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Psiq Biol. 2008;15(5):153-61 153
ORIGINALES
Relación entre el modelo de cinco factores 
y las dimensiones del trastorno de personalidad
latente del Manual Diagnóstico y Estadístico 
de los Trastornos Mentales, cuarta edición
Gerald Nestadta, Paul T. Costa Jrb, Fang-Chi Hsuc, Jack Samuelsa, O. Joseph Bienvenua
y William W. Eatond
aDepartment of Psychiatry and Behavioral Sciences. The Johns Hopkins University School of Medicine. Baltimore. Estados Unidos.
bGerontology Research Center. National Institute on Aging. Baltimore. Estados Unidos.
cDepartment of Biostatistics. The Johns Hopkins University Bloomberg School of Public Health. Baltimore. Estados Unidos.
dDepartment of Mental Hygiene. The Johns Hopkins University Bloomberg School of Public Health. Baltimore. Estados Unidos.
El presente estudio comparó la estructura latente
de los trastornos de personalidad (TP) clasificada en
el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos
Mentales, cuarta edición, con el modelo de cinco
factores (MCF) de las dimensiones de la personalidad
general. En el estudio se incluyó a 742 individuos que
residían en la comunidad y participaban en el
Hopkins Epidemiology of Personality Disorders
Study. Utilizando el International Personality
Disorder Examination los psicólogos evaluaron los TP
clasificados en el Manual Diagnóstico y Estadístico de
los Trastornos Mentales, cuarta edición y las
dimensiones TP se derivaron previamente utilizando
un análisis de factor dicotómico. Se administró a
todos los individuos el Revised NEO Personality
Inventory, un parámetro del MCF. La relación entre
las dos series de conceptos teóricos relacionados con
la personalidad se examinó utilizando un marco de
validez del concepto teórico y, asimismo, coeficientes
de correlación de Pearson, modelos de regresión
lineal múltiples y modelos de regresión spline. Cada
uno de los cinco factores de TP manifestó
correlaciones ligeras o moderadas con diversas
dimensiones NEO; en conjunto, el dominio NEO y las
puntuaciones de faceta explicaron de una quinta a
una tercera parte de la variancia en las dimensiones
TP. Se identificaron ejemplos de relaciones no lineales
entre las dimensiones de la personalidad. Se observó
una correspondencia modesta entre las dimensiones
TP y los rasgos de MCF, y éstos sólo explicaron
parcialmente la variancia de los TP. Los parámetros
dimensionales de la personalidad general pueden ser
una alternativa apropiada al Manual Diagnóstico y
Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición.
Si los rasgos de inadaptación adicionales definen
mejor el dominio de los TP sigue siendo un objetivo
importante de la investigación futura.
Palabras clave:
Modelo de cinco factores. Trastorno de personalidad. Manual
Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales.
The relationship between the five-factor
model and latent Diagnostic and Statistical
Manual of Mental Disorders, fourth edition
personality disorder dimensions
This study compared the latent structure of the
Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders,
fourth edition personality disorders (PDs) with the 
5-factor model (FFM) of general personality
dimensions. The subjects in the study were 742
community-residing individuals who participated in
the Hopkins Epidemiology of Personality Disorders
Study. Diagnostic and Statistical Manual of Mental
Disorders, fourth edition PD traits were assessed by
psychologists using the International Personality
Disorder Examination, and PD dimensions were
derived previously using dichotomous factor analysis.
The Revised NEO Personality Inventory, a measure
268.285
El presente estudio se financió con las becas MH50616, MH64543 y
MH47447 de los National Institutes of Health y el Intramural Research
Program, National Institute on Aging.
Previamente publicado en Comprehensive Psychiatry. 2008;49:98.
Correspondencia. Dr. G. Nestadt.
Department of Psychiatry and Behavioral Sciences. Johns Hopkins
Hospital. Baltimore, MD 21287. Estados Unidos.
Correo electrónico: gnestadt@jhmi.edu
Manuscrito recibido el 26-8-2008 y aceptado el 16-9-2008.
154 Psiq Biol. 2008;15(5):153-61
of the FFM, was administered to all subjects. The
relationship between the 2 sets of personality-related
constructs was examined using a construct validity
framework and also using Pearson correlation
coefficients, multiple linear regression models, and
spline regression models. The 5 PD factors each
exhibited small to moderate correlations with several
NEO dimensions; together, the NEO domain and
facet scores explained a fifth to a third of the variance
in PD dimensions. Examples of nonlinear
relationships between the personality dimensions
were identified. There is a modest correspondence
between the PD dimensions and FFM traits, and the
traits of FFM only partially explain the variance of
the PDs. Dimensional measures of general personality
may be a suitable alternative to the Diagnostic and
Statistical Manual of Mental Disorders, fourth edition.
Whether additional maladaptive traits would better
define the domain of PDs remains an important
objective for future research.
Key words:
Five-factor model. Personality disorder. Diagnostic and Statistical
Manual of Mental Disorders.
