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OR IS RA La enseñanza de Isis y la vuelta del RA © 2017 Gaia Vezzosi © 2017 Ediciones Amatista, S.L. C/ Francisco Martí Mora, 1 07011 Palma. Baleares. España Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con autorización de los titulares de la propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados pueden ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (artículos 270 y siguientes del Código Penal). ISBN Epub: 978-84-16977-19-2 ISBN PDF accesible 978-84-16977-75-8 ISBN: 978-84-944458-9-7 D.L.: PM 447-2017 www.edicionesamatista.com info@edicionesamatista.com Diseño y maquetación: Mario Zárate Moreras Ilustraciones de: Javier Garban Índice Gracias… Prólogo Conexión Con Gaia Cómo empezó todo Sobre Mí Introducción 1. Set-Ra 1.1 El RA 1.2 Los vórtices del RA 1.3 Panteón Egipcio 1.4 Activación del RA en lugares 1.5 Construir a partir del RA 2. Int-Ra 2.1 Los sacerdotes en Egipto 2.2 Poderes sagrados de los sacerdotes 2.3 La RA-activación 2.4. Zigut y On Ri Ka 2.5 Observaciones 3. Ptia-Ra 3.1 Aprender antes de transmitir 3.2 La Enseñanza 3.3 La Voz 3.4 Dudas y escepticismo 3.5 Consejos 4. Hor-Ra 4.1 Efectos de la activación del RA 4.2 Armonizar un ambiente 4.3 La cristalización 4.4 El sonido 4.5 El tiempo en la sanación Akta-Ra Soria La difusión del Or Is Ra Isis – Gaia La Verdad del Or Is Ra 5. Amón-Ra 5.1 Cambiar de ruta 5.2 El control 5.3 Cooperar 5.4 Los RA como antenas de conexión 5.5 Desde Sirián Conexión con el Cielo Estructura de este manual Gracias… Gracias a todos los que han asistido a mi despertar y que han estado acompañándome, aconsejándome y animándome cada vez que daba un paso importante en este camino maravilloso. Gracias a mis compañeros de viaje, con los cuales he compartido momentos únicos de unión, risas y disfrute llenando mi corazón de alegría. Gracias a todas las almas que, hasta ahora, se han cruzado en mi camino: aprendí de cada una de ellas, convirtiéndome en lo que soy. Gracias también a las que vendrán. Gracias a mi compañero de vida Javier por aceptar mi proceso desde el respeto y el amor incondicional. Gracias a mi familia, mi raíz sagrada de esta reencarnación, por haber creado ese ambiente de amor tan puro en el cual he crecido y del cual sigo disfrutando hoy. Gracias al Universo por ser tan perfecto. Gracias a Soria y a mi familia de luz por ser tan espectaculares y estar tan presentes… ¡cuánta delicadeza y amor he recibido! Gracias a todo lo que es. Gracias a la luz que brilla en cada Ser. Gracias a mí misma. Gracias. Desde mi corazón: Grazie. Prólogo La casualidad es aparente. Las personas que se mueven siguiendo su intuición, las así llamadas “señales” en el camino o energías afines a las propias, saben perfectamente que existe una especie de fuerza, de impulso, que lleva a vivir experiencias necesarias para el crecimiento y el desarrollo personal interior. Así fue para mí. Un querido amigo editor, aquí en Madrid, ciudad en la que vivo y trabajo como traductora, me habló de Gaia, una chica italiana, como yo, que vive en Madrid desde hace años, igual que yo, y practica una activación “extraña” llamada RA- activación, que se hace una vez en la vida y que no requiere esfuerzos constantes de meditación, métodos complejos de conexión con el Ser superior de cada uno ni implica la participación en cursos o seminarios aburridos que prometen grandes elevaciones. Suscitó curiosidad en mí y fui a ver su sitio web para descubrir si las informaciones llegaban a despertar mi interés. Se trataba de un conocimiento antiguo que se remonta a la Atlántida, que posteriormente se difundió en Egipto y luego desapareció. Siempre me ha atraído el gran misterio de la Atlántida y de la civilización egipcia, por lo que decidí conocer a Gaia y probar esta nueva experiencia, sin ninguna expectativa, pero abierta a lo que pudiera suceder. Gaia me gustó mucho desde el principio y la experiencia en sí fue extraordinariamente positiva para mí. Precisamente hoy se cumple un año desde entonces¹ , un año en el que mi Yo ha sufrido enormes sacudidas: estructuras y esquemas de pensamiento transformados, limpieza material y espiritual, cambios profundos. Sin demasiados esfuerzos me he desecho de viejos códigos que obstaculizaban el flujo armónico del cambio y soy una persona nueva. 1 Me refiero a la fecha en la que escribí el prólogo para el libro en italiano, junio de 2015. Después de la práctica, que en sí es muy sencilla, pero al mismo tiempo intensa, dejé a Gaia mi tarjeta de visita, intuyendo que el asunto no acabaría en ese momento, sino que nos veríamos de nuevo. Así fue: ella decidió mandar a traducir su libro a italiano, un libro canalizado en español por una italiana, y acudió a mí, ya RA-activada, confiándome esa tarea, bastante delicada. Puedo decir que traducir este manual a italiano² fue el complemento de un año rico en proyectos nuevos que vibran con una energía más sutil y rápida, la cual, si se utiliza a escala global, sin duda contribuirá a cambiar muchas estructuras mentales y a facilitar la evolución de la Tierra en este momento. 2 OR IS RA, L’insegnamento di Iside e il ritorno del RA. Publicado en Italia en marzo de 2016 por Anima Edizioni. Como decía al principio, parece que la sincronicidad de ciertos encuentros tiene un sentido, que existe una lógica energética universal más grande que nosotros, la cual, por resonancia, hace mover eventos y personas hacia direcciones y caminos inesperados y muy satisfactorios. Doy las gracias a Gaia y a los maestros del OR IS RA y estoy segura de que la estructura energética de la estrella la acogerán en Italia todos los que quieren crear un mundo nuevo, cambiar definitivamente para mejor muchos aspectos de su existencia y crecer en armonía con el prójimo y con Gaia la Tierra. Les deseo a todos una buena lectura de esta segunda edición española, revisada y energéticamente actualizada. Ilaria Trezza Conexión Con Gaia “Que Isis te acompañe en el camino y que la Sabiduría Antigua despierte otra vez en tu corazón. Eres hijo de Dios, de la Fuente, y a ella volverás. Amén” Cómo empezó todo Todo comenzó cuando asistí a un taller de Registros Akáshicos. Empecé a recibir información después de la iniciación y de la apertura de mi canal. Los Registros no solamente contestaban a las preguntas que yo les formulaba, sino que también empezaban a entregarme otro tipo de material, un material que estaba allí, a mi disposición, desde toda una vida, guardado en mis registros y listo para ser recibido, entendido, recordado y utilizado. Después de una primera fase de desconcierto, acepté lo que estaba viviendo sin juzgarlo y me permití recordar, entrando también en contacto con seres de otra dimensión que me ayudaron y me siguen ayudando en este proceso. Así es como accedí al OR IS RA y cuatro días después del taller de Registros Akáshicos, el 18 de octubre de 2012, ya estaba canalizando el manual. Durante un mes, sin faltar un solo día, me levantaba cada mañana y empezaba a escribir a mano. Solía “bajar” uno o dos capítulos cada jornada. A veces la información fluía con dificultad, otras veces sin problemas. En los primeros días me cansaba mucho, también porque tenía que acostumbrarme a la frecuencia y a la energía de toda esa información. Este es un “primer” manual, pues después de haberlo terminado entendí que era solamente una pequeña sección del OR IS RA y que más adelante (dentro de meses o años) recibiré más “capítulos”. Actualmente aplico el método en los talleres de RA-activación. Al recordar, mi velo empezó a deshacerse poquito a poco y entendí por qué estoy aquí, cuál es mi misión en este momento y cuáles son las tareas a realizar. Pude reordenar muchas piezas del rompecabezas de toda una vida. Todo esto lo decidí, lo elegí y lo pacté yo misma antes de reencarnar en este plano, y 2012 fue el añoen que decidí despertar, activarme, reconocer y aceptar mi misión. Para mí, Gaia Vezzosi, todo esto es relativamente “nuevo”, pero mi alma trabaja con el Or Is Ra desde hace muchísimo tiempo, colaborando con seres multidimensionales. Trabajamos en el retorno del Or Is Ra. Así que, desde mi esencia, mis recuerdos y mi corazón, os ofrezco este instrumento maravilloso de sanación y evolución, disponible para todos los que resuenen con él. Os recuerdo que para vosotros tampoco es algo nuevo: la Humanidad ya lo ha experimentado anteriormente y está escrito en sus Registros. Sobre Mí Nací en Milán, Italia, en 1983, pero actualmente vivo en Madrid. Desde pequeña siempre me han interesado las artes, el teatro y, en particular, la danza, a la cual tengo la suerte de dedicarme profesionalmente desde los 17 años. Gracias a mi profesión he viajado mucho y he conocido muchos países y culturas, pero España siempre ocupó un sitio especial en mi corazón. Los contactos con esta tierra empezaron en el año 2000, hasta que en 2007 decidí trasladarme definitivamente a Madrid en busca de un sueño, siguiendo mi intuición, mi corazón y mi pasión. Puedo decir que España me ofreció muchísimo más que la realización de un deseo, y sobre todo ha sido la cuna de mi despertar. 