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Resumen En el present e t rabajo se exponen algunas ideas sobre la aplicación de los procedimientos naturalis- tas en logopedia. Después de una breve presentación de los fundamentos de este t ipo de intervención, en el art ículo se comentan las ventajas e inconvenientes de su uso, comparándolos con los procedimientos t ra- dicionales. También se alerta sobre algunos usos erró- neos y sus posibles causas sobre acabar con la aporta- ción de sugerencias sobre la formación de logopedas que deseen emplear la int ervención nat uralist a con profesionalidad. Palabras clave: Intervención naturalista, buenas práct icas, formación de logopedas Some reflexions about naturalistic intervention in speech therapy This article discusses some of the current ideas on applied naturalistic in tervention procedures in speech therapy. After a brief presentation of the underlying principles of naturalistic intervention, the article comments on the advantages and draw- backs of its use while comparing it to the tradi- tional procedures used in speech therapy. At the same time it warns of the erroneous notions and uses that surround it and their probable causes. The article ends with suggestions for practitioners who whish to implement the naturalist interven- tion procedures in a professional way. Key w ords: Naturalistic in tervention, best practices, speech therapists training Int roducción Pasado el período en el que se dieron a conocer en nuest ro país las intervenciones llamadas naturalistas creo que ha llegado el momento de ref lexionar sobre su puest a en práct ica a f in de mejorarla y deshacer ciert as conf usiones. Con est as breves líneas se pre- tende cont ribuir a su correcta aplicación a part ir de algunas ideas personales. Como es sabido, se denomina «intervención natura- lista» a un conjunto de procedimientos psicoeducat i- vos dest inados a facilitar el desarrollo del lenguaje que consist en en adapt aciones de las ayudas nat urales que padres y adult os en general of recen a los niños pequeños impulsando así su desarrollo comunicat ivo y lingüíst ico. Los padres usan estas ayudas en situaciones de la vida cot idiana de manera intensiva, no planif icada y ni siquiera intencional. La reconversión de esas ayudas en est rategias de intervención intencional es el núcleo de la intervención naturalista. Los procedimientos naturalistas para la interven- ción en logopedia suelen agruparse en t res apart a- dos amplios que incluyen: 1. Procedimientos orientados a gest ionar el espacio comunicat ivo de manera que const ituya una aun- tént ica red de apoyo y de seguridad sobre la cual el niño pueda pract icar y ampliar «sin riesgo» sus inci- pient es habilidades comunicat ivas y su conoci- mient o lingüíst ico. Reorganizar el espacio f ísico, est ar disponible para la comunicación, at ender y escuchar, est ructurar la act ividad conjunta por tur- nos, equilibrar los t urnos y seguir la iniciat iva del niño o minimizar las invasiones del espacio comuni- cat ivo infant il son la base de algunos de los proce- dimientos más conocidos en este apartado. 2. Procedimient os de adapt ación del lenguaje diri- gido al niño en sit uaciones interact ivas, de modo que ese lenguaje del adult o sea al mismo t iempo Copyright 2006 AELFA y Grupo Ars XXI de Comunicación, S.L. ISSN: 0214- 4603 139 M. J. Del Rio Originales Consideraciones sobre el uso de los procedimientos naturalistas para la intervención en logopedia Universidad de Barcelona Correspondencia: M. J. del Rio Departament de Psicologia Evolut iva i de l’Educació Universitat de Barcelona Pg. de la Vall d’Hebron 171 08035–Barcelona Correo elect rónico: mjdelrio@ ub.edu Revista de Logopedia, Foniat ría y Audiología 2006, Vol. 26, No. 3, 139- 145 19 20 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO referente, modelo y «guía de uso» para los logros progresivos del niño. Algunos ejemplos serían: el uso est rat égico de las caract eríst icas supraseg- mentales del habla, la adaptación o ajuste ópt imo de la longitud media de los enunciados del niño y el uso de conceptos con un grado de abst racción ligeramente superior al empleado por el niño. 3. Est rategias educat ivas específ icas, como la inter- pretación ajustada, la expansión, la reformulación, el feedback, la corrección implícita, la imitación, la repet ición, los encadenamientos, las reelaboracio- nes y ot ros