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Revisión de literatura Algunas endocrinopatías comunes en perros Some common endocrinopathies in dogs Oscar Jhon Jaiver Buitrago Valverde 1- Leidy Tatiana Perdomo Naranjo 1 1 Estudiantes de Medicina Veterinaria y Zootecnia. Universidad Cooperativa de Colombia, sede Villavicencio, Meta. Seminario de Profundización de Medicina interna de Caninos y Felinos. Julio, 2021 e-mail: oscar.buitragov @campusucc.edu.co- leidy.perdomon @campusucc.edu.co Resumen El sistema endocrino con su estrecha relación con el sistema nervioso se encarga de regular y coordinar las actividades de los órganos tejidos y órganos de un individuo. Cuando una glándula endocrina se afecta como la adrenal y tiroides, los hallazgos clínicos a veces son inespecíficos y comunes a otras muchas enfermedades por lo que su diagnóstico resulta complicado por esto se hace necesario que el diagnóstico se lleve a cabo mediante interconsultas con especialistas, un endocrinólogo veterinario se hace fundamental para orientar al propietario y llevar a cabo un tratamiento eficaz con el fin de devolverle al perro su calidad de vida. En importante resaltar que la mayoría de las endocrinopatías en muchos lugares del mundo no se hace de forma correcta lo que pone en riesgo la vida del paciente. Este articulo contiene información relevante mediante una revisión de literatura sobre algunas de las enfermedades del sistema endocrino en perros más comunes en la práctica clínica. Palabras clave: Endocrinopatía, glándula, perro Abstract Endocrine system with its close relationship with the nervous system is responsible for regulating and coordinating the activities of the organs, tissues and organs of an individual. When an endocrine gland is affected such as the adrenal and thyroid, the clinical findings are sometimes nonspecific and common to many other diseases, so its diagnosis is complicated by this, it is necessary that the diagnosis be carried out through consultation with specialists, a Veterinary endocrinologist is essential to guide the owner and carry out effective treatment in order to restore the dog's quality of life. It is important to note that most endocrinopathies in many parts of the world are not done correctly, which puts the patient's life at risk. This article contains relevant information through a literature review on some of the most common diseases of the endocrine system in dogs in clinical practice. Key words: Endocrinopathy, gland, dog INTRODUCCIÓN. El sistema endocrino con su estrecha relación con el sistema nervioso se encarga de regular y coordinar las actividades de los órganos tejidos y órganos de un individuo. Está compuesto de diferentes glándulas ubicadas en diferentes partes del cuerpo (ver tabla 1), que se encargan de enviar señales químicas (hormonas) a través de la sangre, cada una tiene un papel esencial en el mantenimiento de la homeostasis en el cuerpo (Kapustin, 2013), todo esto mediante las glándulas endocrinas o de secreción interna que no poseen conductos para secretar sus productos (adenohipófisis, tiroides, paratiroides, adrenales y gónadas), algunas estructuras temporales con acciones endocrinas (placenta, folículos ováricos y cuerpo lúteo), partes del sistema nervioso (núcleos hipotalámicos, partes del sistema nervioso central y neurohipófisis), agregados celulares con funciones endocrinas (células peptidérgicas del tracto gastrointestinal, islotes de Langerhans y algunos tejidos hepáticos y endoteliales) y otros órganos que secretan hormonas se incluye el corazón, timo, riñones (Sacristan Garcia et al., 1995). Tabla 1. Órganos del sistema endocrino Glándulas Ubicación Hormonas Hipotálamo Hipófisis o pituitaria e Base del cerebro, se ubica en la silla turca, una cavidad en el hueso esfenoides. Neurohipófisis (porción nerviosa y el tallo neural) -Hormona antidiurética o vasopresina (ADH) -Oxitocina Adenohipófisis anterior) (parte Porción distal: -Somatotrofina u hormona del crecimiento (GH) -Prolactina (PRL) -Hormona estimulante de la tiroides o tirotrofina (TSH) -Hormona foliculoestimulante (FSH) -Hormona luteinizante (LH) -Hormona adrenocorticotrófica p corticotropina (ACTH) -β y γ lipotrofina (LPH) -endorfinas: dopamina Porción intermedia -Hormona estimulante de melanocitos o melanotrofina (MSH) Pineal Techo del tercer ventrículo Mantenimiento ajuste de circadiano. y ciclo -Melatonina Tiroides Base del cuello, a ambos lados de la parte inferior de la Regula metabolismo el -Triyodotironina o T3 -Tiroxina o tetrayodotironina T4 -Calcitonina Paratiroides Cara de la tiroides posterior glándula -Hormona paratiroidea (PTH) Adrenales Junto craneal riñones al polo de los Corteza -Mineralocorticoide: aldosterona Glucocorticoide: cortisol -Andrógenos: dehidroepiandrosterona y androstenodiona, estrógenos. Médula -Adrenalina Páncreas En abdomen, retroperitoneo -Regula los niveles de glucosa -Inhibe los movimientos del estómago luego de finalizar la ingesta -Libera los ácidos gástricos durante la ingesta -Glucagón -Insulina -Somatostatina - pancreático Ovario órganos ubicados dentro de la pelvis (uno a cada lado), ubicado detrás del ligamento ancho del útero y justo debajo de las trompas de Falopio Estimula el desarrollo de glándula mamaria, los caracteres sexuales secundarios femeninos y la reproducción. -Estrógenos -Progesterona Inhibe la producción de hormona estimuladora del folículo. -Inhibina Testículo Región perineal, atrás de la base del pene, en el interior de la bolsa escrotal. Produce espermatozoide caracteres secundarios. los y -Andrógenos: Testosterona Inhibe la producción de hormona estimuladora del folículo. -Inhibina Riñones -Estimular producción glóbulos rojos. la de -Eritropoyetina -Regula tensión arterial -Renina -Regula el dolor -Encefalina Hormonas peptídicas gastrointestinales Células endocrinas de la mucosa intestinal, nervios en el tracto gastrointestinal y en el SNC -Gastrina -Colecistoquinina, -Secretina, -Péptido Gástrico Inhibitorio (GIP), - Somatostatina -Motilina, -Neurotensina -Enteroglucagón -Ghrelina Timo Posición retrosternal sobre la anterior pericardio cara del -Timosina A-1, -Timopoyetina -Timulina (O Factor Sérico) -Timosina Fracción 5 -Timoestimulina -Factor Tímico Humoral. Tejido adiposo Metabolismo de la glucosa y los ácidos grasos -Adiponectina regulador eferente del apetito, de la expedición de energía y de la función reproductiva. -Leptina Placenta Gametogénesis o en su defecto, la producción de esteroides sexuales. Mantenimiento del cuerpo lúteo en el comienzo del embarazo; inhibe la respuesta inmunitaria contra el embrión. -Gonadotropina Coriónica aumento de la resistencia a la insulina, mayor disponibilidad de glucosa para el feto. -Lactógeno placentario humano Útero Preparar el cuello del útero (cérvix) y prepararlo para el parto -Relaxina Hígado, riñón, músculo estriado Estimula producción de plaquetas -Trombopoyetina Corazón Reducción de la presión sanguínea por reducción de la resistencia vascular de la circulación sistémica, de la cantidad de agua, sodio y grasas en la sangre. -Péptido natriurético cerebral Fuente: (Pérez-Montt, 2017), (Klein, 2015) En la actualidad, el aumento de la esperanza de vida de perros y gatos ha incrementado la incidencia de enfermedades relacionadas con el envejecimiento entre ellas las endocrinopatías, además en muchos países hay escases de profesionales especialistas con experiencia en el área.En la imagen 1 se puede observar la ubicación de algunas de las glándulas endocrinas de un perro (Pöppl et al., 2018). Imagen 1. Ubicación de algunas de las glándulas endocrinas en el perro. En un estudio desarrollado en el departamento de estudios clínicos y hospital docente de la facultad de veterinaria de la Universidad de Guelph de Ontario, Canadá, se desarrolló un estudio retrospectivo donde se encontró que 35 perros presentaban más de un trastorno endocrino. El 77,14% (27/35) de los perros eran machos y la edad media al momento de diagnosticarles la primera endocrinopatía fue de 7,9 años. La raza de Schnauzer miniatura fue la más común. El 80% (28/35) de los perros tenían 2 trastornos endocrinos y el 20% 7 (7/35) tenían 3 trastornos endocrinos. Las combinaciones más comunes encontradas en los perros fueron: 57,1% (20/35) diabetes mellitus e hiperadrenocorticismo, 22,9% (8/35) hipoadrenocorticismo e hipotiroidismo y 28,6% (10/35) diabetes mellitus e hipotiroidismo. El tiempo promedio del diagnóstico entre el diagnóstico del primer y el segundo trastorno endocrino fue de 14,5 meses, mientras que el tiempo entre primer y el tercer trastorno endocrino fue de 31,1 meses (Blois et al., 2011). En Brasil, se realizó encuesta epidemiológica con 1.400 perros y gatos por la División de Endocrinología entre 2004 y 2014, el diagnóstico de la enfermedad endocrina se basó en hallazgos de laboratorio, hormonas y ultrasonografía. En