Logo Studenta

Vol9-1-1982-11

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

NEUMOTORAX EN EL RECIÉN NACIDO 
Dr. Aníbal Ramos 
A,- Incidencia: El neumotorax espontá-
neo se presenta en 1 a 2o/o de todos 
los recién nacidos, solamente en el 
0.5o/o es sintomático. 
Generalmente hay historia de dificul-
tad respiratoria, parto dificultoso, as-
piración de sangre, moco ó meconio. 
Los niños que han sido sometidos a in-
tubación endotraqueal, reanimación, 
aspiración de meconio, neumonía ó 
terapia ventálatoria (PEEP) tienen ma-
yor riesgo de presentar Neumotorax. 
B.- Enfermedad de membrana hialina: De 
acuerdo con algunos autores; el riesgo 
de pneumotórax aumenta en pacientes 
con EMH así por ejem: la incidencia 
de neumotorax fue de 24o/o en pa-
cientes tratados con oxígeno solo, 
I60/0 sí se empleó presión positiva 
continua en la vía aérea y 34o/o sí 
se empleó ventilador mecánico. 
C- Malformación renal: diversos estudios 
la relacionan con neumotorax inex-
plicable en recién nacidos. 
D.- Neumopericardio: Puede sospecharse 
si también están asociados el neumo-
torax con neumomediastino; y si no 
mejora con drenaje pleural deberá 
hacerse una punción pericárdica con 
aguja, también se han empleado car 
téteres para drenaje de neumoperi-
cardio persistente. 
DIAGNOSTICO: 
A.- Los signos de neumotorax pueden in-
cluir moderada ó severa dificultad 
respiratoria ó cianosis, desplazamiento 
del choque de la punta del corazón, 
cambios de ruidos cardíacos, dismi-
nución de la perfusión tisular perifé-
rica. Los signos clínicos pueden ser 
útiles no obstante que pueden haber 
alteraciones a nivel de gases arteriales. 
La severa hipotensión, apnea y bradi-
cardia, pueden ser también signos ini-
ciales de un aumento súbito de la pre-
sión intratorácica que impide el retor-
no venoso con reducción en el gasto 
cardíaco. Cualquier neonato que súbi-
tamente inicia disnea que se deteriora 
rápido debe sospecharse neumotorax. 
El neumomediatino puede ser sospe-
chado al palparse enfisema subcutáneo 
ó cambio en los ruidos cardíacos, en 
el neumopericardio hay disminución 
de los ruidos cardiacos. Si el neonato 
está críticamente enfermo deberá 
efectuarse la punción pleural directa 
con aguja, pero si su condición no es 
crítica, deberá efectuarse radiografía 
de tórax AP y lateral., ésto permitirá 
diferenciar el neumotorax de quistes 
pulmonar congénito, enfisema lobar, 
hernia diafragmática, aspiración, EMH 
(Enfermedad, de Membrana Hialina) y 
nuemonía. Otro medio de diagnóstico 
es la transiluminación, pero en nuestro 
medio no contamos con éste aparato. 
(Trasiluminador de fibraóptica). 
B.- TRATAMIENTO: 
Hay dos opciones, en pacientes asinto-
máticos, puede adoptarse medidas 
conservadoras, simplemente vigilando 
al niño por cianosis, alimentándolo 
con pequeñas cantidades de leche, pa-
ra evitar llanto, ó bien puede emplear-
se oxigenoterapia al lOOo/o y 40o/o 
alternándola cada dos horas para evi-
tar la fibriplasia retrolental.- Tomán-
dole en ambos casos radiografías seria-
das para ver evolución radiológica, ge-
neralmente los neumotorax se resuelve 
en 24 - 48 horas. 
Otras medidas de tratamiento del neumo-
torax incluyen: aspiración por punción con 
aguja y colocación de tubo con drenaje a 
través de sello de agua.-La primera se efec- 
- 3 4 - 
túa de la manera siguiente: 1.- El paciente 
se coloca en posición sentada si es posible. 
2.- Conecte una aguja calibre No. 25 auna 
jeringa de 50 mi a travez de una llave de 
tres vías. 3.- Coloque una hemostática aun 
centímetro del extremo de la aguja para 
evitar que penetre demasiado profundo. 
4.- La aguja se introduce a travez del segun-
do espacio intercostal en la línea axilar an-
terior lateral al músculo pectoral mayor. 
Para minimizar el riesgo de hemorragia la 
aguja se introduce sobre el borde de la cos-
tilla. 5.- Si la fuga de aire continúa, se de-
berá conectar un tubo para drenaje, se debe 
tener cuidado cuando el niño llora ó respira 
violentamente sobre todo si la pleura parie-
tal con la pleura visceral están en oposición; 
se puede producir una fístula broncopleu-
ral, que ocurre raramente, por lo cual la 
aguja debe retirarse tan pronto como sea 
posible. 
TORACOTOMIA MÍNIMA: El tubo se in-
serta entre el tercero y cuarto espacio in-
tercostal en la línea axilar anterior, debe 
evitarse perforar el músculo pectoral ó 
lascerar la arteria intercostal, debe evitarse 
también el área del pezón. El tubo debe 
ser No. 8 ó 10 French, si se emplea un 
trocar una pinza de kelly se emplea para 
evitar que el trocar se introduzca más de 
2 cms. Una pequeña incisión se hace a 
través de la 6a. costilla y el catéter es in-
troducido por éste agujero, para evitar fu-
gas de aire. Si no se tiene trocar, puede uti-
lizarse una hemostática curva para intro-
ducir el tubo, haciéndolo avanzar en dife-
rentes direcciones dependiendo de la loca-
lización del neumotorax. En sitio de inci- 
sión se fija con seda 000 y se aplica anti-
biótico localmente. Un error común con-
siste en colocar el tubo en un sitio inade-
cuado por ejemplo en tejido subcutáneo 
de la pared torácica ó en parénquima pul-
monar, ocasionalmente uno de los agujeros 
laterales accidentalmente queda fuera de la 
pared torácica externa; por lo cual el drena-
je puede ser inefectivo. 
DRENAJE: El tubo torácico se conecta a 
un sistema de tres frascos plásticos descar-
tables para sello de agua ó succión. Usual-
mente la succión que se aplica es de - 15 
cms. de H2O, salvo casos severos se aplican 
presiones de -25 cms de H2O, y pueden 
aplicarse hasta dos tubos de drenaje. Para 
retirar el tubo de drenaje, se espera a que 
la enfermedad respiratoria se resuelva, y 
que ya no drena aire por el tubo por 24 a 
48 horas y cuando la radiografía pulmonar 
no muestra aire extrapulmonar por 24 - 48 
horas la succión se descontinúa y si 24 ho-
ras después no. hay evidencia de fugas de 
aire, el tubo se pinza; después una radio-
grafía se toma a las dos horas y 24 horas 
y si todo va bien se retira el tubo y se 
aplica vendaje oclusivo. Este procedimiento 
puede ser modificado en neonatos severa-
mente enfermos que requieren ventilación 
y altas presiones. 
BIBLIOGRAFÍA 
1) Normas de Atención Pediátrica del 
I.H.S.S. 
- 3 5 -

Continuar navegando

Otros materiales