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UNIVERSIDAD NACIONAL DE TRUJILLO ESCUELA DE POST GRADO PROGRAMA DE DOCTORADO EN ADMINISTRACIÓN “LIDERAZGO Y SATISFACCIÓN LABORAL EN LA FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES FINANCIERAS Y ADMINISTRATIVAS DE LA UNIVERSIDAD CATÓLICA LOS ANGELES DE CHIMBOTE – 2014” TESIS PARA OPTAR EL GRADO ACADÉMICO DE DOCTORA EN ADMINISTRACIÓN Autora: Mg. María Isabel Mino Asencio Asesor: Dr. Víctor Julio Zavaleta León Trujillo – Perú 2016 N° Registro……... ii JURADO DICTAMINADOR _______________________________ Dr. José Castañeda Meléndez PRESIDENTE _______________________________ Dr. Carlos Alberto Franco Cornelio SECRETARIO _______________________________ Dr. Víctor Julio Zavaleta León MIEMBRO iii DEDICATORIA A Dios, ser divino que ilumina siempre mi camino. A mis padres Pedro e Isabel, por su dedicación constante y sabios consejos para seguir adelante en mi vida personal y profesional. iv AGRADECIMIENTO Particular agradecimiento a mi asesor Dr. Víctor Zavaleta León por el apoyo brindado a la investigación. Asimismo, al Dr. Roberto Quispe Mendoza por su apoyo incondicional. Agradecer a ULADECH Católica Los Ángeles de Chimbote representada por el señor Rector Dr. Julio Domínguez Granda quien brindó todo su apoyo para lograr este anhelado objetivo. v INDICE JURADO DICTAMINADOR ii DEDICATORIA iii AGRADECIMIENTOS iv INDICE v RESUMEN vii ABSTRACT viii I. Introducción 9 1.1. Realidad Problemática 9 1.2. Antecedentes de la Investigación 12 1.3. Justificación 18 1.4. Problema 18 1.5. Marco Teórico 19 1.5.1. Fundamentos de Liderazgo 19 1.5.2. Comportamiento y Estilos de Liderazgo 22 1.5.3. Liderazgo Transformacional y Transaccional 26 1.5.4. Teorías conductuales clásicas del liderazgo 31 1.5.5. Liderazgo y Clima Organizacional 33 1.5.6. Liderazgo y Satisfacción Laboral 37 1.5.7. Marco Filosófico 43 1.5.8. Marco Sociológico 56 1.5.9. Marco Pedagógico 59 1.6. Hipótesis 62 1.7. Objetivos 63 1.7.1. Objetivo General 63 1.7.2. Objetivos específicos 63 II. Material y Métodos 64 2.1. Objeto de estudio 64 2.2. Población 64 2.3. Muestra 64 2.4. Diseño de la Investigación 65 2.5. Métodos y técnicas de Procedimientos 66 2.5.1 Métodos 66 2.5.2 Técnicas e instrumentos de recolección de datos 66 2.5.3 Procedimientos 71 2.5.4 Variables 72 2.5.5 Operacionalización de las variables 72 vi III. Resultados 73 IV. Discusión 78 V. Conclusiones 81 VI. Recomendaciones 82 VII. Referencias bibliográficas 83 Anexos 90 vii RESUMEN Al ejercer liderazgo, las personas adoptan “estilos”, que probablemente puedan tener cierta influencia en la Satisfacción Laboral de los trabajadores, lo que puede incidir en el trabajo que desempeñan, por lo que esta investigación tuvo como objetivo determinar la relación entre el liderazgo y la satisfacción laboral del personal administrativo y docente de la Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica los Ángeles de Chimbote. Para lo que se aplicó a una muestra de 30, entre docentes administrativos y directivos de la Facultad, cuya población fue de 91, una encuesta que consta de tres partes entre datos generales, evaluación de los estilos de liderazgo y evaluación de la satisfacción laboral del personal de la Facultad. Se obtuvo los siguientes resultados: que los Estilos de liderazgo predominante son el Transaccional y Transformacional; la satisfacción laboral global del personal docente y administrativo es alta, sin dejar de tener en consideración que dentro de los factores extrínsecos los ítems referentes al horario de trabajo y remuneración han mostrado una satisfacción baja y que existe una correlación alta entre el liderazgo y la satisfacción laboral del personal docente y administrativo de la Facultad de Ciencias Contables, Financieras y Administrativas de la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote. Palabras Clave: Liderazgo, Satisfacción laboral viii ABSTRACT In exercising leadership, people adopt "styles" which are likely to have some influence on the job satisfaction of workers, which may affect the work they do, so this research was to determine the relationship between leadership and job satisfaction administrative and teaching staff of the Faculty of administrative and Financial Accounting Sciences of the Catholic University Angels of Chimbote. For what was applied to a sample of 30, including administrative teachers and directors of the Faculty, whose population was 91, a survey has three parts between general data, evaluation of leadership styles and evaluation of job satisfaction Faculty staff. The following results were obtained: the predominant leadership styles are Transformational and Transactional ; the overall job satisfaction of faculty and staff is high, while taking into consideration that within the extrinsic factors the items relating to working hours and remuneration have shown low satisfaction and that there is a high correlation between leadership and satisfaction work of the faculty and staff of the Faculty of Accounting, Finance and administration of the Catholic University Los Angeles of Chimbote . Key Words:Leadership, job satisfaction 9 I. INTRODUCCIÓN 1.1. Realidad problemática: La Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote en su sede central cuenta con 72 personal docente y 19 personal administrativo que dirigen los destinos y la marcha académica e institucional de las carreras de Contabilidad, Administración y Administración Turística. La presente investigación está centrada en determinar la relación del liderazgo y los estilos de liderazgo que prevalecen en la organización de la Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote y relacionar esta variable con la satisfacción laboral que puedan experimentar los trabajadores tanto docentes como administrativos de esta facultad. Esta es una investigación ayudará a reconocer y potenciar a los líderes, a partir del conocimiento del nivel de desarrollo de sus habilidades de liderazgo en el ejercicio de la dirección. Asimismo el personal administrativo y docente de la facultad y demás facultades por ende toda la Universidad podrán desarrollar el trabajo con mayor motivación y armonía, logrando una satisfacción independientemente de la diferencia entre los caracteres de sus miembros. La elección de un estilo de liderazgo en particular podría ser un factor de gran relevancia en el aumento de la Satisfacción Laboral de los http://www.monografias.com/trabajos11/norma/norma.shtml http://www.monografias.com/trabajos/epistemologia2/epistemologia2.shtml http://www.monografias.com/trabajos15/direccion/direccion.shtml http://www.monografias.com/trabajos/fintrabajo/fintrabajo.shtml http://www.monografias.com/trabajos28/saber-motivar/saber-motivar.shtml 10 seguidores, de manera que cada uno de ellos pueda lograr el máximo desarrollo posible de sus habilidades intrínsecas, alcanzando así una alta eficiencia para ellos mismos y para su equipo. Tanto a nivel local como nacional existe un bajo nivel de información con respecto a Satisfacción Laboral tanto de los docentes como de los trabajadores administrativos de las universidades y su relación con los estilos de liderazgo, sin embargo, hay literatura limitada en áreas relacionadas con el estilo de liderazgo de gerente de personal de las universidades. Motivo que brinda una excelente oportunidad para generar conocimientos científicos actuales, que se traduzcan en un incentivo para el sector educativo de formar profesionales de líderes, capaces de enfrentar de manera óptima los nuevos desafíos que impone el medio, ratificando nuestra autonomía como profesionales. Y a nivel empresarial es de vital importancia que estos gocen, entre otras cosas, de buena satisfacción laboral, ya que su carencia contribuye al aumento de factores adversos, que implican consecuencias costosas para la empresa, los cuales se podrían ver reducidos si los líderes de la organización favorecen la satisfacción en el trabajo a través de una adecuada organización y gestión. Por tanto, influirá en la Satisfacción Laboral el estilo de liderazgo percibido por los trabajadores de la Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica los Ángeles de Chimbote, probablemente, en la medida en que cada estilo sea ejercido o no, acorde a la situación, el nivel de satisfacción laboral se verá afectado, 11 premisa bajo la cual se instala el propósito central de esta investigación. De esta forma, al relacionar el estilo utilizado por los líderes de la facultad y la satisfacción de los seguidores respecto a su trabajo, probablemente se pondrán de manifiesto una serie de antecedentes y/o estrategias que permitan la creación de un buen clima laboral, en el cual prime la comunicación y coordinación entre puestos jerárquicos y el personal docente y administrativo, el cumplimento de objetivos, metas y resultados esperados al tener equipos satisfechos, la identificación de metodologías y planes que fomenten la confianza del grupo, el desarrollo de las capacidades del personal de trabajo, la valoración del profesional como miembro importante del equipo multidisciplinar, así como también su participación activa en todas las áreas de desempeño profesional. Mantener niveles altos de satisfacción laboral permite mejorar los procesos, fomenta el trabajo en equipo, aumenta la calidad de la atención a los estudiantes y el rendimiento de su productividad, así como la satisfacción de los usuarios internos y externos. 