Logo Studenta

Microbiologia Medica (507)

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

CAPÍTULO 35 Virus de la hepatitis 509
En personas infectadas con VIH, a menudo se añaden 
infecciones por HBV, y su prevalencia fue de 36% en 2008 
en Estados Unidos.
Los principales mecanismos de transmisión de HBV 
durante la lactancia son de una madre infectada a su recién 
nacido durante el parto y de un contacto doméstico infectado 
a un lactante.
No hay una tendencia estacional para la infección por HBV 
ni una predilección elevada para cualquier grupo de edad, aun-
que hay grupos de alto riesgo defi nidos como los usuarios de 
drogas parenterales, las personas internadas en centros sani-
tarios, personal sanitario, los pacientes que reciben múltiples 
transfusiones, los que reciben trasplantes de órganos, los enfer-
mos en hemodiálisis y quienes los atienden, individuos con 
múltiples parejas sexuales y lactantes recién nacidos de madres 
con hepatitis B. La identifi cación sistemática obligatoria de 
los donadores de sangre por marcadores de infección de HBV 
(HbsAg, HBc Ab y DNA de HBV) ha reducido sobremanera la 
cifra de casos de hepatitis asociada a transfusión. Las personas 
se han infectado por jeringas, agujas o bisturíes esterilizados 
en forma inadecuada o incluso por tatuajes o la perforación de 
las orejas.
Existen otros mecanismos de transmisión de la hepatitis 
B. Se puede detectar HBsAg en saliva, lavados nasofaríngeos, 
semen, líquido menstrual y secreciones vaginales, lo mismo 
que en la sangre. La transmisión de portadores a contactos 
estrechos ocurre por vía oral o por exposición sexual u otro 
contacto íntimo. Hay pruebas sólidas de la transmisión de 
personas con casos leves y portadores de HBsAg a parejas 
de homosexuales y heterosexuales a largo plazo. No se ha 
documentado la transmisión por la vía fecal-oral. Si se toma 
en cuenta que puede haber más de 1 000 millones de viriones 
por mililitro de sangre en un portador positivo para HBeAg y 
que el virus es resistente al desecamiento, no es de sorpren-
der que todos los líquidos corporales de los pacientes infec-
tados por el VHB puedan ser contagiosos. Las infecciones 
subclínicas son frecuentes y estas infecciones no reconocidas 
representan el riesgo principal para el personal sanitario.
El personal sanitario (médicos y cirujanos dentales, pató-
logos, otros médicos, enfermeras, técnicos de laboratorio y per-
sonal de banco de sangre) tienen una incidencia más elevada de 
hepatitis y una mayor prevalencia detectable de HBsAg o anti-
cuerpos contra HBs que los que no tienen exposición laboral a 
los pacientes o a los hemoderivados. El riesgo que estos porta-
dores de HBsAg aparentemente sanos (sobre todo médicos y 
cirujanos dentales) representan a los pacientes bajo su cuidado 
aún no se ha determinado pero probablemente es pequeño.
Las infecciones por hepatitis B son frecuentes en pacien-
tes y personal de las unidades de hemodiálisis. Hasta 50% de 
los pacientes en diálisis renal que tienen contacto con hepatitis 
B puede volverse portador crónico de HBsAg en comparación 
con 2% del grupo de personal, lo que resalta las diferencias en 
la respuesta inmunitaria del hospedador. Los contactos fami-
liares también tienen un riesgo más elevado.
El periodo de incubación de la hepatitis B es de 50 a 180 
días con una media de 60 a 90 días. Al parecer varía según la 
dosis de HBV administrada y la vía de administración, prolon-
gándose en los pacientes que reciben una dosis baja del virus o 
que son infectados por una vía no percutánea.
C. Hepatitis C
Las infecciones por HCV se propagan por todo el mundo. La Or -
ganización Mundial de la Salud estimó que casi 3% de la po -
