Logo Studenta

Or-is-ra-la-enseñanza-de-isis-y-la-vuelta-del-ra

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

OR	IS	RA
La	enseñanza	de	Isis	y	la	vuelta	del	RA
©	2017	Gaia	Vezzosi
©	2017	Ediciones	Amatista,	S.L.
C/	Francisco	Martí	Mora,	1	07011	Palma.	Baleares.	España
Queda	prohibida,	salvo	excepción	prevista	en	la	ley,	cualquier	forma	de
reproducción,	distribución,	comunicación	pública	y	transformación	de	esta	obra
sin	contar	con	autorización	de	los	titulares	de	la	propiedad	intelectual.	La
infracción	de	los	derechos	mencionados	pueden	ser	constitutiva	de	delito	contra
la	propiedad	intelectual	(artículos	270	y	siguientes	del	Código	Penal).
ISBN	Epub:	978-84-16977-19-2
ISBN	PDF	accesible	978-84-16977-75-8
ISBN:	978-84-944458-9-7
D.L.:	PM	447-2017
www.edicionesamatista.com
info@edicionesamatista.com
Diseño	y	maquetación:	Mario	Zárate	Moreras
Ilustraciones	de:	Javier	Garban
Índice
Gracias…
Prólogo
Conexión	Con	Gaia
Cómo	empezó	todo
Sobre	Mí
Introducción
1.	Set-Ra
1.1	El	RA
1.2	Los	vórtices	del	RA
1.3	Panteón	Egipcio
1.4	Activación	del	RA	en	lugares
1.5	Construir	a	partir	del	RA
2.	Int-Ra
2.1	Los	sacerdotes	en	Egipto
2.2	Poderes	sagrados	de	los	sacerdotes
2.3	La	RA-activación
2.4.	Zigut	y	On	Ri	Ka
2.5	Observaciones
3.	Ptia-Ra
3.1	Aprender	antes	de	transmitir
3.2	La	Enseñanza
3.3	La	Voz
3.4	Dudas	y	escepticismo
3.5	Consejos
4.	Hor-Ra
4.1	Efectos	de	la	activación	del	RA
4.2	Armonizar	un	ambiente
4.3	La	cristalización
4.4	El	sonido
4.5	El	tiempo	en	la	sanación
Akta-Ra
Soria
La	difusión	del	Or	Is	Ra
Isis	–	Gaia
La	Verdad	del	Or	Is	Ra
5.	Amón-Ra
5.1	Cambiar	de	ruta
5.2	El	control
5.3	Cooperar
5.4	Los	RA	como	antenas	de	conexión
5.5	Desde	Sirián
Conexión	con	el	Cielo
Estructura	de	este	manual
Gracias…
Gracias	a	todos	los	que	han	asistido	a	mi	despertar	y	que	han	estado
acompañándome,	aconsejándome	y	animándome	cada	vez	que	daba	un	paso
importante	en	este	camino	maravilloso.
Gracias	a	mis	compañeros	de	viaje,	con	los	cuales	he	compartido	momentos
únicos	de	unión,	risas	y	disfrute	llenando	mi	corazón	de	alegría.
Gracias	a	todas	las	almas	que,	hasta	ahora,	se	han	cruzado	en	mi	camino:	aprendí
de	cada	una	de	ellas,	convirtiéndome	en	lo	que	soy.
Gracias	también	a	las	que	vendrán.
Gracias	a	mi	compañero	de	vida	Javier	por	aceptar	mi	proceso	desde	el	respeto	y
el	amor	incondicional.
Gracias	a	mi	familia,	mi	raíz	sagrada	de	esta	reencarnación,	por	haber	creado	ese
ambiente	de	amor	tan	puro	en	el	cual	he	crecido	y	del	cual	sigo	disfrutando	hoy.
Gracias	al	Universo	por	ser	tan	perfecto.
Gracias	a	Soria	y	a	mi	familia	de	luz	por	ser	tan	espectaculares	y	estar	tan
presentes…	¡cuánta	delicadeza	y	amor	he	recibido!
Gracias	a	todo	lo	que	es.
Gracias	a	la	luz	que	brilla	en	cada	Ser.
Gracias	a	mí	misma.
Gracias.
Desde	mi	corazón:
Grazie.
Prólogo
La	casualidad	es	aparente.	Las	personas	que	se	mueven	siguiendo	su	intuición,
las	así	llamadas	“señales”	en	el	camino	o	energías	afines	a	las	propias,	saben
perfectamente	que	existe	una	especie	de	fuerza,	de	impulso,	que	lleva	a	vivir
experiencias	necesarias	para	el	crecimiento	y	el	desarrollo	personal	interior.	Así
fue	para	mí.
Un	querido	amigo	editor,	aquí	en	Madrid,	ciudad	en	la	que	vivo	y	trabajo	como
traductora,	me	habló	de	Gaia,	una	chica	italiana,	como	yo,	que	vive	en	Madrid
desde	hace	años,	igual	que	yo,	y	practica	una	activación	“extraña”	llamada	RA-
activación,	que	se	hace	una	vez	en	la	vida	y	que	no	requiere	esfuerzos	constantes
de	meditación,	métodos	complejos	de	conexión	con	el	Ser	superior	de	cada	uno
ni	implica	la	participación	en	cursos	o	seminarios	aburridos	que	prometen
grandes	elevaciones.	Suscitó	curiosidad	en	mí	y	fui	a	ver	su	sitio	web	para
descubrir	si	las	informaciones	llegaban	a	despertar	mi	interés.	Se	trataba	de	un
conocimiento	antiguo	que	se	remonta	a	la	Atlántida,	que	posteriormente	se
difundió	en	Egipto	y	luego	desapareció.
Siempre	me	ha	atraído	el	gran	misterio	de	la	Atlántida	y	de	la	civilización
egipcia,	por	lo	que	decidí	conocer	a	Gaia	y	probar	esta	nueva	experiencia,	sin
ninguna	expectativa,	pero	abierta	a	lo	que	pudiera	suceder.
Gaia	me	gustó	mucho	desde	el	principio	y	la	experiencia	en	sí	fue
extraordinariamente	positiva	para	mí.	Precisamente	hoy	se	cumple	un	año	desde
entonces¹	,	un	año	en	el	que	mi	Yo	ha	sufrido	enormes	sacudidas:	estructuras	y
esquemas	de	pensamiento	transformados,	limpieza	material	y	espiritual,	cambios
profundos.	Sin	demasiados	esfuerzos	me	he	desecho	de	viejos	códigos	que
obstaculizaban	el	flujo	armónico	del	cambio	y	soy	una	persona	nueva.
1	Me	refiero	a	la	fecha	en	la	que	escribí	el	prólogo	para	el	libro	en	italiano,	junio
de	2015.
Después	de	la	práctica,	que	en	sí	es	muy	sencilla,	pero	al	mismo	tiempo	intensa,
dejé	a	Gaia	mi	tarjeta	de	visita,	intuyendo	que	el	asunto	no	acabaría	en	ese
momento,	sino	que	nos	veríamos	de	nuevo.
Así	fue:	ella	decidió	mandar	a	traducir	su	libro	a	italiano,	un	libro	canalizado	en
español	por	una	italiana,	y	acudió	a	mí,	ya	RA-activada,	confiándome	esa	tarea,
bastante	delicada.
Puedo	decir	que	traducir	este	manual	a	italiano²	fue	el	complemento	de	un	año
rico	en	proyectos	nuevos	que	vibran	con	una	energía	más	sutil	y	rápida,	la	cual,
si	se	utiliza	a	escala	global,	sin	duda	contribuirá	a	cambiar	muchas	estructuras
mentales	y	a	facilitar	la	evolución	de	la	Tierra	en	este	momento.
2	OR	IS	RA,	L’insegnamento	di	Iside	e	il	ritorno	del	RA.	Publicado	en	Italia	en
marzo	de	2016	por	Anima	Edizioni.
Como	decía	al	principio,	parece	que	la	sincronicidad	de	ciertos	encuentros	tiene
un	sentido,	que	existe	una	lógica	energética	universal	más	grande	que	nosotros,
la	cual,	por	resonancia,	hace	mover	eventos	y	personas	hacia	direcciones	y
caminos	inesperados	y	muy	satisfactorios.
Doy	las	gracias	a	Gaia	y	a	los	maestros	del	OR	IS	RA	y	estoy	segura	de	que	la
estructura	energética	de	la	estrella	la	acogerán	en	Italia	todos	los	que	quieren
crear	un	mundo	nuevo,	cambiar	definitivamente	para	mejor	muchos	aspectos	de
su	existencia	y	crecer	en	armonía	con	el	prójimo	y	con	Gaia	la	Tierra.
Les	deseo	a	todos	una	buena	lectura	de	esta	segunda	edición	española,	revisada	y
energéticamente	actualizada.
Ilaria	Trezza
Conexión	Con	Gaia
“Que	Isis	te	acompañe	en	el	camino	y	que	la	Sabiduría	Antigua	despierte	otra
vez	en	tu	corazón.
Eres	hijo	de	Dios,	de	la	Fuente,	y	a	ella	volverás.
Amén”
Cómo	empezó	todo
Todo	comenzó	cuando	asistí	a	un	taller	de	Registros	Akáshicos.	Empecé	a	recibir
información	después	de	la	iniciación	y	de	la	apertura	de	mi	canal.	Los	Registros
no	solamente	contestaban	a	las	preguntas	que	yo	les	formulaba,	sino	que	también
empezaban	a	entregarme	otro	tipo	de	material,	un	material	que	estaba	allí,	a	mi
disposición,	desde	toda	una	vida,	guardado	en	mis	registros	y	listo	para	ser
recibido,	entendido,	recordado	y	utilizado.
Después	de	una	primera	fase	de	desconcierto,	acepté	lo	que	estaba	viviendo	sin
juzgarlo	y	me	permití	recordar,	entrando	también	en	contacto	con	seres	de	otra
dimensión	que	me	ayudaron	y	me	siguen	ayudando	en	este	proceso.
Así	es	como	accedí	al	OR	IS	RA	y	cuatro	días	después	del	taller	de	Registros
Akáshicos,	el	18	de	octubre	de	2012,	ya	estaba	canalizando	el	manual.
Durante	un	mes,	sin	faltar	un	solo	día,	me	levantaba	cada	mañana	y	empezaba	a
escribir	a	mano.	Solía	“bajar”	uno	o	dos	capítulos	cada	jornada.	A	veces	la
información	fluía	con	dificultad,	otras	veces	sin	problemas.
En	los	primeros	días	me	cansaba	mucho,	también	porque	tenía	que
acostumbrarme	a	la	frecuencia	y	a	la	energía	de	toda	esa	información.
Este	es	un	“primer”	manual,	pues	después	de	haberlo	terminado	entendí	que	era
solamente	una	pequeña	sección	del	OR	IS	RA	y	que	más	adelante	(dentro	de
meses	o	años)	recibiré	más	“capítulos”.
Actualmente	aplico	el	método	en	los	talleres	de	RA-activación.
Al	recordar,	mi	velo	empezó	a	deshacerse	poquito	a	poco	y	entendí	por	qué	estoy
aquí,	cuál	es	mi	misión	en	este	momento	y	cuáles	son	las	tareas	a	realizar.	Pude
reordenar	muchas	piezas	del	rompecabezas	de	toda	una	vida.
Todo	esto	lo	decidí,	lo	elegí	y	lo	pacté	yo	misma	antes	de	reencarnar	en	este
plano,	y	2012	fue	el	añoen	que	decidí	despertar,	activarme,	reconocer	y	aceptar
mi	misión.
Para	mí,	Gaia	Vezzosi,	todo	esto	es	relativamente	“nuevo”,	pero	mi	alma	trabaja
con	el	Or	Is	Ra	desde	hace	muchísimo	tiempo,	colaborando	con	seres
multidimensionales.
Trabajamos	en	el	retorno	del	Or	Is	Ra.
Así	que,	desde	mi	esencia,	mis	recuerdos	y	mi	corazón,	os	ofrezco	este
instrumento	maravilloso	de	sanación	y	evolución,	disponible	para	todos	los	que
resuenen	con	él.
Os	recuerdo	que	para	vosotros	tampoco	es	algo	nuevo:	la	Humanidad	ya	lo	ha
experimentado	anteriormente	y	está	escrito	en	sus	Registros.
Sobre	Mí
Nací	en	Milán,	Italia,	en	1983,	pero	actualmente	vivo	en	Madrid.
Desde	pequeña	siempre	me	han	interesado	las	artes,	el	teatro	y,	en	particular,	la
danza,	a	la	cual	tengo	la	suerte	de	dedicarme	profesionalmente	desde	los	17
años.
Gracias	a	mi	profesión	he	viajado	mucho	y	he	conocido	muchos	países	y
culturas,	pero	España	siempre	ocupó	un	sitio	especial	en	mi	corazón.
Los	contactos	con	esta	tierra	empezaron	en	el	año	2000,	hasta	que	en	2007
decidí	trasladarme	definitivamente	a	Madrid	en	busca	de	un	sueño,	siguiendo	mi
intuición,	mi	corazón	y	mi	pasión.
Puedo	decir	que	España	me	ofreció	muchísimo	más	que	la	realización	de	un
deseo,	y	sobre	todo	ha	sido	la	cuna	de	mi	despertar.
2012	fue	un	año	muy	importante	y	decisivo	para	mí.	Desde	el	1	de	enero	mi	Ser,
poquito	a	poco,	como	una	flor	que	nace,	empezó	a	despertar.	Los	cambios	fueron
muy	profundos	y,	después	de	un	intenso	trabajo	de	aceptación	y	de	amor
incondicional,	y	gracias	también	a	maravillosos	compañeros	de	viaje,	he	llegado
hasta	aquí,	a	este	estado	de	consciencia	que	me	permite	fluir	en	mi	existencia
desde	el	amor,	la	conexión	con	mi	Ser,	la	verdad,	creando	mi	realidad	en	cada
instante,	sintiendo	mi	esencia,	compartiendo	conmigo	misma,	con	los	demás,
con	Gaia	y	con	el	Infinito	todo	lo	que	experimento,	sintiéndome	un	granito	de
arena	de	esa	maravillosa	nueva	Humanidad	que	hoy	se	está	gestando.
