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Historia Argentina y Latinoamericana
Vazeilles
Hugo Del Campo
Sindicatos, partidos obreros y Estado en la Argentina pre-peronista.
1. Introducción:
Con la irrupción del peronismo, la relación e/ sindicatos, partidos obreros y estado adquiere una
configuración especial:
- el movimiento sindical considera a loa part obre como enemigos políticos en un enfrentamiento
fuerte entre1945 y 1946
- los parti obre no renunciaron a la reconquista de sindicatos perdidos entre 1943 y 1946 y de hacer
entender a los trabajadores quienes son sus verdaderos representantes.
- Los trabajadores se identifican con un movimiento político no obrero, heterogéneo y de difusa
ideología pero capaz de reunir a un caudal de electoral importante y de acceder por esa vía al control del
estado.
- El estado tiene un papel decisivo en la distribución de la renta de la economía como la argentina. El
movimiento sindical quería recuperar una posición de privilegio en el seno del estado a través de la
participación en el poder político (objetivo principal), Impedir esto fue objetivo de los capitalistas y es así q
la relación entre sindicatos, estado y partidos se vuelca sobre el conjunto del sistema político hasta
determinar su funcionamiento en los próximos 30 años.
Los sectores capitalistas, al no poder acceder al poder por vía electoral, se alían al sector militar. El
sector +compacto, organizado del aparato estatal se convirtió en el fiel de la balanza política. Pacto
sindical-militar.
Por su parte, los partidos no pudieron canalizar los intereses sociales contrapuestos ni negociar su
articulación en el marco de un sistema liberal. El juego de esos intereses se desarrollo bajo el control de
dictaduras militares.
El objetivo de Del Campo es rastrear en la historia del movimiento obre argentino los antecedentes
de la peculiar relación entre sindicatos, partidos obreros y estado q se consolidó durante el peronismo.
2. Sindicatos y partidos obreros:
El problema entre sindicatos y partidos obreros se planteo en el movimi obre desde el principio.
2.1: en un primer momento se enfrentaron socialistas y anarquistas. Socialistas: para ellos debía
existir una estrecha cooperación e/ los sindicatos y PS puesto q ambos tiene los mismo fines de
mejoramiento de la situación de la clase obrera. La actividad sindical y la lucha por las reivindicaciones era
lo mejor p/ desarrollar la conciencia de clase q acercaría a los obreros al partido. Los sindicatos debían
agrupar a todos los trabajadores, sin distinción ideológica. Para esta corriente los trabajadores deben
ocuparse de la lucha política y conseguir leyes protectoras de trabajo dando sus votos a los partidos q en
sus programas tengan reformas sociales en pos de la legislación obrera. Agrupación UGT (unión gral de los
trabajadores)
Los anarquistas organizadores piensan q el sindicato es el terreno propicio p/ difusión de idea
liberadora q llevaría a la revolución social. Organizaciones gremiales debían proclamar su filiación
ideológica, es decir, debían “creerse” los principios que defendían, como lo hizo la Federación Obrera
Regional Argentina (FORA). Hay q inculcar, según ellos, en los obreros los principios filosof y econo del
comunismo anárquico. Trabajan p/ q los estados políticos queden reducidos a funciones puramente
económicas. No les interesaba la conquista del poder político, solo la reivindicación de la clase obrera.
La convivencia de Socialistas y anarquistas en una misma organización resultaba imposible.
Los socialistas solo tenían influencia sobre una minoría de los trabajadores organizados. Por el
contrario los anarquistas tenían mucho más predominio ya que llegaban incluso a los inmigrantes. Esto se
debe a la falta de una ideología política. Este aspecto agrupaba a más personas bajo el objetivo de las
mejoras de las condiciones obreras. En cuanto al inmigrante se puede decir que en este contexto está tamb
el INDIVIDUALISMO propio del inmigrante: venia a hacer la América, se veía forzado por el predominio del
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trabajo artesanal o independiente por las escasas probabilidades de ascenso social. Los asalariados
concebían a la situación como transitoria: aspiraban a propietarios independientes. La frustración por no
realizarse llevaba a la rebelión contra un sistema q se mostraba injusto.
2.2: La nueva corriente surgida en el PS (de trabajadores asalariados que querían conservar sus
empleos) había impuesto su punto de vista según la cual la representación parlamentaria (o sea la
repersentación política) socialista solo tenía un papel secundario y complementario.
La escisión sindicalita se presentaba como una alternativa revolucionaria y clasista frente al
reformismo parlamentario. Pronto evoluciono hacia posiciones anti-estatales y anti-políticas q la acerca a
los anarquistas. De ellos la separaba su concepción de sindicato: los sindicalitas lo consideraban como la
única forma de organización específicamente obrera apta p/ lucha económica, revolución sindical (huelga
gral.). Los sindicatos son, p/ ellos, núcleo esencial alrededor del cual se hace la nueva sociedad. Sostenían q
los sindicatos debían ser neutrales ideológicamente, lo q tamb lo diferencia de los anarquistas (necesidad
de sindicalismo rotulado).
