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Olano Expósito Ángela

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Depresión: ¿un efecto secundario de 
los anticonceptivos hormonales 
orales? 
 
 
Depression: is it an adverse effect of 
the hormonal contraceptive pill? 
 
 
 
 
Autora: Ángela Olano Expósito. 
Directora: Mª de los Ángeles de Cos Cossío. 
 
Trabajo Fin de Grado. Enfermería. Año 2017. 
Escuela Universitaria de Enfermería Casa de Salud Valdecilla. 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
 
 
Índice 
 
Resumen y palabras clave……………………………………………………………………………………………pág.1 
Abstract and key words….……………………………………………………………………………………………pág.1 
 
Introducción………………………………………………………………………………………………………………..pág.2 
- Objetivos…………………………………………………………………………………………………………pág.2 
- Metodología……………………………………………………………………………………………………pág.2 
- Estructura del trabajo……..………………………………………………………………………………pág.3 
 
Capítulo I 
 Contextualización. 
- Historia de la anticoncepción hormonal….………………………………………………………pág.3 
- Epidemiología: depresión en la mujer, anticonceptivos hormonales……….………pág.5 
- Fisiología del ciclo ovárico………………………………………………………………………….……pág.6 
 
Capítulo 2: Farmacología y Fisiopatología. 
- Anticonceptivos hormonales: farmacología y mecanismos de acción……………..pág.8 
- Influencia de las hormonas a nivel cerebral…………………………………………………….pág.11 
- Depresión en la mujer……..……………………………………………………………………………..pág.12 
 
Capítulo 3: Revisión de la evidencia científica y papel de la enfermería. 
- Evidencia científica……………………..………………………………………………………………….pág.16 
- Papel de la enfermería: plan de cuidados estandarizado………………………………..pág.20 
 
Conclusión.………………………………………………………………………………….………………………………pág.24 
 
Bibliografía..……………………………………………………………………………….……………………………….pág.25 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág.1 
Resumen 
 
Este trabajo aborda el problema de salud depresión como efecto secundario de la toma de 
anticonceptivos hormonales orales, a través de una revisión bibliográfica. La monografía 
comprende la epidemiología, la fisiología del ciclo ovárico, la farmacología de la píldora 
anticonceptiva y los posibles problemas anímicos asociados. Para ello se ha realizado una 
revisión de la literatura científica actual, escogiendo aquellos estudios cuyo objetivo es analizar 
la relación, positiva o negativa, entre la anticoncepción hormonal y la depresión como efecto 
secundario. Por último, se ha hecho un plan de cuidados enfermero, que respalde, en base a la 
información obtenida, las acciones de enfermería en este campo de la salud. 
 
Palabras clave: anticonceptivos orales, anticonceptivos orales combinados, anticonceptivos 
hormonales orales, depresión, estrógenos, trastornos del humor. 
 
Abstract 
 
This final dissertation addresses the idea of depression being a side effect of the prescription of 
hormonal oral contraception by means of a bibliographical review. It encompasses the 
epidemiology, the physiology of the ovarian cycle, the pharmacology of contraceptive pills, and 
some emotional health issues associated to it. For this purpose, a review of current scientific 
literature has been undertaken, specifically choosing those studies that aim at analyzing the 
negative or positive relationship between hormonal oral contraceptive methods and depression 
taken as a side effect. Finally, considering the information obtained, a nursing care plan has been 
designed supporting nursing activities in this health field. 
 
Key words: contraceptives, oral, hormonal, combined, depression, estrogens, mood disorders. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 2 
 
Introducción 
 
Este trabajo tiene como objetivo conocer si los anticonceptivos presentan como efecto 
secundario la patología depresión u otras alteraciones anímicas, para ello se ha realizado una 
revisión bibliográfica de los estudios actuales, así como un repaso a la farmacología y 
fisiopatología relacionada. 
 
Actualmente la anticoncepción hormonal es uno de los principales métodos de elección de las 
mujeres, como forma de prevenir embarazos no deseados, además del preservativo. Este tipo 
de métodos por su efecto farmacológico y sus múltiples formas de administración, han supuesto 
una revolución en el área de la sexualidad y la planificación familiar, puesto que han permitido 
aumentar las opciones de anticoncepción y la seguridad de las mujeres que han decidido 
usarlos1. A pesar de los beneficios inequívocos que proporcionan, es conocida la controversia 
en relación con el riesgo de tromboembolismo2 que rodea este tipo de fármacos, tras la 
comercialización del primer formato de píldora, con la cual, debido a las altas dosis hormonales 
se comenzó a observar este efecto. Mientras tanto, otra serie de riesgos pasaban a ser 
secundarios y no han tenido tanta repercusión, pero no por ello deja de ser interesante su 
estudio3-5. 
En una época en la que la depresión es una de las principales causas de enfermedad en la 
población femenina, resulta de especial interés el estudio de los fenómenos que pueden ser 
precursores, con el objetivo de dar a esta población y a los profesionales que le atienden, 
información y mecanismos de ayuda para la prevención de esta patología6.La realización de un 
estudio en 2016, que relacionaba la anticoncepción hormonal oral y la depresión7, provocó la 
aparición de sus resultados en la prensa mundial y como consecuencia este problema tomó 
mayor protagonismo. 
La posibilidad de que la anticoncepción hormonal tenga como efecto secundario la depresión es 
una teoría que, hoy por hoy, se sustenta en estudios epidemiológicos7, pero no existe una teoría 
fisiológica que lo explique de forma exacta, si bien entendiendo su acción farmacológica 
podremos hacernos una idea de sus efectos a nivel del SNC. 
Con esta revisión bibliográfica se pretende obtener respuestas basadas en la evidencia científica 
existente. 
 
Objetivos 
 
Primario: conocer si, en mujeres en edad fértil, existe relación entre el uso de anticonceptivos 
hormonales orales y la aparición de trastornos depresivos u otras alteraciones anímicas. 
 
Específicos: conocer cómo interactúan las hormonas sexuales femeninas y el cerebro, y su 
repercusión en el estado de ánimo y sus alteraciones. 
 
Descripción de la estrategia de búsqueda bibliográfica 
 
Basándome en la pregunta PICO realizada, hice como primera aproximación una búsqueda en 
PubMed, desde la Biblioteca de la Universidad de Cantabria, incluyendo aquellos artículos que 
cumplían los criterios de: hace menos de cinco años y texto completo abierto, basándome en 
una búsqueda en inglés de las siguientes palabras clave: 
 
Descriptores en Ciencias de la Salud (DeCS): anticonceptivos orales, anticonceptivos orales 
combinados, anticonceptivos hormonales orales, depresión, estrógenos, trastornos del humor. 
 
Medical Subject Headings (MeSH): contraceptives, oral, hormonal, combined, depression, 
estrogens, mood disorders. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Posteriormente amplié la búsqueda a textos más antiguos, para conocer estudios anteriores, así 
como de otras bases de datos. Mediante la lectura de los textos encontrados de esta forma, 
también escogí estudios pertenecientes a su bibliografía. 
 
Las bases de datos consultadas fueron: 
PubMed-Medline, Cochrane library plus en español, Google académico, CUIDENplus: base de 
datos de investigación en cuidados de la salud, NNNConsult: NANDA, NOC, NIC, Biblioteca de 
historia de la ciencia y de la técnica. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Estructura del trabajo 
 
Se ha dividido esta monografía en tres capítulos. El primer capítulo consta de la 
contextualización, en la que se ha introducido la historia de la anticoncepción hormonal, desde 
el siglo XIX con los primeros pasos en el mundo de la regulación del ciclo ovárico, hasta el estado 
actual. También como forma de conocerla situación de estos medicamentos, se expone la 
epidemiología, tanto de la depresión en la mujer como de la anticoncepción hormonal. El último 
apartado a tratar es la fisiología del ciclo ovárico. 
 
En el capítulo dos se exponen las bases fisiológicas y fisiopatológicas necesarias para conocer 
los procesos que intervienen en la posible aparición de un trastorno de tipo depresivo en las 
mujeres, asociado o no a la anticoncepción hormonal oral. Para ello se ha realizado una 
exposición de la literatura científica que versa sobre la farmacología, la fisiopatología de la 
depresión y la influencia de las hormonas a nivel cerebral. 
 
