Biologia de los microorganismos (1549)

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Los programas internacionales de vigilancia e intervención 
para la salud pública fueron decisivos para controlar la emer-
gencia del síndrome respiratorio agudo grave (SARS), una 
enfermedad que emergió rápida, explosiva e impredecible-
mente, a partir de una fuente zoonótica. Por otra parte, incluso 
una respuesta rápida y focalizada resultó incapaz de contener 
la propagación de la gripe pandémica (H1N1) en 2009 (Sec-
ción 28.11). 
MINIRREVISIÓN
 ¿Qué factores son importantes para la emergencia y 
reemergencia de posibles patógenos?
 Indique los métodos generales y específicos que serían útiles 
para identificar enfermedades infecciosas emergentes.
28.8 Guerra biológica y armas 
biológicas
La guerra biológica consiste en el uso de agentes biológicos 
para incapacitar o matar a una población militar o civil en un 
acto de guerra o de terrorismo. El uso y desarrollo de armas 
biológicas está prohibido por las leyes internacionales. No obs-
tante, las armas biológicas se han utilizado contra objetivos en 
los Estados Unidos y plantas de producción de armas biológi-
cas pueden estar en manos de diferentes gobiernos así como de 
reconocidos grupos terroristas.
Características de las armas biológicas
Las armas biológicas eficaces son patógenos o toxinas (1) fáci-
les de producir y entregar, (2) seguras para que las usen las fuer-
zas de ataque y (3) capaces de incapacitar o matar personas de 
una manera sistemática y consistente. Aunque las armas bioló-
gicas son potencialmente útiles en manos de fuerzas militares 
convencionales, lo más probable es que sean usadas por terro-
ristas. Esto se debe, en parte, a la disponibilidad y al bajo coste 
algunas poblaciones de roedores (  Sección 30.2). En 1993, en 
el suroeste americano, se describió un número anormalmente 
elevado de casos de infecciones por hantavirus en humanos, con 
varios casos mortales, y que estaban asociados a la exposición a 
ratones silvestres, su orina y sus excrementos. La probabilidad 
de exposición a los ratones y a sus desechos aumentó debido a 
que unas copiosas lluvias, una temporada agrícola prolongada, 
y un invierno suave, dieron lugar a una población de ratones 
salvajes más numerosa de lo normal, lo que condujo a un incre-
mento considerable del hospedador zoonótico y de la densidad 
de patógenos y a un aumento de la exposición de los hospeda-
dores humanos vulnerables. Factores similares provocaron un 
brote de hantavirus en el Parque Nacional de Yosemite (Cali-
fornia, Estados Unidos) en 2011 (Figura 28.10). A medida que 
avanza el calentamiento global, probablemente veamos altera-
ciones permanentes del clima que alterarán significativamente 
el abanico de hospedadores, vectores y patógenos.
Abordaje de las enfermedades emergentes
Las enfermedades emergentes tienen, por lo menos al principio, 
una incidencia baja y no suelen estar en la lista de enfermedades 
de declaración obligatoria para los Estados Unidos (Tabla 28.4). 
Las claves para abordar las enfermedades emergentes son el 
reconocimiento de la enfermedad y la intervención para evitar 
la transmisión del patógeno.
Las enfermedades emergentes son reconocidas primero por 
su incidencia epidémica única, sus agrupamientos, y otros 
patrones epidemiológicos y síntomas clínicos que no están rela-
cionados con patógenos conocidos. Estas enfermedades requie-
ren una vigilancia intensiva de la salud pública, acompañada 
de intervenciones específicas diseñadas para controlar los futu-
ros brotes. Para contener los brotes, se pueden aplicar métodos 
tales como el aislamiento, la cuarentena, la inmunización y el 
tratamiento farmacológico. Para las enfermedades zoonóticas 
y de transmisión por vectores, se debe identificar el hospeda-
dor no humano o el vector para intervenir en el ciclo de vida del 
patógeno y detener la infección en humanos.
Tabla 28.7 Factores de virulencia codificados por bacteriófagos, plásmidos y transposones
Elemento genético Organismo Factores de virulencia
Bacteriófago Streptococcus pyogenes Toxina eritrogénica
Escherichia coli Toxina de tipo Shiga
Staphylococcus aureus Enterotoxinas A, D, E, estafilocinasa, toxina 1 del síndrome del choque tóxico 
(TSST-1)
Clostridium botulinum Neurotoxinas C, D, E
Corynebacterium diphtheriae Toxina diftérica
Plásmido Escherichia coli Enterotoxinas, factor de colonización de los pili, hemolisina, ureasa, factor de 
resistencia al suero, factores de adherencia, factores de invasión celular
Bacillus anthracis Factor causante de edema, factor letal, antígeno protector, cápsula de ácido 
poli-D-glutámico
Yersinia pestis Coagulasa, fibrinolisina, toxina murina
Transposón Escherichia coli Enterotoxinas termoestables, sideróforos de aerobactina, operones de 
hemolisina y pili
Shigella dysenteriae Toxina de Shiga
Vibrio cholerae Toxina del cólera
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