el 93,4% de los casos las endocrinopatías fueron detectadas en perros fueron: 37% hiperadrenocorticismo, 22% diabetes mellitus, 11% hipotiroidismo y 8% sobrepeso/obesidad y mientras que 6,6% fueron gatos, que presentaron 42% diabetes mellitus y 23% hipertiroidismo. El 1% de los pacientes presentó enfermedades clasificadas como raras y poco comunes tales como hipoparatiroidismo, feocromocitoma, enanismo hipofisario y diabetes insípida. endocrinopatías múltiples supusieron el 8% de los casos, siendo las más frecuentes. La edad media de presentación en perros fue del 9,11 ± 3,43 años, el 69% de los pacientes fueron hembras, se sugiere que la alta prevalencia de endocrinopatías entre las perras se relaciona con un 59% de prevalencia de diabetes mellitus e hiperadrenocorticismo hallados en el estudio. También el estudio sugiere hay falta de diagnósticos tempranos de algunas endocrinopatías (Pöppl et al., 2018). HIPOADRENOCORTICISMO O SÍNDROME DE ADDISON (HIPOADRENOCORTICISMO) Es una enfermedad que se presenta en los perros y se caracteriza por la deficiencia en la producción de glucocorticoides y/o mineralocorticoides por la corteza de la glándula adrenal (Imagen 1). También se ha denominado el "gran simulador” pues sus hallazgos clínicos son inespecíficos y comunes a otras muchas enfermedades' por lo que su diagnóstico resulta complejo representar un desafío diagnóstico (Picazo, 2013). Imagen 2. Partes de la glándula adrenal Adaptado de: https://es.dreamstime.com/estructura-interna-de-la-gl%C3%A1ndula- suprarrenal-que-muestra-las-capas-y-m%C3%A9dula-corticales-image125925040 Epidemiología. Esta enfermedad se reporta en perros jóvenes adultos jóvenes, en edades promedio de 4 años, aunque también se ha llegado a encontrar en animales de 2 meses o 14 años. Afectar más hembras (con un riesgo mayor las que no están esterilizadas) que machos. Aunque todas las razas pueden padecer la enfermedad, presentan mayor riesgo: Gran daneses, Perro de agua portugués, Rottweilers, Caniches estándar, West Highland White Terriers, Soft Coated Wheaten Terriers, Collie Barbudo, Leonberger, Retriever de Nueva Escocia y Perros perdigueros (Our & Archive, 2013). Causas. La etiología se puede resumir en la tabla 2. D e s tr u c c ió n d e l a c o rt e z a a d re n a l 1 ) A tr o fi a a d re n a l id io p á ti c a , por: se cree que está relacionado con enfermedades autoinmunes (autoanticuerpos). Hay predisposición genética a la enfermedad en perros, en razas caniches estándar se reporta herencia autosómica recesiva en el caniche estándar, proteína 4 asociada a linfocitos T citotóxicos (CTLA4) en el Perro de agua portugués, Cocker Spaniel y Springer Spaniel, proteína tirosina-fosfatasa no receptora tipo 22 (PTPN22) en Cocker Spaniel, genes de clase II del Complejo mayor de histocompatiblidad (CMH- haplotipos DR3-DQ2 and DR4-DQ8) canino (o antígeno leucocitario de perro, DLA) en Retriever de Nueva Escocia, Collie Barbudo y Caniche estándar, polimorfismos de un solo nucleótido (SNP) particulares en CTLA4 y colágeno tipo IV alfa 4 (COL4A4) en Springer Spaniel, SNP en la proteína de unión a oxisterol como 9 (OSBPL9) y y PTPN22) en Cocker Spaniel y SNP en la proteína de unión a sintaxina 5 (STXBP5) en Labrador Retriever. En 2019, la fundación para la salud del Collie barbudo, mostró una prevalencia de 11,1% siendo relativamente alta de enfermedades autoinmunes de 3072 Collie incluidos en la encuesta, el 3,1% presentó hipoadrenocorticismo primario(Gershony et al., 2020). 2 ) F á rm a c o s el mitotano empleado para el tratamiento de hiperadrenocorticismo dependiente de la hipófisis, causando necrosis o atrofia de la corteza renal en la zona reticular (cortisol) siendo más sensible que la zona glomerular (aldosterona), adicionalmente interfiere con la biosíntesis de esteroides y el trilotano que causa inhibición enzimática con trilostano (análogo del esteroide sintético que competitivamente inhibe: la 3-β-hidroxiesteroide deshidrogenasa, también de forma reversiblemente la conversión de progesterona en pregnenolona, la 11-β-hidroxilasa y el 11-β-hidroxiesteroide deshidrogenasa), este reduce la producción de glucocorticoides, mineralocorticoides y andrógenos, por lo que la supresión en la producción excesiva de cortisol y/o mineralocorticoide induce al hipoadrenocorticismo, se puede retira el trilostano para que regrese a la normalidad el paciente; sin embargo hay casos de hipoadrenocorticismo permanente iatrogénico resultado de necrosis adrenocortical, ketoconazol, a dosis dermatológicas 3 ) in s u fi c ie n c i a a d re n o c o rt i granulomatosos como histoplasmosis, blastomicosis o tuberculosis que ocasionan la destrucción de la corteza, trombosis de vasos renales e infartos en corteza debido a coagulopatía intravascular diseminada, hemorragias y remplazo con tejido conectivo, 5 ) n e o p la s ia s m e ta s tá s ic a s 6 ) a m ilo id o s is . La hipoadrenocorticismo secundaria, es poco frecuente, puede ocurrir por neoplasia o el traumatismo intracraneal :, Tomado de: (Reine, 2012), (Cohen & Bennett, 2015), (Platt et al., 1999). Fisiopatología. Se resume en la tabla 3 (Hauck et al., 2020). Tabla 3. Fisiopatología del Síndrome de Addison en perros P ri m a ri a T íp ic o Alteraciones de las concentraciones de Na+ y K+ y disminución de su proporción. Debido a la falta de glucocorticoides y/o mineralocorticoides (cortisol y aldosterona) por la destrucción de la corteza (zona glomerulosa, zona fasciculada) (Imagen 2). A tí p ic a Falta de glucocorticoides, caracterizado con concentración normal de Na y K y su relación. Esta puede convertirse en la forma típica con el tiempo, al destruirse la zona glomerulosa junto con la zona fasciculada. S e c u n d a ri a Debido a la falta de hormona adrenocorticotrópica (ACTH) debido a anomalías en el eje hipotalámico-hipofisario o por la falta de secreción de hormona de corticotropina (CRH) resultando en la atrofia de la zona fasciculada y reticular, resultado sola en la falta de producción de cortisol; la producción de mineralocorticoides desde la zona glomerular se mantiene intacto En la imagen 3 se observa la comparación entre una glándula adrenal de un perro sano y la de un perro con Síndrome de Addison. Imagen 3. Se observa el corte transversalde una de 2 glándulas adrenales, en la izquierda presenta tamaño normal y en la derecha con atrofia en un perro de raza Gran Danés con hipoadrenocorticismo. Deficiencia de mineralocorticoides. La aldosterona actúa principalmente sobre las células de los túbulos distales del riñón aumentar la reabsorción de sodio, los iones negativos como el cloruro se reabsorben junto con el sodio debido a sus potenciales eléctricos, el agua se reabsorbe siguiendo los gradientes de concentración creados por el movimiento de sodio y cloruro. La deficiencia de aldosterona provoca mayor pérdida de sodio cloruro y agua a través de la orina, contribuyendo a la deshidratación, azotemia prerrenal, orina no concentrada, hipovolemia, debilidad y shock. La aldosterona también promueve la absorción de sodio en el tracto gastrointestinal (TGI), su deficiencia de aldosterona altera la absorción de sodio, cloruro y agua del TGI, contribuyendo a la diarrea y vómito contribuyendo aún más a la hipovolemia, hipoperfusión y choque. Además, la aldosterona también promueve la excreción renal de potasio, para el mantenimiento normal de concentraciones plasmáticas de potasio, la deficiencia de aldosterona causa hiperpotasemia marcada, esta puede exacerbarse por la hipovolemia y disminuir la tasa de filtración glomerular (TFG). La hiperpotasemia puede causar anomalías conducción cardíaca (períodos refractarios prolongados durante potenciales de acción cardíacos), lo que lleva a bradicardia, detención auricular, disminución del gasto cardíaco, en casos graves hay fibrilación ventricular y muerte. La aldosterona también regula la excreción renal de iones de hidrógeno, su deficiencia conduce a una acidosis leve. En las crisis adrenales, la acidosis láctica y la TFG disminuida secundaria a hipoperfusión aumenta la acidosis severa, esta también contribuye al movimiento de potasio fuera de las células, lo que agrava aún más hiperpotasemia (Streeten, 2004). Deficiencia de glucocorticoides. El cortisol juega un papel importante en la regulación de la sangre, presión y volumen sanguíneo, así como concentración de glucosa en sangre, también estimula la liberación de sustancias vasoactivas, sensibiliza los vasos sanguíneos a los efectos de las catecolaminas y disminuye la permeabilidad de los vasos sanguíneos. Es por ello por lo que al disminuir su producción el volumen intravascular y la presión sanguínea también disminuye, contribuyendo a la hipovolemia, hipotensión y shock. El cortisol también contribuye a la regulación de glucosa por estimulación de la gluconeogénesis teniendo un efecto anti-insulina que inhibe la