También	es	verdad	que	antes	de	2012	tuve	algunas	señales	de	este	“despertar”,
pero	fueron	casos	aislados	que	me	venían	a	anunciar	lo	que	me	iba	a	suceder.
¿Qué	quiere	decir	esto?	Que	no	he	sido	ninguna	niña	prodigio:	nunca	he	tenido
dones	particulares,	como	la	telepatía	o	la	capacidad	del	médium,	nunca	he	visto
auras	ni	espíritus,	leído	el	futuro	o	levitado	objetos.	Hadas,	ángeles	y	elfos
existían,	para	mí,	en	mi	imaginación	y	en	las	películas	de	Disney.	Siempre	me	he
dedicado	a	ser	“normal”	y	única.	No	obstante,	aquí	estoy.	He	llegado	a	este
punto	simplemente	porque	un	día	me	levanté	y,	después	de	tantos	viajes	al
extranjero,	decidí	realizar	uno	que	nunca	me	había	atrevido	a	vivir:	el	viaje	a
casa,	a	mi	Universo	interno,	a	mi	Yo,	a	mi	Ser	y	a	mi	esencia.	Allí	encontré	todo
esto.	Todo	está	dentro	de	nosotros.
Os	lo	cuento	para	que	entendáis	que,	hoy	en	día,	hablar	de	seres
multidimensionales,	dimensiones,	planos,	consciencias	despiertas,
extraterrestres,	guías	espirituales,	maestros,	misiones,	herramientas	para	el
cambio,	portales,	naves,	evolución,	etc.	tiene	que	llegar	a	ser	algo	normal	porque
todo	está	ahí,	a	nuestra	disposición,	y	cada	uno	de	nosotros	puede	acceder	a	ello
simplemente	permitiéndose	conectar	con	su	Ser	y	evocar	el	recuerdo	en	los
momentos	en	que	necesitemos	hacerlo.	Todos	tenemos	los	instrumentos	porque
somos	maestros	de	nosotros	mismos,	y	todo	es	posible.	Lo	más	bonito	es	llegar	a
compartir	nuestra	maestría	con	otros	hermanos.
Ya	de	muy	pequeña	pasaba	horas	mirando	las	estrellas,	los	mapas	del	Universo	y
las	constelaciones,	y	ahora	conozco	el	porqué.
Esta	soy	yo,	Gaia	Vezzosi,	un	Ser	que	siempre	amó	bailar,	escribir	y	hablar	de
estrellas,	y	lo	seguiré	haciendo	en	los	años	venideros.
Introducción
Orión	es	una	constelación	que	se	encuentra	a	años	luz	de	nuestro	planeta	Tierra.
Fue	la	encargada	de	elaborar	y	redactar	un	conocimiento	que	se	entregó	a	los
hijos	de	Gaia	en	el	umbral	entre	la	era	de	Virgo	y	la	era	de	Leo.
En	aquel	entonces,	el	mundo	atlante	estaba	a	punto	de	decaer.	La	Humanidad
necesitaba	una	nueva	Sabiduría,	una	herramienta	moderna	para	entrar	en	la	Era
que	estaba	a	punto	de	empezar.
Los	esquemas	y	conocimientos	atlantes	habían	sido	muy	valiosos	y	eficaces
durante	muchos	siglos:	sobre	ellos	se	había	fundado	un	imperio	potente	y
maravilloso,	el	reino	de	Atlántida,	y	habían	garantizado	a	los	humanos	años	de
luz,	paz,	unión	y	armonía.
En	el	12.532	a.C.	estos	principios	empezaron	a	corromperse.	Fue	una	fecha	clave
para	el	declive	de	la	Atlántida.	La	lucha	de	poder	entre	los	atlantes	había
alcanzado	un	estado	muy	crítico:	era	el	fin	de	un	ciclo	y	la	noche	galáctica
asomaba	por	el	horizonte.
Los	Azules,	reyes	provenientes	del	espacio	cuyos	descendientes	se	habían
repartido	el	dominio	de	la	tierras	de	Gaia,	al	ver	esta	situación	elaboraron	un
plan	para	salvar	su	descendencia	y	sus	conocimientos	en	la	Tierra	antes	de	la
llegada	de	la	noche	galáctica,	así	que	eligieron	a	Isis,	hija	de	Om-Ra	y
sacerdotisa	de	un	templo	atlante.
Isis,	de	sangre	real,	reunía	tres	características	fundamentales:	su	genética	era
pura,	pues	descendía	de	los	Azules,	conocía	la	Sabiduría	atlante	(el	OR	antiguo)
e	iba	a	ser	la	portavoz	de	la	nueva	Sabiduría	en	un	nuevo	mundo.
Este	nuevo	Saber	(nuevo	OR)	provenía	de	los	maestros	de	Orión	y,	en	aquel
entonces,	solamente	a	una	mujer	le	fue	permitido	recibirlo:	Isis	iba	a	ser,	y	lo
fue,	el	“cáliz”	del	conocimiento	de	las	estrellas.
Desde	ese	cáliz,	la	futura	Humanidad	tenía	que	“beber”	y	adquirir	el	OR	que	iba
a	constituir	las	bases	de	un	nuevo	mundo	en	un	tiempo	nuevo.
Estaba	claro	que	el	reino	atlante	iba	a	llegar	a	su	fin	e	Isis	era	consciente	de	que
tenía	que	migrar	a	otras	tierras,	buscar	un	lugar	adecuado	donde	establecerse	y
difundir	sus	enseñanzas.
Cuando	en	Atlántida	se	difundió	la	noticia	de	que	una	sacerdotisa	iba	a	ser	la
encargada	de	divulgar	el	OR	antiguo	junto	a	uno	moderno,	en	un	nuevo	mundo,
los	maestros	atlantes	se	rebelaron	creyendo	que	Isis	y	la	nueva	Sabiduría	iban	a
poner	en	peligro	sus	dominios	y	sus	roles	en	la	sociedad.	Creyeron	que	una
mujer	iba	a	ser	la	verdadera	causa	de	lo	que	ya	estaba	anunciado:	el	declive	de
Atlántida.
Queriendo	conservar	sus	poderes	y	preservar	el	OR	atlante,	los	maestros
expulsaron	a	Isis	del	reino	poco	antes	de	que	este	se	hundiera.
Ella	emigró	a	Europa,	recorrió	todo	el	territorio	y	los	hermanos	de	Sirio	la
guiaron	en	su	peregrinación	(de	aquí	el	icono	de	la	estrella	cometa	de	cinco
puntas	que	guía	en	el	camino).
Isis	llegó	a	África	y	se	estableció	en	Egipto.
En	estas	tierras	empezó	a	difundir	el	nuevo	conocimiento	y,	justo	por	eso,	el
reino	de	Egipto	fue	muy	poderoso	durante	mucho	tiempo:	estaba	fundado	en	la
Sabiduría,	en	conceptos	y	principios	de	los	hermanos	mayores	de	Orión,	y	poseía
herramientas	modernas	para	un	tiempo	nuevo	que	las	requería.
Cuando	Isis	dejó	este	plano	fue	venerada	como	una	diosa	y	sus	enseñanzas
fueron	transmitidas,	durante	muchos	siglos,	a	través	de	su	culto	(el	culto	a	Isis),
que	se	propagó	más	allá	de	las	fronteras	de	Egipto	y	del	norte	de	África.
Más	tarde,	el	culto	a	Isis	evolucionó	hasta	convertirse	en	el	culto	a	la	Diosa,	un
culto	pagano	que	tuvo	mucha	influencia	sobre	todo	en	Europa,	Asia	occidental	y
norte	de	África.
Perduró	hasta	la	llegada	del	cristianismo,	que	se	encargó	de	suprimir	la
importancia	de	la	mujer	y	de	lo	femenino	en	la	sociedad.
Ya	no	se	consideraba	oportuno	que	la	gran	Sabiduría	pudiese	“emanar”	solo	del
cáliz	(lo	femenino).
Jesús,	realmente,	era	fiel	a	este	concepto,	pero	la	historia	nos	enseña	que	con	la
llegada	de	Pedro	este	principio	básico	y	fundamental	fue	totalmente
distorsionado.
Era	María	de	Magdala,	en	las	ceremonias	que	Jesús	practicaba,	la	que	sujetaba	y
ofrecía	a	los	asistentes	el	cáliz	de	“la	nueva	y	eterna	abundancia”.	El	cáliz
contenía,	simbólicamente,	el	agua	de	la	Sabiduría,	un	conocimiento	brindado	por
los	hermanos	mayores	de	las	estrellas	a	la	nueva	Humanidad.
El	OR	más	“puro”	fue	divulgado	en	Egipto:	todavía	no	había	llegado	la	noche
galáctica	e	Isis,	junto	asus	descendientes	y	a	sus	primeros	sacerdotes	elegidos,
pudo	trabajar	en	estricto	contacto,	en	este	plano,	con	los	maestros	de	Sirio	y
Orión.
Fueron	siglos	de	aprendizaje.	Los	hermanos	mayores	colaboraron	directamente
con	los	humanos	porque	sabían	que	el	velo	se	iba	a	posar	pronto	sobre	Gaia	y	su
intención	era	la	de	dejar	todas	las	nuevas	herramientas	en	la	Tierra	para	que
pudiesen	ser	utilizadas	de	forma	correcta.	Así	sucedió.
Isis	fue	la	gran	sacerdotisa	y	diosa	del	antiguo	Egipto.	Hizo	de	puente	entre	las
estrellas	y	este	plano.
Su	Sabiduría	perduró	por	siglos	y	fue	custodiada	durante	mucho	tiempo.
Este	OR	nunca	se	perdió,	parte	de	él	siempre	estuvo	en	la	Tierra	y	fue
transmitido	de	generación	en	generación.	Solamente	las	partes	más	puras	y
sagradas	fueron	veladas	y	custodiadas	hasta	hoy.
El	humano	no	pudo	tener	acceso	a	esta	otra	sección	de	la	Sabiduría	porque	no
podía	entenderla.	Desde	el	antiguo	Egipto	los	libros	originales	fueron	retirados
en	las	naves	AS	(comando	estelar	de	Ashtar	Sheran)	y	llevados	a	su	origen,
Orión.
Ahora	es	tiempo	de	recordar,	de	volver	a	difundir	el	conocimiento	antiguo,	de
acceder	a	él	y	transmitirlo.
Ha	llegado	el	momento,	hermanos,	porque	para	vosotros	fue	creado	y	para
vosotros	fue	retirado	de	Gaia	y	protegido.
Los	maestros	sabían	que	iba	a	poder	bajar	de	nuevo	a	este	plano	y	ser	utilizado
en	el	nuevo	umbral.
El	lugar	es	aquí,	el	tiempo	es	ahora.	Es	para	vosotros.	Constituye	la	herramienta
para	el	cambio.
Los	seres	de	Sirio	son	los	encargados,	junto	a	otros	hermanos	y	maestros,	de
poner	en	práctica	el	plan	en	la	Tierra.	Gracias	a	su	labor,	el	Or	Is	Ra	baja	a	Gaia
de	nuevo.
Existen	“elegidos”	que	se	encargan	de	acceder	a	esta	información	y	de	bajarla	a
este	plano	en	este	momento.	Gracias	a	ellos	podréis	conectar	con	la	fuente	de	la
enseñanza	y	de	la	Sabiduría	de	Isis.
Gracias,	hermanos,	por	estar	aquí,	gracias	por	vuestra	labor	en	el	cambio.
Gaia	evoluciona	y	necesitáis	otras	herramientas.
El	velo	se	deshace	y	una	Nueva	Humanidad	toma	conciencia	de	sí	misma.
1.	Set-Ra
1.1	El	RA
LA	ESTRELLA	DE	CINCO	PUNTAS
La	base	del	Or	Is	Ra	es	una	estructura	energética	geométrica:	la	estrella	de	cinco
puntas.
Los	maestros	de	Sirio	y	Orión	han	operado	en	la	Tierra	sobre	todo	a	través	de	la
geometría	sagrada,	pero	podemos	decir	que	el	concepto	base	de	su	geometría	es
el	RA.
Esta	figura	tiene	cinco	puntas	que	corresponden	a	cinco	vórtices	energéticos.	El
5	es	entendido	aquí	como	número	mágico	de	equilibrio,	perfección,	armonía	y
sanación.
Normalmente,	hasta	ahora,	cada	vez	que	el	ser	humano	ha	hablado	de	esta
figura,	siempre	la	ha	relacionado	con	los	cinco	elementos:	fuego,	aire,	tierra,
agua	y	éter.
Ahora	es	tiempo	de	añadirle	significados	más	profundos.
Para	Orión	y	Sirio,	el	cinco	es	un	número	de	conexión.	Con	cinco	vórtices	de
energía	se	pueden	abrir	portales	que	conectan	con	otros	planos,	controlar	una
puerta	dimensional,	“bajar	el	Cielo	a	la	Tierra”	y	al	revés,	pero	este	último
concepto	lo	explicaremos	más	adelante.
El	“otro	poder”	ha	utilizado	muchas	veces	este	número	para	incrementar	su
fuerza,	su	poder,	su	dominio	y	su	saber	intelectual	a	través	de	la	estructura
energética	geométrica	del	pentágono.	Pero	la	simplificación	a	un	pentágono	es
una	explicación	parcial	y	lineal	de	un	concepto	muchísimo	más	profundo.
Los	humanos	siempre	supieron	que	con	cinco	vórtices	energéticos	se	podía
aumentar	o	disminuir	(dependiendo	de	la	intención)	la	frecuencia	o	el	campo
electromagnético	de	una	persona,	un	lugar,	un	sistema,	etc.
