Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Studocu no está patrocinado ni avalado por ningún colegio o universidad. Fierro Marco Semiologia Del Psiquismo pd Psiquiatría (Universidad Metropolitana Colombia) Studocu no está patrocinado ni avalado por ningún colegio o universidad. Fierro Marco Semiologia Del Psiquismo pd Psiquiatría (Universidad Metropolitana Colombia) Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 https://www.studocu.com/bo?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd https://www.studocu.com/bo/document/universidad-metropolitana-colombia/psiquiatria/fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd/17258747?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd https://www.studocu.com/bo/course/universidad-metropolitana-colombia/psiquiatria/5019778?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd https://www.studocu.com/bo?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd https://www.studocu.com/bo/document/universidad-metropolitana-colombia/psiquiatria/fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd/17258747?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd https://www.studocu.com/bo/course/universidad-metropolitana-colombia/psiquiatria/5019778?utm_campaign=shared-document&utm_source=studocu-document&utm_medium=social_sharing&utm_content=fierro-marco-semiologia-del-psiquismo-pd Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Marco Fierro Urresta Médico psiquiatra de la Universidad del Rosario. Especialista en Filosofía de la ciencia de la Universidad del Bosque. Actualmente es docente en lafacultad de medicina de la Universidada delRosario yen el postgrado de psiquiatría de la Clínica de La Paz. cultura Libre Indice Prefacio 5 Introducción.. 7 Evaluación 23 Descripción general 37 Estado de la conciencia, orientación, atención y sueño 45 Afecto ,............................... 59 Pensamiento 77 Lenguaje 97 Percepción 111 Inteligencia......................... 129 Memoria 139 Introspección 155 Bibliografía 167 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Prefacio Es obvio el carácter subjetivo, eminentemente personal y privado de los fenómenos psicológicos. Estas características, en los últimos años, han llevado a muchos a estu- diarlos únicay exclusivamente desde un puntode vistaexterno y a plantearla esterili- dad del abordaje interno. Se prefiere ver mediante neuroimágenes los correlatos de pensamientos, emociones y recuerdos, olvidando muchas veces que los correlatos no son lo mismo que la mente. Lo anterior obedece al prejuicio de que aquello que no es susceptible deserobservado de forma directa no merece ser estudiado científicamente. La subjetividad de los fenómenos psicológicos no debe inhibirnos ni desanimarnos de tratarlos desde una perspectiva científica que abarque los dos puntos de vista. De esta manera, no sólo ampliamos las posibilidades de explicación mediante la especializa- ción y reducción, también nos acercamos a su complejidad al ser capaces de vincular las partescon la totalidad, vislumbrar su intrincada red de interacciones y apreciar sus cualidades emergentes. Un segundo prejuicio, tan arraigado como el primero, establece que los fenómenos psicológicos seencuentran claramente identificados y descritos. Enesteordendeideas, una semiología del psiquismo es un conjunto de conocimientos cerrado, terminado, definitivamente establecido y escasamente sujetoa cambios. Enpsiquiatría, susconse- cuencias han sidoel descuido de este campo de estudio y la insistencia en mantener, a veces de manera acrítica, conceptos que han ido perdiendo capacidad explicativa y predictiva. La semiología como todoconocimiento está sujetaa cambios; su vidasólo puede transcurrir en un estado distante de la quietud, estáobligada a dialogar conotras ramas del saber y no puede hacer algo distinto de aprovechar cuanto descubrimiento puedaparacrecery transformarse. En un librode semiología del psiquismo se puedepresentar de maneraesquemática las manifestaciones psicopatológicas, dar una definición de estas y citar un ejemplo ilustrativo. Deseguro, seríabastante útil comotexto, aunque serviría sobre todocomo un diccionario especializado. Este libroes un tantodiferente. Ala parteesquemática le he agregado unarevisión rápiday general de los factores que danforma a los fenóme- nos psíquicos, destacando su carácterdinámico y productivo. Así, en el capítulo sobre pensamiento hepreferido mostrar la inconveniencia decontinuar utilizando ciertos con- ceptosque según otrasramasdel conocimiento son limitados o ya han sido modifica- dos. En el capítulo de inteligencia, en cambio, he dado prelación a la polémica actual sobre capacidades y habilidades, dejando a un lado la preocupación por las definicio- nes.Quien desee adentrarse de una vezen la psicopatología, bienpuede pasarpor alto 5 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo estaparte, peroquien tengaun pocomásde tiempo y se interese no sóloen el punto de llegadasinoen el tortuoso camino de la discusión y la polémica hacebienal detenerse en ella y leerla con esa actitud críticacapazde discutir los conceptos, cuestionarlos y buscarmejores si es el caso. La semiología del psiquismo seguirá cambiando. Muy probablemente, conceptos tan prestigiosos comoel de ideadelirante, segúnel DSMIV, se modificarán conel conoci- miento venidero. No se entenderán más como alteraciones puras del pensanúento, se necesitará en cambio el concurso de muchas otras instancias que den cuentade su ca- ráctercomplejo. Tendremos quecontarparaellocon losaportes de diferentes áreasdel psiquismo como las emociones y las percepciones, la historiadel sujetocon su flecha irreversible de acontecimientos que da lugara nuevas tendencias interpretativas y los mecanismos de retroacción que inflan o estabilizan esasmismas tendencias. Haberescogido como título"Semiología del psiquismo" en lugarde "Semiología psi- quiátrica" tieneque ver un tantocon el fructífero diálogo existente entre las ciencias. Los fenómenos psicopatológicos ya no son competencia exclusiva de la psiquiatría ni la psicología. Hoy en día son estudiados por las neurociencias, la lingüística, algunas ramas de la filosofía y las ciencias de la computación entre otras. Los enfoques y las técnicas también se ha diversificado, pero aún así el de tipo clínicoposee una enorme utilidad para todoaquelinteresado en la estructura y funcionamiento del psiquismo. Al fin y al cabo las "anomalías" o "alteraciones", comose quiera, ofrecen la posibilidad sin igualde entender "lo patológico" dentro del marco de referencia de "lo normal". 6 Conceptos de importancia En semiologia del psiquismo Cuando seestudia la semiología de alguna especialidad médica distinta a la psiquiatría, de entrada se vislumbra gran acuerdo con respecto a la mayoría de las definiciones y principios generales. No ocurrelo mismo en psiquiatría. Existen varios términos am- pliamente utilizados cuyos significados no sólo son numerosos sm.o complet~ente distintos unos de otros. Desde luego, esta situación no obedece a simples capnchos. Cadaacepción está respaldada por una historia y una perspectiva ampliamente estruc- turadas acercade la manera en que se observa dichapartede la realidad. No es preten- siónde este librodiscutir esossignificados, ni siquiera presentarlos sucintamente. Más bien con la finalidad de aclarar su uso en los capítulos que siguen, se enuncia las acepciones escogidas. 1. MENTE, PSIQUlSMO y FENOMENOS MENTALES No haynadamásfamiliar y cercano a los humanos que nuestros propios pensamientos, percepciones,recuerdos, emociones, etc.Sinembargo, cuando intentarnos caractenzarlos nos topamos con unaenorme cantidad de problemas. En pnmer lugar, no sonobserva- bles directamente por terceros, sólo el propietario puede acceder a ellos. Son entera- mente privados, internos, escondidos. En segundo lugar, cuandopensamos, sentimos o percibimos no lo hacemos en vacío. Pensamos acerca de la situación del país o del medicamento apropiado para tratar un dolor; percibimos un color, un olor o sonidos; sentimos hambre, frío o dolor; experi- mentamos alegría o tristeza en relación con alguna situación. En todos los ejemplos, hay un contenido, hay algo que se está representando. Esta capac~d:d de representar estados internos e interacciones con el mundo externo, los filósofos la llaman intencionalidad. Todos aquellos fenómenos quereúnan lasanteriores características sedenominan fenó- menos mentales, psicológicos o psíquicos, comose prefiera. Y la mente o el psiquismo es la colección de esosfenómenos y sus complejas interacciones. Caractenzar de esta maneralo mental abremuchos interrogantes. Si el cerebro de un animal comoel chim- pancétiene la capacidad de elaborar representaciones desus est~dos internos y de los objetos externos ¿porqué nohablamos de la mente del chimpancé? ¿La mente humana 7Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo poseerasgos adicionales que lahacenparticular y distinta a la mente deotrosanimales? Un intento de respuesta a la segunda pregunta es la conciencia. Peroantesde seguir adelante, es conveniente mencionar algunos aspectos sobre la his- toriadel término mental en el estudio delcomportamiento humano durante el sigloXX. A finales del siglo XIX y comienzos del XX, Sigmund Freud expuso la teoría psicoanalítica. Entresus fundamentos estaban el inconsciente dinámico, la sexualidad infantil y el determinismo psíquico. Lospensamientos, sentimientos y emociones, esta- baníntimamente relacionados con y determinados por el contenido y los procesos del inconsciente, instancia que no puedeser conocida mediante la introspección. Se daba primacía a lo intrapsíquico, a lo no observable directamente. Unos añosmástarde, unaperspectiva completamente diferente vinoconelconductismo. Suinterés secentraba en la conducta observable y mensurable. En su versión másradi- cal, negaba de plano que los fenómenos mentales fueran procesos internos. No era posible identificarlos independientemente del comportamiento y por tanto no se podía tratarlos comocausas de la conducta. Mente, parael conductismo dominante al menos enla psicología norteamericana debuenapartede la primeramitad delsigloXX,eraun término oscuro cuyousodebía suprimirse, pues no se refería a nada. A finales de los cincuenta y comienzos de los sesenta vino la denominada revolución cognoscitiva. Pronto se comenzó a hablarde filtrado selectivo de la experiencia, cons- trucción de representaciones del mundo en la memoria, estrategias para coordinar la información. En 1956, en el libroA studyof thinking, Jerorne Brunery otrosfueron los primeros en proponer que la solución racional de problemas era algoque se podíaex- plicar psicológicamente y no únicamente a través de la evaluación lógica. En 1957, Noam Chomsky, en sulibroSyntactic Structures, postuló quealgunos principios funda- mentales del lenguaje están insertados en la mente y no son producto del aprendizaje. Todo elloprovocó unagrandeserción delconductismo al cognoscitivismo. Nuevamen- te se dio importancia a los fenómenos que ocurren interiormente. Esta vez el enfoque recayó en los procesos intracerebrales o intrapsíquicos y el término mental recobró importancia. Aún así, fenómenos comola conciencia nofueron admitidos dentro de la psicología experimental sinohasta la décadade los ochenta. 