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Analisis pelicula Spotlight

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Para recordar, Spotlight es una película donde un grupo de periodistas de 
investigación de The Boston Globe, bajo el mando de un nuevo director, se envuelve 
en una serie de investigaciones para poder destapar los abusos sexuales por parte de 
sacerdotes cristianos hacia niños en Boston. Durante la investigación, descubren que 
tanto la Iglesia Católica como el sistema judicial y político, además de los medios de 
comunicación de masas, han encubierto varios casos asociados al abuso de niños. El 
film se desarrolla en el lapso 2001-2002 en Estados Unidos. 
La película, como primera instancia, podemos pensarla en dos de las categorías de la 
“narrativa” propuestas por Omar Rincón: la primera es la categoría “Período” (que 
intenta narrar desde una época determinada) ya que la película muestra, en menor 
detalle, la sociedad estadounidense de la época, sus formas de pensar, actuar, la 
hegemonía del momento, los intereses de las élites, etc. La segunda categoría, es 
“Nacionalidad”, estrechamente vinculada con la primera, pues se reflejan las 
características de las identidades nacionales estadounidenses. 
Para comenzar, me parece importante tener presente que los acontecimientos de 
Spotlight se sitúan en el año 2001 en Estados Unidos, año en que el país sufrió la 
terrible tragedia de las Torres Gemelas. Este hecho llevó a que el lanzamiento oficial 
de la noticia se retrasara y fuera pospuesto al 6 de enero del 2002. Centrándonos un 
poco en este tema, podemos hablar de una política dividida en un antes y un después 
de la tragedia: en un primer momento, es decir, antes de lo sucedido, existían élites 
políticas dominantes que se encargaban de establecer un dominio tanto nacional como 
ciertamente mundial (“Teoría del Imperialismo Cultural” lo llamó Herbert Schiller, 
poniendo a EEUU como cabecera: esta teoría se basa en las ideas principales de 
globalización como consecuencia de poderío económico y alianzas entre políticos y 
militares). Durante esta etapa pre terrorismo, la sociedad civil no prestaba mucha 
atención a los temas exteriores o incluso interiores, cada persona hacía su vida 
tranquilamente siendo indiferente de las cuestiones que afectaban a los demás; sin 
embargo, post terrorismo, el Estado y las élites se consolidaron en un bloque más 
fuerte, estricto y aún dominante debido al miedo impuesto por su propia propaganda 
gubernamental en contra de musulmanes y personas de medio oriente. 
En este marco pre terrorismo de indiferencia social (podemos hablar entonces de una 
centralización del poder que funciona sobre una “integración vertical”, donde el sujeto 
queda desligado de la solidaridad grupal y la Iglesia proclama una fe individualista que 
significa la sumisión a las jerarquías -característica fundamental de la modernización, 
al pasar de una integración horizontal que sea pluralista a una vertical y homogénea- 
(Martín Barbero, p. 97), el tema de sacerdotes abusadores pasaba desapercibido 
debido a que eran encubiertos por las élites, entre ellas podemos ver al sistema 
judicial, la Iglesia, los medios de comunicación, etc. Por eso, por muchos años, las 
víctimas fueron indirectamente silenciadas, ya que sabían que si hablaban nadie les 
creería. 
Con la llegada del nuevo director al periódico de Boston, fue que se retomó el proyecto 
de investigación, ya que es esta persona la que concibe al periodismo como una forma 
de llegar a una transformación de la realidad, una forma de dar batalla; en este 
sentido, la frase “Somos los relatos que producimos nosotros mismos como sujetos y 
como culturas” (Rincón, p. 87) es muy acertada, pues habla de ese ansia por un 
cambio, por una verdad, que el director lleva y transmite al equipo de investigación. En 
este momento es cuando se empieza a concebir a la narración de la nota como una 
forma de mostrar lo paradójico, lo impensable de la sociedad (una de las funciones de 
la narración (Rincón, p. 91). 