2012 fue un año muy importante y decisivo para mí. Desde el 1 de enero mi Ser, poquito a poco, como una flor que nace, empezó a despertar. Los cambios fueron muy profundos y, después de un intenso trabajo de aceptación y de amor incondicional, y gracias también a maravillosos compañeros de viaje, he llegado hasta aquí, a este estado de consciencia que me permite fluir en mi existencia desde el amor, la conexión con mi Ser, la verdad, creando mi realidad en cada instante, sintiendo mi esencia, compartiendo conmigo misma, con los demás, con Gaia y con el Infinito todo lo que experimento, sintiéndome un granito de arena de esa maravillosa nueva Humanidad que hoy se está gestando. También es verdad que antes de 2012 tuve algunas señales de este “despertar”, pero fueron casos aislados que me venían a anunciar lo que me iba a suceder. ¿Qué quiere decir esto? Que no he sido ninguna niña prodigio: nunca he tenido dones particulares, como la telepatía o la capacidad del médium, nunca he visto auras ni espíritus, leído el futuro o levitado objetos. Hadas, ángeles y elfos existían, para mí, en mi imaginación y en las películas de Disney. Siempre me he dedicado a ser “normal” y única. No obstante, aquí estoy. He llegado a este punto simplemente porque un día me levanté y, después de tantos viajes al extranjero, decidí realizar uno que nunca me había atrevido a vivir: el viaje a casa, a mi Universo interno, a mi Yo, a mi Ser y a mi esencia. Allí encontré todo esto. Todo está dentro de nosotros. Os lo cuento para que entendáis que, hoy en día, hablar de seres multidimensionales, dimensiones, planos, consciencias despiertas, extraterrestres, guías espirituales, maestros, misiones, herramientas para el cambio, portales, naves, evolución, etc. tiene que llegar a ser algo normal porque todo está ahí, a nuestra disposición, y cada uno de nosotros puede acceder a ello simplemente permitiéndose conectar con su Ser y evocar el recuerdo en los momentos en que necesitemos hacerlo. Todos tenemos los instrumentos porque somos maestros de nosotros mismos, y todo es posible. Lo más bonito es llegar a compartir nuestra maestría con otros hermanos. Ya de muy pequeña pasaba horas mirando las estrellas, los mapas del Universo y las constelaciones, y ahora conozco el porqué. Esta soy yo, Gaia Vezzosi, un Ser que siempre amó bailar, escribir y hablar de estrellas, y lo seguiré haciendo en los años venideros. Introducción Orión es una constelación que se encuentra a años luz de nuestro planeta Tierra. Fue la encargada de elaborar y redactar un conocimiento que se entregó a los hijos de Gaia en el umbral entre la era de Virgo y la era de Leo. En aquel entonces, el mundo atlante estaba a punto de decaer. La Humanidad necesitaba una nueva Sabiduría, una herramienta moderna para entrar en la Era que estaba a punto de empezar. Los esquemas y conocimientos atlantes habían sido muy valiosos y eficaces durante muchos siglos: sobre ellos se había fundado un imperio potente y maravilloso, el reino de Atlántida, y habían garantizado a los humanos años de luz, paz, unión y armonía. En el 12.532 a.C. estos principios empezaron a corromperse. Fue una fecha clave para el declive de la Atlántida. La lucha de poder entre los atlantes había alcanzado un estado muy crítico: era el fin de un ciclo y la noche galáctica asomaba por el horizonte. Los Azules, reyes provenientes del espacio cuyos descendientes se habían repartido el dominio de la tierras de Gaia, al ver esta situación elaboraron un plan para salvar su descendencia y sus conocimientos en la Tierra antes de la llegada de la noche galáctica, así que eligieron a Isis, hija de Om-Ra y sacerdotisa de un templo atlante. Isis, de sangre real, reunía tres características fundamentales: su genética era pura, pues descendía de los Azules, conocía la Sabiduría atlante (el OR antiguo) e iba a ser la portavoz de la nueva Sabiduría en un nuevo mundo. Este nuevo Saber (nuevo OR) provenía de los maestros de Orión y, en aquel entonces, solamente a una mujer le fue permitido recibirlo: Isis iba a ser, y lo fue, el “cáliz” del conocimiento de las estrellas. Desde ese cáliz, la futura Humanidad tenía que “beber” y adquirir el OR que iba a constituir las bases de un nuevo mundo en un tiempo nuevo. Estaba claro que el reino atlante iba a llegar a su fin e Isis era consciente de que tenía que migrar a otras tierras, buscar un lugar adecuado donde establecerse y difundir sus enseñanzas. Cuando en Atlántida se difundió la noticia de que una sacerdotisa iba a ser la encargada de divulgar el OR antiguo junto a uno moderno, en un nuevo mundo, los maestros atlantes se rebelaron creyendo que Isis y la nueva Sabiduría iban a poner en peligro sus dominios y sus roles en la sociedad. Creyeron que una mujer iba a ser la verdadera causa de lo que ya estaba anunciado: el declive de Atlántida. Queriendo conservar sus poderes y preservar el OR atlante, los maestros expulsaron a Isis del reino poco antes de que este se hundiera. Ella emigró a Europa, recorrió todo el territorio y los hermanos de Sirio la guiaron en su peregrinación (de aquí el icono de la estrella cometa de cinco puntas que guía en el camino). Isis llegó a África y se estableció en Egipto. En estas tierras empezó a difundir el nuevo conocimiento y, justo por eso, el reino de Egipto fue muy poderoso durante mucho tiempo: estaba fundado en la Sabiduría, en conceptos y principios de los hermanos mayores de Orión, y poseía herramientas modernas para un tiempo nuevo que las requería. Cuando Isis dejó este plano fue venerada como una diosa y sus enseñanzas fueron transmitidas, durante muchos siglos, a través de su culto (el culto a Isis), que se propagó más allá de las fronteras de Egipto y del norte de África. Más tarde, el culto a Isis evolucionó hasta convertirse en el culto a la Diosa, un culto pagano que tuvo mucha influencia sobre todo en Europa, Asia occidental y norte de África. Perduró hasta la llegada del cristianismo, que se encargó de suprimir la importancia de la mujer y de lo femenino en la sociedad. Ya no se consideraba oportuno que la gran Sabiduría pudiese “emanar” solo del cáliz (lo femenino). Jesús, realmente, era fiel a este concepto, pero la historia nos enseña que con la llegada de Pedro este principio básico y fundamental fue totalmente distorsionado. Era María de Magdala, en las ceremonias que Jesús practicaba, la que sujetaba y ofrecía a los asistentes el cáliz de “la nueva y eterna abundancia”. El cáliz contenía, simbólicamente, el agua de la Sabiduría, un conocimiento brindado por los hermanos mayores de las estrellas a la nueva Humanidad. El OR más “puro” fue divulgado en Egipto: todavía no había llegado la noche galáctica e Isis, junto asus descendientes y a sus primeros sacerdotes elegidos, pudo trabajar en estricto contacto, en este plano, con los maestros de Sirio y Orión. Fueron siglos de aprendizaje. Los hermanos mayores colaboraron directamente con los humanos porque sabían que el velo se iba a posar pronto sobre Gaia y su intención era la de dejar todas las nuevas herramientas en la Tierra para que pudiesen ser utilizadas de forma correcta. Así sucedió. Isis fue la gran sacerdotisa y diosa del antiguo Egipto. Hizo de puente entre las estrellas y este plano. Su Sabiduría perduró por siglos y fue custodiada durante mucho tiempo. Este OR nunca se perdió, parte de él siempre estuvo en la Tierra y fue transmitido de generación en generación. Solamente las partes más puras y sagradas fueron veladas y custodiadas hasta hoy. El humano no pudo tener acceso a esta otra sección de la Sabiduría porque no podía entenderla. Desde el antiguo Egipto los libros originales fueron retirados en las naves AS (comando estelar de Ashtar Sheran) y llevados a su origen, Orión. Ahora es tiempo de recordar, de volver a difundir el conocimiento antiguo, de acceder a él y transmitirlo. Ha llegado el momento, hermanos, porque para vosotros fue creado y para vosotros fue retirado de Gaia y protegido. Los maestros sabían que iba a poder bajar de nuevo a este plano y ser utilizado en el nuevo umbral. El lugar es aquí, el tiempo es ahora. Es para vosotros. Constituye la herramienta para el cambio. Los seres de Sirio son los encargados, junto a otros hermanos y maestros, de poner en práctica el plan en la Tierra. Gracias a su labor, el Or Is Ra baja a Gaia de nuevo. Existen “elegidos” que se encargan de acceder a esta información y de bajarla a este plano en este momento. Gracias a ellos podréis conectar con la fuente de la enseñanza y de la Sabiduría de Isis. Gracias, hermanos, por estar aquí, gracias por vuestra labor en el cambio. Gaia evoluciona y necesitáis otras herramientas. El velo se deshace y una Nueva Humanidad toma conciencia de sí misma. 1. Set-Ra 1.1 El RA LA ESTRELLA DE CINCO PUNTAS La base del Or Is Ra es una estructura energética geométrica: la estrella de cinco puntas. Los maestros de Sirio y Orión han operado en la Tierra sobre todo a través de la geometría sagrada, pero podemos decir que el concepto base de su geometría es el RA. Esta figura tiene cinco puntas que corresponden a cinco vórtices energéticos. El 5 es entendido aquí como número mágico de equilibrio, perfección, armonía y sanación. Normalmente, hasta ahora, cada vez que el ser humano ha hablado de esta figura, siempre la ha relacionado con los cinco elementos: fuego, aire, tierra, agua y éter. Ahora es tiempo de añadirle significados más profundos. Para Orión y Sirio, el cinco es un número de conexión. Con cinco vórtices de energía se pueden abrir portales que conectan con otros planos, controlar una puerta dimensional, “bajar el Cielo a la Tierra” y al revés, pero este último concepto lo explicaremos más adelante. El “otro poder” ha utilizado muchas veces este número para incrementar su fuerza, su poder, su dominio y su saber intelectual a través de la estructura energética geométrica del pentágono. Pero la simplificación a un pentágono es una explicación parcial y lineal de un concepto muchísimo más profundo. Los humanos siempre supieron que con cinco vórtices energéticos se podía aumentar o disminuir (dependiendo de la intención) la frecuencia o el campo electromagnético de una persona, un lugar, un sistema, etc. El pentagrama, como bien canalizó, divulgó, utilizó y enseñó Pitágoras, es un elemento armonizador: de él deriva la proporción áurea que armoniza y entrega una vibración elevada a todo lo que se construye siguiendo sus leyes “mágicas”. Es un instrumento muy poderoso y ya tenéis muchos ejemplos de ello en construcciones, catedrales y templos antiguos. Leonardo da Vinci aplicó el pentagrama al cuerpo humano (el hombre de Vitrubio) y lo reflejaba en sus pinturas y esculturas porque, efectivamente, el cuerpo humano, en sí, está diseñado siguiendo estos cánones. Muchas veces uno de los vórtices energéticos