Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
TR A U M A TO LO G ÍA Residentado Médico William Guzmán Grupo Qx Medic ® 2021 ®Grupo Qx MEDIC William Guzmán Lima. Perú www.qxmedic.com 12UNIDAD 14: Lesiones del pie 14.1. Fractura del calcáneo......................................................... 12 14.2. Fractura del astrágalo........................................................ 12 14.3. Fractura de los metatarsianos........................................... 12 14.4. Deformaciones del pie...................................................... 13 01UNIDAD 9: Fractura de pelvis 9.1. Generalidades...................................................................... 01 9.2. Clasificación......................................................................... 01 9.3. Complicaciones................................................................... 01 9.4. Tratamiento......................................................................... 01 02UNIDAD 10: Luxación de cadera 10.1. Luxación de cadera posterior............................................ 02 10.2. Luxación de cadera anterior.............................................. 03 04UNIDAD 11: Fractura de fémur 11.1. Fractura de la cabeza de fémur......................................... 04 11.2. Fractura del cuello del fémur............................................ 04 11.3. Fractura de la diáfisis del fémur....................................... 05 09UNIDAD 13: Lesiones de tibia y peroné 13.1. Fractura de tibia y peroné................................................. 09 13.2. Otras lesiones.................................................................... 09 13.3. Ruptura del tendón de aquiles.......................................... 11 06UNIDAD 12: Lesiones de rodilla 12.1. Lesión del ligamento cruzado anterior.............................. 06 12.2. Lesión de ligamentos colaterales...................................... 06 12.3. Lesión del ligamento cruzado posterior........................... 06 12.4. Lesión de meniscos........................................................... 07 12.5. Otras lesiones de la rodilla y la rótula.............................. 07 15.1. Escoliosis............................................................................ 14 15.2. Enfermedad de Grisel ....................................................... 14 15.3. Deformación de Sprengel.................................................. 14 15.4. Fractura del ahorcado........................................................ 14 14UNIDAD 15: Deformciones y lesiones de la columna 18.1. Generalidades.................................................................... 19 18.2. Clínica................................................................................. 19 18.3. Diagnóstico........................................................................ 20 18.4. Tratamiento....................................................................... 20 19UNIDAD 18: Osteomielitis 19.1. Tumores benignos............................................................. 21 19.1. Tumores benignos............................................................. 21 21UNIDAD 19: Tumores óseos 17.1. Clínica................................................................................. 17 17.2. Imágenes............................................................................ 17 17.3. Tratamiento........................................................................ 18 17UNIDAD 17: Luxación congénita de cadera 16.1. Enfermedad de Perthes.................................................... 15 16.2. Epifisiolisis femoral ............................................................15 15UNIDAD 16: Osteocondrosis 1 William Guzmán UNIDAD 9: FRACTURA DE PELVIS 9.1. GENERALIDADES La causa más frecuente de fractura de pelvis es por accidente de tránsito, en jóvenes y generalmente son fracturas inestables con elevado riesgo de lesiones intrapélvicas. Frente a un paciente politraumatizado con hipotensión, en ausencia de hemorragia activa en tórax, abdomen o extremidades, debe descartarse sangrado retroperitoneal por fractura de pelvis. Figura 66. Formas de presentación de la fractura de pelvis. 9.2. CLASIFICACIÓN Depende del grado de inestabilidad generada (ligamentos sacroilíacos posteriores son los elementos más importantes de estabilidad del anillo pélvico). - Simple: fractura en un punto, no genera inestabilidad. - Complejas: fractura en más de dos puntos de la circunferencia pélvica, generan inestabilidad. - Parcelares: fractura en uno de los huesos pélvicos sin comprometer la circunferencia pélvica. La fractura más frecuente son las simple a nivel del pubis. El estudio inicial es la radiografía, sin embargo, la TAC es de elección para confirmar y evaluar lesiones asociadas, que son la principal causa de mortalidad. 