está 
extinguiendo eso ya casi no se ve, quien sabe por qué será yo no me explico, antes 
se veían cruzar de pronto, de pronto por que otros animales se las comen o por el 
calor, eso los perros las correteaban” (hombre de 80 años); “La iguana se veía más, 
ahora sí muy poca, yo creo que por los perros las matan” (hombre de 47 años). En 
términos generales, los hombres dijeron que la bejuca (L. ahaetulla), hace 10 años 
se veía más que ahora. 
Por otra parte, la infraestructura como casas, galpones, chiqueros, bodegas, entre 
otros y la carretera, son los hábitats en donde tanto los hombres como las mujeres 
han visto la mayoría de los reptiles dentro de su predio, siendo las salamanquejas 
(H. brookii) las más comunes dentro de las casas (“yo quisiera matarlas todas pero 
no se dejan, yo me la paso fumigando, esos huevos se encuentran por todo lado 
cuando uno esculca las cosas que están por mucho tiempo quietas"- mujer de 62 
años). Para el caso de la serpiente de mitao (B. constrictor), hombre y mujeres 
mencionaron que es común encontrarla en los galpones: “El mitao, lo vimos hace 
poco en los pollos, tenía como metro y medio de largo, y estaba ahí escondido, eso 
casi me muero del susto, llamamos a los carabineros y los bomberos para que se lo 
llevaran, yo le tengo mucho pavor a esos animales” (mujer de 62 años); “La mitao 
que encontramos en el galpón tenía como 10 pollos en el estómago como de 2 libras 
y medias y el otro que vimos tenía un chucho"; “Una mitao que maté eso tenía 10 
pollos en el estómago, he matado como 4 mitaos y siempre vomitan lo que comieron 
pollos, chuchos" (ambos hombres de 76 años); y en el caso solamente de los 
hombres, indicaron que la bejuca (L. ahaetulla) la ven casi siempre en los árboles 
junto a las casas: “esa como es verde se confunde con las hojas porque se la pasa 
encaramada en los árboles” (hombre de 46 años); “la bejuca es la que anda en los 
árboles, el mismo color de la mata” (hombre de 60 años). Con respecto a los 
27 
 
lagartos (A. auratus) y (C. lemnicatus), según la mayoría de las mujeres, éstos son 
común verlos en la carretera. 
Tanto mujeres como hombres mencionaron, que la mayoría de los reptiles se ven 
más que todo en el día como lo son la iguana (I. iguana), la bejuca (L. ahaetulla) y la 
mitao (B. constrictor), excepto la salamanqueja (H. brookii) que se ve tanto de día 
como de noche. Así mismo, la mayoría de las personas que participaron en el 
estudio, desconocen en que época se reproducen los reptiles, algunas personas 
mencionaron por ejemplo que la iguana (I. iguana) se reproduce en verano, como un 
señor de 51 años el cual indica que: “ponen entre 25-30 huevos, son abundantes, 
nacen cualquier cantidad, están en terrenos donde el suelo es suave donde ponen 
sus huevitos en verano”. En general las personas tampoco saben diferenciar entre 
hembras y machos de las especies de reptiles, solo para el caso de la Iguana (I. 
iguana), algunas personas mencionaron que la forma de diferenciar es: “el macho 
tiene una cresta más grande y color rojo en la cabeza y la hembra más delgada” 
(hombre de 23 años); “si al voltear tiene dos puntos es hembra” (hombre de 51 años); 
“el macho tiene como una cresta grande, en cambio la hembra es más pequeña” 
(mujer de 44 años); “el macho tiene una cresta más grande y se sopla” (mujer de 80 
años). 
Al preguntarle a las personas, que si al momento de encontrarse con los reptiles en 
su predio los sacrifican, la mayoría respondió que no frente a todas las especies; 
pero, como se puede observar en los mapas de calor (Figura 14 y 15), los hombres 
sacrifican más especies en comparación a las mujeres, quienes prefieren no 
matarlas (11 ♀ y 14 ♂ respondieron que si los matan). A las mujeres les genera 
mucho susto acercarse a ellas como lo indican en estos testimonios: "yo no mato las 
culebras yo salgo corriendo" (mujer de 46 años); “salgo a la carrera yo no la espero,yo no la mato yo corro” (mujer de 80 años). En cuanto a las especies de reptiles que 
más sacrifican las mujeres, está la cascabel (C. durissus), la mitao (B. constrictor) y 
la falsa coral (E. bizona) y con respecto a los hombres está la mitao (B. constrictor), 
la bejuca (L. ahaetulla) y la coral (Micrurus dumerilii – Jan, 1858). La mayoría utiliza 
herramientas como: palas (26%), peinilla (17%), garrote (14%), escopeta (9%), 
piedras (7%), agua caliente (7%), veneno (5%), escoba (5%), gato (5%) y azadón 
(5%), para matar a los reptiles. 
Para el caso de la babilla (C. crocodilus fuscus), las personas mencionaron que éstas 
las han matado con escopeta y con palas, por ejemplo un hombre de 79 años 
expresó: “La babilla que vimos, llego en un invierno en donde el río Bogotá eso trajo 
babillas, armadillos, borugos y en otras fincas también llegaron más babillas, con una 
escopeta un trabajador la mato para comérsela”; así mismo otro comentó “Hace 
como 10 años llego una babilla aquí a la casa, eran como la 7 de la noche y estaba 
yo bañándome cuando escuche unos ruidos, y fui a ver y era una babilla, me pego 
un susto, tenía como un metro de largo, la perra la corrió y la matamos con un palazo 
y se pelo y se comió; yo no sé cómo ese bicho llegó hasta aquí”- hombre de 47 años). 
Frente al rol ecosistémico que las personas consideran que pueden tener la especies 
de reptiles que identificaron, la mayoría de las mujeres y hombres indicaron que los 
reptiles pueden ayudar como controladores de plagas resaltando a la iguana (I. 
iguana) y a la salamanqueja (H. brookii) (“Esas salamanquejas no hacen nada y se 
las pasan comiendo maripositas, moscos y zancudos pegadas a los bombillos” – 
mujer de 73 años). Y en menor medida, como presas de otros animales, como lo 
menciona una mujer de 73 años: “Yo he visto como los gavilanes se llevan a las 
28 
 