no funciona bien o está completamente cerrado y la energía no puede fluir, ni trabajar al máximo de su potencial. Activar el RA es justo restablecer el buen funcionamiento de todos los centros energéticos, pero de esto hablaremos más adelante. EVOLUCIÓN DE UN PENTÁGONO A UN RA El pentágono es una simplificación del RA. Dibujando esto y nada más, no se está considerando la totalidad de los elementos ni la conexión de ellos con la Fuente y con el entorno. Se está simplemente hablando de un flujo de energía cerrado, estricto, estable, que siempre se repite igual a sí mismo una y otra vez. Digamos que es un circuito estéril, totalmente desconectado de la Fuente y de su centro. Sus extremos pueden enlazarse entre sí solamente de una forma lineal: el vórtice 1 puede volver a sí mismo solamente pasando por los vórtices 2, 3, 4 y 5. El pentágono es bueno para encerrar, encasillar, estancar, dominar y condensar energía que, no fluyendo, se relaciona con su exterior sin armonía, de manera muy estructurada, no abierta a la fluidez y a la escucha. Esta figura energética geométrica, utilizada en la realidad 3D, es una imposición de paradigmas: impone lo que contiene porque no hay un devenir, una posibilidad de evolución. Es la síntesis geométrica del concepto del “así soy y así os lo impongo”, y bajo esta estructura han funcionado muchos de los sistemas, gobiernos y personas que han operado en los últimos siglos en vuestro plano. Es tiempo de evolucionar, y para que el pentágono evolucione el primer paso es conectar sus vórtices con su centro, que llamaremos Punto O, el punto de origen interior. Cuando cada vórtice vuelve a su centro, la conexión con los demás es inmediata: el punto 1, por ejemplo, para conectar con el punto 4 no tendrá que pasar por 2 y 3, sino que transitará solamente por el punto O llegando de forma más rápida y directa a su meta. El flujo de energía es más fluido. Conectarse con O es el primer paso de la evolución, porque para “espirar” primero hay que “inspirar” e ir hacia dentro, donde reside el conocimiento del Ser y la verdad. Conectar con la información que O contiene es conectar con la propia esencia, adquirir así mayor poder y energía, aumentar la vibración y despertar la consciencia del uno antes de brindarla al Infinito. Muchas veces cumplir este movimiento, volver hacia dentro y tomar conciencia de O crea numerosos bloqueos. Los motivos suelen ser los siguientes: no saber dónde está el centro, no querer escucharlo por miedo a las consecuencias, no querer vibrar mejor, no querer aceptar el cambio prefiriendo el estancamiento porque, claramente, conectarse con el Origen interior presupone una evolución que hay que estar dispuestos a asumir y cumplir. Hemos dicho que conectando los extremos con su centro, la energía fluye mejor y más rápidamente. El campo magnético se expande y aumenta, entregando mayor poder a la figura del pentágono. Este es un concepto muy simple, pero muy olvidado en vuestros tiempos. Para “hacer” más hay que ir hacia dentro. El ser humano, en las últimas eras, ha aprendido que, si quiere obtener mayores efectos en su realidad 3D, tiene que empezar a ir hacia fuera, a actuar más, a hacer más cosas: debe empezar a buscar en su exterior y a poner el foco de su atención en algo que está fuera de él. Cuanto más quieren algo los humanos, más se esfuerzan por conseguirlo, pero ese esfuerzo está totalmente enfocado hacia el entorno. El humano sigue la ley del esfuerzo y del sacrificio, actuando en su realidad con más esfuerzos para recoger más frutos. Esto ha sido válido durante mucho tiempo, pero el ser humano no consideraba un paso importante que muestra la geometría sagrada: para “hacer” más y “obtener” más, primero hay que ir hacia dentro, hay que conectarse con el propio centro e incrementar la fuerza y el poder. Aumentando la vibración y el campo magnético de algose producen cambios en la realidad que rodea ese algo. Bien, así funciona: si queréis cambiar vuestra realidad y obtener más de ella, tenéis que evolucionar, y el primer paso es conectar con O. El siguiente paso es aprender a dejar que toda la información que se genera en O fluya hacia el exterior y, para que esto ocurra, primero hay que escuchar. Escuchar no significa “entender”, que es traducir en el idioma de la mente el lenguaje de O, de la fuente interior, pero en la mayoría de los casos esto es imposible porque la información se reduce y se limita. Escuchar es sentir. Hoy en día, los humanos han logrado expresar con palabras lo que sienten, pero esto solo puede ocurrir cuando ese algo que se ha “sentido” ha sido asimilado, grabado en cada célula, expandido al cuerpo de luz transformándose en “emoción” y, solo entonces, expresado a través de un sonido. Este último, por fin, da luz e ilumina la emoción, creando un flujo armónico de energía del interior al exterior y de fuera hacia dentro. El sonido suele volver a evocar la expansión que se acaba de producir. Todo esto, en la mayoría de los casos, se da sin que la mente interfiera. Sentir es mucho más rápido que entender, todo está a otro nivel. Por esta razón, “expresar”, producir un sonido después de haber sentido algo desde vuestro centro, es algo mucho más poderoso que empezar por el sonido para sentir ese algo. Esto supone haber pasado por O y haberse conectado con la fuente interior: el Universo funciona así. “Expresar con el corazón” es una frase que utilizáis mucho y que tiene aquí su explicación. No se puede codificar y hablar de algo sin antes haberlo sentido y experimentado. Los efectos no son los mismos. Una vez que se crea un diálogo entre los vórtices y el centro, el siguiente paso para la evolución es poder expandir ese sentir lo más lejos posible y volver a conectarlo con el entorno, con el espacio y con el Infinito. Es la expansión después de la implosión. Cada movimiento tiene que volver a la Fuente original porque así funciona Dios, así experimenta el Creador. Todo vuelve al Origen después de haberse vivido, y así tiene que ser. Cumplir una acción, un movimiento, quiere decir compartirlo con el Infinito, entregarlo otra vez, expandirlo y, de esta forma, ocurren dos cosas importantes: la información viaja de nuevo a la Fuente y, al mismo tiempo, se propaga a todo lo que existe, incrementando el aprendizaje y la experiencia colectiva. Por esto todos somos Uno. El movimiento, el flujo de energía, se comparte con el Creador y con lo creado. Somos gotas de luz: todo lo que sentimos y experimentamos se propaga y es fundamental para nuestro entorno, que de eso se nutre. Se puede experimentar de forma directa o de forma refleja: “YO HAGO” o “YO ME NUTRO DE LA INFORMACIÓN QUE ME VIENE DE LOS DEMÁS”. En los últimos siglos el hombre se ha desconectado totalmente de su centro, rompiendo la figura de la estrella, del RA. Se ha limitado a funcionar bajo la estructura energética del pentágono, desconectándose del entorno y, sobre todo, de la Fuente. Se han creado sociedades y esquemas fundados por individuos centrados y encerrados en sí mismos con un flujo de energía muy estricto y limitado. Sin conexión con el interior ni con el exterior, las comunicaciones, las relaciones y las conexiones se han hecho muy difíciles. El campo magnético y la vibración de todo disminuyeron y los flujos e intercambios de energía se hicieron casi inexistentes. No se trata de juzgar, pero tuvo que ser así. Ahora entenderéis a las sociedades de los últimos siglos: sistemas con tendencia a imponer, centralizar, manipular la información, detentar el poder sembrando desconfianza e individualismo. Es tiempo de que el RA vuelva a funcionar en cada Ser para que la energía vuelva a fluir en equilibrio y armonía. En el antiguo Egipto este era el esquema energético que existía en cada cosa. Cada Ser tenía su RA activo y perfectamente funcional. La sanación que se practicaba en esos tiempos consistía justo en establecer el perfecto funcionamiento del RA en personas, edificios, lugares, en la sociedad, en sistemas, gobiernos, etc. Imperaba el RA, el flujo armónico de conexión con el O interior y con la Fuente. Todo fluía y estaba alineado con su esencia. La integridad del RA era la perfección y su poder creador era infinito. Este concepto es, ahora, la base para la nueva Humanidad, y cuando un Ser active su RA liberará la energía estancada y se quitará el velo. Es un instrumento para el cambio. Así es. Que el OR de Isis descienda en vuestros corazones. Es el momento. 1.2 Los vórtices del RA PTIA-RA En el cuerpo humano se sitúa en la mano derecha, que es un centro energético muy potente y se asocia al movimiento. Es el vórtice “padre”, la fuente del poder masculino. El Ptia-Ra, en sí, representa el fuego, la chispa, es el fluir. Domina los excesos y sabe bajar a la tierra todo lo que está demasiado proyectado hacia arriba. Los egipcios asociaban este vórtice a la figura del caballo. Se desarrolla a partir de los catorce años de edad: es el centro energético que os entrega el poder de vuestra vida, y se termina de desarrollar justo en la época en la que cogéis las riendas de vuestra existencia y empezáis a querer experimentar vuestra realidad por vosotros mismos. Es la madurez atrevida, el primer paso de una idea hacia la acción. Todavía no constituye la meta: no es la cosa, es el movimiento hacia ella y es fundamental en cada proceso de materialización. Al igual que a un caballo, domarlo no es fácil. Hay que marcar unas pautas a este poder y luego dejarlo fluir sin enjaularlo, enmarcarlo o domarlo del todo. Esto es algo que vosotros, los humanos, todavía no sabéis manejar muy bien. El Ptia-Ra no se deja controlar. Utilizarlo correctamente significa no imponerse a él, sino dejarlo fluir hacia donde os gustaría que os condujera, pero siempre os sorprenderá. Os llevará hacia vuestra meta a través de un movimiento inesperado y creativo. Dejadle crear y materializar el movimiento a su manera. Un hipercontrol de este vórtice lo reduce a cero y a la no acción. Pensad