El capítulo tres está dedicado a la exposición y valoración de los estudios realizados a lo largo de 
los últimos años, cuyo objetivo ha sido encontrar una relación entre la depresión y la utilización 
de anticonceptivos hormonales. Por último, se expone un plan de cuidados enfermero 
estandarizado. 
 
Capítulo 1. 
 
Historia de la anticoncepción hormonal 
 
Actualmente la sociedad tiene un concepto de sexualidad muy diferente al de hace décadas, 
hemos conseguido separarla de la maternidad, y las mujeres podemos decidir si deseamos 
preparar nuestro cuerpo y nuestra mente para la maternidad, o si deseamos esperar. 
Este cambio en la sociedad se ha dado gracias a los avances científicos, así como sociopolíticos, 
y a la consecución de los derechos y libertades de la mujer, no sin debate en el terreno religioso 
y de áreas más conservadoras3. 
 
Palabras clave: contraceptives, oral, hormonal, 
combined, depression, mood disorders, estrogens. 
 
BUC Acceso remoto 
Bases de datos: Pubmed, Cochrane Library Plus, google 
académico, CUIDENplus, NNNConsult, biblioteca de 
historia de la ciencia y de la técnica. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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La anticoncepción en la mujer ahora parece un tema cotidiano y está normalizado, pero hace 
décadas se debatía a fondo sobre su implantación en el mundo de la salud. En España no ha sido 
hasta finalizada la Transición, que la mujer ha podido acceder dentro de la legalidad a los 
anticonceptivos hormonales. 
 
La aparición de estos fármacos se remonta a finales del siglo XIX y siglo XX, con el desarrollo de 
la medicina, especialmente en el campo de la endocrinología y la ginecología, gracias al cual fue 
posible el descubrimiento de los compuestos activos que forman los anticonceptivos 
hormonales. En el siglo XIX, gracias al estudio del ciclo ovárico, se comenzó a pensar en la 
posibilidad de conseguir guiarlo mediante esteroides sexuales exógenos. Para ello los 
laboratorios Schering realizaron diversos experimentos, los cuales les llevaron a descubrir el 
estradiol y posteriormente, con la adición de un grupo etinil, obtuvieron la formulación apta 
para la administración oral. 
 
Uno de los momentos importantes en la historia fue el descubrimiento en México, en 1938, por 
parte de Russel Marker, un químico conocedor de la botánica, de cómo transformar un esteroide 
vegetal llamado diosgenina en progesterona. A su vez, el segundo laboratorio importante a 
mencionar en este proceso fue el laboratorio Syntex, cofundado por el propio Marker, que se 
convirtió en un gran productor de la progesterona descubierta por él mismo. En esos años, a 
partir de 1940, otros doctores comenzaron a aplicar el uso de esteroides sexuales en el ámbito 
de la medicina, como Somers Sturgis que propuso utilizar los estrógenos exógenos en trastornos 
como la dismenorrea4. 
 
En 1950 se descubrieron nuevos gestágenos, los 19-norderivados, aunque no fue hasta más 
tarde cuando, gracias al trabajo de Djerassi en la compañía Syntex, se pudo sintetizar el primer 
progestágeno activo que se podía administrar por vía oral, en 1953: el noretinodrel4.Durante 
esos años, gracias a la implicación de otros investigadores como Chang, Pincus y Hoagland, se 
consigue llevar a la experimentación humana la píldora anticonceptiva hormonal combinada. 
 
La primera píldora contenía mestranol (150mg) y noretinodrel (10 mg), y tras las sucesivas fases 
de experimentación fue comercializada, inicialmente como medicamento indicado para la 
dismenorrea, en 19573. El primer anticonceptivo oral pudo ser comercializado con ese fin en el 
año 1960, bajo el nombre de Enovid® (Searle)8. Años más tarde se comercializó este fármaco 
con dosis menores de ambos compuestos, y fue ya presentado como un método anticonceptivo 
hormonal combinado. 
En los sucesivos años las investigaciones continuaron con el fin de mejorar el fármaco, y fue en 
1963 cuando se sintetizó por primera vez el levonorgestrel, uno de los progestágenos más 
usados actualmente, con el aislamiento del principio activo norgestrel gonano4. 
 
El medicamento Enovid® fue exportado, sólo un año después de su comercialización, a Europa, 
pero en España hasta la década de los 70 no se pudo comercializar. 
 
Los compuestos iniciales contenían una dosis muy alta de hormonas que derivaron en la 
aparición de un gran número de efectos adversos, entre ellos casos de trombosis venosa, 
embolia pulmonar, trombosis cerebral o trombosis coronaria. El descubrimiento de la 
importancia de la dosis de estrógenos y progestágenos es de gran relevancia, como factor clave 
para la seguridad de la mujer, ya que a partir de este conocimiento se estableció la necesidad 
de la búsqueda, y posterior aparición en 1970, de otros compuestos activos y de menores dosis. 
Con el objetivo principal de encontrar anticonceptivos hormonales más seguros, la industria 
farmacéutica redujo la cantidad del etinelestradiol notablemente, así como en la década de los 
80 buscó sintetizar alternativas al progestágeno levonorgestrel. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Hoy por hoy, las dosis son notablemente menores a las iniciales, lo que ha reducido el riesgo de 
efectos secundarios. Sabiendo, además, la implicación en estos riesgos del componente 
estrogénico. Su dosis ha sido limitada al mínimo necesario para conseguir efectos sinérgicos con 
la progesterona, y ésta es la que se modula en compuesto y dosis entre las diferentes propuestas 
comerciales5,9. 
 
Epidemiología 
 
Epidemiología de la depresión en la mujer 
 
Desde el nacimiento hasta la pubertad las mujeres tienen el mismo riesgo de sufrir trastornos 
anímicos o depresión que los hombres. Es sobre los 10 años, con la menarquia, cuando las cifras 
varían y la mujer pasa a tener el doble de riesgo que el hombre en desarrollar este tipo de 
patología. Los expertos concuerdan en que uno de los factores implicados, entre otros, es la 
influencia de los cambios hormonales que se sufren durante los ciclos ováricos, con cambios en 
estrógenos y progesterona; de igual manera sucede en el post-parto y en la perimenopausia10. 
 
En este campo, la literatura de J.W. Studd señala la existencia de una depresión hormonal, que 
se diagnostica de forma diferencial con el Trastorno Bipolar. Esta denominación hace referencia 
a un tipo de depresión que se produce en aquellos momentos de la vida en los que hay 
fluctuaciones hormonales, concretamente en tres casos: síndrome premenstrual, postparto y 
climaterio. Studd describe los beneficios de la terapia hormonal para combatir esta patología de 
tipo depresivo, frente a la común terapia antidepresiva; pero estos resultados no son 
extrapolables a mujeres sanas en terapia anticonceptiva hormonal oral, sin la sintomatología 
referida11. 
 
 
Epidemiología de los anticonceptivos hormonales. 
 
Actualmente la edad media con la que se comienza a tener relaciones sexuales son los 18 años, 
e incluso inferior, por lo que es necesario plantear correctamente los métodos anticonceptivos 
para las mujeres en edad fértil, de forma previa. Conocida en la mayor parte del mundo, sobre 
todo en países desarrollados, la anticoncepción hormonal pertenece al grupo de métodos 
anticonceptivos modernos, cuyo uso ha aumentado en los últimos años, siendo encifras de 2015 
de un 57,4% de usuarias1. 
 
Según la última encuesta de anticoncepción realizada en el año 2016 por la Sociedad Española 
de Contracepción, del total de mujeres, incluyendo aquellas que se encuentran fuera de edad 
fértil o dando lactancia, existe un 24,7% de mujeres que no hace uso de ningún tipo de método 
anticonceptivo. En el cómputo total, considerando tanto las que usan método anticonceptivo 
como las que no, un porcentaje del 11% tiene riesgo de quedarse embarazada. 
De aquellas mujeres que usan algún tipo de método, el 28,4% utiliza solo preservativo, el 26.8% 
hace uso de métodos hormonales como la pastilla, el anillo vaginal, el parche transdérmico o el 
implante, mientras que el resto hace uso de DIU o métodos naturales. 
 
La tendencia en las últimas décadas y especialmente en los últimos años ha sido de ascenso en 
el número de personas que utilizan la anticoncepción hormonal, a la par que, en proporción, ha 
descendido el número de personas que usan el preservativo masculino, aunque éste sigue 
siendo el método más usado por la población. 
 