captación de glucosa y metabolismo en los tejidos periféricos. Por lo que la deficiencia de cortisol causa hipoglucemia e incluso en casos graves llega a causar ataxia, temblores o convulsiones. La deficiencia de cortisol también puede contribuir al íleo gastrointestinal exacerbando la diarrea y los vómitos o a veces presentar impactación fecal. Signos clínicos: Con la reducción en la síntesis y secreción de principalmente aldosterona, ocurren alteraciones del potasio sérico, niveles de sodio y cloruro. Al excretarse menos potasio por el riñón, resulta en un aumento progresivo de los niveles séricos de potasio ocasionado hiperpotasemia severa (5.5-9.0 mmol/L, 5.5- 9.0 meq/L), así hay menos reabsorción de sodio y el cloruro en los túbulos renales y disminución de los niveles séricos; la hiperpotasemia severa altera la frecuencia cardiaca, presentando anomalías de la conducción cardíaca que provocan bradicardia. Por lo que los signos son inespecíficos, pueden atribuirse a múltiples sistemas corporales como el gastrointestinal, insuficiencia renal o enfermedad neurológica. Los signos clínicos Pueden aparecer de manera episódica o "con altibajos", otros lo hacen progresivamente. La gravedad y desarrollo de los signos clínicos (en algunos perros pueden ser sutiles) así como el número pueden varían, así como la duración de la enfermedad hasta su diagnóstico, puede ser entre 2- 52 semanas. Algunos factores estresantes para el perro pueden relacionarse con la presentación de signos clínicos: cambios de alojamiento (hospedaje en hoteles o guarderías, hospitalización por diferente motivo), peluquería, cambios de estilo de vida, la mudanza o visita al veterinario, abandono. Los signos clínicos reportados incluyen: anorexia (88%-95%), letargo/depresión (85%-95%), vómitos/ regurgitaciones (68% - 75%), debilidad (51% -. 75%), pérdida de peso (40%- 50%), diarrea (35%), poliuria/polidipsia (17% - 25%), temblores (17% - 27%), colapso (10%), abdomen doloroso (8%). También pueden presentar hematemesis, hematoquecia, melena (imagen 3), ataxia, convulsiones y dificultad para respirar, calambres musculares episódicos, deshidratación (42%), shock/colapso (24%- 29%), hipotermia (15% - 34%), bradicardia (22% - 25%), pulso femoral débil (22%), dolor abdominal. Los perros con hipoadrenocorticismo primario tienen más probabilidades de presentar shock (más severo la presentación cuando hay deficiencia de glucocorticoides y mineralocorticoides y más leve en perros con solo deficiencia de glucocorticoides) que los perros con hipoadrenocorticismo secundario (Klein & Peterson, 2010). La crisis adrenal aguda causa bradicardia y signos de shock (colapso, membranas mucosas pálidas, hipotermia, pulso débil, patrón respiratorio anormal). Imagen 4. Paciente que presenta melena que se caracteriza por deposiciones de color café oscuro (sangre), untuosas, alquitranadas y de olor ofensivo mezcladas con material fecal (Bugbee et al., 2019). Diagnóstico. Generalmente inicia con la anamnesis del paciente y los signos clínicos reportados por el propietario en la consulta veterinaria. Hallazgos de laboratorio. Hemograma. Un hallazgo común es la ausencia de un leucograma de estrés (92% de los pacientes con hipoadrenocorticismo), es importante considerar si el animal esta estresado (las situaciones estresantes fueron previamente explicadas) y en shock debe considerarse este hallazgo importante, pues la liberación de cortisol en estados de estrés induce linfopenia, eosinopenia y neutrofilia; aunque se ha reportado en algunos casos un leucograma de estrés inverso, conteo de neutrófilos de bajo a normal, aumento de linfocitos y eosinófilos. Otro de los hallazgos es la anemia no regenerativa normocítica normocrómica (25% de los pacientes) relacionado con la baja producción de glóbulos rojos, que puede ser agravado además por la pérdida de sangre en el tracto gastrointestinal y una disminución en la respuesta de producción de reticulocitos por la mielosupresión . Aunque con menos frecuencia, se puede presentar el aumento del hematocrito, esto puede ser debido a hipovolemia y hemoconcentración, aunque también pueden ser completamente normales (Spence et al., 2018). Químicas sanguíneas. Algunos pacientes tienen deficiencia de glucocorticoides y función mineralocorticoide normal y relaciones sodio: potasio (Na:K) normales (>27), aun cuando presentan hipocortisolemia. Los perros también pueden presentar hiperpotasemia, hiponatremia, azotemia, hipercalcemia e hipoglicemia, hipocolesterolemia, hipoproteinemia/hipoalbuminemia, hipercalcemia e hipoglucemia. Los valores en la relación sodio-potasio entre <27 deben ser tenidos en cuenta como sospechosos y <24 asociados con hipoadrenocorticismo. Los valores normales de sodio 142-152 mEq/l y potasio en el perro están entre 3,9-5.1 mEq/l(Suiza Vet, 2013). La azotemia sugiere es prerrenal ocasionada por la hipovolemia e hipoperfusión y esta puede concurrente. Gases arteriales. Mediante la medición de gases arteriales y dióxido de carbono venoso total se puede determinar el estado ácido/base de pacientes en crisis hipoadrenal, presenta también una leve a moderada acidosis metabólica, explicada por la fallaen la reabsorción renal de sodio en los túbulos distales, reduciendo la habilidad para excretar H+, esta incapacidad para excretar protones, hipotensión e hipoperfusión tisular (Granados et al., 2011). Análisis de orina. El sodio en orina Las concentraciones de sodio en la orina de perros hiponatremicos con hipoadrenocorticismo primario clásico deben ser > 30 mmol/L, los perros con hiponatremia debido a otras causas hipovolemia, vómitos y diarrea, sepsis y derrames, se conserva el sodio, por lo que los valores de sodio en la orina pueden ser de <30 mmol / L. la concentración de sodio en orina puede ser una herramienta de diagnóstico útil para el diagnóstico de hipoadrenocorticismo en casos con historia (antecedentes), examen clínico y hallazgos de la bioquímica sérica. Los pacientes con hipoadrenocorticismo (Lennon et al., 2018)la densidad de la orina oscila entre 1.008-1.020, frente a una concentración esperable >1.030 por la azotemia prerrenal, esto ocurre por la menor capacidad de concentración renal de orina secundaria a la pérdida crónica de sodio. Hallazgos radiológicos. Los pacientes con hipoadrenocorticismo pueden presentar disminución del tamaño cardiaco (microcardia) y estrechamiento de la vena cava caudal (CVC) ocasionado por disminución del volumen de sangre circulante (hipovolemia) (Imagenes 5 y 6), también puede estar disminuida de tamaño la aorta ascendente. Aunque estos hallazgos en las radiografías a menudo no son tan evidentes (Streeten, 2004). Imagen 5 Radiografía de tórax lateral izquierda de un perro de raza mixta. Imagen 6. Radiografía de tórax lateral derecho de un perro de raza Rottweiler macho de 3 años. Electrocardiografía. Los hallazgos en la electrocardiografía (ECG) tienden a ser paralelos en magnitud con la potasemia; la hiponatremia, hipercalcemia, hipoxia y acidosis metabólica causan alteraciones en el rendimiento miocárdico. La hipercaliemia leve (5,5 - 6,5 meq/L) es asociada con una onda T amplias y elevación del segmento S-T (> 0,2 mV) en la derivación II (Imagen 7). Cuando la potasemia alcanza valores de 8,5 meq/L hay ensanchamiento y aplanamiento del complejo QRS, prolongación del intervalo PR, reducción en la amplitud de la onda P y mayor duración de la misma. A niveles >8,5 meq/L hay detención auricular y desviación del segmento ST, y cuando la potasemia es de 11-14 meq/L es común la asistolia o fibrilación ventricular (Picazo, 2013) En la imagen 4 y 5, corresponde a un caso clínico de un canino macho Cocker Spaniel de 6 meses de edad recibido en la Clínica par Pequeños Animales de la Universidad Nacional de Colombia, con historia de vómito y diarrea de una semana de duración, hipercalemia compatible con el electrocardiograma y diagnosticado finalmente como hipoadrenocorticismo primario. Imagen 7. Electrocardiograma, derivadas II y III (25 mm/s, 10 mm/mV) con disminución en la amplitud del complejo QRS, aumento en la amplitud de las ondas T (superior al 25% de R) y elevación del segmento S- T de 0,3mV. Realizado el día 5 de hospitalización. Imagen 8. Electrocardiograma, derivadas II, (50 mm/s, 10 mm/mV), microvoltaje, amplitud similar de ondas R y T, complejos QRS prolongados y ausencia de ondas P (pausa atrial). Realizado el día 23 de hospitalización. Diagnósticos diferenciales. Se pueden resumir en la tabla 4 (Picazo, 2013). Tabla 4. Principales diagnósticos diferenciales para hipoadrenocorticismo. Hipercaliemia Fallo renal agudo Fallo renal crónico Uroabdomen Enfermedades digestivas graves Acidosis metabólica Hiperpotasemia y/o hiponatremia Hipoadrenocorticismo Enfermedad renal o urinaria Insuficiencia hepática grave Enfermedades gastrointestinales graves Acidosis metabólica o respiratoria graves