2. LA CONCIENCIA El término conciencia es unode los másutilizados en psicología, psiquiatría, filosofía de la mente y otras disciplinas. Así mismo, las acepciones en que se emplea son mu- chas. SegúnAaron Sloman, "el sustantivo conciencia, talcomolo usala mayoría de los académicos (filósofos, psicólogos, biólogos...) no se refiere a nada en particular". 8 Introducci6n Nicholas Humphrey, en su libro Una historia de la mente, se propuso mostrar que la conciencia no sólo se refiere a "algoen particular" sinoque ya ha sidodefinida como "algoen particular" por los hablantes comunes del idiomainglés (en sucaso). Recorra- mosel camino propuesto por Humphrey. Las palabras adoptan diferentes significados a través del tiempo, algunos sobreviven y otros desaparecen. La palabra "consciente" deriva del latín con, que significa "junto con", y de scire: saber. Significaba inicialmente compartir conocimiento con otros. Se trataba de un conocimiento público, abierto, amplio. Después, pasó a significar com- partir conocimiento únicamente con algunos, pero no con todos; compartirlo con un pequeño grupo. El círculo se fue cerrando y, en lugarde unaspocaspersonas, el cono- cimiento se volvió personal. Solamente el sujetoconocía, era el únicoque sabía y no compartía esto con los demás. Cuando la palabra"consciente" llegóal Inglés, por alláen la EdadMedia, sufriómodi- ficaciones en su significado. Teníaentonces dos acepciones. De un lado, se usabapara designar el conocimiento privado al que unono quisiera quealguien más tuviera acce- so. Aquí estaban los secretos, las acciones culposas, los actos vergonzosos; conoci- mientos privados contingentes, pues, al menos, era posible queotrosaccedieran a ellos y los revelaran. La segunda acepción teníaque verconel conocimiento privado al que nadiemáspodíaacceder pormásque lo intentara; necesariamente privado gracias a su propianaturaleza. Seenmarcaban aquílosconocimientos sobrelospropios pensamien- tos, emociones, recuerdos, etc., es decir, los conocimientos acerca de los fenómenos psicológicos de uno mismo. El conocimiento culposo se convirtió en algo sobre la "conciencia", mientras el autoconocimiento siguiósiendo algode lo que la personaera "consciente". Hoyen día,la primera acepción se usaescasamente en Inglés, si bienen Español aúnla encontramos confrecuencia. Laspersonas suelen decir"tengouncargo de conciencia" o "me pesaen la conciencia", refiriéndose a la conciencia culposa. Y también se escu- chaoraciones como"soyconsciente de la responsabilidad queasumo" en las quecons- ciente es conocimiento compartido. Se expresaría lo mismo si se dice "al igual que ustedes, sé las implicaciones de lo que hago". La segunda acepción ha llegado a serel significado máscomún deconciencia, utilizado incluso por disciplinas académicas. Se refiere a tenerconocimiento de los fenómenos psicológicos propios y privados (pensamientos, emociones, recuerdos, percepciones). Una metáfora bastante utilizada paraexplicarlo es la del "teatrocartesiano" o de "una- película-en-el-cerebro" comodice Damasio. Asistimos, en la mente, a la presentación de un espectáculo teatral, cinematográfico, multimedia que incluye imágenes visuales, sonido y bandas especiales paraolores, sabores, etc. Quienposee dichoconocimiento, 9Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo el espectador del espectáculo, noes un tercero, noes un pequeño hombrecillo interno (homúnculo) como unavezsepropuso, es uno mismo. Hay unyoqueconoce susfenó- menos mentales y se dacuenta dequeestáconociéndolos. Deaquísurge unsentido del yoo de identidad. Serconsciente o estarconciente es entonces 1- tener conocimiento de la presencia de fenómenos psicológicos propios y 2-darse cuenta de laexistencia deunomismo como propietario de ellos (sentido del yo). Si asumimos esta acepción sobre la conciencia, podemos decirqueestamos conscientes cuando estamos despiertos, estoes,cuando nos encontramos enestado dealerta o vigilia. Enesosmomentos tenemos sensopercepciones (vemos el cieloazul, escuchamos unacanción), pensamientos (repasamos lascapitales de lospaíses de Europa, trazamos planes paraunviaje), emociones (sentimos tristeza, alegría),recuerdos (evocamos sucesos delpasado), imaginaciones (planeamos detalles del futuro, fantaseamos con unaexcursión a tierras distantes), etc.Además, nos sabe- mos dueños deesosfenómenos, loqueequivale a decir, nospercatamos de queexisti- mos. Aldorruir, nonosdamos cuenta delapresencia defenómenos psicológicos propios, por tanto no estamos conscientes. Pero dorruir noes unestado homogéneo, incluye perío- dosde actividad onírica (los sueños). Enlossueños hayimágenes visuales, y enmenor medida auditivas, que se entrelazan y forruan una historia que vivenciamos como si fuera real. Además de imágenes perceptivas se experimenta emociones, pensamientos yhastasetrazaplanes. Bastamencionar loquesucede durante unapesadilla. Sentimos ansiedad intensa, pensamos y planeamos la mejor forrua deescapar delpeligro y, si no lo logramos, pedimos auxilio mediante gritos y alaridos. Vivenciamos contal nitidez la pesadilla que si pudiéramos movernos saltaríamos de la cama y correríamos. No lo hacemos debido a la activación de un mecanismo fisiológico inhibidor de los movi- mientos voluntarios. Como se ve, la actividad onírica es un estado muy parecido al de vigilia en cuanto a la presencia de fenómenos psicológicos propios. Más sorprendente todavía es el hecho de queen muchas ocasiones, durante el sueño, sabemos queesta- mos soñando. A primera vista, si serconsciente es experimentar la presencia de fenó- menos mentales propios y ser capaz de identificar al yo como propietario de los mis- mos, durante la actividad onírica se estaría consciente. Sin embargo, patrones diferen- tesen la actividad eléctrica cerebral y enotras variables fisiológicas hacen del soñar un estado concaracterísticas propias, diferente de loquees estarconsciente. Desde luego la discusión noestácerrada. 2.1. Fenomenos inconcientes En los dos últimos siglos, el uso de la palabra conciencia sufrió una transformación más. Se pasódel modo transitivo ("serconsciente de....", "ser consciente de tal y tal 10 Introducción cosa") al modo intransitivo ("ser o estar consciente", "el o ella son o están conscien- tes"). Deestamanera, conciencia comenzó aconnotar unestado especial deexistencia, 10 quepermitió describir otroestado: la inconsciencia. La existencia defenómenos mentales inconscientes, estoes,quenoacaecen enel "tea- tro cartesiano" o en "la-película-en-el-cerebro" Yde los queel yo nada sabe, ha sido motivo de debate. El psicoanálisis, además de admitirlos, les otorga un papel funda- mental enel funcionamiento psíquico. Losconcibe como representaciones mentales de deseos nosujetas a losprincipios lógicos convencionales ni a losforrualismos de tiem- po y espacio. No se expresan directamente, lo hacen a través de derivados como los sueños, losactos fallidos y lossíntomas neuróticos. Uno de los descubrimientos en ciencias cognoscitivas es el procesamiento incons- cientede ciertos tipos de información. Por ejemplo, los sucesos traumáticos de las primeras etapas de la vidano se guardan en la memoria declarativa y no son accesi- blesa la conciencia. Sinembargo, se almacenan como recuerdos inconscientes enun subsistema dememoria diferente (algunos la llaman memoria emocional) ydesde allí influyen en las funciones mentales y el comportamiento de épocas posteriores de la vida. 3. RELAC/ON ENTRE MENTE Y CUERPO Pormás de tres siglos, dos de laspreguntas más interesantes de laciencia y la filosofía hansidoacerca de la mente: ¿quéclase de cosas son lasmentes y cómo se relacionan con los cuerpos? Al menos desde el siglo XVII en adelante, las respuestas han sido numerosas, variadas e interesantes. ParaDescartes, existían unasubstancia física cuya propiedad básica era la extensión y una substancia mental cuya propiedad básica era pensar (tener fenómenos mentales). Lasdos substancias correspondian a entidades to- talmente separadas (dualismo), por loquesu interacción se volvió problemática. Plan- teóqueen unlugar delcerebro (la glándula pineal) la mente podía modificar losmovi- mientos de los humores animales y de esta manera influir en la actividad del cuerpo. Desde entonces, las hipótesis se han sucedido unatrasotra. En opinión de algunos, la relación entre la mente y el cuerpo puede carecer, porprincipio, de respuesta. Arguyen entre otrasrazones quesielobservador y loobservado