INTRODUCCIÓN
En la práctica psiquiátrica clínica los diagnósticos de
trastorno de la personalidad se usan para describir patro-
nes de respuestas emocionales y conductuales inadapta-
das. Estos conceptos teóricos se desarrollaron a partir de
la experiencia clínica y de los consensos de los comités
de diagnóstico, que dio lugar a los 10 trastornos de la
personalidad (TP) contemporáneos, definidos operativa-
mente en el eje II del Diagnostic and Statistical Manual
of Mental Disorders, cuarta edición (DSM-IV). Aunque
los médicos pueden considerar que algunos de estos
diagnósticos son útiles para caracterizar formas particu-
lares de dificultades de los pacientes, muchos otros
identifican otros rasgos y características de inadaptación
diferentes de las categorías actuales del eje II1. Ha sus-
citado un debate considerable la estrategia diagnóstica
más útil para estos trastornos2,3. Recientemente, se ha
producido un movimiento hacia una nueva conceptua-
ción del dominio TP del DSM-IV. Se ha propuesto una
serie de modelos de tres o cuatro dimensiones de orden
superior de la patología de la personalidad (revisados en
Markon et al4). Otra estrategia que se ha propuesto in-
cluye el uso de dimensiones de la personalidad general,
tal como el modelo de cinco factores (MCF) de la es-
tructura de la personalidad general, para caracterizar a
los pacientes en el eje II.
El MCF de la personalidad es uno de los diversos sis-
temas posibles de clasificación de la personalidad gene-
ral disponibles para una consideración. Surgió tanto de la
tradición léxico-semántica como de la tradición del cues-
tionario de personalidad y recibe mayor apoyo en los cír-
culos científicos contemporáneos, aunque de ningún mo-
do se ha adoptado con carácter universal5. La confirma-
ción repetida de la estructura de cinco factores de la
personalidad, a través de poblaciones, geografía y tiem-
po, es su mayor punto fuerte. El Revised NEO Persona-
lity Inventory (NEO-PI-R) es el parámetro citado más
frecuentemente del MCF6. Es uno de los métodos que se
han propuesto para la próxima revisión del DSM7.
Las tradiciones psiquiátricas y psicológicas de evalua-
ción de la personalidad han permanecido relativamente
separadas y aisladas en el ámbito clínico, pero entre los
estudios científicos publicados, la relación entre los ras-
gos de la personalidad general e inadaptada recibe ma-
yor atención. La investigación empírica que compara los
dos métodos apunta a una base común sustancial; múlti-
ples informes indican que para describir los TP, son úti-
les las dimensiones de la personalidad general8-13.
El presente estudio evaluó la correspondencia entre
las dimensiones de la personalidad general e inadaptada.
Los dominios y facetas del 5 NEO-PI-R se usan para
evaluar la personalidad general y las cinco dimensionesTP derivadas del análisis del factor explorador de los
742 individuos incluidos en el Hopkins Epidemiology of
Personality Disorders Study14,15, para evaluar la perso-
nalidad inadaptada. Las cinco dimensiones TP que
emergen del análisis de factores de los criterios TP del
DSM-IV son las siguientes: compulsivo, distante, evita-
dor neurótico, cruel impulsivo y egocéntrico. Aunque
estos factores TP son relativamente similares a los des-
critos por otros investigadores16-18, un objetivo del pre-
sente estudio es evaluarlos desde el marco de las dimen-
siones del MCF. Los aspectos importantes se refieren a
si las dimensiones TP derivadas del International Perso-
nality Disorder Examination (IPDE) reflejan las dimen-
siones relativamente unitarias correspondientes a las
principales dimensiones de la personalidad general o,
más bien, reflejan mezclas variables. Por otra parte, na-
turalmente es posible que las dimensiones TP sean inde-
pendientes de las del MCF y no deban considerarse sim-
plemente como variantes extremas de inadaptación de
las dimensiones del rasgo de personalidad universal o
general.
En resumen, investigamos dos posibles medios en los
que los dos conceptos teóricos de personalidad podrían
relacionarse. En primer lugar, ambos pueden describir
las mismas dimensiones de la personalidad a pesar de
usar métodos diferentes. En segundo lugar, aunque im-
plica los mismos dominios, la personalidad anormal po-
dría tener una variedad concreta de determinación, de
modo que los factores TP sólo se relacionarían con los
extremos de las dimensiones de personalidad básica.
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
MATERIAL Y MÉTODO
En el presente estudio se incluyó a los 742 individuos que
participaban en el Hopkins Epidemiology of Personality Di-
sorders Study. El diseño y los métodos se han descrito con de-
talle en un estudio previo14. Originalmente, se evaluó e identi-
ficó a los individuos en 1981, como parte de la cohorte de Bal-
timore del programa del área de captación epidemiológica. Se
entrevistó de nuevo a todos los individuos disponibles (n =
1.929) entre 1993 y 199619,20. De ellos, seleccionamos a todos
los examinados por psiquiatras en 1981, al igual que a todos
los individuos, identificados mediante el Diagnostic Interview
Schedule en el seguimiento, con diagnóstico de manía, depre-
sión, trastorno de pánico, trastorno obsesivo-compulsivo, tras-
torno por consumo de alcohol o trastorno por consumo de dro-
gas. Además, de los individuos restantes, se seleccionó una
muestra aleatoria del 25% (222/844).