Insuficiencia cardíaca congestiva. Liberación masiva de potasio hacia líquido extracelular Lesiones por aplastamiento Trombosis aórtica Rabdomiólisis Infecciones masivas Hemólisis masivas. Seudohipercaliemia Raza Akita* anormalidad genética particular de la raza, sus glóbulos rojos contienen mayor cantidad de potasio que en la mayoría de los perros. Leucocitosis seria Trombocitosis seria Diabetes mellitus Polidipsia primaria Secreción inapropiada de HAD Medicamentosa Efusiones pleurales quilosas y no quilosas (causa menos identificada) Hiponatremia Pérdidas digestivas por vómitos Gastroenteritis hemorrágica y enteritis Parvovirus Síndrome nefrótico Diuresis post-obstructiva Fallo cardíaco primario o secreción inapropiada de HAO Diagnóstico. El diagnóstico de hipoadrenocorticismo inicia con la identificación de los signos clínicos, desequilibrios de electrolitos y confirmación mediante la prueba de respuesta a la estimulación con Hormona adrenocorticotrópica (ACTH), para ello se debe obtener una muestra de suero antes su administración, luego una muestra una hora después si se administra corticotropina (a dosis de 0.5 U/kg IV o IM) o dos horas después si se administra ACTH porcina en gel (2.2 U/kg IM). La confirmación del diagnóstico debe evaluar la cortisolemia pos-ACTH. El hipoadrenocorticismo se confirma cuando los valores de cortisolemia pos-ACTH son < 55.18 nmol/L (< 2 µg/dl). Para el diagnóstico de hipoadrenocorticismo primario o secundario es recomendable que se mida la ACTH plasmática antes de la administración de cualquier corticosteroide, esta se debe colectar en un tubo de EDTA y se recomienda centrifugarla en el transcurso de la primera hora de haber tomado la muestra y almacenarla en tubos de plástico. Valores de de ACTH plasmática >400 pg/ml sugieren que el origen del hipoadrenocorticismo es primario, porque DDDsu producción aumenta de manera compensatoria, valores de ACTH plasmática <10 pg/ml o indetectable, sugieren hipoadrenocorticismo secundario. Las concentraciones plasmáticas de ACTH entre 10-70 pg/ml cuando se sospecha clínicamente de hipoadrenocorticismo con una cortisolemia post-administración de ACTH <55.18 nmol/L (< 2 µg/dl) se considera reducida, lo cual sugiere un hipoadrenocorticismo secundario (González et al., 2001). Tratamiento. Depende si el paciente esta llega a consulta en crisis adrenal aguda, se diagnostica hipoadrenocorticismo primario o secundario (Serrano, 2017). Tabla 5. Tratamiento sugerido para pacientes con hipoadrenocorticismo. I. C ri s is a d re n a l a g u d a . a) Fluidoterapia y estabilización de electrolitos con suero salino al 0,9%. b) admiración de glucocorticoides: -Dexametasona sódica: 2-4 mg/kg IV -Prednisolona: 15-20 mg/kg IV c) Corrección de la hiperpotasemia grave -Insulina: 0,06-0,12 UI/kg IV -Glucosa 4ml de dextrosa a 50% unidad de insulina IV -Gluconato cálcico al 10%: 0,4-1,0 mg/kg IV durante 10-20 minutos d) Prevenciòn y tratamiento de la hemorragia gastrointestinal. Tratamiento para shock pues esta deriva de la hipoperfusión tisular -Protectores gastrointestinales como sucralfato 0,5-1 g/25 kg V.O cada 8-6 horas. e) Corrección de la acidosis metabólica Acidosis metabólica se suele resolver con la administración de la fluidoterapia. Tratamiento de acidosis grave (pH<7,1) consiste en la administración de bicarbonato sódico, 0,5 mEq/kg I.V en 1-2 dosis. f) Tratamiento de la hipoglucemia: administración lenta I.V en bolo dextrosa al 50% (0,5-1,0 ml/kg) II . T ra ta m ie n to d e m a n te n im ie n to a. Complementos de mineralocorticoides Fludrocortisona oral (0.1 mg/4.5 kg PO SID) o pivalato de desoxicorticosterona (PDOC) (2 mg/kg cada 25 días), b. Complemento de prednisona (0,22 mg/kg) con DOCP 1. Administrar el 50% de la dosis de prednisona en los perros tratados con fludrocortisona. 2. Doblar la dosis de prednisona durante los periodos de estrés II I. S e g u im ie n to Determinar los electrolitos cada 3 semanas hasta obtener la dosis mínimay el intervalo de administración idóneo. La frecuencia de administración de la DOCP es cada 25-40 días en perros y cada 30 días en gatos. HIPOTIROIDISMO CANINO. Es un trastorno endocrino común en perros, su presentación clínica es inespecífica y con algunas situaciones los perros eutiroideos pueden tener incrementos en los valores con enfermedades no tiroideas y como efecto secundario de ciertos agentes farmacológicos (Boretti & Reusch, 2004). La glándula tiroides es una glándula endocrina implicada en la función metabólica celular normal, produce las hormonas tiroideas: tiroxina (T4), 3,5,3'-L-triyodotironina (T3) y 3,3 ', 5'-triyodotironina (T3 inversa), la T3 es 3 a 10 veces más activa que T4, mientras que la T3 inversa está inactiva. La tiroides excreta principalmente T4 y solo una pequeña cantidad de T3 más eficiente, por lo que una parte considerable de la T3 circulante se deriva de desyodación de T4 en el tejido periférico. Su deficiencia, el hipotiroidismo es el resultado de la producción deficiente de las hormonas tiroideas como resultado el individuo es vulnerable a las infecciones de patógenos (Yaxin et al., 2017). Fisiológicamente, las hormonas tiroideas tienen efectos: inotrópicos positivos y efectos cronotrópicos en el corazón, concentración y funcionalidad de numerosas enzimas, afectando así los procesos metabólicos de las grasas, carbohidratos, proteínas, vitaminas, utilización de minerales, la secreción y degradación de otros hormonas, así como la respuesta de los tejidos a otras hormonas, efectos catabólicos sobre el músculo y el tejido adiposo, estimular la eritropoyesis y regular la síntesis y degradación del colesterol, también se relaciona con el crecimiento normal y desarrollo neurológico y del sistema esquelético. La liberación de hormonas tiroideas está regulada por el hipotálamo y la glándula pituitaria (eje hipotálamo-pituitaria-tiroides); hipotálamo produce la hormona liberadora tirotropina (TRH) que estimula la glándula pituitaria para excretar tirotropina (hormona estimulante de la tiroides, TSH), la tirotropina tiene un efecto estimulante sobre la tiroides, síntesis y secreción de hormonas, y además, estimula el crecimiento y la función de la glándula tiroides. Las hormonas tiroideas circulan en la sangre, unidas principalmente a proteínas plasmáticas. La tiroxina y T3 son compuestos lipofílicos insolubles. Su capacidad para circular en el plasma depende de la posibilidad de unirse a proteínas específicas, globulina transportadora de tiroxina (TBG) y prealbúmina que se une a tiroxina-transtiretina (TTR) y albúmina. La TTR y TBG son proteínas de fase aguda y sus concentraciones pueden disminuir significativamente cuando hay otras enfermedades (Kučer et al., 2019). Epidemiología. En un estudio retrospectivo con 108 perros mediante la técnica de radioinmunoensayo, donde se determinaron los valores de T3 y T4 en 96 perros, se encontró que ambos valores fueron bajos en aproximadamente el 50% (47/96) de los perros hipotiroideos, el 25% (24/96) eran hipotiroideos T3 (T3 baja, T4 normal) y el 26% (25/96) eran hipotiroideos T4 (T3 normal, T4 baja). Las razas afectadas en este estudio fueron Doberman Pinschers, Gran Danés, French Poodle, Schnauzers, Setters irlandes y Boxers que representaron el 50% (54/108) de los perros hipotiroideos (Nesbitt et al., 1980). En cuanto a las razas de perros, existen razas como la Greyhound que tiene una concentración de T4T y T4L significativamente más baja que las demás razas, los Basenjis, malamute de Alaska, Lebrel árabe, Whippet y Lebrel Escocés que poseen valores de T4T o T4L por debajo o en el límite inferior del rango de referencia para estas hormonas. El Samoyedo, Siberian Husky y Keeshond tiene valores de T4T y T4L dentro del intervalo de referencia estos presentan valores más altos para estas hormonas que otras razas caninas. Se presentan variaciones raciales en los valores de colesterol y triglicéridos, las razas Rotweiller y el Mastín de los Pirineos presentan mayores niveles de estos metabolitos que otras razas caninas. En cuanto al género algunos autores reportan que la concentración sérica de T4T y T4L, es mayor en hembras que en machos, para el caso de TSH no se encuentran diferencias entre géneros, en cuanto a los niveles de colesterol y triglicéridos, se reportan valores mayores en hembras (Canedo, 2018). Fisiopatología. El hipotiroidismo en perros se puede clasificar según el momento de presentación, en congénito y adquirido, es último, se encuentra más frecuentemente en los pacientes, puede clasificar en primario, secundario o terciario. En la tabla 6 se resume cada uno. Tabla 6. Fisiopatología del hipotiroidismo Hipotiroidismo congénito -Poco frecuente -Causas: hipoplasia o aplasia tiroidea, disgenesia o dishormonogénesis (causando principalmente enanismo), ectopia del tejido tiroideo (resultado del descenso del tejido tiroideo primario junto