en un caballo en libertad que siempre os llevará donde queráis, pero que siempre necesitará sentirse libre para correr y en conexión con su esencia indomable. Se aconseja un diálogo profundo con este vórtice, confiad en él. Entregadle el poder de decidir él mismo cómo moverse, el hacia dónde lo marcaréis vosotros. Es un poderoso aliado y colaborador. El Ptia-Ra se puede encontrar en el cuerpo humano, en un edificio, en un lugar, en un sistema, en una sociedad o en un pequeño grupo de personas, siempre colaborando armónicamente con los demás vórtices del RA. Hoy en día, el humano ha explotado el poder del Ptia-Ra y, en general, se dota a la palabra “poder” de un significado ambiguo y muchas veces de rechazo. Quien hoy ostenta el poder, controla en vez de guiar como lo haría un Ptia-Ra activo. Últimamente, el mal funcionamiento de este vórtice es visible en cada cosa y el consecuente desequilibrio es evidente. El control provoca que este centro se cierre y no quiera seguir con la tarea. Por eso es tiempo, humanos, de aprender a fluir, de confiar en el poder del movimiento, de sorprenderse junto a él y, con él, dialogar. No hay que imponer, sino sugerir, y de ahí esperar que el movimiento surja como quiera hacerlo. Claramente os daréis cuenta de que el patrón de movimiento que sigue el Ptia-Ra es ordenado, armónico y fluido y, justo por eso, podéis confiar en él. Nunca reaccionará, siempre que esté funcionando correctamente, de una forma desequilibrada que pueda comprometeros. Su símbolo es una espiral, un movimiento armónico hacia algo que se materializa durante el andar. Es un fluir constante hacia una meta. Queremos subrayar un concepto muy importante antes de seguir con los demás vórtices: el RA funciona o no funciona, no hay más que entender. Su perfecto funcionamiento depende de los cinco vórtices, de la conexión con O y del flujode información de O hacia fuera, creando el campo armónico circular de conexión con el Infinito. Una pequeña disfunción de algún punto energético es suficiente para que el RA quede, digamos, totalmente apagado. Por este motivo la activación del RA es algo muy profundo y requiere un trabajo intenso. Estaréis pensando, por ejemplo, en el sistema de chakras, pero estamos hablando de algo muy distinto. Un chakra puede estar parcialmente bloqueado u obstruido y aún así, con la proporción de él que esté abierta, puede seguir funcionando, aunque con menor eficiencia, mientras el sistema completo de chakras siga existiendo y esté activo. El RA no funciona así: si los vórtices no están todos activados al máximo de su potencial, la estrella no se constituye. Estaríamos aquí en la fase “pentágono” y la información seguiría fluyendo de forma lineal. Tenéis que imaginaros un interruptor: gracias a él, la luz está encendida o está apagada, pero no se puede regular la intensidad. Por eso “sanar”, en el Or Is Ra, quiere decir activar. Con el paso del tiempo, un vórtice disfuncional perjudica a los demás puntos y causa un apagón general. El primer paso hacia la completa activación del RA es volver a encender todas las bombillas para que las cinco estén iluminadas y, a partir de ahí, trabajar su conexión con O (fuente interna y externa). Con los vórtices disfuncionales, apagados, parcialmente obstruidos o bloqueados, lo único que sigue “dibujado” es el sistema pentagonal, el que tenéis actualmente. También es verdad que una vez activados los vórtices y la estrella completa es muy difícil que esta se vuelva a apagar. Una vez llevada a cabo la RA-activación no será posible volver a dañar el sistema del RA. No penséis que este sistema se daña con una enfermedad o con una emoción negativa. Su desaparición es fruto de muchos siglos de cambios estructurales en vuestros cuerpos de luz y la noche galáctica apagó los RA existentes. Así tuvo que ser. La estructura de la estrella siempre existió, pero ha estado apagada. Iluminar el RA es iluminar vuestro Ser, tomar conciencia de vosotros mismos y de la Fuente. Hoy es tiempo de volver a brillar, hoy es tiempo de la RA- activación y de volver a ese estado de consciencia que reinaba en Egipto gracias a las enseñanzas de Isis, provenientes de Sirio y Orión. Ha llegado el momento. Que así sea. INT-RA En el cuerpo humano, el Int-Ra está situado en la mano izquierda. Es uno de los vórtices más poderosos y lo llamamos “regulador” porque tiene la propiedad de transmitir energía a los demás puntos y regular su flujo. Puede, si es necesario, absorber lo “negativo” y transmutarlo. Es simétrico al Ptia-Ra, también en su significado. Los dos crean el eje de equilibrio de la estrella, sin el cual los demás centros no podrían estructurarse y funcionar. Sanar es la característica principal del Int-Ra: él puede absorber, invocar y utilizar las distintas energías y propagarlas al resto del RA. El primer paso para reconstruir y reactivar la estrella es equilibrar el Int-Ra con el Ptia-Ra. Sabéis que el lado izquierdo siempre ha representado lo femenino, las emociones y la intuición, pero cuando hablamos del Int-Ra hay que ir mucho más en profundidad. Esta es la puerta de entrada de la energía proveniente de las estrellas: puede recogerla de otro plano y distribuirla. Con la mano derecha en el corazón y la izquierda en posición de cáliz mirando hacia arriba, la energía baja y entra en el cuerpo de luz a través de este vórtice. Podéis dibujar 33 veces el símbolo del infinito en vuestra mano izquierda y, con esta, armonizar cualquier dolencia que sufra vuestro físico (siempre y cuando el RA esté completamente activo). Como podéis ver, el Int-Ra es la Sabiduría reguladora, el poder sanador, es un cáliz que absorbe para dar o trasmutar (poder magnético). Cuando este centro energético no está activo, la energía general de un cuerpo, de un lugar o de un sistema, está totalmente desequilibrada. Si el Ptia-Ra es el movimiento, imprescindible en cada plano o realidad para poder evolucionar, el Int-Ra es el que conduce, guía y regula ese movimiento. Regular el flujo de energía es una tarea muy difícil; por eso la correcta activación de este vórtice es fundamental. Gaia, la Tierra, tuvo durante muchos siglos este punto energético apagado, pero ahora vuelve a activarlo porque es hora de evolucionar. Algunos lo llamáis lo “femenino” pero, realmente, es uno de los vórtices del RA completo de Gaia y no será el único que vuelva a estar en equilibrio en este plano. Humanos, abríos a su enseñanza, escuchad el Int-Ra en vuestros corazones: os habla continuamente entregando intuición, sabiduría, equilibrio, conocimiento y mucha paz. Sentid esa parte vuestra que habéis olvidado durante tanto tiempo: solamente escuchándola y dejándose llevar por ella volverá la unión, la paz y la sabiduría a este planeta. Comenzad por vosotros mismos. Si los humanos sois así, vuestras sociedades también lo serán y, así, iréis hacia una nueva Humanidad, hacia un mundo con nuevos esquemas. El Int-Ra es un vórtice que escucha, siente y “soluciona” los problemas, pero acordaos de que lo hace sin imperar y dominar, sino colaborando en armonía con los demás puntos energéticos. Tiene un papel fundamental, pero por sí solo no podría existir: no habría movimiento, resultados, conclusiones, efectos ni expansión. Así es. Sentid la energía en este vórtice y sentid vuestro poder. Que así sea. SET-RA Es un vórtice místico y representa todo lo que está detrás de lo real y de la materialización. Es el paso previo al movimiento, el ojo que todo lo ve, la voluntad que decide, el impulso hacia la materialización, el mundo de las ideas, de los propósitos, de la elaboración de pensamientos, es el ver antes y más allá. El Set-Ra es la voluntad creadora, el cerebro del RA, y su mundo es mágico. Si no está activo, no hay movimiento, acción ni realidad, porque no hay nada que los esté creando. Hoy en día es un centro muy utilizado para el control. Realmente es muy poderoso porque es el que lo decide todo: a partir de él se crea la realidad, así que controlarlo es dominar la materia y sus efectos. Utilizado sin Ptia-Ra, que crea el fluir, y sin Int-Ra, que regula la intención y la energía, el Set-Ra puede resultar un vórtice “negativo” porque crea una realidad apática y sin emociones. Este vórtice está activo en Gaia, pero no se utiliza correctamente porque no coopera con los demás centros energéticos del RA, que están apagados. El Set-Ra de Gaia corresponde a la “Matrix”, el inconsciente colectivo, el mundo de las ideas controladas que entran en las mentes de los humanos, los cuales terminan creando una realidad distorsionada, no alineada con la esencia. Los demás vórtices de la Tierra se están activando, sobre todo el Int-Ra, y su Set-Ra volverá a estar al servicio de la paz y de la armonía. En la Antigüedad los “magos” utilizaban este centro de forma muy consciente: creaban realidades y podían modificar la existente. Eran conocedores del poder del Set-Ra y, dependiendo de la intención, utilizaban la magia blanca o la negra. En el cuerpo humano este vórtice se encuentra en el pie izquierdo. Absorbe energía de su entorno para crear. Muchos no se acuerdan de él, y tenerlo apagado significa ponerse al servicio de los demás bajo una dependencia y una esclavitud continuas, en total desconexión de vuestro poder creador personal. Este último es el único que os permite materializar una realidad alineada con vuestras ideas y pensamientos que, a su vez, estando el RA activo, estarán en armonía con vuestra esencia y con vuestro corazón. Sin Set-Ra, sin ideas ni voluntad propia, creáis siguiendo unos patrones que no son vuestros y proyectáis una realidad que muy pocas veces se alinea con lo que sois. Con vuestro Set-Ra apagado, el “Set-Matrix” decidirá por vosotros y esto es justo lo que pasa hoy en día. No hay que juzgar. Sobre este modelo se han creado los gobiernos y las sociedades de los últimos siglos y estaes la situación actual de vuestro esquema social. Pero las cosas están cambiando. Despertad vuestro poder creador, sentid