1910 influencia anarquista declina, debilitamiento mundial de la corriente. Desde principios de siglo,
la lenidad q había mostrado el estado hasta el momento ante la propaganda anarquista se convirtió en
persecución sistemática. Los inmigrantes debían asumir su condición de asalariados y q era necesario lucha
por el mejoramiento de las condiciones de vida y trabajo. La desconfianza frente a leyes, políticos y estado
hacia q los trabajadores lograran objetivos por sus propias fuerzas por medio de confrontación con patrones
y no por vía electoral. Quienes capitalizaron la decadencia del anarquismo fueron los sindicalistas. Cuando
entraron en la FORA, cambiaron la orientación de la central, se proclamo la neutralidad ideológica y la
pluralidad de tendencias en su interior. La neutralidad ideológica no es lo mismo p/ sindicalistas q para
socialistas. Para los primeros era condición necesaria p/ existencia de sindicatos poderosos y autónomos q
eran su campo de acción. Para los segundos era una barrera q les permitiría mantener en ese ámbito una
cierta presencia q tratarían de ensanchar.
Después del reflujo de desocupación durante la guerra, la recuperación económica favoreció el
estallido de las demandas acumuladas y movimientos huelguísticos. El movimiento sindical se fortalece. Se
quiere adjudicar todo el poder a los sindicatos p/ un efectiva revolución.
Se produce una fragmentación en la década del 20, la cuestión sindicatos-partidos dividía al
movimiento obrero en 2 centrales antipolíticas (FORA anarquista y Unión Sindical Argentina) y 2 centrales
políticas haciendo q los extremos se opongan.
2.3: La fragmentación pareció atenuarse en 1930 con la convergencia de 2 centrales moderadas en
la CGT. La convivencia entre sindicalistas y socialistas en una misma central fue posible mientras la recesion
económica y la desocupación obligaron al movimiento obrero a tener una existencia vegetativa. En 1933 las
condiciones fueron + favorables y las discrepancias internas volvieron.
Reducida la influencia anarquista, los enfrentamientos eran e/ sindicalista, socialistas y comunistas
caracterizándose por la paulatina pérdida de simpatía por loa primeros y el ascenso de los 2 y 3os. La
decadencia de los sindicalistas como tendencia mayoritaria se da en 1922. Sindicalistas fueron perdiendo el
control de los sindicatos como el de los trabajadores de estado, gráficos y de calzado, que pasaron a reforzar
el bloque socialista nucleado alrededor de La Fraternidad, la Unión Tranviaria, municipales y empleados de
comercio.
Concientes de la debilidad de sus bases de sustento, los sindicalistas buscan recuperarse por medio
de los vínculos con el poder político. Esto confirma la burocratización y oficialismo sobre las q se centraba el
crecimiento de la oposición socialista. Elincremento electoral del PS y la importancia de su representación
parlamentaria aumentaban la capacidad de sus dirigentes y afiliados p/ expandir su influencia en el terreno
gremial.
Las circunstancias internacionales impulsaron la politización de los trabajadores, el ascenso del
fascismo en Europa era una amenaza real, frente al cual el peligro de la utilización del movimiento sindical
por los partidos obreros pasaba a un 2do plano.
2.4: El predominio de los partidos obreros sobre el movimiento sindical durara cerca de una década, y
aunque la oposición socialistas-comunistas sustituye la antigua oposición política-antipolítico, esta última
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reaparecerá bajo nuevas formas y es la q llevara la nueva división de la CGT en 1943. El peso de los
comunistas en el movimiento sindical no dejo de aumentar durante las 2 dec siguientes. En algunos
periodos las relaciones entre Soc y sindi habían sido correctas, pero el estallido de la guerra y la firma del
pacto germano-soviético alteraran la convivencia.
La antigua cuestión de la relación entre sindicatos y partidos se reflejo en una división de la CGT, en
CGT Nº1 y CGT Nº2. Ambas representaban estrategias en las q oscilaba el movimiento sindical. La primera
retomaba la tradición sindicalista de prescindencia política y defensa de intereses corporativos que
privilegiaba la capacidad de presión del obrero y favorecía la negociación con los gobiernos al mantener los
sindicatos apartados de la política partidista. La 2da quería reforzar vínculos del movimiento sindical con los
partidos obreros y llevar a la CGT un papel activo en la política nacional y vistas a formación de un frente
popular q aspirara el poder político.
2.5 Estas 2 corrientes que recorren la evolución del movimiento obrero argentino desde sus
comienzos encontrarían síntesis en el peronismo. Perón empezó apoyándose en la CGT Nº1 (en la tradición
de desconfianza e independencia frente a los partidor obreros) p/ eliminar influencia socialista y comunista
del movimiento sindical. Pero termino llevando al mismo a una absoluta identificación con un partido y
llevar un papel importantísimo en la política nacional concretando los objetivos de partido obrero. Logro la
unificación del movimiento sindical a través embanderamiento político sectorial.
