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FERTILIZACIÓN FOLIAR DE CANOLA DE 
TEMPORAL EN LA MESETA PURHÉPECHA 
 
 
 
Blanca L. Gómez Lucatero 
Mario A. Cepeda Villegas 
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL PACÍFICO CENTRO 
CAMPO EXPERIMENTAL URUAPAN 
 
Folleto Técnico Núm. 6 Marzo de 2010 
 
 
DIRECTORIO 
 
LIC. ECON. FRANCISCO JAVIER MAYORGA CASTAÑEDA 
Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo 
Rural, Pesca y Alimentación 
 
ING. FRANCISCO LÓPEZ TOSTADO 
Subsecretario de Agricultura y Ganadería 
 
ING. ANTONIO RUÍZ GARCÍA 
Subsecretario de Desarrollo Rural 
 
LIC. JEFFREY MAX JONES JONES 
Subsecretario de Fomento a los Agronegocios 
 
LIC. JOSÉ DE JESÚS LEVY GARCÍA 
Oficial Mayor 
 
BIOL. ESTEBAN CRUZALEY DÍAZ BARRIGA 
Delegado en Michoacán 
 
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRÍCOLAS Y 
PECUARIAS 
 
DR. PEDRO BRAJCICH GALLEGOS 
Director General 
 
DR. SALVADOR FERNÁNDEZ RIVERA 
Coordinador de Investigación, Innovación y Vinculación 
 
DR. ENRIQUE ASTENGO LÓPEZ 
Coordinador de Planeación y Desarrollo 
 
LIC. MARCIAL ALFREDO GARCÍA MORTEO 
Coordinador de Administración y Sistemas 
 
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL PACIFICO CENTRO 
 
DR. KEIR FRANCISCO BYERLY MURPHY 
Director Regional 
 
DR. GERARDO SALAZAR GUTIÉRREZ 
Director de Investigación 
 
M.C. PRIMITIVO DÍAZ MEDEROS 
Director de Planeación y desarrollo 
 
L.A.E. MIGUEL MÉNDEZ GONZÁLEZ 
Director de Administración 
 
DR. IGNACIO VIDALES FERNÁNDEZ 
Director de Coordinación y Vinculación en Michoacán 
y Jefe del Campo Experimental Uruapan 
 
 
 
 
FERTILIZACIÓN FOLIAR DE CANOLA DE 
TEMPORAL EN LA MESETA PURHÉPECHA 
 
 
 
 
 
 
 
Blanca Leticia GÓMEZ LUCATERO 
Investigador en Ecofisiología de Cultivos 
Campo Experimental Uruapan 
Mario Alberto CEPEDA VILLEGAS 
Investigador en Ecofisiología de Cultivos 
Campo Experimental Uruapan 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL PACÍFICO CENTRO 
CAMPO EXPERIMENTAL URUAPAN 
 
Folleto Técnico Núm. 6 Marzo de 2010 
 
FERTILIZACIÓN FOLIAR DE CANOLA DE TEMPORAL EN LA 
MESETA PURHÉPECHA 
 
No está permitida la reproducción total o parcial de esta 
publicación, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier 
medio, ya sea electrónico, mecánico, fotocopia, por registro u otros 
métodos, sin el permiso previo y por escrito a la Institución. 
 
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y 
Pecuarias. 
Progreso No. 5. Barrio de Santa Catarina. Delegación Coyoacán. 
C. P. 04010 México, D.F. 
Tel. (55) 3871 8700 
www.inifap.gob.mx 
Correo-e: contactenos@inifap.gob.mx 
 
Centro de Investigación Regional Pacífico Centro. 
Campo Experimental Uruapan. 
Av. Latinoamericana Núm. 1101, Col Revolución. 
C. P. 60150. Uruapan, Michoacán. México. 
Tels: (452) 523 7392 Fax: (452) 524 4095 
 
 
Primera edición: Marzo de 2010 
 
 
 
ISBN 978-607-425-308-5 
 
FOTO PORTADA: Cultivo de canola. Tomada por M. C. Blanca 
Leticia Gómez Lucatero. 
 
 
La cita correcta de esta obra es: 
Gómez L. B. L. y Cepeda V. M. A. 2010. Fertilización foliar de 
canola de temporal en la Mesta Purhépecha. Folleto Técnico Núm. 
6. SAGARPA-INIFAP-CIRPAC-Campo Experimental Uruapan. 
Uruapan, Michoacán, México. 44 pp. 
 
http://www.inifap.gob.mx/
mailto:contactenos@inifap.gob.mx
 
 
 
CONTENIDO 
 Pág. 
RESUMEN .......................................................................... 1 
SUMMARY .......................................................................... 1 
INTRODUCCIÓN ................................................................ 3 
Cultivo de canola ............................................................. 4 
Labranza de conservación ............................................... 4 
Nutrición mineral .............................................................. 5 
Fertilizantes foliares ......................................................... 7 
Carbonato de Calcio (CaCO3) ......................................... 9 
Silicato de potasio (Si y K) ............................................. 11 
Etileno ............................................................................ 12 
Liquifertidol .................................................................... 13 
Algaenzims®.................................................................. 13 
MATERIALES Y MÉTODOS ............................................. 14 
Sitios experimentales ..................................................... 14 
Tratamientos .................................................................. 15 
Características estudiadas ............................................. 17 
Diseño estadístico.......................................................... 17 
RESULTADOS Y DISCUSIÓN .......................................... 19 
Condiciones climáticas .................................................. 19 
Ciclo Primavera-Verano 2004 ..................................... 19 
Ciclo Primavera-Verano 2006 ..................................... 20 
Ciclo Primavera-Verano 2007 ..................................... 20 
Análisis de varianza, prueba de medias y análisis 
económico ..................................................................... 23 
 
 
 
Ciclo Primavera-Verano 2004 ..................................... 23 
Ciclo Primavera-Verano 2006 (fertilizantes foliares) ... 26 
Ciclo Primavera-Verano 2006 (épocas de aplicación del 
CC) ............................................................................. 29 
Resultados de la validación del Carbonato de Calcio ..... 33 
CONCLUSIONES .............................................................. 33 
 
 
 
 
 
 
LISTA DE CUADROS 
 Pág. 
 
Cuadro 1. Sitios experimentales y parcela de validación 
ubicación y manejo del cultivo. Campo Experimental 
Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 15 
 
Cuadro 2. Tratamientos evaluados en Cherán, Mich., 
durante el ciclo PV 2004. Campo 
Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 16 
 
Cuadro 3. Tratamientos evaluados en Nahuatzen, Mich., 
durante el ciclo PV 2006. Campo 
Experimental Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 16 
 
Cuadro 4. Tratamientos de carbonato de calcio (46 % de Ca) 
evaluados en canola durante el ciclo PV 2006, en 
Nahuatzen, Mich. Campo Experimental Uruapan. 
CIRPAC. INIFAP. 17 
 
Cuadro 5. Estados fenológicos del cultivo de canola con 
y sin carbonato de calcio, durante el ciclo PV 
2007. Campo Experimental Uruapan. CIRPAC. 
INIFAP. 23 
 
Cuadro 6. Análisis de varianza y comparación de medias 
de los tratamientos estudiados en Cherán, 
Mich., durante el ciclo PV 2004. Campo 
Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 25 
 
Cuadro 7. Análisis económico de los tratamientos evaluados 
en Cherán, Mich., durante el ciclo PV 2004. Campo 
Experimental Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 26 
 
 
 
 
Cuadro 8. Análisis de varianza y comparación de medias de 
tratamientos evaluados en Nahuatzen, Mich., 
durante el ciclo PV 2006. Campo 
Experimental Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 27 
 
Cuadro 9. Análisis económico de cada tratamiento evaluado 
en Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 2006. 
Campo Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 28 
 
Cuadro 10. Análisis de varianza y comparación de 
medias de épocas de aplicación de carbonato 
de calcio estudiadas en Nahuatzen, Mich., 
durante el ciclo PV 2006. Campo 
Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 31 
 
Cuadro 11. Análisis económico de cada época de aplicación 
de carbonato de calcio evaluada en Nahuatzen, 
Mich., durante el ciclo PV 2006. Campo 
Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 32 
 
Cuadro 12. Rendimiento y relación beneficio costo por cada 
tratamiento validado en canola. Pichátaro, 
Mich., PV 2007. Campo Experimental 
Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 33 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
LISTA DE FIGURAS 
 Pág. 
Figura 1. Características estudiadas en los 
 experimentos de canola evaluados en la Meseta 
Purhépecha bajo condiciones de temporal.18 
 
Figura 2. Estados fenológicos de la canola de acuerdo 
a la escala de Lancashire et al., 1991. 19 
 
Figura 3. Fenología de la planta de canola y distribución 
de la lluvia y temperatura en Cherán, Mich., durante 
el ciclo PV 2004. 21 
 
Figura 4. Condiciones climáticas prevalecientes en Nahuatzen, 
Mich., ciclo PV 2006. 22 
 
Figura 5. Condiciones climáticas presentes durante el 
Desarrollo fenológico del cultivo de canola en 
Pichátaro, Mich. Ciclo PV 2007. 22 
 
Figura 6. Rendimiento de aceite obtenido en cada uno 
de los tratamientos evaluados en Cherán, Mich., 
durante el ciclo PV 2004. 25 
 
Figura 7. Valores de índice de área foliar (IAF) y 
Conductancia estomática (gs) para cada tratamiento 
evaluado en Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 2006. 28 
 
 
 