9.3. COMPLICACIONES Las más comunes son las vasculares, seguidas del compromiso en otras estructuras como la uretra, vejiga, vísceras. Pueden lesionar nervio ciático (RM 2012, RM 2014). 9.4. TRATAMIENTO El manejo inicial en caso de fracturas inestables es la fijación externa para estabilizar el anillo pélvico y frenar el sangrado. Si el paciente está estable se opta por un manejo ortopédico, por el contrario, si el paciente se encuentra inestable el manejo será quirúrgico. Figura 67. Vendaje de fractura pélvica con sábana. Procedimiento inicial en fracturas de pelvis, con la finalidad de estabilizarla. En caso de fractura de acetábulo la medida inicial es inmovilizar y traccionar del miembro inferior con la finalidad de evitar la adherencia y posterior artrosis en la articulación coxofemoral. Son fracturas intraarticulares, que generalmente requieren manejo conservador, excepto en fracturas desplazadas, inestables, luxación asociada o incarceración intraarticular de fragmentos óseos (RM 2000, RM 2014, RM 2015). Figura 68. Fractura de acetábulo. A: no desplazada. B: Desplazada. En todo paciente politraumatizado debe tomarse radiografía de columna cervical, de tórax y de pelvis. 2 William Guzmán UNIDAD 10: LUXACIÓN DE CADERA La luxación de cadera ocurre con frecuencia en los jóvenes debido a accidentes de tránsito. En forma general se dividen en luxaciones anteriores (anteroinferior o anterosuperior) y posteriores (posteroinferior o posterosuperior). 10.1. LUXACIÓN DE CADERA POSTERIOR Es la más frecuente de las luxaciones de cadera y el mecanismo de lesión principal es por accidentes en tránsito. Figura 69. Mecanismo de lesión de la luxación traumática posterior de cadera. El impacto en el fémur se orienta en sentido longitudinal, ocasionando el desplazamiento de la cabeza del fémur en sentido posterosuperior. Figura 70. Posición característica de la luxación posterior de cadera, con la de cadera en rotación interna, aducción, semiflexión y acortamiento (RM 2001,RM 2009, RM 2015, RM 2020). Figura 71. Radiografía característica de la luxación posterior de cadera. - Clínica: Dolor, impotencia funcional y deformación. La posición que adopta el miembro afectado incluye rotación interna, semi flexión, aducción y acortamiento (RM 2011) . - Tratamiento: La reducción debe incluir como concepto general tracción y rotación externa. Puede realizarse en decúbito prono o supino, sin embargo, en ambos casos deben participar dos personas y el paciente debe estar sedado con relajación muscular. Las luxaciones de cadera ocurren con más frecuencia en personas jóvenes, mientras las fracturas en esta región son más comunes en ancianos. 3 William Guzmán Figura 72. En la reducción de una luxación posterior de cadera, el segundo operador realiza contratracción sujetando la pelvis mientras el operador principal realiza tracción de fémur, con rotación externa. En esta maniobra el paciente se encuentra en decúbito supino. Figura 73. Reducción de luxación posterior con elpaciente en decúbito prono. - Complicaciones: Lesión neurovascular, que incluye lesión del nervio ciático, puede estar asociado a fractura de acetábulo, siendo ésta la fractura asociada más frecuente. Asimismo, puede haber fracturas de la cabeza del fémur. 10.2. LUXACIÓN DE CADERA ANTERIOR: El principal mecanismo de lesión es la abducción forzada (Ej., accidentes de tránsito en motocicleta, deportistas). - Clínica: Rotación externa, abducción y flexión Figura 74. Posición característica de la luxación anterior de cadera - Complicación: compromiso del VAN femoral, asimismo, puede estar asociado también a fractura de acetábulo (RM 2007) . La luxación traumática más frecuente es la luxación posterior. 4 William Guzmán UNIDAD 11: FRACTURA DEL FÉMUR 11.1. FRACTURA DE LA CABEZA DEL FÉMUR Las fracturas de la cabeza del fémur son consideradas intraarticulares, debido a que la cabeza está dentro del acetábulo. Son más frecuentes en ancianos la osteoporosis como factor de riesgo. Figura 75. Clasificación de Pipkin para fracturas de cabeza de fémur. Usualmente suelen requerir manejo quirúrgico y el tipo de cirugía dependerá de la presencia o ausencia de necrosis avascular (RM 2013). - Con necrosis avascular: se puede optar por colocar tornillos para fijar las estructuras - Sin necrosis avascular: se reemplaza el fémur con una prótesis metálica. El manejo ortopédico se indica en caso de ser un paciente de alto riesgo. En el caso de los ancianos, se puede valorar con el índice de comorbilidad de Charlson. 