El	pentagrama,	como	bien	canalizó,	divulgó,	utilizó	y	enseñó	Pitágoras,	es	un
elemento	armonizador:	de	él	deriva	la	proporción	áurea	que	armoniza	y	entrega
una	vibración	elevada	a	todo	lo	que	se	construye	siguiendo	sus	leyes	“mágicas”.
Es	un	instrumento	muy	poderoso	y	ya	tenéis	muchos	ejemplos	de	ello	en
construcciones,	catedrales	y	templos	antiguos.
Leonardo	da	Vinci	aplicó	el	pentagrama	al	cuerpo	humano	(el	hombre	de
Vitrubio)	y	lo	reflejaba	en	sus	pinturas	y	esculturas	porque,	efectivamente,	el
cuerpo	humano,	en	sí,	está	diseñado	siguiendo	estos	cánones.
Muchas	veces	uno	de	los	vórtices	energéticos	no	funciona	bien	o	está
completamente	cerrado	y	la	energía	no	puede	fluir,	ni	trabajar	al	máximo	de	su
potencial.	Activar	el	RA	es	justo	restablecer	el	buen	funcionamiento	de	todos	los
centros	energéticos,	pero	de	esto	hablaremos	más	adelante.
EVOLUCIÓN	DE	UN	PENTÁGONO	A	UN	RA
El	pentágono	es	una	simplificación	del	RA.
Dibujando	esto	y	nada	más,	no	se	está	considerando	la	totalidad	de	los	elementos
ni	la	conexión	de	ellos	con	la	Fuente	y	con	el	entorno.	Se	está	simplemente
hablando	de	un	flujo	de	energía	cerrado,	estricto,	estable,	que	siempre	se	repite
igual	a	sí	mismo	una	y	otra	vez.	Digamos	que	es	un	circuito	estéril,	totalmente
desconectado	de	la	Fuente	y	de	su	centro.
Sus	extremos	pueden	enlazarse	entre	sí	solamente	de	una	forma	lineal:	el	vórtice
1	puede	volver	a	sí	mismo	solamente	pasando	por	los	vórtices	2,	3,	4	y	5.
El	pentágono	es	bueno	para	encerrar,	encasillar,	estancar,	dominar	y	condensar
energía	que,	no	fluyendo,	se	relaciona	con	su	exterior	sin	armonía,	de	manera
muy	estructurada,	no	abierta	a	la	fluidez	y	a	la	escucha.
Esta	figura	energética	geométrica,	utilizada	en	la	realidad	3D,	es	una	imposición
de	paradigmas:	impone	lo	que	contiene	porque	no	hay	un	devenir,	una
posibilidad	de	evolución.
Es	la	síntesis	geométrica	del	concepto	del	“así	soy	y	así	os	lo	impongo”,	y	bajo
esta	estructura	han	funcionado	muchos	de	los	sistemas,	gobiernos	y	personas	que
han	operado	en	los	últimos	siglos	en	vuestro	plano.
Es	tiempo	de	evolucionar,	y	para	que	el	pentágono	evolucione	el	primer	paso	es
conectar	sus	vórtices	con	su	centro,	que	llamaremos	Punto	O,	el	punto	de	origen
interior.
Cuando	cada	vórtice	vuelve	a	su	centro,	la	conexión	con	los	demás	es	inmediata:
el	punto	1,	por	ejemplo,	para	conectar	con	el	punto	4	no	tendrá	que	pasar	por	2	y
3,	sino	que	transitará	solamente	por	el	punto	O	llegando	de	forma	más	rápida	y
directa	a	su	meta.	El	flujo	de	energía	es	más	fluido.
Conectarse	con	O	es	el	primer	paso	de	la	evolución,	porque	para	“espirar”
primero	hay	que	“inspirar”	e	ir	hacia	dentro,	donde	reside	el	conocimiento	del
Ser	y	la	verdad.
Conectar	con	la	información	que	O	contiene	es	conectar	con	la	propia	esencia,
adquirir	así	mayor	poder	y	energía,	aumentar	la	vibración	y	despertar	la
consciencia	del	uno	antes	de	brindarla	al	Infinito.
Muchas	veces	cumplir	este	movimiento,	volver	hacia	dentro	y	tomar	conciencia
de	O	crea	numerosos	bloqueos.	Los	motivos	suelen	ser	los	siguientes:	no	saber
dónde	está	el	centro,	no	querer	escucharlo	por	miedo	a	las	consecuencias,	no
querer	vibrar	mejor,	no	querer	aceptar	el	cambio	prefiriendo	el	estancamiento
porque,	claramente,	conectarse	con	el	Origen	interior	presupone	una	evolución
que	hay	que	estar	dispuestos	a	asumir	y	cumplir.
Hemos	dicho	que	conectando	los	extremos	con	su	centro,	la	energía	fluye	mejor
y	más	rápidamente.	El	campo	magnético	se	expande	y	aumenta,	entregando
mayor	poder	a	la	figura	del	pentágono.
Este	es	un	concepto	muy	simple,	pero	muy	olvidado	en	vuestros	tiempos.	Para
“hacer”	más	hay	que	ir	hacia	dentro.
El	ser	humano,	en	las	últimas	eras,	ha	aprendido	que,	si	quiere	obtener	mayores
efectos	en	su	realidad	3D,	tiene	que	empezar	a	ir	hacia	fuera,	a	actuar	más,	a
hacer	más	cosas:	debe	empezar	a	buscar	en	su	exterior	y	a	poner	el	foco	de	su
atención	en	algo	que	está	fuera	de	él.
Cuanto	más	quieren	algo	los	humanos,	más	se	esfuerzan	por	conseguirlo,	pero
ese	esfuerzo	está	totalmente	enfocado	hacia	el	entorno.	El	humano	sigue	la	ley
del	esfuerzo	y	del	sacrificio,	actuando	en	su	realidad	con	más	esfuerzos	para
recoger	más	frutos.
Esto	ha	sido	válido	durante	mucho	tiempo,	pero	el	ser	humano	no	consideraba
un	paso	importante	que	muestra	la	geometría	sagrada:	para	“hacer”	más	y
“obtener”	más,	primero	hay	que	ir	hacia	dentro,	hay	que	conectarse	con	el	propio
centro	e	incrementar	la	fuerza	y	el	poder.
Aumentando	la	vibración	y	el	campo	magnético	de	algose	producen	cambios	en
la	realidad	que	rodea	ese	algo.
Bien,	así	funciona:	si	queréis	cambiar	vuestra	realidad	y	obtener	más	de	ella,
tenéis	que	evolucionar,	y	el	primer	paso	es	conectar	con	O.
El	siguiente	paso	es	aprender	a	dejar	que	toda	la	información	que	se	genera	en	O
fluya	hacia	el	exterior	y,	para	que	esto	ocurra,	primero	hay	que	escuchar.
Escuchar	no	significa	“entender”,	que	es	traducir	en	el	idioma	de	la	mente	el
lenguaje	de	O,	de	la	fuente	interior,	pero	en	la	mayoría	de	los	casos	esto	es
imposible	porque	la	información	se	reduce	y	se	limita.
Escuchar	es	sentir.
Hoy	en	día,	los	humanos	han	logrado	expresar	con	palabras	lo	que	sienten,	pero
esto	solo	puede	ocurrir	cuando	ese	algo	que	se	ha	“sentido”	ha	sido	asimilado,
grabado	en	cada	célula,	expandido	al	cuerpo	de	luz	transformándose	en
“emoción”	y,	solo	entonces,	expresado	a	través	de	un	sonido.
Este	último,	por	fin,	da	luz	e	ilumina	la	emoción,	creando	un	flujo	armónico	de
energía	del	interior	al	exterior	y	de	fuera	hacia	dentro.
El	sonido	suele	volver	a	evocar	la	expansión	que	se	acaba	de	producir.	Todo
esto,	en	la	mayoría	de	los	casos,	se	da	sin	que	la	mente	interfiera.
Sentir	es	mucho	más	rápido	que	entender,	todo	está	a	otro	nivel.
Por	esta	razón,	“expresar”,	producir	un	sonido	después	de	haber	sentido	algo
desde	vuestro	centro,	es	algo	mucho	más	poderoso	que	empezar	por	el	sonido
para	sentir	ese	algo.
Esto	supone	haber	pasado	por	O	y	haberse	conectado	con	la	fuente	interior:	el
Universo	funciona	así.
“Expresar	con	el	corazón”	es	una	frase	que	utilizáis	mucho	y	que	tiene	aquí	su
explicación.	No	se	puede	codificar	y	hablar	de	algo	sin	antes	haberlo	sentido	y
experimentado.	Los	efectos	no	son	los	mismos.
Una	vez	que	se	crea	un	diálogo	entre	los	vórtices	y	el	centro,	el	siguiente	paso
para	la	evolución	es	poder	expandir	ese	sentir	lo	más	lejos	posible	y	volver	a
conectarlo	con	el	entorno,	con	el	espacio	y	con	el	Infinito.
Es	la	expansión	después	de	la	implosión.
Cada	movimiento	tiene	que	volver	a	la	Fuente	original	porque	así	funciona	Dios,
así	experimenta	el	Creador.
Todo	vuelve	al	Origen	después	de	haberse	vivido,	y	así	tiene	que	ser.	Cumplir
una	acción,	un	movimiento,	quiere	decir	compartirlo	con	el	Infinito,	entregarlo
otra	vez,	expandirlo	y,	de	esta	forma,	ocurren	dos	cosas	importantes:	la
información	viaja	de	nuevo	a	la	Fuente	y,	al	mismo	tiempo,	se	propaga	a	todo	lo
que	existe,	incrementando	el	aprendizaje	y	la	experiencia	colectiva.	Por	esto
todos	somos	Uno.
El	movimiento,	el	flujo	de	energía,	se	comparte	con	el	Creador	y	con	lo	creado.
Somos	gotas	de	luz:	todo	lo	que	sentimos	y	experimentamos	se	propaga	y	es
fundamental	para	nuestro	entorno,	que	de	eso	se	nutre.
Se	puede	experimentar	de	forma	directa	o	de	forma	refleja:	“YO	HAGO”	o	“YO
ME	NUTRO	DE	LA	INFORMACIÓN	QUE	ME	VIENE	DE	LOS	DEMÁS”.
En	los	últimos	siglos	el	hombre	se	ha	desconectado	totalmente	de	su	centro,
rompiendo	la	figura	de	la	estrella,	del	RA.	Se	ha	limitado	a	funcionar	bajo	la
estructura	energética	del	pentágono,	desconectándose	del	entorno	y,	sobre	todo,
de	la	Fuente.
Se	han	creado	sociedades	y	esquemas	fundados	por	individuos	centrados	y
encerrados	en	sí	mismos	con	un	flujo	de	energía	muy	estricto	y	limitado.
Sin	conexión	con	el	interior	ni	con	el	exterior,	las	comunicaciones,	las	relaciones
y	las	conexiones	se	han	hecho	muy	difíciles.
El	campo	magnético	y	la	vibración	de	todo	disminuyeron	y	los	flujos	e
intercambios	de	energía	se	hicieron	casi	inexistentes.	No	se	trata	de	juzgar,	pero
tuvo	que	ser	así.
Ahora	entenderéis	a	las	sociedades	de	los	últimos	siglos:	sistemas	con	tendencia
a	imponer,	centralizar,	manipular	la	información,	detentar	el	poder	sembrando
desconfianza	e	individualismo.
Es	tiempo	de	que	el	RA	vuelva	a	funcionar	en	cada	Ser	para	que	la	energía
vuelva	a	fluir	en	equilibrio	y	armonía.
En	el	antiguo	Egipto	este	era	el	esquema	energético	que	existía	en	cada	cosa.
Cada	Ser	tenía	su	RA	activo	y	perfectamente	funcional.	La	sanación	que	se
practicaba	en	esos	tiempos	consistía	justo	en	establecer	el	perfecto
funcionamiento	del	RA	en	personas,	edificios,	lugares,	en	la	sociedad,	en
sistemas,	gobiernos,	etc.
Imperaba	el	RA,	el	flujo	armónico	de	conexión	con	el	O	interior	y	con	la	Fuente.
Todo	fluía	y	estaba	alineado	con	su	esencia.	La	integridad	del	RA	era	la
perfección	y	su	poder	creador	era	infinito.
Este	concepto	es,	ahora,	la	base	para	la	nueva	Humanidad,	y	cuando	un	Ser
active	su	RA	liberará	la	energía	estancada	y	se	quitará	el	velo.
Es	un	instrumento	para	el	cambio.	Así	es.
Que	el	OR	de	Isis	descienda	en	vuestros	corazones.	Es	el	momento.
1.2	Los	vórtices	del	RA
PTIA-RA
En	el	cuerpo	humano	se	sitúa	en	la	mano	derecha,	que	es	un	centro	energético
muy	potente	y	se	asocia	al	movimiento.	Es	el	vórtice	“padre”,	la	fuente	del	poder
masculino.
El	Ptia-Ra,	en	sí,	representa	el	fuego,	la	chispa,	es	el	fluir.	Domina	los	excesos	y
sabe	bajar	a	la	tierra	todo	lo	que	está	demasiado	proyectado	hacia	arriba.
Los	egipcios	asociaban	este	vórtice	a	la	figura	del	caballo.
Se	desarrolla	a	partir	de	los	catorce	años	de	edad:	es	el	centro	energético	que	os
entrega	el	poder	de	vuestra	vida,	y	se	termina	de	desarrollar	justo	en	la	época	en
la	que	cogéis	las	riendas	de	vuestra	existencia	y	empezáis	a	querer	experimentar
vuestra	realidad	por	vosotros	mismos.
Es	la	madurez	atrevida,	el	primer	paso	de	una	idea	hacia	la	acción.	Todavía	no
constituye	la	meta:	no	es	la	cosa,	es	el	movimiento	hacia	ella	y	es	fundamental
en	cada	proceso	de	materialización.