1 
 
FERTILIZACIÓN FOLIAR DE CANOLA DE TEMPORAL EN LA 
MESETA PURHÉPECHA 
 
RESUMEN 
 
La agricultura en la Meseta Purhépecha, constituye una actividad 
fundamental, sin embargo, diversos factores han conducido a un 
proceso de deterioro de sus recursos. El suelo evidencia una alta 
erosión por el uso de la labranza convencional y una baja fertilidad 
por el inadecuado uso de fertilizantes. Por esta razón, es 
necesario en el sistema de producción “año y vez” introducir 
cultivos alternativos como la canola en el año de descanso, así 
como usar técnicas de laboreo reducido para ayudar a evitar el 
riesgo de erosión y pérdida de nutrientes. Además, manejar de 
forma balanceada la nutrición de los cultivos, para incrementar su 
eficiencia y reducir la pérdida por lixiviación o escorrentía. El uso 
adecuado de la fertilización foliar constituye una alternativa eficaz 
para el suministro de micronutrientes, sin embargo, se reconoce 
que solo funciona como complemento y no sustituye a una 
fertilización al suelo con macronutrientes como son el nitrógeno, 
fosforo y potasio. La fertilización foliar se ha convertido en una 
práctica importante en muchos sistemas de producción agrícola 
porque permite la corrección rápida, económica y oportuna de 
deficiencias nutricionales, favorece el crecimiento y desarrollo de 
las plantas y mejora el rendimiento y calidad de la cosecha. La 
aplicación de 4000 ppm de Carbonato de Calcio en plena floración 
o fin de floración permite disminuir la aplicación de nitrógeno y 
potasio en 25 % y 100 %, sin que el rendimiento se afecte; 
además, el costo de producción se reduce en 11 % y la relación 
beneficio-costo se incrementa en 31 % con respecto al tratamiento 
con fertilización completa (120-60-80 NPK); este producto es 
barato, fácil de adquirir y contribuye a reducir la aplicación de 
fertilizantes químicos, así como la contaminación de los mismos al 
suelo y al ambiente. 
 
SUMMARY 
 
Agriculture in the Purhépecha Region, constitutes a fundamental 
activity, nevertheless, diverse factors have lead to a process of 
 
2 
 
deterioration of its resources. The ground demonstrates high 
erosion by the use of the conventional farming and a low fertility by 
the inadequate fertilizer use. Therefore, it is necessary in the 
production system “year and time” to introduce alternative cultures 
as the canola in the year of rest, as well as to use techniques of 
reduced working to help to avoid the risk of erosion and loss of 
nutrients. In addition, to handle of balanced form the nutrition of the 
cultures, to increase its efficiency and to reduce to the loss by 
leaching or run-off. The correct use of the fertilization to foliar 
constitutes an effective alternative for the provision of 
micronutrients. In the case of macronutrients such as nitrogen, 
phosphorus and the potassium, is recognized that the fertilization 
to foliar single can complement, but at no moment for replacing the 
fertilization the ground. The fertilization to foliar has become an 
important practice in many agricultural production systems 
because it allows the fast, economic and opportune correction of 
nutritionals deficiencies; it favors the growth and development of 
the plants, and improves the yield and quality of the harvest. The 
application of 4000 ppm of Calcium Carbonate in the heat of 
flowering or aim of flowering allows to diminish nitrogen and 
potassium in 25% and 100%, without the yield is affected; in 
addition, 11 % relation and the production benefit-cost was 
increased in 31 % with respect to the treatment with complete 
fertilization (120-80-60 NPK); this product is cheap, easy to acquire 
and contributes to reduce the application of chemical fertilizers, as 
well as the contamination of such to the ground and the 
atmosphere. 
 
 
 
3 
 
INTRODUCCIÓN 
 
La Meseta Purhépecha se localiza en el estado de Michoacán, 
entre los paralelos 19°15' y 19°50' de latitud norte y entre los 
meridianos 101°15' y 102°25' de longitud oeste, con una altitud 
promedio de 2700 m. Lo conforman los siguientes municipios: 
Charapan, Cherán, Nahuatzen, Paracho, Erongarícuaro, Quiroga, 
Tzintzuntzan, Pátzcuaro y parte de Los Reyes, Peribán, Tancítaro, 
Nuevo Parangaricutiro, Uruapan, Tingambato, Salvador Escalante, 
Tangamandapio, Tangancícuaro, Chilchota y Zacapu. El clima 
predominante es templado y en algunas áreas es semifrío. Con 
una temperatura media anual que varía de 11 a 18 °C y 
precipitaciones desde 800 a más de 1,500 mm anuales 
(DIGETENAL, 1985). La mayoría de los suelos son de textura 
franco arenosa; presentan alto contenido de humus, mientras que 
la materia orgánica es variable de 9.6 a 0.4%. La reacción de los 
suelos (pH) es de acidez fuerte a neutra (4.9 a 6.9), predominando 
los de acidez moderada (6.3). La retención de fósforo en el 50% 
de los suelos es más de 33%. Los andosoles presentan alta 
capacidad de retención de fósforo (Shoji et al., 1996). 
 
La agricultura constituye la principal actividad económica de los 
ejidos y comunidades agrarias existentes en la región. Los 
sistemas agrícolas más importantes son: sistema de humedad 
residual de temporal en tierras planas, sistema de humedad 
residual de temporal en laderas y sistema de temporal, orientadas 
principalmente al cultivo de maíz y forrajes (avena, berza-avena). 
El primer sistema se practica en ciclos de “año y vez”, en el “año” 
con monocultivo de maíz, sin rotaciones y en el “vez” permanece 
en descanso (Bocco et al., 2000). En sus cultivos utilizan prácticas 
agrícolas convencionales, ocasionando problemas severos de 
erosión y fuga de nutrientes, dando como resultado suelos con 
baja fertilidad, lo que asociado a la inadecuada aplicación de 
nutrientes, conlleva a un desarrollo y crecimiento deficiente del 
cultivo y a un rendimiento de grano bajo, por lo tanto, la agricultura 
en general es de subsistencia. 
 
Actualmente, los agricultores deben ser capaces de producir a 
bajo costo para mantener una adecuada competitividad y 
 
4 
 
rentabilidad, pero mejorando al mismo tiempo la protección del 
ambiente. Los altos rendimientos de cualquier cultivo no solo 
significan mayores ganancias, sino que son también un claro 
indicativo de que se utilizan prácticas de manejo que promueven la 
sostenibilidad del sistema (Roberts, 2002). Además, la 
incorporación de nuevas especies a los sistemas de producción, 
enriquecen los agroecosistemas regionales, proporcionando 
beneficios al productor. 
 
Cultivo de canola 
 
La incorporación de nuevas especies a los sistemas de 
producción, además de enriquecer los agroecosistemas 
regionales, proporciona beneficios al productor y a la sociedad en 
general. El cultivo de canola, dada sus características de 
rusticidad, es una alternativa viable para los productores, partiendo 
de que su ciclo vegetativo es mucho más corto que el de maíz, lo 
que permite que los productores realicen sus siembras de maíz 
en el “año” y de canola en el “vez”; además no tiene problemas de 
comercialización debido a que la Industria Aceitera importa al año 
a nivel nacional en promedio un millón de toneladas y se maneja 
bajo el sistema de agricultura por contrato(Cepeda et al., 2006). 
 
Labranza de conservación 
 
La labranza mecánica tradicional contribuye a la degradación de 
los suelos de la región, para mitigar este problema, se han 
propuesto diferentes alternativas para conservar y proteger este 
recurso; una de ellas es el empleo de labranza de conservación, 
que consiste en una serie de técnicas que permiten detener o 
revertir los efectos nocivos del exceso de laboreo sobre las 
características físicas y químicas del suelo, promoviendo los 
proceso biológicos, y permite conservar o recuperar la 
productividad del mismo. La labranza de conservación incluye 
labranza cero, labranza mínima y labranza reducida o siembra 
directa, cada una representa una opción y la decisión de usar 
alguna, dependerá del tipo de clima y suelo prevaleciente en el 
sitio donde se establecerá el cultivo (Galván, 2008). 
 
 
5 
 
En México el sistema de labranza de conservación es una 
necesidad tecnológica, ya que más del 60 por ciento de nuestro 
territorio sufre diversos grados de desertificación que van de 
moderado a severo. El país pierde anualmente 530 millones de 
toneladas de suelo por erosión, según autoridades ambientales 
(Galeana et al., 1999). 
 
El principio fundamental del sistema de labranza de conservación 
es la cobertura o mantillo del suelo con los rastrojos de las 
cosechas de los cultivos anteriores, los cuales tienen un efecto 
decisivo en evitar la erosión, disminuir la presencia de malezas e 
incrementar el contenido de materia orgánica, mejorando con ello 
las propiedades físicas, químicas, biológicas, y la fertilidad del 
suelo (Sierra, 1990; Cardini, 1993). 
 
Las ventajas de labranza de conservación son las siguientes: 
reduce la erosión, aumenta la infiltración y conservación de agua 
en el suelo, disminuye la fuga de nutrientes del suelo, reduce la 
quema de residuos, disminuye el uso de energía, aumenta materia 
orgánica y microorganismos, evita la compactación, incrementa la 
productividad, baja el costo de producción y beneficia el ambiente 
(Figueroa y Morales, 1992). 
Los resultados exitosos con el uso de la labranza de conservación 
en México se han obtenido principalmente bajo condiciones de 
riego; mientras que para temporal, donde son más necesarias las 
prácticas de recuperación o mantenimiento de los recursos 
naturales, poco se ha avanzado para incorporarla como una 
práctica agrícola común, la principal limitante es la escasa 
producción de rastrojos para la cobertura (Galván, 2008). 
 