con el saco aórtico durante la vida embrionaria, el tejido tiroideo puede encontrarse en la grasa de la aorta intrapericárdica), tejido tiroideo aberrante también puede situarse craneal a las glándulas tiroideas como un remanente del conducto tirogloso. -El grupo de genes clase II del antígeno leucocitario del perro (DLA), primer locus que se encuentra asociado con hipotiroidismo canino. Hipotiroidismo espontáneo -Proceso autoinmune progresivo con infiltración linfocítica que lleva a la desaparición del tejido tiroideo. -Forma idiopáticas: 1) atrofia tiroidea sin infiltrado inflamatorio, 2) desorden autoinmune que causa destrucciones inmunomediadas (imagen XX), 3) falla poliglandular aunque es raro que se presenten estas deficiencias endocrinas autoinmunes múltiples. Hipotiroidismo primario -Es las más frecuente -Debido a la disminución de la actividad biológica de las hormonas tiroideas en los tejidos, por una alteración orgánica o funcional de la glándula tiroides, que causa disminución en la producción y secreción de hormonas tiroideas: tiroxina (T4), tiroxina libre (T4L), triyodotironina (T3). -Causas: 1) a la resistencia a la acción de las hormonas tiroideas (hipotiroidismo periférico) 2) acelerada degradación de las hormonas tiroideas en los tejidos (hipotiroidismo por consumo), 3) Inducida por drogas: Bloqueantes de la síntesis de hormonas tiroideas, 4) Destructiva (inhibidores de tirosin-quinasa, interferón α, etc.), 5) Deficiencia de yodo (< 50 g/día) y 6) Infiltrativa: sarcoidosis, hemocromatosis. Hipotiroidismo secundario -Asociado con: 1) hipotiroidismo hipotálamo-hipofisario, secundario o central causado por una deficiencia en la estimulación tiroidea por la tirotrofina hipofisaria (thyroid stimulating hormone; TSH, por sus siglas en inglés): Invasivas: tumores, Inflamatorias, infecciosas, infiltrativas, 2) la disminución de la TSH debido a alteraciones congénitas, neoplásicas o traumáticas de la pituitaria anterior, 3) atrofia secundaria de la glándula tiroides, 4) Postratamiento: cirugía, drogas como somatostatina, dopamina, glucocorticoides, carbamazepina, oxcarbazepina. Y 5) Otras: traumatismo, idiopático. Terciario -Está relacionado con la falta de la producción hipotalámica de TRH. Tomado de: (Camargo, 2018) En la imagen 9 y 10 se observa una imagen histológica de la lesión en la glándula tiroides ocasionada por una Tiroiditis linfocítica (Benjamin et al., 1996) Imagen 9. Glándula tiroides de un perro. Infiltrados linfoplasmocíticos interfolicular, folículos de forma irregular, algunos folículos contienen detritus celulares. Tinción Hematoxilina&Eosina. Imagen 10. Glándula tiroides de un perro. Tiroiditis linfocítica severa que causo atrofia de folículos (flechas). Tinción Hematoxilina&Eosina. Signos clínicos. Las manifestaciones clínicas asociados de hipotiroidismo en perro, suelen ser inespecíficos en el hipotiroidismo (es comúnmente maldiagnosticado), los signos clínicos más comunes son atribuibles a la disminución de la tasa metabólica y se resumen en la tabla 7. Tabla 7. Algunos de los signos clínicos más comunes en perros hipotiroideos Letargo Embotamiento mental Aumento de peso Ocurre en aproximadamente el 40% de los perros hipotiroideos Renuencia al ejercicio Intolerancia al frío Enfermedades de la piel (60-80 por ciento) Piel seca y escamosa Cambios en la calidad o el color del pelaje Falta de crecimiento del pelaje después del corte. Alopecia bilateralmente simétrica (se manifiesta por primera vez en la parte lateral del tronco, tórax ventral y cola) Seborrea Pioderma superficial Hiperqueratosis (párpados, las mejillas y la frente) Hiperpigmentación Formación de comedones Hipertricosis Otitis Cicatrización deficiente de las heridas Mixedema (con menor frecuencia) poco frecuente onicomadesis (separación aguda, espontánea, no inflamatoria e indolora de la parte proximal de la uña de su matriz ungueal). Coma mixoedematoso pronóstico reservado. Anomalías reproductivas Disminución de la libido, disminución de la fertilidad, ciclo anomalías y aborto Anormalidades nerviosas Neuropatía periférica difusa, déficit de los nervios craneales, Anormalidades cardiacas Bradicardia, bajos voltajes QRS, ondas T invertidas. Anormalidades oculares lipidosis corneal, ulceración corneal, uveítis Parálisis laríngea y megaesófago Tomado de: (Cattin & Puig, 2012) En la imagen 11, corresponde a una paciente de raza labrador con 7 años diagnosticada con hipotiroidismo con historial de alopecia, prurito e inapetencia durante los últimos tres meses. En el examen físico se encontró alopecia bilateral, hiperpigmentación de la piel (Ramesh et al., 2018). En la imagen 12, corresponde a otro canino, labrador, macho de cinco años con antecedentes de anorexia, fiebre, aumento de peso continuo, pérdida de pelo en parches y prurito en todo el cuerpo. El examen clínico la piel presentaba pelaje áspero y quebradizo, alopecia irregular predominantemente en extremidades y cola. En la imagen 13, se observa un canino con lesiones típicas de hipotiroidismo. Imagen 11, se observa en piel que muestra extensa alopecia en flancos, tórax, miembros anteriores y posteriores, cuello, orejas y cara. Imagen 12, Piel, Pelo de aspecto seborreico. Tomado de :(Chethan et al., 2020). Imagen 13. Piel, Alopecia bilateral y apariencia de cola de rata Tomado de: (Kumar & Srikala, 2015) Los pacientes hipototiroideos presentan una piel característicamente seca, pálida y fría por la disminución del flujo capilar, sudoración y termogénesis. En muy pocos perros se presenta mixedema generalizado o mucinosis cutánea (cuadro clínico característico de hipotiroidismo prolongado o grave), sin embargo, esto se debe al acúmulo de ácido hialurónico y glicosaminoglicanos en la dermis e hipodermis, este lleva a la acumulación de cantidades considerables de agua y produce un marcado engrosamiento de la pie, acentuándose alrededor de la cara y la cabeza lo que provocan una apariencia "trágica", debido a que los párpados parecen gruesos y caídos, observándose la expresión de tristeza facial (Kumar & Srikala, 2015). La onicomadesis simétrica es una enfermedad de las uñas poco común en la población canina en general, en la raza Setter Gordon y el Setter inglés se ha reportado asociada a hipotiroidismo, en un estudio realizado en Noruega, de 291 perros a la edad de ocho años, el 2,7% tenía hipotiroidismo, el 8,9% tenía onicomadesis simétrica, uno solo (0,3%) tenía ambas enfermedades (Ziener et al., 2015). Las anomalías cardiovasculares frecuentes presentes en pacientes hipotiroideos se pueden explicar debido a que las hormonas tiroideas tienen efectos inotrópicos y cronotrópicos positivos, estas multiplican el número de receptores betaadrenérgicos y aumentan su afinidad y la respuesta a las catecolaminas. El estado inotrópico del ventrículo izquierdo parece estar relacionado con el estado tiroideo en condiciones experimentales y perros hipotiroideos en tratamiento médico. Cuando hay deficiencias hormonales, la función sistólica ventricular izquierda se reduce por lo cual los voltajes QRS son bajos, las ondas T invertidas, el latido del ápice es débil y ocurre una bradicardia sinusal; se ha relacionado con la presentación de miocardiopatía dilatada (MCD) como en la raza Doberman Pinscher se ha sugerido que especialmente podría jugar un papel en su desarrollo o progresión. En perros con el síndrome de enfermedad eutiroidea (SEE) o también conocido como síndrome eutiroideo enfermo, un estado del paciente donde una enfermedad no tiroidea concurrente provoca la supresión de las concentraciones séricas de hormona tiroidea circulante sin que se presente una verdadera patología de la glándula tiroides (Kučer et al., 2019), Debido a que todavía hay muchas discusiones controvertidas, así como diferentes opiniones con respecto a la DCM y el hipotiroidismo, el diagnóstico de DCM podría retrasarse y algunos perros con DCM podrían recibir solo tratamiento para el hipotiroidismo, pero no para su enfermedad cardíaca. Algunos propietarios o veterinarios se muestran reacios a administrar medicamentos cardíacos porque creen que el tratamiento para el hipotiroidismo sería suficiente. Estos perros pueden tener arritmias potencialmente mortales o un corazón morfológicamente anormal. Un tratamiento de estos cambios no solo prolongaría sus vidas, sino que también podría aumentar su calidad de vida (Kumar & Srikala, 2015). Hallazgos de laboratorio. En la tabla 8 se resumen los principales hallazgos de laboratorio clínicos. Tabla 8 Algunos de los hallazgos de laboratorio que se pueden encontrar en perros hipotiroideos. Hemograma -Se puede presentar: anemia arregenerativa moderada, anemia leve no regenerativa, anemia normocítica normocrómica. -Recuento de glóbulos blancos suele ser normal y el número de las plaquetas varían de normales a aumentadas. La anemia se puede explicar por la disminución de la