muchos. No es éste el lugar para detallar las técnicas de inter- vención naturalistas derivadas de los rasgos del lenguaje y la comunicación dirigido al niño que acabamos de citar. Sí hay que recordar, sin embargo, que cuando el logopeda emplea en su trabajo procedimientos basados en estos rasgos, lo hace de manera sistemát ica, organi- zada, planif icada y consciente, además de f inamente adaptada a cada familia y niño en part icular. No imita o se limita a reproducir lo que se supone que hacen los padres, sino que usa conscientemente unas t écnicas basadas en lo que se conoce como «ayuda social» para el desarrollo del lenguaje. Existen dos modalidades de intervención naturalista según se empleen con el niño directamente, o bien con los padres y maestros para ayudarles a mejorar los pro- cesos de aprendizaje del lenguaje en el contexto natural, siempre previa evaluación cuidadosa de las característ i- cas de las int eracciones cot idianas del niño con sus padres en casa o con sus maestros en la escuela. A la pri- mera le hemos dado el nombre de intervención natura- list a direct a y a la segunda int ervención nat uralist a mediada. Tanto una como ot ra pueden llevarse a cabo en entornos habituales del niño, como el hogar familiar o su aula; pero t ambién es posible int ervenir de un modo «naturalista» en un lugar más o menos ajeno al niño, como un despacho o un aula especial. Estas moda- lidades quedan ref lejadas en el esquema siguiente: La modalidad mediada es una de las aplicaciones más interesantes y realmente novedosas. Tiene como objet ivo ayudar a los padres y maest ros del niño a ser, just ament e, mejores «impulsores nat urales» del desarrollo del lenguaje. En est as int ervenciones, en primer lugar se analiza la calidad de los contextos y las interacciones cot idianas en las que se ve inmerso el niño, desde el punto de vista de su potencial para apoyar el desarrollo del lenguaje y, a cont inuación, se orient a direct ament e a los adult os a f in de opt i- mizar dichas interacciones para que proporcionen al niño el máximo de posibilidades de aprender lenguaje en situaciones normales de su vida diaria. A veces, el prof esional t iene la posibilidad de observar e int er- venir en la misma casa o en el aula, pero a veces no es posible y lo hace desde un despacho. En cualquier caso, t ant o la variant e mediada como la direct a requieren, por parte del logopeda, unos conocimien- t os y compet encias bast ant e novedosos que dif ícil- mente se pueden adquirir sólo mediante la lectura o la asistencia a sesiones de formación teóricas. Las versiones más radicales de la int ervención naturalista propondrían intervenir exclusivamente en los entornos naturales del niño: su casa o su escuela, y t rabajar exclusivament e con los int er locut ores naturales, en lo que sería un ejemplo de habilit ación de los escenarios cot idianos para facilitar el aprendi- zaje natural del lenguaje a t raves de la colaboración de los interlocutores del niño (Urquía y del Rio, 1999). Pero ni una cosa ni ot ra son siempre posibles o desea- bles. También se pueden llevar a cabo intervenciones naturalistas directas, en las que el dest inatario de la intervención es el propio niño que interactúa en este caso con el prof esional de la logopedia bien sea en sus entornos habit uales (Vilaseca y del Rio, 1997), o en un escenario más cercano a la sala t ípica de ree- ducación. Est e últ imo t ipo de int ervención sería el menos radical, aún cuandorespeta los presupuestos y emplea procedimientos naturalistas. No vamos a extendernos aquí en una explicación 140 Contexto habitual: casa/escuela Intervención naturalista directa Intervención naturalista mediada Se dirige al niño Se dirige a maest ros/padres Contexto especial: despacho/sala especial 21 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO detallada de las característ icas de estas intervencio- nes. Los lectores interesados en conocer más a fondo en qué consisten pueden consultar las publicaciones de Aimard y Abadie (1992), Gràcia y del Rio (1998), Juárez y Monfort (1989), Kaiser y cols. (2001), Man- nolson (1999), Sánchez (1998), o en el número espe- cial de la revista Suport s de 1999, dedicado integra- mente a este tema. Antecedentes Las dif erent es propuest as de int ervenciones de corte naturalista surgen más o menos a f inales de la década de 1970 como resultado de la madurez de las teorías sobre el desarrollo del