Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
La guerra fría Introducción La Guerra Fría fue un período de tensión y rivalidad entre las dos superpotencias mundiales, Estados Unidos y la Unión Soviética, que se extendió desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta la década de 1990. Aunque no hubo un conflicto militar directo entre estas dos naciones, la Guerra Fría tuvo un impacto significativo en la política, la economía y la sociedad a nivel global Realizar una valoración sobre los aspectos mas resaltantes en este ensayo resulta fundamental ¿Qué fue la Guerra Fría? La Guerra Fría fue uno de los conflictos más importantes del siglo XX. Enfrentó a las dos superpotencias de la segunda mitad del siglo XX: la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y Estados Unidos. Fue un conflicto por la supremacía del mundo y la imposición del modelo político, económico, ideológico y cultural que cada país defendía: el comunismo (URSS) y el capitalismo (EE. UU.). El término “Guerra Fría” fue utilizado por el escritor inglés George Orwell (1903-1950) en un ensayo de 1945 titulado You and the Atomic Bomb (“La bomba atómica y tú”), publicado en el diario Tribune. Posteriormente se popularizó para describir la particularidad del conflicto, en el que la Unión Soviética y Estados Unidos nunca se enfrentaron militarmente de forma directa. La Guerra Fría se caracterizó por las disputas diplomáticas, la carrera armamentística y espacial, la constante amenaza mutua y el intento por influir sobre otros países. Esto incluyó la intervención en guerras subsidiarias, es decir, conflictos bélicos en terceros países en los que cada potencia apoyaba a una de las facciones enfrentadas. Influyó en conflictos militares como la guerra de Corea (1950-1953), la guerra del Sinaí (1956), la guerra de Vietnam (1955-1975) y la guerra afgano-soviética (1979-1989). La Guerra Fría involucró a gran parte del mundo, al que dividió en dos bloques enfrentados a lo largo de sus más de 40 años de duración. La Guerra Fría comenzó tras el fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945 y culminó en diciembre de 1991 con la disolución política de la Unión Soviética. Tuvo etapas de hostilidad y etapas de distensión y fue la época en la que surgió por primera vez el miedo a una guerra nuclear, que en caso de haber ocurrido habría tenido efectos devastadores. Antecedentes de la Guerra Fría Tras la Revolución rusa, las potencias occidentales intentaron frenar el avance del comunismo. Las tensiones entre el gobierno comunista ruso y las potencias capitalistas occidentales comenzaron poco después de la Revolución de Octubre de 1917, que instauró un gobierno bolchevique en Rusia. Este hecho provocó una guerra civil en la que algunos gobiernos extranjeros (como el de Estados Unidos) apoyaron a los grupos contrarrevolucionarios. Sin embargo, los antecedentes directos de la Guerra Fría se encuentran en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), cuando se produjo una alianza entre el primer ministro británico Winston Churchill (1874-1965), el presidente estadounidense Franklin Delano Roosevelt (1882-1945) y el líder soviético Iósif Stalin (1878-1953), para hacer frente a las tropas de la Alemania nazi y a las pretensiones expansionistas de Adolf Hitler (1889-1945). Esta alianza fue funcional hasta que se logró la derrota de Alemania en 1945. A continuación, se acordó la división político-territorial de Alemania en cuatro zonas de ocupación: tres occidentales, a cargo del Reino Unido, Estados Unidos y Francia (que luego se unificaron entre sí), y una zona oriental ocupada por la Unión Soviética, que además controlaba los territorios de Europa del Este que habían sido invadidos por el Ejército Rojo (soviético) para expulsar de ellos a los nazis. Ya en 1946, Churchill empleó el término “telón de acero” para describir la línea que separaba Europa en dos bloques que luego se extendieron a otras regiones del mundo: El bloque occidental o capitalista, bajo