Al	igual	que	a	un	caballo,	domarlo	no	es	fácil.	Hay	que	marcar	unas	pautas	a	este
poder	y	luego	dejarlo	fluir	sin	enjaularlo,	enmarcarlo	o	domarlo	del	todo.	Esto	es
algo	que	vosotros,	los	humanos,	todavía	no	sabéis	manejar	muy	bien.	El	Ptia-Ra
no	se	deja	controlar.	Utilizarlo	correctamente	significa	no	imponerse	a	él,	sino
dejarlo	fluir	hacia	donde	os	gustaría	que	os	condujera,	pero	siempre	os
sorprenderá.	Os	llevará	hacia	vuestra	meta	a	través	de	un	movimiento	inesperado
y	creativo.
Dejadle	crear	y	materializar	el	movimiento	a	su	manera.	Un	hipercontrol	de	este
vórtice	lo	reduce	a	cero	y	a	la	no	acción.
Pensad	en	un	caballo	en	libertad	que	siempre	os	llevará	donde	queráis,	pero	que
siempre	necesitará	sentirse	libre	para	correr	y	en	conexión	con	su	esencia
indomable.
Se	aconseja	un	diálogo	profundo	con	este	vórtice,	confiad	en	él.	Entregadle	el
poder	de	decidir	él	mismo	cómo	moverse,	el	hacia	dónde	lo	marcaréis	vosotros.
Es	un	poderoso	aliado	y	colaborador.
El	Ptia-Ra	se	puede	encontrar	en	el	cuerpo	humano,	en	un	edificio,	en	un	lugar,
en	un	sistema,	en	una	sociedad	o	en	un	pequeño	grupo	de	personas,	siempre
colaborando	armónicamente	con	los	demás	vórtices	del	RA.
Hoy	en	día,	el	humano	ha	explotado	el	poder	del	Ptia-Ra	y,	en	general,	se	dota	a
la	palabra	“poder”	de	un	significado	ambiguo	y	muchas	veces	de	rechazo.
Quien	hoy	ostenta	el	poder,	controla	en	vez	de	guiar	como	lo	haría	un	Ptia-Ra
activo.
Últimamente,	el	mal	funcionamiento	de	este	vórtice	es	visible	en	cada	cosa	y	el
consecuente	desequilibrio	es	evidente.	El	control	provoca	que	este	centro	se
cierre	y	no	quiera	seguir	con	la	tarea.	Por	eso	es	tiempo,	humanos,	de	aprender	a
fluir,	de	confiar	en	el	poder	del	movimiento,	de	sorprenderse	junto	a	él	y,	con	él,
dialogar.	No	hay	que	imponer,	sino	sugerir,	y	de	ahí	esperar	que	el	movimiento
surja	como	quiera	hacerlo.
Claramente	os	daréis	cuenta	de	que	el	patrón	de	movimiento	que	sigue	el	Ptia-Ra
es	ordenado,	armónico	y	fluido	y,	justo	por	eso,	podéis	confiar	en	él.	Nunca
reaccionará,	siempre	que	esté	funcionando	correctamente,	de	una	forma
desequilibrada	que	pueda	comprometeros.	Su	símbolo	es	una	espiral,	un
movimiento	armónico	hacia	algo	que	se	materializa	durante	el	andar.	Es	un	fluir
constante	hacia	una	meta.
Queremos	subrayar	un	concepto	muy	importante	antes	de	seguir	con	los	demás
vórtices:	el	RA	funciona	o	no	funciona,	no	hay	más	que	entender.
Su	perfecto	funcionamiento	depende	de	los	cinco	vórtices,	de	la	conexión	con	O
y	del	flujode	información	de	O	hacia	fuera,	creando	el	campo	armónico	circular
de	conexión	con	el	Infinito.
Una	pequeña	disfunción	de	algún	punto	energético	es	suficiente	para	que	el	RA
quede,	digamos,	totalmente	apagado.	Por	este	motivo	la	activación	del	RA	es
algo	muy	profundo	y	requiere	un	trabajo	intenso.
Estaréis	pensando,	por	ejemplo,	en	el	sistema	de	chakras,	pero	estamos	hablando
de	algo	muy	distinto.
Un	chakra	puede	estar	parcialmente	bloqueado	u	obstruido	y	aún	así,	con	la
proporción	de	él	que	esté	abierta,	puede	seguir	funcionando,	aunque	con	menor
eficiencia,	mientras	el	sistema	completo	de	chakras	siga	existiendo	y	esté	activo.
El	RA	no	funciona	así:	si	los	vórtices	no	están	todos	activados	al	máximo	de	su
potencial,	la	estrella	no	se	constituye.	Estaríamos	aquí	en	la	fase	“pentágono”	y
la	información	seguiría	fluyendo	de	forma	lineal.	Tenéis	que	imaginaros	un
interruptor:	gracias	a	él,	la	luz	está	encendida	o	está	apagada,	pero	no	se	puede
regular	la	intensidad.	Por	eso	“sanar”,	en	el	Or	Is	Ra,	quiere	decir	activar.
Con	el	paso	del	tiempo,	un	vórtice	disfuncional	perjudica	a	los	demás	puntos	y
causa	un	apagón	general.	El	primer	paso	hacia	la	completa	activación	del	RA	es
volver	a	encender	todas	las	bombillas	para	que	las	cinco	estén	iluminadas	y,	a
partir	de	ahí,	trabajar	su	conexión	con	O	(fuente	interna	y	externa).
Con	los	vórtices	disfuncionales,	apagados,	parcialmente	obstruidos	o
bloqueados,	lo	único	que	sigue	“dibujado”	es	el	sistema	pentagonal,	el	que	tenéis
actualmente.
También	es	verdad	que	una	vez	activados	los	vórtices	y	la	estrella	completa	es
muy	difícil	que	esta	se	vuelva	a	apagar.	Una	vez	llevada	a	cabo	la	RA-activación
no	será	posible	volver	a	dañar	el	sistema	del	RA.
No	penséis	que	este	sistema	se	daña	con	una	enfermedad	o	con	una	emoción
negativa.	Su	desaparición	es	fruto	de	muchos	siglos	de	cambios	estructurales	en
vuestros	cuerpos	de	luz	y	la	noche	galáctica	apagó	los	RA	existentes.	Así	tuvo
que	ser.	La	estructura	de	la	estrella	siempre	existió,	pero	ha	estado	apagada.
Iluminar	el	RA	es	iluminar	vuestro	Ser,	tomar	conciencia	de	vosotros	mismos	y
de	la	Fuente.	Hoy	es	tiempo	de	volver	a	brillar,	hoy	es	tiempo	de	la	RA-
activación	y	de	volver	a	ese	estado	de	consciencia	que	reinaba	en	Egipto	gracias
a	las	enseñanzas	de	Isis,	provenientes	de	Sirio	y	Orión.
Ha	llegado	el	momento.	Que	así	sea.
INT-RA
En	el	cuerpo	humano,	el	Int-Ra	está	situado	en	la	mano	izquierda.	Es	uno	de	los
vórtices	más	poderosos	y	lo	llamamos	“regulador”	porque	tiene	la	propiedad	de
transmitir	energía	a	los	demás	puntos	y	regular	su	flujo.	Puede,	si	es	necesario,
absorber	lo	“negativo”	y	transmutarlo.
Es	simétrico	al	Ptia-Ra,	también	en	su	significado.	Los	dos	crean	el	eje	de
equilibrio	de	la	estrella,	sin	el	cual	los	demás	centros	no	podrían	estructurarse	y
funcionar.
Sanar	es	la	característica	principal	del	Int-Ra:	él	puede	absorber,	invocar	y
utilizar	las	distintas	energías	y	propagarlas	al	resto	del	RA.
El	primer	paso	para	reconstruir	y	reactivar	la	estrella	es	equilibrar	el	Int-Ra	con
el	Ptia-Ra.
Sabéis	que	el	lado	izquierdo	siempre	ha	representado	lo	femenino,	las	emociones
y	la	intuición,	pero	cuando	hablamos	del	Int-Ra	hay	que	ir	mucho	más	en
profundidad.	Esta	es	la	puerta	de	entrada	de	la	energía	proveniente	de	las
estrellas:	puede	recogerla	de	otro	plano	y	distribuirla.	Con	la	mano	derecha	en	el
corazón	y	la	izquierda	en	posición	de	cáliz	mirando	hacia	arriba,	la	energía	baja
y	entra	en	el	cuerpo	de	luz	a	través	de	este	vórtice.	Podéis	dibujar	33	veces	el
símbolo	del	infinito	en	vuestra	mano	izquierda	y,	con	esta,	armonizar	cualquier
dolencia	que	sufra	vuestro	físico	(siempre	y	cuando	el	RA	esté	completamente
activo).
Como	podéis	ver,	el	Int-Ra	es	la	Sabiduría	reguladora,	el	poder	sanador,	es	un
cáliz	que	absorbe	para	dar	o	trasmutar	(poder	magnético).
Cuando	este	centro	energético	no	está	activo,	la	energía	general	de	un	cuerpo,	de
un	lugar	o	de	un	sistema,	está	totalmente	desequilibrada.	Si	el	Ptia-Ra	es	el
movimiento,	imprescindible	en	cada	plano	o	realidad	para	poder	evolucionar,	el
Int-Ra	es	el	que	conduce,	guía	y	regula	ese	movimiento.
Regular	el	flujo	de	energía	es	una	tarea	muy	difícil;	por	eso	la	correcta
activación	de	este	vórtice	es	fundamental.
Gaia,	la	Tierra,	tuvo	durante	muchos	siglos	este	punto	energético	apagado,	pero
ahora	vuelve	a	activarlo	porque	es	hora	de	evolucionar.	Algunos	lo	llamáis	lo
“femenino”	pero,	realmente,	es	uno	de	los	vórtices	del	RA	completo	de	Gaia	y
no	será	el	único	que	vuelva	a	estar	en	equilibrio	en	este	plano.
Humanos,	abríos	a	su	enseñanza,	escuchad	el	Int-Ra	en	vuestros	corazones:	os
habla	continuamente	entregando	intuición,	sabiduría,	equilibrio,	conocimiento	y
mucha	paz.	Sentid	esa	parte	vuestra	que	habéis	olvidado	durante	tanto	tiempo:
solamente	escuchándola	y	dejándose	llevar	por	ella	volverá	la	unión,	la	paz	y	la
sabiduría	a	este	planeta.
Comenzad	por	vosotros	mismos.	Si	los	humanos	sois	así,	vuestras	sociedades
también	lo	serán	y,	así,	iréis	hacia	una	nueva	Humanidad,	hacia	un	mundo	con
nuevos	esquemas.
El	Int-Ra	es	un	vórtice	que	escucha,	siente	y	“soluciona”	los	problemas,	pero
acordaos	de	que	lo	hace	sin	imperar	y	dominar,	sino	colaborando	en	armonía	con
los	demás	puntos	energéticos.	Tiene	un	papel	fundamental,	pero	por	sí	solo	no
podría	existir:	no	habría	movimiento,	resultados,	conclusiones,	efectos	ni
expansión.	Así	es.	Sentid	la	energía	en	este	vórtice	y	sentid	vuestro	poder.
Que	así	sea.
SET-RA
Es	un	vórtice	místico	y	representa	todo	lo	que	está	detrás	de	lo	real	y	de	la
materialización.	Es	el	paso	previo	al	movimiento,	el	ojo	que	todo	lo	ve,	la
voluntad	que	decide,	el	impulso	hacia	la	materialización,	el	mundo	de	las	ideas,
de	los	propósitos,	de	la	elaboración	de	pensamientos,	es	el	ver	antes	y	más	allá.
El	Set-Ra	es	la	voluntad	creadora,	el	cerebro	del	RA,	y	su	mundo	es	mágico.
Si	no	está	activo,	no	hay	movimiento,	acción	ni	realidad,	porque	no	hay	nada
que	los	esté	creando.
Hoy	en	día	es	un	centro	muy	utilizado	para	el	control.	Realmente	es	muy
poderoso	porque	es	el	que	lo	decide	todo:	a	partir	de	él	se	crea	la	realidad,	así
que	controlarlo	es	dominar	la	materia	y	sus	efectos.	Utilizado	sin	Ptia-Ra,	que
crea	el	fluir,	y	sin	Int-Ra,	que	regula	la	intención	y	la	energía,	el	Set-Ra	puede
resultar	un	vórtice	“negativo”	porque	crea	una	realidad	apática	y	sin	emociones.
Este	vórtice	está	activo	en	Gaia,	pero	no	se	utiliza	correctamente	porque	no
coopera	con	los	demás	centros	energéticos	del	RA,	que	están	apagados.
El	Set-Ra	de	Gaia	corresponde	a	la	“Matrix”,	el	inconsciente	colectivo,	el	mundo
de	las	ideas	controladas	que	entran	en	las	mentes	de	los	humanos,	los	cuales
terminan	creando	una	realidad	distorsionada,	no	alineada	con	la	esencia.
Los	demás	vórtices	de	la	Tierra	se	están	activando,	sobre	todo	el	Int-Ra,	y	su
Set-Ra	volverá	a	estar	al	servicio	de	la	paz	y	de	la	armonía.
En	la	Antigüedad	los	“magos”	utilizaban	este	centro	de	forma	muy	consciente:
creaban	realidades	y	podían	modificar	la	existente.	Eran	conocedores	del	poder
del	Set-Ra	y,	dependiendo	de	la	intención,	utilizaban	la	magia	blanca	o	la	negra.
En	el	cuerpo	humano	este	vórtice	se	encuentra	en	el	pie	izquierdo.	Absorbe
energía	de	su	entorno	para	crear.
Muchos	no	se	acuerdan	de	él,	y	tenerlo	apagado	significa	ponerse	al	servicio	de
los	demás	bajo	una	dependencia	y	una	esclavitud	continuas,	en	total	desconexión
de	vuestro	poder	creador	personal.	Este	último	es	el	único	que	os	permite
materializar	una	realidad	alineada	con	vuestras	ideas	y	pensamientos	que,	a	su
vez,	estando	el	RA	activo,	estarán	en	armonía	con	vuestra	esencia	y	con	vuestro
corazón.