lenguaje basadas en la observación, en contexto natural, de las interacciones ent re niños y sus padres o cuidadores. Son teorías que enfat izan el valor del uso y las funciones del lenguaje f rent e al predominio de los aspect os f ormales. Por esas f echas mult i t ud de invest igaciones habían ya puest o de relieve la import ancia que t ienen para el desarrollo del lenguaje infant il ciertas característ icas de las int eracciones ent re adult o y niño; se había constatado que el lenguaje especialmente adaptado que los adultos dirigen a los niños en edad de apren- der a hablar t iene una f unción de ayuda impres- cindible para el desarrol lo del lenguaje y se había descubiert o t ambién la exist encia de numerosas est rategias con potencial educat ivo implícit o en las interacciones. Al mismo t iempo, se describía cómo los adultos manejan las rut inas y contextos comunicat i- vos de manera que permit en a los niños ir apren- diendo a comunicarse paulat inamente cada vez con mayor independencia. A medida que estos conocimientos se consolida- daban y se reformulaba el papel de la «ayuda social» en la adquisición del lenguaje, invest igadores y profe- sionales f ueron desarrollando t écnicas de int erven- ción, hasta cierto punto novedosas, para opt imizar el desarrollo del lenguaje infant il basadas en las teorías int eract ivas y sociof uncionales. Fueron diversos los f act ores que conf luyeron para que en un moment o dado se empezara a hablar en publicaciones especia- lizadas de modelos o métodos de intervención natu- ralista. La denominación naturalista surgió como con- secuencia lógica del énfasis que las t eorías aludidas ponían en la observación y en la intervención del len- guaje inf ant i l en cont ext os nat urales. El razona- miento era el siguiente: si ya sabemos que los padres cont ribuyen al desarrol lo del lenguaje de sus hi jos cuando, de forma natural y no planif icada, responden a sus f rases con expansiones, por poner un ejemplo, vamos a probar si como t erapeut as del lenguaje podemos usar nosot ros t ambién las expansiones, debidamente adaptadas, como recurso de int erven- ción. Diversos t rabajos de invest igación/intervención dent ro y fuera de nuest ro país most raron la posibili- dad de adaptar las est rategias naturales de los padres a una sit uación dif erente de intervención y obtener resultados esperanzadores. También cont ribuyeron al auje de las intervencio- nes nat uralist as los movimient os que propugnaban que la evaluación del lenguaje infant il debía incorpo- rar la observación en contexto natural, y no basarse exclusivamente en pruebas estandarizadas u observa- ciones de laboratorio, así como las teorías psicológi- cas contextuales que subrayaban la inf luencia de los contextos en el desarrollo del comportamiento. La revolución pragmát ica en psicolingüist ica y las teorías funcionales del desarrollo del lenguaje, por su parte, pusieron de manif iesto que el uso del lenguaje es la base para su desarrollo natural, o dicho de ot ro modo, se aprende a comunicar y a hablar a base de intentar comunicarse y hablar con propósitos reales, con interlocutores sensibles y atentos y en sit uacio- nes signif icat ivas. La intervención naturalista y los procedimientos t radicionales Para explicar qué es la intervención naturalista a menudo se presenta ésta como opuesta a la interven- ción inst ruccional cuando de hecho no son procedi- mient os opuest os sino dif erent es. La int ervención inst ruccional se deriva de las teorías del aprendizaje, de la psicología de la inst rucción y de la enseñanza formal y es la base, se sepa o no, de la mayoría de las act uaciones logopédicas t radicionales. El t ext o más completo de intervenciones logopédicas de t ipo ins- t ruccional en cast el lano probablement e sea el de Shiefelbush de 1986. Por el cont rario, las intervencio- nes nat uralist as se basan en la psicología evolut iva, en teorías socioculturales del desarrollo del lenguaje y del aprendizaje inf ormal o nat ural. De esa f alsa oposición surge uno de los malentendidos que desea- ría cont ribuir a deshacer. Es cierto que la intervención naturalista presenta ciertas ventajas sobre la inst ruccional, ent re las cuales sobresale la f aci l i t ación de la general ización y la t ransf erencia de conocimient os. Es lógico que a los niños les result e más f áci l usar en casa y en las escuela los aprendizajes sobre comunicación y