culebras con esas garras que tienen, sean o no venenosas, se las llevan en las 
patas”. Así mismo, varias personas consideran que los reptiles no presentan ningún 
rol o función en el ecosistema. 
Con respecto, al origen del conocimiento ecológico que tienen las personas 
participantes sobre los reptiles potenciales del área de estudio, el 47% de las mujeres 
y el 68%de los hombres, respondieron que este conocimiento es empírico, es decir 
que el conocimiento que tienen sobre los reptiles, está basado en las experiencias y 
observaciones que realizan día a día en sus predios, con este grupo biológico. Por 
ejemplo, una mujer de 50 años mencionó que: “Yo desde pequeñita veo todos esos 
animalitos, entonces es normal verlos por la casa” y un hombre de 51 años dijo que 
“Es normal, uno se acostumbra a verlas y bonito saber que hay esas razas de 
serpientes”. Así mismo, el 30% de las mujeres y el 12% de los hombres mencionaron 
que han aprendido sobre especies de reptiles viendo programas en el televisor como 
Naturalia (hombre de 65 años) o por el canal de Discovery (hombre de 51 años) y en 
menor porcentaje las mujeres mencionaron que el conocimiento viene de familiares 
o amigos (13%) y de la concesión Alto Magdalena (10%). Mientras que para el caso 
de los hombres también mencionaron el internet, revistas, la radio y el Parque 
acuático y de conservación “Piscilago”, cada uno con un 4%, como fuentes de 
conocimiento. 
Por último, al preguntar si saben o no diferenciar las serpientes venenosas de las no 
venenosas y como las diferencian, el 42% de las mujeres respondieron que no saben 
diferenciarlas, mientras que el 58% mencionaron que si saben cómo diferenciarlas, 
teniendo en cuentas aspectos como: el nombre (37%), el color (21%), forma de la 
cabeza (16%), el comportamiento (11%), forma de la cola (5%), entre otros. Por 
ejemplo, una mujer de 46 expresó que “Las serpientes venenosas se quedan quietas 
y las no venenosas tiende a huir”; “La venenosa es la que tiene el rabito muy delgado 
y la que no es tan peligrosa es la que tiene el rabo más gruesito” – mujer de 66 años; 
“Por la cabeza, la venenosa la tiene en forma de diamante y la no venenosa es 
ovalada, además, las escamas son diferente en las culebras venenosas” – mujer de 
34 años. 
Para el caso de los hombre, el 22% respondió que no sabe diferenciar serpientes 
venenosas y no venenosas, mientras que el 78% respondió si conocer aspectos 
como: el nombre (42%), el color (16%), la forma de la cabeza (16%), forma de la cola 
(11%), el comportamiento (10%), entre otros, para identificar que serpientes es 
venenosa y cual no lo es. Un hombre de 48 años mencionó que: “La mayoría de las 
culebras que son mansitas son trompi-redondas y las que son venenosas son como 
trompi-diamante como cudraditas un poquito”; “Las venenosas son las que tienen las 
cola roma y con cabeza triangular y las no venenosas como las cazadora la cola es 
delgadita y cabeza ovalada – hombre de 60 años”; “Una las conoces es por su 
nombre uno ya las identifica, dicen que la bejuca no es venenosa, en cambio las 
venenosas son como la cascabel, la coral- hombre de 76 años”. 
 