Nutrición mineral 
 
La adecuada nutrición mineral de un cultivo está influenciada por 
el conocimiento de los requerimientos de la planta y por la 
cantidad e intensidad de nutrimentos del suelo en donde se tiene 
el cultivo. Cuando el suelo no puede suplir adecuadamente los 
nutrimentos para un normal desarrollo de las plantas, se hace 
necesaria su adición en las cantidades y formas apropiadas 
(Salas, 2002a). Los nutrimentos minerales esenciales para las 
 
6 
 
plantas, son aquellos necesarios para la ocurrencia de un ciclo de 
vida completo, involucrados en funciones metabólicas o 
estructurales en las cuales no pueden ser sustituidos y cuya 
deficiencia se asocia a síntomas específicos. Se han reconocido al 
menos 16 elementos minerales que son esenciales para la 
nutrición de las plantas. De ellos el carbono, hidrógeno y oxígeno 
son suministrados a través del agua y el aire. El suelo contiene 
cantidades variables del resto de los elementos, y cuando hay 
deficiencias o desbalances de uno o más de estos elementos es 
necesario utilizar fertilizantes para su corrección (Molina, 2002b). 
 
El flujo de nutrimentos en el sistema suelo-planta está en función 
del ambiente, la planta, manejo, factores socioeconómicos y está 
gobernado por una serie de complejas interacciones entre las 
raíces de las plantas, microorganismos, reacciones químicas y 
diferentes vías de movimiento. El movimiento de nutrimentos en la 
planta depende de la capacidad de absorción y de la demanda del 
nutrimento, de tal manera que este movimiento envuelve 
diferentes procesos metabólicos (Shaviv et al., 1993) 
interconectados como son: la liberación del suelo a la solución del 
mismo, el transporte hacia las raíces para su absorción y 
translocación, así como su utilización dentro de la planta. El 
transporte de nutrimentos hacia la raíz, la absorción y 
translocación de los mismos ocurre simultáneamente; por esta 
razón, si se produce un cambio en uno de estos procesos se 
afectarán los demás. 
 
Los nutrimentos han sido caracterizados por tener alto, bajo o 
intermedio movimiento en el floema, lo cual ha sido determinado 
claramente por medio del empleo de isótopos. Los elementos que 
son muy móviles en el floema, desde las hojas, son el nitrógeno, 
fósforo, potasio y en menor proporción el magnesio (Marschner, 
1995). Elementos como el calcio, boro, manganeso y hierro, son 
prácticamente inmóviles en el floema desde las hojas. Cuando el 
suministro desde la raíz de estos elementos decrece, su contenido 
disminuye en las hojas jóvenes, mientras que en las hojas viejas e 
incluso las senescentes, la concentración se mantiene alta. La 
aparición de deficiencia de calcio y boro en las hojas jóvenes se 
 
7 
 
presenta cuando el suministro externo es inadecuado (Haynes et 
al., 1947). 
 
Además, de todo lo anterior, los elementos minerales en la planta 
están directamente relacionados con todos los mecanismos de 
defensa de la planta, al ser componentes de las células, sustratos, 
enzimas, acarreadores de electrones, o como activadores, 
inhibidores y reguladores del metabolismo (Hubber, 1980; Piening, 
1989). Por ejemplo, el nitrógeno aumenta la resistencia a 
patógenos facultativos en tejidos tiernos, pero aumenta la 
susceptibilidad a patógenos obligados. El fósforo está relacionado 
con procesos vitales para la planta, sin embargo, su papel en la 
resistencia a enfermedades es muy variable y un poco 
inconsistente (Kiraly, 1976). El potasio tiene una relación estrecha 
con la resistencia a enfermedades; mientras que el calcio, ofrece 
resistencia contra enfermedades como Pythium, Sclerotium, 
Botrytis y Fusarium; además, diversos problemas de desórdenes 
fisiológicos en frutas, vegetales, raíces y follaje tierno están 
relacionados con el contenido de calcio (Graham,1983). El 
magnesio en altas cantidades disminuye el contenido de calcio y 
predispone a la planta a enfermedades tales como Rhizoctonia y 
Pythium (Huber, 1980). 
 
Fertilizantes foliares 
 
El uso adecuado de la fertilización foliar constituye una alternativa 
eficaz para el suministro de micronutrientes., sin embargo, se 
reconoce que solo funciona como complemento y no sustituye a 
una fertilización al suelo con macronutrientes como son el 
nitrógeno, fosforo y potasio. Esto se debe a que las dosis a aplicar 
vía foliar son muy pequeñas en comparación con las dosis 
aplicadas al suelo para obtener buenos rendimientos, además, no 
producen efectos fitotóxicos (Salas, 2002a). La fertilización foliar 
se ha convertido en una práctica importante en muchos sistemas 
de producción agrícola porque permite la corrección rápida, 
económica y oportuna de deficiencias nutricionales, favorece el 
crecimiento y desarrollo de las plantas, y mejora el rendimiento y 
calidad de la cosecha (Molina, 2002a). 
 
 
8 
 
La aplicación foliar es efectiva debido a que la penetración de 
nutrientes en la superficie de las hojas y demás partes aéreas de 
las plantas está regulada por las células epidermales de las 
paredes externas de las hojas. Estas paredes están cubiertas por 
una capa de cera, pectinas, hemicelulosa y celulosa que protegen 
a la hoja de una excesiva pérdida de solutos orgánicos e 
inorgánicos por la lluvia. Un gradiente de carga se produce en esta 
capa cuticular de la parte externa hacia el interior de la pared, 
permitiendo la penetración de iones a lo largo del gradiente, 
favoreciendo la efectividad de los nutrientes y controlando las 
pérdidas por lixiviación(Yamada et al., 1964). 
Una vez que se ha realizado la absorción, las sustancias nutritivas 
se mueven dentro de la planta utilizando varias vías: a) la corriente 
de transpiración vía xilema, b) las paredes celulares, c) el floema y 
otras células vivas y d) los espacios intercelulares. La principal vía 
de translocación de nutrimentos aplicados al follaje es el floema. El 
movimiento de célula a célula ocurre a través del protoplasma, por 
las paredes o espacios intercelulares (Salas, 2002a). La tasa de 
absorción de cada elemento es diferente, así el nitrógeno se 
destaca por su rapidez de absorción necesitando de 0,5 a 2 horas, 
el calcio de 10 a 24 horas y el fósforo hasta de 10 días para que 
el 50% de lo aplicado penetre en la planta (Bertsch, 1995). 
Obviamente, la respuesta de la planta a la nutrición foliar 
dependerá de varios factores, tales como la especie, la fuente del 
fertilizante, la concentración, la frecuencia de aplicación, los 
factores climáticos, sistema de aplicación, así como el estado de 
crecimiento de la planta. La combinación más apropiada de todos 
ellos se obtendrá a través de la experiencia y condiciones del 
medio (Salas, 2002b). 
 
En lo que respecta a las fuentes de fertilización foliar, estas deben 
ser muy solubles en agua y que no causen efecto fitotóxico al 
follaje. Las fuentes se pueden dividir en dos grandes categorías: 
sales minerales inorgánicas, y quelatos naturales y sintéticos, que 
incluye complejos naturales orgánicos. Las principales fuentes 
inorgánicas son yacimientos o minas naturales de óxidos, 
carbonatos y sales metálicas como sulfatos, cloruros y nitratos. 
Las sales fueron los primeros fertilizantes foliares que se utilizaron 
y están constituidos principalmente por cloruros, nitratos y sulfatos. 
 
9 
 
En comparación con otras fuentes, las sales son de menor costo, 
pero deben tomarse precauciones para su aplicación por el riesgo 
de causar quema o fitotoxicidad al follaje (Molina, 2002a). 
 
Carbonato de Calcio (CaCO3) 
 
El Calcio (Ca) es un elemento que normalmente es absorbido por 
las plantas como Ca
+2
. La cantidad total de Ca en el suelo fluctúa 
entre 0.1 hasta alrededor de 25%. Los suelos arcillosos contienen 
más Ca que los suelos arenosos. El Ca como catión, está 
gobernado por los fenómenos del intercambio catiónico al igual 
que los otros cationes y se mantiene adherido como Ca
+2
 
intercambiable en la superficie de los coloides cargados negativa-
mente. Generalmente es el catión dominante en el suelo, aun a 
valores de pH bajos, y ocupa normalmente el 70% o más de los 
sitios en el complejo de intercambio. El Ca es parte de la 
estructura de varios minerales del suelo como la dolomita, calcita, 
apatita y feldespatos. En realidad estos minerales son las fuentes 
principales de Ca en el suelo (Agropecstar, 2007). 
 
Es requerido por la planta para mantener la integridad de la 
membrana y se encuentra en las paredes celulares en forma de 
pectatos de Ca, este material hace al tejido altamente resistente a 
la degradación por la Polygalacturonasa; además, ayuda a 
mantener la integridad de la célula y la permeabilidad de la 
membrana celular, favorece el crecimiento y la germinación del 
polen, y activa gran cantidad de enzimas que intervienen en la 
mitosis, división y elongación celular. El Ca interviene en la 
síntesis de proteínas y la transferencia de carbohidratos, y ayuda a 
desintoxicar la planta de la presencia de metales pesados 
(Calderón, 1997; Molina, 2002b). 
 
La deficiencia de oxígeno, dificulta la asimilación del calcio; la 
carencia de boro reduce el transporte de calcio desde las raíces a 
los meristemos apicales. En suelos ricos en calcio pero carentes 
de hierro (Fe) en forma asimilable, pueden presentarse 
insuficiencias de calcio, debido a que la deficiencia de hierro 
induce una drástica reducción en la absorción de calcio. La 
deficiencia de Ca disminuye el crecimiento de la planta y del 
 
10 
 
sistema radical, debilita los tejidos foliares haciéndolos más 
susceptibles al ataque de patógenos (Hidalgo, 2007; Izumi y 
Watada, 1994). La absorción de Ca puede ser afectada también 
por exceso de K y Mg en el suelo, o por el uso de fertilizantes 
nitrogenados amoniacales. La absorción de Ca por la raíz es un 
proceso pasivo que depende del movimiento del agua a través del 
xilema. Las aplicaciones de Ca al suelo no han sido tan efectivas 
para incrementar la concentración del elemento en las hojas y 
frutos debido a las dificultades de movilización que tiene este 
mineral en la planta (Lonstroth, 1994). El suministro de Ca a través 
de la fertilización foliar se convierte en una herramienta importante 
para los cultivos. Las aspersiones foliares de Ca han resultado 
muy efectivas para prevenir los desórdenes que se producen en 
los frutos, debido a que la aspersión del nutrimento llega 
directamente a las hojas jóvenes y los frutos en formación que son 
los que demandan en mayor grado el elemento (Molina, 2002b). 
 