len- 141 22 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO guaje que ya se han iniciado en esos mismos contex- t os. Y aún más si son los padres y maest ros los que saben t ransformar mult itud de intercambios cot idia- nos en aut ént icas oport unidades para aprender in sit u y de forma natural. Esas y ot ras ventajas convier- t en a la int ervención nat uralist a en una alt ernat iva muy int eresant e f rent e a procedimient os más con- vencionales. Las ventajas más citadas de la intervención natu- ralista son: —Posibilit a un nuevo t ipo de t rabajo con padres. Es quizás la mayor de las vent ajas. La met odología naturalist a permite un t ipo de t rabajo con padres que lejos de convert i r los en «prof esores de len- gua» les ayuda a comunicarse mucho mejor con sus hijos, incluso desde edades muy tempranas, lo cual t iene unos efectos alt amente posit ivos sobre la relación emocional ent re el los. Los padres de niños pequeños con problemas de lenguaje que part icipan en una int ervención nat ural ist a mediada llegan a darse cuent a de que ellos pue- den ser, como todos los padres, guías naturales del desarrollo del lenguaje de sus hijos sin alt erar las rut inas cot idianas. —Garant iza la atención y el interés del niño. Como de ent rada se cent ra en acciones u objet os elegidos por el propio niño, se reduce el t iempo empleado en ayudarle a cent rar la atención. —Increment a la signif icación del aprendizaje. Las act ividades y los ref erent es de la int ervención naturalista t ienen más probabilidades de ser signi- f icat ivos y funcionales para los niños, lo cual, como es sabido, favorece el aprendizaje. —Facilit a la f recuencia de uso de los nuevos apren- dizajes en contextos cot idianos. Los niños con dif i- cult ades espcíf icas de aprendizaje y los niños con t rastornos del desarrollo que t ienen problemas de lenguaje necesit an más ensayos, más práct ica y más t iempo para consolidar aquello que van apren- diendo. La int ervención naturalist a, sobre t odo la mediada, garant iza la f recuencia de uso en a lo largo de todo el día, en casa y en la escuela. —Facilita la generalización. Al realizarse en contextos y con int er locut ores habit uales para el niño, la t ransferencia y la generalización de conocimientos para su uso cot idiano está mejor garant izada. —Minimizalos posibles episodios de negat ivismo o dispersión, por el simple hecho de cent rarse en los intereses del niño. Cuando los alumnos t ienen, ade- más de un problema de lenguaje y comunicación, ot ros problemas de conduct a o emocionales, la intervención naturalista, al favorecer la comunica- ción y respetar los intereses del niño, ayuda a dis- minuir los momentos de rechazo o descont rol. —Maximiza la rentabilidad del t iempo empleado por el logopeda y los maestros. Esta ventaja está ya implí- cita en los puntos anteriores. Además, en el caso de la intervención naturalista mediada, padres y maestros apreden en un t iempo relat ivamente breve est rate- gias y maneras de relacionarse con «un» niño que quedan incorporadas a su relación con «todos» los niños y pueden usar posteriormente en mult itud de ocasiones a lo largo del día y durante t iempo indef i- nido. En el caso de los maestros esta part icularidad es de gran importancia, ya que el esfuerzo empleado en aprender a opt imizar las interaciones cot idianas para convert irlas en oportunidades de aprendizaje y uso del lenguaje para un alumno es fácilmente t rans- ferible a otros alumnos. Ahora bien, que la intervención naturalista tenga ciertas ventajas e int roduzca algunas mejoras, o sim- plemente diferencias, respecto a la intervención t radi- cional no signif ica que sea un t ipo de intervención que solucione t odos los problemas de lenguaje, que sea apl icable a t odos los casos y circunst ancias ni que esté exenta de inconvenientes o limitaciones. Algunos de los inconvenientes o limitaciones de la intervención naturalista son: — No es aplicable por igual a todos los componentes del desarrollo lingüíst ico. Por ejemplo, es muy dif í- cil f acilit ar el desarrollo fonológico de un alumno con TEL fonológico empleando solamente procedi- mientos naturalistas. — Su uso es innecesario a medida que los niños t ie- nen más edad y mejor compet encia cogni t iva. Por ejemplo, una niña de diez años de int eligen- cia normal que present ara problemas de t art a- mudeo o de voz, se benef iciar ía más de una int ervención