Psicólogos clínicos con un nivel 4 de formación efectuaron
las evaluaciones de TP entre 1997 y 1999. Los psicólogos ob-
tuvieron el consentimiento informado antes de empezar la en-
trevista. Con este objetivo, se utilizó el IPDE21, un instrumen-
to diagnóstico semiestructurado. Se incluyeron todos los crite-
rios pertinentes para el diagnóstico de todos los TP
clasificados en el DSM-IV y la Clasificación Internacional de
las Enfermedades, décima revisión. Se proporcionaron instruc-
ciones a los psicólogos para que evaluaran los rasgos anorma-
les de personalidad manifestados durante toda la vida adulta
de los individuos. Se valoró cada criterio como 0 (ausente), 1
(acentuado o exagerado), 2 (nivel del criterio o patológico) o 9
(omitido o desconocido). Se obtuvo información adicional de
cada individuo a partir de una entrevista con un amigo o fami-
liar. En las 40 entrevistas valoradas conjuntamente, los coefi-
cientes de correlación intraclase para el número de rasgos TP
DSM-IV valorados, presentes (1 o 2) fueron los siguientes: es-
quizoide, 0,81; esquizotípico, 0,58; paranoide, 0,63; antisocial,
0,80; límite, 0,76; histriónico, 0,69; narcisista, 0,62; evitador,
0,89; dependiente, 0,76 y obsesivo-compulsivo, 0,70.
Todos los individuos completaron el cuestionario NEO-PI-
R con lápiz y papel o un formato en ordenador. El NEO se es-
cala para producir puntuaciones del dominio para cada uno de
los cinco factores, neuroticismo (N), extroversión (E), actitud
abierta a la experiencia (openess [O]), afabilidad (A) y aplica-
ción (conscientiousness [C]). Cada uno de los dominios inclu-
ye puntuaciones de las seis facetas. Las puntuaciones brutas se
convirtieron en puntuaciones T para una estandarización6. Pa-
ra cada dimensión la media ± desviación estándar (DE) es 50
± 10. Las puntuaciones del dominio se correlacionan ligera-
mente entre sí. Las medias ± DE del factor de esta muestra
fueron las siguientes: N, 48,29 ± 9,82; E, 48,29 ± 9,46; O,
46,16 ± 9,38; A, 48,77 ± 10,31, y C, 47,38 ± 9,90. Para cada
una de las cinco dimensiones TP se derivaron puntuaciones
utilizando un análisis de factor dicotómico22, según lo descrito
por Samuels et al14. Las puntuaciones de factor para las cinco
dimensiones TP se estandarizaron con el objetivo de permitir
comparaciones significativas.
Análisis estadístico
Las asociaciones entre las cinco dimensiones TP y los cinco
dominios NEO y las puntuaciones de las 30 facetas se investi-
garon utilizando coeficientes de correlación de Pearson. Para
examinar la relación de las dimensiones NEO con la puntua-
ción de cada factor TP se usaron modelos de regresión lineal
estandarizados. Para la puntuación de cada factor TP se calcu-
laron coeficientes de regresión estandarizados, incluyendo en
el modelo las puntuaciones de los cinco dominios NEO. Para
cada modelo de regresión se calculó el r2 para estimar el grado
hasta el cual las puntuaciones de los cinco dominios NEO po-
drían explicar la variancia de cada una de las dimensiones TP.
Este procedimiento se repitió incluyendo las puntuaciones de
las 30 facetas con las puntuaciones de los dominios. Después
de un ajuste para las puntuaciones de los cinco dominios, la
variabilidad explicada por las facetas se estimó mediante la di-
ferencia entre r2 a partir de ambos modelos. No ajustamos los
modelos para tener en cuenta la falta de fiabilidad de los pará-
metros. 
Efectuamos análisis adicionales para examinar si simple-
mente había relaciones lineales entre las dimensiones básicas
y los TP o si éstas eran más robustas con niveles superiores o
inferiores de personalidad básica. Para examinar la relación
entre cada una de las cinco dimensiones de personalidad bási-
ca y cada una de las cinco dimensiones TP se efectuaron 25
diagramas de dispersión (resultados no mostrados). Para mo-
delar la posible relación no lineal se usaron regresiones spline.
El principal objetivo fue encontrar el modelo más frugal que
explicara las 25 relaciones. Empezamos con los modelos li-
neales más simples, es decir un spline lineal. Si el efecto del
spline lineal no fuera significativo mediante la prueba de la F
para el coeficiente de regresión spline, el término se suprimiría
y se conservaría el modelo más simple original. Si el spline li-
neal tuviera un efecto significativo, se considerarían modelos
más complejos, incluidos splines cuadráticos y cúbicos. Para
efectuar estos análisis se usaron los programas PROC GLM y
CORR en el SAS (SAS, Cary, NC)23. En cada caso, la selec-
ción del modelo se basó en el resultado de la prueba de la F,
comparando el modelo más simple con el más complejo. En
todos los análisis se utilizó una estrategia de selección hacia
adelante. Como “nudos”, para este objetivo se seleccionaron
dos puntos de las respectivas dimensiones NEO, 1 DE por de-
bajo y 1 DE por encima de cada media (puntuaciones T de 40
y 60, respectivamente).
