DESTREZAS Y HABILIDADES EN NIÑOSD E 1 AÑO

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DESTREZAS Y HABILIDADES EN NIÑOSD E 1 AÑO
La evaluación de destrezas y habilidades en niños de 1 año y 5 meses generalmente se centra en observaciones y actividades que permiten a los profesionales de la salud y educadores comprender el desarrollo del niño en áreas clave. No se utilizan pruebas psicológicas tradicionales en esta etapa temprana, ya que los niños a esta edad no pueden participar en cuestionarios o pruebas escritas. En su lugar, se emplean enfoques más prácticos y observacionales. Aquí hay algunas formas de evaluar destrezas y habilidades en niños de esta edad:
1. Observación directa: Los profesionales pueden observar al niño en situaciones de juego y rutina diaria para evaluar sus habilidades motoras, cognitivas, sociales y emocionales. Esto implica observar cómo el niño juega, interactúa con otros y responde a estímulos en su entorno.
2. Escalas de desarrollo: Se utilizan escalas de desarrollo como las Escalas de Desarrollo Infantil de Bayley o el Denver II para evaluar el desarrollo en áreas como la comunicación, la motricidad fina y gruesa, la adaptación social y la cognición. Estas escalas proporcionan una guía para evaluar el desarrollo típico de un niño a esta edad.
3. Evaluación del lenguaje: Se pueden evaluar las habilidades de lenguaje y comunicación del niño mediante la observación de su capacidad para comprender y expresar palabras y conceptos. Las pautas del desarrollo del lenguaje en esta etapa son importantes para evaluar el progreso del niño.
4. Juegos y actividades estructuradas: Se pueden usar juegos y actividades específicas para evaluar ciertas habilidades, como la coordinación mano-ojo, la resolución de problemas simples y la capacidad de atención.
5. Evaluación del comportamiento: Los profesionales pueden evaluar el comportamiento del niño, incluyendo su capacidad para seguir instrucciones, su nivel de actividad y su reacción a situaciones nuevas.
Recuerda que, a esta edad, el desarrollo de los niños puede variar ampliamente, por lo que es importante no comparar a un niño con otros, sino evaluar su progreso en relación con los hitos de desarrollo típicos. Además, es fundamental que cualquier evaluación se realice por profesionales con experiencia en el desarrollo infantil y teniendo en cuenta el contexto y las interacciones familiares del niño.