11.2. FRACTURA DEL CUELLO DEL FÉMUR Es frecuente en ancianos por caídas, también está asociado a osteoporosis. Al examen físico es evidente el acortamiento, la aducción y rotación externa, a veces una equimosis en la cara lateral de la cadera sobre el trocánter mayor que caracteriza las fracturas extracapsulares. Se debe confirmar con un estudio radiográfico. Figura 76. Clasificación de Garden para fracturas de cuello de fémur Figura 77. Posición característica de la fractura de cuello de fémur. Rotación externa con acortamiento del miembro afectado en un anciano con antecedente de caída. 5 William Guzmán Tratamiento: El manejo es quirúrgico por ser fractura patológica y dependerá del grado de desplazamiento e inestabilidad. - Fractura no desplazada o de mínimo desplazamiento / estable (G1-G2) → osteosíntesis con tornillos transcervicales o sistemas de fijación DHS - Fractura desplazada/inestable (G3-G4): - Paciente con baja demanda funcional, esperanza de vida menor a 3 años → hemiartroplastia (reemplazo solo de la cabeza del fémur). - Paciente activo y en buen estado general, con esperanza de vida mayor a 3 años → artroplastia total (reemplazo de la cabeza del fémur y acetábulo) Figura 78. Esquema de manejo quirúrgico de la fractura de cuello de fémur. Complicaciones: En fracturas intracapsulares necrosis isquémica de la cabeza femoral y ausencia de consolidación debido a la vascularización precaria; sin embargo, en fracturas extracapsulares se da a nivel de hueso metafisario con rica vascularización y con múltiples inserciones musculares por lo que el riesgo es de consolidación en mala posición. 11.3. FRACTURA DE LA DIÁFISIS DEL FÉMUR Frecuente en jóvenes, por accidentes de alta energía. Es común el compromiso de la arteria femoral con consecuente shock hipovolémico, así como embolia adiposa. El manejo aproximado dependerá del grupo etario: - Niños: manejo ortopédico con tracción cutánea con posterior colocación de yeso pelvipedio Figura 79. Tracción cutánea en fracturas diafisiarias de fémur en niños. - Adultos: La elección dependerá del grado de severidad de la fractura, manejo ortopédico con tracción ósea o manejo quirúrgico con clavo endomedular. Al fresar la cavidad medular aumenta el riesgo de embolia grasa por lo que se prefieren clavos no fresados. El peso en la tracción ósea debe ser como máximo el 10% del peso corporal total del adulto. Figura 80. Tracción esquelética transcondílea. Permite una alineación adecuada del fémur. Complicaciones: Las fracturas diafisiarias de fémur tienen pueden lesionar la arteria femoral ocasionando pérdidas masivas de sangre, que pueden llevar al shock hipovolémico. Asimismo, la falta de la consolidación y la tracción excesiva pueden ocasionar pseudoartrosis. Las fracturas distales del fémur suelen ser lesiones intraarticulares y generan lesión del VAN ciático poplíteo, con el riesgo de síndrome compartimental. El manejo es quirúrgico. 6 William Guzmán UNIDAD 12: LESIONES DE RODILLA Figura 81. Se muestra la configuración de los diferentes ligamentos de la rodilla, cruzados (PCL, ACL) y colaterale (MCL, LCL). Asimismo, la presencia de los meniscos medial y lateral. 12.1. LESIÓN DEL LIGAMENTO CRUZADO ANTERIOR Es el ligamento más frecuentemente lesionado. Ocasionado por rotación externa con la rodilla en extensión. Se puede asociar a avulsión del margen tibial anterolateral (Fractura de Segond). Al examen físico, el signo de cajón anterior, signo de Lachman (más sensible), signo pivot shift son positivos (RM 2010) Asimismo, al realizar una punción de la articulación (artrocentesis) se suele tener como resultado hemartros, sin grasa. El tratamiento depende del grado del esguince y actividad del paciente, con altas probabilidades de manejo quirúrgico. Figura 82. De izquierda a derecha: 1. Signo de Lachman. 2. Signo del cajón anterior. 3. Pivot shift. 12.2. LESIÓN DEL LIGAMENTOS COLATERALES El mecanismo de lesión es por agresión externa ocasionando un valgo forzado en el caso del ligamento colateral interno y varo forzado en el caso del ligamento colateral externo. Clínicamente, al igual que otros esguinces genera dolor, impotencia funcional e inestabilidad. Ésta última se caracteriza por la lateralización de la rodilla, la cual no debe ser posible en condiciones normales. En la artrocentesis, puede encontrarse líquido articular limpio, sin sangre no grasa. El manejo es usualmente es conservador con inmovilización por 4-6 semanas, salvo casos complicados (RM 2018). 12.3. LESIÓN DE LIGAMENTO CRUZADO POSTERIOR Es lesionado con frecuencia en la “lesión del salpicadero” por traumatismo directo sobre la tibia con la rodilla en flexión, usualmente en accidentes de tránsito. Al examen físico, el signo de cajón posterior es positivo. Las lesiones de los ligamentos cruzados muestran inestabilidad con el signo del cajón. Por el contrario, las lesiones del ligamento cruzado externo muestran el signo del “bostezo” (dolor al varo forzado). 