Sin	Set-Ra,	sin	ideas	ni	voluntad	propia,	creáis	siguiendo	unos	patrones	que	no
son	vuestros	y	proyectáis	una	realidad	que	muy	pocas	veces	se	alinea	con	lo	que
sois.	Con	vuestro	Set-Ra	apagado,	el	“Set-Matrix”	decidirá	por	vosotros	y	esto
es	justo	lo	que	pasa	hoy	en	día.	No	hay	que	juzgar.
Sobre	este	modelo	se	han	creado	los	gobiernos	y	las	sociedades	de	los	últimos
siglos	y	estaes	la	situación	actual	de	vuestro	esquema	social.	Pero	las	cosas
están	cambiando.
Despertad	vuestro	poder	creador,	sentid	vuestro	Set-Ra,	confiad	en	él	y	cread	a
partir	de	allí.	Materializaréis	realidades	alineadas	con	vuestra	esencia	y	estaréis
donde	tenéis	que	estar,	haciendo	lo	que	queréis	hacer,	de	corazón,	en	unión	con
todo	lo	creado	y	con	el	Universo.
Confiad,	hermanos.	Creed	en	vuestro	propio	ojo	interno	que	decide	y	crea	un
mundo	para	vosotros.
HOR-RA
Es	el	vórtice	del	RA	situado	en	el	pie	derecho	y	representa	la	materialización	de
la	realidad,	la	experiencia	de	lo	vivido,	el	fluir	del	Ser	en	la	realización	de	la
acción.
Desde	aquí	los	humanos	pueden	conectar	con	el	alma	de	Gaia	y	compartir	con
ella	la	experiencia	vivida.
El	Hor-Ra	es	el	premio,	la	flor	que	florece,	el	fruto	que	nace	de	la	planta,	es
concretar	una	labor	que	empezó	tres	pasos	atrás	en	el	Set-Ra.	Este	vórtice	es
sorprendente.
Recordad,	humanos,	que	estáis	aquí	encarnados	para	experimentar	y	evolucionar,
y	que	vuestras	experiencias	nutren	tanto	a	Gaia	como	a	la	Fuente.	Cada	una	de
ellas	tiene	que	ser	vivida	y,	simultáneamente,	compartida	con	vuestra	madre
Tierra	y	con	vuestro	padre,	el	Creador.	Compartir	es	fundamental,	no	lo	olvidéis.
Materializar	algo	es	una	bendición,	tanto	para	vosotros	como	para	la	Madre	y	el
Padre.	Es	la	recompensa,	el	premio,	la	realización	de	algo	pensado,	impulsado,
equilibrado	y,	por	fin,	creado	por	vosotros	mismos.	El	Hor-Ra	representa	el	fruto
de	un	proceso	creativo	y	es	un	vórtice	que	está	estrictamente	conectado	con	las
emociones	de	la	alegría,	la	satisfacción	y	la	felicidad,	porque	lograr	cumplir	algo
y	ver	cómo	toma	forma	física	en	vuestra	realidad	3D	siempre	provoca	una	gran
explosión	de	energía.
Solamente	después	de	haber	materializado	se	puede	entregar	la	energía	a	Gaia	y,
justo	por	este	motivo,	el	Hor-Ra	es	tan	importante	para	ella.	El	fruto	se	entrega	a
la	Madre	desde	este	vórtice	creando	un	flujo	de	energía	muy	poderoso	entre	ella
y	vosotros.	Gaia	se	alimenta	de	vuestras	experiencias,	obras	y	acciones,	y
evoluciona	gracias	a	ellas.	Sin	la	ofrenda,	sin	compartir	lo	vivido,	el	flujo
energético	del	RA	se	interrumpe.
Acordaos,	humanos,	de	que	la	materialización	de	algo	no	tiene	su	fin	solamente
en	su	creación.	El	paso	final	es	compartir	ese	algo,	es	hacer	la	ofrenda	a	Gaia.
No	lo	olvidéis.
Muchas	veces	os	habéis	estancado	en	este	punto	del	camino.	Vivís	todos	los	días
experimentando,	pero	esas	vivencias	no	las	compartís	porque	estáis	trabajando
bajo	la	estructura	energética	del	pentágono.
Difícilmente	lo	que	pensáis	proviene	de	vuestro	Set-Ra,	sino	de	un	Set-Ra
colectivo	programado.	Así	que,	cuando	llegáis	al	Hor-Ra,	la	acción	se	queda	allí
encerrada,	sin	salir	al	exterior,	sin	ser	entregada	a	la	Madre	y,	como	enseña	el
ultimo	vórtice,	al	Infinito.
Estos	bloqueos	no	os	permiten	vivir	en	perfecto	equilibrio	y	armonía	ni	tampoco
sentiros	uno	con	el	Universo.	Hacer	funcionar	y	activar	el	Hor-Ra	es	sentir	la
importancia	que	tenéis	como	individuos,	como	gotitas	de	luz	que	cooperan	en	la
evolución	cósmica	para	Gaia	y	el	Creador.	No	os	subestiméis,	humanos,	volved
a	tomar	conciencia	de	vuestro	poder.	Cada	gota	de	luz	es	fundamental	en	el
proceso.
Muchas	veces	el	Hor-Ra	está	totalmente	cerrado	y	eso	se	refleja	en	aquellas
personas,	esquemas	o	sistemas	que	tienen	muchas	dificultades	para	llevar	a	cabo
algo.	Para	algunos	realizar,	hacer	nacer	el	fruto,	es	una	tarea	complicada	o	casi
imposible	y	de	aquí	surge	el	estancamiento,	la	frustración,	la	no-acción,	la
involución.
Cuando	la	energía	fluye	hasta	el	Hor-Ra	y	este	no	la	deja	pasar	por	estar
bloqueado,	vuelve	atrás	(involución)	recorriendo	los	tres	vórtices	anteriores
hasta	llegar	al	punto	de	partida,	borrando	toda	la	labor	hecha	hasta	ese	momento.
Este	proceso	es	muy	común	hoy	en	día.
Es	muy	importante	trabajar	este	vórtice	en	las	personas	y	en	la	sociedad:	es	la
clave	del	avance	y	del	progreso,	del	flujo	continuo	y	de	la	evolución.
Desbloquearlo	significa	volver	a	creer	en	vuestro	poder	de	materialización,
hermanos,	porque	los	resultados	se	hacen	visibles.
Es	devolver	alegría	y	autoestima	al	ser	humano,	es	incentivar	su	confianza	en	la
acción,	en	la	vida.
El	Hor-Ra	es	el	vórtice	de	la	sonrisa.	Activadlo,	humanos,	Gaia	lo	está	pidiendo.
Alegraos	de	vuestras	vivencias	y	compartidlas	con	la	Madre	que	os	está
acogiendo,	amando	incondicionalmente	y	deseando	seguir	aprendiendo	de
vosotros.
Realizad	y	compartid,	humanos,	ha	llegado	el	momento.
Antes	de	pasar	a	hablar	del	último	vórtice,	vamos	a	profundizar	y	explicar	el
concepto	del	“enraizarse”	en	la	Tierra	y	del	porqué	eso	es	tan	importante	en	este
momento.
Sabemos	que	es	algo	que	muchos	de	vosotros	ya	hacéis	conscientemente	y	que
hay	otros	que	lo	hacen	sin	pensar.	Enraizarse	en	Gaia,	desde	el	punto	de	vista	del
Or	Is	Ra,	es	conectar	el	Set-Ra	y	el	Hor-Ra	con	ella.	Hemos	visto	que	el	primero
piensa	y	crea,	y	que	el	segundo	materializa	y	entrega	la	acción	a	Gaia.
El	Set-Ra	funciona	a	partir	de	ella:	cada	cosa	que	pensáis,	ideáis	y	ponéis	a
disposición	de	vuestra	voluntad	antes	de	pasar	al	movimiento,	proviene	de	y	es
impulsada	por	la	energía	que	la	Tierra	os	entrega.
Ella	os	nutre	y	os	da	el	impulso	para	crear,	y	cuando	realizáis	algo,	se	lo
devolvéis.	Es	un	intercambio	constante:	Gaia	os	da	la	fuerza	y	la	energía	para
empezar	un	proceso	creador	y	vosotros	se	la	devolvéis	amplificada	para	que	ella
evolucione.
Hijos	de	Gaia,	honrarla	significa	compartir	con	ella	todo	lo	vivido	desde	el	amor
y	la	unión.	Ella	os	ama	y	os	honra.	Sois	su	instrumento	de	vida	y	de	evolución.
Amad	vuestra	experiencia	en	la	Tierra	y	ponedla	al	servicio	del	Creador.
Recordad	esto,	tomad	conciencia	del	papel	que	desempeñáis.	Estáis	al	servicio
de	Gaia	y	de	la	Fuente.	Enraizarse	es	permitir	el	flujo	conscientemente.	Sois
fundamentales,	sois	hijos	del	RA,	un	puente	entre	el	Cielo	y	la	Tierra.
AMÓN-RA
Es	el	vórtice	divino,	el	más	puro	y	sutil.	Representa	el	punto	de	conexión	con	el
Creador,	con	la	Fuente	y	con	el	macrocosmos.
La	acción	creadora	experimentada	se	impulsa	a	través	de	él	hacia	el	Origen.	Es
un	vórtice	sagrado	porque	expresa	la	profunda	relación	entre	el	Ser	y	el	Padre.
Como	hemos	visto	anteriormente,	es	fundamental	volver	a	entregar	la	energía	a
Gaia,	pero	también	es	importante	proyectarla	hacia	arriba.	El	Amón-Ra	es	el
vórtice	de	la	expansión	divina,	del	flujo	hacia	el	exterior.	Está	profundamente
conectado	con	el	centro	de	la	estrella,	con	O.	Acordaos	de	que	lo	que	es	arriba	es
también	abajo:	el	O	Padre/Creador	(la	fuente	exterior)	se	corresponde	con	el	O
interior	que	se	encuentra	en	cada	Ser.
Cuando	la	materialización	de	la	acción	se	ha	completado,	la	energía	se	impulsa
hacia	este	vórtice	que,	a	su	vez,	la	conecta	con	el	centro	O.	En	ese	momento
sagrado	todos	los	vórtices	pueden	llegar	a	la	fuente	interna	dando	lugar	a	la
implosión	antes	de	la	explosión	final.	Esta	es	una	fase	muy	poderosa	en	la	que	la
energía,	que	ha	completado	su	ciclo,	vuelve	a	conectarse	con	el	centro	y	lo	nutre.
El	momento	mágico	de	conexión	interior	se	llama	AKTA-RA	y	representa	el
instante	de	la	escucha,	del	sentir.	La	fuente	interna	se	alimenta	y	bendice	la	labor
de	los	cinco	vórtices:	es	la	toma	de	conciencia	y	la	iluminación	del	Ser.	Este	se
completa	entregando	la	energía	a	lo	creado,	impulsándola	verticalmente	hacia	la
Fuente.	Es	la	activación	total	del	RA.
El	Ser	interior	realiza	y	completa	el	ciclo	del	flujo	energético,	le	da	un
significado	y	lo	comparte	con	Gaia	y	con	el	Infinito:	es	armonía	y	equilibrio
puro.
El	RA	se	constituye	y	la	energía	empieza	nuevamente	su	ciclo	volviendo	a
“casa”,	a	la	creación	en	el	Set-Ra.
RESUMEN	DE	LOS	MOVIMIENTOS	PARA	LA	CONSTRUCCIÓN	DEL
RA
ESQUEMA	COMPLETO	DEL	RA
SET-RA:	creación,	voluntad,	pensamiento	creativo,	ideas.
PTIA-RA:	movimiento.
INT-RA:	conduce	el	flujo,	lo	regula,	sana,	corrige,	armoniza.
HOR-RA:	realización,	materialización.
AMÓN-RA:	impulso	hacia	la	fuente	interior	y	exterior.
Este	es	el	RA,	humanos.	Comprenderlo,sentir	su	esencia	y	activarlo	es
fundamental	para	el	Cambio.
Significa	fluir	con	vosotros	mismos	y	con	la	realidad	que	os	rodea,	funcionar
bajo	las	leyes	del	Creador,	alinearse	con	vuestra	misión,	sentir	la	unión	con	el
Todo,	en	equilibrio	y	armonía.	Es	para	vosotros.
Cada	cosa	funciona	así	y	cada	Ser	volverá	a	activarlo.
Que	así	sea.
1.3	Panteón	Egipcio
A	partir	del	RA	se	puede	ahora	explicar	la	parte	más	importante	de	la	mitología
del	antiguo	Egipto.
ISIS-OSIRIS:	son	el	padre	y	la	madre.	Juntos	simbolizan	el	equilibrio	puro,	el
eje	entre	el	Ptia	y	el	Int,	el	eje	del	panteón	egipcio,	el	equilibrio	de	la	Sabiduría.
HORUS:	es	hijo	de	Isis	y	Osiris,	el	fruto	del	Ptia	y	del	Int.	Es	la	experimentación
y	la	materialización.
SETH:	representa	la	conexión	con	la	Tierra	(con	el	infra).	Tiene,	a	veces,	una
faceta	“ambigua”.	Hemos	dicho	que	es	el	poder	místico,	el	mundo	de	las	ideas,
del	pensamiento,	y,	dependiendo	de	la	intención,	puede	crear	de	forma	“positiva”
o	“negativa”.	Por	esta	razón,	Seth	tiene	esa	dualidad:	es	un	dios	que	está	entre	el
Bien	y	el	Mal.	Es	muy	poderoso	y	recibe	a	las	almas	después	de	la	muerte,	en	su
regreso	a	casa.
AMÓN	RA:	es	el	Sol,	la	iluminación	del	Ser,	la	luz	que	ilumina	la	estrella.	Es	el
dios	más	divino,	el	que	está	más	en	conexión	con	la	Fuente.
Los	egipcios	decidieron	personificar	los	cinco	vórtices	del	RA	en	deidades	que
se	veneraban	en	los	templos.	Esta	es	la	explicación	del	panteón	egipcio.	El	RA
imperaba.