Llegado este punto, es que empiezan a ver las claras relaciones entre los sujetos de la 
sociedad y las instituciones, una de las características de la comunicación: “La 
comunicación hoy (…) también es parte de un sistema de relaciones sociales, 
culturales y cada vez más, económicas” (Porta, p. 2). Una de las primeras relaciones 
que podemos ver es la de la sociedad con la Iglesia, a la que se le mantiene un 
profundo respeto y se la coloca en la posición máxima de la pirámide jerárquica, en 
este sentido, es la Iglesia la que junto al Estado lleva adelante los discursos 
hegemónicos incuestionables, naturalizados y dominantes. Asimismo, durante el 
transcurso de la película, podemos ver lo que igualmente pasaba en el caso anterior: 
el sistema judicial es intocable, incuestionable y no cede información debido a la 
protección de los intereses internos; en Spotlight, existe un abogado que tomó casos 
sobre sacerdotes pederastas, casos que se encuentran enterrados en la historia y 
nadie parece recordar. En este marco, la industria mediática de los medios de 
comunicación adquiere un papel indiferente sobre el caso, ya que, al principio de la 
película se muestra que el mismo The Boston Globe, bajo el mando de otro director, 
archivó y jamás sacó a la luz la información que años antes habían recogido sobre el 
mismo tema; así podemos ver una industria de medios de comunicación que pasó de 
estar fuera del control eclesiástico y estatal como en el siglo XV: “El surgimiento de la 
industria de la impresión representó la aparición de nuevos centros y redes de poder 
simbólico que generalmente quedaban fuera de el control de la Iglesia y del Estado…” 
(Thompson, p. 79), a tener una industria mediática hegemonizada por el poder 
dominante y perteneciente a las élites. Este hecho es producto de una globalización de 
la comunicación, de la industria y del Imperialismo Cultural antes mencionado; la 
comunicación se volvió cada vez más global por el crecimiento de la interconectividad 
en el mundo, lo que lleva a que las actividades sean de carácter global: “La 
reordenación del espacio y del tiempo ocasionada por el desarrollo de la media es 
parte de un conjunto de procesos (…). Estos procesos se describen en la actualidad 
comúnmente con el nombre de «globalización»” (Thompson, p. 199). En este ámbito 
de modelo globalizado capitalista, la prensa adquiere su forma y responde a los 
intereses económicos: “La relación vendedor-comprador, disfraza de relación 
intersubjetiva entre emisor y receptor, enmascara las relaciones sociales de 
producción que marcan el discurso de la prensa” (Martín Barbero, p. 51). 
La globalización fue y es la nueva productora de sentido en la actualidad, donde 
nuevamente podemos ver la cultura mediática estadounidense en las televisiones de 
la sociedad en casi todo el mundo. Este proceso trajo a nosotros nuevos modos de 
estar juntos y de articular relaciones sociales (Martín Barbero, p. 43). En este aspecto, 
los medios de comunicación cobran gran relevancia, donde en relación con la película, 
podemos ver la simplificación de los acontecimientos debido a la intervención de 
intereses políticos y económicos, es por esto que no dejan libertad a la sociedad de 
expresarse y sacar a la luz sus casos; es justamente esta idea la que lleva adelante 
Silverstone: “Entender los medios como proceso también implica reconocer que el 
proceso es, en lo fundamental, político o, quizá, con mayor rigor, políticamente 
económico” (Silverstone, p. 18). Sobre esta simplificación, Martín Barbero sostiene que 
se lleva adelante mediante la banalización o descomplejización (Martín Barbero, p. 