7 William Guzmán 12.4. LESIÓN DE MENISCOS Figura 83. Se muestra la disposición de los meniscos, medial y lateral. El medial se caracteriza por la disposición de sus cuernos, anterior y posterior. El cuerno posterior del menisco interno es el más afectado y la lesión del asa de cubo es la forma más frecuente. Característico de jóvenes y deportistas. Clínica: Presenta dolor difuso, derrame articular seroso; tras el episodio agudo suele haber atrofia del cuadríceps, episodios recurrentes de bloqueo articular y dolor en la interlinea articular posterior. En la exploración el talón nos orienta respecto al menisco lesionado (rotación externa explora menisco interno y la rotación interna el menisco externo), prueba de McMurray (+). El diagnóstico es por RMN o artroscopía diagnóstica. Figura 84. Maniobra de McMurray para lesión de meniscos. Flexión de la rodilla con rotación externa de pierna y pie. Tratamiento: El tratamiento es por artroscopia y dependerá de la irrigación de la zona afectada, considerando que la zona periférica es más vascularizada que la central. - Buena irrigación: Suturameniscal - Mala irrigación: Meniscectomía parcial. La presencia de hemartros es un signo indirecto de buena vascularización de la zona lesionada por lo que se esperan mejores resultados. 12.5. OTRAS LESIONES DE LA RODILLA Y LA RÓTULA LUXACIÓN DE RODILLA Las más comunes son anterior o posterior (lesión de “salpicadero”). Este último suele asociarse a lesión del VAN ciático poplíteo (puede lesionarse la íntima arterial poplítea generando trombosis arterial aguda en las 24h siguientes), el ligamento rotuliano o los ligamentos cruzados. Se puede observar el signo del hoyuelo en la rodilla. El manejo es reducción, inmovilización, vigilancia estrecha de la circulación distal y rehabilitación. Figura 85. Luxación de rodilla en sus diferentes formas de presentación. Nótese el compromiso de los ligamentos propios de la rodilla, así como de los vasos poplíteos, lo cual puede desencadenar en un síndrome compartimental. El menisco “interno” tiene forma de “C” mientras que el menisco “externo” tiene forma de “O” 8 William Guzmán FRACTURA DE RÓTULA El mecanismo de lesión suele ser por golpe directo y es común en jóvenes. En su mayoría los fragmentos de rótula suelen ser desplazados por la tracción que ejerce el músculo cuadríceps. El manejo es quirúrgico mediante un cerclaje con alambre. Figura 86. Izquierda: Fractura de rótula, con severo desplazamiento. Derecha: Cerclaje con alambres. LUXACIÓN DE RÓTULA La luxación más frecuente es la lesión de rótula lateral, común en mujeres jóvenes adolescentes. El mecanismo usual está relacionado al valgo excesivo [ángulo Q > 15-16°]). El paciente refiere dolor, disfunción y deformidad (triple D). El tratamiento incluye reducción manual por medialización asociada a extensión de la rodilla para luego colocar un yeso o inmovilizador ortopédico; en el caso de luxaciones recidivantes se debe considerar la rehabilitación de la porción medial del cuádriceps (RM 2019) . Figura 86. Desviación fisiológica del fémur (valgo), mostrando los ángulos Q característicos. Izquierda: varones con 12°. Derecha: Mujeres con 16°. Figura 87. Luxación de rótula hacia la zona lateral. Nótese la deformación característica de las luxaciones. 9 William Guzmán UNIDAD 13: LESIONES DE TIBIA Y PERONÉ 13.1. FRACTURA DE TIBIA Y PERONÉ La lesión a nivel de la diáfisis tibial es la más frecuente. Es ocasionado por accidentes de alta energía, ya sea por golpe directo o mediante lesiones por torsión (espiroideas). La fractura de tibia puede comprometer el compartimento anterior de la pierna, por lo que una de sus complicaciones frecuentes es el síndrome compartimental. Por otro lado, es común que las fracturas de tibia se presenten como fracturas abiertas, por ello el alto riesgo de desarrollar osteomielitis secundaria a fractura abierta. Asimismo, puede generar pseudoartrosis, embolia grasa y otras complicaciones. El tratamiento dependerá si la fractura de abierta o cerrada. Fractura cerrada - Estable: son fracturas simples, transversas, no desplazadas, únicas, con peroné sin lesión. El manejo es ortopédico (yeso muslopedio) (RM 2014) . - Inestable: son oblicuas, complejas, múltiples y con o sin el peroné fracturado. El manejo es quirúrgico con uso de clavo endomedular. Figura 88. Izquierda: Yeso muslopedio. Derecha: osteosíntesis con clavo endomedular. Fractura abierta: el tratamiento dependerá de la clasificación de Gustilo - Grado I: el manejo es similar al de fractura cerradas más la administración de antibióticos. - Grado II y III: el manejo es con antibióticos, osteotaxis y colgajo. 