 
 
 
29 
 
Variables sociodemográficas y actividades productivas en los predios que 
explican el conocimiento local de reptiles. 
El número de especies de reptiles identificadas, se explicó por cambios en la edad 
de la persona y la presencia o no de plantaciones en el predio (AICc=114.76); esta 
misma variable por si sola explicó la composición de especies de reptiles 
identificadas por las personas en sus predios (AICc= 360.14) (Tabla 2). 
En cuanto a la variación de conocimiento, con respecto al número de grupos 
taxonómicos que identificaron las personas, se obtuvo que el mejor modelo incluyó 
las variables predictoras de religión y el número de especies de animales domésticos 
en el predio, agrupados en alimento, transporte y mascota (AICc= -34.573). Mientras 
que, el modelo que mejor explicó la variación en el conocimiento que tuvieron las 
personas frente a la composición de grupos taxonómicos incluyó exclusivamente la 
variable de sexo (AICc=294.95) (Tabla 2). 
Tabla 2. Resultados de los mejores modelos ajustados (DistLM), clasificados por el 
criterio de información de Akaike para muestras pequeñas (AICc), que explicaron 
cambios en el conocimiento local de reptiles (variables de respuesta), en función de 
variables sociodemográficas de las personas y las actividades productivas que 
desarrollan en sus predios. Se reportan los mejores modelos por número de variables 
y el mejor modelo, por cada variable de respuesta, se señala en negrilla. Variables: 
1= sexo; 2= edad; 3= religión; 4=ocupación; 5= uso del predio; 6= presencia o no de 
plantaciones; 7= tipo de plantaciones; 8= riqueza de plantaciones; 9= destino de 
producción; 10= tipo de agroquímico; 11= animal para producción; 12=otros animales 
(alimento, transporte y mascota); 13 = riqueza otros animales (alimento, transporte y 
mascota). 
Variable respuesta AICc R2 RSS 
Número de 
Variables 
Código de las 
variables 
seleccionadas 
Número de especies de 
reptiles identificados 
115.69 0.088885 518.38 1 2 
114.76 0.15055 483.3 2 2, 6 
114.83 0.19261 459.37 3 2, 6, 9 
115.49 0.26816 416.38 4 2, 3, 6, 9 
424.43 0.72431 156.86 13 Todas 
Composición de especies 
de reptiles identificados 
360.14 0.051528 1.0532E+05 1 6 
360.48 0.044616 1.0609E+05 1 8 
360.71 0.086389 1.0145E+05 1 9 
360.71 0.086389 1.0145E+05 2 6, 9 
361.28 0.12209 97487 3 2, 5, 6 
362.05 0.15493 93841 4 2, 5, 6, 9 
658.42 0.77136 25389 13 Todas 
Número de grupos 
taxonómicos conocidos 
-34.016 0.061797 20.008 1 13 
-34.573 0.16306 17.849 2 3,13 
-33.16 0.22883 16.446 3 3, 4, 13 
-30.908 0.19014 17.271 4 1, 3, 5, 13 
246.36 0.84673 3.2686 13 Todas 
Composición de grupos 
taxonómicos conocidos 
294.95 0.049058 25531 1 1 
295.69 0.080769 24679 2 1, 5 
30 
 
