Logo Studenta

El significado socio- antropológico del calificativo o apelativo religioso de ciudad morena, referido a la ciudad de Santa Ana

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

KKJOSÉ ALFRRDO VALENCIA ESQUIVEL 1 
 
 
UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR 
FACULTAD MULTIDISCIPLINARIA DE 
OCCIDENTE 
DEPARTAMENTO DE CIENCIAS SOCIALES, 
FILOSOFIA Y LETRAS 
▬▬▬▬ 
Docente: Lic. Francisco Arturo Alarcón 
Alumno/a: José Alfredo Valencia Esquivel 
 
Curso de etnología, 
Ciclo I 
▬
▬
▬
▬
▬
▬
 
2021 
Temática: El significado socio-
antropológico del calificativo o apelativo 
religioso de “ciudad morena”, referido a la 
ciudad de Santa Ana 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 1 
 
Temática: El significado socio-antropológico del calificativo o apelativo religioso de 
“ciudad morena”, referido a la ciudad de Santa Ana1 
 
Por: José Alfredo Valencia Esquivel2 
Docente instructor: Lic. Francisco Arturo Alarcón 
Introducción 
Los calificativos o apelativos son nombres que recibe una persona, lugar o cosas, que por 
lo general son reconocidos por un conjunto de personas, es decir por cultura general en 
términos coloquiales. El calificativo o apelativo de “ciudad morena” es una terminología 
religiosa católica popular con el que se le reconoce a la ciudad de Santa Ana, debido a la 
santa patrona de la ciudad que es la señora Santa Ana, el semblante de la estatua en honor 
a la señora Santa Ana es de color morena (al igual que el de su esposo Joaquín), de ahí 
entonces proviene el calificativo o apelativo de “ciudad morena”. 
Los pueblos de El Salvador siempre en sus festividades patronales dan honra o 
conmemoran sus festividades a un santo, en el caso de la ciudad de Santa Ana, las fiestas 
patronales se celebran en honor a la señora Santa Ana en el mes de julio, de ahí las famosas 
“Fiestas Julias”. La veneración de imágenes religiosas cristinas dentro del catolicismos 
provienen desde la época de la dominación colonial, de la conquista de los españoles por 
el año de 1492, porque la conquista no solo fue de los recursos hermosos y vírgenes de la 
tierra mesoamericana, sino que también existió una conquista religiosa, como estudioso 
de la ciencias sociales y de la cultura social (aspecto o variable fundamental de la 
etnología) me sorprende que la estatua en honor a las Señora de Santa Ana presente rasgos 
del mestizaje (piel morena, asiendo referencia al cruce étnico de españoles con pobladores 
originarios de América Latina “indios”), una situación contradictoria que se opone a la 
 
1 La presentación de este trabajo esta apegado a la normativa APA proporcionada por el libro: 
Grijalva, R. (2016). Como escribir, presentar y exponer el informe de investigación: técnicas 
aplicadas en estudio de cátedras, trabajos de grado y tesis: módulo 2. San Salvador: EDIPRO. 
 
2 Estudiante de 5º año de la Cátedra de Curso de Etnología, de la Licenciatura en Sociología, 
Universidad de El Salvador, Facultad Multidisciplinaria de Occidente, 2021. 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 2 
 
colonialisación ideológica de los conquistadores hacia los oprimidos. El objetivo de este 
ensayo tiene la finalidad entender el significado del apelativo o calificativo de “ciudad 
morena” para la población santaneca desde una visión socio-antropológica que data desde 
el colonialismo europeo, que sigue vivo en la actualidad. 
Una reseña histórica de la ciudad de Santa Ana 
En marzo (2015), el Diario de Hoy hace una publicación titulada “Santa Ana…Ciudad 
Heroica”, en la cual se expresa que, en el tiempo de la conquista, la zona de Santa Ana 
fue ocupada por las tribus Chortis y Pokomames, ambos de la familia Maya-Quiche, en 
donde las poblaciones chortis estaban en el área de Metapán, y los pokomames en las áreas 
de Chalchuapa, Tzi-huathuacan, Coatepeque y Texistepeque; sin embargo, todas estas 
tierras fueron sometidas por los pipiles. El autor Armas (1942) nos explica cuál es el 
nombre precolombino y el supuesto origen de la ciudad de Santa Ana, de lo cual se expone 
lo siguiente: 
La tradición nos dice que en la época precolombina existía una aldea llamada Tzi-huathuacan ósea 
lugar abundante de mujeres, cuyo asiento, siguiendo la costumbre de aquellos primeros pobladores 
de nuestro territorio de establecerse en las cercanías de las fuentes debe de haber estado al lado 
Norte de la actual ciudad de Santa Ana, en atención a que por allí estaban los manantiales de 
Apanchacal (fuente del tigre) y Apanteos (fuente de los Dioses), y sin duda por allí quedaba 
también la cabaña· palacio del cacique Axahuat, padre de la infortunada Milta, cuya historia dio 
tema a una de las más bellas leyendas de Santa Ana (p.1) 
El señor Bellardino Villalpando de Guatemala institucionaliza la devoción de la señora 
Santa Ana, como una devoción católica que con el tiempo se mesclaría con las festividades 
civiles, por ello “en 1569 el Obispo de Guatemala, Monseñor Bernardino de Villalpando, 
visitó Tzi-huathuacan y el 26 de julio ofreció una misa en el sitio que actualmente ocupa 
el Parque de la Libertad y por ser el santo de tal fecha Santa Ana, la nombró patrona oficial 
del pueblo” (Mata, 1997, p. 205). El historiador Carlos Dinarte nos proporciona en la 
fecha aproximada en el que se denomina Santa Ana a la ciudad que se Tzi-huathuacan y 
su relación con el cristianismo católico en la ciudad morena, en una entrevista expresó lo 
siguiente: 
Los orígenes coloniales de Santa Ana son un poco polémicos que, es un poco diferente a la historia 
tradicional que se le ha contado a nuestros amigos de la ciudad de Santa Ana, en términos generales 
se ha dicho que la población fue cambiado de nombre por el obispo Bellardino Villalpando, que 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 3 
 
llego a esa población en julio de 1569 a esa población a Tzi-huathuacan como se le conocía aquella 
época y es entonces a raíz de eso pasa a llamarse como tal, hay que decir que eso es relativamente 
cierto pero en su mayor parte es falso, porque entre 1539 y1545 hay registros que Santa Ana se 
llame como tal, es decir 20 años antes de que el obispo de Guatemala llegue a esa población, ya 
existía el nombre de Santa Ana, Santa Ana Tzi-huathuacan, Santa Ana La Grande, etc., entonces 
Villalpando lo que hace es institucionalizar la devoción a la señora de Santa Ana, una figura de la 
representación cristiana (Dinarte, entrevista, 26 de julio, 2018). 
La institucionalidad religiosa de la celebración del 26 de julio de 1569 en honor a la Señora 
Santa Ana, dio paso a las celebraciones de las “fiestas julias”, una mescla de las 
celebraciones populares indígenas que se mesclaron con las ceremonias católicas de los 
colonizadores europeos que dieron paso a lo que en la actualidad denominamos fiestas 
patronales, por ello “la fiesta patronal desde el sincretismo y la mezcla, la cultura española 
impone una fiesta religiosa cristiana de culto a un santo, pero se vuelve una con danzas 
indígenas españolizadas, costumbres africanas, culto a la tierra y reconocimiento al Rey” 
(Parducci, 2007, p. 4). 
Los pobladores originarios de América Latina antes de la conquista no eran seres incultos, 
ellos poseían su religión, la teórica Chacón (2003), nos manifiesta la forma errónea de 
como los españoles en el tiempo de la colonia y de la conquista, no entendieron a primera 
instancia la cultura indígena, de ello se expone lo siguiente: 
Al llegar a América los españoles se convirtieron en los portadores de las formas musicales 
indígenas que a ellos les parecieron más importantes y en las que no encontraron vestigios de 
idolatría. Más tarde comprendieron que las danzas y música con nombres de animales eran, a su 
vez, otras formas de idolatría ya que, en la religión de los indígenas, algunos de esos animales eran 
sagrados y lo siguen siendo todavía (p. 50). 
Posteriormente, una forma brillante de colonialismo cultural de los españoles, tratando de 
mesclar una figura mitológica con rasgos de indígenas para interiorizarse en la mente del 
colonizado e imponer su religión cristiana, es la leyenda de la ciguanaba que fue y es una 
figura mitológica creada por los españoles, unaforma brillante de los españoles para 
meterse en las mentes de los indígenas, imponiendo de una manera creativa su religión, 
porque de acuerdo a lo que la gente cuenta la ciguanaba persigue a los hombres infieles, 
por ello, los seduce y los lleva a lugares baldíos y los juega, por ello “existen varias 
“contras” para protegerse de los daños de la Ciguanaba: deben mencionar el nombre de 
“María” (la Virgen, madre de Cristo), o “María, pata de gallina”, también hacer el signo 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 4 
 
de la cruz, morder un machete simulando que el hombre se hiere formando una cruz, o 
fumar un puro” (Guevara, 2018, pp. 107-108). 
El significado religioso de “ciudad morena” desde el catolicismo 
La tradición católica desde siglos denomina a Santa Ana patrona de la ciudad morena (en 
honor a su nombre), ante este fenómeno, el Padre César López (Párroco de la Iglesia Jesús 
de Los Milagros en Coatepeque) nos explica la procedencia de la patrona de la ciudad de 
Santa Ana desde la tradición católica, expresando lo siguiente: 
La tradición católica nos dice que Santa Ana fue la madre de María (la abuela de Jesucristo), es 
hija de Matan, Santa Ana es la esposa de Joaquín, hasta la fecha provienen de evangelios no 
aprobados por la iglesia católica dentro de sus libros canónicos, tales como el evangelio de la 
Natividad de María (escrito por Mateo) y el proto evangelio de Santiago, estos evangelios dicen 
que Santa Ana era originaria de ciudad de Belén y tanto ella como su esposo eran una pareja 
acomoda, pero con un problema de fertilidad, motivo por el cual fueron marginados de diferentes 
formas, lo que llevo a Joaquín a dirigirse un día a la montaña para rogar a Dios que lo bendijera 
con un hijo y en ofrenda a su petición ofreció un ayuno de 40 días y 40 noches, mientras tanto Ana 
se mantuvo lejos del hogar durante este periodo, hasta que un día, un ángel se le presento para 
avisarles que su petición había sido escuchado y serian bendecidos con un hijo. Aquella mujer 
llamada Ana, prometió en agradecimiento dedicar a su hijo en servicio de Dios, y pasado los nueve 
meses de la aparición del ángel, Ana dio luz a una niña, a la que llamo Mirian María, al cumplir 3 
años la llevaron al templo para consagrarla a Dios como había prometido, María vivió en el templo 
hasta que, cumplido los 12 años de edad, en la que fue entregada a José como esposa. Tanto a Santa 
Ana como a San Joaquín se les celebra el mismo día que es el 26 de julio y son conocidos como 
los patronos de los abuelos (Padre César López, entrevista personal, 1 de junio de 2021). 
La historia que la religión católica cuenta acerca de Santa Ana nos manifiesta como la 
religión de los colonialistas europeos se impuso en la mente de los mestizos y pobladores 
originarios de los países de la región conquistada, hoy por hoy, la veneración y culto (que 
se han vuelto una tradición católica vigente en pleno siglo XXI) a la imagen religiosa de 
Santa Ana es parte de ser santaneco, porque “tanto la religión como las tradiciones 
influyen no solo en la formación y reforzamiento de valores, sus efectos van mucho más 
allá, pues contribuyen a configurar la personalidad del ser humano” (Guevara, 2018, p. 
102). 
Los pobladores de Santa Ana que son devotos de las costumbres católicas que refieren a 
la devoción a la patrona de la ciudad morena, siempre asisten a la misa y a las profesiones 
en honor a la patrona de la ciudad de Santa Ana, una de ellas es Dolores Hernández, al 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 5 
 
preguntarle ¿Qué significado tienen en usted celebrar las fiestas julias en honor a la señora 
patrona de la ciudad de Santa Ana?, de la cual nos expresó lo siguiente: 
Desde pequeña mi mamá siempre me llevo a las misas, siempre me inculco las cosas de Dios desde 
pequeña, porque me decía que ser creyente da la señora de Santa Ana era una forma de seguir con 
nuestras costumbres religiosas porque es la iglesia que Dios dejo (…) en lo particular siempre que 
voy a Catedral siempre voy de rodillas desde la entrada hasta el altar de la señora de Santa Ana, 
porque cuando mi hijo tenía 1 mes de edad, mi hijo tenía problemas del corazón, yo le rogué a ella 
que sanara mi hijo, al cabo de unos días, mi hijo milagrosamente no tenía nada, yo llore de alegría, 
un “milagro”, por eso soy devota y creyente de mi señora de Santa Ana y de ello mi penitencia 
( Hernández, entrevista personal, 2 de junio, 2021). 
Desde la concepción religiosa, la figura de la señora Santa Ana es la “patrona de los partos 
difíciles”, por ello como es el caso de Dolores Hernández ella pidió a la señora Santa Ana 
sanar a su recién nacido, así como ella hay muchos casos más, de embarazadas que piden 
a la figura religiosa intervenir en el éxito de su embarazo, estos sentimientos ideológicos 
a la creencias y a las tradiciones como a la devoción a la señora Santa Ana, nos enseña 
que “la religión penetra en el dominio de los sentimientos y emociones, donde puede 
ejercer una ayuda muy significativa a las personas para enfrentarse a situaciones de crisis, 
como la enfermedad y la muerte” (Guevara, 2018, p. 112). 
Las famosas Fiestas Julias, por mucho tiempo han concentrado a miles de personas en lo 
que denominamos a ciudad morena, el apelativo o calificativo de ciudad morena se debe 
a la devoción a la señora Santa Ana, que según su origen es guatemalteco, 
aproximadamente data desde más de 400 años. La señora Ana María Carranza de 82 años 
de edad, fiel devota católica y creyente de la señora Santa Ana nos expresa una historia 
que sus generaciones contaban acerca del origen de la procedencia de la figura católica de 
Santa Ana, la cual expresa lo siguiente: 
Mi abuelita contaba que decía su mamá que un grupo de hombres que trasladaban la imagen de la 
señora Santa Ana, dichos hombres trasladaban la imagen a Esquipulas y decidieron descansar en 
Tzi-huathuacan (creo que así se dice, me cuesta pronunciarlo), la cosa es que cuando estos hombres 
decidieron retomar su marcha, no pudieron con el peso de mi señora Santa Ana, entonces ellos 
decidieron dejar la imagen aquí en la ciudad, y fíjate muchacho que mis padres en honor a nuestra 
Señora Santa Ana, mi madre decidió llamarme Ana, así me dijo mi madrecita linda (Carranza, 
entrevista personal, 31 de mayo, 2021). 
Como es característico, las leyendas populares religiosas tratan de dar origen a un lugar o 
cosa de originen divino, por lo general se trata para que las personas se asombren ante 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 6 
 
aquel fenómeno y es que precisamente esos anécdotas referidos a la figura religiosa de la 
señora de Santa Ana, sin embargo esa leyenda popular forma parte de la identidad de ser 
santaneco, porque “la identidad es una proyección crítica de lo que se demanda o se busca 
con respecto a lo que es; o, aún más exactamente, una afirmación indirecta de la 
inadecuación o el carácter inconcluso de lo que es” (Bauman, 2003, p. 42). 
El culto a la señora Santa Ana se lleva a cabo principalmente en las famosas “fiestas 
julias”, de ahí que la figura de religiosa se convierte en la patrona de la ciudad de Santa 
Ana, ya que el “el patrono se constituye en el símbolo de identidad más importante del 
municipio, por lo que las fiestas patronales representan los rituales donde se reproduce 
una identidad” (Parducci, 2007, p. 14). En los diferentes municipios de El Salvador los 
patrones que nombra le religión católica en cada municipio se debe principalmente a 
imponer los dogmas religiosos en su conjunto a la población lugareña de cada municipio, 
porque los colonizadores españoles necesitaban imponer un lenguaje común religioso, 
para colonizar las mentes des sus oprimidos, haciéndolos sentir sus creencias como suyas, 
por ello, la importancia del “lenguaje del sentido común, hace que la identificación se 
construye sobre la base del reconocimiento de algún origen común o unas característicascompartidas con otra persona o grupo o con un ideal, y con el vallado natural de la 
solidaridad” (Hall, 2003, p.15). 
Los devotos que se identifican con la devoción católica a la señora Santa Ana, en el lapso 
de las fiestas julias, los fieles católicos siguen la tradición de la oración de la novena (véase 
el esquema titulado “la estructura de la oración de la novena para la patrona de la ciudad 
de Santa Ana), una oración de gracias que manifiesta la gratitud de los santanecos a los 
favores concedidos por la su santa patrona, muchas personas deciden dedicarle tributo 
otras no, porque “la identidad se convierte hoy en un juego libremente elegido, una 
presentación teatral del yo” (Bauman, 2003, p. 40). 
 
 
 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 7 
 
La estructura de la oración de la novena para la patrona de la ciudad de Santa Ana 
Su nombre se deriva de la palabra latina "novem", que significa "nueve", una novena es una devoción privada o pública de 
nueve días en la Iglesia Católica para obtener gracias especiales. Siguen siendo una "devoción popular" y han rezado desde 
el comienzo de la Iglesia. Según la tradición cristiana en devoción a Santa Ana se encomienda ofrecer la novena a ella los 
nueve días antes de la celebración de su fiesta que se elogia cada 26 de julio. 
Dia Oración 
Introducción Oh bendita Santa Ana, Que siempre procuras escuchar a quienes te imploran, Mostrándote noble a los afligidos, 
Tristes y alejados de la fe para aliviarlos y reconciliarnos, Con Jesucristo nuestro señor, Me presento a tus pies 
amada madre, Para implorar escuches mis suplicas, Que junto a tu sagrada hija la virgen María, No te olvides de 
mis rendidas suplicas, Que yo aguardare tu consuelo y misericordia, Y las bendiciones de nuestro señor 
todopoderoso Amén. 
 
 
Día primero 
Admirable Santa Ana, Eres fuente de amor infinito. Te pido que labres mi pensamiento, Y mi corazón con nobles 
sacrificios, Pido tu piedad adorada madre, Para honrarte en esta novena, Renovando mí fe para invocarte cada día 
Sin caer en pecado que te ofenda, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, Con amor infinito, (hacer 
petición), Amén. Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Segundo 
 
Admirable Santa Ana, Eres ejemplo de ternura infinita, Hacia todos los que pecamos Y nos honras como abogada 
nuestra, A ti rindo mis humildes plegarias encomendando La indulgencia de mis pecados, Escucha mis ruegos 
bienaventurada esposa y madre, Con amor infinito, (hacer petición), Amén. Después rezar un padre nuestro, ave 
María y gloria. 
 
 
Día tercero 
Admirable Santa Ana, Llena de caridad y amor por todos nosotros, Noblemente con ejemplos de virtud, Consagraste 
ante Dios tu ternura honrándolo, Haz de mí un ciervo que viva gentileza infinita, Para contemplar las gracias del 
cielo, Pues quien ama a Dios tendrá vida eterna, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, Con amor 
infinito, (hacer petición), Amén. Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Cuarto 
 
Admirable Santa Ana, Siempre bendita por tus afables tratos, Con todos los necesitados, Y de la mano de tu hija 
bienaventurada, En auxilio de los pobres, Tú llena de los dones del señor Dios, Te imploro que necesito de tu 
amparo, Remedia mis pesares, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, Con amor infinito, (hacer 
petición), Amén. Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Quinto 
 
 
Admirable Santa Ana, La oración siempre acompaña tu corazón, Con tal fe y esperanza que abrió las puertas, Más 
fuertes y remedió tus pesares para concebir, Alabaste su santo nombre siempre y encaminaste a tu hija María como 
brillante estrella, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, Con amor infinito, (hacer petición) Amén. 
Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Sexto 
 
Admirable Santa Ana, Tu vida en gracia del señor todopoderoso, De castidad matrimonial y entrega piadosa, Fue 
incorrupta y pura, Permíteme ser humilde ciervo, Muéstrame destellos de virtud a seguir Y merecer la dicha de 
poder verte, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre. Con amor infinito, (hacer petición) Amén. 
Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Séptimo 
 
Admirable Santa Ana, Son muchas las gracias de la que gozaste, Merecidamente por gran amor infinito, Y lealtad 
a la promesa de vida eterna, Que el altísimo señor nos promete, Adorable amor a su nieto, el mismo Dios, Que 
honor y que gloria tan infinita, No hay aflicción ni tristeza, solo amor y fervor, Escucha mis ruegos bienaventurada 
esposa y madre, Con amor infinito, (hacer petición), Amén. Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Dia Octavo 
 
Admirable Santa Ana, Que alegría tan indescriptible, Gran señora de piedad, Que hayas tenido el bendito consuelo, 
De ascender al cielo junto a tu nieto, Bienaventurada Santa Ana, que inclina, Su alma de gloria en su amoroso 
cristo, Te imploro me concedas licencia de ver tus alegrías, Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, 
Con amor infinito, (hacer petición) Amén. Después rezar un padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Día Novena 
 
 
Admirada Santa Ana, De votos irreprensibles en toda su vida, Cual grande fue su alegría de llegar al reino de Dios, 
Y poder disfrutar la compañía eterna de su adorada familia, Pues la gracia infinita que tuviste siempre 
Te dio lar recompensa más grande, Por la fe y la adoración a nuestro señor, Los méritos eternos son concedidos, 
Escucha mis ruegos bienaventurada esposa y madre, Con amor infinito, (hacer petición), Amén. Después rezar un 
padre nuestro, ave María y gloria. 
 
 
Culminación 
Adoradísima Santa Ana llena de gracia, Cuyas virtudes obsequiadas por el padre eterno, Con especial amor a su 
cierva concedió, Por tanto, ejemplo ferviente de caridad y humildad, Ante los más necesitados de tu misericordia, 
Te doy gracias infinitas por permitirme rendirte mis plegarias, Y darme la esperanza fiel de caridad. Dada en tus 
benditas manos, Ante nuestro señor todopoderoso, Para que escuche mis súplicas, Y me conceda perdón por mis 
pecados, Y la gracia encomendada con todo mi corazón, Ante ti amada madre, Amén (Ahora y en la última hora, 
sed, Ana, abogada mía, amén. Culminamos la novena haciendo la señal de la santa cruz. 
Fuente: Elaboración personal, basado en la entrevista personal al Padre César López, párroco de la Iglesia de Jesús de los Milagros. 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 8 
 
Estas oraciones en honor a Santa Ana, sin lugar a dudas adquieren una modalidad de canto 
(canción), expresiones que expresan sentimiento de gratitud hacia una figura ideológica a 
quien se le atribuye una eventualidad de un hecho trascendental en la vida cotidiana del 
individuo, por ello la música, la coreografía, etc., son una expresión que los pone en 
contacto con los seres sobrenaturales (Marroquín, 2003). 
El semblante de la figura religiosa de Santa Ana no es de origen europeo, ya que los rasgos 
físicos que posee la imagen religiosa son piel morena, pelo negro y ojos negros, rasgos 
mestizos que contradicen al caucásico europeo. Los rasgos mestizos e indígena de la 
imagen de la señora Santa Ana sin lugar a dudas contradice el “el prejuicio y desprecio a 
la imagen y estética indígena, negra y mestiza, por parte de los grupos dominantes, 
también comenzó el proceso que hasta la fecha denigra y distorsiona la conciencia de los 
subyugados” (De Burgos, 2010, p. 2). 
Los cambios físicos que pueda sufrir una imagen católica dentro de las costumbres 
religiosas pueden repercutir al rompimiento de las normas culturales de culto en tiempos 
de modernidad, el teórico Barth (1976), nos expresa que existes situaciones culturales en 
donde la fidelidad a una norma o creencia de un fenómeno se puede ver afectada de acorde 
a una eventualidad contradictoria a la norma cultural, ante ello se expone lo siguiente:La identidad étnica está asociada con un conjunto de normas de valor, específicamente culturales, 
se concluye que existen circunstancias donde esta identidad puede expresarse con' éxito moderado, 
y límites cuyo traspaso está vedado, pues la fidelidad a normas de valor básicas no podría sostenerse 
en situaciones donde, comparativamente, la propia conducta es totalmente inadecuada (p.31). 
El señor Juan de Dios Castillo (45 años de edad) es ex-sacristán de la iglesia Jesús de Los 
Milagros en Coatepeque, se le preguntó: Usted como devoto de la señora Santa Ana, 
¿Seguiría usted siendo devoto de la señora Santa Ana, aunque la figura de ella fuera 
remplazada y hoy tuviera ojos azules, piel blanca, pelo rubio, etc.? Ante esta interrogante 
en la entrevista los expresó lo siguiente: 
Pues en realidad me sintiera un poco raro adorando esa imagen, pues desde que tengo memoria la 
figura de ella es de piel morena, yo entrando a la iglesia te diría que esa imagen no es de la señora 
Santa Ana, es otra virgen y quizás todas las personas te dirían lo mismo (Castillo, entrevista 
personal, 3 de junio, 2021). 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 9 
 
Como hemos recalcado anteriormente los rasgos físicos de la señora Santa Ana refleja 
rasgos mestizos, características que contradicen a una tradición europea, que se instauró 
en la cultura de los mestizos e indígenas, es curioso porque otra figura religiosa como la 
Virgen de Guadalupe presenta rasgos físicos similares a la señora Santa Ana (si 
comparamos las vírgenes, tenemos una tendencia a blanquear la piel de las imágenes, 
véase el esquema (similitudes y contradicciones faciales de la virgen Santa Ana, Virgen 
de Guadalupe y la virgen María), sin embargo, en la modernidad eso empieza a cambiar. 
La historia de la virgen de Guadalupe se remonta al año de 1531, en el cerro de Tepeyac, 
hoy norte de la capital mexicana, la Virgen se le apareció al indígena Juan Diego 
Cuauhtlatoatzin, quien había sido bautizado al cristianismo por los franciscanos, “la 
Virgen de Guadalupe se conoce como la Virgen Morena dado su deliberado origen 
indoamericano, sin embargo, en febrero de 2008 noté que en una de las estampas más 
populares de la Virgen de Guadalupe en El Salvador su piel había sido aclarada y sus ojos 
originalmente cafés eran ahora verdes” (De Burgos, 2010, p. 7). 
Similitudes y contradicciones faciales de la virgen Santa Ana, Virgen de Guadalupe 
y la virgen María 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Virgen de Guadalupe Virgen María Señora Santa Ana 
Los rasgos faciales tradicionales de la virgen de Guadalupe están cambiando en la modernidad, al menos en las 
figuras resientes de mármol o imagen impresa en papel los rasgos de las mismas se asemejan a los rasgos 
europeo (“blanco”), es curioso que el semblante de la Virgen de Guadalupe se verá orientado a los rasgos 
europeo en la modernidad, debido su relación con el indígena mexicano, una contradicción dentro del mismo 
catolicismo, en un futuro no muy lejos, la tendencia será en cambiar los rasgos físicos tradicionales de la Señora 
Santa Ana, debido a la presencia del racismo en la modernidad, porque “el racismo que los conquistadores 
españoles impusieron en Latinoamérica, aún está muy arraigado en todas sus expresiones y es el predominante, 
a este sistema conceptual impuesto se subordinan todas las demás manifestaciones de racismo, incluyendo la 
percepción racista de la piel morena” (De Burgos, 2010, p.14). 
Fuente: Elaboración personal. 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 10 
 
Decir que la religión católica es la predominante en la ciudad de Santa Ana es incorrecto, 
porque hay muchas personas que son ateos, otros son mormones, otros Testigos de Jehová, 
etc., y no son devotos de la señora Santa Ana, debido a que la etnicidad se basa en todas 
aquellas diferencias y similitudes culturales que existen en una nación, porque “los 
miembros de un grupo étnico comparten ciertas creencias, valores hábitos, costumbres y 
normas debido a su sustrato común, se definen a sí mismo como diferentes y especiales 
debido a características culturales, esta distinción podría surgir del lenguaje, la religión o 
la raza” (Phillip, 2006, p. 76). 
Conclusiones 
La devoción a la señora Santa Ana es una práctica religiosa católica que forma parte del 
colonialismo europeo de la conquista ideológica del imperio español, sin embargo, los 
rasgos físicos que presenta la imagen religiosa se asemejan más a los rasgos mestizos (piel 
morena, cabello negro, ojos cafés, etc.), de ahí el nombre del calificativo o apelativo de 
ciudad de Santa Ana como “ciudad morena”. El sincretismo3 que representa los rasgos 
físicos de la Señora Santa Ana representan por un lado los rasgos físicos de los mestizos 
e indígenas y por otro lado representan las creencias de los españoles que conquistaron a 
América Latina, donde dichos cultos y tradiciones siguen siendo vigentes en la actualidad. 
Cuando los españoles arribaron a América Latina no encontraron una población aborigen 
sin algún tipo de religión, los pobladores originarios de América Latina (indígenas) 
adoraban a elementos de la naturaleza o animales, entonces una manera brillante que 
utilizaron los españoles es inventar historias mitológicas como la ciguanaba, que la 
leyenda dice que seduce y juega a los hombres por las noches, por ello la religión católica 
predicaba que se tenía que hacer una cruz con los dedos para ahuyentar esos malos 
espíritus, una forma brillante para insertar sus ideales religiosos a una comunidad indígena 
que fue conquistada. En síntesis, las fiestas patronales como las fiestas julias son una 
mescla de ritos, costumbre y tradiciones religiosas que se mesclaron con las festividades 
civiles de los pueblos originarios en la ciudad de Santa Ana (antes Tzi-huathuacan), hoy 
 
3 El sincretismo “se trata de un suceso cultural por el cual dos sociedades distintas acaban por compartir o 
unir dos o más rasgos de origen diferente” (The Free Dictionary, 2021). 
JOSÉ ALFRRDO VALENCIA 
ESQUIVEL 11 
 
las fiestas patronales en honor a la patrona Santa Ana se integran los famosos 
enmascarados, unos representan a la ciguanaba, el cipitío, el hombre sin cabeza, etc., esas 
figuras mitológicas creadas por los colonizadores, con el fin de educar con el catolicismo 
a los pobladores indígenas, ya que esas figuras son considerados malos espíritus y son 
alejados con oraciones y por la señal de la santa cruz, eso es la reseña histórica de lo que 
vemos en la actualidad en las fiestas patronales en los municipios de El Salvador 
Referencias 
Phillip, C. (2006): Etnicidad y raza. Universidad de Michigan, pp. 75-95. 
Barth, F. (1976). Los grupos étnicos y sus fronteras. México: Fondo de Cultura Económica. 
De Burgos, H. (2010). Racismo de la belleza y autoestima en El Salvador. Ciencias Sociales y 
 Humanidades, núm.1, julio-diciembre, 2010, pp. 1-21. 
Parducci, A. (2008). El Salvador del migración, cultura y fiestas patronales de los 
 salvadoreños, Universidad Centroamericana “José Simón Cañas”, núm. 23, enero, 2007, 
 pp. 1-42. 
Hall Stuart (2003). ¿quién necesita «identidad» ?, Hall y Paul du Gay (comps.). Cuestiones de 
 identidad cultural. Buenos Aires: Amorrortu. 
Bauman, Z. (2003). De peregrino a turista, o una breve historia de la identidad. En Stuart 
 Hall y Paul du Gay (comps.). Cuestiones de identidad cultural. Buenos Aires: 
 Amorrortu. 
Mata, M. (1997). El patrimonio arquitectónico histórico-artístico de Santa Ana y 
 Sonsonate. Tecnologías Urbanas de Barcelona Sociedad Anónima (TUBSA), pp. 203-
 214. 
Chacón, M. (2003). Nuestra música y danzas tradicionales, “Instrumentos precolombinos”. 
 Coordinación Educativa y Cultura Centroamericana, pp. 39- 51. 
Marroquín, S. (2003). Nuestra música y danzas tradicionales, “La música oral-tradicional 
 y popular de en El Salvador”. Coordinación Educativa y Cultura Centroamericana, pp.51-
 61. 
Armas, J. (1942).Hombres y cosas de Santa Ana. BN: El Salvador. 
Dinarte, C. (26 de julio de 2018). Entrevistador Lemus, R. Canal Doce (Archivo de video). 
 Historiador. San Salvador, El Salvador. 
Guevara, C. (2010). Tradición oral salvadoreña, mestizaje, religión y valores. 
 Universidad Tecnológica de El Salvador, pp. 102-113. 
El Diario de Hoy (2015). Santa Ana ciudad heroica. Consulado el dial 8 de junio del 2021, del 
 sitio web: http://archivo.elsalvador.com/especiales/santaana/nota2.html 
The Free Diccionario (2021). El significado del Secretismo. Consultado de 
 https://es.thefreedictionary.com/sincretismo

Continuar navegando