la hegemonía de Estados Unidos e integrado por los países que firmaron el Tratado del Atlántico Norte (que dio origen a la OTAN). El bloque oriental o comunista, controlado por la Unión Soviética e integrado por los países firmantes del Pacto de Varsovia. Las tensiones entre la Unión Soviética y las potencias occidentales se agravaron cuando el gobierno estadounidense impulsó la Doctrina Truman (1947), que consistía en apoyar a los países que se enfrentaban a insurrecciones comunistas. A esto se sumó un conflicto cuando el gobierno soviético bloqueó las fronteras del sector occidental de Berlín (ocupado por las potencias occidentales), hecho conocido como el bloqueo de Berlín de 1948-1949. Causas de la Guerra Fría Las causas de la Guerra Fría pueden resumirse en: La oposición ideológica entre el sistema comunista y unipartidista dirigido por la Unión Soviética, y el sistema capitalista y multipartidista encabezado por Estados Unidos y las potencias europeas occidentales. El sentimiento anticomunista que se extendió por Europa y Estados Unidos a partir de la Revolución de Octubre de 1917 y del estallido de la guerra civil china entre comunistas y nacionalistas en 1927. La propaganda anticapitalista en la Unión Soviética que identificaba a Estados Unidos y sus aliados como un peligro imperialista y burgués. El derrumbe de Europa occidental como potencia mundial luego de la devastación provocada por la Segunda Guerra Mundial, lo que llevó a la afirmación como superpotencias de Estados Unidos y la Unión Soviética, los dos países que lideraron la victoria frente a los nazis. Las tensiones derivadas del reparto político-territorial de Alemania entre las fuerzas aliadas: Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, por un lado, y la Unión Soviética, por el otro. La ocupación soviética de los territorios de Europa del Este previamente conquistados por los nazis, que tras su liberación por el Ejército Rojo quedaron bajo el control de la Unión Soviética a través de gobiernos comunistas locales y del mantenimiento de tropas soviéticas. La creciente injerencia estadounidense en Europa, fruto de su protagonismo en la Segunda Guerra Mundial y de la aplicación del Plan Marshall en la posguerra, un programa de ayuda y financiamiento para la recuperación económica europea. Los países que estaban bajo hegemonía soviética rechazaron la ayuda del Plan Marshall, que la Unión Soviética consideraba un instrumento del imperialismo estadounidense. Consecuencias de la Guerra Fría La Guerra Fría estimuló conflictos bélicos en países de Asia, América Latina y Medio Oriente. Las principales consecuencias de la Guerra Fría fueron: La división de Europa y el resto del mundo en dos bloques dominados por Estados Unidos y la Unión Soviética, que configuraron un mundo bipolar mediante alianzas y el control o la influencia sobre otros países. La carrera armamentística y espacial, en la que cada potencia invertía recursos para superar a su adversario en el desarrollo de armamento convencional y nuclear y en la exploración del espacio exterior, lo que derivó en importantes innovaciones tecnológicas usadas también en la vida civil. La amenaza nuclear, que difundió el miedo a una guerra atómica de efectos devastadores. Una guerra de este tipo estuvo a punto de estallar durante la llamada crisis de los misiles de Cuba en 1962. El estallido de conflictos, guerras y golpes militares en otros países, especialmente en Asia, América Latina y Medio Oriente, donde cada potencia apoyaba a uno u otro bando para extender su hegemonía mundial. Estos acontecimientos incluyeron las guerras de Corea, Vietnam y Afganistán, el apoyo soviético al régimen de Fidel Castro en Cuba y el respaldo estadounidense a algunas dictaduras latinoamericanas. La ruptura entre China y la Unión Soviética, a partir de la década de 1960, y la división del mundo comunista entre las vertientes soviética y maoísta. Esto permitió un acercamiento importante entre Estados Unidos y China durante