La anticoncepción hormonal además de haber aumentado, es sobretodo usada por mujeres 
jóvenes en edad fértil, entre los 20 y los 30 años, las cuales se ven más influidas a la hora de 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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elegir el método anticonceptivo por profesionales como: médicos, enfermeras, ginecólogos y 
matronas, seguido de la opinión de familia o amigos. Gracias a este tipo de datos, el personal 
sanitario, y en concreto enfermería, podemos saber el perfil de las pacientes a las que debemos 
dirigir nuestra atención en este ámbito, y enfocar así nuestras intervenciones. 
 
Actualmente, no existen cifras respecto de las mujeres que dicen tener cambios en el estado de 
ánimo, o depresión, tras el inicio de la terapia anticonceptiva hormonal12. 
 
Fisiología del ciclo ovárico de la mujer 
 
Para poder adentrarnos un poco más en el tema a tratar, es importante aclarar una serie de 
conceptos en cuanto a la fisiología del ciclo ovárico, para así poder comprender cómo actúan los 
métodos anticonceptivos hormonales. 
 
El ciclo ovárico es un proceso que comienza en la vida de la mujer con la primera menstruación, 
la denominada menarquia, y que posteriormente se sucede cada veintiocho días hasta la 
menopausia. Durante este proceso se distinguen dos etapas fundamentales: la fase folicular y 
la fase lútea (fig. 1). 
 
La fase folicular comienza el primer día de la menstruación y termina cuando se produce la 
ovulación, es decir en un ciclo de veintiocho días, dura desde el día uno al catorce. 
En el ovario se desarrollan múltiples folículos, de los cuales solo uno será seleccionado. El 
llamado folículo de Graaf madurará, conteniendo en su interior un óvulo, que será liberado 
durante el proceso de ovulación, que dura desde el día catorce al diecisiete. En este momento 
se producirá también el engrosamiento y proliferación celular del endometrio, necesarios para 
crear en el útero las condiciones que permitan albergar un embrión13. 
 
En la fase lútea se liberan las hormonas en el ovario, en especial la progesterona. El ciclo, y en 
concreto esta fase, finalizará tras la fecundación, si se produce, o con la disminución de los 
niveles hormonales y con la menstruación, iniciando una nueva fase folicular13. 
 
Figura 1. Fluctuaciones hormonales durante el ciclo ovárico de la mujer. 
 
 
 
 
 
 
 
 1 14 28 
 
 
Estradiol. 
 
Progesterona. 
 
 
Hormonas implicadas en el ciclo ovárico: Eje hipotálamo-hipofisario-ovárico. 
 
El ciclo ovárico de la mujer está regulado por el Sistema Nervioso y por el Sistema Endocrino, a 
través del eje Hipotálamo-Hipofisario-Ovárico. 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 7 
 
A nivel del hipotálamo se sintetiza la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRh), la cual 
actúa sobre la hipófisis, donde se sintetizan las hormonas foliculoestimulante (FSH) y 
luteinizante (LH), hormonas clave en la regulación del ciclo ovárico de la mujer14. 
 
A nivel del ovario se produce la síntesis de las hormonas sexuales femeninas: progesterona, 
estradiol, así como los factores de crecimiento y péptidos gonadales: activina, inhibina y 
folistatina. A lo largo del ciclo se lleva a cabo la retroalimentación de hipotálamo e hipófisis (fig. 
2) que hará que, dependiendo en qué fase del ciclo se encuentre, varíe la secreción de GnRh y 
por tanto, de las gonadotropinas FSH y LH14. 
 
Figura 2. Retroalimentación del eje hipotálamo-hipofisario-ovárico. 
 
 
 
Hipotálamo: produce la hormona liberadora de gonadotropinas o GnRh. La forma de secreción 
es característica: a pulsos. A su vez, la GnRh modula la secreción de las hormonas hipofisarias 
de la misma manera, produciendo picos de aparición de las diferentes hormonas durante el 
ciclo. 
 
Hipófisis: sintetiza las hormonas FSH y LH. La FSH estimula el crecimiento folicular, mientras que 
la LH se encarga de producir la ovulación y de la formación del cuerpo lúteo. 
 
Ovario: productor de las hormonas sexuales femeninas estradiol y progesterona, así como de la 
inhibina, que suprime la síntesis de FSH; la activina cuya acción es la de favorecer la síntesis de 
la FSH y la folistatina, con efecto inhibidor de la secreción de la hormona FSH en la hipófisis; 
todos estos efectos producidos por acción de la retroalimentación desde el ovario al 
hipotálamo14,15. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hipotálamo
GnRH
Inhibina
Activina
Folistatina
Ovario
Progesterona
Estradiol
Hipófisis
FSH, LH
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Capítulo 2. 
 
Anticonceptivos hormonales: farmacología y mecanismo de acción 
 
Los anticonceptivos hormonales son uno de los métodos de planificación familiar más utilizados, 
junto con el preservativo, especialmente por su seguridad y comodidad de uso. Su utilización no 
solo se centra en sus efectos en cuanto a contracepción, también las mujeres hacen uso de ellos 
para el tratamiento de procesos como el acné o dismenorrea, entre otros. 
En el mercado farmacéutico podemos encontrarnos diversas presentaciones como pastillas, 
parches, implantes, dispositivos intrauterinos o anillos vaginales16. Para acotar este trabajo me 
centraré principalmente en los anticonceptivos hormonales orales. 
 
Farmacología 
 
Los anticonceptivos hormonales orales pueden ser combinados: con estrógeno y progestágeno, 
o bien solo contener progestágeno. 
 
De forma general el estrógeno de elección es el etinelestradiol y para el objetivo de 
anticoncepción la dosis será la mínima: 0,02 mg17,18, mientras que el gestágeno varía, siendo los 
más usados el levonorgestrel o la drospirenona2. 
 
El etinelestradiol se produce por la adición al estradiol de un grupo etinil, que permite que se 
pueda administrar de forma oral, además de potenciar su acción estrogénica. La metabolización 
de este compuesto se realiza por vía hepática, mediante reacciones de primera fase formará 
derivados hidroxilados aromáticos, y por reacciones de segunda fase sulfatos y conjugados 
glucurónidos19. A continuación pasa por el conducto biliar, y por último, lo reabsorberá el 
intestino delgado o se eliminará por las heces. El etinilestradiol atraviesa la barrera placentaria20. 
 
Actualmente los criterios de elección del compuesto etinilestradiol consisten en tratar con la 
menor dosis eficaz posible, contribuyendo a disminuir sus efectos secundarios. La clasificación 
actual según dosis es: 
 
- Dosis muy baja: 15 mcgr. 
- Dosis baja: 20-35 mcgr. 
- Dosis alta: 40-50 mcgr. 
 
Lo ideal es optar por anticonceptivos con una cantidad inferior a 35 mcgr, puesto que la 
evidencia científica ha demostrado que tienen la misma eficacia a la hora de prevenir unembarazo17,18. 
En cuanto a los progestágenos existen dos grandes grupos, los derivados de la 19-
nortestosterona y los derivados de la 17-hidroxiprogesterona, así como actualmente se han 
comenzado a usar otros tipos de progestágenos: los derivados de la 17-alfa-espironolactona, 
como es la drospirenona. Su metabolismo es hepático y su vía de excreción es la renal. En la 
tabla 1 una breve clasificación de estos compuestos. 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Tabla 1. Clasificación de los progestágenos3. 
 
Derivados de la 19-
nortestosterona. 
 
