Adverbios de Tiempo

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Adverbios de Tiempo:
Los adverbios de tiempo son uno de los distintos tipos de adverbio que contempla la lengua española, es decir, de palabras que cumplen una función modificadora de otras palabras, en este caso de verbos, adjetivos u otros adverbios, e inclusive de oraciones enteras. Su nombre proviene del vocablo latino adverbium, compuesto por las palabras ad- (“hacia”) y verbum (“verbo”).
En general, los adverbios son piezas del idioma que no varían su forma y que tienen un significado léxico propio, vinculado con una determinada circunstancia como pueden ser un lugar, un modo de hacer las cosas, o en el caso específico que nos ocupa, un tiempo determinado o una relación histórica, cronológica, dentro de la oración. Es por ello que nos referimos a los adverbios de tiempo.
Además, junto con los adverbios de lugar, modo y cantidad (o grado), sirven para expresar una relación concreta con lo real, mientras que otros tipos de adverbios como los de duda, orden o exclamación tienen que ver más bien con una realidad subjetiva (mental) de quien los utiliza.
Oraciones con adverbios de tiempo
A modo de ejemplo de uso, a continuación listamos algunas oraciones con adverbios de tiempo resaltados:
· Trataré de llegar inmediatamente, pero voy tarde, como siempre.
· Mi equipo de fútbol ganó recientemente un partido que solía perder anteriormente.
· ¿Vas a salir ya? Todavía es temprano.
· Ayer fuimos a ese lugar con el que antaño soñaba.
· Hoy mismo dejaré de fumar.
· Eso fue lo que dijiste anteayer.
Otros tipos de adverbio
Además de los adverbios de tiempo, existen otras categorías adverbiales, como son:
· Adverbios de lugar. Como lo dice su nombre, expresan una relación espacial en la oración, o sea, indican dónde está ubicado un referente. Por ejemplo: allá, acá, ahí, afuera, arriba, abajo, dentro, entre, etc.
· Adverbios de modo. Son aquellos que describen una manera específica en que ocurren las cosas o en que se llevan a cabo determinadas acciones. Por ejemplo: rápidamente, bien, mal, mejor, aprisa, regularmente, etc.
· Adverbios de cantidad. Son aquellos que expresan una proporción en que las cosas se dan, o sea, un grado en que algo sucede. Por ejemplo: poco, mucho, bastante, más, menos, etc.
· Adverbios de orden. Son aquellos que expresan una relación cronológica o de continuidad, o sea, de orden entre los referentes aludidos. Por ejemplo: primero, luego, después, etc.
· Adverbios de duda. En este caso, expresan un cierto grado de incertidumbre del hablante respecto de lo dicho o de algo que podría ocurrir. Por ejemplo: seguramente, quizá, acaso, probablemente, etc.
· Adverbios afirmativos y negativos. Como lo indica su nombre, sirven para afirmar o negar situaciones, esto es, expresar un determinado grado de conformidad con lo dicho. Por ejemplo: sí, no, ciertamente, exacto, jamás, nunca, etc.
· Adverbios interrogativos y exclamativos. Aquellos que permiten introducir oraciones interrogativas o exclamativas, respectivamente, y que suelen por ende acentuarse. Por ejemplo: dónde, cuándo, cómo, qué, quién, etc.