13.2. OTRAS LESIONES Otras lesiones de en la pierna incluyen: Lesión de los platillos tibiales: es una lesión intraarticular, el manejo quirúrgico y pueden generar lesiones neurovasculares con compromiso del VAN ciaticoplopiteo. Figura 89. Lesión de los platillo tibiales Espina tibial anterior: la clínica es parecida a la ruptura del ligamento cruzado anterior porque es el sitio de inserción de dicho ligamento. Figura 90. Lesión de la espina tibial anterior Tuberosidad anterior de la tibia: es una avulsión de la tuberosidad anterior de la tibia por tracción del cuádriceps. Es sitio de inserción del ligamento rotuliano. Es más común en niños (enfermedad de Osgood-Schlatter). 10 William Guzmán Figura 91. Lesión de la tuberosidad anterior de la tibia Fractura de cabeza de peroné: Si la fractura ocurre a nivel de la cabeza del peroné es común el compromiso del nervio peroneo común, con pérdida de inervación de los músculos del compartimento anterior de la pierna, ocasionando “pie caído” o “pie equino” Figura 92. El compromiso de la cabeza del peroné puede comprometer el nervio peroneo común. Fracturas de tobillo: Son lesiones que comprometen a la tibia, el astrágalo o el peroné. Lo más frecuente es la fractura del maleolo del peroné. El manejo puede ser ortopédico siempre que no haya compromiso ligamentario o de otros huesos Indicaciones quirúrgicas para fractura de tobillo: - Fracturas que incluyen el maleolo tibial - Compromiso ligamentario - Fracturas múltiples Fractura de Tillaux- Chaput Fractura de Wagstaffe Fractura de Pott Fractura de Dupuytren Fractura de Fractura de Maisonneuve Avulsión de la tuberosidad tibial por el ligamento tibioperoneo anterior. Avulsión de tuberosidad peronea anterior Fractura distal del peroné con lesión de la sindesmosis Fractura del maleolo tibial y maleolo del peroné (bimaleolar). Fractura de peroné, ruptura de membrana interósea y lesión de ligamento peroneotibial. 11 William Guzmán 13.3. RUPTURA DEL TENDÓN DE AQUILES Es la lesión tendinosa más frecuente y está ocasionada por cambios bruscos de dirección, por ejemplo, saltadores o atletas ante un impulso brusco (RM 2018). Factores de riesgo: sedentarismo, debilidad de tejidos, falta de preparación física, etcétera. Clínica: - Dolor: “signo de pedrada” - Deformidad “signo del hachazo” - Disfunción: Imposibilidad para la flexión plantar (maniobra de Thompson) (RM 2015) Figura 93. Izquierda: Lesión del tendón de Aquiles. Derecha: Deformación, “signo del hachazo”. Figura 94. Maniobra de Thomspon. Izquierda: hallazgo normal, hay flexión plantar al estímulo gemelar. Derecha: Ante la lesión del tendón de Aquiles no se puede realizar flexión plantar. Tratamiento: la medida inicial es la inmovilización y requerirá un aparato de yeso. En caso de compromiso total del tendón el manejo es quirúrgico con posterior inmovilización (RM 2019). 12 William Guzmán UNIDAD 14: LESIONES DEL PIE 14.1. FRACTURA DEL CALCÁNEO Es el hueso del tarso más frecuentemente afectado. El mecanismo de lesión es por caída de altura por lo que se asocia a fractura de meseta tibial y vertebras lumbares. El tratamiento es quirúrgico (RM 2015). Figura 95. Fractura de calcáneo, con su tratamiento quirúrgico respectivo. 14.2. FRACTURA DEL ASTRÁGALO Llamada también “fractura del aviador”. El mecanismo de lesión es por dorsiflexión forzada. Su vascularización es precaria por lo que hay riesgo de mala consolidación y necrosis avascular del cuerpo. El manejo es quirúrgico. Figura 96. Fractura de astrágalo, mostrando el tratamiento quirúrgico respectivo. 14.3. FRACTURA DE LOS METATARSIANOS - Diáfisis quinto metatarsiano: o fractura de Jones, cercana a la base. - Base del quinto metatarsiano: Más frecuente. Se denomina también pseudo Jones o “lesión de la bailarina”. Es una fractura por avulsióndel tendón del músculo peroneo lateral corto, en el contexto de una inversión del pie. - Base del primer metatarsiano: Puede ocurrir por golpe directo. En esta fractura se compromete la inserción del tendón del músculo peroneo lateral largo. - Segundo metatarsiano: Es una fractura por fatiga o estrés, llamado también fractura del recluta o soldado. Lesiones de Lisfranc Lesiones de Chopart Luxofracturas que ocurren en la articulación tarsometatarsiana. Lesiones distales del tarso Luxofracturas que ocurren en la articulación de la zona proximal del tarso con su región distal. Las lesiones aisladas de los demás huesos del tarso, que incluyen el navicular, cuboides y las cuñas, suelen ser de manejo ortopédico, mediante la inmovilización con una bota de yeso, salvo casos con desplazamientos mayores a 2 mm o con otras lesiones asociadas. Las lesiones del primer metatarsiano por su mayor importancia suele requerir cirugía en el manejo, a diferencia del resto de metatarsianos que se puede considerar inicialmente inmovilización y manejo ortipédico. 