coinciden, como enel estudio de la mente, no seráposible entender el problema. Más alláde la interesante discusión al respecto, es importante resaltar la tendencia al abandono de los dualismos que se ha venido imponiendo desde hace unos años en disciplinas como psiquiatría, psicología, neurociencias, lingüística, etc.Seprefiere los morúsmos, estoes,considerar a losestados mentales como idénticos a losestados físi- IJDescargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo cos del cerebroo, cuando menos, íntimamente correlacionados. Los datosempíricosen favor de estas hipótesis son cada vez mayores y más fuertes, y han mostradoademás que los fenómenos mentalesno se correlacionan únicamente con el cerebrosino con la totalidad del cuerpo. El cerebroenvía señalesal cuerpo continuamente. Dispone para ello de 1- nerviosque transmiten señales al sistema musculoesquelético, encargado de los movimientos vo- luntarios;2- nerviosque transmiten señalesa las vísceras(sistemanerviosoautónomo) y 3- sustancias químicas como hormonas, transmisores y moduladores liberadas en el torrente sanguíneo. El cerebrono sóloenvía señales y órdenes, tambiénes su receptor. Mediante los nervios recibe información de todas y cada una de las partes del cuerpo, llámensemúsculos, huesos, articulaciones, vísceras. Por el torrentesanguíneole llegan sustancias procedentes de muchos lugares que van a interactuar con las estructuras cerebralesy modificarsu funcionamiento. El cerebroentonces no sólo está encargado de nuestra relacióncon el mundo, también cumpleun papel fundamental en la regula- ción biológicadel organismo como totalidad. Todo cambio en el cuerpo se traduceen cambios en el cerebro y viceversa. Después de todo, parece que la separaciónentre el cerebro y el resto del cuerpo es más artificial de lo que pensábamos. El cerebrorealizamuchastareasde las cualesno tenemosinformación conscientealgu- na. La disminución de los niveles de azúcar en la sangre desencadena un conjunto de respuestas fisiológicas encaminadas a restituirlos a suvalornormal; el aumento decortisol inhibe la producción de ACTHen la hipófisis; unadisminución en la presiónarterialse compensaen parte con un aumentode la frecuenciacardiaca.Aunqueel correcto fun- cionamiento de estos mecanismos reguladores es sumamenteimportantepara la vida, ninguna de sus acciones se presentadirectamenteal psiquismoen forma de imágenes perceptivas. Por más que lo intentemos, no nos damos cuenta, concientemente, del aumento del cortisol. La hipoglicemia nos produce hambre, pero ninguna imagen perceptivaacercade ella ni de la grancantidadde correctivosque el organismo poneen juego. En conclusión, de un gran número de acciones que suceden en el cerebro no tenemos información consciente, lo que equivalea decir información en forma de imá- genes mentales. Sin embargo,el panoramano se reduceal procesamiento y ejecuciónde una respuesta de las que nada sabemos. Una gran cantidadde la información proveniente del cuerpo, del mundo externo a nosotros, del propio cerebroy el procesamiento de todas ellas se va a presentarcomofenómenos mentales conscientes. Aunqueno todo lo que sucedeen el cerebroaparececomo mental, todo lo mental está sucediendo al mismo tiempoen el cerebro, o para ser más precisosen esa comunión cerebro-cuerpo. Visto así, hay razo- nes para referirse indistintamente a mente o cerebro cuando se alude a los fenómenos mentales; lo que se hace en los capítulos siguientes. 12 Introducción 4. LO NORMAL Y LO ANORMAL Sise habla de síntomas,de trastornos, de enfermedades, surge necesariamente la pre- gunta sobre qué es normal y qué no lo es. En la vida diaria se emplea con in~sitada frecuenciaestascategoríasparareferirseal comportamiento de las personas,casi siem- pre más con emociónque con razones.Existen variasconcepciones teóricas acerca de lonormal y anormal.Cinco de ellas son bastante conocidas y ameritan una breve pre- sentación 4.1. La normalidad como salud Es la perspectivamásestrechamente relacionadacon la medicina. Lo normales la salud y lo anormal la enfermedad. En una época se entendía la salud como la ausencia de síntomas. Sin embargo, con el tiempo, el concepto de salud se ha extendido enorme- mente. Desde el funcionamiento armónico del organismohasta el bienestarque se ex- perimentacon las propiascreencias religiosases hoy en día salud, lo que vuelvedifícil su uso como criteriode normalidad. El criterio es bastante útil en ciertos casos. Si alguien tiene alucinaciones auditivasde voces que le hablan,ese es un síntomaque no puede soslayarse, pues indica la presen- cia de algunaenfermedad seriaque ameritainvestigarse. De otra parte,no son pocaslas limitaciones y cuestionamientos a este criterio. ¿Cuál es la lista de los síntomas y las enfermedades existentesque debe utilizarse como marcode referenciapara establecer lo anormal? Los procesosescondidos, es decir, los que no se manifiestan como sínto- mas, pero que actúande manerasilenciosaduranteperiodosde tiempo a vecesprolon- gados, ¿pueden ser considerados parte de lo normal o de lo anormal? Un ejemplo de esto último es el conjuntode alteraciones en la migración y arquitecturacelularencon- trada en la esquizofrenia. Se originan durante la vida intrauterinapero no se manifies- tan sintomáticamente sino hasta la adolescencia o comienzos de la vida adulta. 4.2. La normalidad como ideal Platón concebía la existenciade un mundo allendeel nuestro.Ese mundoestaba habi- tado por las ideas,esto es, los ejemplaresperfectosde todo lo existente. Los objetosdel mundo sensible que percibennuestros sentidosno son más que copias imperfectas de esas ideas.Así, los perros o los gatos son representantes burdos,copias mal hechasdel perro y el gato del mundo de las ideas. Lo normal y anormal en el psiquismotambién han sido conceptualizados siguiendoel modeloplatónico. De acuerdocon este planteamiento, lo normal es concebidocomo la mezclaarmoniosa y perfectade los distintos elementosdel psiquismodandocomo resultadoun funciona- 13Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo miento óptimo. Seplantea unideal de persona quenoexiste más allá dela teoría, pues encontrar alguien cuyo psiquismo pueda serdescrito porel enunciado de la definición es imposible. 4.3. Normalidad estadística Es unaexplicación basada en la estadística. El modelo principal es la distribución de una población en unacurva en forma de campana. Hacia la parte media se agrupa la mayoría y a medida quese avanza hacia los extremos se encuentra un número decre- ciente de individuos. Lo normal queda comprendido en unazona alrededor de la parte media dela curva (dos desviaciones estándar porlogeneral); es todo fenómeno psíqui- co propio de la mayoría de los individuos. Lo anormal, en los extremos, es aquello característico deun grupo minoritario de personas. Los estudios estadísticos han logrado gran aceptación en el mundo científico actual. Conocer lascaracterísticas de grandes poblaciones de individuos ha ayudado enorme- mente a establecer parámetros por fuera de los cuales hay mayor riesgo de presentar molestias o complicaciones de salud. Es el caso de la presión arterial. Porencima de ciertas cifras aumenta la probabilidad de sufrir problemas cardiacos, renales y de acci- dentes cerebrovasculares. Aunque es más difícil utilizar herramientas estadísticas enel estudio delosfenómenos psicológicos, nose puede subestimar el conocimiento adqui- rido a través de ellas. El criterio tiene también limitaciones. Quedan patentes al estudiar el cociente intelec- tual. La mayoría delaspersonas tienen uncociente alrededor de 100. Pordebajo de70 se ubica unaminoría conretardo mental. Porencima de 130 hay otraminoría coninte- ligencia superior. Al aplicar el criterio de manera rígida, quienes seencuentran en los extremos, tanto los sujetos conretardo mental como aquellos que ostentan unainteli- gencia superior, sonigual de anormales. 4.4. Lo aceptado socialmente Este criterio sehalla ligado estrechamente alanterior. Encadagrupo humano hay creen- cias, expresiones deafecto y comportamientos aceptados yotros que noloson. Loacep- tado socialmente además es visto como bueno, útily deseable. Llega a convertirse en lo normal. Obviamente, amedida que semodifican lassociedades ysetransforma lacultura, lo considerado normal también cambia. En favor de estaconceptualización, es preciso recordar que vivimos engrupos cuya influencia sobre nosotros esenorme ydeterminante; porloque nosepuede entender elpsiquismo dealguien sinesta referencia. El usoinflexible de estecriterio conlleva el riesgo de considerar anormal a cualquiera 14 Introducción qlle se diferencie o elija un estilo de vidacon creencias y conductas particulares y a lIIuél que nocomparta la manera de verel mundo predominante en su grupo. 1.5. Criteríos psícoanalitícos Algunos representantes dela escuela psicológica conocida como psicoanálisis han pro- puesto conceptos variados acerca dela normalidad. Para Melanie Klein, estárelaciona- daconlafortaleza delcarácter y lascapacidades paraafrontar losconflictos emociona- les, disfrutar sinconflictualizarse y amar. Otto Rank dice que la normalidad es la capa- cidad de vivir sinculpani ansiedad y saber responsabilizarse de losactos propios. 4.6. Todos loscriterios presentados sonherramientas útiles paraentender el psiquismo humano. Dependiendo del fenómeno en estudio y del contexto del momento, uno de ellospuede serdemás ayuda quelosotros. Desde luego, ninguno estáexento delimita- ciones; mucho más si se utilizan de manera inflexible. Peromás alládelasfortalezas o debilidades de cadauno, es importante tener presente que losfenómenos psíquicos, al menos en cuanto a suintensidad, se presentan dentro de unespectro donde nohayuna frontera claramente definida entre lo que es normal y aquello que nolo es. Adscribir demasiado rápido losadjetivos de normal o anormal al psiquismo dealguien no acrecienta mucho el conocimiento acerca de esa persona. Conviene más acercarse conunamirada diferente. Se trata de verel psiquismo en acción, en permanente trans- formación, empeñado encumplir supropósito deayudar de la mejor manera a la adap- tación alentorno. Noes posible entenderlo sinel concepto delodinámico, yaque noes unaestructura estática inmodificable. Eselproducto deunaentramada historia biológi- ca, psicológica y social, conposibilidades de modificaciones y con limitaciones en el alcance delas mismas. 