eritropoyesis. Bioquímica sanguínea. - Enzimas lactato deshidrogenasa pueden estar aumentadas leve a moderada. -Enzimas alanina aminotransferasa, la fosfatasa alcalina y creatinina quinasa pueden también incrementarse levemente. La hiperlipidemia puede llevar a su su acumulación en los hepatocitos (hígado graso) llevando a una falla hepática. Electrolitos -Se puede presentar hipercalcemia moderada en el hipotiroidismo congénito. Colesterol y triglicéridos -Se presenta hipercolesterolemia e hipertrigliceridemia, en el 75% de los caninos hipotiroideos -La concentración de colesterol puede exceder los 1.000 mg / dL Se pueden explicar por defectos en el catabolismo de las lipoproteínas de baja densidad (LDL). En pacientes que presentan hiperlipidemia de larga duración pueden desarrollar aterosclerosis de vasos coronarios, cerebrales que puede favorecer los infartos miocárdicos, también puede acumularse estos lípidos en los glomérulos renales que se obstruyen desarrollando una insuficiencia renal progresiva (Beth et al., 2007). Biopsia de piel. Muchos pacientes con hipotiroidismo presentan enfermedades cutáneas recurrentes (tabla 7), cuando se presentan se puede recurrir a la histopatología, en la imagen 14, se puede observar la lesión microscópica de un paciente hipotiroideo, incluso las lesiones encontradas en la muestra de piel pueden sugerir su presentación. Imagen 14. Piel de un paciente con hipotiroidismo. La epidermis consta solo de la base y la córnea. Los núcleos de la capa de células basales son oscuros (Tsujio et al., 2008). Las lesiones microscópicas observadas en la piel y el pelo de los pacientes hipotiroideos ocurren debido a los niveles sanguíneos bajos de hormonas tiroideas (tiroxina estimula la fase anágena o activa delpelo) que favorecen que este la fase telógena o de reposo, también causa que se desprenden más fácilmente de los folículos pilosos, dando como resultado el adelgazamiento del pelaje y a menudo una alopecia simétrica bilateral en el área del ijar, cola y área cervical se asocian con áreas son de fricción, algunos pacientes presentan hiperqueratosis debido al aumento en la descamación de la piel, se puede también puede también observar en la vaina radicular externa del folículo piloso, esto puede llevar a la formación y acumulación de queratina dentro de los folículos pilosos con la consiguiente dilatación de este, en la epidermis, en la capa basal hay aumentado de los melanocitos esto explicaría la hiperpigmentación (manchas melánicas) que se reporta macroscópicamente. Algunos pacientes presentan atrofia de la epidérmica y de las glándulas sebáceas esto puede explicarse porque las hormona tiroidea influye directamente en el mecanismo de diferenciación de los queratinocitos y en la producción de sebo, se observa también disminución del grosos de la dermis por lo que se hace visible más fácilmente la hipodermis encontrándose a nivel de los folículos pilosos los adipocitos esto puede explicarse también porque dichas hormonas estimulan la síntesis de proteoglicanos en la dermis al estimular los fibroblastos (Costa et al., 2016). Diagnóstico. Aunque ninguna prueba de la función tiroidea es completamente confiable, se requiere incluir antecedentes del paciente, signos clínicos y resultados de las pruebas de la función de la glándula tiroides. Un buen protocolo para su diagnóstico incluye: Pruebas de función tiroidea. Se realiza cuando se sospecha de hipotiroidismo, la concentración de T4 total es una prueba de detección útil para hipotiroidismo, su sensibilidad diagnóstica esta entre 89% a 100%. Para el diagnostico de hipotiroidismo las pruebas disponibles se resumen en la tabla 9. Tabla 9. Pruebas diagnósticas para hipotiroidismo canino. Prueba Interpretación Muestra Técnica Concentraciones séricas totales de triyodotironina T3 Es la hormona tiroidea más potente a nivel celular, pero en el perro entre el 40% - 50% no se produce en la glándula. Suero, plasma Cantidad: 1 ml Refrig. 3-6º c Rango normalidad: 0,50-1,5 ng/ml Quimioluminiscencia No se recomienda su uso dado que se solapan los valores de eutiroideos e hipotiroideos. Su sensibilidad y precisión para diagnóstico de hipotiroidismo es bajas. Los resultados varían mucho incluso en patologías no tiroideas. Prueba de medición de T4L (libre) Solo es diagnóstica si el valor es normal o elevado en muestras de suero o plasma de perros. Suero, plasma Cantidad: 1 ml refrig. 3-6º c Rango de normalidad: 0,6-3,3 ng/dl Quimioluminiscencia T4 total Se recomienda Suero, plasma Cantidad: 1 ml Refrig. 3-6ºC Rango de normalidad: 1,48-4,5 μg/dl Quimioluminiscencia como primer análisis. total. T4 total post., prueba de estimulacion con TSHrh Suero, plasma 1 ml. Cantidad: 1 ml Refrig. 3-6º C Se administran 75 μg/perro vía i.v. de TSHrh (tirotropina recombinante humana). Se extrae una nueva muestra de sangre a las 6h post-estimulación. Perros eutiroideos: si T4 post-estimulación es > 2,5 μg/dl o 1,5 veces superior a la concentración basal de T4. Quimioluminiscencia TSH (Hormona estimulante del tiroides o tirotropina) Suero, plasma Refrig. 3-6º C Cantidad: 1 ml < 0,592 ng/ml Valores elevados de TSH y bajos de T4 son diagnósticos de Quimioluminiscencia Más precisa la determinación de T4 libre que de T4 HIPOTIROIDISMO PRIMARIO (disfunción de la glándula tiroidea: 95% de los casos) en un perro que presenta sintomatología característica. Valores normales de TSH con niveles de T4 bajos: 20- 40% de los perros con hipotiroidismo. Hipotiroidismo secundario (por alteración de la secreción de TSH por la hipófisis: 5% casos) Trastornos no tiroideos/administración de ciertos fármacos. Tomado de: (Clark, 2008). Imagen 15. Aproximación diagnóstica al hipotiroidismo canino. Tomado de: (Bugbee et al., 2019). Medición de anticuerpos de tiroglobulina (TgAA). La tiroglobulina es el principal antígeno, la sensibilidad y especificidad de la prueba alcanzan más del 90%. Se recomienda: tomar la muestra en tubo sin anticoagulante (tubo tapa roja con barrera de gel) para obtener el suero 0,5 a 1 mL, en horas de la mañana, antes de las 10:00 am. Si el paciente ya toma un suplemento para regular la función tiroidea se recomienda no administrarlo el día que venga el laboratorio, hasta que la muestra sea tomada. Es importante tener en cuenta la ingestión de medicamentos o situaciones que puedan alterar los valores de las hormonas tiroideas (ej., glucocorticoides, anticonvulsivos, medicamentos antiinflamatorios, furosemida, algunos antibióticos y antidepresivos tricíclicos). El transporte de la muestra debe ser refrigerado Las hormonas tiroideas son estables a 37 grados centígrados, durante 5 días, siempre y cuando estén en tubo plástico y a 22 grados centígrados durante 8 días. Adicional a ello son estables a la congelación (Duncan, 2007). Electrocardiograma: El hipotiroidismo en perros induce cambios leves y reversibles de la función cardíaca electromecánica, como una disminución de la frecuencia cardíaca (FC), disminución de la amplitud de la onda P y onda R, así como la disminución significativa índice de volumen diastólico del ventrículo y un diámetro sistólico normal (Guglielmini et al., 2019). Ecografía tiroidea. Es una herramienta eficaz para discriminar entre perros enfermos hipotiroideos y eutiroideos. La mayoría del hipotiroidismo canino es el resultado de una atrofia de la glándula tiroides causada por enfermedad autoinmune. Se ha sugerido el uso de ecografías tiroideas para medir cambios morfológicos en la glándula tiroides como determinación del tamaño de la tiroides y la tiroidecogenicidad han sido bien documentadas como hallazgos diagnósticos útiles y válidos en la enfermedad tiroidea autoinmune y la disfunción, incluso las variables ecográficas permiten diferenciar entre hipotiroidismo y síndrome de enfermedad eutiroidea (Reese et al., 2005). Citología de la glándula tiroides. Para el estudio de lesiones tiroideas se puede hacer uso de la citología aspirativa con aguja fina (PAAF), que es un método eficiente para su diagnóstico. Se puede hacer guiada por ecografía. De igual forma se recomienda hacer correlación con la histopatología (Maurenzig et al., 2017). Biopsia de la glándula tiroides. Es una buena elección para determinar tiroiditis linfocítica, atrofia tiroidea o tumores, ya que la histopatología proporciona información confiable (Itoh et al., 2007). En algunos casos, se puede hacer biopsia excisional o incisional dependiente de la patología sospechosa. Se ha sugerido también el uso de tomografía y resonancia magnética para el diagnóstico en perros, sin embargo, su uso es limitado. Tratamiento. Al tratamiento para corregir la deficiencia de hormonas tiroideas en el perro es la suplementación con levotiroxina oral (l-T4), solución VO cada 24 h a 20 μg / kg de peso corporal durante un mínimo de 4 semanas (Villiers, 2015). HIPERADRENOCORTISISMO Ó SÍNDROME DE CUSHING Es una