13 William Guzmán 14.4. DEFORMACIONES DEL PIE PLANO VALGO VARO CAIDO TALUS ZAMBO PIE EQUINO O CAÍDO Existe la imposibilidad para hacer dorsiflexión. El nervio lesionado va a depender de la zona de fractura o lesión. En casos de fractura de tibia suele estar comprometido el nervio tibial anterior o peroneo profundo; en fracturas de cabeza de peroné se compromete el nervio peroneo común o ciático poplíteo externo. PIE PLANO Aplanamiento del arco longitudinal interno. Está asociado a hiper laxitud de tejidos. La posición que adquiere el pie en valgo, pronado y con rotación externa. El tratamiento es ortopédico, en caso de limitaciones funcional el manejo será quirúrgico (RM 2006, RM 2006). Figura 97. Pie plano. PIE CAVO Se debe a la hipertonicidad de los músculos plantares, es secundario a compromiso de motoneurona en trastornos neurológicos. Figura 98. Pie cavo PIE ZAMBO/EQUINOVARO/BOTT: Llamado también pie bot o pie equinovaro. La posición que suele adquirir el pie es equino, varo, aducido, supino y cavo. Se ha asociado al síndrome de Edwards, consumo de éxtasis materno, oligohidramnios, bridas amnióticas, entre otras. El tratamiento es progresivo con uso de yesos, usualmente incluye tenotomía del tendón de Aquiles. Si la desviación es muy severa el manejo será corrección quirúrgica. Figura 99. Pie bot. 14 William Guzmán UNIDAD 15: DEFORMACIONES Y LESIONES DE LA COLUMNA 15.1. ESCOLIOSIS La escoliosis es una curvatura lateral de la columna vertebral que ocurre con mayor frecuencia durante el período de crecimiento anterior a la pubertad. El 60% es de causa idiopática, aunque puede estar relacionada a la hiperlaxitud de tejidos. Debe diferenciarse de la pseudoescoliosis, en la que no hay anomalía estructural. La maniobra de Adams es usada para diferenciar una escoliosis de una pseudo escoliosis. En esta maniobra se realiza hiperflexión torácica; en la escoliosis estructural no hay corrección de la deformación de la columna, mientras en la pseudoescoliosis se corrige con la hiperflexión. Figura 100. Ángulo de Cobb Se clasifica según el ángulo de Coob: - <30 grados → leve - 30 – 40 → moderado - >40 → severo El tratamiento quirúrgico está indicado en casos severos, siendo la artrodesis el procedimiento de elección. En casos leves y moderados el manejo ortopédico con ejercicios de terapia física y corsés es lo más indicado. 15.2. ENFERMEDAD DE GRISEL Subluxación atlantoaxoidea (C1-C2), secundario a degeneración de los cartílagos de las apófisis transversas. 15.3. DEFORMACIÓN DE SPRENGEL Falta de descenso caudal de la escápula y demás estructuras asociadas, se manifiesta como “joroba” (RM 2009). 15.4. FRACTURA DEL AHORCADO También llamada espondilolistesis traumática. Ocurre a nivel de los pedículos del axis (C2). 15 William Guzmán UNIDAD 16: OSTEOCONDROSIS Es una degeneración de la parte ósea y cartilaginosa. La historia natural inicia con la devascularización seguido de un proceso de revascularización, finalizando con regeneración con deformidad. La osteocondrosis más frecuente es la enfermedad de Perthes. Figura 101. Secuencia evolutiva e historia natural de la osteocondrosis, que incluye una devascularización inicial, seguida de revascularización y deformación Osteocondrosis Lesión Sever Calcáneo Scheuermann Columna vertebral Kienbock Hueso semilunar Köhler Hueso navicular Koenig Hueso Rodilla Freiberg Metatarso Tabla 6. Algunas de las osteocondosis más importantes 16.1. ENFERMEDAD DE PERTHES Enfermedad de Legg-Calvé-Perthes (RM 2013): es una osteocondrosis que afecta a la cabeza del fémur y suele ocurrir en niños entre los 3 a 12 años. La causa es idiopática, sin embargo, hay asociación con obesidad, inmadurez esquelética y nivel socioeconómico más bajo, hiperactividad. Clínica: Dolor que inicia en la cadera con irradiación de la rodilla, limitación de movilidad en especial abducción y rotación interna. Cuando evoluciona genera cojera. Imagen: el estudio de elección de la gammagrafía ósea que muestra una disminución de la perfusión de la cabeza femoral. Para valorar la extensión se utiliza el sistema del pilar lateral de Herring (Ver imagen). Figura 102. Clasificación de Herring: A: No colapso pilar lateraal, B: Colapso < 50% del pilar lateral, C: Colapso > 50% del pilar lateral. Tratamiento: consiste en reposo y tracción del fémur si es que ha sido diagnosticado oportunamente. La secuela más frecuente es la coxa magna (artrosis entre la cabeza del fémur y el acetábulo) y suele manifestar con cojera crónica que podría requerir una prótesis de cadera. Figura 103. Niño en reposo con tracción cutánea del miembro inferior, como medida inicial en la enfermedad de Perthes. 