Derivado de la progesterona Derivado de la 17-alfa-
espironolactona 
Segunda generación: 
- Levonorgestrel 
- Noretisterona 
 
- Acetato ciproterona - Drospirenona 
Tercera generación: 
- Gestodeno 
- Desogestrel 
- Norgestimato 
 
 
Como compuesto para la contracepción el etinelestradiol de forma aislada no cumple con la 
función de influir en el ciclo ovárico de la mujer, es necesario combinarlo con algún tipo de 
progestágeno que actúe sinérgicamente y potencie su efecto. Sin embargo, los progestágenos 
por si solos sí que pueden ser usados con ese objetivo, puesto que actúan sobre el moco cervical, 
espesándolo, impidiendo así que los espermatozoides penetren en el útero21,22. 
Tabla 2. Farmacocinética del etinelestradiol y la drospirenona. 
Compuesto Vía de 
administración 
Vía de 
metabolización 
Vía de excreción 
Etinilestradiol Junto con gestágeno: 
Oral, I.M, 
transdérmica, 
subcutánea, 
intrauterina. 
Hepática Intestinal 
Drospirenona Oral, I.M, 
transdérmica, 
subcutánea, 
intrauterina. 
Hepática Urinaria 
 
En la actualidad, a la hora de combinar compuestos, es muy importante la elección del 
progestágeno puesto que con el paso de los años se ha ido reduciendo la dosis del estrógeno, 
compuesto que la evidencia científica ha demostrado que es el componente más ligado a los 
efectos secundarios, en cuanto a los problemas circulatorios como el tromboembolismo. 
Haciendo un breve recordatorio a la historia de estos fármacos, los primeros anticonceptivos 
orales de la década de los 60 presentaban altas dosis de estrógenos y progestágenos. El uso de 
ambos compuestos juntos, por su efecto sinérgico permite disminuir la dosis de cada uno, 
potenciando los estrógenos el efecto de los progestágenos17. 
Por la necesidad de estudiar el efecto secundario tromboembolismo de las pastillas 
anticonceptivas orales combinadas, se ha hecho hincapié en la investigación de los compuestos 
progestágenos, con el objetivo de saber si hay alguno que presente más riesgo para la salud. 
Mientras que estudios de 2007 llegaban a la conclusión de que, comparando el levonorgestrel 
con la drospirenona, ambos progestágenos tienen la misma seguridad; la evidencia actual 
asegura que existe entre dos y tres veces más riesgo de padecer efectos secundarios como la 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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trombosis con el uso de drospirenona. Por tanto, el progestágeno de primera elección será 
levonorgestrel frente al gestodeno, desogestrel, acetato de ciproterona o drospirenona12,23-27. 
 
Mecanismo de acción 
 
Los anticonceptivos hormonales actúan a dos niveles: el primario consiste en la inhibición de la 
ovulación natural de la mujer, de forma que la administración exógena de estas hormonas 
produce una retroalimentación negativa sobre el eje hipotálamo-hipofisario, inhibiendo la 
síntesis de GnRh y por tanto, la de las gonadotropinas FSH y LH, lo que provocará que la FSH no 
produzca la foliculogénesis, y la LH no estimule la ovulación19. 
• El estrógeno inhibe la síntesis de FSH, evitando así que se produzca la foliculogénesis. A 
su vez, potencia el efecto de los progestágenos, principal compuesto en cuanto a dosis 
por su mayor seguridad. 
• El gestágeno inhibe la producción de LH, es decir, evita la formación del cuerpo lúteo y 
también el pico preovulatorio. 
El segundo nivel de actuación consiste en efectos a nivel del endometrio, trompas de Falopio y 
moco cervical, que evita la fecundación e implantación de un embrión. 
El estrógeno impide que se estimule y proliferen las células del endometrio, mientras que el 
progestágeno tiene efecto sobre el aumento del espesor del moco cervical, que dificulta la 
migración espermática19,28. 
 
Tabla 3. Tipos de anticonceptivos orales (ACO) 2. 
 
Tipo de ACO Estrógeno Progestágeno 
Combinado: 
Estrógenos 
+ gestágenos 
Monofásico 
Bifásico 
Trifásico 
 
 
Etinilestradiol Levonorgestrel 
Noretisterona 
Gestodeno 
Norgestimato 
Desogestrel 
Acetato 
ciproterona 
Drospirenona 
Gestágenos Monofásica Desogestrel 
 Postcoital Levonorgestrel 
 
Los anticonceptivos combinados orales podemos encontrarlos en presentaciones de veintiún 
comprimidos, debiendo dejar siete días de descanso hasta el inicio de un nuevo ciclo con las 
pastillas, o bien en presentaciones de veintiocho comprimidos, siete de los cuales no tienen 
principio activo, simulando la semana de descanso. 
 
Pueden clasificarse a su vez en (tabla 3): monofásicos, bifásicos o trifásicos. Los primeros no 
varían su composición a lo largo de los veintiún días de tratamiento con principio activo, los 
segundos varían una vez y los terceros varían la composición cada siete días2,27,29. 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Influencia de las hormonas a nivel cerebral 
 
Tras una breve introducción en el área de la fisiología de la mujer, la pregunta principal sobre la 
que se pretende dar información es: 
¿Existe un aumento de la prevalencia de depresión en mujeres que usan anticoncepción 
hormonal oral? 
 
Por tanto, cabe preguntarse si las hormonas juegan algún tipo de papel en la transmisión 
nerviosa de la información, y consecuentemente en la conducta, y en caso afirmativo, con qué 
mecanismos se produce. El estudio de los mecanismos que participan en la depresión y de la 
fisiología del cerebro ha sido y es un tema que genera gran interés, y sobre el que se ha invertido 
mucho tiempo de estudio. 
 
Plasticidad 
 
Uno de los factores más importantes por los que ejercen influencia las hormonas a nivel cerebral 
se centra en el fenómeno de la plasticidad. Consiste en los cambios que es capaz de sufrir el 
cerebro por sí mismo para adaptarse a los cambios, creando nuevas conexiones sinápticas30. 
 
Las hormonas sexuales, junto con el resto del sistema endocrino, tienen dos efectos principales: 
el organizador y el activador. 
 
El primer efecto hace referencia a la capacidad de las hormonas durante el periodo de 
crecimiento de moldear la forma del cerebro. Desde la etapa fetal a la adolescencia las 
hormonas influyen en su estructura. Esto quiere decir que efectivamente, existen diferencias a 
nivel cerebral entre los distintos sexos, y estas vienen derivadas de la composición a nivel de 
esteroides sexuales. 
El segundo efecto, a colación de lo explicado en el punto anterior, hace referencia a contextos 
específicos en los que la respuesta del sistema nervioso viene influida por las hormonas. Esto 
quiere decir que la conducta con la que el ser humano responda a un determinado estímulo, 
variará en función a la respuesta endocrina y su efecto en los receptores cerebrales31. 
Además, las investigaciones llevadas a cabo durante el siglo XX han llegado a la conclusión de 
que efectivamente, las hormonas sexuales no solo tienen su efecto a nivel de las gónadas 
masculinas y femeninas, sino que además se han hallado receptores de estrógenos en diversas 
áreas del cerebro, concretamente en el hipotálamo, donde se sintetiza la hormona GnRh; la 
amígdala, el área del cerebro donde se procesa el valor e intensidad de las emociones32; el 
hipocampo y la corteza prefrontal, enlazada a las funciones ejecutivas; en resumen, están 
presentes en áreas que están relacionadas con el control emocional33,34. Todas ellas forman 
parte directade los sistemas de neurotransmisión: noradrenérgico, colinérgico, serotonérgico, 
dopaminérgico, glutamatérgico, gabaérgico, del neuropéptido Y y opioide; un breve esquema 
de cómo influyen los neurotransmisores en el SNC y a qué sistema pertenecen queda reflejado 
en la tabla 4. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Tabla 4. Neurotransmisores35-40. 
 
Neurotransmisor Sistema al que pertenece Efectos 
Acetilcolina Colinérgico Sinapsis excitatorias e inhibitorias 
del SNC. 
 
Serotonina Serotonérgico Mejora en el talante, conducta, 
movimiento, apreciación del dolor, 
actividad sexual, apetito, 
secreciones endocrinas, funciones 
cardíacas, ciclo sueño-vigilia. 
 
Noradrenalina Noradrenérgico Sintetizado en la vigilia y en 
episodios de estrés. 
 
Dopamina Dopaminérgico Efecto inhibidor del SNC, mantiene 
el estado de alerta en episodios de 
estrés. 
 
GABA Gabaérgico Efecto inhibidor del SNC, participa 
en los episodios de estrés. 
 
Glutamato Glutamatérgico Efecto excitatorio del SNC. 
 
Los receptores de estrógenos se encuentran de forma específica tanto a nivel de los cuerpos 
celulares como de las dendritas, terminaciones presinápticas, mitocondrias y células de la glía. 
En síntesis, las hormonas a nivel del SNC participan en el intercambio de información 
influyendo sobre las emociones, además de en el sueño y el manejo del estrés, teniendo efecto 
tanto en procesos de excitación, como de inhibición, que modularán el estado de ánimo de la 
mujer y por tanto se manifestará en su conducta33,34. 
 
