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Meditación para amarte al máximo e invocar tu propósito Rebekah Borucki Preparación/acerca de esta meditación Te crearon con intención divina. Es un hecho innegable e indiscutible. Eres un ser milagroso, capaz de lograr grandes cosas, y tu vida tiene un propósito único. Una de las tareas más importantes que tienes en esta vida es descubrir en qué consiste ese propósito. Sin embargo, el objetivo de la meditación para amarte al máximo no consiste en identificar el propósito, sino en ayudarte a creer de todo corazón que ese propósito existe y que mereces encontrarlo. ¡Eso es! Una vez que creas que tienes un propósito, crearás oportunidades para que se te revele. Así que piensa en esta meditación como en un cartel de bienvenida para tu propósito. Estás enviando una señal al Universo que dice: «¡Eh, Propósito! Sé que estás ahí fuera (o ya aquí dentro) y quiero que seamos amigos. Puedes manifestarte cuando quieras». Al propósito no suele apetecerle mucho manifestarse ante personas poco seguras de sí mismas, así que esta meditación te ayudará también a cultivar un amor radical, ardiente y ardoroso hacia ti mismo, con el fin de atraer a tu propósito. Esto sucederá en un proceso de tres fases. Te guiaré para que uses tres mantras: uno para liberarte de las opiniones, otro para afirmar tu valía y otro para llamar la atención de tu propósito. ¿Cuándo? Los sueños nos ayudan enormemente a resolver conflictos internos e influyen en nuestro subconsciente. ¿Por qué no meditar entonces antes de acostarte y dar a tus sueños un buen material con el que trabajar? Las meditaciones nocturnas ayudan a que los últimos pensamientos del día sean buenos pensamientos. En lugar de soñar «cualquier cosa», puedes reprogramar tu subconsciente para amarte a ti mismo. Completa tu rutina nocturna antes de acomodarte para esta meditación. Debería ser lo último que hagas antes de dormir. ¿Dónde? ¡Prueba en la cama! Sellarás esta meditación con el sueño, así que la cama puede ser el lugar perfecto para realizarla. Asegúrate de que el dormitorio está tranquilo, en silencio y oscuro (quizá necesites usar una lamparita de lectura para leer la meditación la primera vez). Su santidad el XIV dalái lama dijo: «El sueño es la mejor de las medicinas». Crear un espacio perfecto para dormir es, básicamente, lo mismo que crear un espacio perfecto para meditar. ¿Sabes ya cómo hacerlo? Empieza por eliminar todo lo que suene, pite o vibre. ¡A mí me costó muchísimo! Solía dormir con el móvil bajo la almohada, y lo miraba varias veces a lo largo de la noche y nada más despertarme. Había noches en las que incluso me dormía con él en la mano. ¡Puedes tratarte mucho mejor! Deja el móvil, el portátil y el resto de los aparatos electrónicos al otro lado de la puerta del dormitorio. Si eres de los que son incapaces de despertarse sin ayuda, usa un despertador de los de siempre, no la alarma del móvil. Si tu pareja insiste en tener un televisor en el dormitorio, acordad que se apagará a partir de una hora establecida y sugiere sustituirlo por una lectura ligera antes de ir a dormir. Nuestros sentidos permanecen alerta mientas dormimos, por lo que tener un televisor encendido o música sonando no hace más que estimularnos e interrumpir el sueño profundo. Si crees que la televisión te ayuda a conciliar el sueño, te aseguro que te equivocas. Haz que tu dormitorio esté lo más oscuro posible; nada de pantallas encendidas, de luces nocturnas ni de farolas que iluminan desde el otro lado de la ventana. Apaga, desconecta y disfruta del silencio. ¿Postura? Puedes recostarte sobre un par o tres de almohadas para adoptar la postura fácil o también puedes probar la del ángulo atado reclinado. Recuerda que está bien relajarse, pero no tanto como para dormirse antes de tiempo. Apoya las manos sobre las rodillas o los muslos con las palmas hacia arriba, o a sendos lados del cuerpo si estás en una postura reclinada. Antes de cada mantra te pediré que cierres los ojos. Cuando acabes de repetir el tercer mantra, mantén los ojos cerrados y duérmete. Tienes 4 minutos para invocar tu propósito ¡Esta es una meditación muy importante! Estás a punto de hacer declaraciones colosales que enraizarán y sostendrán todos y cada uno de tus sueños. Descubrir cuál es tu propósito es un hito monumental y el viaje hacia ese descubrimiento puede estar lleno de aventuras. Cuanto más abierto estés, más te enamorarás de ti mismo y más fácil será que tu propósito y tú podáis encontraros. ¡Así que invoquemos al propósito! 1. Respira con naturalidad. No intentes modificar la respiración. Limítate a observar cómo el aire entra y sale del cuerpo con facilidad. Sigue observando la respiración hasta que veas que se ha vuelto tranquila y equilibrada. 2. Ahora que sientes comodidad en la postura que has adoptado, relájate todavía más, cerrando los ojos y haciendo un escáner mental de todo tu cuerpo, desde la coronilla a la punta de los dedos de los pies. Empieza por la parte superior de la cabeza y desplaza lentamente la atención hacia abajo, en busca de tensión o incomodidad. Escanea la frente, los ojos y la mandíbula. Relaja todos los músculos del rostro y abre los labios. Desplaza la atención a los hombros, el pecho y los brazos, y ve liberando toda la tensión que encuentres. Abre y relaja los dedos de las manos. Relaja el abdomen, no lo metas hacia dentro. Escanea los muslos y desplaza la atención por las piernas hasta llegar a los dedos de los pies. Muévelos y suelta toda la tensión. Pensamientos para unos dulces sueños Ha llegado el momento de repetir los mantras para amarte al máximo. Los tres son absolutamente ciertos. Cuanto antes aceptes la verdad innegable de estos mantras, antes conectarás con tu propósito. Repite cada mantra en cada exhalación de una serie de cinco respiraciones completas. Una vez que hayas repetido un mantra durante una serie, abre los ojos para leer el siguiente. Al final de la última serie de repeticiones, da las buenas noches al Universo. Ahora pondrás a trabajar a tu subconsciente mientras te sumerges en un sueño profundo y reparador. Si has usado una luz de lectura para leer la meditación, apágala antes de repetir el último mantra. Mantra 1- Cuando me disocio de las opiniones de los demás, conecto con mi verdad. Mantra 2- Soy amor divino y posibilidad infinita. Mantra 3- Estoy preparado para conectar con mi propósito.
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