 
Discusión 
Aunque ha habido un aumento en los estudios de temas etnobiológicos durante la 
última década, aún se sabe poco sobre la interacción humana con la herpetofaunaen América del Sur (Ríos-Orjuela et al., 2020). Para el caso de Colombia, se han 
realizado algunas investigaciones etnobiológicas que ayudan a entender esta 
relación (Vargas-Ramírez, 2006; Balaguera Reina & González Maya, 2010; Cuesta-
Ríos & Rentería-Moreno, 2012; Nates Jimenez & Lindemann Matthies, 2015; Ríos-
Orjuela et al.,2020; Vargas-Ríos et al., 2020). No obstante, es poco lo que se conoce 
acerca de la relación reptiles-humanos que habitan el bosque seco tropical. Dado lo 
anterior, este estudio es pionero en el análisis de cómo varía el conocimiento y la 
percepción de reptiles por parte de habitantes rurales en la subregión del alto 
Magdalena, frente a variables sociodemográficas y actividades productivas que se 
desarrollan en los predios. Lo anterior supone un aporte, a que las estrategias de 
conservación y programas de educación ambiental que se plateen para este grupo 
biológico en esta zona de país, tengan en cuenta las características sociales 
evaluadas en este estudio. 
Conocimiento de especies de reptiles 
Dentro de las especies de reptiles más reconocidas por las personas que participaron 
en este estudio, se encuentra la bejuca (L. ahaetulla), el mitao (B. constrictor), la 
iguana (I. iguana) y la salamanqueja (H. brookii), lo anterior, teniendo en cuenta que 
la mayoría presenta hábitos diurnos y arborícolas (Bock, 2013; Suárez & Alzate, 
2014); además, se encuentran asociadas a la actividad humana, por lo que se 
pueden encontrar usualmente en infraestructuras como en: casas, jardines, cocinas, 
graneros, entre otro, en donde suelen encontrar su alimento, como ratones, ranas e 
insectos (Torres-Carvajal et al., 2020; Bowles et al., 2019; Suárez & Alzate, 2014; 
Bock, 2013). 
Aunque, la tortuga morrocoy (K. leucostomum), no se encuentra en la lista de 
especies de CITES, ni en la lista roja de especies amenazadas de la UICN, si 
presenta amenazas, puesto que su hábitat natural ha sido degradado por la 
fragmentación de bosques nativos, desecación de humedales y contaminación del 
agua; además es perseguida para consumo humano en ciertas regiones del país y 
es traficada debido al amplio uso que tiene como mascota (Giraldo et al., 2012; 
Rueda-Almonacid et al., 2007). Entre las personas que participaron en este estudio, 
algunas de ellas mencionaron que en algún momento de su vida o algún familiar ha 
tenido esta especie de tortuga como mascota: “Yo tuve una tortuga de mascota hasta 
que un día se fue” (mujer de 50 años); “Las tortugas las han traído los chinos que las 
encuentran por ahí y vienen y las meten en los lagos de aquí de la finca” – (hombre 
de 60 años). Lo que refleja la importancia de trabajar con las comunidades locales 
296.08 0.025416 26165 1 5 
296.12 0.11937 23643 2 1, 3 
296.21 0.070277 24961 2 1, 13 
296.51 0.15921 22573 3 1, 3, 13 
298.2 0.17663 22106 4 1, 2, 3, 13 
594.69 0.76336 6353.3 13 Todas 
31 
 