51), justamente esas fueron las estrategias que los medios de Boston llevaron 
adelante para no revelar la noticia sobre las víctimas de abusos: archivaron los casos, 
sus denuncias y sus reclamos, no les dieron importancia. Entonces, en este punto, 
podemos hablar de una sociedad “fragmentada” por los procesos de globalización, ya 
quequedaron atrás las partes más contrahegemónicas; aspecto que podemos notar 
en Spotlight con las víctimas, ya que quedaron “fuera” de la sociedad y es por ese 
margen de alejamiento que necesitan un nuevo reconocimiento (reconocimiento que 
les será otorgado en 2002 por la nota: tras la publicación llegaron miles de llamadas al 
departamento de Spotlight para denunciar más casos de abusos por parte de 
sacerdotes en Massachussets); el concepto de sociedad fragmentada es trabajado por 
Martín Barbero: “El proceso de globalización que ahora vivimos, sin embargo, es al 
mismo tiempo un movimiento de “potencialización” de las diferencias y de exposición 
constante de unas culturas frente a “otras”, de mi identidad y la del otro” (Martín 
Barbero, p. 42). 
Sin embargo, con esta globalización de la comunicación y la modernidad de la 
industria mediática, vemos a los medios de comunicación también como “dimensiones 
sociales y culturales, políticas y económicas del mundo moderno” (Silverstone, p. 15) 
(en este sentido, articulamos la idea de que narrar es en base a la experiencia: 
“Siempre que buscamos explicarnos, nos convertimos en una historia” (Rincón, p. 89), 
además de pensar la narración como forma de pensar, explicar y comprender (Rincón, 
p. 89). En relación a la película, vemos esto en el momento de la investigación, de la 
recolección de datos y de la producción de la nota como instancia para develar las 
historias de abusos silenciadas por las élites, los testimonios de las víctimas y la gran 
red de pedofilia y pederastia; es la nota y la propia narración lo que le da voz a los 
silenciados durante años por la hegemonía del poder dominante. En relación a esto, 
podemos ver la narración mediante los textos, donde el discurso adquiere una “triple 
autonomía semántica” respecto al emisor, receptor y las condiciones en que se dé el 
intercambio (Rincón, p. 97); en este aspecto, se tienen en cuenta, por ejemplo, la 
preocupación y el interés del equipo de periodistas de investigación por develar el 
caso (que cabe resaltar es demasiada, pues todos ellos dejan ver en diferentes 
escenas lo involucrados, indignados y sorprendidos que los tiene la situación), las 
ansias de las víctimas porque se dé a conocer su historia personal (igualmente, 
muchos de ellos, a pesar del miedo, confían en que la verdad saldrá a luz y se 
mantienen esperanzados en la busca de la justicia) y el ámbito en que se da (un 
ámbito de “censura”, involucración, defensa entre élites, etc). 
En este contexto, se pueden identificar varios elementos de la narración mediática: “el 
contar” como la relación entre la importancia del conocido equipo Spotlight 
perteneciente a The Boston Globe y sus objetivos de revelar la verdad sobre al caso 
de los sacerdotes, “el narrar” con el “sujeto” como los periodistas, las élites, las 
víctimas, los lectores, etc. con lo “dramatúrgico” basado en el caso de pederastia por 
parte de sacerdotes en Massachussets, y con las “intenciones” en el objetivo antes 
dicho. En relación a los tipos de conflictos, tenemos el ser humano contra otro humano 
y el ser humano contra la sociedad; el primero de ellos radica en la idea de que es el 
equipo de investigación Spotlight y las víctimas contra el sistema judicial, eclesiástico y 
en general las élites, y el segunda se refiere a las víctimas y al equipo de periodistas 
frente a una sociedad hegemonizada y ciega que debe abrir los ojos y darse cuenta 
que ha vivido engañada toda la vida. En otra instancia tenemos a la “competencia 
narrativa” donde podemos identificar al objetivo revelativo y denunciativo de la nota 
(nota como “competencia de estilo”) como “competencia de producción” que mediante 
estrategias de investigación, entrevistas, búsqueda de archivos (que se articulan en 
“competencia dramatúrgicas”) e intervención en el sistema de abogados, la Iglesia y 
distintas personalidades (“competencia de referentes narrativos”) busca generar un 
sentido en la sociedad (“competencia de tono”). Estas diferentes competencias 
“potencian las culturas mediáticas” (Rincón, p. 101). En cuanto a intervenciones 
narrativas, podemos notar una clara presencia del “presentar la expresión social” pues 
el medio de comunicación de la película busca tras la llegada del nuevo director una 
manera de ayudar a aquellas víctimas de abusos ofreciéndoles una voz en su portal. 
