Sistema Nervioso Grupo Lobulo Insular

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UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL LISANDRO ALVARADO
DECANATO EXPERIMENTAL DE HUMANIDADES Y ARTES
PROGRAMA DE LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA
SISTEMA NERVIOSO CENTRAL Y PERIFÉRICO
Integrantes:
Marchán Sucet C.I 27.411.177
Peña Katherinee C.I. 26.669.027
Quintero Omar C.I. 26.943.380
Rivero Amanda. C. I. 26.120.567
Vielma Kerlys C.I 26.779.299
Grupo: Lóbulo Insular
Barquisimeto, 17 de marzo de 2023
Sistema Nervioso Central
1. Cerebro Posterior.
El sistema nervioso central se divide en dos estructuras: el encéfalo y la medula espinal; a su vez, el encéfalo cuenta con tres divisiones: anterior, medio y posterior. El cerebro posterior, también conocido como rombencéfalo, abarca tres componentes: el bulbo raquídeo, ubicado en el mielencéfalo; además, de la protuberancia y el cerebelo, situados en el metencéfalo.
· Protuberancia:
	La protuberancia o Puente de Varolio se encuentra en el tronco encefálico, conectado al mesencéfalo en la zona inferior y al bulbo raquídeo por la zona superior. Una parte de la formación reticular se encuentra en su centro, relevante para el control del sueño y nivel de activación del organismo, entre otras cosas. Además, en esta área también se localizan núcleos sensoriales y motores de algunos nervios craneales, por lo cual, permite la ejecución de distintas funciones, como por ejemplo, la función auditiva y vestibular, la motricidad y sensaciones del rostro y la boca, e incluso, también cuenta con los núcleos que controlan los músculos oculares externos de los ojos (Aguilar, 2011; Rains, 2004)
· Bulbo Raquídeo:
	El segundo componente del conocido cerebro posterior, es el bulbo raquídeo. Esta estructura se encuentra en la zona inferior del tronco cerebral, es decir, arriba de la médula espinal. El bulbo raquídeo se encarga de transmitir información entre el cerebro y la médula espinal, y viceversa, por lo tanto contiene núcleos sensoriales como los encargados de la entrada vestibular y la sensaciones del rostro, garganta y abdomen, además de núcleos motores que inervan la lengua, la garganta y el cuello; es importante mencionar que también controla las funciones de diferentes órganos del cuerpo, como el corazón y la tensión arterial, el sistema digestivo, e incluso el aparato respiratorio, en otras palabras, permite el mantenimiento de la vida (Rains, 2004)
	Por otro lado, se puede considerar que el bulbo raquídeo se divide en tres partes: las pirámides bulbares y decusación piramidal, que posibilita llevar información del cerebro con otras partes del cuerpo, el cruce de los axones (decusación) que ocurre en esta área permite comprender por qué las cortezas de cada lado del cerebro puede controlar los movimientos del lado opuesto, es decir, se da generalmente en las vías motoras. La decusación meniscal tiene un proceso similar al anterior, solo que se presenta en las vías sensoriales. Y por último, el complejo olivar se conecta con el cerebelo, relacionándose también con la motricidad (Bear et al., 2016)
· Cerebelo:
	Para finalizar, la tercera estructura anatómica que conforma el rombencéfalo es el cerebelo. Se encuentra en la parte posterior del cerebro, encima del tronco cerebral y debajo de los lóbulos occipitales; logra vincularse con el tronco cerebral por medio de los pedúnculos cerebelosos. Posee una corteza intricada de pliegues, parecida a la corteza cerebral, además, también cuenta con sus propios cuatro pares de núcleos. Puede procesar la información somatosensorial, visual, auditiva, y vestibular, además, también de las funciones motoras. Por lo tanto, se encuentra a cargo de la regulación del equilibrio y tono muscular; controlar la motricidad voluntaria, como planificar y corregir los movimientos mientras se ejecutan; y el ajuste del aprendizaje por medio del condicionamiento motor (Portellano, 2005; Rains, 2004)
	Por esta razón, una lesión en el cerebelo podría influir en la adecuada conservación de la postura y la coordinación en la estabilidad de los movimientos de lado ipsilateral de la lesión, esto se conoce como ataxia cerebelosas. Dado que a pesar de que el cerebelo es de menor tamaño en comparación al cerebro, contiene una alta cantidad de neuronas, tantas como los hemisferios cerebrales (Rains, 2004)
2. Cerebro Medio.
El cerebro medio, también llamado en alguna literatura como Mesencéfalo, es una sección estrecha del cerebro que se encarga de conectar el cerebro posterior con el anterior, y que durante el desarrollo cerebral suele diferenciarse relativamente poco (Stellman y Finklea, 1998). El área dorsal del mesencéfalo se convierte en una estructura llamada tectum (o techo), mientras que el suelo del mismo se le denomina tegmento. Además, dentro del cerebro medio también se encuentra un estrecho canal conocido como Acueducto Cerebral o Acueducto de Silvio, por el cual fluye el líquido cefalorraquídeo (LCR) y que a su vez conecta con el tercer y cuarto ventrículo (Bear et al., 2016; Stellman y Finklea, 1998).