Las fuentes de sales foliares más comunes que suministran calcio 
y magnesio son: nitrato de calcio, nitrato de magnesio y sulfato de 
magnesio, así como el carbonato de calcio. Para lograr un efecto 
positivo, se aplican en dosis más altas que los quelatos. Entre sus 
ventajas están su costo más económico comparado con los 
quelatos, y su mayor concentración de nutrimentos (Molina, 
2002a; Calderón, 1997). La aplicación de calcio soluble, puede 
mejorar la producción de los cultivos, debido a que aumenta la 
absorción de amonio, potasio y fósforo, estimula la fotosíntesis y 
aumenta el tamaño de las partes comerciables de la planta. La 
aplicación de calcio soluble también promueve un uso eficiente del 
nitrógeno, lo que mejora los aspectos económicos de la 
producción y reduce la contaminación del medio ambiente por 
nitrógeno (Fenn et al., 1995). Al agregar el calcio como 
suplemento nutricional, se aceleró en un 100 % la velocidad con 
que las plantas absorben el amonio. A medida que parte del 
amonio se convierte en nitrato, el calcio previamente precipitado 
se vuelve a solubilizar gradualmente, aumentando la 
concentración del calcio soluble disponible que aumenta el 
rendimiento (Fenn et al., 1994). Por todo lo anterior, la aplicación 
del calcio es una excelente herramienta ambiental y agronómica. 
 
 
11 
 
Silicato de potasio (Si y K) 
 
El silicio es el segundo elemento más abundante en la tierra con 
un 27.7 %, después del Oxigeno (O2) y es también abundante en 
la mayoría de los suelos (Datnoff et al., 1997). En la naturaleza se 
encuentran formas biogeoquímicas activas de silicio como: 
monómeros, ortosilícico, H4SiO4 y metasilícico, H2SiO3, dímeros, 
trímeros, polímeros, coloides, agregados coloidales y el silicio 
amorfo (Quero, 2006a). 
 
El silicio aunque no se le considera un nutriente esencial, es 
removido anualmente por los cultivos en cantidades de 200 a 500 
kg ha
-1
 y es utilizado por las plantas para transportar en sus 
tejidos, minerales y compuestos orgánicos como los azúcares, así 
mismo para formar estructuras, poliméricas y cristalinas en la 
cutícula de las hojas, que permiten resistir estrés biótico y abiótico. 
Estructuras ricas en silicio que forman parte de las hojas son: 
fitolitos, tricomas y cadenas poliméricas presentes en las paredes 
celulares. Los tricomas son importantes para la liberación de 
compuestos con actividad fungicida e insecticida (Quero, 2006c). 
Por lo anterior, Marschner (1995) y Quero (2006b), mencionan que 
este elemento controla el desarrollo del sistema radicular, la 
asimilación y distribución de nutrientes minerales, incrementa la 
resistencia de la planta al estrés abiótico (alta y baja temperatura, 
viento, alta concentración de sales, metales pesados y aluminio) y 
biótico (insectos, hongos, enfermedades). 
 
El Potasio, es un elemento esencial en la nutrición de la planta, 
debido a que está implicado en varias funciones fisiológicas como 
son: transporte en el floema, turgencia de célulasguardianes de 
los estomas, movimientos foliares y crecimiento celular. El K activa 
más de 60 enzimas (substancias químicas que regulan la vida); 
por ello, juega un papel vital en la síntesis de carbohidratos y de 
proteínas. Por lo anterior, mejora el régimen hídrico de la planta y 
aumenta su tolerancia a la sequía, heladas y salinidad. Las plantas 
bien provistas con K sufren menos de enfermedades (FAO, 2002). 
 
Las plantas difieren en su capacidad para absorber el K del suelo, 
así se tiene que las plantas monocotiledóneas (algunas 
 
12 
 
gramíneas) presentan mayor capacidad de absorción que las 
plantas dicotiledóneas. En general, las plantas contienen entre 
0.3 - 6% en base al peso seco, requiriendo algunas especies 
vegetales altas concentraciones de K en los tejidos para su 
crecimiento normal. Cada cultivo de acuerdo a su rendimiento 
extraerá mayor o menor cantidad de potasio del suelo. Entre los 
cultivos de más alta extracción de potasio se pueden mencionar la 
papa, caña de azúcar, plátano, tomate, algodón, tabaco y alfalfa 
entre otros. El factor de remoción para maíz es de 
aproximadamente 0.131 kg de K2O por cada 25.4 kilogramos de 
grano producido (Chirinos, 1999). 
 
Etileno 
 
Es el principal componente del Ethrel. La síntesis de etileno (C2H4) 
tiene lugar en todos los órganos vegetales, aunque en diferente 
cantidad dependiendo del tejido y del estado de desarrollo. La 
mayor síntesis de etileno se lleva a cabo en los frutos climatéricos 
y los tejidos senescentes. Las heridas físicas, el estrés hídrico y 
las bajas temperaturas, inducen la síntesis temporal de etileno 
(www.uam.es, 2005). 
 
El etileno es activo a concentraciones muy bajas, del orden de 1 
ppm; las plantas, pueden oxidarlo fácilmente hasta CO2 y está 
implicado en la adaptación de las plantas en ambiente extremos. 
El etileno, induce la maduración de frutos climatéricos, incrementa 
la expansión celular lateral, estimula la curvatura de las hojas 
(epinastia), estimula la germinación y elongación de tallos, induce 
la formación de raíces y acelera la velocidad de la senescencia 
foliar. Juega un rol importante en la abscisión foliar y en muchas 
especies regula la abscisión de órganos perecederos (pétalos de 
flores). Además, controla las respuestas a diferentes tipos de 
estrés, debido a que contiene varias vías de transducción de 
señales. Entre sus acciones destaca, el incremento en el 
contenido de senósidos de la Cassia angustifoli; aumento en el 
flujo del látex del caucho, así como en el rendimiento en látex 
entre un 36 y un 130% (www.uam.es, 2005). 
 
http://www.uam.es/
http://www.uam.es/
 
13 
 
El Ethrel 480, es un líquido soluble que contiene 480 g L
-1
 de 
Ethephon; es un regulador de crecimiento de las plantas y tiene la 
propiedad de que la planta lo absorbe rápidamente, liberando 
etileno en el tejido vegetal, induciendo una mayor síntesis del 
mismo (www. bayercropscience.com.mx, 2005). 
 
Liquifertidol 
 
Fertilizante orgánico mineral, contiene: silicio (15 %), hierro (16 %) 
y potasio (22 %). La importancia fisiológica del Si y K se explicó en 
el silicato de potasio. 
 
Algaenzims® 
 
Producto elaborado a base de algas marinas del género 
Sargassum y contiene 27 reguladores de crecimiento, micro algas 
cianofitas, 5000 enzimas no desnaturalizadas, agentes 
quelatantes, ácidos orgánicos, sustancias biócidas, elementos 
mayores y menores en ppm (potasio: 14800, nitrógeno: 14500, 
sodio: 13660, magnesio: 130, fósforo: 750, calcio: 620, zinc: 505, 
fierro: 440, cobre: 147, manganeso: 72 y silicio: 4. 
El AlgaEnzims, es un producto biológico y 100 % orgánico que es 
obtenido al extraer de las algas marinas el máximo de sus 
componentes sin perder sus atributos y permite a 
microorganismos marinos tales como los fijadores de nitrógeno del 
aire, halófilos, mohos, levaduras y gérmenes aeróbicos mesofílicos 
vivir en asociación con las algas, permanecer en estado viable, 
propagarse y multiplicarse en el medio donde se aplican, ya sea 
en forma foliar o al suelo, ya que potencializan su acción benéfica. 
También contiene todos los elementos mayores y elementos 
menores que requieren las plantas; Aporta además, un complejo 
de enzimas marinas, reguladores de crecimiento de las plantas, 
proteínas, aminoácidos, carbohidratos, vitaminas y sustancias 
biócidas contra plagas y enfermedades (http://filsa.com.mx). 
 
López et al., (1994), reportan la acción de las enzimas como 
fuente de vida. Es de considerarse que al hacer aplicaciones 
foliares de los extractos de algas marinas, las enzimas que estas 
conllevan, refuerzan en las plantas su sistema inmunológico (más 
http://filsa.com.mx/
 
14 
 
defensa) y su sistema alimentario (más nutrición) y activan sus 
funciones fisiológicas (más vigor). Resultado: plantas más sanas 
con mejor nutrición y más vigorosas. Además, las microalgas 
cianofitas que los extractos y otros derivados de algas marinas 
conllevan, ya sea que se apliquen foliarmente o al suelo, fijan el 
nitrógeno del aire aún en las no leguminosas (Canales, 1999 y 
Martínez, 1995). La aplicación foliar de extractos de algas marinas 
facilita la nutrición y mejora los frutos (De Villiers, et al, 1983). 
Todos los beneficios antes mencionados repercuten en un 
incremento del rendimiento y calidad del grano. 
 
Objetivo. Disminuir la fertilización química en canola de temporal 
bajo labranza reducida en suelos de la Meseta Purhépecha. 
 