t radicional que de una int erven- ción nat uralist a. — Para ser ef icaz es necesario garant izar un uso lo más int ensivo posible de las est rat egias por part e del adulto y de la part icipación del niño en las situacio- nes interact ivas objet ivo de la intervención. Una o dos intervenciones correct ivas en cada sesión, dos veces por semana, probablemente no serán suf i- cientes para ayudar al niño en el sent ido deseado. Las intervenciones naturalistas directas son especial- mente efect ivas en las primeras etapas del lenguaje, en at ención precoz o en niños con t rast ornos del desarrol lo de cualquier edad. Las int ervenciones naturalist as mediadas const it uyen un t ipo de int er- 142 23 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO vención realmente novedosa y son insust ituibles, por el momento, en la intervención orientada a opt imizar ciertas interacciones cot idianas del niño con su fami- lia o maest ros, de modo que pueda part icipar en casa y en la escuela en situaciones naturales ópt imas para el desarrol lo del lenguaje. Sin embargo, incluso en los casos citados, la intervención naturalista mediada no es incompat ible ni sust i t ut iva de ot ros t ipos de intervención directa, de cualquier naturaleza, con el niño. Las buenas práct icas: intervención naturalista no es sinónimo de improvisación Con todo, el mayor riesgo para un uso adecuado de la int ervención nat uralist a es la f acil idad con la que sus principios y procedimient os pueden ser malinterpretados o tergiversados. En todas las disciplinas hay denominaciones afor- tunadas y también desafortunadas. Los nombres que se ponen a las cosas acaban por t ener inf luencias a veces insospechadas sobre las cosas mismas, o al menos sobre su comprensión. Tal es el caso a mi entender de la denominancion naturalista aplicada al conjunto de procedimientos logopédico- educat ivos. El adjet ivo naturalista y las referencias a los contextos nart urales de desarrol lo despiert an una i lusión de naturalidad, entendida como lo cont rario de lo que es cualquier int ervención logopédica, un conjunt o de práct icas especiales y en el f ondo art i f iciosas para que los niños que no pueden desarrollar el lenguaje, en todo o en parte, puedan aprender con ayuda o con mucha ayuda, lo que no pueden aprender por sí solos en sus contextos habituales. La intervención natura- lista para ser ef icaz exije alterar el entorno, int roducir ayudas que no est aban allí de f orma nat ural, cam- biar ritmos de aprendizaje, proporcionar más cant i- dad de práct ica y práct icas de calidad dif erente a lo que hubiera sido el curso normal del desarrollo del lenguaje. Porque, no conviene olvidarlo, lo que les ocurre a los niños con problemas de lenguaje es que, o bien t ienen una dif icultad específ ica int rapersonal para aprender a comunicarse y a hablar, o bien en su entorno existen distorsiones importantes de las inter- acciones diarias, interpersonales, que le privan de las experiencias necesarias para const ruir sus conoci- mientos lingüíst icos y sus competencias comunicat i- vas; o bien, lo que es más f recuente, ocurren ambas cosas a la vez. La int ervención nat ural ist a t iene por objet ivo modif icar determinados aspectos de las relaciones del niño con su ent orno para inf luir, indirect ament e, sobre procesos internos cognit ivo- lingüíst icos y tam- bién sobre procesos sociales y emocionales ent re el niño y sus interlocutores habituales. Todo ello con el objet ivo últ imo de facilit ar el desarrollo del lenguaje y la comunicación. En ese proceso el prof esional (logopeda, psicopedagogo, enseñant e, psicólogo, f oniat ra, et c.) debe act uar, int ervenir, sobre lo que hay y modif icarlo. Por muy nat ural ist a que sea la intervención, no puede consist ir sólo en observar o en mantener la situación de part ida con ligeros retoques. Las sesiones de la intervención naturalista t ienen una apariencia natural para el niño, pero no para el profe- sional quien t iene que dedicar esfuerzo a la prepara- ción y a la implement ación de las sesiones, t ant o o más que en las int ervenciones llamadas t radiciona- les. La int ervención nat ural ist a no es sinónimo de improvisación. Una mirada superf icial exclusivamente teórica a la intervención naturalista, en algunos casos parece que induce a suponer que ést a consist e en seguir le la corrient e al niño en las sesiones de logopedia o en que el