RESULTADOS
En la tabla 1 se muestran las correlaciones entre las
cinco dimensiones TP y los cinco dominios de persona-
lidad general a partir de los NEO. Con la excepción del
factor egocéntrico, cuatro de los factores TP se caracte-
rizanpor una dimensión NEO exclusiva como su máxi-
ma correlación: evitador neurótico con N (0,47), distan-
te con E (–0,43), egocéntrico con E y O (0,28) y cruel
impulsivo con A (–0,33). En comparación, el factor
compulsivo sólo presentó una correlación baja con C
(0,13). Sin embargo, cada uno de los factores TP se co-
rrelaciona significativamente con, al menos, otros dos
dominios NEO: compulsivo con N (0,10) y A (–0,11);
distante con N (0,18), O (–0,21), A (–0,09) y C (0,12);
evitador neurótico con E (–0,31) y C (–0,29); cruel im-
pulsivo con N (0,19) y C (–0,25); y egocéntrico con E
(0,28) y A (–0,08).
Psiq Biol. 2008;15(5):153-61 155
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
Considerando si los cinco factores TP describen el
mismo “espacio” de la estructura de la personalidad que
los cinco dominios de personalidad básica, adoptamos
un marco de validez de constructo convergente-diver-
gente24, en el que las correlaciones de 0,3 o mayores in-
dican una convergencia adecuada, y las correlaciones de
menos de 0,16 indican una divergencia adecuada. Con
estas presunciones, sólo 3 de los factores IPDE mues-
tran una validez convergente con los factores NEO: evi-
tador neurótico con N, distante con E y cruel impulsivo
con A. Los factores egocéntrico y compulsivo no mues-
tran validez convergente con los factores O y C, respec-
tivamente (tabla 1, correlaciones convergentes identifi-
cadas en diagonal).
Aunque el factor evitador neurótico muestra conver-
gencia con N, no muestra divergencia con E ni, hasta un
menor grado, con C. El factor distante muestra correla-
ciones divergentes moderadas (es decir r = 0,16-0,29),
con N y O. El factor egocéntrico muestra una correla-
ción con E tan alta como la del factor al que va dirigido,
O. El factor cruel impulsivo muestra correlaciones di-
vergentes moderadas con N y C. Por último, el factor
compulsivo apenas muestra asociaciones con cualquier
dominio, con independencia de que sea convergente o
divergente.
A continuación, examinamos las correlaciones del
factor TP con las facetas de NEO-PI-R. En la tabla 2 se
muestra la correlación entre NEO-PI-R y los factores
TP. Las facetas de N se correlacionan en gran parte con
el factor evitador neurótico, excepto que N2 (hostilidad
colérica) y N5 (impulsividad) se correlacionan en alto
grado con el factor cruel impulsivo y C5 (autodiscipli-
na) y C1 (la aptitud) se correlacionan más firmemente
con el factor evitador neurótico. Tres de las seis facetas
E se correlacionan con el factor distante, excepto que E3
(seguridad en sí mismo) se correlaciona negativamente
de modo más firme con el factor evitador neurótico, E5
(la conducta de búsqueda de la excitación) se correlacio-
na más firmemente con el factor cruel impulsivo y E4
(la actividad) no se correlaciona con ninguno de los fac-
tores TP. Las facetas de una actitud abierta se correla-
cionan más con el egocentrismo aunque las facetas E,
E6 (emociones positivas) y E3 (seguridad en sí mismo)
también se correlacionan con el egocentrismo. Las face-
tas de afabilidad se correlacionan con el factor cruel im-
pulsivo, excepto la faceta A6 (predisposición a la sensi-
bilidad) que no se correlacionó con ninguno de los fac-
tores TP. Ninguna de las facetas C se correlaciona
firmemente con el factor compulsivo.
De las 30 posibles correlaciones convergentes, siete
son de 0,3 o mayores, lo que indica un grado de conver-
gencia entre las facetas NEO y los factores TP, aunque
está claro que los factores TP y las facetas de los cinco
factores no comparten el mismo espacio. El factor evita-
dor neurótico muestra convergencia para cuatro de las
seis facetas N y el factor distante para tres de seis face-
tas. Los tres factores TP restantes no muestran conver-
gencia en 0,3 o mayor con las facetas de cinco factores a
los que van dirigidos, mostrando correlaciones conver-
gentes con cinco de las seis facetas de O y A, respecti-
vamente (véase tabla 2, en diagonal).
La estrategia de validez convergente/divergente re-
quiere que, para que sea válida, el concepto teórico se
correlacione más firmemente con los criterios o paráme-
tros relacionados de lo que se correlaciona con los pará-
metros o constructos no relacionados. Un constructo vá-
lido muestra una validez divergente revelando la ausen-
cia de correlaciones significativas con las escalas o
variables no determinadas. El examen de las correlacio-
nes fuera de la diagonal de la tabla 2 proporciona un
medio para evaluar la validez divergente. En general, las
correlaciones fuera de la diagonal o no convergentes no
deben ser significativas, o una magnitud de 0,2 o mayor.
