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Un día de estos En la obra Los Funerales de la Mamá Grande, escrita por Gabriel García Márquez precisamente en el cuento “Un día de estos”, el autor expone un reproche contra la realidad que se vive en muchos pueblos latinoamericanos y a la vez realiza una crítica a la organización sociopolítica que se vive, donde las autoridades se aprovechan de su poderío, sin embargo estos a pesar de las injusticias impuestas a los oprimidos, necesitan el apoyo de la clase baja para consolidar su poder. La importancia de Don Aurelio Escovar, en la sociedad de esa época era magna, en el pueblo recibía el trato de “Don”, ya que en la época en la que vivía era muy común este trato hacia alguien apreciado y respetado, y él, por su dedicación y profesionalismo que se evidencia en el siguiente extracto: “y puso sobre la mesa un puñado de instrumentos que ordenó de mayor a menor, como en una exposición.”, razón por la cual también, pudo ejercer su profesión de dentista sin título, ya que contaba con la plena confianza de la gente. La recurrencia del alcalde hacia el dentista nos muestra la confianza, seguridad e importancia que poseía Don Aurelio Escobar, ya que el alcalde al pertenecer a la clase social alta nos hace inferir que va a recurrir a profesionales que tengan un título y un buen despacho, pero sin embargo ocurre lo contrario ya que este va en busca de Don Aurelio Escobar, a pesar de no poseer un despacho adecuado para la recepción de personas de alta alcurnia. La clase social baja tenía una insatisfacción con el manejo del poder que tenían los de la alta alcurnia, la cual se evidencia con la siguiente metáfora: “Aquí nos paga veinte muertos, teniente.”, metáfora que hace referencia a que los trabajos realizados por el pueblo eran pagados con muertes y a la vez nos hace una retrospección hacia el pasado con un hecho arcaico, que es el de la masacre de las bananeras, en el cual los “tenientes” mandaban asesinar a los pobladores “revolucionarios”, tan solo por exigir sus derechos. Otra evidencia de la insatisfacción del pueblo se encuentra en el siguiente extracto: “Me pasa la cuenta — dijo. —¿A usted o al municipio?”, en este extracto se evidencia la ironía por parte de Don Aurelio Escobar, el cual sabiendo que, si pasa la cuenta a cualquier, ya sea al alcalde o al municipio de todas formas va a tener que pagar el municipio, lo cual nos hace referencia la corrupción existente en el gobierno de ese pueblo, en el cual las autoridades se aprovechan de su entorno de poder. Don Aurelio Escobar representaba a la clase social baja, las cuales son las personas trabajadoras y solidarias, a lo largo de todo el cuento se encuentra y expone la opresión que sufría el pueblo, pero en un cierto momento se logra evidenciar que el pueblo se revela contra esta opresión sufrida pero que a la vez siente compasión hacia su opresar al verlo en mal estado, en el siguiente extracto se logra evidenciar lo predicho: “abrió por completo la gaveta inferior de la mesa. Allí estaba el revólver. —Bueno — dijo—. Dile que venga a pegármelo. […] la mano apoyada en el borde de la gaveta. El alcalde apareció en el umbral. Se había afeitado la mejilla izquierda, pero en la otra, hinchada y dolorida, tenía una barba de cinco días. El dentista vio en sus ojos marchitos muchas noches de desesperación. Cerró la gaveta con la punta de los dedos” También podemos ver en otros extractos, tal como en el siguiente: “El dentista le dio un trapo limpio. —Séquese las lágrimas —dijo.”, en este extracto se puede nuevamente observar la compasión por parte de los pobres, al momento de ofrecerle un trapo limpio, representando este al respeto, igual como cuando el autor utiliza la antítesis mencionando lo siguiente: “El dentista sólo movió la muñeca. Sin rencor, más bien con una amarga ternura”, la antítesis utilizada al decir “amarga ternura”, nos hace referencia a que el Dentista a pesar de tener rencor e ira contra el alcalde muestra una ternura hacia este. Los de la clase social baja son importantes, así como los de la alta alcurnia porque si no existieran personas pobres, o ricas, no habría la división del poder, por lo tanto se puede concluir con que la clase social alta necesita de los de la clase social baja para poder consolidar su poder. Sin embargo los de la alta alcurnia se aprovechan en muchas ocasiones de su entorno de poderío, despertando así en el pueblo un ansia de justicia, la cual es consumida por la compasión y necesidad de ayudar que sienten los oprimidos al ver a una persona en mal estado, como lo estaba el alcalde.
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