Para dar fin a este aspecto, cabe resaltar la “significación” que tiene la nota, en este 
sentido, pretenden producir una especie de significante vacío donde los sacerdotes y 
la Iglesia deje de verse como una clase perfecta, y pueda tomarse en cuenta las 
atrocidades cometidas por sus religiosos y el encubrimiento por parte de los más 
poderosos dentro del clero. Podemos decir entonces que el género de la nota es 
cultural, ya que busca una significación colectiva (Rincón, p. 107). 
Justamente es por estas características narrativas que la noticia, en el caso de 
Spotlight, no fue tomada como mera mercancía. Con respecto a la noticia, Martín 
Barbero explica que es el eje discursivo informativo que tiene como base un 
acontecimiento (Martín Barbero, p. 56) y que es una mercancía del modelo capitalista: 
en este aspecto, el acontecimiento es el abuso de menores por parte del clero en 
Massachussets y la nota escrita por los periodistas tiene el objetivo de sacarlo a la luz. 
Martín Barbero explica que los hechos “no existen” si no son narrados en la televisión, 
o que existen en tanto son construidos: es por esto que el caso llevado adelante por el 
equipo de periodistas “no existe” para el resto de la sociedad, ya que no salieron en 
las noticias. En este ámbito, lo que caracteriza al “acontecimiento” del caso, es su 
imprevisibilidad, que vendría siendo que rompe con la norma (en la película, la parte 
contrahegemónica de la nota que rompe con las mentiras hegemónicas de la élite): “Lo 
noticiable (…) se recorta sobre lo verosímil del género, sobre el juego de tolerancia y 
de censura no en cuanto instancia del hecho” (Martín Barbero, p. 57), además de su 
implicación, lo que puede llegar a generar en las personas y el impacto que puede 
tener en la sociedad (en la película, lo que generó luego de ser publicada la nota: ese 
esperanza de justicia y el ánimo a sacar a la luz los testimonios): “… Es 
acontecimiento no aquello que le pasó a tales personas, sino aquello en lo que pueden 
participar” (Martín Barbero, p. 57). Más allá de lo explicado, The Boston Globe no 
presenta a esta noticia como lo describe Martín Barbero, ya que lo que se busca no es 
dinero sino reconocimiento de víctimas, condena a victimarios y conciencia de la 
sociedad civil. 
En este marco donde una de las cosas buscadas por los periodistas es generar un 
sentimiento en la sociedad tras dar a conocer los casos de la región, podemos ver 
relacionada a la posverdad que Murolo describe como “la idea de representar” 
(Murolo, p. 4) en su solo aspecto de que está orientada a la generación de un sentido, 
de una ideología o sentimiento, de una verdad. Normalmente la posverdad se ve 
asociada a las fake news por su capacidad de ser tomada como verosímil a pesar de 
su no verificación para ser difundida rápidamente: “Se trata de una falsedad que 
continúa siendo aceptada aun a sabiendas de que es una falsedad” (Fernández 
García, p. 67). Pero en el caso de Spotlight, solo podemos ver a la posverdad en este 
aspecto que antes nombré: una verdad que busca generar algo en su receptor (ya sea 
indignación, sentido de justicia, pena por las víctimas, enojo hacia el sistema de élite, 
etc.) 