niño no esté sentado sino que corretee por la habit ación como si est uviera en casa jugando y eli- giendo él los juguetes o materiales con los que va a ent ret enerse. El papel del prof esional consist i r ía —según est a conf usa int erpret ación— en act uar sin ningún plan preconcebido y se reduciría a observar lo que ocurre, a contestar a los intentos de comunicac- ción o pronunciación del niño con el mayor ent u- siasmo posible y, en el mejor de los casos, a hacerle alguna pregunta o a repet ir lo que dice el niño. Con ser est as act it udes encomiables, en ningún caso se corresponden con el autént ico t rabajo del profesional especial izado en int ervención nat ural ist a y dif íci l- mente cont ribuirán a mejorar los procesos de adqui- sición del lenguaje del niño que necesit a ayuda. Las líneas anteriores se ref iren a la intervención natura- lista directa, en la que el logopeda t rabaja con el niño. La intervención naturalista mediada, por su parte, se prest a con mayor f aci l idad aún a las práct icas inadecuadas puesto que sus procedimientos eran casi desconocidos hasta hace muy poco. Para iniciar una int ervención nat uralist a mediada es imprescindible realizar, en primer lugar, una evaluación de la cali- dad del entorno y de las interacciones del niño con su interlocutor, desde el punto de vista de sucont ribu- ción al desarrollo del lenguaje. Ya est e primer paso resulta dif ícil dada la ausencia de t radición e inst ru- ment os asequibles para la evaluación de la calidad de la int eracción que específ icament e f avorece el desarrol lo de la comunicación y del lenguaje. Est a dif icult ad se suele solvent ar mediant e una aprecia- 143 24 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO ción intuit iva del est ilo interact ivo del adulto, sea la madre o el maest ro, realizada sin cat egorías ni pro- cedimientos de análisis adecuados. En segundo lugar, la intervención en sí requiere del profesional compe- tencias específ icas de observación de contextos natu- rales y de un determinado t ipo de interacción madre –hi jo; de la ent revist a colaborat iva; del asesora- mient o a padres y prof esionales sobre cont enidos muy delicados, como son los est ilos de comunicación y de interacción lingüíst ica que mant iene con el niño con dif icult ades; o del manejo de regist ros audiovi- suales o técnicas de role playing en las tareas de ase- soramient o. Est as son algunas de las compet encias requeridas para realizar la int ervención nat uralist a mediada y hay que admit ir que ni forman parte habi- t ualment e de los programas de f ormación de los logopedas ni son f áciles de adquirir si no se cuent a con supervisores o formadores. Por ot ra parte, el t rabajo del logopeda se desarro- l la a menudo en condiciones inst it ucionales, t ant o públicas como privadas, que no siempre le permiten disponer de espacios y t iempos necesarios para la rea- lización de este t ipo de intervención. ¿Cuántos logo- pedas que t rabajan en escuelas disponen de t iempo para intervenir de manera cont inuada con los padres? ¿Con cuánt a f recuencia se prevee que las sesiones del logopeda y del niño incluyan horas y equipa- miento para el análisis de vídeos, para ent revistas con padres o maest ros e incluso para desplazamientos al domicilio o al aula? El resultado de estas carencias es que se puede lle- gar a susbt ituir la intervención naturalista medidada por unas cuantas conversaciones semiinformales con los padres o maest ros del niño, quizás alguna sesión de observación de sus formas de relacionarse y f inal- mente algún consejo general del t ipo: «conviene que presten más atención al niño cuando intente comuni- carse», «intente repet ir lo que le diga el niño», «pro- cure entenderle cuando hable», et c. Las administ ra- ciones por su part e pueden l legar a creer que est e t ipo de int ervención es un remedio a la f alt a sist e- mát ica de personal especializado para ayudar a los alumnos con dif icult ades de lenguaje; ent onces puede darse el caso de que se anime a maest ros sobrecargados de t rabajo a que apliquen en el aula vagos principios naturalist as sin haber recibido una formación previa. El efecto de estas actuaciones pro- bablement e será mínimo aunque no nulo, pero en nada se parecerá a los resultados que se obt ienen con una correcta implementación de los procedimientos de int ervención nat ural ist a l levada a cabo por un expert o o