La tabla 2 muestra que el factor evitador neurótico care-
ce de validez divergente en el sentido de que se correla-
ciona en 0,2 o más con E3 (seguridad en sí mismo), C1
(aptitud) y C5 (autodisciplina). De forma similar, el fac-
tor distante muestra correlaciones de 0,2 o más altas pa-
ra N3 (depresión), O3 (sentimientos), A1 (confianza) y
C1 (aptitud). Los factores “egocéntrico” y “cruel impul-
sivo” tampoco muestran validez divergente: el factor
egocéntrico se correlaciona tan firmemente con las face-
tas E, E3, E5 y E6 como con las facetas O a las que va
dirigido. El factor cruel impulsivo muestra correlaciones
156 Psiq Biol. 2008;15(5):153-61
TABLA 1. Coeficientes de correlación de Pearson entre las dimensiones NEO y TP
Evitador neurótico Distante Egocéntrico Cruel impulsivo Compulsivo
N 0,47a 0,18a 0,06 0,19a 0,1b
E –0,31a –0,43a 0,28a 0,05 –0,04
O –0,03 –0,21a 0,28a 0,05 0,02
A 0,03 –0,09b –0,0b –0,33a –0,11c
C –0,29a –0,12c 0,05 –0,25a 0,13c
ap � 0,0005.
bp = 0,005 < p � 0,05.
cp = 0,0005 < p � 0,005.
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
moderadas indeseadas con una serie de facetas diferen-
tes, a saber, N2 (hostilidad colérica), N5 (impulsividad),
E5 (conducta de búsqueda de excitación), C1 (aptitud),
C3 (sumisión) y C6 (deliberación). Por último, el factor
compulsivo apenas muestra asociación con las facetas
del MCF, convergente o divergente. 
La tabla 3 muestra los resultados de los análisis de re-
gresión, conducidos para establecer la relación indepen-
diente de cada uno de los dominios NEO con las dimen-
siones TP y para evaluar la variancia de cada dimensión
TP explicada por los dominios NEO y sus facetas rela-
cionadas. El neuroticismo, A y C hacen contribuciones
significativas e independientes al factor compulsivo. En
conjunto, los dominios de personalidad NEO explican el
8% de la variancia. Esto se duplica cuando en la ecua-
ción de regresión se incluyen las puntuaciones de la fa-
ceta (17%). La extraversión y C se relacionan significa-
tivamente con el factor distante. El dominio exclusivo
explica el 19% de la variancia para este factor. Esto au-
menta hasta el 31% con la inclusión de las puntuaciones
de la faceta en el modelo. El neuroticismo, E y A hacen
contribuciones significativas al factor evitador neuróti-
co. Las puntuaciones del dominio explican el 27% de la
variancia, que aumenta al 34% si se incluye en el mode-
lo las puntuaciones de la faceta. La afabilidad C y E se
relacionan significativamente con el factor cruel impul-
sivo. Los dominios NEO explican el 17% de la varian-
cia para este factor. Con la inclusión de las puntuaciones
de la faceta en el modelo esto aumenta hasta el 32%. La
extraversión, O, N y A se relacionan significativamente
con el factor egocéntrico. Las puntuaciones del dominio
explican el 14% de la variancia, que aumenta al 21%
con la inclusión de las puntuaciones de la faceta en el
modelo. 
Dado que se detectaron relaciones significativas aun-
que modestas entre dimensiones generales y TP, exa-
minamos si una relación no lineal podría ser un mejor
ajuste de los datos. En nueve de 25 comparaciones,el
modelo lineal no produjo un mejor ajuste de los datos
(resultados no mostrados). Tres modelos de regresión
spline lineal ilustraron las estructuras alternas de estas
relaciones. Se identificó una relación inversa signifi-
cativa entre las escalas de evitador neurótico y E (según
lo documentado). En el caso de un nudo individual con
Psiq Biol. 2008;15(5):153-61 157
TABLA 2. Correlaciones : facetas NEO con las dimensiones de TP
Factor evitador Factor distante Factor Factor cruel Factor neurótico egocéntrico impulsivo compulsivo
N1: ansiedad 0,38a 0,12a 0,04 0,05 0,06
N2: hostilidad colérica 0,22a 0,15a 0,15a 0,28a 0,19a
N3: depresión 0,45a 0,22a 0,06 0,15a 0,02
N4: inhibición 0,43a 0,17a –0,04 0,04 0,11a
N5: impulsividad 0,16a –0,06 0,08b 0,23a 0
N6: vulnerabilidad 0,43a 0,15a –0,01 0,13a 0,07
E1: calidez –0,19a –0,37a 0,16a –0,12a –0,1b
E2: sociabilidad –0,20a –0,40a 0,11a –0,08 –0,13a
E3: seguridad en sí mismo –0,34a –0,26a 0,27a 0,07 0,07
E4: actividad –0,19a –0,22a 0,19a 0,08 0,09b
E5: búsqueda excitación –0,08 –0,16a 0,21a 0,25a –0,07
E6: emociones positivas –0,26a –0,31a 0,22a 0 –0,03
O1: fantasía 0,08 –0,15a 0,17a 0,11a –0,01
O2: estética 0,02 –0,11a 0,2a –0,03 –0,02
O3: sentimientos 0,02 –0,27a 0,24a 0,01 0,11a
O4: acciones –0,16a –0,13a 0,18a 0,02 –0,03
O5: ideas –0,06 –0,04 0,22a 0,07 0
O6: valores –0,03 –0,14a 0,06 0,01 0,02
A1: confianza –0,18a –0,25a –0,05 –0,25a –0,15a
A2: franqueza 0,03 –0,01 –0,1b –0,28a –0,02
A3: altruismo –0,05 –0,17a 0,06 –0,19a –0,09b
A4: sumisión 0,1b 0,04 –0,17a –0,29a –0,11a
A5: modestia 0,18a 0,09b –0,13a –0,18a 0
A6: afabilidad 0,05 –0,08 0,10a –0,11a –0,09b
C1: aptitud –0,3a –0,2a 0,07 –0,22a 0,06
C2: orden –0,12a –0,07 0,06 –0,09b 0,16a
C3: obediencia –0,09b –0,14a –0,02 –0,28a 0,16a
C4: esfuerzo en logros –0,27a –0,11a 0,14a –0,07 0,1b
C5: autodisciplina –0,33a –0,06 0 –0,16a 0,02
C6: prudencia –0,13a 0,04 –0,04 –0,28a 0,08b
ap � 0,01.