MATERIALES Y MÉTODOS 
 
Sitios experimentales 
 
Los experimentos se establecieron en la Meseta Purhépecha, 
durante el ciclo PV 2004 y 2006, así como la parcela de validación 
en el ciclo PV 2007. El clima que presenta esta región es templado 
con lluvias en verano, precipitación media anual de 930.5 mm y 
temperaturas que oscilan desde 4.1 a 25.4º C. El análisis físico de 
suelo indicó una textura franco arenosa, con un pH de 6.2 
(moderadamente ácido).La ubicación y manejo del cultivo en cada 
sitio se muestra en el cuadro 1. 
 
La siembra se realizó con la sembradora Dobladense modelo OL-
U2N (adecuada al cultivo de canola por investigadores del C. E. 
Uruapan) bajo labranza reducida (rastreo, surcado y escarda), la 
cantidad de semilla utilizada fue de 3.5 kg ha
-1
 con el híbrido Hyola 
401; antes de la siembra, la semilla fue tratada con Carbofurán 
27.53 % (400 ml/3.5 kg semilla) para evitar el daño de la plaga del 
suelo (Familia Carabidae). La fertilización se aplicó un tercio del N 
y todo el P al momento de la siembra y el resto del N en la escarda 
(55 días después de la siembra: DDS). El control de malezas fue 
manual en Cherán y Pichátaro, mientras que en Nahuatzen se 
realizó a los 27 días después de la siembra con la aplicación de 
 
15 
 
Paraquat al 25% (2.0 L ha
-1
) en forma dirigida y Sethoxydim (1.5 L 
ha
-1
) para hoja angosta, en forma total ya que no afecta al cultivo. 
 
Cuadro 1. Sitios experimentales y parcela de validación ubicación 
 y manejo del cultivo. Campo Experimental Uruapan. 
 CIRPAC. INIFAP. 
Características Cherán Nahuatzen Pichátaro 
Ciclo PV 2004 2006 2007 
Latitud Norte 19º 41’ 19° 38’ 19° 32’ 
Longitud Oeste 101º 57’ 101° 55’ 101° 47’ 
a.s.n.m (m) 2,400 2,388 2,331 
Fecha siembra 11 junio 22 junio 17 julio 
Fertilización 100-80-00 80-60-80 90-60-00 
Fecha cosecha 11 noviembre 29 noviembre 21 diciembre 
 
Tratamientos 
 
Los tratamientos evaluados en cada ciclo se muestran en los 
Cuadros 2, 3 y 4. La parcela de validación se estableció en 
Pichátaro, Mich., durante el ciclo PV 2007, se aplicó carbonato de 
calcio (CaCO3) en plena floración en dosis de 4000 ppm y el 
tratamiento de fertilización química 90-60-00 NPK, comparada con 
el testigo regional que es 120-60-80 de NPK. Los estados 
fenológicos más importantes del cultivo de la canola de acuerdo a 
la escala de Lancashire et al. (1991), se muestran en la Figura 2. 
 
 
16 
 
Cuadro 2. Tratamientos evaluados en Cherán, Mich., durante el 
 ciclo PV2004. Campo Experimental Uruapan, 
 CIRPAC, INIFAP. 
 
Tratamientos Dosis Época de 
aplicación 
1 
 
Silicato de potasio 
(SK) 
4000 
ppm 
Plena floración 
2 Ethrel 480 (ET) 800 ppm Estado fenológico 
65 
3 Sulfato de calcio 
(SC) 
4000 
ppm 
de acuerdo a la 
escala 
4 Carbonato de 
calcio (CC) 
4000 
ppm 
de Lancashire et 
al., 
5 Testigo sin aplicar 
(TE) 
 (1991). 
 
 
Cuadro 3. Tratamientos evaluados en Nahuatzen, Mich., durante 
 el ciclo PV 2006. Campo Experimental Uruapan. 
 CIRPAC. INIFAP. 
 
Tratamientos Dosis Época de 
aplicación 
1 Liquifertidol (LI) 1.0 L 
ha
-1
 
Plena floración 
2 algaenzims
MR
 (AL) 1.0 L 
ha
-1
 
Estado 
fenológico 65 
3 carbonato de calcio 
(CC) 
4000 
ppm 
de acuerdo a la 
escala 
4 Testigo sin aplicar 
(TE) 
 de Lancashire et 
al., 
5 Testigo regional sin 
apl. (TR)* 
 (1991). 
*Este tratamiento fue con la fertilización química completa 120-60-
80 de NPK y labranza 
convencional. 
 
 
 
17 
 
Cuadro 4. Tratamientos de carbonato de calcio (46 % de Ca) 
 evaluados en canola durante el ciclo PV 2006, en 
 Nahuatzen, Mich. Campo Experimental Uruapan. 
 CIRPAC. INIFAP. 
 
 Tratamientos Dosis 
(ppm ha
-
1
) 
Época de 
aplicación (estado 
fenológico)** 
1 Inicio de floración 
(IF) 
4000 60 
2 Plena floración (PF) 4000 65 
3 Fin de floración (FF) 4000 69 
4 Testigo sin aplicar 
(TE) 
 
5 Testigo Regional 
(TR)* 
 
** Fenología basada en la escala de Lancashire et al., 1991. 
 * Este tratamiento fue con la fertilización química completa 120-
60-80 de NPK y labranza 
 Convencional. 
 
Características estudiadas 
 
Las variables analizadas se muestran en la figura 1 y fueron: altura 
de planta (ALP), número de silicuas por planta (NSP), número de 
granos por silicua (NGS), peso de mil granos (P1000), peso 
específico del grano (PES) y rendimiento de grano (RGR), el cual 
fue ajustado al 8 % de humedad. Se determinó el índice de área 
foliar (IAF) con el Ceptómetro Accupar, modelo PAR-80 y la 
conductancia estomática (CE) con un porómetro LI-COR modelo 
LI-1600. El rendimiento de aceite (%) se obtuvo en el laboratorio 
de la industria de aceite Grasas y Derivados S.A. de C.V., ubicada 
en Zapopan, Jal. 
 
Diseño estadístico 
 
Los experimentos fueron establecidos bajo un diseño experimental 
de bloques completamente al azar con cuatro repeticiones y la 
parcela total estuvo conformada por cuatro surcos de 80 cm de 
 
18 
 
ancho y 5 m de largo; la parcela útil, fueron los dos surcos 
centrales (8 m
2
). Los análisis de varianza se realizaron con el 
paquete MSTAT (Nissen et al., 1986) y la comparación de medias 
de tratamientos se efectuó con la prueba de Tukey al 5%. Se 
realizó un análisis económico para determinar la relación beneficio 
costo (B/C) de acuerdo a la metodología de Pérez (2002). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 1. Características estudiadas en los experimentos de 
canola evaluados en la Meseta Purhépecha bajo 
condiciones de temporal. 
 
 ALTURA DE PLANTA ÍNDICE DE ÁREA FOLIAR 
GRANOS POR SILICUA SILICUAS POR PLANTA PESO DE MIL GRANOS 
RENDIMIENTO DE GRANO 
PESO HECTOLÍTRICO 
CONDUCTANCIA 
ESTOMÁTICA 
RENDIMIENTO 
ACEITE 
 
19 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 2. Estados fenológicos de la canola de acuerdo a la escala 
 de Lancashire et al., 1991. 
 
RESULTADOS Y DISCUSIÓN 
 
Condiciones climáticas 
 
Ciclo Primavera-Verano 2004 
En la figura 3, se muestra la distribución de lluvias y temperaturas 
prevalecientes durante el desarrollo fenológico del cultivo de 
canola en el ciclo primavera-verano 2004, para Cherán, Mich. De 
acuerdo a los requerimientos climáticos, la canola necesita 
temperaturas entre 5 y 30 °C, ideales entre 22 y 24 °C (Thomas, 
2003); en éste aspecto el desarrollo de la canola se vio muy 
favorecido, ya que desde el período vegetativo hasta el de 
maduración (154 días) las temperaturas máximas de julio a 
octubre oscilaron entre 20 y 22 °C, mientras que, las mínimas 
 EF 12 (Dos hojas) EF 30 (Inicia crecimiento tallo 
principal) 
EF 60 (Inicio de floración) 
EF 65 (Plena floración) EF 69 (Fin de floración) EF 75 (50 % silicuas tamaño final) 
EF 85 (50 % silicuas maduras) EF 89 (Madurez completa) Cosecha 
 
20 
 
fluctuaron entre 9 y 11 °C, las temperaturas mayores de 30 °C y 
las menores de 0 °C se presentaron del 8 al 9 de noviembre, casi 
para la cosecha, por lo tanto, ya no tuvieron efecto sobre el cultivo. 
En lo referente a la precipitación el cultivo requiere 500 mm y se 
presentaron 970 mm, con una distribución uniforme, lo que indica 
que el cultivo tuvo suficiente agua durante todo su desarrollo 
fenológico. La acumulación de unidades calor durante todo el 
desarrollo del cultivo hasta la madurez fisiológica fue de 1550 días. 
Ciclo Primavera-Verano 2006 
 
En Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 2006, desde el período 
vegetativo hasta el de maduración (160 días), las temperaturas 
máximas oscilaron entre 21 y 26 °C, de finales de junio a 
noviembre, mientras que, las mínimas fluctuaron entre 8 y 14 °C; 
no se presentaron temperaturas superiores de 30 °C y las 
inferiores o iguales a 0 °C sucedieron del 22 al 26 de noviembre, 
casi para la cosecha, por lo tanto, ya no tuvieron efecto sobre el 
cultivo. El 16 de agosto, se presentó una tormenta con granizo, 
causando una disminución en el rendimiento de grano del 5%. En 
lo referente a la precipitación se acumularon 1187 mm, con una 
distribución uniforme, lo que indica que el cultivo tuvo 
temperaturas ideales y suficiente agua en todos sus estados 
fenológicos (Figura 4). Durante el desarrollo fenológico no se 
presentaron diferencias, todos los tratamientos en general 
germinaron a los 13 días después de la siembra (DDS), mientras 
que el inicio de floración, fin de floración y madurez de corte 
ocurrió a los 50, 94 y 160 DDS, respectivamente. 
 