 
Depresión 
 
Existen diversos tipos de depresión, siendo los más comunes el trastorno depresivo mayor y el 
trastorno distímico. 
 
El “Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM V” no hace diferencia 
entre el diagnóstico para mujeres u hombres; según este manual los criterios para el diagnóstico 
de un episodio depresivo mayor abarcan: 
 
Tabla 5. Criterios diagnósticos del Trastorno Depresivo Mayor según el DSM V 41. 
 
A. Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día, casi cada día según lo indica el propio 
sujeto (p.ej, se siente triste o vacío) o la observación realizada por otros (p.ej,llanto). En los 
niños y adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable. 
Disminución acusada del interés o de la capacidad para el placer en todas o casi todas las 
actividades, la mayor parte del día, casi cada día (según refiere el propio sujeto u observan 
los demás). 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Pérdida importante de peso sin hacer régimen o aumento de peso (p.ej, un cambio de más 
del 5% del peso corporal en 1 mes), o pérdida o aumento del apetito casi cada día. Nota: en 
niños hay que valorar el fracaso en lograr los aumentos de peso esperables. 
Insomnio o hipersomnia casi cada día. 
Agitación o enlentecimiento psicomotores casi cada día (observable por los demás, no meras 
sensaciones de inquietud o de estar enlentecido). 
Fatiga o pérdida de energía casi cada día. 
Sentimientos de inutilidad o de culpa excesivos o inapropiados (que pueden ser delirantes) 
csi cada día (no los simples autorreproches o culpabilidad por el hecho de estar enfermo). 
Perdida de la capacidad para pensar o concentrarse, o indecisión, casi cada día (ya sea una 
atribución subjetiva o una observación ajena) 
Pensamientos recurrentes de muerte (no sólo temor a la muerte), ideación suicida recurrente 
sin un plan específico o una tentativa de suicidio o un plan específico para suicidarse. 
 
La definición indica además que para poder ser catalogado de esta manera se han de cumplir 
una serie de puntos: 
 
B. Los síntomas no cumplen los criterios de un episodio mixto. 
 
C. Los síntomas provocan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de 
otras áreas importantes de la actividad del individuo. 
 
D. Los síntomas no son debidos a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p.ej un 
medicamento) o una enfermedad médica (p.ej, hipotiroidismo). 
 
E. Los síntomas no se explican mejor por la presencia de un duelo (p.ej después de la pérdida de 
un ser querido), los síntomas persisten durante más de 2 meses o se caracterizan por una 
acusada incapacidad funcional, preocupaciones mórbidas de inutilidad, ideación suicida, 
síntomas psicóticos o ralentización psicomotora. 
 
El trastorno distímico consiste en una depresión moderada que persiste más de dos años, pero 
que no cumple los criterios para el trastorno depresivo mayor. 
 
Otro tipo de depresión es el trastorno depresivo no especificado, que abarca aquellos 
trastornos que no cumplen criterios de clasificación para otros trastornos pero que presentan 
síntomas depresivos. 
 
Como bien indican las definiciones, en el condicionante D para el diagnóstico de Trastorno 
Depresivo Mayor, queda claro que, en el tema específico de la depresión relacionada con la 
anticoncepción hormonal oral, los profesionales sanitarios no podemos hablar de esta patología 
como efecto secundario, por su relación con un medicamento. Por tanto, los problemas 
emocionales que puedan surgir de la toma de anticonceptivos, solo podrán clasificarse como un 
trastorno distímico o un trastorno depresivo no especificado. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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Tabla 6. Tipos de trastornos depresivos según el DSM V 41. 
 
Trastorno depresivo mayor Trastorno distímico Trastorno depresivo no 
especificado 
- Cumple todos los criterios 
diagnósticos. 
- >2 años de duración. 
- No cumple todos los 
criterios diagnósticos. 
- Síntomas depresivos. 
- No cumple criterios 
diagnósticos de otros 
trastornos. 
 
 
 
Causas de los trastornos depresivos en la mujer5 
 
La depresión es una de las patologías que más afecta e incapacita a las mujeres en la actualidad, 
por tanto, su estudio es vital para mejorar su calidad de vida. 
 
Los estudios actuales apuntan a que es una enfermedad multifactorial, cuyos factores 
principales son la genética, la neuroquímica, las hormonas y factores psicosociales como el 
estrés, el estilo de vida, la geografía… 
De todos estos aspectos influyentes, debido al interés en relación con la anticoncepción 
hormonal oral nos centraremos en las teorías de la neuroquímica, así como de los efectos 
hormonales a nivel cerebral y su influencia en el estado de ánimo. 
Aunque aún son necesarios más estudios en este campo, la evidencia en cuanto a fisiopatología 
de la depresión y trastornos anímicos asienta en el funcionamiento del eje hipotálamo-
pituitario-gonadal, puesto que una irregularidad en éste desembocará directamente en cambios 
en la función adrenal, tiroidea y gonadal. 
 
Teorías neurobiológicas de la depresión 
Una de las teorías más recurrentes en la literatura científica es la debida a la actuación de los 
neurotransmisores39. Estas teorías neuroquímicas se centran especialmente en dos 
neurotransmisores principales: la serotonina y el ácido gamma-aminobutírico37. 
Las principales líneas de investigación se centran en: 
- El déficit de piridoxina o vitamina B6 inducida por el estrógeno y la consecutiva 
disminución de los niveles de ácido gamma-aminobutírico (GABA) y la serotonina, 
neurotransmisores clave en la regulación del estrés, el talante, la conducta, el ciclo 
sueño-vigilia, etc36,42. 
- El aumento del ácido gamma-aminobutírico (GABA) por la mediación de la progesterona 
y el estrógeno que induce la inhibición y supresión de la excitación por la vía 
glutamatérgica39,42-45. 
- El aumento de la enzima monoamino oxidasa (MAO) debido a la progesterona que 
deriva en una concentración menor de serotonina39,42-45. 
Por tanto, y de forma resumida, en distintas regiones del cerebro se encuentran receptores de 
estrógenos, progesterona y testosterona, que forman parte de las vías de neurotransmisión 
serotonérgica, noradrenérgica, gabaérgica, dopaminérgica, colinérgica…35.Diversas teorías relacionan las áreas en las que se encuentran estos receptores y el efecto de los 
neurotransmisores, con patrones comunes que son clave en la fisiopatología de la depresión. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 15 
 
Dentro de estos mecanismos las hormonas sexuales juegan un papel muy importante, el 
estrógeno tiene efectos neuromoduladores y forma parte de los procesos de transcripción de 
genes para codificar enzimas, las cuales a su vez median la síntesis de neurotransmisores31. 
Además, los estrógenos también afectan a la actividad de los receptores celulares 
serotonérgicos aunque no está demostrada su interacción de forma directa35. 
 
 
Otros factores 
 
Genética 
 
Existe un componente hereditario en el diagnóstico de trastornos depresivos, habiéndose 
encontrado, por ejemplo, relación con el gen de la proteína transportadora de serotonina48. Aun 
así la influencia de la genética en los trastornos anímicos es moderada, es decir, no es un factor 
que por sí solo predisponga a padecer el trastorno, han de existir otros factores añadidos. 
 
Estrés y factores socioculturales 
 
Además de los factores asociados a la herencia y a los posibles derivados de una medicación 
como los anticonceptivos y sus efectos, existe otro gran grupo de factores que pueden propiciar 
esta enfermedad, de forma aislada o como agravantes del anterior. Uno de los más importantes 
es el estrés continuado en el tiempo. 
El estrés continuado produce una cascada de mecanismos que origina un aumento de los 
procesos inflamatorios en el organismo. La inflamación hace que se libere la hormona cortisol, 
como principal antiinflamatorio, que a su vez induce una disminución del triptófano, y como 
consecuencia también una disminución de la serotonina. De igual manera esta inflamación 
mantenida produce un aumento de la neurodegeneración, dificultando los procesos de 
información neuronal48. 
El propio estilo de vida de la persona y su personalidad, más tendente a padecer estrés o a ser 
más pausada y tranquila, serán puntos que influirán. Además, factores como la zona geográfica 
en la que habite y su clima, con diferencias entre países más fríos o con menores horas de sol al 
día, la situación laboral y social, y los antecedentes médicos son otra serie de factores 
predisponentes5. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Influencia hormonal 
Plasticidad cerebral. 
Efecto neuromodulador. 
Parte del proceso de transcripción génica. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 16 
 
Capitulo 3. 
 