16.2. EPIFISIOLISIS FEMORAL Consiste en el desgarro de la cabeza del fémur y ocurre en niños entre los 3 a los 12 años de edad (RM 2006). Factores de riesgo: Obesidad, enfermedades que cursan con desmineralización ósea, asimetrías de las extremidades inferiores. Clínica: Dolor con la actividad que se irradia a la rodilla y cojera. Se clasifica en crónica (>3 sem) y aguda, esta a su vez en estable e inestables dependiendo de la tolerancia a la carga. Bilateral en 50%. 16 William Guzmán Imagen: La radiografía es diagnóstica. Se traza la línea de Klein-Trethowan (prolongación de cortical superolateral del cuello) en cada cadera y se compara el segmento cefálico femoral interceptado. Tratamiento: el manejo es quirúrgico mediante epifisiodesis. Figura 104. Característica de epifisiolis femoral Figura 105. Signo de Trethowan evidenciando la epífisis por debajo de la línea de Klein Figura 106. Epifisiodesis femoral. 17 William Guzmán UNIDAD 17: LUXACIÓN CONGÉNITA DE CADERA Está asociado a partos distócicos, oligohidramnios, partos podálicos, macrosomía, sexo femenino, cadera izquierda. Es bilateral en aproximadamente un 25%. Existe limitación a la abducción por hipotrofia de los músculos glúteo medio y glúteo menor (RM 2014). La forma más frecuente de lesión es posterosuperior. 17.1. CLÍNICA Niños menores: Maniobras de Barlow (luxa la cadera) y maniobra de Ortolani (reduce la cadera luxada) son sugestivos de displasia congénita de cadera. Puede encontrarse asimetría de pliegues (RM 2014). Niños mayores: Signo de Trendelenburg, que corresponde a una claudicación en la marcha, por hipotrofia del músculos abductores ya descritos. Figura 107. Superior: Maniobrade Barlow. Inferior: Maniobra de Ortolani. Figura 108. Signo de Trendelenburg, con inclinación contralateral por debilidad de músculos abductores. 17.2. IMÁGENES La displasia de cadera se debe confirmar con imágenes. En niños menores de 3 meses se prefiere el estudio ecográfico. En niños mayores de 6 meses la radiografía es de elección. Se debe buscar el índice acetabular (>30 °) y el arco de Shenton o arco cérvico-obturatriz Figura 109. Índice acetabular 18 William Guzmán 17.3. TRATAMIENTO Consiste en la colocación del arnés de Pavlik manteniendo las extremidades del paciente en posición de abducción y rotación externa, está indicado por al menos 6 meses (RM 2007). En casos no diagnosticados oportunamente o que no se pudieron resolver ortopédicamente se considera tratamiento quirúrgico: liberación capsular y tenotomía de los aductores. Figura 110. Arnés de Pavlik, con miembros inferiores en aducción Figura 111. Tenotomía de aductores, para casos complejos. 19 William Guzmán UNIDAD 18: OSTEOMIELITIS 18.1. GENERALIDADES Infección ósea, la vía de infección es por contacto directo o vía hematógena (más común en bebés y niños). La vía por contacto directo está asociada a la exposición de fracturas abiertas y la vía hematógena por infecciones previas (RM 2013). El germen comúnmente aislado es el Staphylococcus aureus. El hueso más frecuentemente afectado es la tibia. Bacterias grampositivas Características clínicas Staphylococcus aureus (RM 2017) Todas las edades. Posible infección asociada de piel o tejidos blandos. Estafilococos coagulasa (-) Recién nacidos en UCI. Niños con catéteres vasculares permanentes. Estreptococo del grupo A Común en menores de 4 años. Puede estar asociado a infección por varicela zóster Estreptococo del grupo B Lactantes menores de 3 meses. Bacterias gramnegativas Características clínicas E. coli y otros bacilos gram(-) Desde el nacimiento hasta los 3 meses, niños con anemia de células falciformes; instrumentación del tracto gastrointestinal o urinario; huésped inmunodeprimido. Bartonella henselae Niños expuestos a gatos. Puede ser multifocal Brucella Zonas endémicas, asociado a consumo de lácteos no pasteurizados Tabla 7. Características clínicas de la osteomielitis en niños según tipo de bacteria Dentro de la patogenia, la edad cumple un rol importante: - Nacimiento – 3 meses: Corteza delgada y el periostio laxo no pueden contener la infección y llega a penetrar hasta tejido blando; de igual manera los capilares metafisarios perforan la placa de crecimiento epifisiaria de cadera, hombro y rodilla generando complicación con artritis séptica. - Bebes mayores y niños pequeños: La corteza se vuelve mas gruesa y el periostio denso por lo que se desarrollan abscesos subperiósticos a nivel de metáfisis; los capilares metafisarios se atrofian desde los 8 meses lo que limita la propagación articular de la infección, excepto sean metáfisis intracapsulares como en cadera. - Niños mayores y adolescentes: Tienden a localizar la infección siendo más predispuestos a absceso de Brodie (RM 2002) Figura 112. Patogenia de la osteomielitis aguda. 