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República bolivariana de Venezuela Ministerio del poder popular para la defensa Universidad nacional experimental politécnica de la fuerza armada UNEFA Tucupido Guárico (Informe) Profesora: Participantes: Rocelianna Palma Yorgelys Flores María Torrealba Neriyen Rodríguez Betania Flores 1533-D01 Las etapas de la formulación de proyecto Identificación El inicio de la formulación del proyecto está en la identificación de un problema, para convertirlo en una oportunidad de mejora, es un proceso de reconocimiento del problema, necesidad u oportunidad del proyecto privado o socioeconómico. A partir de esta etapa es donde se visualiza en gran medida el éxito o el fracaso que puede tener el proyecto. Como los proyectos son la búsqueda de una alternativa para resolver problema con la inversión o producción de un bien o servicio, es necesaria especificar las causas y efectos del problema, participantes, objetivos, metas y alternativas de solución. Las investigaciones que se realizan en esta fase son de carácter preliminar, por lo tanto no poseen la profundidad de los estudios que siguen. Identificación: Esta es la primera esta que se presenta en un proyecto la cual puede ser conocida como fase de iniciación o idea. Consiste en definir entre toda las partes implicadas ideas de proyectos que parecen de alto interés por los problemas que podrán resolver y las ventajas o beneficios que potencialmente pueden generar a costos razonables. A partir de esta etapa es donde se visualiza en gran medida el éxito o el fracaso que puede tener el proyecto. El propósito de esta primera etapa es definir claramente el problema central que se intenta resolver con el proyecto, determinar los objetivos centrales y específicos del mismo y plantear las posibles soluciones. Preparación: Esta etapa permite la recopilación, procesamiento y análisis de los antecedentes en base a la identificación del problema, realizando un diagnóstico de la situación actual, estudio de mercado, técnico, métodos, operaciones, procesos, legal, financiero, ambiental y otros, donde se evidencien las bondades en términos de ventajas y desventajas que se derivan de la asignación de recursos con el fin de elaborar la mejor alternativa de solución y que permita justificar la ejecución del proyecto. El objetivo es formular un plan de acción para la producción de bienes o servicios, con el propósito de obtener ventajas financieras, y económicas. Con más especificación en esta etapa se busca obtener información primaria o secundaria acerca del sector de intervención, demográfico, geográfico y del mercado, aspectos técnicos como tamaño, localización e ingeniería del proyecto, aspectos medioambientales, administrativos, organizacionales, legales, financieros, ambientales, aspectos tributarios y fuentes de financiamiento, y sistematizar la información obtenida en estudios técnico-económicos- financieros para su evaluación. Negociación: Comprende todos los aspectos relacionados con la negociación de los recursos necesarios para realizar el proyecto, en especial, los financieros. Así como, las acciones para promocionar y divulgar el proyecto ante las autoridades y entidades vinculadas al mismo y que en alguna medida son responsables y deben brindar las aprobaciones correspondientes para hacer una realidad el proyecto. El resultado básico de esta fase, es la viabilidad del proyecto y la aprobación del financiamiento Muchas veces la negociación de un proyecto no siempre está asociada a la parte financiera del mismo, sino a la viabilidad desde la perspectiva de la comunidad beneficiaria del proyecto, debido a que muchas organizaciones (patronatos, clubes asociaciones), individuos (políticos o lideres) o instituciones( públicas, religiosas o privadas), se oponen a que el proyecto se lleve a cabo, con los cuales hay que negociar la participación de estos actores en la ejecución y funcionamiento del proyecto. Al interior de esta fase se dan cuatro subprocesos: • Viabilidad política e institucional; • Identificación de organismos financieros; • Elaboración del documento de proyecto • Estrategia de negociación. Un primer paso en el marco de esta fase es lograr que el proyecto tenga aceptación política y aprobación en los diferentes niveles jerárquicos de la institución o instituciones que apoyan el proyecto. Antes de iniciar cualquier acción para buscar los posibles recursos financieros del proyecto, se hace necesario contar con la información de las probables instituciones nacionales, internacionales, públicas o privadas, que apoyan proyectos orientados en la problemática que apunta nuestro proyecto y que pueden tener posibilidades o interés de financiar el proyecto. Ejecución: En base a la planificación, habrá que completar las actividades programadas, con sus tareas, y proceder a la entrega de los productos intermedios. Es importante velar por una buena comunicación en esta fase para garantizar un mayor control sobre el progreso y los plazos. Asimismo, es indispensable monitorizar la evolución del consumo de recursos, presupuesto y tiempo, para lo que suele resultar necesario apoyarse en alguna herramienta de gestión de proyectos. En esta etapa se deben gestionar: el riesgo, el cambio, los eventos, los gastos, los recursos, el tiempo y las actualizaciones y modificaciones. La ejecución del proyecto se conforma de las siguientes etapas: Organizar los medios humanos y materiales del proyecto para poder asignar los recursos adecuados a cada tarea Controlar, para asegurar la adecuada ejecución y el control del riesgo. Concluir para obtener la aceptación y hacer la entrega del producto o servicio. Evaluación: Antes de comenzar la evaluación de un proyecto en sí, hace falta llevar a cabo una meticulosa tarea de preparación que garantice la obtención de los mejores resultados. El conocimiento del proyecto y un proceso introspectivo que revele su finalidad son decisivos a la hora de preparar la evaluación y: Identificar a qué áreas, procesos, actividades, tareas y responsables va dirigida la evaluación. Definir las preguntas a que se quiere dar respuesta. Establecer los indicadores y las fuentes de verificación. Escoger métodos de evaluación de un proyecto. Designar responsables de la recogida de datos y aplicación de métodos de evaluación. Asociar el proceso a un plazo de tiempo y programar la periodicidad en la aplicación. Prever el modo de reportar los resultados Selección del método de evaluación Todo proyecto puede evaluarse en base a factores cuantitativos y cualitativos. La mayor riqueza de información se obtendrá de la combinación de ambos, escogiendo métodos complementarios cuya aplicación pueda simultanearse o ejecutarse de forma secuencial. Tener claros los medios y objetivos de la evaluación de un proyecto es tan importante como esforzarse por garantizar una correcta comunicación, que incluya entre sus prioridades la información a todos los participantes en el proyecto de las medidas que se van a tomar, su alcance y sus metas. Entre los métodos cuantitativos para la evaluación de un proyecto destacan: Revisiones de desempeño: son fundamentales para conocer el grado de productividad. En su programación es importante fijar una frecuencia adecuada y un objetivo, que es corregir desviaciones. Análisis de tendencia: buscan detectar si el proyecto está mejorando o si la tendencia predominante es negativa. Muy recomendable su aplicación en proyectos de larga duración. Sus resultados proveen de un margen de respuesta confortable. Análisis del valor acumulado: integra las medidas de alcance de proyecto, costes y programación y compara las previsionesrecogidas en el planning con lo que se ha conseguido completar en realidad. Es el método idóneo para controlar el consumo de tiempo y presupuesto, facilitando la gestión de proyecto. Para su cálculo, de cada actividad ha de conocerse el valor previsto, el coste real y el valor ganado, en relación a un periodo de tiempo determinado
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