bp � 0,05.
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
una puntuación T de 40 en la escala E, la relación entre
la escala de evitador neurótico y E se fortaleció con
puntuaciones muy bajas de E y fue significativamente
diferente de la relación con puntuaciones E más altas (la
pendiente de regresión se modificó desde –0,06 con la
puntuación de menos de 40 hasta –0,03 con más de 40;
F = 4,47; p = 0,03). La relación entre la escala evitador
neurótico y N fue fuertemente positiva (según lo docu-
mentado). Esta relación se fortaleció cuando las puntua-
ciones N de más de una puntuación T de 60 se compara-
ron con las puntuaciones de evitador neurótico y fue ca-
si significativamente diferente de la relación por debajo
de esta puntuación (la pendiente de regresión cambió
desde 0,04 a 0,07; F = 3,03; p = 0,08). Documentamos
una relación inversa significativa entre la escala evita-
dor neurótico y C. Con puntuaciones T en C de más de
60, esta relación fue positiva y significativamente dife-
rente de la línea de regresión por debajo de este punto
(la pendiente de regresión se modificó desde –0,04 a
0,04; F = 9,42; p = 0,002) (fig. 1).
DISCUSIÓN
Este estudio desarrolla la investigación previa que
propone como principio dos puntos de partida funda-
mentales de la estrategia DSM para el diagnóstico de los
TP. El primero es que los 10 diagnósticos de TP del
DSM-IV pueden elaborarse más frugalmente en cinco
dimensiones. Esta estrategia alternativa conserva la uti-
lidad clínica y tiene apoyo empírico14. El segundo es
que, para la definición de los TP, podría tener valor una
estrategia dimensional más que categórica25. En el con-
texto de estas estrategias muchos investigadores han
considerado el uso de diversos sistemas de personali-
dad básica como alternativa de las categorías TP del
DSM-IV.
Abordamos este problema desde dos aspectos. Estu-
diamos las correlaciones entre dimensiones generales y
TP y el grado hasta el cual un parámetro de la personali-
dad general explica la variación de los factores TP.
También hemos considerado si los modelos no lineales
mejoran la correspondencia entre los dos sistemas. 
Los resultados del presente estudio indican una co-
rrespondencia moderada entre los parámetros de la per-
sonalidad general y las dimensiones TP. De los cinco
factores TP, tres se correlacionaron firmemente con un
factor MCF diferente y congruente. No obstante, el fac-
tor egocéntrico se correlacionó hasta el mismo grado
con E y O y el factor compulsivo sólo manifestó ligeras
correlaciones con las dimensiones pertinentes de MCF.
El factor de evitación neurótica se correlaciona más po-
tentemente con N, el factor distante se correlaciona in-
versamente con E, el factor cruel impulsivo se correla-
ciona inversamente con A y el compulsivo con C, aun-
que la correlación fue relativamente débil. Para O la
mayor correlación entre los cinco factores TP se obser-
vó en el factor egocéntrico. Esto indica que la estructura
factorial de los TP demuestra un grado modesto de co-
rrespondencia con la estructura de las dimensiones de la
158 Psiq Biol. 2008;15(5):153-61
TABLA 3. Coeficientes de correlación estandarizados de los rasgos de personalidad del MCF que predicen 
las dimensiones de TP
Evitador neurótico Distante Egocéntrico Cruel impulsivo Compulsivo
N 0,42 0,05 0,17 0,08 0,2
E –0,19 –0,43 0,26 0,19 –0,09
O 0,07 –0,02 0,18 0,03 0,04
A 0,16 –0,06 –0,1 –0,28 –0,14
C –0,04 0,1 0,03 –0,21 0,3
R2 0,27 0,19 0,14 0,17 0,08
R2a 0,34 0,31 0,21 0,32 0,17
ar2 con todas las facetas añadidas.
bp � 0,005.
cp � 0,05.