por los maest ros, pero después de recibir formación práct ica suf iciente. La pregunt a que se plant ea a cont inuación es: ¿Por qué a veces ocurre est o? ¿Qué ha pasado para que a menudo se malinterpret ren y usen inadecuada- ment e los procedimient os nat ural ist as? En primer lugar, hay pocas publicaciones, invest igaciones y t ra- dición al respect o y, en consecuencia, exist e una ciert a carencia de f ormación adecuada t eórica y sobre todo práct ica. Así mismo, puede ser que inf luya tanto la ausencia de condiciones adecuadas de espa- cio y t iempo para t rabajar de est e modo como las resist encias esperables por part e de t rabajadores e inst it uciones a la int roducción de cambios drást icos en la metodología de t rabajo. Saber y saber hacer La f ormación t eórica necesaria para apl icar correctamente los procedimientos naturalistas, desde mi punt o de vist a, al menos t endría que incluir los aspect os que se cit an a cont inuación. Conocimien- tos sobre la teoría general del desarrollo del lenguaje basada en Vigotsky y que encont ramos adaptada en Bruner, por ejemplo. Conocimient os act ual izados sobre los mecanismos y procesos naturales de inter- acción que impulsan el desarrollo del lenguaje en el niño pequeño. Estos conocimientos se pueden encon- t rar resumidos, en cast ellano, en la obra de Gart on, 1994. Son saberes que aportan la psicología evolut iva y la psicol ingüíst ica del desarrol lo y que incluyen también aspectos relat ivos a las teorías del andamiaje aplicadas a la opt imización del desarrollo y a la facili- t ación del aprendizaje de la comunicación y del len- guaje. Por últ imo, habría que profundizar en t rabajos clínicos y de invest igación de dif erent es aut ores, t ant o nacionales como ext ranjeros, que han usado con éxit o la int ervención nat ural ist a en dif erent es contextos, edades y patologías. La preparación práct ica que es, con mucho, la más importante y dif ícil de obtener requeriría, al menos, aprender técnicas de ent revistas colaborat ivas/forma- t ivas con padres y colegas; aprender a t ranscribir secuencias int eract ivas y a evaluar int ercambios comunicat ivos en cuanto al valor que t ienen para el desarrollo del lenguaje infant il; part icipar en el análi- sis de casos práct icos pref erent ement e f i lmados; observar int ervenciones nat ural ist as in si t u ; saber planif icar int ervenciones y sesiones y pasar por un período suf iciente de práct ica guiada o supervisada. Las inst it uciones académicas y la administ ración son quienes pueden facilitar la formación y las condi- ciones de t rabajo adecuadas de los profesionales que 144 25 R ev L o g o p F o n A u d io l 2 0 0 6 , V o l. 2 6 , N o . 3 , 1 3 9 -1 4 5 CONSIDERACIONES SOBRE EL USO DE LOS PROCEDIMIENTOS NATURALISTAS PARA LA INTERVENCIÓN EN LOGOPEDIADEL RIO deseen, o t engan el encargo, de ut il izar las t écnicas de intervención naturalista para que éstas cont ribu- yan, con t odo su pot encial, a mejorar la vida de las familias de los niños y de los propios niños que nece- sitan ayuda para desarrollar la comunicación y el len- guaje correctamente. Conclusión La aplicación de procedimient os de t ipo nat ura- l ist a en logopedia ha abier t o unas posibi l idades para la int ervención esperanzadoras y ef icaces en det erminados casos, como la int ervención precoz o el t rabajo con padres o maest ros. Su uso no es incompat ible con ot ros est ilos de int ervención pero sí requiere cambios en las f ormas t radicionales de hacer. Los logopedas que se animen a emplear est as nuevas t écnicas deberán incorporar no sólo nue- vos conocimient os t eóricos sino sobre t odo nuevas compet encias prof esionales que se adquieren cuando se pasa por un período de f ormación prác- t ica, observando y anal izando su apl icación y a la vez pract icando bajo supervisión. No puede con- f undirse la int ervención nat ural ist a con el espon- t aneismo: los procedimient os nat ural ist as exigen plani f icación y sist emat ización y son ef icaces cuando se pueden emplear de f orma int ensiva. Además, su uso requiere a veces disponer de nuevos espacios y de una ciert a f lexibi l idad de horarios y disponibilidad para los encuent ros cont inuados con padres y coordinación con colegas. Bibliograf ía Aimard, P. y Abadie, C. (1992). Intervención precoz en los t ras- tornos de comunicación en el niño. 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