patología endocrina común diagnosticadas en perros asociada con una producción o administración excesiva de glucocorticoides y que tiene un impacto negativo en la calidad de vida del paciente. Fue descrito por primera vez en humanos en 1932, por el neurocirujano Dr. Harvey Cushing con síntomas y signos clínicos similares a los presentados por la alta concentración crónica de cortisol sérico, el glucocorticoide principal liberado por las glándulas suprarrenales. Esta enfermedadpuede tener un diagnóstico difícil de confirmar debido a que no presenta un cuadro clínico no patognomónico, por lo que un diagnóstico incorrecto del síndrome de Cushing podría dar lugar a tratamiento innecesario que podría ser potencialmente dañino (Melián, 2014). Etiología. Se puede clasificar en 2 tipos: espontánea o iatrogénica, en la tabla 10, se resume los aspectos más importantes de cada una. Tabla 10. Aspectos importantes de la etiología de síndrome de Cushing Hiperadrenocorticismo dependiente de pituitaria o dependiente de pituitaria (HPD), -Generalmente es causado por la aparición de tumores pituitarios (como adenomas de células corticotrópicas de la pars distalis y de la pars intermedia), estimulando la secreción exacerbada de ACTH, resultando en hiperplasia bilateral de adrenocortical y secreción excesiva de cortisol. - Otra causa incluye una falla en la retroalimentación negativa de cortisol en ACTH, se sugiere asociado con la estimulación excesiva de las células corticotrópicas en la pituitaria debido a de un trastorno hipotalámico o una sobreproducción de hormona liberadora de corticotropina (CRH) por el hipotálamo. Tumores suprarrenales uni o bilaterales (Adenomas y carcinomas adrenocorticales) Origen Iatrogénico Se produce como resultado de la administración excesiva de glucocorticoides exógenos para tratamiento de trastornos alérgicos o Inmunomediados. Esto lleva a la supresión de las concentraciones plasmáticas de ambos CRH hipotalámica y hormona adrenocorticotrópica (ACTH) hipofisaria, lo que causan atrofia suprarrenal bilateral. Origen para neoplásico Causa muy rara, pero está asociada con hipercortisolemia secundaria a secreción tumoral ectópica de ACTH. Tomado de: (Luciana et al., 2017) Epidemiología. En un estudio epidemiológico realizado en Italia, con aproximadamente 21.281 perros, donde se analizaron las características de pacientes con hipercortisolismo espontáneo (HC) atendidos en consulta para endocrinología en clínicas privadas y una universidad pública, encontraron que el sexo, la raza y la edad resultaron siendo factores de riesgo; la edad media de presentación fue de 9,8 (± 2,5) años, siendo las hembras quienes presentaron mayor riesgo que los machos, los perros castrados (tanto machos como hembras) presentan mayor riesgo comparados con perros no castrados, siendo las hembras esterilizadas las de mayor riesgo también comparadas con las hembras no castradas. En el estudio los perros de raza mixta se tomaron como población de control encontrando que el Schnauzer estándar presenta mayor riesgo junto con el Fox Terrier. Se identificó una prevalencia global del 0,20% y el estudio sugiere la existencia de predisposición sexual siendo un mayor riesgo para las hembras esterilizadas (Carotenuto et al., 2019). En otro estudio retrospectivo realizado en América del Norte, recopilando información de la base de datos de medicina veterinaria (VMDB, por sus siglas en inglés) de los hospitales veterinarios de enseñanza, revisaron la información de la población de perros diagnosticados con hiperadrenocorticismo al momento de la muerte para identificar estados o condiciones de co-morbilidad asociadas con a este. De 70.574 perros, 1519 presentaron hiperadrenocorticismo, los criterios de se incluyó parentesco,presencia o ausencia de hiperadrenocorticismo, etiología del hiperadrenocorticismo (si se describio), así como la frecuencia de comorbilidades seleccionadas y las causas de muerte en perros con y sin hiperadrenocorticismo. Allí se encontró que el hiperadrenocorticismo fue más frecuente hembras, siendo las esterilizadas a las que se les asoció con un aumento significativo de presentar la enfermedad, además que fue la presunta causa de muerte de aproximadamente 393 (25 ± 9%), 527 perros (34 ± 7% de los casos) se encontró la etiología específica, 387de 527 (73 ± 4%) perros tenían hiperadrenocorticismo hipofisario dependiente y 136 de 527 perros (25 ± 8%) el tumor corticosuprarrenal funcional fue más común. Las razas pequeñas como la caniche miniatura caniche y Dachshund (Teckel) son las màs comunes, sin embargo, no se espera encontrar un número importante de casos en razas como Setter irlandés y Bassett hound. Las comorbilidades incluyeron: diabetes mellitus concurrente, infección del tracto urinario, urolitiasis, hipertensión, mucocele de la vesícula biliar y enfermedad tromboembólica (Rooks, M.G and Garrett, W.S, 2017). En otro estudio de cohorte retrospectivo comprendido entre el 1 de enero de 2009 y el 31 de diciembre 2013 realizado en Inglaterra para evaluar la supervivencia de los perros más allá del evaluando las historias clínicas electrónicas de 219 casos diagnosticados con hiperadrenocorticismo, 179/219 (81,7%) murieron durante este período, con una mediana de tiempo de supervivencia desde el primer diagnóstico de 510 días, perros con peso mayor o igual a 15 kg y mayores o iguales a 13 años de edad presentaron los mayores riesgos de mortalidad por todas las causas, los perros medicados trilostano y a los que se les aumentó la dosis inicial presentaron un pronóstico favorable. Este estudio encontró resultados similares con otros reportados para perros (Schofield et al., 2020). Aunque la presentación de forma natural es poco común en perros, hay reportes de prevalencia en la población canina general entre el 0,06% y el 0,28% y señalan a las razas: Collie barbudo, Caniche estándar, Perros de agua portugués, perro perdiguero de los patos de Nueva Escocia con mayor riesgo de y prevalencias de 9.4%, 8.6%, 1.5%, y 1,4%, respectivamente. Otras razas incluidas están: Terriers blancos de las tierras altas del oeste, Gran Danés, Terriers pelaje de trigo blando, Rottweilers y San Bernardo. Se ha reportado en los caniches estándar y los perros perdigueros de peaje de los patos de Nueva Escocia su presentación con una herencia autosómica recesiva (Decôme & Biais, 2017). En Brasil, un estudio retrospectivo realizado en la Universidad Federal do Rio Grande do Sul reportó que la edad media para presentación de hiperadrenocorticismo fue de 10,3 ± 2,5 años (Martins et al., 2019). Signos clínicos. En el hiperadrenocorticismo se presenta polidipsia y la poliuria en la mayoría de los perros, también se ha reportado abdomen pendulante (figura 15), hepatomegalia, intensificación de gluconeogénesis hepática a partir de aminoácidos, polifagia, atrofia muscular debilidad muscular, y jadeo, infecciones del tracto urinario que se pueden relacionar con efectos inmunosupresores del cortisol, orina diluida que puede ser resultado de la polidipsia, movilización de calcio de huesos, adelgazamiento de paredes de los vasos sanguíneos. Los signos neurológicos pueden incluir ataxia, estupor y comportamiento alterado que está relacionado con el síndrome de macrotumor hipofisario que ocurre de forma secundaria a la ocupación de espacio por los tumores pituitario. Otros signos clínicos menos comunes reportados son parálisis nerviosa facial unilateral o bilateral, laxitud y rotura de ligamentos, pseudomiotonía, resistencia a la insulina y diabetes mellitus inducida por cortisol (Bird, 2010) . Imagen 16. Abdomen pendulante en un canino con hiperadrenocorticismo (Bird, 2010) Los signos dermatológicos de hiperadrenocorticismo reportados en los pacientes incluyen alopecia bilateral (imagen 17) debido a que hay atrofia de folículos pilosos, atrofia de glándulas sebáceas, piel delgada, elastosis, hiperpigmentación comedones (imagen 18) ,calcinosis cutis (imagen 19) y piodermas recurrentes (Boghian, 2020). Imagen 17. Piel. Alopecia bilateral en un perro con síndrome de Cushing. Imagen 18. Piel con presencia de comedones en un perro con síndrome de Cushing. Imagen 19. Piel con calcinosis cutis en un perro con síndrome de Cushing Tomadode: (Boghian, 2020) Hallazgos de laboratorio En la tabla 11 se resumen los principales hallazgos del laboratorio clínico. Tabla 11. Algunos hallazgos del laboratorio clínico en perros síndrome de Cushing Hemograma Leucograma de estrés linfopenia: neutrofilia, monocitosis y eosinopenia. Debido a las concentraciones altas de cortisol en sangre. Eritrocitosis Trombocitosis Química sanguínea H íg a d o Aumento fosfatasa alcalina (ALP) y alanina aminotransferasa (ALT) Por el efecto de los glucocorticoides endógenos, estos favorecen la acumulación de glucógeno en citoplasma de hepatocitos. Aumento de factores de coagulación II, V, VII, IX, X, XI