Evidencia científica 
 
En los últimos años, con el fin de estudiar si existe o no un patrón de aparición de depresión en 
mujeres en edad fértil, como efecto secundario a las pastillas anticonceptivas, se han realizado 
diversos estudios con diferentes métodos de investigación. Estos estudios, tanto retrospectivos 
como prospectivos, llegan a resultados dispares: mientras existe un grupo que considera la 
depresión como un efecto secundario directo y negativo, otros resaltan beneficios en el estado 
mental de las mujeres con respecto al ánimo. 
La posibilidad de la aparición de depresión como efecto de la anticoncepción hormonal oral 
aparece reflejada dentro de la descripción de efectos adversos del prospecto (fig.3), tanto de 
los más usados como etinilestradiol - levonorgestrel, así como los que contienen etinilestradiol 
- drospirenona; aun así se siguen realizando estudios para evaluar el riesgo real de este 
problema en las mujeres y la detección de los factores asociados, para que los sistemas de salud 
adopten medidas acorde al sector de la población afectada, o potencialmente en riesgo. 
 
Figura 3. Efectos adversos del ACO Yasmin49. 
 
 
 
*Yasmin: drospirenona/etinilestradiol 3/0,03mg. 
 
Teniendo en cuenta que puede ser un problema de salud a considerar, a continuación una breve 
exposición de estos estudios. 
 
1. Título: “Use of hormonal contraceptives in relation to antidepressant therapy: A 
nationwide population-based study”50. 
País: Suecia. 
Año: 2008. 
Estudio cuyo objetivo es ver la relación existente entre el uso de la píldora anticonceptiva y la 
prevalencia de tratamiento con fármacos antidepresivos. 
Consistió en un estudio cuantitativo descriptivo de tipo transversal en Suecia, en noviembre de 
2008, en una muestra de 917.993 mujeres, con un rango de edad entre los 16 y 31 años. 
 
Para poder realizarlo la muestra fue separada en usuarias y no usuarias de anticoncepción 
hormonal, y en usuarias y no usuarias de antidepresivos. La información se extrajo de la base de 
datos “Sweedish Prescribed Drug Register” (Registro de prescripción de medicamentos de 
Suecia) desde el 1 de junio de 2005 hasta el 30 de junio de 2008. Para acotar mejor el estudio y 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 17 
 
eliminar factores limitantes, se realizó una subdivisión en los anticonceptivos hormonales, 
diferenciándolos en combinados y no combinados. 
El requisito para ser considerado como usuaria de uno de los dos medicamentos era que debería 
habérsele dispensado el medicamento al menos una vez en ese periodo. 
 
El resultado final de este estudio coindice en que el uso de terapia antidepresiva es menos 
común en usuarias de anticonceptivos hormonales que en no usuarias, es decir, encuentra un 
efecto positivo del tratamiento en usuarias; si bien también concluye que la terapia 
antidepresiva es más utilizada en aquellas mujeres que utilizan anticonceptivos con solo 
progesterona respecto a los combinados, especialmente entre los 16 y los 19 años. 
2. Título: “Hormonal contraception and mental health: results of a population-based 
study”51. 
País: Finlandia 
Año: 2011. 
 
Es un estudio descriptivo transversal, realizado en Finlandia entre el año 2000 y 2001, en un 
total de 8028 mujeres de treinta años o más, escogidas mediante un muestreo aleatorio 
estratificado. El objetivo de sus investigadores era ver si existía relación entre la toma de 
anticonceptivos orales y el diagnóstico de depresión. 
Para evaluar la muestra, en este caso en lugar de obtener datos de prescripción farmacológica, 
se obtuvo la información mediante una entrevista y un examen de salud, así como con cuatro 
encuestas autoadministradas. Para conocer el estado de salud mental se realizó una entrevista 
específica realizada por enfermeras entrenadas. Dentro de la muestra, la población más joven, 
entre los 18-29 años, se incluyó en un grupo aparte, realizándoles también una entrevista y 
autoadministrándose dos cuestionarios. 
Como forma de disminuir factores limitantes para los resultados, la evaluación del estado de 
salud físico y mental, de las mujeres incluidas en la muestra, se realizó de forma previa. 
Tras analizar los datos, teniendo en cuenta las variables sociodemográficas, se llegó a dos 
conclusiones: se encontraron beneficios en el estado de ánimo y el carácter, mientras que, por 
otro lado, también se encontró asociado un mayor riesgo de dependencia alcohólica. 
3. Título: “Further evidence for lack of negative associations between hormonal 
contraception and mental health”52. 
País: Finlandia. 
Año: 2012. 
Estudio posterior al mencionado anteriormente, de cohortes retrospectivo, que pretende seguir 
sus directrices y aumentar el conocimiento de aquel, mediante la encuesta nacional de salud 
“Finrisk” de 1997, 2002, y 2007, en 6 ciudades diferentes del país. Este estudio consistía en una 
encuesta autoadministrada y un examen de salud. La muestra fue elegida de forma aleatoria 
con 10.000 mujeres entre los 25-64 años, y 750 entre los 65-74. 
El resultado final coincidía con el estudio previo, no existe asociación negativa entre ambas 
variables. En concreto este estudio además descarta que el dispositivo intrauterino de 
levonorgestrel esté asociado a síntomas en el estado de ánimo o depresión. 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivoshormonales orales? 
 
pág. 18 
 
4. Título: “Association of hormonal contraceptive use with reduced levels of depressive 
symptoms: a national study of sexually active women in the United States”53. 
País: Estados Unidos. 
Año: 2013. 
Es un estudio realizado en Estados Unidos haciendo uso de datos obtenidos del “National 
Longitudinal Study of Adolescent Health”. Se realizó un seguimiento longitudinal desde 1994 a 
2008, con una muestra de 90.000 adolescentes con pareja, a las cuáles se les realizaron cuatro 
encuestas a lo largo de los años. 
Los resultados encuentran efectos positivos en la relación entre el uso de anticoncepción 
hormonal y la depresión, incluso ante intentos de suicidio. Esta asociación se da tanto en 
anticonceptivos combinados como aquellos de solo progestágeno. 
 
5. Título: “Association of hormonal contraception with depression”6. 
País: Dinamarca. 
Año: 2016. 
 
Es el estudio más reciente sobre la relación de los anticonceptivos con el efecto secundario 
depresión o síntomas depresivos. 
Consiste en un estudio cuantitativo analítico de cohortes prospectivo, en una muestra de 
1.061.997 mujeres en un rango de edad de 15 a 34 años, en un periodo de tiempo que abarca 
desde 1 de enero del 2000 hasta el 31 de diciembre de 2013. 
 
Se tuvieron en cuenta dos variables: toma de pastillas anticonceptivas, y depresión entendida 
como: diagnóstico médico o toma de medicación antidepresiva. 
La información fue obtenida del Registro Nacional de Prescripción Farmacológica de Dinamarca, 
del cual se escogió a mujeres que se encontraban usando pastillas anticonceptivas en el periodo 
estudiado. 
La variable “depresión” se midió también mediante la prescripción de antidepresivos en el 
registro nacional, así como mediante los diagnósticos de depresión obtenidos del “Psychiatric 
Central Research Register”. 
Tanto al inicio del estudio, como durante el mismo se excluyó a ciertas mujeres por variables 
como: diagnóstico de depresión y uso de antidepresivos antes del comienzo del estudio (1 de 
enero del 2000) o antes de los quince años, diagnosticadas de otros trastornos psiquiátricos, 
cáncer, trombosis venosa o mujeres inmigrantes después de 1995, por no existir en Dinamarca 
registros de aquellos factores excluyentes. Para poder acotar aún más el estudio se tuvieron en 
cuenta variables que podían limitarlo como: edad, nivel educativo, diagnóstico de Síndrome de 
Ovario Poliquístico, endometriosis, tabaco e índice de masa corporal mediante registros 
nacionales oficiales. 
 