Ciclo Primavera-Verano 2007 
 
La distribución de lluvias y temperaturas prevalecientes durante el 
desarrollo fenológico del cultivo de canola en el ciclo primavera-
verano 2007, se muestran en la figura 5. Desde el período 
vegetativo hasta el de reproducción (94-99 días), las temperaturas 
máximas oscilaron entre 23 y 29 °C, de finales de junio a 
noviembre, mientras que, las mínimas fluctuaron entre 3 y 15 °C. 
Durante el período de reproducción del 26 de octubre al 2 de 
noviembre las temperaturas bajas mostraron valores entre -1 a -2 
 
21 
 
0
20
40
60
80
1
6
2
6 6
1
6
2
6 5
1
5
2
5 4
1
4
2
4 4
1
4
2
4 3
1
3
m
m
-10
0
10
20
30
°C
PREC. T.MAX T.MIN
JUN JUL AGO SEP OCT NOV
p. VEGETATIVO
P. REPRODUCTIVO
P. MADURACIÓN
970 mm
°C, en tanto que del 5 al 15 de noviembre fueron entre -0.1 a -3.9 
°C; lo que causó una disminución del 15 %, en el rendimiento de 
grano. La precipitación acumulada fue de 924 mm, la mayor 
cantidad se presentó del período vegetativo al reproductivo, con 
una distribución uniforme, ya que en el período de maduración la 
precipitación descendió y su distribución fue desuniforme. Durante 
su desarrollo se presentaron diferencias en las etapas fenológicas 
del cultivo, las plantas tratadas con carbonato de calcio, en plena 
floración aceleraron el desarrollo y llegaron a madurez fisiológica 
siete días antes que el testigo sin aplicar, como se muestran en el 
cuadro 5. 
 
 
 
Figura 3. Fenología de la planta de canola y distribución de la 
 lluvia y temperatura en Cherán, Mich., durante el ciclo 
 PV 2004. 
 
 
22 
 
0
20
40
60
80
6
1
6
2
6 6
1
6
2
6 5
1
5
2
5 4
1
4
2
4 4
1
4
2
4 3
1
3
2
3 3
1
3
m
m
-10
0
10
20
30
°C
PREC. T.MAX T.MIN
JUN JUL AGO SEP OCT NOV DIC
P. VEGETATIVO
P. REPRODUCTIVO
P. MADURACIÓN
DAÑO
GRANIZO
HELADAS
1187 mm
5 %
0
20
40
60
80
5
1
5
2
5 4
1
4
2
4 3
1
3
2
3 3
1
3
2
3 2
1
2
2
2 2
1
2
2
2
m
m
-10
0
1020
30
°C
PREC. T.MAX T.MIN
JUL AGO SEP OCT NOV DIC
HELADAS
924 mm
P. VEGETATIVO
P. REPRODUCTIVO
P. MADURACIÓN
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 4. Condiciones climáticas prevalecientes en Nahuatzen, 
 Mich., ciclo PV 2006. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 5. Condiciones climáticas presentes durante el desarrollo 
 fenológico del cultivo de canola en Pichátaro, Mich. 
 Ciclo PV 2007. 
 
23 
 
Cuadro 5. Estados fenológicos del cultivo de canola con y sin 
 carbonato de calcio, durante el ciclo PV 2007. Campo 
 Experimental Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 
 
Estado fenológico 
 
Días después de la siembra 
CaCO3 Testigo Regional 
Emergencia 12 12 
Inicia crecimiento tallo 
principal 
41 41 
Botones florales presentes 49 49 
Plena floración 64 64 
Fin de floración 90 94 
50 % silicuas maduras 112 118 
80 % silicuas maduras 136 144 
Madurez completa 148 155 
Cosecha 157 157 
 
Análisis de varianza, prueba de medias y análisis 
económico 
 
Ciclo Primavera-Verano 2004 
 
El análisis de varianza realizado a los datos obtenidos durante el 
ciclo PV 2004, indicaron diferencias significativas para todas las 
variables evaluadas, excepto para el rendimiento de grano. Los 
coeficientes de variación oscilaron entre 0.7 y 19.4 %, son 
aceptables considerando que el experimento fue de temporal, por 
lo tanto, la información obtenida es confiable. Para altura de 
planta, el testigo (119 cm) supero a todos los tratamientos 
evaluados y obtuvo ganancia entre 3 cm (CC) y 16 cm (ET). En el 
número de silicuas por planta el testigo tuvo 334 y se vio superado 
por todos los tratamientos evaluados, los cuales presentaron 
ganancias entre 154 y 224 silicuas por planta, los mayores valores 
correspondieron al CC, ET y SK. Para el número de granos por 
silicua, el testigo fue superado únicamente en un 3 % por el CC. 
En el peso de mil granos, el testigo mostró 4.0 g y solamente lo 
supero con 0.2 g el SC. En lo que respecta al peso hectolítrico 
solo se formaron dos grupos de significancia, el primero estuvo 
formado por el SK, SC, CC y TE con valores entre 63.1 y 63.5 kg 
hl
-1
, el segundo grupo lo formó el ET con 61.9 kg hl
-1
. El 
 
24 
 
rendimiento de grano no mostro diferencias significativas entre los 
tratamientos evaluados, pero numéricamente todos los 
tratamientos superaron al testigo (2134 kg·ha
-1
), el mejor 
tratamiento fue el CC seguido por el SK y ET, con incrementos 
sobre el testigo del 13, 12 y 9 %, respectivamente (Cuadro 6). 
 
Los resultados indicaron que el número de silicuas por planta fue 
la variable que obtuvo el mayor beneficio con los fertilizantes 
foliares aplicados. Lo ideal sería, que todas las componentes de 
rendimiento fueran mejoradas, pero esto no sucede porque la 
planta tiene efectos compensatorios. Los tratamientos con los 
mejores rendimientos se comportaron como sigue: el CC obtuvo 
valores altos para NSP y NGS, bajo para el P1000; el SK alto para 
el NSP, bueno para el NGS y P1000; el ET fue alto para el NSP, 
bueno para el P1000 y bajo para el NGS. 
Finalmente, para el rendimiento de aceite, únicamente se envió a 
la industria para su análisis una muestra por tratamiento; es 
necesario mencionar, que los resultados probablemente 
estuvieron influenciados por la humedad de grano, ya que el 
testigo contenía una humedad de 6.9 %, mientras que en los 
tratamientos osciló entre 7.2 y 7.6 %. En este aspecto el SK fue el 
único tratamiento que mostró un rendimiento similar al testigo de 
44.4 %, mientras que el resto de tratamientos estuvieron por 
debajo del testigo con valores entre 43.6 y 43.9 % (Figura 6). Si 
bien, los fertilizantes foliares no tuvieron una influencia positiva 
sobre la producción de aceite, tampoco la afectaron, ya que los 
valores que se obtuvieron se encuentran dentro de los 
requerimientos de la industria, que son entre el 40 y 44 %. 
 
 
25 
 
Cuadro 6. Análisis de varianza y comparación de medias de los 
 tratamientos estudiados en Cherán, Mich., durante el 
 ciclo PV 2004. Campo Experimental Uruapan, CIRPAC, 
 INIFAP. 
 
TRATAMIENTOS ALP 
(cm) 
NSP NGS P1000 
(g) 
PES 
kg hl
-
1
 
RGR 
kg 
ha
-1
 
1 SK 109 
AB 
494 
AB 
29 A 3.6 
AB 
63.5 
A 
2395 
2 ET 103 B 538 
AB 
27 A 3.7 
AB 
61.9 
B 
2329 
3 SC 116 A 488 
AB 
28 A 4.2 A 63.1 
A 
2301 
4 CC 116 A 558 A 32 A 2.7 B 63.1 
A 
2412 
5 TE 119 A 334 B 31 A 4.0 A 63.4 
A 
2134 
 
 MEDIA 112.5 482.5 29.4 3.6 63.02 2314 
 C.V. (%) 4.9 19.4 7.6 12.6 0.7 7.2 
 SIGNIFIC. ** * * ** ** ns 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 6. Rendimiento de aceite obtenido en cada uno de los 
 tratamientos evaluados en Cherán, Mich., durante el 
 ciclo PV 2004. 
0
10
20
30
40
ACEITE (%) 44,4 43,9 43,9 43,6 44,5
SK ET SC CC TE
 
26 
 
Al realizar el análisis económico, este mostró que todos los 
fertilizantes evaluados obtuvieron ganancias netas superiores al 
testigo, con incremento entre $ 939.00 y $ 1,720.00; la situación 
fue similar en la relación beneficio-costo, los tratamientos 
evaluados superaron al testigo en 5 y 10%. Si la inversión por el 
costo del CC, ET y SK es de $ 26.0, $ 79.0 y $ 116.0, más $ 
200.00 de la aplicación, la ganancia esta alrededor de los mil 
pesos por hectárea, por lo tanto, estos tratamientos incrementan 
el rendimiento y rentabilidad del cultivo, sin afectar el medio 
ambiente (Cuadro 7). 
 
Cuadro 7. Análisis económico de los tratamientos evaluados en 
 Cherán, Mich., durante el ciclo PV 2004. Campo 
 Experimental Uruapan. CIRPAC. INIFAP. 
 