Os	recordamos,	humanos,	que	cada	vórtice	es	importante,	cada	uno	tiene	un
papel	fundamental.
Que	el	RA	se	active.	Ha	llegado	el	momento.
LA	ORACIÓN
Como	acabamos	de	explicar,	en	Egipto	el	RA	se	transformó	en	varias	deidades
veneradas	en	todo	el	país.
Era	tradición	rezarles,	obsequiarles,	adorarles	en	templos	y	ser	devotos	de	ellos.
Existían	muchas	oraciones	y	rituales	para	invocar	el	RA	y,	con	el	tiempo,	las
personas	empezaron	a	creer	que	este	era	algo	externo	al	proprio	ser	humano
cuando,	en	verdad,	reside	en	todas	las	cosas,	siendo	el	instrumento	que	el
Creador	bajó	a	la	Tierra	para	poder	experimentar.	Si	el	RA	era	algo	que	se
llevaba	dentro,	no	había	que	invocarlo,	sino	simplemente	tomar	conciencia	de	su
poder	y	de	cómo	utilizarlo.
Sí	es	cierto	que	los	grandes	sacerdotes	y	sacerdotisas	de	la	época	tenían	unas
claves	de	acceso	al	conocimiento,	unos	pequeños	símbolos	que,	pronunciados	y
trasformados	en	sonido,	creaban	una	vibración	que	constituía	la	llave	para	entrar
en	una	frecuencia	más	elevada	y	bajar	información	de	la	Sabiduría	antigua.
Estas	“oraciones”,	o	códigos,	no	eran	públicos,	sino	que	se	entregaban	a	unos
pocos	elegidos	que	se	encargaban	de	difundir	y	explicar	las	enseñanzas	de	los
maestros	de	Sirio	y	Orión.	Entre	estos	estaban	los	faraones,	que	los	hermanos	de
Egipto	consideraban	encarnaciones	del	RA	cuando,	en	realidad,	lo	único	que	los
diferenciaba	del	pueblo	era	que	poseían	los	códigos	sagrados	de	acceso	a	la
Sabiduría	de	las	estrellas.
La	oración,	en	este	caso,	era	entonces	una	herramienta	de	conexión	que	ayudaba
al	humano	a	entrar	en	un	estado	de	introspección,	pero	no	constituía	un	elemento
imprescindible	para	la	invocación	del	RA.	Este,	como	ya	hemos	dicho,	no	es
algo	externo	al	Ser,	así	que	no	había	que	invocarlo	ni	pedirle	nada.
Simplemente	había	que	honrarlo,	cuidarlo,	sentirlo	y	actuar	a	partir	de	él.
NOTA
Los	que	se	van	a	dedicar	a	acceder	directamente	al	conocimiento	sagrado,	a
bajarlo	a	este	plano,	transmitirlo	y	difundirlo,	y	todos	los	que	van	a	utilizar	el
método	para	activar	el	RA,	necesitarán,	como	pasaba	en	Egipto,	una	oración,	una
vibración	de	sonido	que	les	permitirá	conectarse	con	la	frecuencia	del	Or	Is	Ra.
Los	nombres	están	escritos:	parte	de	esta	llave	vibratoria	está	en	el	nombre	de	la
persona	¨elegida¨,	que	fue	grabado	en	unos	registros	y	que	constituye	una
poderosa	herramienta.	Los	que	no	se	dedicarán	activamente	a	la	difusión	de	este
OR	no	podrán	tener	acceso	directo	al	conocimiento,	pero	sí	podrán	escuchar
gran	parte	de	su	contenido,	transmitirlo	y	recibir	la	activación	del	RA.	Es
fundamental	que	todo	esto	se	respete.
El	Or	Is	Ra	es	para	todos,	para	la	nueva	Humanidad,	y	es	importante	que	los
seres	humanos	escuchen	los	pilares	de	este	método.	Los	encargados	de	bajar	el
Or	Is	Ra	a	la	Tierra	y	de	activar	los	RA	son,	de	momento,	muy	pocos.	Todos	los
grandes	maestros	o	sacerdotes	del	antiguo	Egipto	que	ahora	están	encarnados	en
este	espacio,	están	en	misión	y	preparados	para	recordar.
Respetad	las	pautas	dictadas,	es	fundamental.
EJEMPLO	DE	CLAVES	DE	ACCESO
Las	oraciones,	como	podréis	ver,	son	instrumentos	poderosos;	nos	conducen	a	la
meta	durante	el	camino.	Nunca	serán	peticiones,	nunca	serán	pronunciadas
mecánicamente.	Son	un	puente	de	acceso	a	un	estado,	una	vibración	o	una
frecuencia.	Son	algo	que	os	permite	abrir	una	puerta,	pero	a	partir	de	ahí	el	poder
creador	es	vuestro.
Humanos,	estáis	acostumbrados	a	un	significado	denso	de	la	oración.	Os	habéis
desconectado	desde	hace	siglos	de	su	poder.	Simplemente,	centraos	en	el	hecho
de	que	cuando	pronunciáis	una	oración,	estáis	entrando	en	contacto	con	un	plano
superior,	tanto	interior	como	exterior.	Desde	ese	estado	sutil	podéis	comunicaros
y,	sobre	todo,	sentir	vuestro	poder	creador.
1.4	Activación	del	RA	en	lugares
VÓRTICES	ENERGÉTICOS
Los	vórtices	energéticos,	en	el	caso	de	lugares,	son	sitios	con	una	alta	frecuencia
vibratoria	que	tienen	la	función	de	sujetar	y	anclar	la	rejilla	energética	de	Gaia
en	el	territorio	en	el	cual	se	sitúan.	Son	los	nodos	de	conjunción	de	esta	rejilla	y
es	muy	importante	que	estén	funcionando,	porque	el	tipo	de	energía	que	allí	se
concentra	es	la	que	se	distribuye	por	todo	el	territorio	que	controlan.	Digamos
que	son	como	distribuidores	energéticos	que	tienen	un	determinado	radio	de
acción:	toda	la	energía	que	se	acumula	en	ellos	es	la	misma	que	irradiarán	y	que
alimentará	las	zonas	de	alrededor.
Hay	que	destacar	que,	hoy	en	día,	la	mayoría	de	los	nodos	magnéticos
funcionan,	pero	no	al	máximo	de	su	potencial.	Activar	el	RA	en	ellos	quiere
decir	equilibrar	su	vibración,	mejorar	y	armonizar	toda	la	energía	que	de	ellos	se
propaga.	Así,	la	frecuencia	aumentará	y	mejorará	el	flujo	de	energía	en	las	zonas
limítrofes.	Esto	influirá	también	en	todo	lo	que	habita	en	el	radio	de	acción	del
vórtice	activado	según	el	RA	y	la	calidad	de	vida	mejorará	visiblemente.
En	algunos	casos,	los	vórtices	están	apagados	y	las	tierras	que	los	rodean	no
tienen	vida	porque	no	disponen	de	alimento	energético.	Son	zonas	que	sufren,	en
las	que	la	energía	está	estancada.
En	otros	casos,	los	nodos	están	controlados	por	el	sistema.	Controlar	un	vórtice
quiere	decir	utilizar	su	energía	conscientemente	e	introducir	en	él	un
determinado	tipo	de	información	o	intención	que,	consecuentemente,	se	propaga
por	todo	el	radio	de	acción	del	vórtice.	Es	como	si	este	fuese	una	antena	de	radio
sintonizada	en	una	estación,	emitiendo	constantemente	lo	mismo.	Los	habitantes
de	la	zona	podrán	oír	solo	la	información	emitida	durante	todo	el	día	y	se
nutrirán	de	ese	tipo	de	frecuencia.	Esto	se	llama	“programación”.	Es	ejercer
poder,	control	y	dominio	sobre	seres	que	responderán	a	los	estímulos	exteriores
en	función	de	cómo	se	les	eduque,	a	través	de	una	información	que	llega	a	sus
campos	magnéticos	sin	que	ellos	puedan	elegir	y	ser	conscientes	de	ello.	Es,	en
parte,	manipular	el	libre	albedrío	de	los	individuos.
Como	podéis	ver,	estos	vórtices	son	puntos	fundamentales	para	el	territorio
donde	están	situados.	Activar	el	RA	en	ellos	es	proporcionar	sanación	a	gran
escala	para	que	todo	el	mundo	se	beneficie	de	una	frecuencia	energética
armónica.	Con	la	activación,	si	el	nodo	está	apagado	volverá	a	funcionar;	si	ya
funciona,	potenciará	su	energía;	y	si	está	controlado,	dejará	de	estarlo	y	se
restablecerá	la	información	inicial.	Así	que	os	animamos,	sacerdotes,	a	practicar
activaciones	en	los	lugares	que	lo	necesiten.
LAS	PUERTAS	DIMENSIONALES
Los	portales	dimensionales	son	vórtices	energéticos	que,	además	de	tener	la
función	de	anclar	y	sostenerla	energía	de	la	rejilla,	son	puentes	y	puertas	hacia
otras	dimensiones	y	planos.	Una	puerta	dimensional	tiene	la	estructura	del	RA.
Sus	vórtices	son	muy	potentes	y	la	frecuencia	suele	ser	muy	elevada.	Siempre
hay	guardianes	custodiándola	para	limitar	y	filtrar	la	entrada	de	seres	“no
autorizados”.
La	Tierra	tiene	muchos	escudos	de	protección,	pero	quienes	regulan	el	flujo	de
entrada	y	salida	de	cualquier	entidad	son,	desde	fuera,	el	comando	estelar	de
Ashtar	Sheran	y,	desde	dentro,	los	guardianes	de	los	portales	dimensionales.
Hay	puertas	que	conectan	Gaia	con	otros	puntos	del	Universo,	puertas	que
conectan	un	punto	de	Gaia	con	otros	puntos	que	físicamente	están	a	miles	de
kilómetros	de	distancia	y	puertas	que	conectan	este	plano	con	ciudades	etéricas.
La	mayoría	de	los	portales	se	apagaron	de	forma	natural	con	la	llegada	de	la
noche	galáctica	y	otros	fueron	apagados	voluntariamente	para	proteger	el
territorio	de	visitantes	indeseados.	En	el	curso	de	la	historia,	muchos	portales
fueron	utilizados	de	forma	incorrecta,	manipulados,	controlados	y,	en	estos
casos,	se	practicó	de	forma	consciente	un	On	Ri	Ka	(este	concepto	lo
explicaremos	más	adelante)	como	instrumento	de	protección.	Hoy	en	día,
muchos	vuelven	a	abrirse	para	facilitar	la	entrada	de	nuevas	entidades	que	tienen
la	misión	de	venir	a	ayudar	en	el	Cambio.
Como	todos	los	portales	tienen	la	estructura	del	RA,	todos	se	pueden	activar.	¡Es
una	gran	responsabilidad!
Subrayamos	lo	siguiente:	la	activación	de	un	portal	solo	se	practicará	cuando	os
lo	pidamos	específicamente;	no	se	puede	activar	un	RA	en	lugares	donde	no
haya	existido	antes	un	vórtice	energético	o	una	puerta	dimensional.	Os
recordamos	que	siempre	se	aplicará	el	método	en	estructuras	que	ya	existen	y
que	solo	están	apagadas,	dañadas	o	bloqueadas.	Anclar	un	nuevo	RA	en	lugares
donde	nunca	existió	es,	de	momento,	una	tarea	imposible	para	vosotros.
Significaría	crear	desde	cero	los	vórtices	y	el	O:	esto	nos	corresponde	a	nosotros.
No	es	momento	de	cerrar	portales,	así	que	no	es	tiempo	de	practicar	el	On	Ri	Ka
en	ningún	lugar,	pero	si	fuese	necesario,	el	método	os	sería	dado.
De	momento	es	tiempo	de	iluminar	los	RA	en	personas	y	en	lugares	que	lo
requieren.
1.5	Construir	a	partir	del	RA
Antiguamente,	cada	construcción	se	erguía	a	partir	de	las	proporciones	que
ofrecía	el	RA.
La	estrella	de	cinco	puntas	se	compone	de	triángulos.	Los	arquitectos	egipcios
tenían	como	unidad	de	construcción	esta	figura	geométrica	y	la	del	círculo,	dos
elementos	básicos	y	sagrados.	El	triángulo	era	para	ellos	algo	místico	y
simbolizaba	el	equilibrio	capaz	de	materializar	desde	la	armonía.
Como	esta	figura	es	la	unidad	que	constituye	el	RA,	todo	lo	que	se	componía	a
través	de	ella	tenía	las	mismas	características,	la	misma	energía	y	el	mismo
poder.
Los	egipcios	erigían	monumentos	que	tenían	formas	geométricas	construidas	a
partir	de	la	suma	de	triángulos,	y	los	complementaban	edificando	columnas	que
simbolizaban	el	círculo	de	conexión	del	RA.	Nada	se	dejaba	al	azar.	Todo	estaba
perfectamente	estudiado	para	que	su	forma	fuese	estructurada	a	partir	del
triángulo,	para	que	sus	proporciones	fuesen	las	del	RA	y	para	que	el	círculo
estuviese	siempre	representado	y,	así,	recordase	la	conexión	con	la	Fuente.
Efectivamente,	las	construcciones	egipcias	eran	más	que	monumentos:	recogían
y	anclaban	energía,	creaban	un	campo	magnético	muy	poderoso	o	potenciaban	la
vibración	de	la	zona	en	la	cual	se	edificaban	(casi	siempre	en	nodos	magnéticos
o	en	puertas	dimensionales).	Así	que,	además	de	tener	una	función	estética	y	de
exaltar	el	poder	del	pueblo	egipcio,	servían	como	instrumentos	energéticos.
Las	personas	que	allí	entraban	se	beneficiaban	de	esa	vibración,	como	también
todo	lo	que	se	encontraba	alrededor	de	estos	edificios.	El	RA	existía	en	cada
cosa	y	reinaba	la	armonía.	Construyendo	se	anclaba	un	RA,	y	viceversa.	Las	dos
opciones	eran	válidas	y	muy	utilizadas.