Con los datos de los registros nacionales de prescripción farmacológica y los de psiquiatría, los 
resultados de este estudio concluyeron que, tras los catorce años que duró, un número de 
133.178 mujeres, tanto aquellas que tomaban anticonceptivos hormonales como las que no lo 
hacían, precisó algún tipo de tratamiento antidepresivo, de las cuales 23.077 mujeres fueron 
diagnosticadas de depresión. 
Dentro de las usuarias de anticonceptivos, resultó similar el número de diagnosticadas de 
depresión o tratadas con antidepresivos entre las que tomaban pastilla combinada respecto de 
aquellas que tomaban progesterona, u otros métodos como anillo vaginal con etonogestrel, 
parche transdérmico con norgestrolmin... Así mismo, el estudio también concluye que la 
probabilidad de ser diagnosticada o tratada por síntomas depresivos, aumentaba a mayor 
tiempo de tratamiento anticonceptivo hormonal. En cuanto a la importancia de los compuestos 
hormonales, aumentó el riesgo en aquellas usuarias de anticonceptivos combinados con acetato 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 19 
 
de ciproterona, dienogest y parches y anillos vaginales, frente a la combinación etinelestradiol - 
levonorgestrel. 
 
La conclusión final del estudio fue que el uso de anticonceptivos hormonales, de todo tipo, 
estaba asociada con un aumento del riesgo de diagnóstico o tratamiento de depresión , 
especialmente en adolescentes. 
 
Limitaciones de los estudios54 
 
Una vez descritos los estudios, de forma breve, es preciso conocer si estos tienen validez. 
 
Error aleatorio. 
Para realizar un estudio con una correcta precisión es importante obtener una muestra 
significativamente grande, en lo cual cabe destacar la muestra de los estudios 1 y 2, mientras 
que el resto también cuentan con una muestra amplia, solo estos dos cuentan con entre 900.000 
y 1.000.000 de mujeres, por lo que cabría esperar mayor precisión en los resultados obtenidos 
de estos estudios, frente al resto. 
 
Error sistemático. 
 
Consiste en ver si un estudio tiene suficiente validez interna como para finalmente tener validez 
externa, y ser extrapolable. Como sabemos, para poder determinar si un estudio tiene la validez 
interna que se requiere, se deberán eliminar los sesgos de selección, de información y los 
factores de confusión. 
Los sesgos de selección en estos estudios han sido eliminados puesto que se han elegido las 
muestras mediante muestreo aleatorio estratificado. Dentro de cada tipo de muestra, y los 
subgrupos, la forma de elección de estos dentro de cada estudio es la misma, es decir, dentro 
de los obtenidos de un registro nacional, ambos subgrupos han sido elegidos según la 
prescripción farmacológica de un medicamento u otro, eliminando otro posible sesgo. 
 
Por otro lado, los estudios recogidos, además, eliminan posibles factores limitantes como 
pueden ser los antecedentes de padecimiento de otras alteraciones anímicas o enfermedades 
mentales o de otro tipo anteriores al estudio. Gracias a los conocimientos aportados por otros 
estudios como el de Borgström55 sabemos que existe mayor propensión a padecer efectos 
secundarios tomando ACOS, en las personalidades tendentes a mayor vulnerabilidad a padecer 
ansiedad o estrés; por otro lado según Segebladh56 aquellas personas que en algún momento 
del tratamiento han comentado la existencia de algún tipo de cambio en su estado de ánimo, 
tienen mayor tendencia a sufrir trastornos como depresión o ansiedad posteriormente; y según 
Hall58 el hecho de tener un tipo de personalidad depresivo o sufrir estrés, condicionará en mayor 
medida la aparición de efectos adversos. 
 
Por el contrario, hay factores que no han podido eliminar, en relación al error aleatorio, a pesar 
de que los estudios 1 y 2 tienen una muestra grande, ésta se encuentra concentrada en un único 
país, y por tanto, en un entorno geográfico reducido, con unas características demográficas, 
modo de vida, climatología, incluso posiblemente creencias muy concretas. Debido a la 
diversidad de poblaciones a nivel mundial, es necesario plantearse que los resultados en países 
como Dinamarca, Suecia o Finlandia pueden no ser extrapolables a otros lugares como España, 
es decir, que la validez externa puede estar en duda. 
 
A la hora de comparar el planteamiento de los estudios, cabe destacar la diferencia entre un 
estudio retrospectivo y uno prospectivo y las limitaciones que habrá que tener en cuenta: el 
primer tipo de estudio contará con el riesgo de tener errores de memoria de las participantes y 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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de ser menos sistemático en la recogida de datos, mientras que el segundo dará mejor 
información, pero existirá el riesgo de perder participantes a lo largo de los años. 
 
Conclusiones generales derivadas de estos estudios 
 
Los estudios de carácter retrospectivo concluyen que el uso de anticonceptivos hormonales 
orales aporta a las usuarias un beneficio en el estado anímico, aunque no llegan a una conclusión 
exacta sobre la asociación de los anticonceptivos hormonales orales y la depresión. El único 
estudio realizado de forma prospectiva, motivado por la aparición del resto de literatura 
científica, detecta una posible relación negativa, este es “Association of hormonal contraception 
with depression”. Debido a la existencia de un único estudio con metodología prospectivay que 
la conclusión a la que llega no es concordante con los estudios retrospectivos, es imprescindible 
que se realicen nuevas investigaciones con una metodología similar, en una población de 
características parecidas, y a poder ser en zonas geográficas diferentes, para así poder ver si el 
resultado positivo se debe a factores como la geografía, las características de la muestra 
seleccionada, la existencia de múltiples formas de presentación y combinaciones de compuestos 
y dosis hormonales de este tipo de anticonceptivos, etc. 
 
 
Papel de enfermería 
 
Tras la revisión bibliográfica una de las conclusiones a las que llegan la mayor parte de los 
estudios, es la necesidad de asesorar correctamente a las mujeres, antes y durante la elección 
del método anticonceptivo. Es primordial conocer y valorar las características particulares de 
cada una de ellas basándonos en aspectos como su nivel educacional, recursos económicos, 
apoyo social, antecedentes ginecológicos, obstétricos y en especial psiquiátricos, conocimientos 
en el área de la anticoncepción o creencias previas, entre otros. Aunque las mujeres con 
antecedentes personales de haber sufrido alteraciones anímicas tienen una mayor percepción 
del riesgo y, por tanto, una tendencia menor a escoger métodos anticonceptivos como la pastilla 
anticonceptiva58,59, ya que suelen tener de base patologías como ansiedad y susceptibilidad al 
estrés frente a las que no reportan alteraciones55, en ellas también es fundamental valorar 
estos aspectos de la personalidad. 
Conociendo que las chicas que suelen comentar efectos sobre el estado de ánimo son, 
principalmente, caucásicas o del sur de Asia, solteras y jóvenes, aunque habrá que dar cobertura 
a todo tipo de mujeres, podremos centrar cierta atención extra a este tipo de población60,61. 
Mediante una valoración holística podremos conocer todas estas particularidades de la mujer, 
que nos harán enfocar las intervenciones de un modo u otro, pero de la forma más certera 
posible. Para ello será fundamental un trabajo interdependiente entre los profesionales de 
atención primaria, desde el médico de familia, que será el profesional que indicará la pauta que 
ha consensuado con la mujer, tras haberle indicado todas sus opciones y haberle valorado, hasta 
nosotros, el personal de enfermería y la matrona. También es interesante contar con el apoyo 
de otros profesionales externos como farmacéuticos, a la hora de captar a aquellas mujeres que 
quieren iniciar este tipo de métodos de anticoncepción pero no conocen el modo, beneficios y 
riesgos, y quizá no se atreven o se deciden a ir al médico para aumentar sus conocimientos. 
Estos profesionales, según el observatorio SEC de salud sexual y reproductiva, animan a las 
mujeres a acudir al médico a recibir información y el 60,3% aconsejan positivamente su uso en 
mayores de 18 años12. 
En la actualidad la enfermería en el área de Atención Primaria se encuentra enfocada al 
tratamiento de enfermos crónicos, y por tanto, de personas de avanzada edad en su gran 
mayoría; tras la infancia, los adolescentes pasan de ser atendidos por el pediatra al médico de 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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cabecera, y dejan de tener los controles rutinarios de etapas anteriores, suele ser común que 
comience una etapa en la cual las personas acuden al médico solo cuando es necesario, 
normalmente por enfermedades agudas. Aun así, los adolescentes, y en concreto ellas, tienen 
múltiples dudas, especialmente en el área de la sexualidad y la anticoncepción, que no saben 
cómo resolver ni a quién acudir para hacerlo, quizá por vergüenza a preguntar. En la gran parte 
de los colegios e institutos se promueve la realización de alguna charla durante la etapa de la 
adolescencia, pero quizá eso no sea suficiente. 
Tras haber hecho un repaso bibliográfico de uno de los posibles efectos secundarios de la 
anticoncepción hormonal oral, en este trabajo se pretende hacer hincapié en la importancia de 
la educación para la salud de los profesionales de enfermería, y de ampliar nuestra presencia en 
la población joven, de visibilizar nuestra profesión y ser accesibles para ellos, y así de esta 
manera poder prevenir problemas derivados del desconocimiento. 
Para ello, a continuación expongo un modelo de plan de cuidados estandarizado en base a la 
taxonomía NANDA, NOC, NIC, dirigido a mujeres en edad fértil, usuarias o potencialmente 
usuarias de anticonceptivos hormonales orales. 
 