vuestro Set-Ra, confiad en él y cread a partir de allí. Materializaréis realidades alineadas con vuestra esencia y estaréis donde tenéis que estar, haciendo lo que queréis hacer, de corazón, en unión con todo lo creado y con el Universo. Confiad, hermanos. Creed en vuestro propio ojo interno que decide y crea un mundo para vosotros. HOR-RA Es el vórtice del RA situado en el pie derecho y representa la materialización de la realidad, la experiencia de lo vivido, el fluir del Ser en la realización de la acción. Desde aquí los humanos pueden conectar con el alma de Gaia y compartir con ella la experiencia vivida. El Hor-Ra es el premio, la flor que florece, el fruto que nace de la planta, es concretar una labor que empezó tres pasos atrás en el Set-Ra. Este vórtice es sorprendente. Recordad, humanos, que estáis aquí encarnados para experimentar y evolucionar, y que vuestras experiencias nutren tanto a Gaia como a la Fuente. Cada una de ellas tiene que ser vivida y, simultáneamente, compartida con vuestra madre Tierra y con vuestro padre, el Creador. Compartir es fundamental, no lo olvidéis. Materializar algo es una bendición, tanto para vosotros como para la Madre y el Padre. Es la recompensa, el premio, la realización de algo pensado, impulsado, equilibrado y, por fin, creado por vosotros mismos. El Hor-Ra representa el fruto de un proceso creativo y es un vórtice que está estrictamente conectado con las emociones de la alegría, la satisfacción y la felicidad, porque lograr cumplir algo y ver cómo toma forma física en vuestra realidad 3D siempre provoca una gran explosión de energía. Solamente después de haber materializado se puede entregar la energía a Gaia y, justo por este motivo, el Hor-Ra es tan importante para ella. El fruto se entrega a la Madre desde este vórtice creando un flujo de energía muy poderoso entre ella y vosotros. Gaia se alimenta de vuestras experiencias, obras y acciones, y evoluciona gracias a ellas. Sin la ofrenda, sin compartir lo vivido, el flujo energético del RA se interrumpe. Acordaos, humanos, de que la materialización de algo no tiene su fin solamente en su creación. El paso final es compartir ese algo, es hacer la ofrenda a Gaia. No lo olvidéis. Muchas veces os habéis estancado en este punto del camino. Vivís todos los días experimentando, pero esas vivencias no las compartís porque estáis trabajando bajo la estructura energética del pentágono. Difícilmente lo que pensáis proviene de vuestro Set-Ra, sino de un Set-Ra colectivo programado. Así que, cuando llegáis al Hor-Ra, la acción se queda allí encerrada, sin salir al exterior, sin ser entregada a la Madre y, como enseña el ultimo vórtice, al Infinito. Estos bloqueos no os permiten vivir en perfecto equilibrio y armonía ni tampoco sentiros uno con el Universo. Hacer funcionar y activar el Hor-Ra es sentir la importancia que tenéis como individuos, como gotitas de luz que cooperan en la evolución cósmica para Gaia y el Creador. No os subestiméis, humanos, volved a tomar conciencia de vuestro poder. Cada gota de luz es fundamental en el proceso. Muchas veces el Hor-Ra está totalmente cerrado y eso se refleja en aquellas personas, esquemas o sistemas que tienen muchas dificultades para llevar a cabo algo. Para algunos realizar, hacer nacer el fruto, es una tarea complicada o casi imposible y de aquí surge el estancamiento, la frustración, la no-acción, la involución. Cuando la energía fluye hasta el Hor-Ra y este no la deja pasar por estar bloqueado, vuelve atrás (involución) recorriendo los tres vórtices anteriores hasta llegar al punto de partida, borrando toda la labor hecha hasta ese momento. Este proceso es muy común hoy en día. Es muy importante trabajar este vórtice en las personas y en la sociedad: es la clave del avance y del progreso, del flujo continuo y de la evolución. Desbloquearlo significa volver a creer en vuestro poder de materialización, hermanos, porque los resultados se hacen visibles. Es devolver alegría y autoestima al ser humano, es incentivar su confianza en la acción, en la vida. El Hor-Ra es el vórtice de la sonrisa. Activadlo, humanos, Gaia lo está pidiendo. Alegraos de vuestras vivencias y compartidlas con la Madre que os está acogiendo, amando incondicionalmente y deseando seguir aprendiendo de vosotros. Realizad y compartid, humanos, ha llegado el momento. Antes de pasar a hablar del último vórtice, vamos a profundizar y explicar el concepto del “enraizarse” en la Tierra y del porqué eso es tan importante en este momento. Sabemos que es algo que muchos de vosotros ya hacéis conscientemente y que hay otros que lo hacen sin pensar. Enraizarse en Gaia, desde el punto de vista del Or Is Ra, es conectar el Set-Ra y el Hor-Ra con ella. Hemos visto que el primero piensa y crea, y que el segundo materializa y entrega la acción a Gaia. El Set-Ra funciona a partir de ella: cada cosa que pensáis, ideáis y ponéis a disposición de vuestra voluntad antes de pasar al movimiento, proviene de y es impulsada por la energía que la Tierra os entrega. Ella os nutre y os da el impulso para crear, y cuando realizáis algo, se lo devolvéis. Es un intercambio constante: Gaia os da la fuerza y la energía para empezar un proceso creador y vosotros se la devolvéis amplificada para que ella evolucione. Hijos de Gaia, honrarla significa compartir con ella todo lo vivido desde el amor y la unión. Ella os ama y os honra. Sois su instrumento de vida y de evolución. Amad vuestra experiencia en la Tierra y ponedla al servicio del Creador. Recordad esto, tomad conciencia del papel que desempeñáis. Estáis al servicio de Gaia y de la Fuente. Enraizarse es permitir el flujo conscientemente. Sois fundamentales, sois hijos del RA, un puente entre el Cielo y la Tierra. AMÓN-RA Es el vórtice divino, el más puro y sutil. Representa el punto de conexión con el Creador, con la Fuente y con el macrocosmos. La acción creadora experimentada se impulsa a través de él hacia el Origen. Es un vórtice sagrado porque expresa la profunda relación entre el Ser y el Padre. Como hemos visto anteriormente, es fundamental volver a entregar la energía a Gaia, pero también es importante proyectarla hacia arriba. El Amón-Ra es el vórtice de la expansión divina, del flujo hacia el exterior. Está profundamente conectado con el centro de la estrella, con O. Acordaos de que lo que es arriba es también abajo: el O Padre/Creador (la fuente exterior) se corresponde con el O interior que se encuentra en cada Ser. Cuando la materialización de la acción se ha completado, la energía se impulsa hacia este vórtice que, a su vez, la conecta con el centro O. En ese momento sagrado todos los vórtices pueden llegar a la fuente interna dando lugar a la implosión antes de la explosión final. Esta es una fase muy poderosa en la que la energía, que ha completado su ciclo, vuelve a conectarse con el centro y lo nutre. El momento mágico de conexión interior se llama AKTA-RA y representa el instante de la escucha, del sentir. La fuente interna se alimenta y bendice la labor de los cinco vórtices: es la toma de conciencia y la iluminación del Ser. Este se completa entregando la energía a lo creado, impulsándola verticalmente hacia la Fuente. Es la activación total del RA. El Ser interior realiza y completa el ciclo del flujo energético, le da un significado y lo comparte con Gaia y con el Infinito: es armonía y equilibrio puro. El RA se constituye y la energía empieza nuevamente su ciclo volviendo a “casa”, a la creación en el Set-Ra. RESUMEN DE LOS MOVIMIENTOS PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL RA ESQUEMA COMPLETO DEL RA SET-RA: creación, voluntad, pensamiento creativo, ideas. PTIA-RA: movimiento. INT-RA: conduce el flujo, lo regula, sana, corrige, armoniza. HOR-RA: realización, materialización. AMÓN-RA: impulso hacia la fuente interior y exterior. Este es el RA, humanos. Comprenderlo,sentir su esencia y activarlo es fundamental para el Cambio. Significa fluir con vosotros mismos y con la realidad que os rodea, funcionar bajo las leyes del Creador, alinearse con vuestra misión, sentir la unión con el Todo, en equilibrio y armonía. Es para vosotros. Cada cosa funciona así y cada Ser volverá a activarlo. Que así sea. 1.3 Panteón Egipcio A partir del RA se puede ahora explicar la parte más importante de la mitología del antiguo Egipto. ISIS-OSIRIS: son el padre y la madre. Juntos simbolizan el equilibrio puro, el eje entre el Ptia y el Int, el eje del panteón egipcio, el equilibrio de la Sabiduría. HORUS: es hijo de Isis y Osiris, el fruto del Ptia y del Int. Es la experimentación y la materialización. SETH: representa la conexión con la Tierra (con el infra). Tiene, a veces, una faceta “ambigua”. Hemos dicho que es el poder místico, el mundo de las ideas, del pensamiento, y, dependiendo de la intención, puede crear de forma “positiva” o “negativa”. Por esta razón, Seth tiene esa dualidad: es un dios que está entre el Bien y el Mal. Es muy poderoso y recibe a las almas después de la muerte, en su regreso a casa. AMÓN RA: es el Sol, la iluminación del Ser, la luz que ilumina la estrella. Es el dios más divino, el que está más en conexión con la Fuente. Los egipcios decidieron personificar los cinco vórtices del RA en deidades que se veneraban en los templos. Esta es la explicación del panteón egipcio. El RA imperaba. Os recordamos, humanos, que cada vórtice es importante, cada uno tiene un papel fundamental. Que el RA se active. Ha llegado el momento. LA ORACIÓN Como acabamos de explicar, en Egipto el RA se transformó en varias deidades veneradas en todo el país. Era tradición rezarles, obsequiarles, adorarles en templos y ser devotos de ellos. Existían muchas oraciones y rituales para invocar el RA y, con el tiempo, las personas empezaron a creer que este era algo externo al proprio ser humano cuando, en verdad, reside en todas las cosas, siendo el instrumento que el Creador bajó a la Tierra para poder experimentar. Si el RA era algo