Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
De estrato en estrato By: Daniela Alejandra Gutiérrez La morfología lexical, si bien es una propuesta que tiene bastante tiempo, ha sido innovadora y desafiante frente a la morfología estructuralista convencional, amplía el espectro de análisis tomando como eje central la palabra en sí misma y dejando en un segundo plano los morfemas. Esta teoría de análisis resuelve algunos de los puntos que la morfología estructural no abarca de manera precisa o en los que simplemente falla por su manera de analizarlos. La morfología estructuralista, con su sistema uno a uno (un morfo pertenece a un morfema) es bastante útil a la hora de analizar lenguas aglutinantes como el suajili e incluso en parte a las lenguas analíticas como el chino mandarín. Sin embargo en el caso de lenguas fusionales y en parte de las lenguas analíticas este se queda corto, ya que la relación puede ser uno a muchos y muchos a uno (varios morfemas ligados a un morfo y varios morfos ligados a un morfema). La morfología léxica plantea un modelo que permite abordar de manera más clara el proceso de formación de palabras en lenguas fusionales a través de una explicación por estratos. Sin embargo, resulta curioso que este modelo se haya construido desde una lengua analítica como el inglés. ¿Es este modelo apropiado para aplicarse a otras lenguas? ¿Qué tan productivo puede llegar a ser? Se han encontrado diferentes inconsistencias en la aplicación de este modelo, las cuales abordaremos en el presente ensayo. A pesar de que el modelo no es perfecto, resulta bastante útil y aporta herramientas valiosas para el análisis morfológico. Para comenzar, abordaremos dos críticas bastante similares. En primer lugar, se cuestiona que los estratos no siempre parecen estar determinados por los afijos, sino más bien por el comportamiento de las raíces. En segundo lugar, se plantea la idea de que los afijos no siempre pertenecen de manera inequívoca a un solo estrato. Es importante recordar que el modelo está estructurado en dos estratos lexical y uno post lexical, cada uno cumpliendo una función específica. El primer estrato permite generar cambios en la raíz a través de flexiones o derivaciones (como monoptongación, diptongación, alternancia de raíz, epéntesis, entre otros). El segundo estrato, por otro lado, da lugar a flexiones o derivaciones donde no se genera un cambio en la raíz. Por último, el tercer estrato se refiere a los procesos fonológicos y prosódicos a los que se ven expuestas las palabras formadas. Para abordar estas dos críticas me gustaría traer a colación un cuantos ejemplo Como podemos observar, al agregar el sufijo [-ura] a la raíz [tern], se produce una monoptongación, lo que indica que es una derivación de estrato 1. Sin embargo, al añadirlo a la raíz [fresc], no hay variación en la raíz, lo que la convierte en una derivación de estrato 2. En este caso, el sufijo [-ura] no se puede asignar claramente a ninguno de los dos estratos. Parece haber una relación entre la maleabilidad de la raíz y ciertos morfemas, pero no con todos. Por otro lado también existe la crítica de que las reglas fonológicas de nivel lexical se aplican a más de un estrato. Si bien es cierto que es un proceso lineal paso a paso, se debe tener en cuenta que las palabras están constantemente en un proceso de purificación en la prosodia de las mismas, incluso en procesos sintácticos como en el francés.
Compartir