5. LIMITACIONES DE LA SEMIOLOGíA PSIQUIÁTRICA TRADICIONAL Ludwig Wittgenstein, filósofo de la primera mitad del siglo XX, en su libro póstumo publicado en 1953, Investigaciones filosóficas, afirmó que paraentender el lenguaje deberíamos estudiar cómo lousamos. Enlasteorías delaprimera mitad delsiglo XXse enfatizaba en que los términos lingüísticos se utilizaban para referirse a objetos. La palabra manzana se refería siempre a la fruta conocida con este nombre, lo que se conoce como usoreferencial. Wittgenstein pensaba queel lenguaje ordinario nolousa- mos de manera puramente referencial. Utilizar la expresión "la manzana es verde" en unacanción esdiferente deutilizarla enunchiste, en ladescripción deunobjeto o enla adivinanza de un acertijo. Aesas actividades lingüísticas particulares les llamó juegos 15Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo del lenguaje. Cantar, describir, contar un chistesonjuegos del lenguaje. Decíaque no prestar atención cuidadosa a la naturaleza de los juegosy a sus reglasera la fuente de muchos errores filosóficos y el origen de pseudoproblemas. Afirmaba que los proble- mas filosóficos surgen "cuando el lenguaje se va de vacaciones". En la semiología psiquiátricanoes difícilencontrar pseudoproblemas de este origen. 5.1. Terminologia confusa Lasdefiniciones ayudan a caracterizar las cosasy posibilitan unprimeracercamiento a ellas. A medidaque se profundiza en su estudio, ocupan un lugarsecundario, pues la complejidad que se encuentra ya no puede ser resumida en unas pocas palabras. Los apartes de lostextos de psiquiatría dedicados a la semiología sonricosen definiciones; desafortunadamente una buenacantidad de ellas oscuras y hastacirculares. En un co- nocido libro aparece insight verdadero definido como "comprensión de la realidad objetiva de unconjunto de circunstancias acoplada conlamotivación y el ímpetu emo- cionalparamanejar la situación ". Es difícilentender cuál y cómoes el acoplamiento propuesto y a qué situación se alude. Es una definición confusa y poco útil. En otro aparte, pensamiento mágico es definido como "una forma de pensamiento dereísta; pensamiento queessimilar alde lafasepreoperacional delniño(lean Piaget), en la que el pensamiento, las palabras y las acciones asumen el poder (p.ej., pueden causaro prevenir sucesos)". Enestecasose define unaclasede pensamiento acudien- do a unejemplo enel queseutilizanuevamente el término pensamiento. Se tratadeuna definición circular en la que la palabra definida se empleacomopartede la definición. 5.2. Categorización sin criterios claros Al hacer clasificaciones es necesario al menos seleccionar una característica clara y precisa quesirvacomoreferencia paradeterminar lasclaseso tipos quese va a estable- cer. Si para clasificar las frutas se escoge el color, se agruparán en verdes, amarillas, rojas,etc; peroseríainapropiado agruparlas en verdes, dulces, rojas,ácidasy redondas, puesse mezclarían criterios de color, sabory forma. En semiología psiquiátrica no es extraño hallar este tipo de clasificaciones. Se suele mencionar como alteraciones del origendel pensamiento al pensamiento lógico, ilógi- co, autista, dereísta y mágico. Ni siquierase precisa qué se entiende por origen, pero alrededor de un término escasamente discutido, se mezclan aspectos referentes a la estructura y el contenido del pensamiento. En otro libro figuran entre las alteraciones generales en el cursoo proceso del pensamiento las siguientes; 1-trastorno mental; 2- psicosis; 3- evaluación de la realidad; 4- trastorno formal del pensamiento; 5- pensa- miento ilógico, 6- dereísmo.... Es obvioque si las alteraciones del pensamiento sonun 16 lturoducclán síntoma de algunos trastornos mentales y de las psicosis, no se puede incluir a estos últimos comouna de las clasesen que se dividen las alteraciones del pensamiento. Es comosi al enumerar lospaíses deEuropa incluyéramos Africa, Asiay la mismaEuropa junto con Francia y Alemania. 5.3. Abundacia de terminos Guillermo de Occam, un sacerdote y filósofo del sigloXIVaportó al conocimiento una valiosaherramienta conocida comola navaja de Occam. De acuerdo con su recomen- dación, las teorías y lasexplicaciones no se deben poblarconentidades más alláde las estrictamente necesarias. No seríaaconsejable, por ejemplo, dividir la tristeza en quin- ce o veinte clases porqueno agregaría nadaproductivo al conocimiento de ese estado emocional. En esta línea, en la semiología psiquiátrica hay varios casos. Hablar de alteraciones en el origen delpensamiento es unade ellas,puesse postula unacategoría sin másfundamento que el de la tradición acrítica. De otraparte, hay términos interesantes que no aportan mucho a la semiología ni pres- tanmayores favores en la comunicación, sólosirven a losinteresados en nombres com- plejos o raros. Sucede con la palabra noesis, utilizada para referirse a quien ha experi- mentado una revelación en la que ocurre una inmensa iluminación asociada con la sensación de que uno ha sido elegido para liderar y dirigir a otros. Términos como ailurofobia (miedo a los gatos) son másútiles para hacertareasen el colegio que para otra cosa. Desdeluegohay fobias másfrecuentes y por tantomás importantes comola acrofobia (miedo a las alturas), agorafobia (miedo a los espacios abiertos), eritrofobia (miedo a ruborizarse), claustrofobia (miedo a lugares cerrados) y xenofobia (miedo a losextranjeros), la últimapropiedad ya del lenguaje cotidiano. Unproblema no menor queencuentra quiendeseaestudiarsemiología es la existencia depalabras utilizadas parareferirse almismo fenómeno, peroquesonpresentadas como sidescribieran fenómenos diferentes. Descarrilamiento es sinónimo de asociación laxa de ideas, incoherencia de disgregación, concretismo de pobreza de pensamiento, etc., pero no siempre se reconoce. 6. ASPECTOS PARA TENER EN CUENTA EN LA SEMIOLOGIA PSIQUIÁ TRICA 6.1. Los fenomenos psicológicos se presentan en un espectro Si alguien evoca los momentos tristes de su vida encuentra que puede jerarquizarlos. Recuerda haberexperimentado gran tristeza tras la muertede un familiar, una tristeza 17 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo menos intensa cuando perdió dinero en un negocio y hasta tristezas ocasionales por disputas irrelevantes conpersonas amigas. Vuelven a sumemoria momentos y situacio- nesen que ni siquiera logró identificar con claridad si estaba tristeo quizá aburrido o iracundo. La tristeza es unbuenejemplo, pero igual sucede concualquier otrofenóme- no mental. Su intensidad varíadentro de un espectro, no son unacosa de todoo nada. Noes posible asignar un nombre preciso a cadacomponente deun espectro, se conver- tiríaen unatareainfinita. En lugarde ello, seacostumbra tomarlosextremos y algunos puntos intermedios paranominarlos. Por ejemplo, al estudiarla asociación de las ideas en el pensamiento, al extremo de la desorganización se le denomina incoherencia. Ala parteintermedia, a la presencia de ciertadesorganización: asociación laxade ideas. Es más, como no hay nombres paraespecificar una mayoro menorintensidad en la laxi- tud, se termina empleando los términos leve, moderada y severaparaeste propósito. La faltade precisión no se soluciona creando palabras paranombrar cadadiferencia en la intensidad. Aunque parafines de investigación es conveniente utilizar herramientas- comolas escalas- que intentan acercarse a cuantificar los fenómenos mentales, parael clínicoserásuficiente conocerconclaridad losconceptos y tenerpresente que losfenó- menos mentales se presentan en un espectro. No se tratade simplificar excesivamente la semiología sinode hacerla práctica. 6.2. Experiencias globales versus funciones psíquicas aisladas Si tomamos el modelo de mente y decerebro delasciencias cognoscitivas nostopamos con un conjunto de módulos o sistemas multicomponentes encargados cada uno de funciones específicas, si bien en constante y compleja interacción. Si nos referimos a los fenómenos mentales diferenciamos el afecto, la sensopercepción, el pensamiento, la inteligencia, etc.; establecemos sus variaciones cualitativas y cuantitativas y hasta identificamos su patología. Sin embargo, en el psiquismo individual las experiencias conscientes no se vivencian de forma parcelada. Si al recordar un accidente de tránsito ocurrido hacepoconos sentimos ansiosos e imaginamos las posibilidades quetuvimos de evitarlo, el psiquismo no nos brinda un informe pormenorizado en el que consigna que la memoria, el pensamiento y el afecto tienen un determinado funcionamiento en ese momento. No nosdice cuáles de susdispositivos estánactivos o inactivos, simple- mente nospresenta una experiencia que sentimos integrada psíquica y somáticamente, unaexperiencia globalque sólomediante un esfuerzo intelectual podemos analizar en sus componentes. Aparentemente existeunacontradicción entre la manerade funcionar de la mentey la forma en que experimentamos subjetivamente dichofuncionamiento. Pero no es así. El resultado del trabajo mancomunado de los módulos se traduce en experiencias 18 Introducción globales integradas y con sentido. Dicho de otra manera, una de las tareas más gran- des y elaboradas del psiquismo es dotar a nuestra experienciaconscientedel mundo de su significado y coherenciatípicos. Yasea que vivamos en un entorno repleto de espíritus y fuerzas metafísicas en conflicto; nos cause risa el afán de la gente por enriquecerse; no encontremos razonessuficientes quejustifiquenla existenciaperso- nal o de la especie;o consideremos que la vida está repleta tan sólo de sufrimientos; todas esas maneras de ver el mundo (cosmovisiones) están llenas de coherencia y significado para su dueño. Es indispensable tenerpresente lo anterior cuando intentamos comprender lasmanifes- taciones de algunos pacientes. Si unode ellosdiceque sienteun demonio dentro de su cuerpo, nose tratasólodeunaideaaisladay extrañacuyoorigen noentendemos; es una experiencia global, tan real para él, como una de la vida cotidiana para nosotros. El paciente no inventaunahistoria, hace lo mismo que cualquiera en esas circunstancias: intentaentender su experiencia y encontrarle un sentido. Finalmente lo hallay conclu- ye, para el ejemplo en cuestión, que todoobedece a la presencia de un demonio en su interior. Como seexplicaba previamente, eselyoquien asiste como espectador al teatro cartesiano (o la-película-en-el-cerebro) y observa el espectáculo delosfenómenos mentales priva- dos. Esel únicoque losvive. Si en el teatro o la película de alguien se presentan espec- táculos e historias extrañas o poco entendibles, no por ello podemos desconocerlas o negarsuexistencia. Es preferible intentarentenderlas, conocer quésucedetrasbastido- res y hastaacercarse a ese espectador paracomprender sus reacciones. Estaes quizála mejormanera paraponernos en el lugardel otro y entender un pocosu psiquismo. 6.3. Palabras para describir sentimientos Si alguien repasamentalmente las capitales de Europa, fielmente puedereproducir con palabras lo que ocurreen su interior. Podría suceder así: "capital de Francia: Paris, capital deInglaterra: Londres, capital de Bélgica: Amsterdam...No, no esAmsterdam. Haber si recuerdo. Comienza conB de Bélgica... Bueno, sigamos. Capital de España: Madrid. Lisboa es capital de un país que queda encerrado por España perotampoco tengo presente el nombre. Capital de Italia: Roma..." Con aciertos, dudasy omisiones continuaría latarea.Enel ejemplo, el repaso propuesto es unaactividad delpensamien- to y la memoria, y noes muydifícilreproducir verbalmente lo queenese momento está sucediendo en la mente. Perosi a alguien queestá triste le pedimos que tratede relatar- nos lo que está experimentando mentalmente, el resultado será distinto. Puede decir "me sientotriste, abatido, al bordedel abismo. Nadame gustay sóloquiero estarence- rrado". Aunque con palabras intentadescribir su experiencia, siempre queda una dis- tanciaentreellas y el fenómeno psíquico sentido comotristeza. 19Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo Quienes mejor han logrado expresar verbalmente las experiencias subjetivas de los humanos hansidolosescritores. Sedicequeunodelosmejores reflejos delalma de los hombres se encuentra en las obras de Shakespeare. Balzac, en su Comedia humana, repasa hastalo másprofundo lasgrandezas y miserias de la especie. Definitivamente, es difícil poner en palabras muchas de las experiencias subjetivas. Aveces, se vuelve unaempresa tan difícil como hablar de los colores que poseen los sonidos. Es conve- niente tenerpresente estacircunstancia cuando seestudia semiología psiquiátrica, pero sinqueseconvierta en un obstáculo. Aunque carecemos delgenio de Balzac, con inte- rés, dedicación y creatividad podemos captar esasexperiencias y describirlas. 7. EXPLOSIÓN DE CONOCIMIENTO Se ha aprendido más acerca del cerebro y la mente en la década de los noventa, la denominada década del cerebro, quedurante todala historia previa de la psiquiatría, la psicología y la neurología. El aumento notorio, exponencial, de nuevos conocimientos desafía algunos de losmásperdurables y afianzados esquemas explicativos atinentes a losfenómenos mentales. El localizacionismo fuerte de otros tiempos ha dado paso a nuevos modelos que no pretenden simplificar losfenómenos sinoestudiarlos en sucomplejidad. En la corteza sensorial y motriz de primates no humanos se ha vistoque si bien las funciones están localizadas, la localización exacta varía de un individuo a otro. Aún más, las áreas encargadas de partes específicas del cuerpo están en un continuo proceso de reorgani- zación dinámica en respuesta a laestimulación y el aprendizaje. También se está comenzando a entender que las interacciones entre regiones distan- tes del cerebro pueden dar origen a estados biológicos (psicológicos) complejos que son mucho másque la sumade las partes. Se haencontrado queel cerebro(lamente) poseeniveles estructurales múltiples donde los más elevados tienenentre sus tareas la observación de los inferiores y el procesamiento de su información. Parecen existir reglas intrínsecas parajerarquizar y manejar la información dando lugara lospensa- mientos. El trabajo en ciencias cognoscitivas ha mostrado que la mente y el cerebro no son estructuras monolíticas. Al contrario, están constituidos porunidades discretas, módu- los o sistemas multicomponentes encargados cada uno de funciones específicas. Los módulos no trabajan aislados, están en constante y compleja interacción. En cualquier fenómeno mental hay muchos de ellos trabajando de forma mancomunada. El cerebro (la mente) no es un dispositivo general de resolución de problemas constituido por partes indiferenciadas queejecutan cualquier función, sinounconjunto dedispositivos Introducción confunciones específicas cuyos productos nosproveen finalmente la sensación de inte- gridad personal que vivimos día a día. Toda esta explosión de conocimientos ha transformado, y continuará haciéndolo, el panorama delestudio delpsiquismo. Lasemiología psiquiátrica noes laexcepción. Por ejemplo, los hallazgos empíricos acerca de los procesos de memoria han mostrado su gran complejidad, haciendo imposible enadelante seguirdividiendo lasamnesias única y exclusivamente en retrógradas y amerógradas. Nosepuede continuar utilizando con- ceptos y categorías que los conocimientos actuales han mostrado de lejos su escaso poder descriptivo y explicativo. Es necesario abrirse y renunciar a la costumbre de ignorar las nuevas evidencias, puesaferrarse de forma acrítica a lo tradicional no con- tribuye alpropósito científico de conocer cadavezmás y mejor. Auncuando hay muchas personas dispuestas a creerque unaalteración en cualquiera de lasáreas de la esfera mental traecomo consecuencia unapersona extraña, marginal y alienada, noOCurre así.Como anota Caramazza (1997), quizá es másnuestra habitual inclinación y los prejuicios quienes nos hacen desvalorizar la totalidad de la esfera mental de un paciente, cuando tan sólohay algunos aspectos comprometidos. Lasen- fermedades psiquiátricas brindan unaoportunidad valiosa paraver el funcionamiento de los distintos componentes de un sistema que no se aprecian diferenciados cuando funcionan normalmente, momento en que son invisibles. La enfermedad revela la es- tructura interna del sistema 21 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Evaluación Existen muchos esquemas pararealizar evaluaciones en psiquiatría. Dependiendo del marco teórico de base(llámese psicoanálisis, conductismo, cognoscitivismo, teoría de sistemas) se enfatiza enel conocimiento deciertos aspectos de la viday se utiliza dife- rentes técnicas. Enestelibro, loreferente a laevaluación estábasado principalmente en la guíay recomendaciones que laAsociación Psiquiátrica Americana (APA) ha elabo- radopara tal fin. Sepractica evaluaciones psiquiátricas condiversos propósitos. Lossistemas legales se valen de ellasparaestablecer la responsabilidad penal de un acusado, la idoneidad de alguien paraadoptar unniñoo lacapacidad paraadministrar bienes. En medicina labo- ral,paradeterminar el grado y tipodecompromiso psíquico ocasionado porunaenfer- medad. En la práctica clínica paraestablecerundiagnóstico y definir el tratamiento. El proceso de evaluación posee rasgos particulares en cada caso, pues lo importante e interesante varía de acuerdo con el propósito que se persigue. Además, el lugar de evaluación, el tipode paciente y el problema quese vaa abordar pueden hacer necesa- río modificar el esquema comúnmente utilizado. 1. TIPOS Y OBJETIVOS DE LA EVALUACiÓN 1.1. Evaluación general El mejor ejemplo de evaluación general es la que se realiza en consulta externa. La fuente principal de información es la proporcionada por la persona evaluada; no obs- tante, en algunas ocasiones será preciso contar además con los datos aportados por familiares o gentes allegadas, historias clínicas e informes de pruebas psicológicas. Unaevaluación general tomaunpocomás de unahoradependiendo de la complejidad del problema y del grado decooperación delevaluado. Tiene como objetivos: • Establecer undiagnóstico. • Recolectar información conel finde tener unavisión panorámica delcaso • Diseñar un plan inicial de tratamiento si la intervención inmediata es necesaria o determinar la continuidad de un tratamiento ya iniciado. 23 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 1.4. Otras evaluaciones Semiología del Psiquismo 1.2. Evaluación de urgencias Laspersonas acuden o sonllevadas a losservicios de urgencias debido a la presencia de fenómenos mentales incómodos o intolerables, comportamientos auto oheteroagresivos, amenazas de ocasionar daño a otroso a sí mismo, comportamiento desorganizado, an- siedady temorintensos. Los objetivos de la evaluación de urgencias son: • Evaluación Hacer sugerencias acerca del manejo del paciente. Se debe tener siempre pre- sente el respeto de la relación del paciente con la persona que pidió la interconsulta y si aquélla se encuentra en situaciones problemáticas, conviene ayudar a resolverlas. a • Establecer undiagnóstico del trastorno mental queocasiona lossíntomas e identifi- carmanifestaciones querequieran unaevaluación adicional porpartede otrosespe- cialistas. Identificar losfactores de tiposocial, familiar y económico queseanrelevantes para la tomade decisiones en el tratamiento inmediato Determinar la capacidad del paciente para colaborar en el tratamiento, las precau- cionesque se debe tomaren casode riesgo de autoo heteroagresión y la necesidad de unahospitalización involuntaria • Determinar el tipo y lugarde tratamiento convenientes. El tiempo necesario para una evaluación en urgencias es bastante variable. Puede requerirse hastahoras para culminarla. Los pacientes que acuden al servicio de urgen- cias, además de la enfermedad psiquiátrica, tienen una alta prevalencia de traumas re- cientes, problemas de abusoy dependencia de sustancias y limitaciones cognoscitivas. Estas condiciones también deben ser evaluadas y manejadas. 