 
 
Diagnósticos de enfermería62 
 
 
DxE [00126] Conocimientos deficientes: 
anticoncepción hormonal. 
 
Definición: Carencia o deficiencia de 
información cognitiva relacionada con un 
tema específico. 
 
Dominio: 5 
Clase: 4 
 
 
NOC [1808] Conocimiento: medicación. 
 
Definición: grado de conocimiento 
transmitido sobre el uso seguro de la 
medicación. 
 
Dominio 4: conocimiento y conducta de salud. 
Clase S: conocimientos sobre salud. 
 
NOC [1815] Conocimiento: funcionamiento 
sexual. 
 
Definición: grado de conocimiento 
transmitido sobre el desarrollo sexual y la 
práctica sexual responsable. 
 
Dominio 4: conocimiento y conducta de salud 
Clase S: conocimientos sobre salud. 
Indicadores: 
 
Escala U. 
[180805] Efectos secundarios de la 
medicación. 
 
[180819] Efectos terapéuticos de la 
medicación. 
 
 
 
Escala U. 
[181505] Reproducción. 
 
[181509] Prácticas sexuales seguras. 
 
[181510] Anticoncepción eficaz. 
 
[181513] Estrategias para el sexo seguro. 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 22 
 
NIC [5510] Educación para la salud. 
 
Definición: desarrollar y proporcionar 
instrucción y experiencias de aprendizaje que 
faciliten la adaptación voluntaria de la 
conducta para conseguir la salud en 
personas, familias, grupos o comunidades. 
 
Campo: 3 conductual. 
Clase S: educación de los pacientes. 
 
 
Actividades: 
 
-Organizar reuniones en centros educativos 
con los alumnos, en colaboración con los 
mismos centros, de forma periódica, por 
ejemplo una vez al año o al inicio y fin de los 
cursos. 
 
-Buscar recursos didácticos distendidos para 
captar la atención de las jóvenes. 
 
-Facilitar métodos de resolución de dudas 
anónimas, como un buzón, correo 
electrónico o teléfono de contacto, abierto a 
las jóvenes. 
 
-Acudir en colaboración de una matrona, 
para la resolución de temas más específicos, 
cuando sea posible. 
 
-Creación de una página web abierta a las 
adolescentes con información práctica de los 
métodos anticonceptivos: qué son, cómo 
actúan, cómo usarlos, efectos principales, 
efectos secundarios, consejos para acudir al 
médico de Atención Primaria, así como un 
apartado para dudas personales, que 
resolverá la enfermera desde el Centro de 
Atención Primaria. 
 
 *Escala U: 
1 Ningún conocimiento. 
2 Conocimiento escaso. 
3 Conocimiento moderado. 
4 Conocimiento sustancial. 
5 Conocimiento extenso. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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DxE [00065] Patrón sexual ineficaz m/p 
alteración en la relación con personas 
significativas r/c temor al embarazo, 
conocimiento insuficiente sobre alternativas 
relacionadas con la sexualidad. 
 
Definición: expresiones de preocupación 
respecto a la propia sexualidad. 
 
Dominio 8: sexualidad. 
Clase 2: función sexual. 
 
*Escala m: 
1 Nunca demostrado. 
2 Raramente demostrado. 
3 A veces demostrado. 
4 Frecuentemente demostrado. 
5 Siempre demostrado. 
NOC [1907] Control del riesgo: embarazo no 
deseado. 
 
Definición: acciones personales para 
comprender, evitar o reducir la posibilidad de 
un embarazo no deseado. 
 
Dominio 4: conocimiento y conducta de salud. 
Clase T: control del riesgo y seguridad. 
 
Indicadores: 
Escala m. 
 
[190705] Comprende los procesos 
fisiológicos de la concepción. 
 
[190706] Desarrolla estrategias efectivas de 
prevención de embarazo. 
 
[190708] Se compromete con estrategiasde 
prevención de embarazo. 
 
[190715] Utiliza los servicios sanitarios de 
acuerdo a sus necesidades. 
 
[190719] Controla los cambios en el estado 
general de salud. 
 
NIC: [6784] Planificación familiar: 
contracepción. 
 
Definición: ayudar al paciente a determinar y 
obtener métodos de prevención del 
embarazo. 
 
Campo 3: conductual. 
Clase S: seguridad de los pacientes. 
 
 
Actividades: 
 
-Evaluar los conocimientos y la comprensión 
del paciente sobre las opciones de 
anticoncepción. 
 
-Consultar el historial médico y determinar el 
grado de implicación para usar un método de 
forma constante. 
 
-Comentar los métodos de anticoncepción, 
incluyendo su eficacia, efectos secundarios, 
contraindicaciones, así como signos y 
síntomas que deban notificarse a un 
profesional sanitario. 
 
-Incidir en la importancia de ser constante y 
en la forma de administración. 
 
 
 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
pág. 24 
 
Problemas interdependientes 
 
Problema de colaboración Anticoncepción hormonal oral 
 
Complicaciones potenciales -Síntomas depresivos. 
-Alteraciones anímicas. 
 
Objetivos -Detectar signos y síntomas de inestabilidad 
fisiológica. 
-Reducir la gravedad del hecho. 
 
Actividades -Proporcionar el ambiente idóneo para que la 
paciente exprese su situación anímica. 
 
-Recordar que puede existir el riesgo de 
sufrirlos, pero que no tiene porqué. 
 
-Realizar una valoración holística, indagando 
en otros posibles factores que puedan 
propiciar estos síntomas. 
 
 
 
Conclusión 
 
Aunque en la actualidad la anticoncepción hormonal oral es un método usado habitualmente 
por más de la mitad de las mujeres, la existencia de efectos adversos es un factor que puede 
provocar dudas y problemas en el día a día de las usuarias, disminuyendo su calidad de vida. 
 
La conclusión de los estudios revisados concuerda en que las mujeres manifiestan cambios en 
el estado anímico con frecuencia, pero ninguno puede concluir con seguridad que estos cambios 
se deben a la acción farmacológica de los anticonceptivos orales. Por tanto, será necesaria la 
realización de nuevos estudios en un futuro, que permitan completar la información actual. 
 
Aquellas mujeres que manifiestan cambios en el estado de ánimo es posible que decidan 
suspender el tratamiento anticonceptivo. El personal de enfermería deberá servir de apoyo a 
estas mujeres, dando la información necesaria y trabajando de forma interdependiente con el 
personal médico y resto de profesionales. Aquellas mujeres que decidan hacerlo, deben estar 
informadas de los riesgos y de la importancia de evitar un embarazo no deseado. 
 
Las adolescentes son la población más susceptible a padecer cambios anímicos durante el 
tratamiento anticonceptivo hormonal oral, además de tener mayor desconocimiento, por lo que 
debemos buscar introducir la figura de enfermería en la promoción de la salud a nivel escolar. 
Ser accesibles a la población, de una forma cercana que permita disminuir sus dudas, que sean 
conscientes de los beneficios y de los riesgos, favoreciendo la elección del método más 
adecuado para cada individuo, permitirá disminuir los embarazos no deseados y la 
manifestación de efectos secundarios como la depresión. 
 
Cabe destacar la importancia del papel del equipo multidisciplinar a la hora de detectar los 
problemas de salud de las mujeres, especialmente en el diagnóstico diferencial de la depresión 
y los trastornos anímicos relacionados con la anticoncepción hormonal oral. 
Depresión: ¿un efecto secundario de los anticonceptivos hormonales orales? 
 
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