2. El movimiento sindical y el estado:
Si bien el movimiento sindical tiene dinámica propia, esta se vincula con la evolución de la sociedad,
del sistema político y del estado. Las etapas de predominio anarquista, sindicalista y social-comunista en el
movimiento obrero coincidían con las 3 formas q adopta el estado durante este periodo:
OLIGARQUICO-REPREZIVA (hasta 1916) / POPULISTA-LIBERAL (1916-1930) /
OLIGARQUICO-INTERVENCIONISTA (1930-1943). La relación sindicato-estado tiene un desarrollo lineal y
termina con la solución peronista.
3.1: El estado OLIGARQUICO-REPRESIVA (hasta 1916) se ajusta tan bien a la concepción q los
anarquistas tenían del estado como el sindicalismo anarquista se ajusta la idea q el primero tenia del
movimiento obrero: cada uno cumplir el papel q el otro le atribuía. Estado, para el obrero anarquista, era
maquinaria represiva al servicio del capital, imposible de reformar, había que destruirlo. Para el estado
oligárquico-represivo, el mov sindi era factor de desorden, promovido por agitadores extranjeros. Se trataba
de un problema policial y las leyes de residencia y defensa social eran las herramientas p/ combatirlo.
3.2: Con el primer radicalismo la actitud del estado frente al movimiento obrero cambio. Bajo una
concepción liberal atomística de la sociedad, el radicalismo se diferencio del est. oligar practicando una +
sensibilidad social. En el cazo de Irigoyen, concepción de estado como arbitro de problemas sociales, con
inclinación humanitaria y paternalista hacia los – favorecidos. Los obreros, influidos por las ideas de rev
rusa, convocaron huelga p/ recuperar el poder adquisitivo q los salarios habían pedido. Esto provoco el
estallido de la Semana Trágica, en tanto paradójica expresión de actitud anarquista. P/ los anarquistas el gob
de Yri no se diferenciaba de los anteriores y la actitud del estado p/ con los obreros no cambiaria en nada.
Los sindicalistas pensaban q el estado de Yri era un arbitro, mediador con voluntad de obtener beneficios a
los huelguistas. Loz socialistas pensaban q era demagógico.
El periodo de Alvear tuvo prosperidad económica, estabilidad política, paz social q permitió aumentar
el salario real, dictar leyes sociales. Se – huelgas y movilizaciones de protesta. Algunos sindicalistas tuvieron
buenas relaciones con el Gob. Los sindicalistas se adaptaron rápido a las nuevas condiciones transformando
la concepción del estado y de su comportamiento.
3.3 Ninguno de los gobernantes posteriores a Yri siguió este modelo porq la situación de los obreros
tendió a estancarse y las escasas leyes sociales debieron ser arrancadas y defendidas por los trabajadores. El
estado intervino dentro de los conflictos laborales. Esto se debía a la importancia de la organizaciones
gremiales y a la moderación de dirigentes. En esta época la vocación participacionista del movimiento
sindical que buscaba institucionalización no podía dejar indiferente a un estado q expandía sus funciones y
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tendía a controlar las funciones sociales. El intervencionismo en lo social era consecuencia de q el Estad. se
había visto obligado a asumir en lo económico por la crisis. Hay una tendencia a la posición de mediación
para evitar conflictos laborales, esto responde a la intención de aumentar en control del estado sobre el
movimiento sindical.
3.4 Si desde el punto de vista del movimiento sindical, el peronismo en síntesis de sus 2 principales
corrientes p/ involucrarlo en la política nacional, desde el punto de vista de la actitud del estado frente al
movimi sindical se puede hablar de una síntesis de las tendencias insinuadas durante las 3 décadas
anteriores. El la etapa Yrig, el peronismo retomara rasgos populistas: el peso del estado estará a favor del
sector popular, mejorando su situación y apelando a su apoyo contra la oligarquía, valores como lealtad,
identificación emocional con el líder y las mazas. El estado peronista desarrollará tendencias
intervensionistas en la dec del 30 actuando sobre el ámbito de relaciones laborales en tanto arbitro de
conflictos e institucionalizando el movimiento sindical p/ tener un + control del mismo.
P/ q esto fuera posible, la actitud del mov sindical frente al estado cambio: se volvió cada vez + hacia
el estado en busca de arbitraje y protección, aceptando al principio y reclamando desp su intervención en
asuntos laborales. P/ q la intervención fuera ok era necesario q reforzara su capacidad de influir sobre el
poder político.
Las 2 líneas de desarrollo del movimiento sindical argentino (alejamiento de los partidos obreros y
acercamiento al estado) hacían q la mayor parte del mismo acepte la propuesta de Perón.
Elementos de relación sindicatos-parti obrero-estado cuajan rápidamente entre 1943-46 con la crisis
q recompondría al sistema argentino sobre nuevas bases.
Reforzamiento de identificación del movimiento sindical con el peronismo en 1946-55 parece
corroborar q la coparticipacion en el gobierno no fue decepcionante p/ el primero.
Composición del movimiento sindical no cambio entre 1943-46 y q el apoyo a Perón p/ su asunción al
poder no vario en décadas anteriores.
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