1.3. Evaluación cuando se resonde interconsultas Lasinterconsultas sonevaluaciones solicitadas porotrosmédicos, profesionales de áreas de la saluddiferentes a la medicina, personas encargadas del cuidado de los pacientes, familiares y hastael mismo paciente. Pueden seramplias ensusalcances o limitadas a dar respuesta a preguntas específicas comola medicación más adecuada parael manejo de alguien quetiene unaenfermedad psiquiátrica conocida. Especial atención merece la in- formación proporcionada porlao laspersonas solicitantes de laevaluación. Si sepideuna interconsulta paraun paciente queestásiendo atendido por unaenfermedad distinta a la psiquiátrica, debedarse importancia a la enfermedad en cuestión, el tratamiento y elpro- nóstico. Al paciente se le informa queel objetivo dela evaluación es asesorar a los solici- tantes en laspreguntas quetienen. Lospropósitos deeste tipode evaluación son: • Establecer undiagnóstico psiquiátrico si es relevante en la pregunta formulada. Formular recomendaciones de tratamiento. 24 Hay evaluaciones cuyafinalidad es resolver asuntos legales, administrativos o labora- les.La mayoría de lasrecomendaciones generales acerca delproceso deevaluación son también útiles en estas situaciones. No obstante, es necesario tener en cuentaque no siempre los evaluados padecen problemas mentales. Además, los límites de la confidencialidad son distintos, pues otras personas posiblemente conocerán y utiliza- rán los resultados de la evaluación. En estos asuntos es conveniente basarse en los documentos existentes; de esta manera se evitarádificultades posteriores. Los objeti- vos de este tipo de evaluación son: • Responder las preguntas formuladas por quien solicita la evaluación lo másclara- mente posible y conel mayorsustento encontrado • Formular un diagnóstico psiquiátrico si el relevante para lo solicitado. 2. ACTITUD DEL ENTREVISTADOR El entrevistador no puede asumir una actitud despreocupaday distante. Debe mos- trar un genuino respeto e interés por lo que el entrevistado comunica. Al fin y al cabo, si éste se siente confiado, podrá hablar más sinceramente y expresar pensa- mientos y afectos que de otra manera se reservaría. Quizá lo más difícil de la eva- luaciónsea comprender la diversidadde experienciaspsicológicasque las personas viven o han vivido y traen a la consulta. Por ejemplo, un hombre de 50 años se entristeció intensamentepoco después de vender un negocioque ya no era rentable, por lo que ninguno de sus familiares o amigos lograba entender tal reacción. En la entrevista salió a flote el temor del paciente ante la posibilidad de cambios en su vida laboral. Aunqueaceptaba que podía irse a la quiebra, contemplabaremota esa posibilidad y no estaba dispuesto a sufrir la incertidumbre de emprender un nuevo trabajo. Por presión de los familiares, aceptó venderel negocio, lo que le trajo gran ansiedad. Pensó que su vida había perdido el rumbo y presentó la sintomatología depresiva.En este caso, el entrevistadorhubiera comprendido muy poco de quedar- se en la superficialidadde los hechos. Sólo despuésde escuchar acerca de los temo- res y expectativas del entrevistado, pudo entender y reconocer su fuerza e impor- tancia en la aparición de la tristeza. 25 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo Pesea sucarácter inmediato, eminentemente subjetivo, parael entrevistado nosiempre es fácil describir las experiencias psicológicas propias. El entrevistador tiene como tareausartodos susconocintientos y habilidades técnicas paraclarificar el carácter de lasmismas y organizarlas de forma talquecompongan unahistoria entendible. Para tal fin, puede recurrir a una mezcla de preguntas abiertas y cerradas, las primeras con el propósito de darlibertad al entrevistado paraqueexprese en suspalabras lo que expe- rimenta. Las segundas para ganar precisión en las respuestas o detenerse en aspectos específicos de importancia. Cuando el pensamiento estádesorganizado hastallegara la incoherencia o la persona se muestra tan desconfiada que evita responder cualquier pregunta, no será posible formarse una historia aceptable de los sucesos de su vida. El proceso de entender las experiencias psicológicas delpaciente resultará difícil, masno imposible, puesa par- tir de la conducta no verbal se consigue inferir infinidad de aspectos del mundo psi- cológico. 3. RELATOS EN PRIMERA Y TERCERA PERSONA En literatura, unahistoria se puedenarrardesdediferentes perspectivas. En el relato en primera persona, el narrador es el protagonista. Da a conocer sus pensamientos, sentimientos y fantasías; brinda su versión sobre los hechos que presencia y opina acerca de las intenciones y estados psicológicos de los demás. En unaevaluación del psiquismo, el recuento biográfico en primera persona es la fuente de información más importante, pues permite conocer la forma en que alguien percibe sus estados psicológicos, da sentido a sus vivencias y procura entender el mundo. Este tipo de relato es muyimportante, tantoasíque al escribirel informe respectivo en la historia clínicaes recomendable agregarpasajes en los quese transcriba con palabrastextua- les lo que la persona dice. En pacientes quepresentan síntomas psicóticos activos enel momento de la entrevista, el relato puede estarimpregnado decontradicciones, imprecísiones y situaciones extra- ñas. Enestoscasos, sehacenecesario unesfuerzo adicional porparte del entrevistador paraorganizar y darle coherencia a lo escuchado. En literatura, en el relatoen tercerapersona hay un observador externo que describe las acciones, pensamientos y palabras de los demás e interpreta sus experiencias psi- cológicas. En unaevaluación, se acudepreferentemente a terceros que relatenlo su- cedido al paciente cuando éste no puedebrindar información debido a que presenta compromiso en su estado de conciencia, mutismo, inquietud, hostilidad marcada o desorganización delpensamiento. En talescasos, la información brindada porel eva- 26 Evaluación luadosueleser insuficiente o pocoprecisay nopermiteformarse una idea apropiada de lo acontecido. De todas formas, la informacíón nunca sobra y en muchas ocasiones será necesario acudir a todas lasfuentes posibles: paciente, familiares, amigos, observadores casuales, historias clínicas, documentos legales, etc. 4. TÓPICOS DE LA EVALUACIÓN GENERAL Las evaluaciones tienen diferentes alcances según seasu propósito. Si bienla evalua- cióngeneral cubre ungrupo bastante grande de tópicos, laprofundización enelconoci- miento decadaunodeellosvaria según el interés que se tenga en alguno en particular y el objetivo que se persiga. 4.1. Identificación Los datos deidentificación proporcionan unresumen demográfico delpaciente. Incluyen: o Nombre completo o Documento de identificación y número de historia clínica o Fechay lugarde nacimiento o Edad o Lugarde procedencia y residencia o Estado civil o Ocupación • Sexo Raza o Religión o Lugary fecha de lasevaluaciones. Fuente de información Estos datos proporcionan unconjunto decaracteristicas quepueden relacionarse conel diagnóstico, pronóstico y tratamiento. 4.2. Motivo de consulta (razones para la evaluación) El motivo de consulta está fuertemente relacionado conel propósito de la evaluación. 27 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiologíadel Psiquismo Incluye (aunque nose limitaa) la quejaprincipal delpaciente, la quedebeser evaluada consuficiente detalle paracomprender lo que la persona identifica como problemático y la llevaa buscar ayuda o atención. Al describir el motivo de consulta en la historia clínica o el documento respectivo, es preferible anotar textualmente las palabras de quien asistea la evaluación, independientemente de loextrañas o irrelevantes quepue- dan parecer. Si alguien no brinda información, se registra la versión del familiar o del acompañante. Si se considera conveniente se agrega una notacon la descripción resu- midaque hace el evaluador. Ejemplos. En la historia clínicade una mujer con síntomas depresivos, el motivo de consulta fue escrito así: Según la paciente: "me siento en lo profundo de unfoso y no encuentro salida". En opinión de la hermana, quienlaacompaña, desde hace unmesestátriste y aprecia con tinte pesimista todo cuanto ocurre a su alrededor. . En la evaluación de unapersonaque luceperpleja y no habla, aparecerá: Lapaciente permanece mutista y noresponde verbalmente laspregunta, quese leformula. 4.3. Enfermedad actual La historia de la enfermedad actual debe ser exhaustiva, organizarse de preferencia en ordencronológico y ser redactada dela manera másclaraposible, puesbuenapartedel diagnóstico se basa en esta información. Los términos utilizados deben ser precisos y en la medida delo posible técnicos. Sinembargo, en algunos apartes, paraenriquecer la comprensión de lo que sucede, son convenientes y bienvenidas las palabras textuales del paciente. Comprende: 4.3.1. Descripción de signos y sintomas Lossignos y síntomas deben ser descritos de manera pormenorizada y suficientemente clara. Para tal efectose utilizalas especificaciones semiológicas de cada uno de ellos acompañadas de las respectivas intensidad y duración. Ejemplo: insomnio de concilia- ción (especificación) de dos a treshoras de duración. 