Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
LA CABAÑA ENSAYO FANY MAYRANI CHUC MUÑOZ 15/11/2016 ENCONTRARNOS CON DIOS ES ENCONTRAR LA PAZ EN NUESTRAS VIDAS LA CABAÑA Hay historias de las América profunda que surgen de pronto y te preguntas si en ciertos lugares de allí no pasa el tiempo. Suelen ser narraciones dotadas de un inmenso ambiente cálido y apetecible. Maravillosas. Las típicas para que, en la época en que vivimos, evolucionen hasta llegar a las novedades en cartelera de cine. En La Cabaña, una repentina excursión familiar de Mackenzie Philips con sus hijos se convierte en tragedia. Por culpa de un hecho fortuito en el lago (de esos sucesos que siempre te preguntarás que pasaría si no hubiese ocurrida la hija pequeña de Mack, Missy, es raptada por un asesino en serie. Todo se torna en desgracia a partir de entonces y Mack decide romper su pacto de fe con Dios. Muchos años después, un día duro de invierno, cuando las casas quedan aisladas de toda civilización, Mack recoge una nota de su buzón. Un tal <<Papá>>, le invita a reunirse con él en la cabaña. Dos curiosidades nos revelaran los detalles de la apasionante trama que llega a continuación: Uno, la cabaña es aquella donde se encontraron los últimos restos de Missy; o sea, el purgatorio de Mackenzie Philips, el lugar maldito de un hombre para el resto de sus días. Y dos, Nan, la mujer del protagonista y madre de los niños, siempre se refería a Dios como Papá. Es decir, ¿Dios le está invitando a una cita? A pesar de lo aparentemente absurdo de la situación, los hechos se desencadenan de forma magistral y cada capitulo se va volviendo más y más interesante a menudo que el libro avanza. La novela tiene justas las páginas, no se excede ni un ápice. No llena de paja nuestra imaginación con conversaciones banales, pensamientos o descripciones por doquier. Amena, es una palabra que definiría bastante bien esta historia. Idea que navegó largo tiempo en la imaginación del autor, el cual explica los pormenores de la historia y sus deseos respecto a ella, en artículo final denominado La historia detrás de La Cabaña. El libro te hace pensar. Sobre todo hace que te preguntes porqué recurrimos a Dios cuando nuestro mundo se llena de indescriptible dolor. Porqué le negamos cuando no nos ayuda La cabaña cuenta la dramática experiencia que viven Mack, el protagonista, y su familia. En una excursión a los bosques de Oregón que hace Mack desaparece Missy, la hija más pequeña, de seis años. Todo parece indicar que se trata de un secuestro y, aunque su cuerpo no aparece, del posterior asesinato, pues las circunstancias son las mismas que otras desapariciones de niñas que conducen a un asesino en serie. Aunque Mack es una persona religiosa como toda su familia, lo sucedido le provoca una profunda crisis que enturbia su relación con Dios. Durante los años siguientes a la muerte de Missy entra en un largo periodo que él define comoLa Gran Tristeza, pues esos trágicos hechos siguen presentes en su vida interior y en el resto de los miembros de la familia. Tres años después, Mack recibe una misteriosa carta firmada por “Papá” (nombre con el que Nan, su mujer, designa afectivamente a Dios), que le invita a pasar un fin de semana en la cabaña de Oregón donde encontraron algunos restos de Missy. Mack piensa que se trata de una broma macabra, o de una invitación del asesino y sin decir nada a nadie se presenta en la cabaña, asumiendo el absurdo de la nota recibida, del viaje y de toda la situación. Y aquí comienza propiamente la novela, pues tras esta introducción se cuenta lo principal: el encuentro en la cabaña con el mismo Dios para abordar las diferencias que los separan. A Mack se le aparecen las tres personas dela Santísima Trinidad: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, cada uno con una imagen muy distinta a la que la tradición teológica y artística cristiana han figurado. El Padre (Papá) es una cariñosa y gruesa mujer negra; el Hijo, con rasgos de Oriente Medio, va vestido de carpintero moderno; el Espíritu Santo es una joven asiática, algo etérea, que se llama Sarayu (nombre de una deidad oriental). El encuentro con las tres personas es uno de los momentos cruciales y más desconcertantes de la novela, pues es el que más cuesta asimilar. Sin embargo, si se supera y acepta el choque que provoca este momento, lo que viene a continuación es un exigente ejercicio religioso y literario de intentar explicar a los lectores contemporáneos la relación de Dios entre sí y con los hombres, relación que, en el caso de Mack, está condicionada porLa Gran Tristezay por el aparente desdén con el que Dios asume la trágica muerte de Missy. Papá, Jesús y Sarayu charlan ese fin de semana con Mack, le explican sus puntos de vista, contestan a sus preguntas. Salen a relucir ideas tan profundas como la reconciliación, el dolor, el perdón, la caridad y, sobre todo, el amor de Dios por cada una de sus criaturas. Y la libertad, que lleva a Dios a aceptar las consecuencias, a veces negativas, que tienen las acciones de los hombres, como sucede en el caso de Missy. CREEN EN DIOS • TODOS ELLOS SE RENCUTRAN CON DIOS CUANDO PASAN LAS COSAS MAS TERRIBLES DEL MUNDO MARCK RECIVE UNA ESTRAÑA CARTA DE DIOS • Mack recibe una extraña carta, al parecer procedente de Dios, donde lo invita a reunirse con él en La Cabaña (lugar donde se encontraron los últimos rastros de Missy), lo cual lo lleva sufrir una serie de cambios que lo volverán diferente con respecto a su percepción de Dios. REFLEXIONAR • NOS AYUDA A ENTENDER UN POCO DE NUENTRA FE Y PODER ENTENDER Y REFLEXIONAR QUE DIOS ESTA EN NUETRAS VIDAS COMO EN TODOS LOS DEMAS
Compartir