que se llevaba dentro, no había que invocarlo, sino simplemente tomar conciencia de su poder y de cómo utilizarlo. Sí es cierto que los grandes sacerdotes y sacerdotisas de la época tenían unas claves de acceso al conocimiento, unos pequeños símbolos que, pronunciados y trasformados en sonido, creaban una vibración que constituía la llave para entrar en una frecuencia más elevada y bajar información de la Sabiduría antigua. Estas “oraciones”, o códigos, no eran públicos, sino que se entregaban a unos pocos elegidos que se encargaban de difundir y explicar las enseñanzas de los maestros de Sirio y Orión. Entre estos estaban los faraones, que los hermanos de Egipto consideraban encarnaciones del RA cuando, en realidad, lo único que los diferenciaba del pueblo era que poseían los códigos sagrados de acceso a la Sabiduría de las estrellas. La oración, en este caso, era entonces una herramienta de conexión que ayudaba al humano a entrar en un estado de introspección, pero no constituía un elemento imprescindible para la invocación del RA. Este, como ya hemos dicho, no es algo externo al Ser, así que no había que invocarlo ni pedirle nada. Simplemente había que honrarlo, cuidarlo, sentirlo y actuar a partir de él. NOTA Los que se van a dedicar a acceder directamente al conocimiento sagrado, a bajarlo a este plano, transmitirlo y difundirlo, y todos los que van a utilizar el método para activar el RA, necesitarán, como pasaba en Egipto, una oración, una vibración de sonido que les permitirá conectarse con la frecuencia del Or Is Ra. Los nombres están escritos: parte de esta llave vibratoria está en el nombre de la persona ¨elegida¨, que fue grabado en unos registros y que constituye una poderosa herramienta. Los que no se dedicarán activamente a la difusión de este OR no podrán tener acceso directo al conocimiento, pero sí podrán escuchar gran parte de su contenido, transmitirlo y recibir la activación del RA. Es fundamental que todo esto se respete. El Or Is Ra es para todos, para la nueva Humanidad, y es importante que los seres humanos escuchen los pilares de este método. Los encargados de bajar el Or Is Ra a la Tierra y de activar los RA son, de momento, muy pocos. Todos los grandes maestros o sacerdotes del antiguo Egipto que ahora están encarnados en este espacio, están en misión y preparados para recordar. Respetad las pautas dictadas, es fundamental. EJEMPLO DE CLAVES DE ACCESO Las oraciones, como podréis ver, son instrumentos poderosos; nos conducen a la meta durante el camino. Nunca serán peticiones, nunca serán pronunciadas mecánicamente. Son un puente de acceso a un estado, una vibración o una frecuencia. Son algo que os permite abrir una puerta, pero a partir de ahí el poder creador es vuestro. Humanos, estáis acostumbrados a un significado denso de la oración. Os habéis desconectado desde hace siglos de su poder. Simplemente, centraos en el hecho de que cuando pronunciáis una oración, estáis entrando en contacto con un plano superior, tanto interior como exterior. Desde ese estado sutil podéis comunicaros y, sobre todo, sentir vuestro poder creador. 1.4 Activación del RA en lugares VÓRTICES ENERGÉTICOS Los vórtices energéticos, en el caso de lugares, son sitios con una alta frecuencia vibratoria que tienen la función de sujetar y anclar la rejilla energética de Gaia en el territorio en el cual se sitúan. Son los nodos de conjunción de esta rejilla y es muy importante que estén funcionando, porque el tipo de energía que allí se concentra es la que se distribuye por todo el territorio que controlan. Digamos que son como distribuidores energéticos que tienen un determinado radio de acción: toda la energía que se acumula en ellos es la misma que irradiarán y que alimentará las zonas de alrededor. Hay que destacar que, hoy en día, la mayoría de los nodos magnéticos funcionan, pero no al máximo de su potencial. Activar el RA en ellos quiere decir equilibrar su vibración, mejorar y armonizar toda la energía que de ellos se propaga. Así, la frecuencia aumentará y mejorará el flujo de energía en las zonas limítrofes. Esto influirá también en todo lo que habita en el radio de acción del vórtice activado según el RA y la calidad de vida mejorará visiblemente. En algunos casos, los vórtices están apagados y las tierras que los rodean no tienen vida porque no disponen de alimento energético. Son zonas que sufren, en las que la energía está estancada. En otros casos, los nodos están controlados por el sistema. Controlar un vórtice quiere decir utilizar su energía conscientemente e introducir en él un determinado tipo de información o intención que, consecuentemente, se propaga por todo el radio de acción del vórtice. Es como si este fuese una antena de radio sintonizada en una estación, emitiendo constantemente lo mismo. Los habitantes de la zona podrán oír solo la información emitida durante todo el día y se nutrirán de ese tipo de frecuencia. Esto se llama “programación”. Es ejercer poder, control y dominio sobre seres que responderán a los estímulos exteriores en función de cómo se les eduque, a través de una información que llega a sus campos magnéticos sin que ellos puedan elegir y ser conscientes de ello. Es, en parte, manipular el libre albedrío de los individuos. Como podéis ver, estos vórtices son puntos fundamentales para el territorio donde están situados. Activar el RA en ellos es proporcionar sanación a gran escala para que todo el mundo se beneficie de una frecuencia energética armónica. Con la activación, si el nodo está apagado volverá a funcionar; si ya funciona, potenciará su energía; y si está controlado, dejará de estarlo y se restablecerá la información inicial. Así que os animamos, sacerdotes, a practicar activaciones en los lugares que lo necesiten. LAS PUERTAS DIMENSIONALES Los portales dimensionales son vórtices energéticos que, además de tener la función de anclar y sostenerla energía de la rejilla, son puentes y puertas hacia otras dimensiones y planos. Una puerta dimensional tiene la estructura del RA. Sus vórtices son muy potentes y la frecuencia suele ser muy elevada. Siempre hay guardianes custodiándola para limitar y filtrar la entrada de seres “no autorizados”. La Tierra tiene muchos escudos de protección, pero quienes regulan el flujo de entrada y salida de cualquier entidad son, desde fuera, el comando estelar de Ashtar Sheran y, desde dentro, los guardianes de los portales dimensionales. Hay puertas que conectan Gaia con otros puntos del Universo, puertas que conectan un punto de Gaia con otros puntos que físicamente están a miles de kilómetros de distancia y puertas que conectan este plano con ciudades etéricas. La mayoría de los portales se apagaron de forma natural con la llegada de la noche galáctica y otros fueron apagados voluntariamente para proteger el territorio de visitantes indeseados. En el curso de la historia, muchos portales fueron utilizados de forma incorrecta, manipulados, controlados y, en estos casos, se practicó de forma consciente un On Ri Ka (este concepto lo explicaremos más adelante) como instrumento de protección. Hoy en día, muchos vuelven a abrirse para facilitar la entrada de nuevas entidades que tienen la misión de venir a ayudar en el Cambio. Como todos los portales tienen la estructura del RA, todos se pueden activar. ¡Es una gran responsabilidad! Subrayamos lo siguiente: la activación de un portal solo se practicará cuando os lo pidamos específicamente; no se puede activar un RA en lugares donde no haya existido antes un vórtice energético o una puerta dimensional. Os recordamos que siempre se aplicará el método en estructuras que ya existen y que solo están apagadas, dañadas o bloqueadas. Anclar un nuevo RA en lugares donde nunca existió es, de momento, una tarea imposible para vosotros. Significaría crear desde cero los vórtices y el O: esto nos corresponde a nosotros. No es momento de cerrar portales, así que no es tiempo de practicar el On Ri Ka en ningún lugar, pero si fuese necesario, el método os sería dado. De momento es tiempo de iluminar los RA en personas y en lugares que lo requieren. 1.5 Construir a partir del RA Antiguamente, cada construcción se erguía a partir de las proporciones que ofrecía el RA. La estrella de cinco puntas se compone de triángulos. Los arquitectos egipcios tenían como unidad de construcción esta figura geométrica y la del círculo, dos elementos básicos y sagrados. El triángulo era para ellos algo místico y simbolizaba el equilibrio capaz de materializar desde la armonía. Como esta figura es la unidad que constituye el RA, todo lo que se componía a través de ella tenía las mismas características, la misma energía y el mismo poder. Los egipcios erigían monumentos que tenían formas geométricas construidas a partir de la suma de triángulos, y los complementaban edificando columnas que simbolizaban el círculo de conexión del RA. Nada se dejaba al azar. Todo estaba perfectamente estudiado para que su forma fuese estructurada a partir del triángulo, para que sus proporciones fuesen las del RA y para que el círculo estuviese siempre representado y, así, recordase la conexión con la Fuente. Efectivamente, las construcciones egipcias eran más que monumentos: recogían y anclaban energía, creaban un campo magnético muy poderoso o potenciaban la vibración de la zona en la cual se edificaban (casi siempre en nodos magnéticos o en puertas dimensionales). Así que, además de tener una función estética y de exaltar el poder del pueblo egipcio, servían como instrumentos energéticos. Las personas que allí entraban se beneficiaban de esa vibración, como también todo lo que se encontraba alrededor de estos edificios. El RA existía en cada cosa y reinaba la armonía. Construyendo se anclaba un RA, y viceversa. Las dos opciones eran válidas y muy utilizadas. Hoy en día, los expertos creen que los egipcios edificaban de forma muy avanzada considerando los medios de que disponían. Os podemos decir que dominaban