12 1.2. Antecedentes de la Investigación De acuerdo con Ahumada (2004), el contexto en el que se insertan las organizaciones durante las últimas décadas, se ha caracterizado por cambios discontinuos e impredecibles y la consiguiente incertidumbre organizacional. Por lo tanto, aquellas deberían amoldarse a los nuevos y acelerados cambios si quieren sobrevivir en la economía global. Ésta evidente e incesante adaptación de las empresas a su ambiente y el innegable hecho que acusa que deban competir con otras es un aspecto que hace que el tema del liderazgo preocupe cada vez más a la teoría y práctica organizacional, dado que del buen ejercicio de éste se obtendrían mejores indicadores de eficacia y competitividad, además de constituirse en "uno de los elementos más representativos de la dinámica que caracteriza el ser y el quehacer organizacional actual". Es así que, como resultado de esto, las empresas parecen haber centrado su atención en el liderazgo como una ventaja competitiva. En relación con lo expuesto, existe un acuerdo generalizado que establece que el éxito o fracaso de cualquier organización dependerá, en buena medida, de la calidad de sus líderes. Martínez (2009). Por tanto, no es una sorpresa que, en el mundo empresarial de hoy, se invierta una importante parte del presupuesto anual en la formación de directivos con la finalidad que se conviertan en auténticos líderes de sus seguidores. 13 En la tesis de Vega V., Carolina; Gloria Zavala (2004) definen Liderazgo como “el proceso de influencia que un individuo ejerce sobre otro individuo o grupo, para lograr el alcance de objetivos en una determinada situación”. En este mismo trabajo se cita a una investigación llevada a cabo en 1948, por Stogdill, ampliada y revisada 25 años más tarde, dónde se demuestra que no existe un grupo de características que definan universalmente el liderazgo. En 1974 el mismo autor concluyó que las características y habilidades que requiere el liderazgo vienen determinadas por una situación específica. Consciente o inconscientemente, el liderazgo se lleva a la práctica de maneras diferentes, dependiendo de la situación, de la disposición de los poderdantes y según las características propias del mismo líder, adoptando “Estilos de Liderazgo”. El ejercicio del liderazgo, a pesar de ser complejo, es inherente a la organización del trabajo y repercute en la articulación de los equipos. Al efectuar su función, un líder debe acercarse a un estilo en particular y entre estos destacan, según el modelo de Blanchard y Hersey (1998), el director, entrenador, participativo/soportativo y delegador. Con esto se debe entender que el modelo o estilo adoptado define la eficacia del líder en función de su capacidad para utilizar cada uno de los estilos de acuerdo con la situación de los colaboradores. No existe un estilo de liderazgo que sea siempre correcto de utilizar en todas las situaciones, por tanto, el líder más eficaz será aquel que demuestre una mayor flexibilidad de estilo y que utilice el estilo adecuado con la 14 persona adecuada. Según Hersey et al. (1998), a cada nivel de preparación le correspondería un estilo de liderazgo en concreto. El modelo de Hersey y Blanchard ha contribuido a que profesionales y consultoresde todo el mundo prestaran una mayor atención al concepto “situación”. El Modelo de Liderazgo Situacional comprende y explica la interacción existente entre las dimensiones de comportamiento de tarea y de relación junto con el nivel de madurez o preparación de los seguidores a la hora de desempeñar un rol u objetivo, es decir, incluye tres componentes básicos, dentro de los que se encuentra una “descripción de las situaciones alternativas que podrían encontrar los lideres, una serie de posibles estilos de liderazgo y recomendaciones sobre que estilo de liderazgo es más apropiado adoptar en determinadas circunstancias”. Es indispensable para el ejercicio del liderazgo contar con seguidores de personas sobre las cuales ejercer influencia para conseguir objetivos comunes. En este sentido podemos decir que la esencia del liderazgo son los seguidores, lo que hace que una persona sea líder es la disposición de la gente a seguirla. Ahora bien, según Galaz (2002), liderazgo se entiende como la "capacidad de influir en un grupo para que consiga sus metas", pero independientemente de la conceptualización de éste el tema del liderazgo es uno de los que más investigación ha generado en el ámbito de la psicología social de las organizaciones, debido a su 15 consideración como factor significativo en el funcionamiento y éxito de las empresas. Por otra parte, son muchos los autores que han proporcionado una perspectiva sobre el tema, especialmente en relación a la capacidad de poder distinguir, por una parte, a los líderes de los que no lo son y, por otra, a los líderes eficaces de los ineficaces. En este sentido, una de las tipologías más aceptadas al respecto es clasificar al liderazgo en transformacional y transaccional, que dada la relevancia que revisten para esta investigación serán tratadas con mayor detalle más adelante. Además, de la variable Satisfacción laboral podemos decir que es una actitud y que, si bien se han propuesto diferentes definiciones, buena parte de ellas han puesto el énfasis en el componente afectivo de las actitudes (se refiere a las emociones o sentimientos que suscita el objeto actitudinal), sin considerar como se debería, los elementos cognitivos (creencias sobre las características positivas o negativas del objeto actitudinal) y conductuales (alude a las conductas o experiencias pasadas relacionadas con el objeto de actitud). Alargunsoro (2012) A decir por Galaz (2002), La satisfacción laboral es el clásico indicador al que se recurre cuando se desea conocer la actitud general de las personas hacia su vida laboral. Su carencia contribuye al aumento de 16 factores adversos que implican consecuencias costosas para la empresa. Al ejercer liderazgo, las personas adoptan “estilos”, que probablemente puedan tener cierta influencia en la Satisfacción Laboral de los trabajadores, lo que puede incidir en el trabajo que desempeñan. Por esta razón, es que en los últimos años se ha propuesto una redefinición que trata de estudiar esta actitud de una manera más comprehensiva, vale decir, considerando el componente cognitivo, ya que parece lógico tener en cuenta que la satisfacción laboral depende de lo que las personas sienten y piensan con respecto a su trabajo. Desde esta perspectiva, se conceptualiza como "un estado interno que es expresado, por la evaluación afectiva y/o cognitiva de las experiencias de trabajo, de manera favorable o desfavorable". El grado de satisfacción puede afectar la cantidad y calidad del trabajo que desempeñan los sujetos, e incidir en la baja calidad de la prestación, ausentismo laboral, propensión a abandonar la organización, entre otros. Muchinsky (2009). La satisfacción laboral es un aspecto que ha sido ampliamente estudiado desde que Hoppock, ya en el año 1935, publicó la primera investigación que, hacía un análisis profundo de la satisfacción laboral, determinando que existen múltiples factores que podrían ejercer influencia sobre la satisfacción laboral como: fatiga, monotonía, condiciones de trabajo y supervisión. La satisfacción laboral se define como el “grado de placer 17 que el empleado obtiene de su trabajo” Muchinsky (2009). En la atención de los servicios educativos ha aumentado en importancia, e incluso se podría decir que al determinar si los profesionales se encuentran o no satisfechos, se está midiendo la calidad de la organización y de sus servicios internos Marriner (2009). A partir de lo anterior, la satisfacción laboral se entiende como un factor determinante de la calidad de la atención, y un estado emocional positivo o placentero de la percepción subjetiva de las experiencias laborales del sujeto, en el que inciden las circunstancias y características de la labor que se desempeña, y las individualidades de cada trabajador, condicionando la respuesta afectiva de este hacia diferentes aspectos del trabajo. Para un individuo, trabajar significa tener un propósito, expresarse y sentirse satisfecho de contribuir a la sociedad. A raíz de la estrecha relación que existe entre la satisfacción laboral y la productividad, existe un interés creciente en los administradores por mejorar la calidad de vida en el trabajo, especialmente en los profesionales de las universidades, tanto personal docente como administrativo y de servicio pues ellos deben velar por la educación de quienes están a su cargo, y entregar una atención de buena calidad. Las intervenciones destinadas a mejorar la práctica diaria del personal de la Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote debe centrarse en la carga de trabajo, expectativas personales de los trabajadores y satisfacción en el trabajo. Una de las 18 definiciones más usuales y generales de satisfacción en el trabajo, que incluye componentes cognoscitivos y afectivos es la siguiente: “Un estado emocional agradable o positivo que es el resultado de la valoración del trabajo personal o la experiencia que brinda el trabajo” Gonzales (2013). Tiene lugar cuando, en virtud de estar involucrado en ciertas actividades dentro de un ambiente de trabajo particular, las necesidades específicas de un individuo son satisfechas. 