para reducir el uso de tortugas como mascotas y la protección de su hábitat en la 
región. 
En cuanto a la tortuga icotea (P. lewyana), entre sus principales amenazas se 
encuentran la destrucción de su hábitat y contaminación, uso tradicional para 
consumo y explotación comercial, siendo éstas dos últimas las amenazas más 
graves para la conservación de este reptil (Giraldo et al., 2012; Rueda-Almonacid et 
al., 2007); por lo que su estado de conservación, acorde con la UICN, es de peligro 
crítico (Páez et al., 2016). Así mismo, la especie se encuentra en el apéndice II de la 
CITES, es decir que no está necesariamente amenazada de extinción pero que 
podría llegar a estarlo a menos que se controle estrictamente su comercio (CITES, 
2020). Algunas de las personas encuestadas expresaron que antes si se consumía 
su carne y huevos de tortugas, pero que ahora no la consumen: “La gente caza las 
tortugas para comérselas, pero nosotras no, las echamos al río de nuevo” (mujer de 
45 años). Sin embargo, de acuerdo con el estudio realizado por Vargas – Ramírez 
(2006), algunos pescadores están capturando con sus redes esta tortuga, 
posiblemente para su venta, ya que varias comunidades de bajos recursos a las 
afueras de la cabecera municipal de Girardot la consumen, además, existe un 
elevado comercio de su carne y huevos (Vargas-Ramírez, 2006). 
Los resultados aquí obtenidos, son un primer insumo y una aproximación para 
entender la relación que existe entre estas dos especies de tortugas y las personas 
del área rural de Girardot, la cual se basa en el uso que le dan, ya sea como mascota 
o como fuente de alimento. Además, la percepción que tienen es de protección hacia 
estas especies, por lo que, como lo expresaron algunas personas evitan su captura 
y consumo (Figura 12 A-B); de modo que, sería de gran importancia poder 
implementar estrategias de conservación, enfocadas en líneas de acción de uso 
sostenible, donde se pueda desarrollar un trabajo comunitario para desestimular el 
consumo y tráfico de estas especies y proponer alternativas de sustento proteico y 
económico (Morales-Betancourt et al., 2015). Así mismo, promover procesos de 
educación ambiental en los espacios de comunicación local, ya sea por emisoras o 
televisión, teniendo en cuenta lo mencionado por las personas participantes durante 
la encuesta realizada (Morales-Betancourt et al., 2015) (ver resultados sección 
conocimiento ecológico local). 
En cuanto a la babilla (C. crocodilus fuscus), esta especie se encuentra en la 
categoría global de la UICN en preocupación menor (Balaguera-Reina & Velasco, 
2019) y bajo el apéndice II de CITES, es decir que no está necesariamente 
amenazada de extinción pero que podría llegar a estarlo a menos que se controle 
estrictamente su comercio (CITES, 2020). Lo anterior, como consecuencia de la 
presión que tiene sus poblaciones, ya que son objeto de tráfico ilegal para la 
comercialización de su piel, huevos y neonatos (Morales-Betancourt et al., 2013). En 
el presente estudio se pudo evidenciar el uso de esta especie, a partir de testimonios 
tales como: “Yo he comido babilla y tortuga eso es muy bueno en guiso, eso la babilla 
es como chiclosa más dura, sabe cómo a carne de res y la tortuga sabe más como 
a pescado es muy buena” (hombre de 65 años que vive cerca al río Magdalena). 
En cuanto a las especies que no fueron reconocidas por ninguna de las personas 
que participaron en el estudio, posiblemente se deba a que por ejemplo la serpiente 
S. degenhardtii, es una especie terrestre poco común que se alimenta principalmente 
de invertebrados como escorpiones y tarántulas, así como saltamontes, grillo y larvas 
de insecto, por lo que presenta hábitos semifosoriales (Díaz-Ricaurte, 2019), con 
32 
 
respecto a la serpiente I. cenchoa, ésta es una especie nocturna y posee una hilera 
de escamas alargadas en la parte media dorsal que le provee rigidez mientras se 
desplaza entre las ramas, por lo que tiene la capacidad de moverse rápidamente 
entre las ramas de los árboles para poder alimentarse de lagartijas arborícolas 
mientras duermen (Torres-Carvajal et al., 2020). Con relación, al lagarto L. 
xanthostigma, este hace parte del grupo de geckos pequeños, que habitan dentro de 
la hojarasca buscando arañas y colémbolos, los cuales hacen parte de su base 
alimenticia (Vitt et al.,2005). Las tres especies presentan una amplia distribución 
geográfica y altitudinal y hasta el momento no se ha reportado amenazas o un uso 
por parte de las personas, por lo que su estado de conservación, acorde con la UICN, 
es de preocupación menor (Lee et al., 2017; (Arzamendia et al., 2019; Vargas et al., 
2015). 
En el presente estudio, las pruebas estadísticas arrojaron que no hay diferencia entre 
sexos en la identificación del número de especies de reptiles, al igual que en el 
estudio realizado por Reyna-Rojas et al (2015), en el cual se menciona que esta 
homogeneidad entre hombres y mujeres se puede deber a que las mujeres 
adquieren la información de sus esposos, padres, abuelos, hermanos e hijos. 
Algunos autores han propuesto

Continuar navegando