una arquitectura mucho más compleja y evolucionada de lo que podéis imaginar. Existían, por ejemplo, edificios en los cuales se creaba e introducía un tiempo distinto del que reinaba fuera de sus muros. Esto era posible porque seguían la ley del tiempo que más adelante os explicaremos. Según la forma que tiene un edificio, se obtiene un determinado ciclo (ciclo = tiempo) y, si se decide no conectarlo con el tiempo que existe en el espacio donde es construido, el monumento seguirá su propio ciclo de tiempo. Queremos recordar que cada conocimiento se utilizaba para beneficio de la sociedad y no para perjudicarla o dominarla. Todo estaba pensado para potenciar Egipto desde la armonía, el bien y el equilibrio. La arquitectura egipcia estaba en profunda conexión con los eventos astronómicos. Si se construían edificios al servicio del poder energético, el campo magnético, la frecuencia y la vibración, el movimiento de las estrellas, los equinoccios, los solsticios o los eclipses también influían. No solo la forma era importante, sino también el momento y las condiciones en las que se construía. Así era. Dependiendo de la fase lunar, el momento del año o el acontecimiento astronómico, el edificio absorbía una determinada energía y vibración. Todo estaba en armonía y en conexión con el Universo, con la Fuente y con Gaia. Hoy ya no es así. Tenéis la costumbre, humanos, de pensar que todo lo que vino antes del momento presente es antiguo, obsoleto y, en consecuencia, más atrasado. Os cuesta pensar que civilizaciones que estuvieron en la Tierra hace miles de años puedan haber sido muchísimo más avanzadas y modernas que la vuestra actualmente. Os cuesta creer que la calidad de la vida, en aquel entonces, era mucho más alta que la que tenéis ahora y que la tecnología existe desde hace milenios. La noche galáctica trajo oscuridad, entendida como un velo que se posó sobre esos conocimientos que hicieron brillar la civilización atlante o la egipcia, por ejemplo. Una época dorada está a punto de volver y muchos de vuestros sistemas cambiarán o se adaptarán a lo que vendrá. Otros, como ya estáis experimentando, caerán y desaparecerán para siempre porque ya no son acordes con la vibración y la frecuencia que Gaia está alcanzando. Con estas breves nociones sobre la arquitectura antigua no os queremos decir que tengáis, de golpe, que volver a construir pirámides o monumentos como en aquel entonces, pero sí os queremos enseñar la importancia que el RA tiene en cada campo y lo poderoso que puede llegar a ser este instrumento si se pone al servicio de la construcción y de la arquitectura. Humanos, aprenderéis de nuevo a edificar en conexión con vuestro Ser y con vuestro entorno. Volveréis a sentir y entender la importancia que tiene construir creando o anclando un campo vibratorio armónico y beneficioso para el entorno. Comprenderéis que un sitio o un lugar pueden sanar, simplemente, gracias a la energía que en él se encuentra y gracias a su frecuencia. Acordaos de que la arquitectura tiene que seguir las leyes del Universo y no solo leyes humanas. Es una ciencia que proviene de las estrellas y que estará al servicio de una nueva Humanidad capaz de utilizarla para el bien de todo lo creado. Nosotros, los maestros, instruimos en su momento y os ayudaremos en el futuro. Abríos a romper esquemas, recordad y aceptad nuevas reglas que os permitirán avanzar y evolucionar. Que se empiece con la RA-activación en lugares: es el primer paso hacia una nueva visión de la arquitectura y de su poder. 2. Int-Ra 2.1 Los sacerdotes en Egipto Sabemos que lo que hoy os rodea está muy lejos de lo que rodeaba a los sacerdotes en el antiguo Egipto. Quien se iniciaba en las enseñanzas del Or Is Ra cumplía un protocolo muy estricto. Este “culto” se confundió más adelante con el culto a Isis, pero originariamente tenía otras características. Isis fue la primera sacerdotisa del Or Is Ra y, junto a ella,en su tiempo, trabajaban los maestros de Orión y Sirio. Antes de que llegara la noche galáctica, los maestros iniciaron a más sacerdotes con los cuales cooperaban: les transmitían todo el conocimiento y los métodos de sanación. Estos fueron los elegidos para difundir el OR de generación en generación. Llegó un momento en el que los maestros ya no podían interactuar con los humanos, pero gracias a la labor de Isis y de esos primeros sacerdotes, parte de sus enseñanzas permanecieron en la Tierra. Los iniciados no desarrollaban su trabajo en los templos, sino en las cortes de los reyes y de los faraones. No obstante, estaban directamente en contacto con el pueblo y con el resto de la sociedad. Intervenían en las obras de construcción de monumentos, en los ciclos de las cosechas, en los tratados y las relaciones diplomáticas con otros reinos y en la organización de la economía y del gobierno. Sus tareas eran muy amplias y desempeñaban un papel fundamental en la historia del imperio egipcio. En la época del Or Is Ra no existían guerras ni faltaba la abundancia: todo fluía en armonía y equilibrio porque la sociedad estaba formada por pequeños grupos (vórtices) que colaboraban entre sí. El faraón no era un tirano déspota que explotaba a su pueblo, sino un elegido que garantizaba la prosperidad de toda la sociedad. Los templos se construían como lugares de culto, pero los sacerdotes no estaban allí. No todo el mundo tenía acceso a las cortes. Mucha gente tenía que viajar días para visitarlas, así que se decidió construir una serie de pequeños templos por todo el territorio egipcio. Allí los ciudadanos iban a entregar ofrendas, pero eran construcciones que, principalmente, tenían la función de anclar la frecuencia del RA en esas tierras. Los grandes templos y obras de arte que han perdurado hasta el día de hoy fueron edificados sobre grandes vórtices de energía o portales dimensionales. La mayoría, actualmente, están apagados. El conocimiento se transmitía de la siguiente forma: cada sacerdote elegía a tres jóvenes a los que, durante los últimos años de su vida, instruía en el Or Is Ra preparándolos para sus futuras tareas. Había sacerdotes y sacerdotisas. Muchos de ellos tenían sangre real. Era muy común que el segundo hijo de un matrimonio real fuese iniciado en el culto y se hiciese sacerdote. Se preparaba para ser parte de los “candidatos” entre los cuales un sacerdote veterano elegía a su sucesor. No estaba prohibido casarse y tener familia. Resumiendo, los sacerdotes, en el antiguo Egipto, eran unos “elegidos” y tenían una existencia normal, al servicio del OR y de las estrellas. Podían casarse, formar una familia y relacionarse con cada miembro de la sociedad (tanto con el rey, como con cualquier persona del pueblo). Podían tener su propia casa o vivir directamente en la corte real, donde trabajaban al lado del faraón. Desempeñaban un papel fundamental en el sistema egipcio y tomaban decisiones importantes. Sabían de arquitectura, agricultura, astronomía, economía, religión, diplomacia y política, porque se dedicaban a activar RA en cada campo, no solamente en las personas. Por ejemplo, el gran arquitecto egipcio Imhotep fue sacerdote del Or Is Ra. Vivían en la abundancia, pero sabían ser humildes. Portaban las vestimentas típicas de los sacerdotes y llevaban en las manos el Ank y el Cop-Tá (de estos hablaremos más adelante). Se dedicaban a ser un puente entre las estrellas y la Tierra. Sus misiones eran muy importantes. Hoy vuelven los sacerdotes con la misión de bajar el Or Is Ra a este plano, de difundirlo y de activar los RA en los individuos y en la sociedad. 2.2 Poderes sagrados de los sacerdotes Los sacerdotes egipcios disponían de dos instrumentos de poder para aplicar los métodos de sanación y activación: el Ank y el Cop-Tá. EL ANK El Ank es el símbolo de la pureza y de la vida, y se codifica con la letra alfa. Es un símbolo de limpieza espiritual: entrega claridad a todo lo que toca. Suele limpiar el cáliz y llenarlo de tierra fértil: es la preparación para recibir. Es muy importante entender que estos símbolos fueron entregados a Isis y a los sacerdotes por los maestros de Sirio y Orión, y que su significado original trasciende el significado que tienen desde hace siglos en este plano. Cuidado con los “significados”, humanos. Tenéis la tendencia a querer explicar con el idioma de la mente algo que, a veces, va muchísimo más allá de un significado o una explicación. Los símbolos lo demuestran. Con un símbolo se expresan conceptos enteros, son la síntesis de algo que, en palabras, ocuparía páginas enteras. Los significados profundos y completos de un símbolo solamente pueden ser entendidos por vuestra alma. Las palabras son para las mentes, los símbolos y la geometría son para el alma. Así que no os preocupéis si no “entendéis” símbolos o códigos, porque seguro que vuestra alma lo está haciendo y de forma más directa. No hay que hablarle a la mente, sino a vuestras esencias. No os perdáis en el proceso del entendimiento, de querer expresar con palabras, de querer sintetizar, porque no sirve. Acordaos de que una palabra es un significado aparente y lineal de algo más profundo. Los símbolos constituyen mensajes y hojas de acceso para el alma, y se han quedado en la Tierra desde hace eras para mantener el diálogo con vuestra esencia. Dejad que sigan haciéndolo. Volviendo al Ank (“ankh”), acordaos de que su significado va mucho más allá de las palabras y de cualquier explicación. Os diremos solamente que este es el comienzo del todo, el principio de la energía, es la vida que fluye, es lo que prepara la acción y la experiencia. Es la letra “alfa” con una vara, con un mango, entregada a los elegidos como instrumento de poder. Simboliza la sanación y limpia, prepara, trasmuta, absorbe, recoloca y desbloquea. El Ank está conectado con el poder magnético de la mujer y actúa solo: sabe hacer, por sí solo, lo que hay que hacer. Acercándolo, por ejemplo, a un vórtice del RA bloqueado, sanará, desbloqueará y limpiará. Hay que dejarlo