El Enfoque de Género

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El Enfoque de Género 
En la sociedad, siempre se ha observado en distintos escenarios la polarización de ideologías de los individuos en cuanto al género y lo que es capaz de realizar cada uno. Debe señalarse que, género y sexo son dos conceptos distintos, primeramente porque el género es un constructo social que determina ciertas características qué una persona de ése sexo “debería” llevar. Así mismo, el sexo, es la parte biológica que califica si es un hombre o una mujer de quién se habla. Sin embargo, existe una herramienta para poder evaluar y analizar desde un punto de vista más objetivo y certero, en donde, no se discrimina ningún género bien sea mujer u hombre sino que se adapta a lo que engloba la palabra y logra que cada situación establecida para obtener el mismo trato, sean convenientes sin necesidad de que se menosprecie a uno u otro por lo que representa. Ésta metodología se denomina enfoque de género:
Implica una transformación social de fondo para la búsqueda de condiciones de equidad, donde hombres y mujeres tengan la libertad de ejercer sus derechos y de construir contextos para el reconocimiento de las desigualdades, acogiéndose a los marcos normativos, políticos y socioculturales que han evolucionado en materia de reconocimiento de derechos, interiorizando comportamientos, prácticas y costumbres incluyentes y respetuosas de la diferencia. (Londoño, 2019)
Básicamente, el enfoque de género se usa para borrar los estigmas y estereotipos que rigen a la sociedad dentro de todo ámbito, especialmente del campo social, laboral, educativo, económico, político, etc. A su vez, sirve para solucionar la distribución de actividades entre hombres y mujeres en las categorías públicas y privadas para minimizar la exclusión preexistente. De allí, lo relevante que es mantener un planteamiento amplio, con respecto a las maneras de estudiar un caso que se vea polarizado por el género y lo que representa.
Por consiguiente, los obstáculos ostensibles al comparar las capacidades tanto de hombres como de mujeres se ven interrumpidas por los ideales y prejuicios que arraiga el individuo en cuestión, por ejemplo: la recepción ante los casos de violencia de género especialmente a los hombres, no se distingue desde una perspectiva de género, puesto que, para la sociedad el hombre es visto cómo “fuerte e inquebrantable”, por ende muchas veces ni siquiera investigan el caso. En cambio, la postura de las mujeres en éstos casos es más creíble puesto que “victimizan” a la misma, cuando hasta se ha visto que es totalmente falsa la historia. Otro ejemplo puede ser: “El trabajo de una mujer en la actividad agrícola tiene menor valor que el trabajo que desarrolla un hombre” (Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, n.d.) 
En relación a la problemática expuesta, no es una situación nueva. En la evolución de la historia siempre se ha visto que la mujer debe enfocarse en el hogar, en la tarea de criar a los hijos mientras que los hombres por su capacidad física lo han catalogado de ser el encargado de trabajar arduamente y ser la cabeza y el responsable de la familia. Por otro lado, se ha vislumbrado que:
A partir de los años 70’s se llevaron a cabo movimientos feministas con el fin de reclamar por la igualdad y la no discriminación en razón del sexo y del género. En la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo El Cairo, en 1994, se hizo énfasis en la importancia de eliminar las brechas entre hombres y mujeres y de propender por la igualdad de género, para que ambos puedan tener acceso a oportunidades que les permitan la plena efectividad de sus derechos. (Londoño, 2019)
	Cabe considerar por otra parte, que un cometido de los gobiernos y organismos tanto nacionales cómo internacionales debería ser; inspirar ideas fuera de la doctrina parcializada, cómo por ejemplo apoyar a los movimientos aledaños que vayan en contra de la violencia de género, proyectos de ley donde se abarquen las necesidades y exigencias laborales de cada individuo sin tomar en cuenta si es hombre o mujer. En relación a la idea anterior, tenemos que: 
Las últimas Conferencias Mundiales han definido objetivos y mecanismos específicos en las áreas de desarrollo sostenible y cooperación internacional y han establecido metas y tácticas para asegurar la igualdad entre hombres y mujeres en materia de distribución de recursos y acceso a las oportunidades de la vida económica y social. Igualmente, se ha llegado a un consenso acerca del vínculo fundamental existente entre la temática de género y el desarrollo sostenible. (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, n.d.)
Visto de esta forma, el enfoque de género es una coyuntura que se manifiesta de la siguiente manera: 
· Persistente y creciente carga de la pobreza sobre la mujer;
· Acceso desigual e inadecuado a la educación y capacitación;
· Violencia contra las mujeres;
· Efectos de los conflictos armados y de otra clase sobre las mujeres;
· Desigualdad en las estructuras políticas y económicas, en todas las formas de actividad productiva y en el acceso a los recursos;
· Disparidad entre mujeres y hombres en el ejercicio del poder y la toma de decisiones en todos los niveles de autoridad;
· Estereotipos sobre la mujer y desigualdad en su acceso y participación en todos los sistemas de información, en especial los medios masivos de comunicación;
· Desigualdades en materia de género, en el manejo de los recursos naturales y la protección del medio ambiente;
· Persistente discriminación y violación de los derechos de las niñas. (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, n.d.)
Importa y por muchas razones, que el enfoque de género sea la herramienta idónea para cualquier Estado, gobierno u Organización, en donde, se efectúe correctamente para evitar la inequidad presente en los países para potenciar su desarrollo cómo sociedad íntegra y ecuánime para solucionar las adversidades presentadas por lo menos en la Agenda Internacional. Concientizando así a la sociedad de que todos somos seres humanos y se debe promover la misma capacidad y alcance de oportunidades en todos los campos existentes. Por último es conveniente acotar que debe conciliarse y empezar a poner en práctica el enfoque de género para conseguir: 
· Una redistribución equitativa de las actividades entre los sexos (en las esferas de lo público y privado).
· Justa valoración de los distintos trabajos que realizan mujeres y hombres, especialmente en lo referente a la crianza de las hijas e hijos, el cuidado de los enfermos y las tareas domésticas.
· Modificación de las estructuras sociales, los mecanismos, las reglas, prácticas y valores que reproducen la desigualdad. (¿Qué Es La Perspectiva De Género Y Por Qué Es Necesario Implementarla?, n.d.)
	Entre otros aspectos que serían promovidos si se aplicara la perspectiva de género para analizar las distintas situaciones que entorpecen el desarrollo saludable de una sociedad objetiva y un país con oportunidades que valoren a sus ciudadanos sin importar a qué género pertenecen. Siendo amplios y justos con sus propósitos para hacer de una sociedad mejor y un mundo integral y equitativo.
Referencias Bibliográficas
Londoño, A. L. (2019, January 25). Enfoque de género ¿Por qué importa? Oriéntame. Retrieved May 17, 2022, from https://orientame.org.co/enfoque-de-genero-por-que-importa/
Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. (n.d.). Folleto conceptos fundamentales. Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. Retrieved May 19, 2022, from https://www.mimp.gob.pe/files/direcciones/dcteg/Folleto-Conceptos-Fundamentales.pdf
Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. (n.d.). II. EL ENFOQUE DE GÉNERO. fao.org. Retrieved May 17, 2022, from https://www.fao.org/3/x2919s/x2919s04.htm
¿Qué es la perspectiva de género y por qué es necesario implementarla? (n.d.). Gobierno de México. Retrieved May 19, 2022, from https://www.gob.mx/conavim/articulos/que-es-la-perspectiva-de-genero-y-por-que-es-necesario-implementarla