· Tectum:
En este sentido, el tectum está compuesto por dos estructuras que tienen la apariencia de dos pequeños abultamientos, la primera es el colículo superior o también denominado tectum óptico, ésta se encarga de recibir información directa del ojo y de esta forma controlar los movimientos oculares a través de la inervación de los músculos oculomotores, es por esta razón que el cerebro medio es el sitio en el cual se encuentran dos de los tres núcleos de los nervios craneales encargados del movimiento ocular, formando así los pares craneales III (oculomotor) y IV (troclear). La segunda estructura es el colículo inferior, quien también recibe información sensorial pero proveniente del oído, por lo que esta área es una importante estación de relevo para toda la información auditiva que va en dirección al tálamo (Bear et al., 2016; Dennis Rains, 2004).
· Tegmento:
Por otra parte, el tegmento incluye la sustancia gris periacueductual, la cual esta mayormente compuesta por cuerpos de células neuronales que rodean el acueducto cerebral y además contiene circuitos neuronales que controlan las secuencias del movimiento voluntario, aunado a esto el tegmento también contiene el núcleo rojo y la sustancia negra, los cuales son componentes de gran importancia en el sistema motor, es de esta forma como el núcleo rojo constituye uno de los principales sistemas de fibras encargado de llevar la información motora de la corteza cerebral y cerebelo hacia la medula espinal a través del tracto corticorubral y el tracto cerebelorubral (Aguilar-Morales, 2011). 
· Formación Reticular:
Finalmente, otra estructura localizada en el área mesencefálica es la formación reticular, la cual se concibe como una red de núcleos encargada de la regulación de funciones autonómicas básicas, la misma se encuentra ubicada en la zona nuclear del tronco encefálico, proyectándose desde el borde inferior del bulbo raquídeo hasta el extremo superior del mesencéfalo. Envía axones a la corteza cerebral, el tálamo, y la médula espinal, recibiendo información sensorial por medio de diversas vías. Como bien se menciona anteriormente, la formación reticular participa en funciones autonómicas básicas tales como el control del sueño, el tono muscular, el movimiento de reflejos vitales, el nivel de activación de la atención, entre otros (Aguilar-Morales, 2011). 
3. Cerebro Anterior.
El cerebro anterior es la localidad donde se identifica y se encuentran las estructuras con mayor funcionalidad cognitiva, siendo sobresaliente la corteza cerebral (Rains, 2002).
· Corteza Cerebral
Es la formación de la cubierta exterior de los dos hemisferios cerebrales, donde su ubica el 70% de todas las neuronas del sistema nervioso central (Rains, 2002).
· Lóbulos cerebrales 
Los hemisferios se dividen en cuatro lóbulos “Occipital, Parietal, Temporal y Frontal”. Se utilizan para describir las áreas de la corteza involucradas con comportamientos particulares (Rains, 2002).
Divisiones funcionales de la corteza 
· Corteza Motora: está estrictamente relacionada entre el los lóbulos frontales y la circunvoluciónpre-central en la planeación y ejecución del movimiento. Antes del área motora están las áreas pre-motora y motora suplementaria, que coordinan las secuencias del movimiento y la corteza pre-frontal se encarga del control de los movimientos de ejecución superior que requieren de planeación y modificación de la conducta (Rains, 2002).
· Corteza Somatosensorial: ubicada en la circunvolución post-central de los dos hemisferios, su función es recibir la información sensorial desde el tacto, el dolor, la temperatura, la vibración, posición corporal (Rains, 2002).
· Corteza Visual: La información visual es dirigida desde la retina hasta el núcleo geniculado lateral del tálamo antes der ser plasmada hacia los bancos del surco calcarino en los lóbulos occipitales (Rains, 2002).
· Corteza Auditiva: Se encuentra en la circunvolución de Heschi, del labio inferior de la cisura de Silvio en cada lóbulo temporal. Contienen varias representaciones de frecuencia sonoras conocidas como mapas tonotópicos, que son importantes para percibir las propiedades auditivas como el tono, la ubicación, el ritmo y el timbre (Rains, 2002).
· Corteza Olfativa: La entrada olfativa hacia la corteza es mediante la codificación de moléculas particulares en el ambiente del organismo, obteniendo acceso directo a la superficie ventral de los lóbulos frontales (Rains, 2002).
