Vista previa del material en texto
mayor, tienen un aspecto de dientes de sierra insertándose en las costillas e interdigitándose con el oblicuo externo del abdomen (fig. 4-28). Las costillas inferiores y los arcos costales a menudo son evidentes, en especial cuando los músculos abdominales están contraídos. La musculatura intercostal no suele observarse normalmente; no obstante, en algún caso (raramente) en que hay ausencia o atrofia de la musculatura intercostal, los espacios intercostales se hacen evidentes con la respiración: durante la inspiración, son cóncavos y durante la espiración protruyen. FIGURA 4-28. Anatomía de superficie de la musculatura de la pared torácica. Las mamas femeninas tienen un tamaño, una forma y una simetría variables — incluso en una misma mujer. Sus superficies anteriores aplanadas no muestran una demarcación clara con la superficie anterior de la pared torácica, pero sus bordes están bien definidos lateralmente e inferiormente (fig. 4-29). A menudo es visible un patrón venoso sobre las mamas, sobre todo durante el embarazo. 622 https://booksmedicos.org https://booksmedicos.org booksmedicos.org Push Button0: