Logo Studenta

ética y valores libertad PDF

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

1 
 
APUNTES DE LA SEGUNDA EVALUACIÓN Valores Éticos 3ºESO 
 
1. Libertad, ética y moral 
 
Es importante darnos cuenta de el papel que juega la libertad dentro de la reflexión sobre la moral. Si 
nuestras decisiones no nacieran de la plena libertad (soy libre para elegir robar en la tienda de chuches 
o no hacerlo) no tendrían sentido los juicios morales (esa acción es correcta/incorrecta) ni podríamos 
hablar de culpa o responsabilidad. Cuando llevamos a cabo acciones que no hemos elegido (suponte 
que te tropiezas con una piedra que hay en el camino y al caer empujas a una persona sin querer) 
efectivamente, no se nos va a condenar ni a penalizar por ello, pues se entiende que lo hemos hecho sin 
tener opción de no hacerlo. 
El debate está en cuándo se empieza a actuar libremente (un bebé, por ejemplo, no actúa desde la libertad 
sino más bien desde el instinto, la necesidad…) y en si existen factores que pueden determinar nuestra 
toma de decisiones y nuestra conducta (una enfermedad mental, por ejemplo). 
Podemos afirmar por tanto (como señaló el filósofo Kant) que la libertad es condición de posibilidad de 
la moral. 
 Y repasando estos términos, ya sabemos que la moral 
es un conjunto de valores, creencias y costumbres que 
nos motivan a actuar de una manera concreta y a 
distinguir lo comúnmente aceptado “correcto” de lo 
“incorrecto”. 
La ética, sin embargo, se define como el estudio o la 
disciplina que estudia la moral. 
 
(Imagen 1) 
 
Etimológicamente, ética deriva del griego: “ethos” que significa “hábito” o “costumbre”. Esto nos 
trasmite la idea de que la ética tiene que ver con el comportamiento y con la repetición de ciertas 
conductas como única forma de interiorización. 
Históricamente esta rama de la filosofía se ha ocupado de dos preguntas fundamentales: ¿cuál es la mejor 
manera de vivir? (pregunta por la felicidad) y ¿cómo debo comportarme? (pregunta por el deber) 
acompañadas, por supuesto, de una cuestión de fondo intrínseca a ambas reflexiones: ¿y por qué eso es 
así? 
 
 
 
2. Las normas 
 
La RAE define “norma” como “principio que se impone o se adopta para dirigir la conducta o la 
correcta realización de una acción”, pero está claro que no todas estas normas se imponen de la misma 
manera. La ética se centra en el estudio de las normas morales, cuyas diferencias del resto de normas 
quedan recogidas en el siguiente cuadro: 
 
2 
 
 SOCIALES JURÍDICAS MORALES 
¿Están escritas? 
 ¿Dónde? 
 No Sí, en códigos 
 (Constitución, Código Penal, 
 Reglamento del Instituto...) 
 No 
¿Quién las 
estudia? 
 La Antropología El Derecho/ la Política La Ética 
¿Cuál es el 
castigo si no se 
cumplen? 
Rechazo, exclusión 
social. 
 Multas, cárcel, trabajos a la 
comunidad, castigos 
 (sanciones). 
 Remordimiento de 
conciencia, culpa 
¿Pueden variar 
según el 
momento y el 
lugar? 
Sí Sí ¿¿¿¿???? (this is the 
question) 
 Ejemplos Normas de 
 educación, 
 costumbres 
 (guardar el luto, 
 tratar de usted a 
 los adultos, no 
 estirarse en 
 público, no 
eructar…) 
 Leyes: prohibido fumar a 
 menores de 18 años, 
 prohibido usar armas sin 
 permiso, obligatorio ir a la 
 escuela hasta los 16 años 
 Prohibido robar, matar... 
 Prohibido comer chicle en 
 clase. 
 No hacer a otros lo que 
 no queremos que nos 
 hagan 
 Decir la verdad 
 No hacer daño a 
 personas ni animales 
 Cuidar el 
 Medioambiente 
 