· Representación cortical del sabor: Se piensa que está ubicada en el labio superior de la cisura de Silvio y la información es codificada cuando alcanza su destino cortical después de hacer sinapsis en el tálamo (Rains, 2002).
· Corteza de asociación: Son aquellas áreas que no median alguna función motora o sensorial, donde solo están involucrados los procesos asociativos o cognitivos, incluyendo el procesamiento de orden superior que subyacen al comportamiento (Rains, 2002).
· Ganglios Basales
Son un conjunto de estructuras subcorticales de sustancia gris que se ubican en el telencéfalo. Teniendo tres subdivisiones “putamen, globus pallidus, núcleo caudado”, conformando el cuerpo estriado. Los Ganglios Basales constituyen un circuito cortical-subcortical que monitorea y ajusta la actividad motora (Rains, 2002).
· Sistema Límbico 
Está constituido por las siguientes estructuras corticales como la circunvolución cingulada, la circunvolución subcallosa, la circunvolución parahipocampica y el hipocampo, además del septum, la amígdala, el hipotálamo y el núcleo anterior del tálamo. Su papel es la de regular la función autónoma y endocrina, además de influir en la conducta emocional e irascible (Rains, 2002).
· Diencéfalo 
Las estructuras más relevantes del Diencefalo son el tálamo, situado en la profundidad del cerebro, rodeado lateralmente por el tercer ventrículo, dorsalmente por los ventrículos laterales y lateralmente por la capsula interna, donde sus núcleos específicos tienen la función de portar información sensorial proveniente de cada modalidad sensorial formando sinapsis hacia la corteza. Y el hipotálamo que se encuentra ubicado debajo del tálamo, está comprendido por el tejido que forman las paredes inferiores del tercer ventrículo, y está relacionado con el procesamiento emocional y la motivación mediados por el sistema límbico (Rains, 2002).
Sistema Nervioso Periférico
1. Médula Espinal
     Según Rains (2004) este componente del sistema nervioso se encuentra ubicado a partir del bulbo raquídeo hasta la "cauda equina" o cola de caballo de forma caudal, la cual a su vez está compuesta de treinta y un pares de nervios espinales los cuales son los más bajos que continúan de forma caudal hasta dejar la columna vertebral. A su vez la médula posee un centro de sustancia gris rodeado de sustancia blanca, el cual se aprecia con forma de mariposa. 
     La sustancia blanca comprende tractos somatosensoriales ascendentes, tractos motores descendentes y fibras de proyección intraespinales los cuales actúan como conexión entre las distintas zonas de la médula. Por su parte la sustancia gris se divide en cuerno ventral, que posee las motoneuronas alfa encargadas de la contracción muscular, y el cuerno dorsal que contiene interneuronas que transmiten información desde las neuronas somatosensoriales primarias (que tienen sus axones entran a la médula por la raíz dorsal) y las motoras, vías esenciales para los reflejos espinales (Rains, 2004). 
     Tal como se mencionaba la médula espinal posee la función de regulación del tono muscular, es decir, activación e inhibición de movimientos musculares. Además posee sensibilidad somática general por lo cual trabaja con sensibilidades especiales de los cinco sentidos (vista, gusto, olfato, entre otros), así como con la somestecia táctil, térmica, nociceptiva y propioceptiva (Diéguez y Velayos, 2015).
2. Nervios craneales y espinales
Los nervios craneales y espinales son los encargados de la comunicación del encéfalo y la médula con el resto del cuerpo, estos forman parte del sistema nervioso periférico (Aguilar, 2011). 
Los nervios raquídeos o espinales resultan de la unión de las raíces dorsales y ventrales y emergen de la medula espinal, estos están encargados de transmitir la información sensorial a través de un viaje hacia los músculos o a los receptores sensoriales que inervan, ramificándose repetidamente a medida que avanzan. Estos nervios son 31 en total, dividiéndose de la siguiente manera:
· 8 nervios cervicales (C1-C8) que salen de la columna cervical.
· 12 nervios torácicos (T1-T12) que salen de la columna torácica.
· 5 nervios lumbares (L1-L5) salen de la columna lumbar.
· 5 nervios sacros (S1-S5) que salen del hueso sacro.
· 1 nervio coccígeo que emerge del hueso coccígeo o cóccix (Hernández, s.f.).