y el fibrinógeno. Hipercoagulabilidad inducida por el hipercortisolismo. Favorece tromboembolismo. Hipercolesterolemia Determinada por una producción alterada de adipocinas. Hiperglucemia Glucocorticoides provocan o favorecen la gluconeogénesis lo cual produce una resistencia a la acción que genera la insulina, esto hace que se requieran niveles de insulina elevados para así poder mantener la normoglicemia. Aumento de globulinas Se deba al catabolismo de proteínas estructurales y la utilización de aminoácidos en el proceso de gluconeogénesis. Parcial de orina Proteinuria Debido a la glomeruloesclerosis Gravedad especifica: usualmente se encuentra por debajo de 1.015 y por lo general se aprecia hipostenuria Electrolitos Fósforo sérico bajo, hipernatremia e hipopotasemia leve. Es muy leve, clínicamente poco significativo. Calcio Osteoporosis Disminuyen la síntesis de colágeno y aumentan su degradación, inhiben la acción, la replicación y la diferenciación de los osteoblastos. Tomado de: (Karic et al., 2021) Diagnóstico. Para el correcto diagnóstico se debe demostrar un aumento en la producción de cortisol o una disminución de la sensibilidad del eje hipotálamo pituitario-adrenal a la retroalimentación negativa de los glucocorticoides. En la tabla 11 se resumen las diferentes pruebas que ayudan el clínico en el diagnóstico de la enfermedad de Cushing. (Mayo, 2012). Tabla 12. Pruebas para el diagnóstico de la enfermedad de Cushing T e s t d e s u p re s ió n c o n d e x a m e ta s o n a a d o s is b a ja ( L D D S T ) -Prueba de elección para el diagnóstico de hiperadrenocorticismo. 1) Administrar 0,01-0,015 mg/kg de dexametasona intravenosa (IV) 2) tomar muestras de sangre antes de iniciar la prueba, a las 4 y 8 horas post-administración; el resultado de las 8 horas se emplea para el diagnóstico. -Su sensibilidad es de 85-100 % y una especificidad de 44-73 % -El fenobarbital puede dar falsos positivos. T e s t d e e s ti m u la c ió n c o n A C T H Prueba de elección para el diagnóstico del HAC iatrogénico y del hipoadrenocorticismo. Tiene baja sensibilidad, no se considera de elección para el diagnóstico del HAC. 1) Se obtiene una muestra basal, otros 60 minutos después de la administración de 5 µg/kg de ACTH IV (esto evitar problemas de absorción). -Tiene una sensibilidad del 57-95 % y una especificidad del 86-93 %. -Puede ser útil en pacientes con diabetes mellitus resistente a la insulina sospechos de HAC. -Algunos medicamentes suprimen el eje y pueden disminuir la respuesta a la ACTH: progestágenos, glucocorticoides y ketoconazol. R a ti o c o rt is o l/ c re a ti n in a e n o ri n a ( U C C R ) Prueba muy sensible para descartar la enfermedad (75-100 %), pero poco específica (20- 25 %). -Para evitar estrés se recomienda tomarla en casa del paciente, en la mañana, por lo menos 48 horas después de la visita al veterinario. Los progestágenos y los glucocorticoides exógenos pueden reducirlo al disminuir la producción de cortisol endógeno; enfermedades no adrenales pueden aumentar su liberación aumentado el UCCR M e d ic ió n d e l a c o n c e n tr a c ió n d e A C T H e n d ó g e n a Concentraciones plasmáticas de ACTH endógena son: -normales o elevadas en perros con HAC hipofisario -bajas o indetectables en aquellos con tumores adrenales. Es una prueba que ayuda a diferenciarlas. Se emplea Radioinmunoensayo (RIA) y quimioluminiscencia. - Se toma la muestra de sangre en tubos que contengan EDTA -Se centrifuga por 15 minuto y se congela inmediatamente y se envía con hielo al laboratorio. Se debe consultar previamente con el laboratorio para planificar el envío y en algunos casos se puede añadir aprotinina para evitar la degradación de la ACTH por las proteasas plasmáticas, pero ésta puede interferir con algunas técnicas. Puede haber problemas por: baja sensibilidad, carácter pulsátil de la secreción de ACTH y su degradación por un mal manejo de la muestra. P ru e b a d e s u p re s ió n c o n d e x a m e ta s o n a a d o s is a lt a ( H D D S T ) La administración de dexametasona a dosis de 0,1 mg/kg de dexametasona produce en: - perros sanos: causa una rápida y prolongada supresión en la secreción de cortisol. -Si hay tumor adrenal, a cualquier dosis no suprime la secreción de cortisol. -Si es origen pituitario, la secreción de ACTH no se suprime de modo adecuado con su administración (incluso a dosis más alta), pero en algunos perros la concentración de cortisol disminuye. dexametasona oral 0,1 mg/kg cada 6-8 horas y se recoge una tercera muestra de orina a las 24 horas. Se considera supresión si la ratio después de la dexametasona es inferior a la mitad del ratio basal. Si no hay supresión no se puede diferenciar entre origen pituitario y un tumor adrenal. -se recomienda realizar la medición de la ACTH endógena y/o pruebas de imagen, -Los resultados de las pruebas de LDDST y de HDDST no se consideran fiables al 100 %. P ru e b a U C C R y s u p re s ió n Se recogen dos muestras de orina dos días consecutivos, por la mañana, con la segunda muestra se administra dexametasona oral a dosis de 0,1 mg/kg cada 6-8 horas y se recoge una tercera muestra de orina a las 24 horas. Se considera supresión si la ratio después de la dexametasona es inferior a la mitad de la ratio basal. Tomado de: (Mayo, 2012) El diagnóstico por imagen acompaña las pruebas hormonales, entre las que se encuentran: Ecografía. Permite la observación y medición de las glándulas adrenales para determinar si el tamaño es normal normales, sin embargo, no descarta la enfermedad, pues el origen puede ser pituitario (Imagen 20). Imagen 20 Glándula adrenal: aumento de tamaño (2,92 x 1,43 cm) observado en una ecografía diagnóstica (flecha blanca). Imagen 21. Glándula adrenal. Aumenta de tamaño (círculo rojo) observado durante una necropsia. Tomado de : (Boghian, 2020) Necropsia. Si el paciente fallece y se sospecha de enfermedad de Cushing sin embargo no se ha diagnosticado adecuadamente se puede recurrir a esta para indagar (imagen 21) . Se puede determinar si la causa fue hiperplasia o tumores adrenales. En la imagen 21 se observa una fotomicrografía de una glándula adrenal con tinción Hematoxilina-azul de metileno (HEB) donde evidencian células grandes, de colores intensos y de núcleo fuerte con estructuras lipídicas en su interior (precursores de esteroides) revelando unas células del metabolismo activo, las otras células pequeñas, de color oscuro, con núcleo picnótico o ricas en heterocromatina que corresponden a células del metabolismo inactivos (Boghian, 2020). Figura 22. Glándula adrenal con tinción Hematoxilina-azul de metileno (HEB). Tomado de: (Boghian, 2020) Diagnóstico por imagen. Se emplea en caso de sospecha de tumores en la glándula adrenal e hipófisis, mediante tomografía axial computarizada (TAC) y/o resonancia magnética,sin embargo, son pruebas diagnósticas que puedan pagar todos los propietarios (Belloso, 1947). Tratamiento. Existen varias opciones como tratamiento para esta enfermedad, pero un factor importante para la elección del mismo es conocer su etiología. Para casos de hipoadrenocorticismo pituitario el tratamiento va dirigido a bloquear la síntesis de hormonas de la corteza adrenal (trilostano), producir necrosis de la corteza adrenal en caso de hipoadrenocorticismo adrenal (mitotano), si es necesario controlar la liberación excesiva de ACTH endógena (Nelson, 2010). Conclusiones -Las endocrinopatías son un conjunto de enfermedades que en los últimos años han aumentado significativamente a medida que la calidad de vida y longevidad de los perros. -Un problema que se presenta comúnmente en la consulta clínica es que los signos de las diferentes endocrinopatías pueden ser confundidos con otras enfermedades pues afectan muchos sistemas corporales piel, sistema nervioso, digestivo entre otros, pudiendo llegar a causar errores diagnósticos al tener tan variados y a la vez comunes signos. -Con el incremento de la casuista de las diferentes endocrinopatías cada vez se hace más necesario la capacitación de profesionales para hacer un correcto diagnóstico. - Es importante en cada caso que se haga una correcta anamnesis, de allí parte el diagnóstico pues los propietarios describen los signos del paciente en casa hasta el momento de la consulta. - Un correcto examen clínico acompañado de las ayudas diagnósticas correctas mejoran las posibilidades de un diagnostico exitoso y por su puesto un tratamiento efectivo. - Entre las endocrinopatías más comunes en clínica de pequeños animales se incluyen las enfermedades de las glándulas tiroides y adrenal es importante para los clínicos conocer la epidemiologia de dichas enfermedades con el fin de diagnosticarlas correctamente según sexo, edad, raza predispuesta a su presentación. 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Denisse Graciano
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