4
2
0
–2
–4P
u
n
tu
a
c
ió
n
 d
e
 e
v
it
a
c
ió
n
 n
e
u
ró
ti
c
a
0 20 40 60 80 100
Diligencia/aplicación
Figura 1. Relación (spline) entre las puntuaciones C y de
evitación neurótica con un nudo en la puntuación T de 60
en la dimensión C.
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
personalidad general. Sin embargo, las estructuras de
dos factores no comparten el mismo espacio que de-
muestran las correlaciones convergentes y divergentes y
no deben considerarse como si fueran las mismas. En
cada caso, más de un dominio NEO se asocia significa-
tivamente con los factores TP. Esto indica que la expre-
sión de los TP podría depender de un perfil de dimen-
siones generales más que de una simple correspondencia
uno a uno o que estas dimensiones particulares del tras-
torno no son sobresalientes en las dimensiones de perso-
nalidad más generales. Otro aspecto importante que se
demuestra en el presente estudio es que las facetas den-
tro de cada dominio MCF también son decisivas para
discriminar entre los TP.
Estudios empíricos respaldan estas conclusiones;
Saulsman et al12 condujeron un metaanálisis de estos es-
tudios y llegaron a la conclusión de que, para cada TP,
había un perfil MCF significativo. Maruta et al26 estu-
diaron la relación entre el Dimensional Assessment of
Personality Pathology-Basic Questionnaire (DAPP-BQ)
y el NEO-PI-R en una población de individuos japone-
ses voluntarios. Observaron una correspondencia entre
las cuatro dimensiones primarias del DAPP-BQ y las
cuatro de los cinco dominios del MCF, pero no de O
con el dominio de la experiencia; también indican que
algunas dimensiones TP tienen una superposición limi-
tada con el NEO-PI-R.
En conjunto, los cinco dominios NEO explicaron mo-
deradamente cada uno de los factores TP27. La inclusión
de las puntuaciones de las facetas NEO en los modelos
de regresión mejoró el grado hasta el cual las dimensio-
nes NEO explicaron los factores TP. En total, el NEO
explicó de una quinta a una tercera parte de la variancia,
un dato moderadamente más bajo que en otros estudios.
Por ejemplo, O’Connor et al28 encontraron que las pun-
tuaciones de las facetas del NEO explicaron, como me-
dia, el 46% de la variancia de las dimensiones TP eva-
luadascon el Millon Clinical Multiaxial Inventory-III
(MCMI-III)29 en estudiantes de secundaria. En dicho es-
tudio las mayores correlaciones podrían relacionarse
con el hecho de que el MCMI-III es un cuestionario au-
toevaluado y/o que el instrumento Millon representa
versiones diferentes de los constructos del DSM. Las
correlaciones más moderadas detectadas en el presente
estudio se deben en parte a la diferencia tanto en el mé-
todo de determinación como de la naturaleza de los
constructos representados, al igual que a la poca fiabili-
dad de los instrumentos. Una corrección de estas fuentes
de error de determinación aumentaría las asociaciones,
quizá de manera sustancial. 
En el presente estudio sólo se compararon los factores
TP con el NEO-PI-R, un ejemplo prominente del MCF
de la personalidad, y no se efectuaron comparaciones
con otros parámetros de personalidad básica ni con pa-
rámetros alternos de TP. En la actualidad se encuentran
en investigación varios de estos parámetros como alter-
nativas a la nosología del DSM-IV. Éstos incluyen el
Temperament and Character Inventory30, el Personality
Assessment Schedule31, el Schedler and Westen Assess-
ment Procedure32, el Eysenck Personality Ques-
tionnaire33, el Zuckerman Personality Questionnaire34,
el MCMI-III29, el Multidimensional Personality Ques-
tionnaire (Tellegen, Waller, datos no publicados, 1987),
el parámetro Interpersonal Circumplex35, el DAPP-BQ
(Livesley, datos no publicados, 1999), el Schedule No-
nadaptive and Adaptive Personality36 y el Personality
Psychopathology-537. Se han publicado diversos estu-
dios que describen la concordancia de estos otros pará-
metros de la personalidad con los TP13,38-40; para cada
uno se dispone de pruebas de una utilidad razonable,
aunque no completa para describir los TP del DSM-IV.
El objetivo del presente estudio fue comparar los facto-
res TP con un parámetro prototípico de la personalidad
sana. Widiger et al3 revisaron la relación entre los am-
plios dominios de varios de estos parámetros y llegaron
a la conclusión de que, con algunas excepciones, estos
modelos alternos comparten una “estructura jerárquica
común”; además, desde una perspectiva jerárquica,
Markon et al4 apuntaron a que el MCF es el nivel decisi-
vo de análisis para la investigación de la personalidad y
la psicopatología. Por consiguiente, el NEO, así como
los cinco dominios de la personalidad que valora, es un
vehículo apropiado para estudiar la relación entre los
rasgos sanos y patológicos de la personalidad.
Es preciso considerar una fuente adicional de varian-
cia entre los constructos generales y los TP. Aunque las
características TP pueden originarse del temperamento
del individuo, según lo indicado por la correspondencia
entre los dos constructos, la relación puede ser modera-
da por los efectos de las experiencias y los contextos
culturales del desarrollo. Estos efectos pueden hacer una
contribución más sustancial o diferente a las caracterís-
ticas medidas en el constructo TP que a las de la perso-
nalidad básica.