Si bien es cierto las normas jurídicas deberían elaborarse en base a normas morales, lo cierto es que en 
algunas ocasiones han entrado en contradicción las unas con las otras. Por ejemplo, en EE.UU durante 
muchos años las leyes permitían la posesión de esclavos, en muchos casos han desfavorecido a la 
personas negras (el Apartheid Sudáfrica) o las mujeres (lapidación por infidelidad en algunos países 
fundamentalistas, poligamia para los hombres, consentimiento del marido para algunas cosas durante la 
época franquista en España…) 
De otras normas puede discutirse si son morales o sociales (es imposible que sean de los dos tipos a la 
vez porque las normas sociales dependen de una cultura o sociedad concreta y no tienen carácter 
universal), por ejemplo, una norma de conducta básica como cederle el asiento a las personas mayores 
en el autobús podría ser considerada moral, pero hay quien defiende que se trata meras normas de 
educación impuestas por una sociedad y que no tienen carácter universal. 
Otras veces pueden entrar en conflicto, llegando a justificar la desobediencia civil cuando la misma ley 
viola o atenta contra algún principio moral. Veamos el caso de Antígona: 
 
CREONTE.—En cuanto a ti, contéstame sin extenderte, con brevedad: ¿sabías que estaba pregonada la 
prohibición de hacer eso? 
ANTÍGONA.— Lo sabía, ¿cómo no iba a saberlo? Era bien clara. 
CREONTE.—Y, aun así, ¿te atreviste a transgredir esa ley? 
ANTÍGONA.—No fue Zeus quien dio ese bando, ni la Justicia que comparte su morada con los dioses 
infernales definió semejantes leyes entre los hombres. Ni tampoco creía yo que tuvieran tal fuerza tus 
pregones como para poder transgredir, siendo mortal, las leyes no escritas y firmes de los dioses. Pues su 
vigencia no viene de ayer ni de hoy, sino de siempre, y nadie sabe desde cuándo aparecieron. De su 
incumplimiento no iba yo, por temor al capricho de hombre alguno, a recibir castigo entre los dioses. Que 
3 
 
iba a morir, ya lo sabía —¡cómo no!—, aunque tú no lo hubieras prevenido en tu proclama. Y si muero 
antes de tiempo, lo tengo por ganancia, pues quien vive como yo en una muchedumbre de desgracias, 
¿cómo no va a sacar provecho con la muerte? Así, el alcanzar este destino no me causa dolor 
alguno. En cambio, si hubiera tolerado ver insepulto el cadáver de quien nació de mi madre, entonces sí 
me dolería. Con esto otro, en cambio, no siento dolor alguno. Si a ti te parece que he cometido una locura, 
tal vez sea un loco ante quien incurro en falta de locura.” 
 
Antígona (SÓFOCLES) 
 
 
3. Relativismo y universalismo moral 
 
Son los dos enfoques más generales sobre la ética: 
• El relativismo (subjetivismo) niega la existencia de valores morales absolutos, como el bien y 
el mal, lo correcto y lo incorrecto, y sostiene que estos dependen de cada cultura, raza, ideología, 
época o convicción particular. Los sofistas fueron los primeros defensores de esta postura. 
(Ejemplos: relativismo en España, conducta sexual en Grecia, situaciones límites. Problemas: 
¿todo vale?) 
• El universalismo (objetivismo) sostiene que existe una moral válida universal. Esto significa que 
se afirma la existencia valores morales (bien, mal, correcto, incorrecto) independientemente de la 
cultura, la época y la persona. El bien o el mal tienen validez por 
sí mismos (objetivismo). Por contraposición a los sofistas, Platón 
defendía que existía la idea suprema de “bien” de la que todas las 
acciones buenas participaban. (Pruebas: en todas las culturas se 
juzga como “malo” el asesinato, la mentira y el incesto. Problemas 
(¿etnocentrismo?) 
El relativismo niega la posibilidad directamente de elaborar una 
teoría al no aceptar la existencia de normas morales. Para los 
relativistas la moral sería como una construcción social, una 
convención que hemos aceptado para poder convivir pacífica y 
ordenadamente. Nada de lo que vamos a explicar después tiene 
sentido para un relativista. 
(Imagen 2)

Continuar navegando