1.3. Justificación Es de gran importancia la investigación de este trabajo porque nos permite determinar la relación que existe entre el Liderazgo y la Satisfacción Laboral, porque a través de este estudio va a permitir que a otros investigadores les sirva como guía en su investigación; así mismo, sea de utilidad para los estudiantes de pregrado y posgrado en sus futuras investigaciones y porque no decirlo a nivel de la sociedad civil toda vez que exige calidad de servicio fundamental para su satisfacción en las organizaciones de hoy que desean ser competitivas. 1.4. Problema ¿Existe relación entre el liderazgo y la satisfacción laboral del personal administrativo y docente de la Facultad de Ciencias Contables Financieras y Administrativas de la Universidad Católica los Ángeles de Chimbote – Chimbote. 2014? 19 1.5. Marco Teórico Liderazgo es una palabra que se utiliza en casi todas las organizaciones y en la sociedad misma, sin embargo, no siempre se tiene el pleno conocimiento de lo que significa. 1.5.1. Fundamentos liderazgo: Martínez (2009), en su obra Liderazgo describe a cuatro fundamentos del verdadero liderazgo: 1. Conciencia: Significa Co-conocimiento o conocimiento con uno mismo, es la capacidad que tiene la persona de mirarse a sí mismo y ver lo que está bien y lo que está mal, en el líder se alimenta a través de la sabiduría universal que se encuentra en la buena literatura, algunas recomendaciones son: La Biblia, Voltaire, Cervantes, Pablo Coelho, Miguel Angel Cornejo, Deepack Chopra, Jonh Maxwell y Stephen Covey quien dice: “Escucha tuconciencia para encontrar algo que realmente debas hacer”. Definitivamente el fin no justifica los medios, es la conciencia la que permite hacer lo correcto. 2. Creatividad: Es la capacidad que tiene el líder para soñar y construir su visión, Covey lo llama “Comenzar con un fin en mente “, Joel Barker lo llama “El poder de una Visión”, esa http://www.gestiopolis.com/administracion-estrategia/cuatro-fundamentos-del-liderazgo.htm#mas-autor 20 capacidad de imaginar de ver el sueño como si ya lo hubiese conseguido: Un ejemplo estupendo de lograr sueños es la obra de Disney con su poder de visionar todo lo que representa en la actualidad. Walt Disney murió antes de ser inaugurado su primer parque en el Estado de Florida, el discurso de apertura lo hizo su hermano, alguien se le acercó y le dijo “Que lastima que Walt nunca vio su parque terminado, a lo que el hermano respondió: “¿Quien dijo que no lo vio? “. Pablo Coelho cita en varias de sus obras: “cuando deseas algo, el universo conspira para que lo logres". 3. Voluntad: Se define como la capacidad de llevar a cabo acciones contrarias a nuestras tendencias inmediatas en un momento dado, es vital para poder conseguir nuestros sueños, es solo con voluntad que podemos alcanzar nuestros objetivos. Covey afirma: “Comienza poco a poco, haz una promesa y mantenla”. Después da un paso más, haz una promesa mayor y mantenla. Con el tiempo descubrirás que tu sentido del honor es superior a tu disposición hacia la acción, esto aumentará tu nivel de confianza y motivación, te hará moverte a otras facetas en las que necesites hacer mejoras. 21 Esto también tiene que ver con aprender de los errores y ver en cada fracaso una oportunidad. El ejemplo más usado de voluntad es el de Thomas Alva Edison es considerado el más grande inventor de todos los tiempos y cuyos fracasos lo llevaron al éxito. John Maxwell en su libro el lado positivo del fracaso cuenta: “He aprendido a hacer del fracaso un amigo". 4. Amor Incondicional: El verdadero líder desarrolla amor incondicional, hace el bien porque desea hacerlo y sirve a los demás con verdadera vocación, sin esperar recompensa, esto contrariamente a lo que se piensa lo llena de felicidad y pasión para hacer las cosas, al respecto Miguel Ángel Cornejo expresa: “Trata a cada persona como es, un ser singular e irrepetible". En su libro: La Paradoja el Dr. James Hunter, explica que amar tiene que ver con identificar y satisfacer las necesidades legítimas de los liderados. De esta forma estamos sirviendo e incluso sacrificándonos por ellos, forjando nuestra autoridad o influencia y ganándonos así el papel de líderes. La gran paradoja es: para que te sigan debes servir. 22 1.5.2. Comportamiento y Estilos de Liderazgo Dicho por Siliceo (2001), En los años 40, las investigaciones sobre liderazgo se centraron en la teoría de comportamiento, que parte de lo que dicen y hacen los líderes, los investigadores trataron de identificar las diferencias entre el comportamiento de líderes eficaces e ineficaces, su meta; encontrar el mejor estilo: desafortunadamente no se identificaron comportamientos que se asociaran de manera constante con la eficacia en el liderazgo. El mejor indicador de conservación de empleados es la relación entre jefe y subordinado. Los empleados que sostienen una mala relación con su superior suelen renunciar con mayor frecuencia. Este lazo se finca en los rasgos de personalidad y las actitudes de liderazgo de los jefes influyen en forma directa en su comportamiento con el empleado. Dirigir con el ejemplo es importante para los administradores, como dijera Albert Einstein: "Poner la pauta no es el medio más importante de influir en los demás, es el único". La dirección con el ejemplo es algo que ocurre cuando los seguidores observan e imitan el comportamiento del líder, y el proceder de este se basa en sus rasgos. Por tanto, los rasgos y 23 el comportamiento van de la mano, o mejor, la teoría del liderazgo influye en la teoría conductual. El estilo de liderazgo, Pascale (2008), es la combinación de rasgos, destrezas y comportamiento a los que recurren los líderes al interactuar con los seguidores. Aunque un estilo de liderazgo se compone de rasgos y destreza, el elemento fundamental es el comportamiento, pues es el patrón de conducta relativamente constante que caracteriza al líder. Mackenzei y col (2001) encontró en su investigación que Kurt Lewin y sus colaboradores realizaron estudios en la Universidad Estatal de Iowa enfocados al estilo de liderazgo de los administradores e identificaron dos básicos: 1. Estilo de liderazgo autocrático: El líder autocrático toma decisiones, informa a los empleados lo que deben hacer y los supervisa muy de cerca. 2. Estilo de liderazgo democrático: El líder democrático alienta su participación en las decisiones, trabaja con los empleados para determinar lo que hay que hacer y no supervisa a los empleados estrechamente. Los estudios de Iowa contribuyeron al movimiento conductista y dieron pie a un periodo de investigación sobre el comportamiento más que de los rasgos. Con el cambio de 24 paradigma de la administración al liderazgo, el estilo de dirección de los administradores efectivos ya no es necesariamente autocrático, sino más bien democrático y liberal. El centro de investigaciones de la Universidad de Michigan, Gillespie (2000), realizó estudios para determinar la eficacia en el liderazgo. Los investigadores crearon un cuestionario denominado "Sondeo Organizacional" y llevaron a cabo entrevistas para recabar datos sobre los estilos de liderazgos. Sus objetivos fueron: 1. Clasificar a los líderes en efectivos e inefectivos en función del comportamiento de jefes de unidades con una producción elevada o baja; 2. Determinar las razones del buen liderazgo. Los investigadores identificaron dos estilos de comportamiento de los líderes, uno que denominaron centrado en el trabajo y otro, centrado en los empleados. a) Estilo de liderazgo centrado en el trabajo. Cuenta con escalas para medir dos comportamientos dirigidos al trabajo y pone en énfasis en los objetivos en las facilidades 25 laborales. Su éxito depende del grado de responsabilidad que asume líder para hacer que el trabajo se lleve a cabo. b) Estilo de liderazgo centrado en los empleados. Posee las escalas para medir dos clases de comportamiento orientados a los trabajadores en los que se destaca un liderazgo de apoyo y facilidades de interacción. Este estilo demanda un cierto grado de concentración del líder en la satisfacción de las necesidades de los empleados y al mismo tiempo fomenta las relaciones interpersonales. El líder se muestra sensible a los subordinados y se comunica con ellos para cultivar la confianza, el apoyo y el respeto, y al mismo tiempo busca su beneficio. El consejo de investigación de Gestión personal de la universidad estatal de Ohio, Newstrom (1991), bajo la dirección de Ralph Stogdill, inicio un estudio para determinar cuáles son los estilos de liderazgo eficaces. Los encuestados percibieron el comportamiento de sus líderes hacia ellos en dos dimensiones o estilos de liderazgo distintos, que los investigadores llamaron estructura inicial y consideración. a) Estructura inicial. Este estilo de liderazgo es, en esencia, sinónimo del estilo centrado en el trabajo; pues se enfoca en hacer que la tarea se cumpla. 