Tratamientos RGR 
kg 
ha
-1
 
Costo 
cultivo 
($) 
($/kg) Ingreso ($) B/C 
($) Bruto Neto 
1 SK 2395 7575 7.0 16765 9190 2.21 
2 ET 2329 7538 7.0 16303 8765 2.16 
3 SC 2301 7489 7.0 16107 8618 2.15 
4 CC 2412 7485 7.0 16884 9399 2.26 
5 TE 2134 7259 7.0 14938 7679 2.06 
 
Ciclo Primavera-Verano 2006 (fertilizantes foliares) 
 
En el ciclo PV 2006, los análisis de varianza para los fertilizantes 
foliares evaluados indicaron alta significancia para la ALP, NSP, 
PES y RGR, sin embargo, para el NGS y P1000 no hubo diferencias 
significativas; los coeficientes de variación fueron aceptables, con 
un rango entre el 1 y 23 %. 
 
Para el índice del área foliar el testigo regional (TR) fue superado 
entre 24 y 68 % por los tratamientos evaluados, el mejor fue el CC 
(4.0) seguido por el AL (3.0) y LI (2.7); mientras que en la 
conductancia estomática el mayor valor lo obtuvo el CC con un 
incremento de 41.8 cm
-2
 s
-1
 sobre el TR (Figura 7). En la variable 
ALP, el primer grupo de significancia estuvo formado por el TR 
 
27 
 
(141 cm) y el segundo por el resto de los tratamientos (123 a 127 
cm). En el NSP todos los tratamientos superaron al TR con 
ganancias entre 148 y 421 silicuas, el valor máximo correspondió 
al CC con 735 silicuas por planta. En la variable NGS y P1000, no 
se presentaron diferencias significativas. Para el rendimiento de 
grano, el valor más alto correspondió al CC con 2306 kg ha
-1
, 
seguido por el LI con 2161 kg ha
-1
 (Cuadro 8). 
 
Es importante señalar que el tratamiento con mayor altura, no fue 
el que obtuvo el valor más alto de IAF y RGR, esto se debe a que 
la producción de materia seca es la responsable del rendimiento 
de grano final y esta se realiza a través de la actividad 
fotosintéticamente activa (PAR) interceptada por la cubierta 
vegetal, la cual está en función del área foliar (Gómez, 2002). 
Los resultados del análisis económico (Cuadro 9) mostraron que el 
Carbonato de Calcio obtuvo la mayor relación beneficio costo con 
$ 2.04, seguida del Liquifertidol ($ 1.84), además el ingreso neto 
comparado con el TR ($ 539.00) fue de $ 8226.00 y $ 6737.00, 
respectivamente. 
 
Cuadro 8. Análisis de varianza y comparación de medias de 
 tratamientos evaluados en Nahuatzen, Mich., duranteel ciclo PV 2006. Campo Experimental Uruapan. 
 CIRPAC. INIFAP. 
 
Tratamientos 
 
ALP 
(cm) 
NSP NGS P1000 
(g) 
PES 
kg 
hl
-1
 
RGR 
kg ha
-1
 
1 LI 123 B 579 
AB 
33 3.9 68.9 
B 
2161 A 
2 AL 123 B 462 
AB 
31 4.0 69.1 
AB 
1710 B 
3 CC 127 B 735 A 31 4.2 66.4 
C 
2306 A 
4 TE 128 B 618 A 31 4.3 69.6 
AB 
1896 B 
5 TR 141 A 314 B 32 4.1 70.5 
A 
1285 C 
 Media 128.5 541.4 31.4 4.1 68.9 1871.7 
 C.V. (%) 4.1 22.5 5.7 4.3 1.0 4.5 
 Significancia. ** ** ns ns ** ** 
 
28 
 
0
1
2
3
4
5
0
10
20
30
40
50
60
LI AL CC TE TR
BC
B
A
C
D
B B A C BC
gs (cm-2 s-1) IAF
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Figura 7. Valores de índice de área foliar (IAF) y conductancia 
 estomática (gs) para cada tratamiento evaluado en 
 Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 2006. 
 
Cuadro 9. Análisis económico de cada tratamiento evaluado en 
Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 2006. Campo 
Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 
Tratamientos RGR 
kg 
ha
-1
 
Costo 
cultivo 
($) 
($/kg) Ingreso ($) B/C 
($) Bruto Neto 
1 LI 2161 8390 7.0 15127 6737 1.80 
2 AL 1710 8130 7.0 11970 3840 1.47 
3 CC 2306 7916 7.0 16142 8226 2.04 
4 TE 1896 7690 7.0 13272 5582 1.73 
5 TR 1285 8456 7.0 8995 539 1.06 
 
 
 
29 
 
Ciclo Primavera-Verano 2006 (épocas de aplicación del 
CC) 
 
El análisis de varianza para las épocas de aplicación evaluadas en 
el ciclo PV 2006 mostró diferencias altamente significativas para la 
ALP, IAF, NSP, PES y RGR, mientras que para el NGS y P1000 fue 
no significativo; los coeficientes de variación oscilaron entre el 1 y 
23 %, aceptables para experimentos manejados en temporal. 
 
En ALP, el testigo obtuvo el valor máximo con 141 cm, mostró 
ganancias entre 13 y 17 cm sobre las épocas de aplicación 
evaluadas. Los tratamientos con CC para la variable IAF, 
obtuvieron los valores más altos con incrementos sobre el TR 
entre 50 y 122 %, el mejor tratamiento fue la aplicación de CC en 
plena floración con una ganancia sobre el TR de 2.2, esto se 
convertirá en incremento en el rendimiento de grano (Cuadro 10). 
Estas ganancias en el IAF se explican con lo reportado por Bartlett 
(1965), ya que él aplicó calcio soluble en col, melón, chile, rábano, 
calabacita y tomate, logrando incrementos en la fotosíntesis, 
debido a que la planta absorbió cantidades mayores de dióxido de 
carbono del aire, lo que aumentó los componentes orgánicos 
básicos de la planta; además, incrementó la absorción de amonio. 
Menciona también, que el exceso de nitrógeno que absorben, las 
plantas lo guardan y lo utilizan para estimular el crecimiento 
durante toda la temporada. Por último, señala que tal vez el efecto 
más beneficioso de aplicar calcio fue que las plantas cambiaron 
sus patrones normales de deposición de reservas de energía 
(carbohidratos, metabolitos). 
 
En el NSP, los tratamientos con CC aplicados en fin de floración y 
plena floración mostraron los valores más altos, superando al TR 
con 542 y 421 silicuas por planta, respectivamente; la aplicación al 
inicio de floración fue la que obtuvo la menor ganancia sobre el 
TR, con 159 silicuas. Aunado a esto en el número de granos por 
silicua y peso de mil granos, pese a que no se presentaron 
diferencias significativa, la ganancia del los tratamientos con CC 
en fin de floración sobre el TR fue de 3 granos por silicua, mientras 
que en el peso de mil granos las aplicaciones en plena floración y 
fin de floración superaron al TR con 0.4 g (Cuadro 10), lo cual 
 
30 
 
numéricamente es significativo; ya que con la aplicación de CC en 
fin de floración se incrementa en 542 silicuas por planta, dos 
granos por silicua y en 0.4 g en el peso de mil granos, la 
ganancia total es de 1084 granos por planta, que equivale a 0.43 g 
por planta. Estos resultados coinciden con los obtenidos por Sung 
et al. (1990), ya que ellos mostraron que al agregar calcio soluble 
al agua del arrozal, se logra hasta un 15 % de la producción de 
energía de la hoja bandera se transfiera a la formación y llenado 
de la semilla. Además, menciona que el peso del arroz aumentó el 
14 % cuando se aplicó calcio durante el llenado del grano. Estos 
mismos resultados se obtuvieron en betabel, cebolla, trigo, avena 
y cebada. En el PES, el TR obtuvo el valor máximo de 70.5 kg hl
-1
, 
con ganancia entre 1 y 6 % sobre las épocas de aplicación de CC 
(Cuadro 10). 
 
Los componentes directos de rendimiento antes descritos, se 
reflejan en el rendimiento de grano, es por esto, que los mejores 
tratamientos para esta variable fueron la aplicación de CC en fin 
de floración y en plena floración con incrementos del 86 y 80 % 
sobre el TR, respectivamente (Cuadro 10). Ganancia similar en 
rendimiento obtuvieron Fenn et al. (1994), ya que ellos 
incrementaron hasta en un 50 % el peso de los bulbos de cebolla y 
betabel, sobre los bulbos sembrados únicamente con nitrato, 
después de haber transcurrido 30 horas de la aplicación de calcio. 
 
 
31 
 
Cuadro 10. Análisis de varianza y comparación de medias de 
épocas de aplicación de carbonato de calcio 
estudiadas en Nahuatzen, Mich., durante el ciclo PV 
2006. Campo Experimental Uruapan, CIRPAC, 
INIFAP. 
 
Tratamientos ALP 
(cm) 
IAF NSP NGS P1000 
(g) 
PES 
kg hl
-
1
 
RGR 
kg 
ha
-1
 
1 IF 125 
B 
3.5 
B 
473 
CD 
30 4.0 65,1 
BC 
1847 
B 
2 PF 127 
B 
4.0 
A 
735 
AB 
31 4.2 66,4 
BC 
2306 
A 
3 FF 128 
B 
2.8 
B 
856 
A 
33 4.2 63,9 
C 
2385 
A 
4 TE 124 
B 
2.7 
B 
555 
BC 
31 4.0 63,4 
C 
1827 
B 
5 TR 141 
A 
1.8 
C 
314 
D 
32 4.1 70,5 
A 
1285 
C 
 
 Media 128 2,91 546 31 4 65,86 1942 
 C.V. (%) 2 12 14 7 5 2,3 4 
 Significancia ** ** ** ns ns ** ** 
 
Al realizar el análisis económico, los tratamientos con la mayor 
relación beneficio costo de $ 2.11 y $ 2.04 fueron la aplicación de 
CC en fin de floración y plena floración, respectivamente; con 
ganancia económica sobre el TR de $ 8240.00 y $ 7687.00, 
respectivamente (Cuadro 11). 
 