Los análisis exploradores indicaron que puede ser va-
lioso considerar una relación no lineal entre los paráme-
tros de la personalidad básica y los TP. Por ejemplo, las
puntuaciones del factor de evitación neurótica tuvieron
relaciones más potentes en los extremos de las dimen-
siones tanto E como N. En ambos ejemplos, la relación
se acentuó en los extremos de las dimensiones MCF, pe-
ro persistió una relación significativa en la misma direc-
ción, a través de toda la dimensión. En el tercer ejem-
plo, la relación lineal mostró una relación inversa signi-
ficativa entre las puntuaciones de evitación neurótica y
C. Sin embargo, en el extremo alto de C hubo una inver-
sión significativa de la dirección de la relación (las pun-
tuaciones C más altas se relacionaron con mayores pun-
Psiq Biol. 2008;15(5):153-61 159
Nestadt G et al. Relación entre el modelo de cinco factores y las dimensiones del trastorno de personalidad latente 
del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, cuarta edición
tuaciones de evitación neurótica). Una posible interpre-
tación es que, en general, los individuos evitadores neu-
róticos son menos concienzudos, pero en las puntuacio-
nes extremas de C, la dimensión de este rasgo favorece
conductas asociadas con la evitación neurótica. Estos
hallazgos representan esfuerzos exploradores que, en
conjunto, no respaldan la hipótesis de que las dimensio-
nes TP estén más relacionadas con los extremos de las
dimensiones de la personalidad básica. Sin embargo,
ejemplos como éste destacan la riqueza clínica que pro-
porciona la evaluación de las dimensiones de la perso-
nalidad.
El presente estudio proporciona una perspectiva ex-
clusiva sobre la relación entre los TP del DSM-IV y el
MCF. Difiere en diversos aspectos importantes de los
estudios previos que han investigado esta relación. Pro-
bablemente los problemas relacionados con la búsqueda
de tratamiento, que podría influir en los hallazgos obser-
vados en una población clínica, no influyen en esta
muestra comunitaria, en el sentido de que el tratamiento
no afectó a la selección de la muestra. El tamaño de la
muestra es lo suficientemente amplio para que los resul-
tados de los análisis presentados sean fiables. Psicólo-
gos clínicos evaluaron los rasgos TP del DSM-IV me-
diante una entrevista estandarizada, empleada interna-
cionalmente, y la complementaron con entrevistas a
informantes. Es preciso destacar que la estructura NEO
en esta población no difirió sustancialmente de otras po-
blaciones estudiadas (Löckenhoff et al, manuscrito en
preparación).
Limitaciones
Los individuos del estudio fueron reclutados original-
mente en 1981 en el proyecto de área de captación epi-
demiológica de Baltimore. Con el tiempo, la muestra es-
tuvo afectada por las pérdidas para el seguimiento (p.
ej., por muerte, rechazo a participar o imposibilidad de
localizar a los individuos) y por el envejecimiento. La
comparación entre individuos que participaron y no par-
ticiparon sólo ha revelado diferencias demográficas me-
nores diferentes de la edad, pero una pérdida mayor de
lo esperado de los individuos con un diagnóstico de TP
antisocial14,41. Sin embargo, no es probable que la es-
tructura latente de los factores TP y su relación con el
MCF se vea afectada sustancialmente por la exclusión
de individuos del estudio o el envejecimiento en esta
muestra de población general.
Los individuos fueron entrevistados utilizando un ins-
trumento semiestructurado. No se excluyó a individuos
con trastornos del eje I y sólo se usaron los criterios TP
del DSM-IV. Cada uno de estos aspectos podría influir
en los resultados del estudio. El IPDE podría evaluar los
rasgos de manera diferente de otros instrumentos se-
miestructurados y, sin duda, los evalúa de manera dife-
rente de un instrumento autoevaluado. El estado mental
clínico de los individuos podría influir en la evaluación
de los rasgos de personalidad, y la inclusión de los dife-
rentes rasgos (p. ej., rasgos que se consideran deseables)
podría afectar a la solución del factor derivado.
Implicaciones
El presente estudio proporciona un apoyo mesurado
de la correspondencia entre las estructuras de los TP y la
del MCF de la personalidad general. Cada uno de los
factores TP se relaciona con diversos dominios del
MCF. La amplitud de la patología de los TP no se abar-
ca por completo con los dominios NEO, aunque las fa-
cetas contribuyen sustancialmente a la variancia de los
TP. Parece necesario disponer de material clínico adi-
cional, más allá del NEO, para describir las dimensiones
de los TP. Instrumentos como el DAPP-BQ, el Schedule
for Nonadaptive and Adaptive Personality36 y la Struc-
tured Interview para el MCF42, que combinan las di-
mensiones de la personalidad MCF con rasgos clínicos
adicionales y permiten al médico reproducir manifesta-
ciones variables de la patología de la personalidad, pue-
den ser alternativas más útiles para la estructura TP del
DSM-IV.
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