4.3.2. Inicio de la sintomatologia Lasintomatología puede aparecer súbitamente encuestión deminutos, instaurarse enel transcurso de horas a díaso demorar meses y años hastahacerse evidente. Ejemplos. 1- Inmediatamente después de una experiencia traumática que puso en riesgo su vida, H.D. comenzó a presentar ansiedad intensa y persistente. 2- Enlosdosúltimos años, de forma lenta y paulatina, K.D. se ha aislado socialmente. 28 EvaLuaci6n 4.3.3.Circunstancias y factores queexacerban o atenúan los sintomas La sintomatología puede aumentar o disminuir en intensidad de acuerdo conla presencia o ausencia de ciertos factores y circunstancias. Enpersonas conabuso y dependencia de sustancias, algunos ambientes y tipos de música incrementan el deseo de consumo. En quienes padecen depresión, si noes muyintensa, lasbuenas noticias o la visitadeamigos y familiares, despiertan un poco de alegría y atenúan la tristeza. Y.F. teníamiedo de volar en avión, temor que aumentaba a medida quese acercaba la fecba delviaje. 4.3.4. Circunstancias y factores que precipitaron o desencadenaron la sintomatología Los estados psicológicos no tienen una relación causal lineal, su aparición no es pro- ductode la acción de un factor único. Estándeterminados por un conjunto de factores en compleja interacción. No obstante, en ocasiones es posible identificar algo fuerte- mente relacionado con el comienzo de la sintomatología. La muerte de una persona cercanapuede facilitar la aparición de unepisodio depresivo, el consumo de LSDsuele desencadenar alucinaciones visuales, la ansiedad puede haberse iniciado después de experimentar dolor precordial. Si no hay un factor desencadenante identificable, es igualmente importante registrar su ausencia. 4.3.5. Evolución de lasintomatologia La sintomatología puedepermanecer invariable a lo largodel tiempo o modificarse de maneras diversas. En trastornos como el delirium es frecuente encontrar variaciones caracterizadas porperiodos biendefinidos de lucidez y otrosdeconfusión y desorienta- ción.Enel duelotras la muerte de un serquerido, pasados unos cuantos días,la tristeza y el desinterés porel entorno disminuyen paulatinamente hastadesaparecer. 4.3.6. Limitaciones producidas por la sintomatologia Se evalúaen qué medida el trabajo, el desempeño académico, lasrelaciones familiares, la interacción social, las relaciones sentimentales, el cuidado de sí mismo se han visto afectados por la sintomatología. En algunas personas condepresión levehaymuypoco compromiso en las áreas anotadas; en cambio, si es severa, hasta bañarse y vestirse pueden convertirse en un granproblema. 4.3.7. Tratamientos El tipo de tratamiento así comolos resultados obtenidos son importantes; también las pruebas psicológicas o de laboratorio que se hayan practicado. Si alguien se queja de insomnio e indica que las medidas de higiene de sueño y el uso de Benzodiazepinas durante dosmeses noha traídobeneficios, dichainformación serácrucialparaexplorar posibilidades diagnósticas y formular el tratamiento 4.3.8. Manera enquese ha afrontado la sintomatologia Es útil evaluarlas estrategias utilizadas para hacerfrente a los síntomas. Una persona 29 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiologíadel Psiquismo con problemas de memoriapuedeacudira anotaciones en libretas; alguientristequizá se refugie en un grupo de oración; los ataques de pánico pueden llevar al paciente a evitarlugares concurridos. Haypersonas que no se percatande los cambios psíquicos, porostensibles quesean,e incluso quienes losbuscan y losrefuerzan activamente como algunos consumidores de alucinógenos. 3.4. Antecedentes personales 3.4.1. Antecedentes psiquiátricos (historia psiquiátrica previa) Los antecedentes psiquiátricos incluyenel recuentocronológicode la totalidadde los episodios previos de trastorno mental. Se especifica lasintomatología junto con la duración, la presenciade factores desencadenantes, los tratamientos recibidos y las repercusiones en el desempeño laboral,académico, socialy familiar. Mereceespecial importanciael primer episodio, ya que puede brindar claves importantes acerca del diagnóstico y evolución del trastorno. Puede ser conveniente no sólo describir los síntomas de cada episodio sino aquellos que se presentan durante los periodos intercríticos. En cuanto a los tratamientos se recomienda registrar la modalidad (psicoterapia, farmacoterapia, etc), tiempo de intervención y resultados obtenidos. Si se trata de me- dicamentos conviene anotardosis, duración, eficacia, efectossecundarios y adherencia a la prescripción. Enocasiones, lossíntomas psíquicos pueden pasardesapercibidos paraquienlos pade- ce, por lo que no hablaráde ellosespontáneamente. Será necesario entonces preguntar acercade intentos de suicidio, conductas autodestructivas, temporadas con problemas en el funcionamiento social, laboral o académico, así como uso de medicamentos psicoactivos, sean estosprescritos o utilizados por iniciativa propia. Todas estas situa- cionesestánfuertemente relacionadas con la presencia de trastornos mentales y pueden ser un indicioimportante de su presencia en algúnmomento vital. 3.4.2. Antecedentes médicos generales En esta sección están incluidos los clásicos antecedentes de cualquier historiaclínica: patológicos, quirúrgicos, traumáticos, gineco-obstetricos y alérgicos. Se registrala información disponible acercade las enfermedades sufridas así comolos tratamientos recibidos y la evolución de lossíntomas. De especial importancia es cono- cer si existe relación entre determinadas molestias somáticas y la aparición o intensificación de síntomas psíquicos. Algunos problemas neurológicos relacionados con pérdida de conciencia, episodiosde 30 Evaluación confusión y desorientación, epilepsiay migrañacobrangranvalor, ya que puedencon- fundirse con trastornos psiquiátricos. Debe explorarse el uso de medicamentos, pues muchos de ellos producen efectos se- cundarios en el psiquismo y se asocian con trastornos psiquiátricos específicos. Por ejemplo, los episodios de manía y los corticoides. 3.4.3. Antecedentes acerca de uso de sustancias Se evalúael uso actualo pasadode sustancias comoalcohol, nicotina, marihuana, co- caína, opiáceos, agentes hipnótico-sedantes, agentes estimulantes, solventes y alucinógenos. La información relevante incluyela cantidad y frecuencia de uso,vía de administración, patrón de uso (episódico o continuo; socialo solitario), problemas le- gales, laborales, económicos o interpersonales como consecuencia del uso;manifesta- ciones de tolerancia y abstinencia; asociación temporal con trastornos psiquiátricos y cualquier beneficio percibido por el usuario. 3.5. Antecedentes familiares Losantecedentes familiares de interéssonaquellos relacionados conenfermedades que se conoceo sospechatienenfactores hereditarios entre los causales. Por ejemplo, dia- betes,hipertensión arterial, algunos tiposde cáncer, etc. En cuanto a los trastornos psiquiátricos, conviene detallarlos un poco más e incluirno sólo los diagnósticos sinode ser posiblelas manifestaciones clínicas, su evolución, los tratamientos administrados y la respuesta a los mismos. Hay mayorprobabilidad de presentaresquizofrenia, trastornos afectivos, dependencia al alcohol y otros trastornos en la medida en que parientes más cercanos los hayan padecido. De otra parte, se ha encontrado un patrónfamiliar de respuesta favorable o desfavorable a medicamentos como los antidepresivos, 3.6. Historia personal La historiapersonal es un recuento panorámico del pasado de una personaa travésde cada una de las etapasde su vida.Ayuda no sólo a comprender su historia, también da elementos paraenlazarel pasado con el presente, especialmente en lo relacionado cou la sintomatología actual. Sepuede dividir enetapas deacuerdo conperiodos deldesarrollo: etapaprenatal, infancia temprana, infancia tardía, pubertad y adolescencia, edadadulta, senectud. Encadaunade esasetapas hay vivencias relevantes y características, pero también pueden aparecer si- 31 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo tuaciones extraordinarias, destacadas positiva o negativamente, las que muchas veces trazan caminos insospechados en lavida. Servíctima deabuso sexual, serexpulsado de la tierranatal, conseguir una becaen una universidad prestigiosa, ganarpremios en depor- tes,educación o trabajo son algunos ejemplos de ese tipode situaciones. A continuación se presenta de manera esquemática los aspectos más importantes que enmarcan cadaunade esasetapasde la vida,los que debenexplorarse en el proceso de evaluación. Cada uno de los tópicos ameritaría una discusión aparte, pero por razones de espacio nos limitamos sólo a enumerarlos más importantes. 3.6.1. Historia prenatal y perinatal o Embarazo planeado y deseado o lo contrario. o Problemas durante el embarazo (tantoemocionales como físicos). Aspectos relacionados conelparto: lugar, tipo deatención, complicaciones y tratamientos. Estado de saludal nacery en el primermes de vida. 3.6.2. Primera infancia (desde el nacimiento hasta los tres años) Hábitos alimenticios: lactancia materna o un tipo de alimentación diferente a ésta. Cambios en el patrónalimenticio a lo largode este tiempo. o Desarrollo psicomotor: edad a la que sostuvo la cabeza, gateó, comenzó a caminar, dijo las primeras palabras. Interacciones sociales, especialmente con los padres. Circunstancias relacionadas con loshábitos higiénicos. Enseñanza deestosúltimos. o Cuidados prodigados y personas que se encargaban de ello. o Características del sueño. o Ansiedad anteextraños o de separación. Tendencias en el juego:juego solitario o conotrosniños. Preferencia por rolespasi- vos o activos. Primeros recuerdos o recuerdos reiterativos. Síntomas de problemas de comportamiento: chupeteo del dedo, explosiones emo- cionales, tics,conductas autoo heteroagresivas, terrores nocturnos, miedos pronun- ciados,enuresis o encopresis. 