actuar. Es un símbolo mágico que se autorregula, es inteligente y muy poderoso. Se “sujeta” (se recibe) en la mano izquierda, el Int-Ra. Es el instrumento de Isis y la sabiduría magnética que actúa por sí sola. Sin dejar que la mente intervenga en el proceso, dejadlo fluir y expresar su potencial. Representa el puente entre el Ser y la esencia divina y se conecta con el plan en la Tierra. Amad este símbolo porque os curará, os devolverá la vida, entendida como ese flujo de energía continuo, libre y consciente. Es el instrumento sanador de los sacerdotes que se utiliza en las activaciones y sanaciones. EL COP-TÁ El Cop-Tá es la letra “omega” situada encima de una vara creando un bastón de poder. Si el Ank repara, transmuta, desbloquea y llena de tierra fértil un vórtice, el Cop- Tá introduce en él la nueva vibración, la frecuencia y el conocimiento. Contiene la información que llena el punto energético que, de este modo, subirá su frecuencia y se activará. Este poder se “sujeta” en la mano derecha, en el Ptia- Ra, representando el polo masculino. LA SERPIENTE Durante la época dorada de Egipto, cuando todo seguía el concepto del RA y los maestros de Orión y Sirio cooperaban con los sacerdotes y con Isis, antes de la llegada de la noche galáctica, bajaron a la Tierra, de visita, naves Nu provenientes del planeta Nibiru. Los Nu son maestros de la genética y conocen todas las técnicas para potenciarla, manipularla y activarla. En ese momento histórico llegaron a la Tierra para estudiar la genética humana, modificarla y tomar muestras para seguir experimentando en su planeta de origen. Hay que reconocer que esto ocurrió varias veces en la historia de Gaia y de la Humanidad. En distintos momentos, los Nu bajaron a este plano con sus naves y con sus maestros para intervenir en la genética existente. Llevaron a cabo muchos experimentos, siempre con la finalidad de crear una raza humana perfecta o de potenciarla.Fueron los encargados de la evolución del ADN del ser humano y operaban introduciendo en él códigos. Así fue. Realmente, humanos, hoy en día sois lo que sois gracias a la labor que los Nu desarrollaron durante muchas eras en este planeta. El protocolo era el siguiente: bajaban a la Tierra desde Nibiru y se quedaban durante un tiempo relativamente breve, durante el cual realizaban las modificaciones genéticas necesarias introduciendo nuevos códigos en el ADN humano y, a la vez, recogían muestras para volver a su planeta y seguir trabajando en la formulación de nuevos códigos para la siguiente fase de actualización genética. Cada visita de los Nu era una actualización del sistema genético humano. Una de estas etapas de modificación del ADN coincidió con el periodo en el cual Isis estaba operando para difundir el Or Is Ra. Cuando visitaron Egipto, se celebró un consejo en el cual los maestros de Sirio y Orión se reunieron con los Nu para explicarles y enseñarles la labor que estaban llevando a cabo en la nueva tierra con el Or Is Ra y con su aplicación. Los Nu se quedaron impresionados, sobre todo con los efectos que las activaciones de los RA producían en las personas y en el entorno. Aprobaron este tipo de sanación y decidieron apoyar el trabajo de Isis. En vez de actuar sobre el ADN humano por su cuenta, entregaron los nuevos códigos de activación a Isis para que los integrase en la técnica de activación del RA. Así fue. Los Nu, prácticamente, delegaron parte de su misión en la Tierra a Isis y le regalaron el poder de activación y actualización genéticas. Ellos, a cambio, quisieron llevarse una muestra de su ADN a Nibiru para utilizarla en sus futuros experimentos. Esta muestra para los Nu era muy interesante porque contenía información genética de la sangre real azul, de una activación realizada por ellos y de un RA activo. Los maestros de Sirio y Orión se alegraron mucho de este intercambio. A través de las activaciones de los RA, Isis podía practicar también una activación genética potenciando así el ADN humano. El poder entregado por los Nu se llamaba A-Núk y fue transmitido a los demás sacerdotes que estaban operando en ese momento. Así que al Cop-Tá y al Ank se sumó el A-Núk, el poder de la serpiente. El primer experimento que Isis llevó a cabo fue sobre un árbol: activando su RA modificó y potenció su genética. Digamos que el A-Núk es un poder que funciona, sobre todo, en las activaciones en personas. En las activaciones en lugares potenciará el ADN de todo lo que se encuentra en esos sitios (plantas, árboles, animales, etc.). Humanos, estáis acostumbrados a hablar de los Nu de forma negativa, pero es una raza que desarrolló una labor muy importante para Gaia y, sobre todo, para la Humanidad. Isis colaboró con ellos y supo aprovechar positivamente sus enseñanzas y sus conocimientos. Esto es para que veáis, otra vez, que no hay instrumentos, herramientas ni conocimientos ¨buenos¨ o ¨malos¨, sino que todos son útiles, solo depende de la intención con la cual se utilizan. Después de la visita de los Nu, los sacerdotes poseían tres poderes y las activaciones se hicieron aún más eficaces. Mirad cuántas razas operaron para la ampliación y el perfeccionamiento del Or Is Ra. Reconoced su eficacia y su poder. 2.3 La RA-activación Sanar es un proceso muy importante y requiere una profunda entrega. Llegará un tiempo, humanos, en el que desaparecerá la mayoría de las dolencias físicas y emocionales que hoy en día os afectan en el plano denso en el que estáis sintonizados. Hay que estar dispuestos a estar sanos. Durante vuestro día a día estáis sujetos a muchos ¨ataques¨, aparentemente ¨externos¨, que, con un cuerpo energético no perfectamente funcional, resultan ¨dañinos¨ para vuestra salud. En vuestra realidad 3D, estar física y emocionalmente bien os parece algo muy complicado. Hay muchas cosas que aparentemente pueden influir: la alimentación, la manipulación del Set-Ra de Gaia, los vampiros energéticos, falsas creencias y paradigmas (miedo, ansiedad, preocupaciones, dependencia, falta de autoestima, de conexión con vuestro Ser y con el poder creador), educación, etc. Pero, no obstante todo esto, que es una ilusión, estáis aquí y habéis aprendido a ¨sobrevivir¨. Vuestra calidad de vida parece no ser de las mejores hoy en día, pero la buena noticia es que todo esto no puede privaros del libre albedrío o destruir vuestra voluntad de evolucionar y despertar. Restablecer un nivel de salud física y emocional equilibrado colectivo en un plano 3D no es tarea fácil, pero tampoco imposible. Ya sabéis que en las últimas décadas se han introducido muchas herramientas para dar inicio a este cambio. Todas valen y cada uno de vosotros resonará con algo específico. La RA-activación es un instrumento que se practica una vez en la vida y que provoca efectos muy profundos a todos los niveles (físico, emocional y energético) en quien lo recibe. Os subrayamos otra vez que el RA, en este momento, es algo fundamental para el Cambio. Os hablamos desde la experiencia: el Or Is Ra es un conocimiento que proviene de las estrellas y que estuvo en la Tierra durante muchos siglos en el antiguo Egipto, otorgando a este reino prosperidad, armonía y equilibrio. No tenéis que acudir a una RA-activación simplemente para sanar una patología. Acordaos de que es un cambio estructural en vuestro cuerpo de luz y esto significa que, una vez iluminada la estrella, haber tomado conciencia de ella y haber entendido cómo funciona, los efectos se darán en cada campo de vuestra vida, llevando vuestro Ser a una completa transformación. No habrá marcha atrás. Por esto os repetimos: “hay que estar dispuestos a sanarse” y, sobre todo, a ser conscientes de que vuestra realidad cambiará después de una activación del RA. No estamos hablando de milagros (que en algunos casos se darán), sino de tomas de conciencia y conexión con vuestro Ser, con lo creado y con la Fuente divina. Esto cambiará vuestra forma de ver el mundo que os rodea, de sentir, de reaccionar y de tomar decisiones. Así es. SANACIÓN PERSONAL → SANACIÓN COLECTIVA → SANACIÓN DE GAIA Ya hemos hablado de la importancia que tenéis como individuos. Sois únicos y especiales en vuestra esencia, y por aquí hay que empezar. Gaia decidió evolucionar y os necesita. Alineaos con su proceso y ayudadla a iluminarse. Ha llegado el momento. Las herramientas están aquí. Ahora depende de vosotros. Amén, hermanos. RITUAL DE INICIACIÓN (preparación a la activación) A través de este ritual los iniciados preparan su cuerpo y su mente para la activación. Antes de empezar, se coloca un cuenco o un vaso de agua en el suelo, cerca del iniciado, el cual estará, durante toda la acción, sentado en una silla, con su espalda recta y con los pies bien apoyados. Después de una breve meditación guiada para conectar con el Ser interior y con el corazón de la madre Tierra, se realiza el “ritual del conocimiento de las estrellas”, una secuencia de movimientos que permite armonizar los chakras y recibir e integrar en el cuerpo de luz la frecuencia del Or Is Ra. Con el humo que desprenden las hojas de la acacia al quemarse se limpia cada vórtice del iniciado. Para cerrar este ritual de preparación, los asistentes tomarán el agua del cuenco previamente colocado entre sus pies. El agua: aquí, este elemento representa la pureza y la limpieza espiritual. Tomar agua es una acción simbólica y de esta forma el iniciado comunica al Universo lo siguiente: “tomo el agua del conocimiento antiguo y lo integro en mi Ser, me limpio interiormente y sano mi esencia”. Antes del ritual, el agua se programa utilizando el Ank y el Cop-Tá. La acacia: es un instrumento fundamental en este ritual. Simboliza el árbol sagrado de la Sabiduría, el conocimiento, la pureza del alma y la sanación del espíritu. Fue una planta muy importante para muchas culturas durante muchos siglos. En el antiguo Egipto era el árbol de los dioses, justo porque se utilizaba en los rituales de iniciación para las
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