Hoy	en	día,	los	expertos	creen	que	los	egipcios	edificaban	de	forma	muy
avanzada	considerando	los	medios	de	que	disponían.	Os	podemos	decir	que
dominaban	una	arquitectura	mucho	más	compleja	y	evolucionada	de	lo	que
podéis	imaginar.	Existían,	por	ejemplo,	edificios	en	los	cuales	se	creaba	e
introducía	un	tiempo	distinto	del	que	reinaba	fuera	de	sus	muros.	Esto	era
posible	porque	seguían	la	ley	del	tiempo	que	más	adelante	os	explicaremos.
Según	la	forma	que	tiene	un	edificio,	se	obtiene	un	determinado	ciclo	(ciclo	=
tiempo)	y,	si	se	decide	no	conectarlo	con	el	tiempo	que	existe	en	el	espacio
donde	es	construido,	el	monumento	seguirá	su	propio	ciclo	de	tiempo.
Queremos	recordar	que	cada	conocimiento	se	utilizaba	para	beneficio	de	la
sociedad	y	no	para	perjudicarla	o	dominarla.	Todo	estaba	pensado	para	potenciar
Egipto	desde	la	armonía,	el	bien	y	el	equilibrio.
La	arquitectura	egipcia	estaba	en	profunda	conexión	con	los	eventos
astronómicos.	Si	se	construían	edificios	al	servicio	del	poder	energético,	el
campo	magnético,	la	frecuencia	y	la	vibración,	el	movimiento	de	las	estrellas,
los	equinoccios,	los	solsticios	o	los	eclipses	también	influían.	No	solo	la	forma
era	importante,	sino	también	el	momento	y	las	condiciones	en	las	que	se
construía.	Así	era.
Dependiendo	de	la	fase	lunar,	el	momento	del	año	o	el	acontecimiento
astronómico,	el	edificio	absorbía	una	determinada	energía	y	vibración.	Todo
estaba	en	armonía	y	en	conexión	con	el	Universo,	con	la	Fuente	y	con	Gaia.	Hoy
ya	no	es	así.
Tenéis	la	costumbre,	humanos,	de	pensar	que	todo	lo	que	vino	antes	del
momento	presente	es	antiguo,	obsoleto	y,	en	consecuencia,	más	atrasado.
Os	cuesta	pensar	que	civilizaciones	que	estuvieron	en	la	Tierra	hace	miles	de
años	puedan	haber	sido	muchísimo	más	avanzadas	y	modernas	que	la	vuestra
actualmente.	Os	cuesta	creer	que	la	calidad	de	la	vida,	en	aquel	entonces,	era
mucho	más	alta	que	la	que	tenéis	ahora	y	que	la	tecnología	existe	desde	hace
milenios.
La	noche	galáctica	trajo	oscuridad,	entendida	como	un	velo	que	se	posó	sobre
esos	conocimientos	que	hicieron	brillar	la	civilización	atlante	o	la	egipcia,	por
ejemplo.
Una	época	dorada	está	a	punto	de	volver	y	muchos	de	vuestros	sistemas
cambiarán	o	se	adaptarán	a	lo	que	vendrá.	Otros,	como	ya	estáis
experimentando,	caerán	y	desaparecerán	para	siempre	porque	ya	no	son	acordes
con	la	vibración	y	la	frecuencia	que	Gaia	está	alcanzando.
Con	estas	breves	nociones	sobre	la	arquitectura	antigua	no	os	queremos	decir
que	tengáis,	de	golpe,	que	volver	a	construir	pirámides	o	monumentos	como	en
aquel	entonces,	pero	sí	os	queremos	enseñar	la	importancia	que	el	RA	tiene	en
cada	campo	y	lo	poderoso	que	puede	llegar	a	ser	este	instrumento	si	se	pone	al
servicio	de	la	construcción	y	de	la	arquitectura.
Humanos,	aprenderéis	de	nuevo	a	edificar	en	conexión	con	vuestro	Ser	y	con
vuestro	entorno.	Volveréis	a	sentir	y	entender	la	importancia	que	tiene	construir
creando	o	anclando	un	campo	vibratorio	armónico	y	beneficioso	para	el	entorno.
Comprenderéis	que	un	sitio	o	un	lugar	pueden	sanar,	simplemente,	gracias	a	la
energía	que	en	él	se	encuentra	y	gracias	a	su	frecuencia.
Acordaos	de	que	la	arquitectura	tiene	que	seguir	las	leyes	del	Universo	y	no	solo
leyes	humanas.	Es	una	ciencia	que	proviene	de	las	estrellas	y	que	estará	al
servicio	de	una	nueva	Humanidad	capaz	de	utilizarla	para	el	bien	de	todo	lo
creado.
Nosotros,	los	maestros,	instruimos	en	su	momento	y	os	ayudaremos	en	el	futuro.
Abríos	a	romper	esquemas,	recordad	y	aceptad	nuevas	reglas	que	os	permitirán
avanzar	y	evolucionar.	Que	se	empiece	con	la	RA-activación	en	lugares:	es	el
primer	paso	hacia	una	nueva	visión	de	la	arquitectura	y	de	su	poder.
2.	Int-Ra
2.1	Los	sacerdotes	en	Egipto
Sabemos	que	lo	que	hoy	os	rodea	está	muy	lejos	de	lo	que	rodeaba	a	los
sacerdotes	en	el	antiguo	Egipto.	Quien	se	iniciaba	en	las	enseñanzas	del	Or	Is	Ra
cumplía	un	protocolo	muy	estricto.	Este	“culto”	se	confundió	más	adelante	con
el	culto	a	Isis,	pero	originariamente	tenía	otras	características.
Isis	fue	la	primera	sacerdotisa	del	Or	Is	Ra	y,	junto	a	ella,en	su	tiempo,
trabajaban	los	maestros	de	Orión	y	Sirio.
Antes	de	que	llegara	la	noche	galáctica,	los	maestros	iniciaron	a	más	sacerdotes
con	los	cuales	cooperaban:	les	transmitían	todo	el	conocimiento	y	los	métodos
de	sanación.	Estos	fueron	los	elegidos	para	difundir	el	OR	de	generación	en
generación.
Llegó	un	momento	en	el	que	los	maestros	ya	no	podían	interactuar	con	los
humanos,	pero	gracias	a	la	labor	de	Isis	y	de	esos	primeros	sacerdotes,	parte	de
sus	enseñanzas	permanecieron	en	la	Tierra.
Los	iniciados	no	desarrollaban	su	trabajo	en	los	templos,	sino	en	las	cortes	de	los
reyes	y	de	los	faraones.	No	obstante,	estaban	directamente	en	contacto	con	el
pueblo	y	con	el	resto	de	la	sociedad.
Intervenían	en	las	obras	de	construcción	de	monumentos,	en	los	ciclos	de	las
cosechas,	en	los	tratados	y	las	relaciones	diplomáticas	con	otros	reinos	y	en	la
organización	de	la	economía	y	del	gobierno.	Sus	tareas	eran	muy	amplias	y
desempeñaban	un	papel	fundamental	en	la	historia	del	imperio	egipcio.
En	la	época	del	Or	Is	Ra	no	existían	guerras	ni	faltaba	la	abundancia:	todo	fluía
en	armonía	y	equilibrio	porque	la	sociedad	estaba	formada	por	pequeños	grupos
(vórtices)	que	colaboraban	entre	sí.
El	faraón	no	era	un	tirano	déspota	que	explotaba	a	su	pueblo,	sino	un	elegido	que
garantizaba	la	prosperidad	de	toda	la	sociedad.
Los	templos	se	construían	como	lugares	de	culto,	pero	los	sacerdotes	no	estaban
allí.
No	todo	el	mundo	tenía	acceso	a	las	cortes.	Mucha	gente	tenía	que	viajar	días
para	visitarlas,	así	que	se	decidió	construir	una	serie	de	pequeños	templos	por
todo	el	territorio	egipcio.	Allí	los	ciudadanos	iban	a	entregar	ofrendas,	pero	eran
construcciones	que,	principalmente,	tenían	la	función	de	anclar	la	frecuencia	del
RA	en	esas	tierras.
Los	grandes	templos	y	obras	de	arte	que	han	perdurado	hasta	el	día	de	hoy
fueron	edificados	sobre	grandes	vórtices	de	energía	o	portales	dimensionales.	La
mayoría,	actualmente,	están	apagados.
El	conocimiento	se	transmitía	de	la	siguiente	forma:	cada	sacerdote	elegía	a	tres
jóvenes	a	los	que,	durante	los	últimos	años	de	su	vida,	instruía	en	el	Or	Is	Ra
preparándolos	para	sus	futuras	tareas.
Había	sacerdotes	y	sacerdotisas.	Muchos	de	ellos	tenían	sangre	real.	Era	muy
común	que	el	segundo	hijo	de	un	matrimonio	real	fuese	iniciado	en	el	culto	y	se
hiciese	sacerdote.	Se	preparaba	para	ser	parte	de	los	“candidatos”	entre	los
cuales	un	sacerdote	veterano	elegía	a	su	sucesor.	No	estaba	prohibido	casarse	y
tener	familia.
Resumiendo,	los	sacerdotes,	en	el	antiguo	Egipto,	eran	unos	“elegidos”	y	tenían
una	existencia	normal,	al	servicio	del	OR	y	de	las	estrellas.	Podían	casarse,
formar	una	familia	y	relacionarse	con	cada	miembro	de	la	sociedad	(tanto	con	el
rey,	como	con	cualquier	persona	del	pueblo).	Podían	tener	su	propia	casa	o	vivir
directamente	en	la	corte	real,	donde	trabajaban	al	lado	del	faraón.
Desempeñaban	un	papel	fundamental	en	el	sistema	egipcio	y	tomaban	decisiones
importantes.	Sabían	de	arquitectura,	agricultura,	astronomía,	economía,	religión,
diplomacia	y	política,	porque	se	dedicaban	a	activar	RA	en	cada	campo,	no
solamente	en	las	personas.	Por	ejemplo,	el	gran	arquitecto	egipcio	Imhotep	fue
sacerdote	del	Or	Is	Ra.
Vivían	en	la	abundancia,	pero	sabían	ser	humildes.	Portaban	las	vestimentas
típicas	de	los	sacerdotes	y	llevaban	en	las	manos	el	Ank	y	el	Cop-Tá	(de	estos
hablaremos	más	adelante).	Se	dedicaban	a	ser	un	puente	entre	las	estrellas	y	la
Tierra.	Sus	misiones	eran	muy	importantes.
Hoy	vuelven	los	sacerdotes	con	la	misión	de	bajar	el	Or	Is	Ra	a	este	plano,	de
difundirlo	y	de	activar	los	RA	en	los	individuos	y	en	la	sociedad.
2.2	Poderes	sagrados	de	los	sacerdotes
Los	sacerdotes	egipcios	disponían	de	dos	instrumentos	de	poder	para	aplicar	los
métodos	de	sanación	y	activación:	el	Ank	y	el	Cop-Tá.
EL	ANK
El	Ank	es	el	símbolo	de	la	pureza	y	de	la	vida,	y	se	codifica	con	la	letra	alfa.	Es
un	símbolo	de	limpieza	espiritual:	entrega	claridad	a	todo	lo	que	toca.	Suele
limpiar	el	cáliz	y	llenarlo	de	tierra	fértil:	es	la	preparación	para	recibir.
Es	muy	importante	entender	que	estos	símbolos	fueron	entregados	a	Isis	y	a	los
sacerdotes	por	los	maestros	de	Sirio	y	Orión,	y	que	su	significado	original
trasciende	el	significado	que	tienen	desde	hace	siglos	en	este	plano.	Cuidado	con
los	“significados”,	humanos.
Tenéis	la	tendencia	a	querer	explicar	con	el	idioma	de	la	mente	algo	que,	a	veces,
va	muchísimo	más	allá	de	un	significado	o	una	explicación.	Los	símbolos	lo
demuestran.
Con	un	símbolo	se	expresan	conceptos	enteros,	son	la	síntesis	de	algo	que,	en
palabras,	ocuparía	páginas	enteras.	Los	significados	profundos	y	completos	de
un	símbolo	solamente	pueden	ser	entendidos	por	vuestra	alma.	Las	palabras	son
para	las	mentes,	los	símbolos	y	la	geometría	son	para	el	alma.
Así	que	no	os	preocupéis	si	no	“entendéis”	símbolos	o	códigos,	porque	seguro
que	vuestra	alma	lo	está	haciendo	y	de	forma	más	directa.	No	hay	que	hablarle	a
la	mente,	sino	a	vuestras	esencias.
No	os	perdáis	en	el	proceso	del	entendimiento,	de	querer	expresar	con	palabras,
de	querer	sintetizar,	porque	no	sirve.	Acordaos	de	que	una	palabra	es	un
significado	aparente	y	lineal	de	algo	más	profundo.
Los	símbolos	constituyen	mensajes	y	hojas	de	acceso	para	el	alma,	y	se	han
quedado	en	la	Tierra	desde	hace	eras	para	mantener	el	diálogo	con	vuestra
esencia.	Dejad	que	sigan	haciéndolo.
Volviendo	al	Ank	(“ankh”),	acordaos	de	que	su	significado	va	mucho	más	allá	de
las	palabras	y	de	cualquier	explicación.	Os	diremos	solamente	que	este	es	el
comienzo	del	todo,	el	principio	de	la	energía,	es	la	vida	que	fluye,	es	lo	que
prepara	la	acción	y	la	experiencia.	Es	la	letra	“alfa”	con	una	vara,	con	un	mango,
entregada	a	los	elegidos	como	instrumento	de	poder.
Simboliza	la	sanación	y	limpia,	prepara,	trasmuta,	absorbe,	recoloca	y
desbloquea.
El	Ank	está	conectado	con	el	poder	magnético	de	la	mujer	y	actúa	solo:	sabe
hacer,	por	sí	solo,	lo	que	hay	que	hacer.	Acercándolo,	por	ejemplo,	a	un	vórtice
del	RA	bloqueado,	sanará,	desbloqueará	y	limpiará.