26 b) Consideración. Este estilo de liderazgo es idéntico al estilo de liderazgo centrado en los empleados, pues procura satisfacer las necesidades de los individuos y fomentar las relaciones interpersonales. En virtud de que el líder puede contar con una estructura inicial y /o consideración elevadas o bajas, se concibieron cuatro estilos deliderazgo. El modelo de liderazgo de la Universidad Estatal de Ohio identifica cuatro estilos de liderazgo: 1. De estructura baja y consideración elevada 2. De estructura y consideración elevadas 3. De estructura y de consideración bajas 4. De estructura elevada y consideración baja. 1.5.3. Liderazgo Transformacional y Transaccional No es un tema menor resaltar que, en los últimos 20 años, ambos constructos han generado y acumulado un substancial cuerpo de investigaciones, Fabiane (2013:13), siendo el estilo transformacional uno de los que más apoyo empírico ha recibido, Locke (1987), además de influenciar la literatura existente sobre liderazgo. Asimismo, existen otros estudios, Chiang (2008), que han encontrado que éste es un fuerte 27 predictor de índices de rendimiento tanto individual como organizacional. Ahora bien, es Burns (1978). Quien hace la distinción e introduce ambos conceptos en su abordaje del liderazgo político. Para éste, la diferencia entre un estilo transaccional y uno transformacional radica en lo que los líderes y seguidores ofrecen uno a otro. Los líderes transformacionales ofrecen un propósito que trasciende las metas a corto plazo y se enfoca en necesidades internas de orden mayor. En contraste, los líderes transaccionales se focalizan en el adecuado intercambio de recursos. Es decir, si el líder transformacional provoca que los seguidores se identifiquen con sus necesidades, el transaccional proporciona a los seguidores algo que ellos desean a cambio de algo que el líder quiere. A su vez, Bass (1985) utiliza la conceptualización de Burns (1978) para erigir su teoría de liderazgo transformacional, pero con diversas modificaciones y elaboraciones. En primer lugar, Bass no concuerda con Burns respecto que los dos estilos de liderazgo mencionados representen los extremos de un continuo (en el que, si un líder tenía estrategias transformacionales altas, se esperaba que las otras conductas fuesen bajas), argumentando que éstos son conceptos independientes y que los mejores líderes conjugan los dos. En 28 segundo lugar, Bass elaboró su desarrollo teórico sobre la base de los comportamientos manifiestos que se evidenciaban en ambos tipos de liderazgo, identificando ocho dimensiones, de las cuales tres corresponden a la orientación transaccional, cuatro a la transformacional y una dimensión de no liderazgo (laissez faire). El liderazgo transformacional, tal como se menciona arriba, consta de cuatro dimensiones. Carisma o influencia idealizada es el grado en que el líder enfatiza la confianza, toma una posición en momentos y aspectos complicados, resalta la importancia y propósito del compromiso, están conscientes de las consecuencias éticas de sus decisiones y se relacionan con sus seguidores a un nivel emocional. Motivación inspiradora alude al grado en que el líder es capaz de articular una visión atractiva del futuro, desafían a sus seguidores a obtener estándares altos, hablan con entusiasmo, optimismo y motivan y dan significado a lo que es necesario hacer. Estimulación intelectual se caracteriza por el desafío de supuestos, toma de riesgos, petición de ideas a los seguidores; estimulan y animan la creatividad en sus subordinados. Por último, consideración individualizada se refiere al grado en que el líder trata a los demás como individuos; toman en cuenta las necesidades individuales, las capacidades y aspiraciones; escuchan con 29 atención, aconsejan y enseñan. Es necesario resaltar que, extensivas investigaciones han proporcionado apoyo a estos componentes. Por su parte, el estilo transaccional consta de tres tipos de estrategia. Recompensa contingente es el grado en que el líder establece transacciones o intercambios constructivos y positivos con sus seguidores por el esfuerzo realizado, es decir, prometen recompensas por el buen desempeño y reconocen los logros. Por otro lado, administración por excepción originalmente se refiere al grado en que el líder emprende acciones correctivas sobre la base de los resultados de las transacciones con sus seguidores. No obstante, Bass y Hater (1988) reportaron evidencia suficiente para dividir administración por excepción en: Activa y Pasiva. La diferencia entre éstas radica en el tiempo en que el líder decide intervenir. Los líderes activos monitorean el comportamiento del seguidor, anticipan problemas y toman acciones correctivas antes que se creen serios problemas y los intercambios (transacciones) en este tipo de estrategia están diseñados para animar activamente a los seguidores a evitar cometer cualquier error. Los líderes que utilizan una estrategia de administración pasiva esperan hasta que surjan los problemas para recién tomar acciones. 30 Una forma final es el estilo laissez-faire o no liderazgo - denominado por Robbin (2006) Política de no Intervención- que resulta en la ausencia o evitación del liderazgo, vale decir, abdican a sus responsabilidades, son reacios a tomar decisiones, vacilan al tomar acciones y están ausentes cuando se les necesita. Aunque este estilo se parece algo a la administración por excepción pasiva representa la carencia de cualquier liderazgo (transformacional o transaccional), por lo tanto, debería ser tratado separadamente de las otras dimensiones transaccionales. Luego de la delimitación conceptual de los constructos transformacional, transaccional y laissez-faire, Bass (1985) elaboró el primer instrumento para medirlos, el cual denominó Multifactor Leadership Questionaire (MLQ). Siendo éste uno de los instrumentos más utilizados para evaluar liderazgo transformacional. Es necesario agregar que, desde su elaboración ha sido objeto de múltiples estudios y reformulaciones en los cuales se han analizado sus propiedades psicométricas y su estructura factorial. Teniendo en cuenta estos antecedentes es que, para la presente investigación, se utilizó una adaptación del Cuestionario Multifactor de Liderazgo (MLQ) forma 5X. Vega y col (2004) 31 Por otra parte, se han realizado diversas investigaciones para observar la relación que se da entre estos conceptos y variables e indicadores organizacionales. Por ejemplo, se han examinado y establecido los efectos positivos de la estrategia transformacional y transaccional sobre variables como: satisfacción laboral del seguidor y satisfacción con el líder, motivación, rendimiento del líder en el trabajo, rendimiento del grupo u organización y efectividad del líder; también se ha analizado la influencia que tienen sobre clima laboral y productividad, entre otros. Por tanto, se podría establecer que la estrategia transformacional y transaccional son las que actualmente dominan la investigación sobre liderazgo. 1.5.4. Teorías Conductuales Clásicas de Liderazgo Las Teorías Conductuales Clásicas surgen como respuesta, en un principio, a la incapacidad del enfoque de los rasgos -teorías que consideraban que ciertas cualidades y características personales diferenciaban a los líderes de los demás de distinguir a los líderes de los que no lo eran y a los líderes eficaces de los ineficaces. Esta corriente teórico-experimental postula que son las conductas las que distinguen a la persona que es líder. La implicación práctica era que, si este tipo de conductas particulares existían, entonces el liderazgo podría ser enseñado. Newstrom (1991) 32 En términos más específicos, los años ´40 se caracterizaron por la gran importancia concedida al campo del liderazgo. Es así que un grupo de investigadores de la Universidad de Ohio encabezado por personalidades como Stogdill, Shartle y Hemphill (finales de los ´40 aproximadamente), los cuales estaban decepcionados de los resultados de los estudios provenientes del enfoque de rasgos, descubrieron indicadores conductualesde liderazgo efectivo. Aunque tras un largo período más de 1000 categorías comportamentales fueron estudiadas, finalmente terminaron en dos que daban cuenta de la mayor parte de la conducta del líder. Se denominaron Iniciación de Estructura que "se relaciona con el grado en que el supervisor (líder) facilita o define las interacciones del grupo encaminadas a la obtención de la meta". Vale decir, incluyen estándares definidos de ejecución, confirman que los subordinados comprendan órdenes y tareas, que sigan los procedimientos operativos establecidos, asignan tareas concretas y enfatizan el cumplimiento de plazos; y Consideración, que alude al grado en el cual el líder muestra preocupación y respeto por sus seguidores, busca su bienestar y les expresa apreciación y apoyo. Cantera (2013). Las conclusiones de este estudio llevaron a los investigadores a sugerir que, un estilo de liderazgo que marca alto en Consideración y Estructura da lugar a resultados positivos. No 33 obstante, es importante indicar que, hasta el advenimiento de la teoría de liderazgo transformacional estas dos dimensiones dominaron la investigación. Tal como Mintzberg (1999) señaló "Consideración e Iniciación de Estructura han probado estar entre los más robustos conceptos de liderazgo". 