Ahora bien, no solo hay 31 pares de nervios espinales sino que también tenemos 12 pares de nervios craneales y estos están unidos a la superficie ventral del encéfalo, algunos cumplen funciones sensoriales y motoras relacionadas a la cabeza y el cuello, estos no pasan por la médula espinal a diferencia de los nervios espinales, sino que salen directamente del cerebro. Cada par craneal emerge de la siguiente manera: Sobre el tallo cerebral están el par I y II, desde el mesencéfalo el par III y IV, desde la plataforma (o puente de Varolio) los pares V, VI, VII y VIII y por último desde el bulbo raquídeo los pares craneales IX, X, XI y XII (Hernández, s.f.). Los 12 pares craneales son los siguientes:
1. Olfatorio (Olfato)
2. Óptico (Visión)
3. Oculomotor (Movimientos oculares)
4. Troclear (Movimientos oculares)
5. Trigémino (Músculos de la mandíbula, tacto y dolor)
6. Abducens (Movimientos oculares)
7. Facial (músculos de la cara, gusto)
8. Auditivo (Audición, equilibrio)
9. Glosofaríngeo (Gusto, músculos de la faringe y la laringe)
10. Vago (Órganos internos)
11. Espinal Accesorio (Músculos del cuello)
12. Hipogloso (Movimientos de la lengua) (Aguilar, 2011)
3. Sistema Nervioso Autónomo
     Se trata de un componente del sistema nervioso encargado de regular las funciones viscerales así como el proceso de homeostasis, esto quiere decir que regula funciones tales como la respiración, la circulación, la digestión, el metabolismo, la secreción glandular, la temperatura corporal, la reproducción y también coordina todas esas funciones vitales. Cabe destacar que tal como su nombre lo refleja es un sistema autónomo, independiente, el cual trabaja sin que el individuo sea consciente de su funcionamiento (Navarro, 2002).
     De igual forma, Navarro (2002) establece la siguiente estructura funcional de este sistema:
"Las vías efectoras de los sistemas simpático y parasimpático constan, típicamente, de una cadena de dos neuronas. Una neurona preganglionar, cuyo soma se localiza en el sistema nervioso central (SNC) y envía su axón para sinaptar con una neurona posganglionar, cuyo soma está en un ganglio autonómico y que a su vez inerva los órganos diana" (p. 553).
     Según Navarro (2002) el sistema puede ser dividido en dos. En primer lugar el sistema nervioso simpático conocido también como división toracolumbar, poseeuna cadena de ganglios simpáticos paravertebrales paralela a la columna vertebral dónde cada cadena consta de aproximadamente 24 ganglios. 
     La segunda división se trata del sistema nervioso parasimpático donde los somas de sus neuronas preganglionares se ubican en núcleos del tronco encefálico o la columna lateral de la médula espinal sacra. Nuevamente Navarro (2002) nos indica que:
"En la porción craneal las neuronas preganglionares se sitúan en los núcleos eferentes viscerales, de donde distribuyen sus fibras periféricamente por nervios craneales:
– Núcleo de Edinger-Westphal: nervio motor ocular común (III).
– Núcleo salivatorio superior y lagrimal: nervio facial (VII).
– Núcleo salivatorio inferior: nervio glosofaríngeo (IX).
– Núcleo dorsal del vago y núcleo ambiguo: nervio vago (X)". (p.554)
     El nervio vago regula el 75% de la actividad parasimpática debido su alcance. 
REFERENCIAS
Aguilar Morales, J.E. (2011). La estructura del sistema nervioso. México: Asociación Oaxaqueña de Psicología A.C. http://cleuadistancia.cleu.edu.mx/cleu/flash/PAG/lecturas/poligrafia/Estructura%20sistema%20nervioso.pdf
Bear, M. F., Connors, B. W., & Paradiso, M. A. (2016). Neurociencia. La exploración del cerebro (4.a ed.). Wolters Kluwer. https://davidfloresblog.com/wp-content/uploads/2020/04/Neurociencia.-La-exploraci%C3%B3n-del-cerebro-4%C2%AA-Ed.-Bear-Connors-Paradiso.pdf
Diéguez, G. & Velayos, J. L. (2015). Anatomía y Fisiología del sistema nervioso central. 
 CEU Ediciones: España.
Hernandez, N. (s.f). Anatomofisiologia del sistema neurológico. 
http://ri.uaemex.mx/bitstream/handle/20.500.11799/103599/secme27158_1.pdf?sequence=1#:~:text=%EF%82%B4Los%2031%20pares%20de,que%20salen%20del%20hueso%20sacro. 
Navarro, X. (2002). Fisiología del sistema nervioso autónomo. Revista Neurología, 35, (6), 
 pp. 553-562.
Portellano, J. A. (2005). Introducción a la neuropsicología. McGraw-Hill.
Rains,G. (2004). Principios de Neuropsicología Humana (1 ª Ed.) México: McGraw-Hill
Stellman, J. M. y Finklea, J. (1998). Enciclopedia de Salud y Seguridad en el Trabajo (2ª. Ed.). Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.