Hay	que	dejarlo	actuar.	Es	un	símbolo	mágico	que	se	autorregula,	es	inteligente
y	muy	poderoso.	Se	“sujeta”	(se	recibe)	en	la	mano	izquierda,	el	Int-Ra.	Es	el
instrumento	de	Isis	y	la	sabiduría	magnética	que	actúa	por	sí	sola.
Sin	dejar	que	la	mente	intervenga	en	el	proceso,	dejadlo	fluir	y	expresar	su
potencial.	Representa	el	puente	entre	el	Ser	y	la	esencia	divina	y	se	conecta	con
el	plan	en	la	Tierra.	Amad	este	símbolo	porque	os	curará,	os	devolverá	la	vida,
entendida	como	ese	flujo	de	energía	continuo,	libre	y	consciente.
Es	el	instrumento	sanador	de	los	sacerdotes	que	se	utiliza	en	las	activaciones	y
sanaciones.
EL	COP-TÁ
El	Cop-Tá	es	la	letra	“omega”	situada	encima	de	una	vara	creando	un	bastón	de
poder.
Si	el	Ank	repara,	transmuta,	desbloquea	y	llena	de	tierra	fértil	un	vórtice,	el	Cop-
Tá	introduce	en	él	la	nueva	vibración,	la	frecuencia	y	el	conocimiento.
Contiene	la	información	que	llena	el	punto	energético	que,	de	este	modo,	subirá
su	frecuencia	y	se	activará.	Este	poder	se	“sujeta”	en	la	mano	derecha,	en	el	Ptia-
Ra,	representando	el	polo	masculino.
LA	SERPIENTE
Durante	la	época	dorada	de	Egipto,	cuando	todo	seguía	el	concepto	del	RA	y	los
maestros	de	Orión	y	Sirio	cooperaban	con	los	sacerdotes	y	con	Isis,	antes	de	la
llegada	de	la	noche	galáctica,	bajaron	a	la	Tierra,	de	visita,	naves	Nu
provenientes	del	planeta	Nibiru.
Los	Nu	son	maestros	de	la	genética	y	conocen	todas	las	técnicas	para
potenciarla,	manipularla	y	activarla.
En	ese	momento	histórico	llegaron	a	la	Tierra	para	estudiar	la	genética	humana,
modificarla	y	tomar	muestras	para	seguir	experimentando	en	su	planeta	de
origen.	Hay	que	reconocer	que	esto	ocurrió	varias	veces	en	la	historia	de	Gaia	y
de	la	Humanidad.
En	distintos	momentos,	los	Nu	bajaron	a	este	plano	con	sus	naves	y	con	sus
maestros	para	intervenir	en	la	genética	existente.	Llevaron	a	cabo	muchos
experimentos,	siempre	con	la	finalidad	de	crear	una	raza	humana	perfecta	o	de
potenciarla.Fueron	los	encargados	de	la	evolución	del	ADN	del	ser	humano	y
operaban	introduciendo	en	él	códigos.	Así	fue.
Realmente,	humanos,	hoy	en	día	sois	lo	que	sois	gracias	a	la	labor	que	los	Nu
desarrollaron	durante	muchas	eras	en	este	planeta.
El	protocolo	era	el	siguiente:	bajaban	a	la	Tierra	desde	Nibiru	y	se	quedaban
durante	un	tiempo	relativamente	breve,	durante	el	cual	realizaban	las
modificaciones	genéticas	necesarias	introduciendo	nuevos	códigos	en	el	ADN
humano	y,	a	la	vez,	recogían	muestras	para	volver	a	su	planeta	y	seguir
trabajando	en	la	formulación	de	nuevos	códigos	para	la	siguiente	fase	de
actualización	genética.
Cada	visita	de	los	Nu	era	una	actualización	del	sistema	genético	humano.
Una	de	estas	etapas	de	modificación	del	ADN	coincidió	con	el	periodo	en	el	cual
Isis	estaba	operando	para	difundir	el	Or	Is	Ra.	Cuando	visitaron	Egipto,	se
celebró	un	consejo	en	el	cual	los	maestros	de	Sirio	y	Orión	se	reunieron	con	los
Nu	para	explicarles	y	enseñarles	la	labor	que	estaban	llevando	a	cabo	en	la	nueva
tierra	con	el	Or	Is	Ra	y	con	su	aplicación.	Los	Nu	se	quedaron	impresionados,
sobre	todo	con	los	efectos	que	las	activaciones	de	los	RA	producían	en	las
personas	y	en	el	entorno.	Aprobaron	este	tipo	de	sanación	y	decidieron	apoyar	el
trabajo	de	Isis.
En	vez	de	actuar	sobre	el	ADN	humano	por	su	cuenta,	entregaron	los	nuevos
códigos	de	activación	a	Isis	para	que	los	integrase	en	la	técnica	de	activación	del
RA.	Así	fue.
Los	Nu,	prácticamente,	delegaron	parte	de	su	misión	en	la	Tierra	a	Isis	y	le
regalaron	el	poder	de	activación	y	actualización	genéticas.	Ellos,	a	cambio,
quisieron	llevarse	una	muestra	de	su	ADN	a	Nibiru	para	utilizarla	en	sus	futuros
experimentos.	Esta	muestra	para	los	Nu	era	muy	interesante	porque	contenía
información	genética	de	la	sangre	real	azul,	de	una	activación	realizada	por	ellos
y	de	un	RA	activo.
Los	maestros	de	Sirio	y	Orión	se	alegraron	mucho	de	este	intercambio.	A	través
de	las	activaciones	de	los	RA,	Isis	podía	practicar	también	una	activación
genética	potenciando	así	el	ADN	humano.
El	poder	entregado	por	los	Nu	se	llamaba	A-Núk	y	fue	transmitido	a	los	demás
sacerdotes	que	estaban	operando	en	ese	momento.
Así	que	al	Cop-Tá	y	al	Ank	se	sumó	el	A-Núk,	el	poder	de	la	serpiente.
El	primer	experimento	que	Isis	llevó	a	cabo	fue	sobre	un	árbol:	activando	su	RA
modificó	y	potenció	su	genética.	Digamos	que	el	A-Núk	es	un	poder	que
funciona,	sobre	todo,	en	las	activaciones	en	personas.	En	las	activaciones	en
lugares	potenciará	el	ADN	de	todo	lo	que	se	encuentra	en	esos	sitios	(plantas,
árboles,	animales,	etc.).
Humanos,	estáis	acostumbrados	a	hablar	de	los	Nu	de	forma	negativa,	pero	es
una	raza	que	desarrolló	una	labor	muy	importante	para	Gaia	y,	sobre	todo,	para
la	Humanidad.
Isis	colaboró	con	ellos	y	supo	aprovechar	positivamente	sus	enseñanzas	y	sus
conocimientos.
Esto	es	para	que	veáis,	otra	vez,	que	no	hay	instrumentos,	herramientas	ni
conocimientos	¨buenos¨	o	¨malos¨,	sino	que	todos	son	útiles,	solo	depende	de	la
intención	con	la	cual	se	utilizan.
Después	de	la	visita	de	los	Nu,	los	sacerdotes	poseían	tres	poderes	y	las
activaciones	se	hicieron	aún	más	eficaces.
Mirad	cuántas	razas	operaron	para	la	ampliación	y	el	perfeccionamiento	del	Or
Is	Ra.	Reconoced	su	eficacia	y	su	poder.
2.3	La	RA-activación
Sanar	es	un	proceso	muy	importante	y	requiere	una	profunda	entrega.
Llegará	un	tiempo,	humanos,	en	el	que	desaparecerá	la	mayoría	de	las	dolencias
físicas	y	emocionales	que	hoy	en	día	os	afectan	en	el	plano	denso	en	el	que	estáis
sintonizados.	Hay	que	estar	dispuestos	a	estar	sanos.
Durante	vuestro	día	a	día	estáis	sujetos	a	muchos	¨ataques¨,	aparentemente
¨externos¨,	que,	con	un	cuerpo	energético	no	perfectamente	funcional,	resultan
¨dañinos¨	para	vuestra	salud.
En	vuestra	realidad	3D,	estar	física	y	emocionalmente	bien	os	parece	algo	muy
complicado.	Hay	muchas	cosas	que	aparentemente	pueden	influir:	la
alimentación,	la	manipulación	del	Set-Ra	de	Gaia,	los	vampiros	energéticos,
falsas	creencias	y	paradigmas	(miedo,	ansiedad,	preocupaciones,	dependencia,
falta	de	autoestima,	de	conexión	con	vuestro	Ser	y	con	el	poder	creador),
educación,	etc.
Pero,	no	obstante	todo	esto,	que	es	una	ilusión,	estáis	aquí	y	habéis	aprendido	a
¨sobrevivir¨.
Vuestra	calidad	de	vida	parece	no	ser	de	las	mejores	hoy	en	día,	pero	la	buena
noticia	es	que	todo	esto	no	puede	privaros	del	libre	albedrío	o	destruir	vuestra
voluntad	de	evolucionar	y	despertar.	Restablecer	un	nivel	de	salud	física	y
emocional	equilibrado	colectivo	en	un	plano	3D	no	es	tarea	fácil,	pero	tampoco
imposible.
Ya	sabéis	que	en	las	últimas	décadas	se	han	introducido	muchas	herramientas
para	dar	inicio	a	este	cambio.	Todas	valen	y	cada	uno	de	vosotros	resonará	con
algo	específico.	La	RA-activación	es	un	instrumento	que	se	practica	una	vez	en
la	vida	y	que	provoca	efectos	muy	profundos	a	todos	los	niveles	(físico,
emocional	y	energético)	en	quien	lo	recibe.
Os	subrayamos	otra	vez	que	el	RA,	en	este	momento,	es	algo	fundamental	para
el	Cambio.
Os	hablamos	desde	la	experiencia:	el	Or	Is	Ra	es	un	conocimiento	que	proviene
de	las	estrellas	y	que	estuvo	en	la	Tierra	durante	muchos	siglos	en	el	antiguo
Egipto,	otorgando	a	este	reino	prosperidad,	armonía	y	equilibrio.	No	tenéis	que
acudir	a	una	RA-activación	simplemente	para	sanar	una	patología.	Acordaos	de
que	es	un	cambio	estructural	en	vuestro	cuerpo	de	luz	y	esto	significa	que,	una
vez	iluminada	la	estrella,	haber	tomado	conciencia	de	ella	y	haber	entendido
cómo	funciona,	los	efectos	se	darán	en	cada	campo	de	vuestra	vida,	llevando
vuestro	Ser	a	una	completa	transformación.	No	habrá	marcha	atrás.	Por	esto	os
repetimos:	“hay	que	estar	dispuestos	a	sanarse”	y,	sobre	todo,	a	ser	conscientes
de	que	vuestra	realidad	cambiará	después	de	una	activación	del	RA.
No	estamos	hablando	de	milagros	(que	en	algunos	casos	se	darán),	sino	de	tomas
de	conciencia	y	conexión	con	vuestro	Ser,	con	lo	creado	y	con	la	Fuente	divina.
Esto	cambiará	vuestra	forma	de	ver	el	mundo	que	os	rodea,	de	sentir,	de
reaccionar	y	de	tomar	decisiones.	Así	es.
SANACIÓN	PERSONAL	→	SANACIÓN	COLECTIVA	→	SANACIÓN	DE
GAIA
Ya	hemos	hablado	de	la	importancia	que	tenéis	como	individuos.	Sois	únicos	y
especiales	en	vuestra	esencia,	y	por	aquí	hay	que	empezar.	Gaia	decidió
evolucionar	y	os	necesita.	Alineaos	con	su	proceso	y	ayudadla	a	iluminarse.	Ha
llegado	el	momento.
Las	herramientas	están	aquí.	Ahora	depende	de	vosotros.
Amén,	hermanos.
RITUAL	DE	INICIACIÓN	(preparación	a	la	activación)
A	través	de	este	ritual	los	iniciados	preparan	su	cuerpo	y	su	mente	para	la
activación.
Antes	de	empezar,	se	coloca	un	cuenco	o	un	vaso	de	agua	en	el	suelo,	cerca	del
iniciado,	el	cual	estará,	durante	toda	la	acción,	sentado	en	una	silla,	con	su
espalda	recta	y	con	los	pies	bien	apoyados.
Después	de	una	breve	meditación	guiada	para	conectar	con	el	Ser	interior	y	con
el	corazón	de	la	madre	Tierra,	se	realiza	el	“ritual	del	conocimiento	de	las
estrellas”,	una	secuencia	de	movimientos	que	permite	armonizar	los	chakras	y
recibir	e	integrar	en	el	cuerpo	de	luz	la	frecuencia	del	Or	Is	Ra.
Con	el	humo	que	desprenden	las	hojas	de	la	acacia	al	quemarse	se	limpia	cada
vórtice	del	iniciado.
Para	cerrar	este	ritual	de	preparación,	los	asistentes	tomarán	el	agua	del	cuenco
previamente	colocado	entre	sus	pies.
El	agua:	aquí,	este	elemento	representa	la	pureza	y	la	limpieza	espiritual.
Tomar	agua	es	una	acción	simbólica	y	de	esta	forma	el	iniciado	comunica	al
Universo	lo	siguiente:	“tomo	el	agua	del	conocimiento	antiguo	y	lo	integro
en	mi	Ser,	me	limpio	interiormente	y	sano	mi	esencia”.
Antes	del	ritual,	el	agua	se	programa	utilizando	el	Ank	y	el	Cop-Tá.
La	acacia:	es	un	instrumento	fundamental	en	este	ritual.	Simboliza	el	árbol
sagrado	de	la	Sabiduría,	el	conocimiento,	la	pureza	del	alma	y	la	sanación
del	espíritu.	Fue	una	planta	muy	importante	para	muchas	culturas	durante
muchos	siglos.	En	el	antiguo	Egipto	era	el	árbol	de	los	dioses,	justo	porque
se	utilizaba	en	los	rituales	de	iniciación	para	las

Continuar navegando