1.5.5. Liderazgo y Clima Organizacional En los albores de los años sesenta del pasado siglo, personalidades como Likert y Mc Gregor proponen el concepto de "clima organizacional" (conocido igualmente como clima laboral), debido al interés en estudiar el modo en que los directivos y los responsables organizacionales creaban el clima en el que los subordinados llevaban a cabo sus tareas, la manera en que lo hacían, el grado en que resultaban competentes en su ejecución y su capacidad para que las acciones que llevaban a cabo ejerciesen una influencia positiva y ascendente en el contexto organizacional. En este sentido, es posible notar que ya desde esa época era posible avizorar la profunda relación que se daba entre liderazgo y clima, afectando, incluso, al desempeño de la organización en su totalidad. Ahora bien, se tiene que el concepto de "clima laboral" alude a "los factores ambientales percibidos de manera consciente por 34 las personas que trabajan en las organizaciones, los cuales se encuentran sujetos al control organizacional y que se traducen en normas y pautas de comportamiento". A su vez, Hersey y Johnson (1998) definen clima como: "las percepciones compartidas por los miembros de una organización respecto de las políticas, las prácticas y los procedimientos, tanto formales como informales, propios de ella". Por otra parte, se ha comprobado que los cimientos de un buen clima laboral se relacionan, en términos generales, con el adecuado desempeño de la organización, y más específicamente con los siguientes indicadores, entre otros: conciliación del trabajo con la vida familiar, prestaciones de tipo social, satisfacción en el puesto de trabajo y calidad directiva (liderazgo). En relación a este último, se señala que goza de tal relevancia que, sin duda, es el aspecto que más incide en el clima. En esta misma perspectiva, se indica que el estilo de liderazgo que exhiba la jefatura influirá sobre el clima, y que éste, a su vez, lo hará sobre la creatividad y productividad. Por ejemplo, los líderes transformacionales fomentan relaciones cercanas con sus subordinados, caracterizadas por una pequeña distancia de poder y por la consideración individualizada de las necesidades y capacidades de sus miembros, de manera de ofrecer desafíos y recompensas motivantes. Estas relaciones son 35 sostenidas por valores como la confianza, honestidad, apertura y cuidado mutuo y por la riqueza de la comunicación verbal entre líderes y miembros. Además, los líderes transformacionales comunican una visión a sus subordinados e incrementan el compromiso de éstos con la visión, mediante la calidad de las relaciones interpersonales. La apertura y la cercanía, serían un resultado de éstas y deberían tener un efecto sustancial en el clima percibido. En consecuencia, los planteamientos hechos hasta el momento dejan claro que el liderazgo es, sin duda, una variable que tiene una importante influencia sobre el clima, y que éste correspondería a un conjunto de percepciones compartidas, no obstante, Stogdill y Bass B.(1990) proponen que el clima organizacional sería una representación socialmente construida y compartida de aquellos aspectos del ambiente laboral que informan sobre los roles de comportamiento específicos que son recompensados y apoyados en cualquier organización, en contraste con una observación pasiva de procedimientos formales y prácticas aisladas. Es así que, los indicadores perceptuales más relevantes son: las políticas formales e informales y las prácticas y procedimientos organizacionales. Esta descripción refleja la dirección actual que ha tomado la investigación sobre clima, la cual está asociada más con facetas 36 específicas que con índices globales. Estos indicadores específicos proporcionan medidas convergentes de las percepciones de los empleados, respecto de las políticas, prácticas y procedimientos que son relevantes. Otra investigación llevada a cabo por Berson y Linton (2005) citado por Martínez (2005) en Israel, basados en la evidencia que indicaba la importancia del liderazgo transformacional en contextos de I+D, examinó las relaciones entre estilos de liderazgo - transformacional, refuerzo contingente y administración por excepción- y calidad de clima, entre otros, en contextos I+D y administrativos. Los resultados indican que el liderazgo transformacional en contextos de equipos y unidades de investigación y desarrollo (I+D) explica significativamente la calidad del clima, respecto del componente refuerzo contingente y administración por excepción que no lograron tener significación estadística. Estos hallazgos destacan el impacto extraordinario que tiene el estilo transformacional de los supervisores en este tipo de contextos. Respecto de los ambientes de bajo nivel (administrativos, recursos humanos), el estilo transformacional logró dar cuenta de la calidad del clima, pero en menor grado que el contexto anterior. Refuerzo contingente, también lo hizo, pero con un indicador más pobre. Administración por excepción, no logró significación. Estos resultados son consistentes con los 37 hallazgos meta-analíticos previos de Lowe (1996) y proporcionan apoyo al rol del liderazgo transformacional en contextos I+D. 1.5.6. Liderazgo y Satisfacción Laboral Según Peiró (2000), la satisfacción laboral (o satisfacción con el trabajo) se trata de la actitud relacionada con el trabajo que más atención ha recibido por parte de la investigación. Aunque el estudio sistemático de su naturaleza y sus causas comienzan recién en la década de los treinta, algunos autores ya habían estudiado diversas actitudes de los empleados frente a diferentes aspectos del trabajo. Por ejemplo, el problema de la reducción de la fatiga fue uno de los primeros en tratarse. A continuación de éste, se investigaron asuntos como las horas de trabajo y los descansos. Respecto de su delimitación conceptual, subrayamos que la satisfacción laboral es una actitud y que, si bien se han propuesto diferentes definiciones, buena parte de ellas han puesto el énfasis en el componente afectivo de las actitudes (se refiere a las emociones o sentimientos que suscita el objeto actitudinal), sin considerar como se debería, los elementos cognitivos (creencias sobre las características positivas o negativas del objeto actitudinal) y conductuales (alude a las conductas o experiencias pasadas relacionadas con el objeto de actitud). 38 Por esta razón, es que en los últimos años se ha propuestouna redefinición que trata de estudiar esta actitud de una manera más comprehensiva, vale decir, considerando el componente cognitivo, ya que parece lógico tener en cuenta que la satisfacción laboral depende de lo que las personas sienten y piensan con respecto a su trabajo. Desde esta perspectiva, se conceptualiza como "un estado interno que es expresado, por la evaluación afectiva y/o cognitiva de las experiencias de trabajo, de manera favorable o desfavorable". Las respuestas conductuales derivadas de esta evaluación quedan excluidas de la definición, ya que suelen considerarse como consecuencias de la satisfacción laboral. Por otra parte, autores como Mackensei, Podsakoff y Rich (2001) consideran que es necesario adoptar un enfoque más amplio, de manera que la definen como una actitud o un conjunto de actitudes desarrolladas por la persona hacia su experiencia y su situación de trabajo. Dichas actitudes pueden referirse al trabajo en general o a facetas específicas del mismo. Dentro de esta última postura, específicamente la que alude a la satisfacción conformada por "facetas específicas", Bennis (2001) establecen que, éste es un constructo multidimensional que comprende aspectos particulares de la satisfacción relacionadas con el pago, el trabajo, la supervisión, las oportunidades profesionales, los 39 beneficios, las prácticas organizacionales y las relaciones con los demás trabajadores. Por tanto, la forma de ver la satisfacción como una actitud general es amplia, pero es necesario recordar que el trabajo de una persona es mucho más que las actividades obvias de barajar documentos, esperar clientes o manejar un vehículo, requiere también tener trato con los compañeros y los jefes, obedecer las reglas y costumbres de la organización, cumplir con los criterios de desempeño, etc. Por tanto, ambas perspectivas pueden ser complementarias y contribuir a la obtención de un cuadro completo de la satisfacción laboral. Estos nuevos enfoques también tienen en cuenta la naturaleza claramente psicosocial de este proceso, es decir, la interacción del individuo con los factores de su ambiente. De esta manera, frente a los que defienden que la satisfacción laboral es una cuestión que depende de la personalidad de los trabajadores, hay autores que postulan que lo que realmente influye en el grado de satisfacción es la interpretación que hace el individuo de las circunstancias de su ambiente de trabajo, interpretación en la que tienen injerencia tanto los factores personales como los del entorno. 