blación mundial se había infectado y los subgrupos de po bla-
ción en África tenían tasas de prevalencia de hasta 10%. En 
Sudamérica y en Asia se encuentran otras zonas de gran pre-
valencia. Se estima que hay más de 170 millones de portadores 
crónicos en todo el mundo que corren el riesgo de presentar 
cirrosis hepática, cáncer hepático, o ambos y que más de tres 
millones de ellos viven en Estados Unidos.
El HCV se transmite principalmente a través de la expo-
sición percutánea directa a la sangre, aunque en 10 a 50% de 
los casos no se puede identifi car la fuente de este virus. En 
orden de prevalencia de la infección más o menos decreciente 
están los usuarios de drogas inyectables (alrededor de 80%), los 
hemofílicos tratados con productos de factores de la coagula-
ción antes de 1987, los receptores de transfusiones de donado-
res positivos para HCV, los pacientes en hemodiálisis crónica 
(10%), las personas que tienen prácticas sexuales de alto riesgo 
y el personal sanitario (1%). El virus se puede transmitir de la 
madre al lactante, aunque no con la misma frecuencia que el 
HBV. Las estimaciones de la transmisión vertical materno-in-
fantil varían de 3 a 10%. Las madres con densidades virales de 
HCV más altas o infección concomitante con HIV transmiten 
más a menudo el HCV. No se ha relacionado el riesgo de trans-
misión con la lactancia natural.
El HCV se detectó en la saliva de más de un tercio de 
pacientes con infecciones concomitantes por HCV y HIV; se 
ha transmitido a través de preparados comerciales de inmuno-
globulina intravenosa, incluido un brote epidémico en Estados 
Unidos que ocurrió en 1994. La población de Egipto tiene una 
prevalencia de HCV elevada (alrededor de 20%). La transmi-
sión se ha vinculado al intento (de la década de los 50 a la de los 
80) de tratar la esquistosomiasis mediante múltiples inyeccio-
nes, a menudo con agujas esterilizadas de forma inadecuada o 
reutilizadas. La infección por HCV se asocia con tatuajes y, en 
algunos países, con las prácticas de la medicina popular. Un 
donador positivo a HCV puede transmitir el HCV a un recep-
tor de trasplante de órgano.
El periodo de incubación promedio para HCV es de seis a 
siete semanas. El tiempo promedio desde la exposición hasta 
la seroconversión es de ocho a nueve semanas y casi 90% de 
los pacientes son positivos para anticuerpos contra HCV en los 
primeros cinco meses.
D. Hepatitis D (virus delta)
El virus de la hepatitis D (HDV) se encuentra en todo el mundo 
pero con una distribución no uniforme. Su máxima prevalen-
cia se ha comunicado en Italia, Medio Oriente, Asia Central, 
África Occidental y Sudamérica. El HDV infecta a todos los 
grupos de edad. Las personas que han recibido múltiples trans-
fusiones, los toxicómanos de drogas intravenosas y sus contac-
tos estrechos tienen un riesgo elevado.
Se considera que las vías primarias de transmisión son 
similares a las del HBV, aunque el HDV no parece ser una 
enfermedad de transmisión sexual. La infección depende de la 
replicación del HBV, pues éste proporciona una envoltura de 
HBsAg para HDV. El periodo de incubación varía de dos a 12 
semanas y es más breve en portadores de HBV que presentan 
35 Chapter 35_Carroll_4R.indd 50935 Chapter 35_Carroll_4R.indd 509 15/04/16 12:0115/04/16 12:01

Continuar navegando

Contenido elegido para ti

28 pag.
Hepatitis C Informacion para pacientes

SIN SIGLA

User badge image

Mbinho Capi Mbape

40 pag.
documento_informativo_sobre_infeccion_vih_profesionales

Colégio Objetivo

User badge image

Brayan Jossue Escalante Mota

44 pag.
enfermedad de meningococina

SIN SIGLA

User badge image

Alexander.alvarez Alvarez Primera

1 pag.
Anatomia y Fisiologia (452)

SIN SIGLA

User badge image

alfo norma

Otros materiales