Para ir finalizando este análisis sobre Spotlight, cabe resaltar que todo su proceso de 
investigación no habría sido posible sin las tecnologías que vinieron de la mano con la 
modernidad; las tecnologías son, como explica Raymond Williams, “el marco de 
conocimientos necesarios para el desarrollo de dichas habilidades y aplicaciones” 
(Williams,p. 184) y, como dice Roger Silverstone, “nuestra manera de encarar la 
realidad” (Silverstone, p. 1), además de estar claramente atravesadas por distintos 
intereses. Así, podemos ver a las tecnologías vinculándose con el orden social para 
responder a sus necesidades y aportar al proceso de desarrollo junto a las nuevas 
modalidades comunicativas. En este marco, las tecnologías están presentes durante 
todo el film por este aspecto: ayudaron a llevar una investigación adelante. Fueron los 
avances en la literatura, la imprenta y sus innovaciones técnicas en el siglo XV las que 
permitieron que hoy en día y en los tiempos del 2001 se pudieran utilizar diversos 
medios: por ejemplo, los libros, recortes periodísticos y cartas muestran evidencias 
sobre el caso investigado al tener archivos sueltos de años anteriores que fueron 
olvidados en la historia. Esta es una parte fundamental ya que fue mediante la lectura 
y traspaso de datos de forma escrita que se lograron obtener muchísimas pistas que 
guiaban a los periodistas a lo largo de la investigación. Asimismo, vemos a los 
teléfonos, a las grabadoras de voz y a diferentes dispositivos electrónicos que fueron 
de gran utilidad a la hora de contactar personas -sea víctima o victimario-, además de 
presentarse como una posibilidad para el resto de la sociedad que hubiera sufrido un 
caso similar de contactarse con el medio de comunicación. Por último, aparece la 
computadora como elemento en donde la nota es escrita y posteriormente publicada 
para que el caso se devele y el objetivo se cumpla. 
Como conclusión, cierro que Spotlight es un gran ejemplo de cómo la comunicación 
puede influir en la sociedad para lograr una transformación, y cómo los medios de 
comunicación son esa gran vía que nos puede llevar a un cambio mundial donde la 
hegemonía e intereses de las élites no nos perjudiquen directamente quitándonos la 
voz y las posibilidades de denunciar a las jerarquías que nos oprimen. 
Bibliografía: 
- MARTÍN-BARBERO, Jesús (1987). De los medios a las mediaciones. Comunicación, cultura y 
hegemonía. Editorial G. Gilli, México. Segunda Parte: “Matrices Históricas de la 
massmediación: El largo proceso de enculturación. Del folklore a lo popular” 
- RINCÓN, Omar (2006) Narrativas Mediáticas. O como se cuenta la sociedad del 
entretenimiento. – Cap. 3 “La narración mediática” 
– PORTA, Paula (2016) “Comunicación, medios, poder” en Hoja de ruta. Un recorrido por los 
sentidos sobre la comunicación, las cotidianidades y el poder. 
-THOMPSON, John (1998) Los media y la modernidad. Una teoría de los medios de 
comunicación. Cap. 2 “Los media y el desarrollo de las sociedades modernas” 
- THOMPSON, John (1998) Los media y la modernidad. Una teoría de los medios de 
comunicación. Cap. 5 “La globalización de la comunicación” 
- SILVERSTONE, Roger (2001) ¿Por qué estudiar los medios? – Cap. 1 “La textura de la 
experiencia” 
- MARTÍN-BARBERO, Jesús (2005) “Globalización comunicacional y transformación cultural” 
en Por otra comunicación: los media, globalización cultural y poder / coord. por Denis de 
Moraes. 
- MARTÍN BARBERO, Jesús (1988) Procesos de comunicación y matrices de cultura. Itinerario 
para salir de la razón dualista. Cap. “Prensa la forma-mito del discurso de la información” 
- MUROLO, Leonardo “La posverdad es mentira…” 
- FERNÁNDEZ GARCÍA Nuria (2017) “Fake news: una oportunidad para la alfabetización 
mediática” en Nueva Sociedad No 269. 
- WILLIAMS, Raymond (1992) Historia de la Comunicación. Cap. 4 “Tecnologías de la 
comunicación e instituciones sociales” 
- SILVERSTONE, Roger (2001) ¿Por qué estudiar los medios? – Cap. 3 “Tecnología”

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