18.2. CLÍNICA Fiebre. Inflamación, calor y enrojecimiento en la zona de la infección. Dolor en la zona de la infección. Limitación a los movimientos. En casos no tratados oportunamente o resistente a antibióticos puede evolucionar a la cronicidad. En fases crónicas puede manifestarse mediante los patrones abscedado de Brodie, esclerosante de Garré o perióstico de Ollier. El absceso está compuesto por una zona central de necrosis (secuestro) rodeado de una zona de neoformación de hueso (involucro) (RM 2003). 20 William Guzmán Absceso de Brodie Esclerosis de Garré Periostico de Ollier Tabla. Formas de manifestación de la osteomielitis crónica. 18.3. DIAGNÓSTICO Se prefiere el uso de gammagrafía ósea ya que detecta cambios en la perfusión ósea en estadio temprano (RM 2006). Sin embargo, el estudio más específico es la RMN que detecta cambios más tardíos. Imagen Hallazgos Radiografía simple Inflamación profunda de los tejidos blandos (3 días después del inicio) Reacción perióstica o elevación (10 a 21 días después del inicio) Esclerosis lítica (<1 mes después del inicio) RMN Inflamación en médula ósea. Edema en médula ósea y tejidos blandos. Signo de la penumbra (zona de transición de señal de alta intensidad entre el absceso y la médula ósea esclerótica) Ausencia de flujo sanguíneo, sugerente de necrosis o absceso. Gammagrafía Captación focal de trazador. Tomografía Aumento de la densidad de la médula ósea. Destrucción de la corteza. Formación de reacción perióstica (formación de hueso nuevo). Purulencia perióstica. Secuestro (hueso esclerótico desvitalizado). Ecografía Colección de líquido adyacente. Engrosamiento y elevación de periostio. Tabla 8. Hallazgos y anomalías en las imágenes en osteomielitis. 18.4. TRATAMIENTO Etapa aguda (3-4 semanas): se administra antibioterapia dirigida por 4 a 6 semanas. Etapa crónica: suele hallarse distintas lesiones de cronificación y requiere tratamiento quirúrgico con resección ósea. 21 William Guzmán UNIDAD 19: TUMORES ÓSEOS 19.1. TUMORES BENIGNOS Osteocondroma Es el tumor benigno más frecuente. Radiológicamente tiene aspecto pediculado que podría generar síntomas por compresión o irritación de estructuras contiguas. Suele dejar de crecer cuando acaba el crecimiento y se cierra la fisis. Figura 113. Osteocondroma sésil femoral, que se origina en la superficie del hueso. Pueden presentarse también de forma pediculada. Quiste óseo esencial Predominan en niños y adolescentes, se caracterizan por tener localización central (contrario al quiste aneurismático que es excéntrico). Localización más frecuente es húmero proximal. Suele debutar como fractura patológica. En la radiografía se observa lesión lítica que adelgaza e insufla las corticales. El tratamiento clásicamente es con aspiración seguida de inyección de corticoides o relleno con injerto. 19.1. TUMORES MALIGNOS Los tumores malignos más frecuentes que se pueden encontrar en el hueso corresponden a metástasis, provenientes de mama y próstata, según sexo, respectivamente, asimismo, pueden provenir de tiroides, pulmones y riñón (RM 2006). Los tumores malignos metastásicos suelen afectar a la vertebras y zonas proximales de los huesos largos (Ej,. epífisis y metáfisis del húmero y fémur). El tumor maligno primario, de origen óseo, más frecuente es el osteosarcoma (RM 2010). Osteosarcoma Tumor maligno característico de jóvenes (segunda década de la vida). Se asocia a retinoblastoma. Localización mas frecuente es la metáfisis de fémur distal y tibia proximal. El tipo histológico mas frecuente es intramedular de alto grado. En la radiografía se observa el “signo de sol naciente” que aparece como lesión lítica con áreas blásticas asociado a reacción perióstica, se describe además la formación del triángulo de Codman. El tratamiento consiste en resección quirúrgica con márgenes amplios, incluyendo quimioterapia neoadyuvante y coadyuvante. Figura 114. Osteosarcoma mostrando imagen de triángulo de Codman Figura 115. Signo del sol naciente característico del osteosarcoma, por la reacción perióstica característica. 22 William Guzmán Sarcoma de Ewing Tumor maligno radiosensible generalmente de la diáfisis de huesos largos. Los de peor pronóstico suelen ser los sarcomas localizados en la pelvis. Clásico en radiografía la reacción perióstica en “capas de cebolla”. Salvo casos complicados, el tratamiento incluyequimioterapia y radioterapia local (RM 2000). Figura 116. Radiografía en “capas de cebolla”, característico del sarcoma de Ewing.
Compartir