40 Dentro de los estudios realizados en esta área no se puede dejar de mencionar el más reciente, profundo y comprehensivo meta- análisis realizado por Álvarez de Mon Pan et al (2001). En esta investigación, que recopila una vasta cantidad de estudios sobre el tema, se examina la relación de los estilos transformacional, transaccional y laissez faire con seis criterios de liderazgo, entre ellos se encontraba satisfacción del seguidor con el trabajo y satisfacción con el líder. De acuerdo con los resultados los autores concluyen que, por una parte, la correlación entre la estrategia transformacional y satisfacción del colaborador con el trabajo es de 0.58 y, por otra, la correlación entre el estilo transaccional y satisfacción laboral del colaborador es de 0.64, siendo ambas significativas. Otro resultado interesante de observar es la relación entre estos dos estilos de liderazgo y la satisfacción del seguidor respecto del líder. Así se tiene que la fuerza de interacción entre el estilo transformacional y la satisfacción con el líder es de 0.71 y la correlación entre el estilo transaccional y la variable aludida es de 0.55. Llama la atención que, si bien hay pequeñas diferencias en relación al aspecto al que apunte la satisfacción, las correlaciones son moderadamente fuertes, probando la importancia que tiene el ejercer un buen liderazgo. Por otra parte, la relación de laissez faire con satisfacción laboral fue de -.028 y de -0.58 respecto de satisfacción con el líder. (Vega, 2004) 41 En otro meta-análisis parecido al anterior, llevado a cabo por Judge, Piccolo e Ilies, (2004), en el cual se analizó, entre otras cosas, la relación existente entre las dimensiones de Consideración y Estructura con satisfacción del seguidor con su trabajo y satisfacción con el líder. La correlación entre Consideración y satisfacción del seguidor con su trabajo fue de 0.46 y para satisfacción con el líder fue de 0.78. Para Iniciación de Estructura fue de 0.22 y 0.33 respectivamente, siendo todas significativas. Por otra parte, un aspecto que no puede ser objeto de soslayo es que, si bien el liderazgo ejerce un efecto significativo sobre la satisfacción laboral -como quedó de manifiesto en los estudios expuestos- no puede ser utilizado livianamente, sino que se debe atender a las necesidades del momento y evaluar qué estilo/s es el más eficaz para esa situación en especial. Foong (2001) manifiesta que es muy importante que la jefatura sea entrenada y re-entrenada para incorporar los estilos de liderazgo dentro de sus habilidades directivas, siendo esto absolutamente posible, ya que el liderazgo es un conjunto de prácticas observables y entrañables que tienen un gran impacto sobre el éxito de una organización. Por tanto, se podría establecer que el liderazgo haría las veces de antecedente de variables asociadas con resultados organizacionales, en este caso particular, la satisfacción. A su vez, 42 cuando ésta es evaluada de buena manera tendrá efectos potenciales positivos que pueden aparecer o no, más que consecuencias directas sobre aspectos como rendimiento y productividad, conductas extra-rol, absentismo, rotación, etc., que, en caso contrario, generan altos costes para la organización. Por otra parte, se podría afirmar que, la satisfacción laboral ejerce un efecto moderador entre las conductas de liderazgo y los "efectos potenciales", tema que sería interesante investigar en estudios posteriores. Considerando todo lo expuesto hasta el momento, el propósito del presente estudio fue determinar las relaciones entre liderazgo transformacional y transaccional con satisfacción laboral, las cuales cuentan con fuerte soporte teórico-empírico, tal como quedó de manifiesto. La razón que llevó a realizar este estudio fue que la mayor parte de la investigación se lleva a cabo en otras realidades e instituciones diferentes a la universitaria, siendo muy difícil encontrar estudios que examinen la relación, y potenciales efectos, de estas variables en el contexto organizacional universitario y, menos aún, en el local, como en el caso de la Universidad Católica Los Ángeles Chimbote. 43 1.5.7. Marco Filosófico El trabajo del individuo constituye una de las claves del curso de su vida, así como de su ser y de su identidad social. En los siglos pretéritos y en especial cuando floreció la cultura de Grecia y roma antes del nacimiento de Jesucristo, el trabajo como tal no ocupaba un lugar tan ensalzado como lo ocupa en los estados unidos en el día de hoy. La verdad era que los que estaban en lo más alto del rango social no creían tener que trabajar, puesto que el trabajo estaba circunscrito primordialmente a los esclavos a los ciudadanos libres carentes de recursos. El ciudadano de Grecia no sentía ninguna necesidad de excusarse ante sus contemporáneos por qué no trabajaba, tal como lo hacen hoy muchas personas que podrían ahorrarse muy fácilmente tener que trabajar. En la edad media, el trabajo adquirió múltiples connotaciones religiosas. El trabajo constituía claramente un deber, cumplir con el llamado predestinado de cada quien. No trabajar era algo inmoral. Hoy aceptamos el trabajo como parte de una vida sana y normal. Todas las retribuciones psicológicas, económicasy sociales derivadas de un empleo activo hacen que las personas se sientan que se les priva de algo si no tienen oportunidad de trabajar en labores que les proporcionen dichas recompensas. 44 Dalla (1999): Al mismo tiempo existen en la vida contemporánea ciertas tendencias contrapuestas. La semana de trabajo más reducida, junto con el vaticinio de la semana de cuatro días laborales, es probable que dentro de unas generaciones disminuyan la importancia atribuida al trabajo. Las ocupaciones de las horas libres están aumentando constantemente su importancia como fuentes de satisfacción. Aunque el trabajo en si cabe por ser menos importante como fuente de satisfacción, hoy en día todavía la mayor parte de la gente sigue esperando de su trabajo algo más que las satisfacciones fuera del trabajo tales como paga, seguridad y mejora. Cuesta poco olvidar el hecho mismo de que el trabajo satisface necesidades humanas propias de la sociedad moderna. La importancia del trabajo en la vida moderna nos las sugieren los efectos del desempleo y del retiro en los trabajadores que se han mostrado activos y productivos durante décadas. La simplificación del trabajo es la aplicación del sentido común para encontrar la forma más económica de usar el esfuerzo humano, materiales, máquinas, tiempo y espacio, de manera que pueden emplearse formas más sencillas de hacer el trabajo. 45 Si este trabajo no es satisfactorio, puede sufrir una verdadera frustración con resultados que serán costosos, tanto para él como para quién le proporciona el trabajo. Un empleado desdichado contagia su desdicha a la familia y a la comunidad. La baja moral lleva a la ineficiencia, a la baja producción y al descontento. En otra palabra todos salen perdiendo. Sánchez C. Yomar. (2008): En las organizaciones más grandes de nuestra sociedad, la motivación de los empleados constituye un problema difícil. El enfoque bueno no resulta mucho más útil, quizá ayude a reclutar empleados, pero hace muy poco en cuanto a servir de motivación una vez que los mismos están ya en posesión de su empleo. Raras veces la gente trabaja por gratitud. También este enfoque proporciona poco incentivo para producir algo más que el rendimiento mínimo necesario para evitar el despido. La negociación parece ser un enfoque más realista, particularmente en las situaciones en que hay un sindicato de por medio, crea un ambiente de vivir y dejar vivir. Una competencia exagerada puede deshacer el trabajo de equipo y llevar a las frustraciones y a una legión de efectos colaterales indeseables, también hace hincapié en las satisfacciones logradas con el trabajo. 46 En enfoque más prometedor en materia de motivaciones es la supervisión general, en la que la dirección procura dar oportunidades para la satisfacción de necesidades en el trabajo. La supervisión general da a los subordinados una oportunidad para tomar acuerdos por sí mismos y permite que los supervisores puedan concentrarse en enseñarles mejor su labor. Podemos considerar que la motivación como el resultado de una urgencia o tensión a movernos de una dirección dada o a lograr ciertas metas. También podemos decir que después de haber conseguido algo, recibimos una retribución interior que afecta a la selección de la siguiente serie de eventos que van a ser emprendidos. No hay duda de que estas actividades tienen un fundamento de necesidad biológica, eso no obstante, la persona adulta ha crecido y ha desarrollado dentro del complejo de nuestras influencias culturales. Por lo tanto, los hechos que pueden estimular el desempeño están condicionados a lo que se ha aprendido a considerar como digno de lograrse. Podemos decir que el ejecutivo ya no trabaja para tener algo qué comer sino más bien, que come para trabajar. La existencia de innumerables códigos y guías adoptadas por numerosas asociaciones, tanto profesionales como comerciales, son otra prueba de que generalmente se aceptan y se desean los 47 apegados a la ética, hay que agregar que grupos partidarios y gubernamentales desarrollan esfuerzos destinados a lograr que se empleen practicas claras, honestas y justas que son consideradas como básicas en el desempeño de funciones administrativas. El administrador por lo tanto debe mantener interés en el valor o mérito de los hechos que observa y en los que participan. Sus valores son un factor primordial en las decisiones que toma y en la dirección que persigue como líder de una empresa. Según Mendoza (2011), vivimos en un mundo en el que tanto el acceso a la información, como su control y su procesamiento, se han globalizado. El conocimiento se ha multiplicado y nos llega desde múltiples