 
32 
 
Cuadro 11. Análisis económico de cada época de aplicación de 
 carbonato de calcio evaluada en Nahuatzen, Mich., 
 durante el ciclo PV 2006. Campo Experimental 
 Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 
 
Tratamientos RGR 
kg 
ha
-1
 
Costo 
cultivo 
($) 
($/kg) Ingreso ($) Relación 
B/C ($) Bruto Neto 
1 IF 1847 7916 7.0 12929 5013 1.63 
2 PF 2306 7916 7.0 16142 8226 2.04 
3 FF 2385 7916 7.0 16695 8779 2.11 
4 TE 1827 7690 7.0 12789 5099 1.66 
5 TR 1285 8456 7.0 8995 539 1.06 
 
De todo lo anterior se concluye que los incrementos de 
rendimiento debidos a la fertilización foliar pueden ser atribuidos al 
agregado de macronutrientes, micronutrientes o a la estimulación 
del crecimiento producida por las fitohormonas y demás 
compuestos orgánicos adicionados. La bibliografía menciona 
aumentos de rendimientos por las tres vías mencionadas. 
Además, Ventimiglia et al., (2000) mencionan diferencias de 
rendimiento por fertilización foliar en trigo cuya magnitud no sería 
explicable por la dosis de macroelementos aportados, y lo 
atribuyen a un efecto promotor del crecimiento producido por los 
compuestos orgánicos presentes en el fertilizante foliar. 
Los resultados expuestos anteriormente coinciden parcialmente 
con lo reportado por Ferraris y Couretot (2004), ya que mencionan 
que el fertilizante foliar aplicado en trigo provocó un incremento del 
área foliar y alargó el llenado de los granos, lo cual se tradujo en 
un aumento en el rendimiento de manera significativa. Además, 
citan que la dosis de macroelementos aportados en el ensayo 
(0,82 kg N ha
-1
) es claramente insuficiente para producir aumentos 
en la productividad de entre 621 y 815 kg ha
-1
; por este motivo, 
sugieren que gran parte de estos incrementos del rendimiento 
fueron atribuibles a la micronutrición o a un efecto de estimulación 
del crecimiento. 
 
 
33 
 
Resultados de la validación del Carbonato de CalcioPara rendimiento de grano no hubo diferencia significativa; sin 
embargo, en el tratamiento con CC disminuyó la fertilización 
nitrogenada en un 25 % y se está eliminando el potasio. El análisis 
económico indico que el tratamiento con CC fue el que obtuvo la 
mayor relación beneficio-costo, con una ganancia adicional sobre 
el testigo de 40 centavos por cada peso invertido; además, 
presentó un incremento en el ingreso neto de $ 1,679.00 sobre el 
mismo tratamiento con fertilización completa (Cuadro 12). 
 
Cuadro 12. Rendimiento y relación beneficio costo por cada 
 tratamiento validado en canola. Pichátaro, Mich., PV 
 2007. Campo Experimental Uruapan, CIRPAC, INIFAP. 
 
Tratamientos RGR 
kg 
ha
-1
 
Costo 
cultivo 
($) 
Valor de la 
Producción 
($/kg) 
Ingreso ($) Relación 
B/C ($) Bruto Neto 
1 90-60-
00+CC 
2007 6895 7 14049 7154 2.04 
2 120-60-80 
(TR) 
2006 8567 7 14042 5475 1.64 
 
 
CONCLUSIONES 
 
1. La aplicación de carbonato de calcio como de fertilizante 
foliar hace posible disminuir la cantidad de nitrógeno y 
potasio en 25 % y 100 %, sin que el rendimiento se afecte. 
 
2. El costo de producción en promedio se disminuyó en un 
11 % y la relación beneficio costo se incrementó en un 31 
% con respecto al tratamiento con fertilización completa. 
 
3. El mejor tratamiento fue el carbonato de calcio con 
rendimiento de grano hasta de 2,412 kg ha
-1
. 
 
4. La aplicación del carbonato de calcio debe hacerse en 
plena floración, ya que después de este estadio el cultivo 
se cierra y es difícil realizar la esta labor. 
 
34 
 
 
5. Si la aplicación de carbonato de calcio es con tractor debe 
hacerse en plena floración y si es manual en fin de 
floración. 
 
6. El uso de carbonato de calcio reduce el ciclo del cultivo en 
siete días e incrementa el índice de área foliar y el número 
de silicuas por planta. 
 
7. El carbonato de calcio es barato, fácil de adquirir y 
contribuye a reducir la aplicación de fertilizantes químicos, 
así como la contaminación de los mismos al suelo y medio 
ambiente. 
 
 
 
35 
 
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41 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 Asociación Nacional de Industriales de Aceite y Manteca 
Comestible A.C (ANIAME) y Aceitera TRON Hermanos 
S.A de C.V., por el financiamiento a los proyectos de 
investigación de canola, de los que se generó la 
información. 
 
 A los productores Manuel Vázquez Cortés y Jorge 
Vázquez García, por su colaboración al prestar sus 
terrenos y realizar las prácticas culturales durante el 
desarrollo del cultivo. 
 
 Al Sr. Noé Acosta Vázquez, personal del Campo 
Experimental Uruapan, INIFAP, por su valiosa 
colaboración en la ejecución de los trabajos de campo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
42 
 
El contenido de esta obra, fue revisado por el Comité Editorial Campo 
Experimental Uruapan: 
 
COMITÉ EDITORIAL 
 
Ing. Roberto Toledo Bustos. Presidente 
Ing. H. Jesús Muñoz Flores. Secretario 
Dr. Víctor Manuel Coria Ávalos. Vocal 
Ing. Trinidad Sáenz Reyes. Vocal 
 
REVISIÓN TÉCNICA 
 
M. C. Alfredo González Ávila 
Investigador C. E. Centro Altos de Jalisco 
Ing. Jaime Gustavo López Arriaga 
Investigador C. E. Santiago Ixcuintla, Nay. 
 
SUPERVISIÓN 
 
Dr. Keir Francisco Byerly Murphy 
Dr. Gerardo Salazar Gutiérrez 
 
EDICIÓN 
 
Ing. Roberto Toledo Bustos 
Ing. H. Jesús Muñoz Flores 
 
Para mayor información acuda, llame ó escriba al: 
 
Centro de Investigación Regional del Pacífico Centro. INIFAP 
Parque Los Colomos S/N. Colonia Providencia. 
Apartado Postal 6-103 CP. 44660 
Guadalajara, Jalisco, México. 
Tels: (33) 3641 6971; 3641 3575; 3641 2061; 
3641 6969; 3641 2248. Fax: 3641 3598. 
 
Campo Experimental Uruapan 
Av. Latinoamericana 1101 
Colonia Revolución. C. P. 60150 
Uruapan, Michoacán, México 
Tel. (452) 523 7392 
Fax (452) 524 4095 
Correo-e: gomez.blanca@inifap.gob.mx 
cepeda.mario@inifap.gob.mx 
mailto:gomez.blanca@inifap.gob.mx
mailto:cepeda.mario@inifap.gob.mx
 
43 
 
 
 
 
 
 
 
FERTILIZACIÓN FOLIAR DE CANOLA DE TEMPORAL EN LA 
MESETA PURHÉPECHA 
 
 
 
 
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, 
AGRICOLAS Y PECUARIAS 
CENTRO DE INVESTIGACION REGIONAL DEL PACIFICO 
CENTRO 
 
 
 
 
 
La edición consta de 500 ejemplares 
Marzo de 2010 
 
 
Impreso en México – Printed in México 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
44 
 
CENTRO DE INVESTIGACION REGIONAL PACIFICO CENTRO 
(CIRPAC) 
 
 
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%U
%U
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%U
%U
Vaquerías
Tecomán
Ctro. Altos de Jalisco
%U
Santiago Ixcuintla
El Verdineño
Valle de Apatzingán
Uruapan
Costa de Jalisco
%U
Oficinas Centrales
del CIRPAC
SISTEMAS AMBIENTALES
EN EL CIRPAC - INIFAP
N
SIMBOLOGIA
SIGNOS CONVENCIONALES
%U
%U
Sitios Experimentales
Campos Experimentales
Límites estatales
Fuente para su elaboración:
Tipos climáticos de México
INIFAP - 2003
40 0 40 Kilómetros
Escala Gráfica
Trópico Arido Muy Cálido
Trópico Semiárido Muy Cálido
Trópico Semiárido Cálido
Trópico Semiárido Semicálido
Trópico Subhúmedo Muy Cálido
Trópico Subhúmedo Cálido
Trópico Subhúmedo Semicálido
Subtrópico Arido Semicálido
Subtrópico Arido Templado
Subtrópico Semiárido Cálido
Subtrópico Semiárido Semicálido
Subtrópico Semiárido Templado
Subtrópico Subhúmedo Cálido
Subtrópico Subhúmedo Semicálido
Subtrópico Subhúmedo Templado
Subtrópico Húmedo Cálido
Templado Subhúmedo Frío
El CIRPAC comprende los cuatro estados del Pacífico Centro de la República Mexicana, 
que son Colima, Jalisco, Michoacán y Nayarit. Estos en su conjunto abarcan una superficie 
de 154,364 Km
2
, que representan 7.5% de la superficie nacional. En esta área, viven 
12’235,866 habitantes (INEGI, 2005), correspondiendo más de la mitad de ellos al Estado 
de Jalisco. Un 42.6% de la Región Pacífico Centro es apta para la ganadería; 34.56% tiene 
vocación forestal y 22.84% comprende terrenos apropiados para las actividades agrícolas. 
La región posee una gran variedad de ambientes, que van desde el templado subhúmedo 
frío, hasta el trópico árido

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