3.6.3. Infancia tardia (de los 3 a los 11años) o Identidad de género. Pertenencia al género masculino o femenino. Primeras expe- rienciasescolares y reacción a ellas. Manejó de la separación de los padres al co- menzar la escolaridad. 32 Evuluacíán Relaciones sociales. Características de los amigos y de las relaciones con éstos. Participación en actividades grupales. o Disciplina. Tipo de castigosy personaencargada de ellos. o Respeto por las normas escolares y de convivencia. o Rasgos de comportamiento predominantes: impulsividad, pasividad, agresividad, aislamiento, ansiedad anteel contacto social. Facilidad para aprender y dificultades académicas. Síntomas de problemas de comportamiento: pesadillas frecuentes, fobias, enuresis, agresividad, piromanía, crueldad con los animales. 3,6.4, Pubertady adolescencia En esta etapa empieza la búsqueda de independencia de los padres, se confiere gran importancia a las relaciones con los coetáneos, empiezaa ser importante la obtención de una identidad y se afianza y consolida una formade ver el mundo. Se evalúa: o Desempeño escolarincluyendo relaciones con los profesores y compañeros, activi- dadesextraacadémicas, adaptación al ambiente escolary problemas específicos. o Participación en deportes y otrasaficiones. Uso de sustancias comoel alcohol. o Intereses sexuales, actitudes haciael sexo, temores, problemas físicos y emociona- les relacionados. Primeras experiencias sexuales y reacción hacia las mismas. o Relaciones de amistad y participación en actividades grupales. Reacciones emocio- nales en situaciones sociales. Rasgos de personalidad: tendencia al aislamiento, irritabilidad, impulsividad, lide- razgo. o Imagen corporal. Aceptación o rechazo de sí mismo. o Desarrollo físico, aparición de caracteres sexuales secundarios y respuesta anteesta situación. o Problemas emocionales y físicos diversos: pesadillas,fobias, enuresis, fugas decasa, delincuencia, tabaquismo, consumo dealcohol u otrassustancias, anorexia, bulimia, problemas de peso, ideasde minusvalía, ideasy gestosautoagresivos. 3.6.5. Edad adulta 3,6,5.1. Aspectos laborales, Númeroy duración de los empleos. o Elección de la ocupación, o Conflictos en el campode trabajo. 33 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiología del Psiquismo • Desempeño laboral. • Cambios de trabajo y motivo paralos mismos. • Epocas de desempleo y razones paraello. • Ambiciones laborales y metas a largo plazo. Sentimientos haciael trabajo (satisfacción, malestar, aburrimiento). • Relaciones dentro del trabajo (con losjefes,compañeros y, si es aplicable, con los subordinados). 3.6.5.2. Relaciones sentimentales. • Descripción de las relaciones significativas a lo largo de la vida: características, duración y evolución de las mismas. • Matrimonios y suevolución. Roles dentro delmatrimonio, manejo deldinero, pro- blemas domésticos, actitud ante la crianza de los hijos. • Ausencia de relaciones sentimentales y motivo paraello. Dificultad parainiciar relaciones o mantenerlas. • Actitud ante losfracasos sentimentales. Desempeño sexual y problemas surgidos. • Actitudes frente a la anticoncepción y la planificación familiar. 3.6.5.3. Aspectos educativos • Descripción de lasactividades educativas. • Desempeño académico: motivación, logros, capacidades, creatividad. Obstáculos parael desempeño académico. • Abandono escolar y sus causas. Gustos de lectura. • Actividades paralelas durante la vidaacadémica. 3.6.5.4. Actividad social Relaciones con los amigos y personas conocidas, destacando lascaracterísticas de estas relaciones, su duración y profundidad. Intereses que se comparte conel grupo social. • Tendencias sociales predominantes: aislamiento, sociabilidad marcada, evitación de los contactos. 3.6.5.5, Situación vitalactual • Descripción de las condiciones actuales de vidaen cuanto a vivienda, fuentes de financiación y posibles dificultades económicas. 34 Evaluación • Metas, planes y proyectos vitales. • Fantasías acerca del futuro. • Valores con respectos al trabajo, ocio, hijos, padres, amistad, sexo, cuestiones co- munitarias y aspectos culturales., 3.7. Historia familiar En la historia familiar se recoge las características generales y la descripción de la personalidad de quienes convivieron o conviven con el paciente, abarcando desde la infancia hastael presente. Además, es imprescindible registrar el tipode relación esta- blecida entre aquellas personas y el evaluado. El conocimiento de las interacciones entrelos miembros de lafamilia, sus sistemas decreencias y losroles porellosdesem- peñados amplían notablemente este aparte de la historia clínica. 3.8. Examen fisico Mediante el examen físico se obtiene información importante acerca delestado de sa- ludgeneral actual. Dependiendo de loquehastael momento sehayaconocido median- te la enfermedad actual y los antecedentes, sepondrá especial atención a la presencia o ausencia de algunos signos. Tiene como objetivos: • Determinar la presencia de signos asociados a enfermedades que se presentan con sintomatología psiquiátrica • Determinar la necesidad deevaluaciones y cuidados médicos adicionales porparte de otrosespecialistas. • Ayudar en la elección o contraindicación de los tratamientos de acuerdo con los hallazgos. 3.9. Examen mental Elexamen mental es ladescripción delestado psíquico actual dealguien. Sebasaenlos datos obtenidos mediante la observación de laconducta no verbal y el análisis delcon- tenido verbal de lo expresado por el evaluado. Tiene como propósito obtener eviden- ciasacerca de la presencia de signos y síntomas de algún trastorno mental. Abarca los siguientes tópicos: • Descripción general (incluye movimientos y posturas) • Estado de conciencia • Orientación • Atención y concentración • Afecto 35 Descargado por Natalia Manya (manyanatalia01@gmail.com) lOMoARcPSD|33111652 Semiologfa del Psiquismo • Pensamiento Lenguaje Sensopercepción Memoria • Inteligencia y otras funciones cognoscitivas • Introspección • Juiciode realidad 3.10. Diagnóstico Es la conclusión de todo lo registrado. Al formular undiagnóstico seasignaunnombre específico al conjunto de manifestaciones encontradas, lo que conlleva consideracio- nes de tipo etiológico, terapéutico y de pronóstico. Paraefectos del diagnóstico, en el DSMIV, se recomienda el sistema multiaxial. Cada eje del sistema brinda un tipo diferente de información, ampliando la posibilidad de conocer rápidamente el funcionamiento actual del psiquismo. En total son cmcoejes: Eje 1: trastornos psiquiátricos específicos. • Eje II: trastornos de personalidad y retardo mental • Eje III: patología médica diferente a la psiquiátrica. Eje IV: problemas familiares, sociales, económicos, laborales, académicos y am- bientales ocurridos durante el último año. • Eje V: funcionamiento global actual de acuerdo con la escalade evaluación de la actividad global 3.11. Conducta que se va a seguir Una vez se formula el diagnóstico y de acuerdo con lascaracterísticas clínicas, la can- tidad, la intensidad y la urgencia de la sintomatología sedecideacerca del tipode inter- vención que se va a realizar. Se puede hacer algunas recomendaciones generales, pro- poner un tratamiento psicológico y/o farmacológico ambulatorio, sugenr manejo intrahospitalario y hastaordenarlo si fuese necesario. Es deseable concertar la conducta quese va a seguir, lo que requiere hacerpartícipe al paciente en la toma de decisiones. Lastimosamente, no siempre es posible, especial- mente cuando la sintomatología pone en riesgo la integridad física del afectado o de quienes lo rodean. 36 Descripción general Los aspectos quese tieneen cuentaen la descripción general estánconstituidos porlas expresiones facial y corporal, el estilo utilizado para relacionarse con los demás y las conductas observables de manera inmediata. Es la parte más descriptiva del examen mental. Lo que interesa son los aspectos generales de una persona en el momento de practicarse laevaluación; el conjunto de manifestaciones noverbales másqueel conte- nido verbal que las acompaña. En algunas ocasiones, como cuando alguien se niega a hablar, lo evaluado en la des- cripción general se va a constituir en la fuentede información más valiosa para saber del estado mental. Loshallazgos de esta sección son un elemento másen el proceso de conocerel mundo psicológico de alguien; de buenas a primeras no tienen connotación psicopatológica, pues esta últimasólo se hace evidente dentro del contexto total de la situación en que se presentan. Los aspectos de la descripción general, incluida la apariencia física, no estáncondicio- nados únicamente por factores biológicos; los sucesos de la historia vital y, en buena medida, lasexpectativas culturales del gruposocial dejanallí su huella. Es importante tener en cuenta ciertas diferencias culturales para no confundir y juzgar de manera erradaalgunas conductas. Por ejemplo, los árabes se miranfijamente a los ojos mien- tras conversan, en cambio en algunos lugares de Asia oriental es de mala educación hacerlo. Acontinuación, sedetalla y discute loscomponentes de la descripción general. 1. CON QUIÉN y CÓMO LLEGA EL PACIENTE Los pacientes pueden llegar solos, motivados ypor supropia iniciativa ohacerlo encompañía de alguien más, a veces hasta obligados. Enocasiones, será lapolicía oalgún servicio de emergen- cias quienes los traigan, encuyo caso elpaciente podría negarse aentrar, mostrarse poco colabo- rador, oponer resistencia física y hasta volverse agresivo. Pueden llegar encamilla y serincapa- ces dedesplazarse porsimismos o moverse con facilidad y soltura. 2. CONDUCTA OBSERVABLE Y EXPRESIÓN CORPORAL Noescasual queunapersona camine erguida, lohaga encorvada o sedesplace lentamente. La manera de llevarel cuerpo dacuenta del psiquisrno y estáimpregnada de la cultura en 37 Descargado por Natalia
Compartir