canales, generando numerosos factores que inciden en lo que se sabe y en lo que se puede o se debe hacer. En un contexto así, los hombres se ven exigidos a desarrollar un modo de pensar y actuar acorde con esta situación. Este hecho plantea enormes desafíos a la sociedad contemporánea, que deben ser afrontados desde un nuevo estilo de liderazgo. Aquí presentamos cuáles son, a nuestro juicio, las características de este liderazgo, explicamos por qué la filosofía es un tipo de saber que contribuye, quizá de modo privilegiado, al fomento de un liderazgo necesario en nuestro mundo y, finalmente, exponemos las características particulares de la formación filosófica, que 48 distinguen a esta materia de cualquier otro tipo de formación y posibilitan las mencionadas actitudes de liderazgo. El líder que reclama el futuro es aquel que: – No sólo sabe mucho y bien sobre aquello en lo que es especialista. También sabe tratar la información compleja que se recibe de un modo integrado. Ya no basta con saber analizar muy bien la realidad, es imprescindible sintetizar la multitud de datos en un discurso con sentido. – Muestra una altísima capacidad de aprendizaje ante los cambios a los que se enfrenta. Este aprendizaje sólo será posible si el líder es capaz de salirse de su propio marco formativo para poder ver la realidad desde otras perspectivas. – Toma decisiones con un estilo caracterizado por su capacidad de compartir el conocimiento. – Tiene una actitud visible de escucha a los otros y fomenta de manera constante y sustantiva la comunicación y el intercambio de ideas. – Sabe tomarse el tiempo necesario para una deliberación pausada y paciente, asumiendo así, hasta el final, el compromiso que toda decisión requiere. – Encuentra el modo de combinar las necesarias acciones tácticas y estratégicas de su organización con la responsabilidad social y la creación de un mundo sostenible para las generaciones venideras. 49 Ahora bien, ¿qué tipo de formación precisa ese líder? Pensamos que la formación específica y técnica que está orientada a la consecución de resultados y estructurada según un esquema de medios y fines es, y será siempre necesaria; pero no es suficiente para generar los líderes que necesita el siglo XXI. La filosofía aparece, a nuestro entender, como un saber que contribuye de un modo privilegiado a esta formación y que se constituye como un complemento formativo necesario para completar el recorrido de un buen líder, por los siguientes motivos fundamentales: En primer lugar, la filosofía invita al hombre a detenerse y poner a cierta distancia la realidad en la que está inmerso para mirarla atentamente. Al hacerlo, la realidad adquiere su dimensión más precisa y comienza a mostrarse en toda su complejidad. El mundo global que vivimos necesita líderes con una perspectiva propia y ajustada a la realidad que sólo se hace posible si las personas se detienen y aprenden a mirarla atentamente. En segundo lugar, la filosofía pide a la persona que se detiene a reflexionar que comparta con otros, de un modo racional y dialogado, los frutosde su atenta mirada sobre el mundo. Sólo a través de este diálogo racional, en el que se intercambian 50 afirmaciones y argumentos, es posible alcanzar determinadas conclusiones que no funcionan como verdades absolutas, sino como nuevos principios que posibilitan decisiones y que abren nuevos caminos para el diálogo. En tercer lugar, la filosofía, porque detiene a la persona y la conduce al diálogo con los otros, fomenta una actitud responsable frente a uno mismo, la sociedad y el entorno en el que vive. La responsabilidad no se mide únicamente por las horas que se trabaja, por la capacidad de ejecutar órdenes o de plegarse a las condiciones que otros ponen. La responsabilidad es una actitud crítica y constructiva. Crítica, porque el líder responsable no da por hecho que todo está bien ni entrega, sin examen previo, a la costumbre o a las tradiciones la respuesta a los desafíos siempre nuevos del presente. Constructiva, porque el líder responsable busca, con los otros, soluciones reales a los problemas planteados: soluciones que sean innovadoras y, al mismo tiempo, adecuadas a la realidad presente. Sánchez C. Yomar. (2008): El fomento de estas actitudes no se consigue, sin embargo, en entornos formativos donde la adquisición competitiva sea la motivación principal. Lo que funciona en la formación especializada y técnica no sirve para la formación en valores intangibles, que son igualmente importantes 51 para adquirir el perfil del líder del futuro. Nuestra experiencia como formadores en estos años confirma lo que aquí afirmamos. Para que emerjan las actitudes de reflexión detenida, diálogo y responsabilidad es preciso que el entorno formativo sea amable y esté vinculado al ocio. Conviene recordar que la palabra escuela se remonta, etimológicamente, a la palabra griega para ocio. Los latinos la recogieron y enseguida formaron una palabra que significara su contrario: negocio, el conjunto de actividades que niegan el ocio. A una escuela de filosofía no se va a hacer negocios, sino a disfrutar, a dejar fuera durante unas horas el trabajo y las preocupaciones y a sumergirse, con otros y con excelentes profesores, en las enseñanzas ya milenarias de la tradición filosófica occidental. A este ocio necesario se le debe unir el rigor intelectual, ya que no está reñida la deleitación con la instrucción, como enseña el sabio romano Horacio. La historia de la filosofía está repleta de pensadores que supieron detenerse, reflexionar, dialogar con otros y así responsabilizarse de su presente. Platón intentó responder, creando la primera institución universitaria de Europa, a la crisis política de la Atenas de su tiempo. Descartes, en su Discurso del método, que fue uno de los libros más leídos en el siglo XVII, propone el buen uso de la razón que todos poseemos para acabar con las guerras de religión que asolaron Europa durante treinta años. Habermas y Levinas, ya en el siglo XX, han propuesto una ética fundada en el diálogo y la 52 responsabilidad por el otro como respuesta a los traumas de la segunda guerra mundial, las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, y los campos nazis de exterminio. En contacto con todos ellos, en un ambiente de ocio y deleitación, la actitud filosófica se puede destilar poco a poco como un buen whisky. Atención al mundo, reflexión pausada, diálogo con los otros y responsabilidad son los ingredientes que conforman la actitud filosófica que precisa el líder de las organizaciones en el siglo XXI. La formación filosófica es el hábitat donde nace y se desarrolla esta actitud. Platón afirmaba en República, con cierta melancolía, que el gobierno de los sabios nunca verá la luz. Quizá en este siglo de incertidumbres, riesgos y oportunidades veamos nacer algunos líderes filósofos. Los necesitamos. “Servir o servirse”, el gran dilema ético de todo líder. Mintzberg (1999) Utilizamos el termino servir para denotar algo que "hace el bien", que beneficia y es útil, que promueve el desarrollo y que mejora el estado o situación de alguien o de algo. Servimos o no servimos para los papeles, actividades o funciones que desempeñamos en el vivir cotidiano. Cometer errores no significa, necesariamente, que no servimos, solo hay que recordar la sabia cita latina: errare humanum est (es propio del humano 53 cometer errores). Aprender a crecer a partir de nuestros errores es una virtud. El pensamiento o la filosofía de este tema resume "El que no vive para servir, no sirve para vivir". Los valores en el líder y de toda persona son los cimientos de toda construcción humana. El mundo presente, y en especial los umbrales del siglo XXI, está marcado un retorno importante a los valores humanos, tanto sociales como productivos. Los valores conforman las reglas o los principios que regulan el comportamiento individual y grupal para tener una convivencia armónica y productiva. Naciones, instituciones y empresas están rescatando los principios y valores que definen su identidad y destino, y muchas de ellas han concertado y compartido estos valores haciéndolos parte fundamental de su cultura organizacional. Los valores, como dijimos antes, son los cimientos de toda cultura humana y, por tanto, de toda cultura organizacional, familiar, deportiva, escolar, etcétera. Los valores conforman los fundamentos éticos y los principios filosóficos del "ser" y del "quehacer" humanos. La experiencia y el sentido práctico nos demuestran que los valores son: DOMÍNGUEZ (2002). • Principios éticos de acción. • Creencias y anhelos. • Actitudes sanas y constructivas ante el mundo. 