la década de 1970. La reconfiguración del poder mundial tras el derrumbede la Unión Soviética en 1991, cuando Estados Unidos se convirtió en la única superpotencia del mundo y la OTAN se amplió con la adhesión de países que habían abandonado el comunismo. La desilusión ideológica de sectores de izquierda ante la derrota soviética, la idea generalizada de que el comunismo había fracasado y la consolidación del capitalismo a nivel mundial a fines del siglo XX. Fin de la Guerra Fría La caída del muro de Berlín y el colapso de la URSS dieron por terminada la Guerra Fría. La Guerra Fría terminó formalmente con la caída de la Unión Soviética en 1991, luego de años de crisis y de una reducción significativa de su influencia internacional. Ya en los últimos años de la década de 1980, su capacidad de suministrar recursos y ejercer influencia en las naciones socialistas de Europa del Este se había visto muy limitada. Los procesos de cambio emprendidos durante el mandato de Mijaíl Gorbachov a fines de la década de 1980, conocidos como perestroika (reestructuración) y glasnost (apertura), intentaron evitar el derrumbe económico y social del Estado soviético. Sin embargo, la apertura política estimuló la manifestación del descontento social contra el régimen y la reestructuración agravó la crisis económica, lo que fue internacionalmente interpretado como un reconocimiento del fracaso del comunismo. En 1989 se produjeron una serie de revoluciones y cambios políticos en Europa del Este que provocaron el colapso del comunismo en esos países, incluida la caída del Muro de Berlín que llevó a la reunificación de Alemania un año después. Estos hechos trazaron el camino hacia sistemas democráticos con economías de libre mercado. Casi en simultáneo, muchas de las naciones que conformaban la Unión Soviética comenzaron sus respectivos procesos de independencia, lo que produjo la desmembración del Estado soviético luego de setenta años de existencia. Las quince repúblicas soviéticas se convirtieron en Estados independientes. La Federación de Rusia adoptó un modelo de economía de mercado y un sistema democrático multipartidista, y Estados Unidos se consolidó como la mayor potencia mundial. Este hecho marcó el fin de la Guerra Fría. Conclusiones La Guerra Fría no solo afectó a las relaciones internacionales de las dos superpotencias y sus aliados, sino que influyó en todos los aspectos que configuran la sociedad contemporánea, desde la economía hasta la cultura. La religión, la política, los medios de comunicación, la industria militar y civil, la salud, la educación, hasta el más mínimo aspecto de la cotidianidad de la humanidad en esta etapa histórica fue alterado. No en vano, como estaba en juego el modelo de sociedad que habría de imponerse a nivel planetario, el «alma de la humanidad», y para logar este fin cualquier medio podía ser válido, haciendo bueno el pensamiento de Maquiavelo. Como novedad interpretativa fundamental de la bibliografía que se estudia, destaca la incuestionable importancia del individuo como sujeto de la historia y actor principal en la Guerra Fría. Los líderes de la URSS y los Estados Unidos desempeñaron un papel fundamental en el desarrollo de este conflicto y fueron mediatizados en el ejercicio del poder por las cuestiones que han acompañado al ser humano desde su intemporal búsqueda de la felicidad. Bibliografía GARTON ASH, Timothy (1999). Ten Years Aer, New York Review of Books, Nueva York, 18, 18-22. LEFFLER, Melvyn P. (2008). La guerra después de la guerra. Estados Unidos, la Unión Sovié- tica y la Guerra Fría. Barcelona: Crítica. LEWIS GADDIS, John (2008). La Guerra Fría. Barcelona: RBA. LOZANO CUTANDA, Álvaro (2007). La Guerra Fría. Madrid: Melusina. MACMAHON, Robert J. (2016). La Guerra Fría. Una breve introducción. Madrid: Alianza Editorial. NIÑO, Antonio; MONTERO, José Antonio., (Eds.) (2012). Guerra Fría y Propaganda. Estados Unidos y su cruzada cultural en Europa y América Latina, Madrid: Biblioteca Nueva.
Compartir