54 • La esencia de un credo. • Niveles de compromiso en el quehacer humano. • Caminos que orientan el comportamiento para la acción constructiva. • Inspiración para el logro de objetivos de servicio. • Medios para enriquecimiento de toda cultura organizacional. • Señalamientos y fuentes de inspiración para la tarea de los líderes. • Claridad y dirección para la visión y la misión personales y de grupo. • Requisitos para la productividad, la calidad, la excelencia, el desarrollo individual y grupal y la mejora continua. La filosofía puede ayudar a articular los puntos ciegos de los negocios mirando detrás de sus supuestas certezas y precondiciones teóricas. Al ponderar las cuestiones que están fuera del ámbito de los negocios, la filosofía puede ampliar la reflexión del horizonte de los futuros líderes empresariales para ayudarles a gestionar la complejidad y tomar decisiones acertadas, no sólo en el ámbito de un buen negocio, sino también de acuerdo con las necesidades de la sociedad. Martínez (2009). Estas ideas conectan con las de Gonzalo Mendoza y Jorge Úbeda, fundadores de la Escuela de Filosofía de Madrid, para http://www.gestiopolis.com/administracion-estrategia-2/analisis-filosofico-del-liderazgo-organizacional.htm#mas-autor http://www.gestiopolis.com/administracion-estrategia-2/analisis-filosofico-del-liderazgo-organizacional.htm#mas-autor 55 los que el mundo globalizado y saturado de información en que vivimos plantea desafíos que sólo pueden abordarse desde un nuevo estilo de liderazgo en el que la filosofía aporte de manera significativa, tal como se expresan en una reflexión publicada en la revista Consejeros. En esa línea, defienden que “la formación específica y técnica que está orientada a la consecución de resultados y estructurada según un esquema de medios y fines es, y será, siempre necesaria; pero no es suficiente para generar los líderes que necesita el siglo XXI. La filosofía aparece, a nuestro entender, como un saber que contribuye de un modo privilegiado a esta formación y que se constituye como un complemento formativo necesario para completar el recorrido de un buen líder.” Según los citados autores, “la responsabilidaddel líder no se mide únicamente por las horas que se trabaja, por la capacidad de ejecutar órdenes o de plegarse a las condiciones que otros ponen. La responsabilidad es una actitud crítica y constructiva. Crítica, porque el líder responsable no da por hecho que todo está bien ni entrega, sin examen previo, a la costumbre o a las tradiciones la respuesta a los desafíos siempre nuevos del presente. Constructiva, porque el líder responsable busca, con los otros, soluciones reales a los problemas planteados: http://www.revistaconsejeros.com/espaniol/opinion.asp?valor=61&id=134&anio=2011&ultimoNumero=61&lengua=1 56 soluciones que sean innovadoras y, al mismo tiempo, adecuadas a la realidad presente.” Posiblemente el mayor reto para el liderazgo actual se ubique en aprender a preguntarnos y darnos tiempo para respondernos a nosotros mismos. Sólo desde nuestro propio centro, en equilibrio emocional, visceral e intelectual, habremos de saber hallar, no las respuestas, sino el camino hacia ellas. 1.5.8. Marco Sociológico Conforme se consolida la teoría de la administración y de las organizaciones, sobre todo en este siglo, ha cobrado fuerza el estudio del liderazgo como una función dentro de las organizaciones. Esta perspectiva no enfatiza las características ni el comportamiento del líder, sino "las circunstancias sobre las cuales grupos de personas integran y organizan sus actividades hacia objetivos, y sobre la forma en la función del liderazgo es analizada en términos de una relación dinámica." Según Marín (2005): esta perspectiva el líder es resultado de las necesidades de un grupo. Operacionalmente, un grupo tiende a actuar o hablar a través de uno de sus miembros. Cuando todos http://www.monografias.com/Administracion_y_Finanzas/index.shtml http://www.monografias.com/trabajos12/eleynewt/eleynewt.shtml http://www.monografias.com/trabajos16/comportamiento-humano/comportamiento-humano.shtml http://www.monografias.com/trabajos11/grupo/grupo.shtml http://www.monografias.com/trabajos16/objetivos-educacion/objetivos-educacion.shtml http://www.monografias.com/trabajos34/cinematica-dinamica/cinematica-dinamica.shtml 57 tratan de hacerlo simultáneamente el resultado por lo general es confuso o ambiguo. La necesidad de un líder es evidente y real, y esta aumenta conforme los objetivos del grupo son más complejos y amplios. Por ello, para organizarse y actuar como una unidad, los miembros de un grupo eligen a un líder. Este individuo es un instrumento del grupo para lograr sus objetivos y, sus habilidades personales son valoradas en la medida que le son útiles al grupo. El líder no lo es por su capacidad o habilidad en sí mismas, sino porque estas características son percibidas por el grupo como las necesarias para lograr el objetivo. Por lo tanto, el líder tiene que ser analizado en términos de o función dentro del grupo. El líder se diferencia de los demás miembros de un grupo o de la sociedad por ejercer mayor influencia en las actividades y en la organización de estas. El líder adquiere status al lograr que el grupo o la comunidad logren sus metas, su apoyo resulta de que consigue para los miembros de su grupo, comunidad o sociedad más que ninguna otra persona. El líder tiene que distribuir el poder y la responsabilidad entre los miembros de su grupo. http://www.monografias.com/trabajos16/objetivos-educacion/objetivos-educacion.shtml http://www.monografias.com/trabajos6/napro/napro.shtml http://www.monografias.com/trabajos7/perde/perde.shtml http://www.monografias.com/trabajos35/el-poder/el-poder.shtml http://www.monografias.com/trabajos33/responsabilidad/responsabilidad.shtml 58 Esta distribución juega un papel importante en la toma de decisiones y, por lo tanto, también en el apoyo que el grupo le otorga. Como el liderazgo está en función del grupo, es importante analizar no solo las características de este sino también el contexto en el que el grupo se desenvuelve. Pues se considera que estas características determinan quien se convertirá en el líder del grupo. Se ha encontrado que un individuo que destaca como un líder en una organización constitucional no necesariamente destaca en una situación democrática, menos estructurada. Dependiendo si la situación requiere acción rápida e inmediata o permite deliberación y planeación, los liderazgos pueden caer en personas diferentes. En síntesis, el líder es un producto no de sus características, sino de sus relaciones funcionales con individuos específicos en una situación específica. Aunque todavía se cree que hay líderes natos, este estudio analiza el liderazgo dentro de la perspectiva que fundamenta la posición que se pueden crear líderes con solo reforzar aquellas habilidades de liderazgo necesarias para una organización o situación específica. http://www.monografias.com/trabajos11/travent/travent.shtml http://www.monografias.com/trabajos12/decis/decis.shtml http://www.monografias.com/trabajos12/decis/decis.shtml http://www.monografias.com/trabajos35/categoria-accion/categoria-accion.shtml http://www.monografias.com/trabajos7/plane/plane.shtml http://www.monografias.com/trabajos7/sipro/sipro.shtml 59 1.5.9. Marco Pedagógico Todos estamos de acuerdo de que en la actualidad es necesario lograr un cambio en la Educación universitaria y para ello es necesario que cambie la institución educativa. Marín (2005): El desarrollo de la universidad como institución educativa contemporánea se basa en la filosofía del cambio, y se apoya en tres pilares fundamentales, que son: El DESARROLLO DE DIRECTIVOS, como condición necesaria y resultado del desarrollo institucional. El TRABAJO EN EQUIPOS, como portador de creatividad, calidad y compromiso en las decisiones y las acciones. El LIDERAZGO PEDAGÓGICO, como la herramienta fundamental para el logro de los fines propuestos. 1.5.9.1. LIDERAZGO PEDAGÓGICO: Vargas (2011): planteó en una ocasión: "Cualquiera que recuerda su propia experiencia educativa se acuerda de los profesores, no de los métodos y técnicas. El profesor es la persona clave de la situación educativa. El hace y deshace programas". ¿Qué es entonces el liderazgo pedagógico?, ¿Quién lo ejerce?, ¿Es lo mismo ser docente que líder pedagógico?, ¿Cuáles son los requisitos, cualidades y habilidades del líder pedagógico?, http://www.monografias.com/trabajos2/mercambiario/mercambiario.shtml http://www.monografias.com/trabajos12/desorgan/desorgan.shtml http://www.monografias.com/trabajos910/en-torno-filosofia/en-torno-filosofia.shtml http://www.monografias.com/trabajos13/indicrea/indicrea.shtml http://www.monografias.com/trabajos11/conge/conge.shtml http://www.monografias.com/trabajos4/acciones/acciones.shtml http://www.monografias.com/trabajos11/metods/metods.shtml http://www.monografias.com/trabajos6/juti/juti.shtml http://www.monografias.com/trabajos27/profesor-novel/profesor-novel.shtml http://www.monografias.com/Computacion/Programacion/ 60 ¿Existe diferencia entre docente y líder pedagógico? - Sí., ¿Cuál es la diferencia? La diferencia entre docente y líder pedagógico radica en el origen de la autoridad de cada uno, ya que ella constituye la premisa de la relación dominio - subordinación. La autoridad del docente proviene de los niveles superiores en la institución educativa, en relación con el nivel que ocupa respecto a los estudiantes. Es autoridad oficial. La autoridad del líder pedagógico proviene siempre de los estudiantes con los cuales interactúa y con quienes comparte su posición, normas y valores. Es autoridad moral. Por ende, podemos afirmar que el concepto de líder pedagógico siempre implica la existencia de un determinado vínculo entre el docente y los estudiantes, caracterizado por la existencia de una ascendencia más o menos estable del profesor sobre los educandos, donde tal ascendencia
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