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Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Programa de Formación del Defensor Público Módulo de Autoformación “Psicología Forense” Autores Lic. David Leonel Girón Marroquin Lic. Alba Rosa Alburez Gálvez Licda. Betsabé Eunice Albanés Gómez Colaboradores Lic. Luis Oscar Díaz Samayoa Licda. Diana Betsabe Barillas Ajín Licda. Tierna Corita Siboney Polillo Cornejo Lic. Oscar Guillermo Hernández Castillo 1ª Edición, Guatemala, julio 2016 Módulos de Autoformación Mediación Pedagógica M.A. Sara Marisol Mejía Alburez Tratamiento del Contenido M.Sc. Idonaldo Arevael Fuentes Coordinador UNIFOCADEP Revisión de Estilo Dra. María Eugenia Sandoval de Paz Diseño y Diagramación Luis Fernando Hurtarte Licda. Nydia Lissette Arévalo Flores de Corzantes Directora General IDPP M.Sc. Idonaldo Arevael Fuentes Fuentes Coordinador de UNIFOCADEP Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal PSICOLOGÍA FORENSE Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Me es grato entregar a los Defensores y Defensoras Públicas, este material de apoyo elaborado por los profesionales de la Sección de Psicología de la Coordinación de Apoyo Técnico, del Instituto de la Defensa Pública Penal, cuyo aporte es consecuencia de los diferentes estudios y análisis bibliográficos para constituir el marco teórico referencial y la experiencia de la práctica de los casos asignados a la Sección de Psicología de la Unidad de Apoyo Técnico. En el presente módulo, se aborda contenido de la Psicología Forense como parte del que hacer o desempeño profesional de la psicología como disciplina en el proceso penal, exponiendo temas relevantes encontrados dentro de los procesos atendidos en esta institución, por ser una ciencia auxiliar de las Ciencias Jurídicas y Sociales se considera el abordaje de temas que van conectados con la identificación de trastornos relacionados con: "Trastorno mental permanente y transitorio, Estado emotivo y miedo invencible desde el punto de vista psicológico, Desarrollo psíquico incompleto, inferioridad psíquica o inmadurez psicológica y Trastorno de tipo sexual". Se puede afirmar que este trabajo es un esfuerzo tesonero en investigación científica en el campo de la psicología con rigor académico sobre la casuística de fenómenos criminales que exigen un debido proceso y en el que es necesario estructurar dentro de la estrategia de defensa, la utilización de peritajes y consultorías técnicas que coadyuven a la defensa eficaz del sindicado. Se destaca el aporte de casos prácticos, para darle mayor claridad a los conceptos de los marcos teóricos referenciales de cada capítulo, con la finalidad de ejemplificar la utilización de estas vivencias a otros casos similares y un léxico aplicable a la temática de Psicología Forense. Para concluir me permito agradecer el esfuerzo de todos los profesionales que formaron parte en la elaboración de este módulo de capacitación, demostrando esa mística de trabajo de acuerdo a la misión y visión de la Institución en pro de la defensa de las personas que constituyen una población vulnerable, lo cual los convierte en agentes de cambio con temas de vanguardia dentro del sector justicia, constituyendo un magnífico valor bibliográfico para la Institución. Licda. Nydia Lissette Arévalo Flores de Corzantes Directora General PRESENTACIÓN Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Introducción 11 Justificación 13 Objetivos generales 14 Página Capítulo I LA PSICOLOGÍA COMO DISCIPLINA AUXILIAR EN EL PROCESO PENAL 15 Objetivos Específicos 16 1.1. Fundamentos 18 1.1.1 Contribución de la psicología a la psicología forense. 18 1.1.2 Generalidades de la psicología forense 20 1.1.3 Características del ejercicio de la psicología forense 23 1.1.4 Diferencias entre la psicología forense y la psicología clínica: 24 1.1.5. Las funciones psíquicas en la exploración psicológica forense 25 1.1.6. Objetivos de la psicología forense en materia penal 27 1.2 Objeto de estudio 28 1.2.1. El comportamiento o conducta humana 28 1.2.2. Salud y enfermedad (Un binomio inseparable) 29 1.2.3. Salud y normalidad son relativas 30 1.3 Análisis y comprensión 32 Capítulo II LA ENFERMEDAD MENTAL 33 Objetivos específicos 34 2.1 ¿Qué es trastorno mental? 35 2.2 Enfermedad mental he inimputabilidad 37 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal ÍNDICE Página 2.2.1 Definición de inimputabilidad 37 2.2.2 ¿Quién es un sujeto inimputable? 37 2.2.3 ¿Qué enfermedades mentales causan inimputabilidad? 38 2.2.3.1 Retraso mental (actualmente conocido como discapacidad intelectual) 38 2.2.3.2 Delirium 39 2.2.3.3 Demencias 40 2.2.3.4 Drogodependencias 41 2.2.3.5 Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos 42 2.2.3.6 Trastornos del estado de ánimo 44 2.2.3.7 Trastornos del control de impulsos 45 2.2.3.8 Trastornos de la personalidad 46 2.3 Herramientas dirigidas al defensor público en casos con supuestos enfermos mentales. 47 2.3.1 Como detectar la enfermedad mental en la entrevista 47 2.3.2 Descripción de la simulación de enfermedad mental 48 2.3.3 Criterios de valor para solicitar la exploración psiquiátrica o psicológica del sujeto. 53 Análisis de caso y comprensión 55 Capítulo III TRASTORNO MENTAL TRANSITORIO 57 Objetivos específicos 58 3.1 Marco legal 59 3.1.1 Artículo 23 inciso 2 del Código Penal: 59 3.2 ¿Qué es trastorno mental transitorio? 59 3.2.1 Características 59 3.2.1.1 Origen 60 3.2.1.2 Comienzo 60 3.2.1.3 Duración 60 3.2.1.4 Intensidad 60 3.2.1.5 Curación 61 3.2.1.6 Base patológica 61 3.3 Clasificación del trastorno mental transitorio 62 3.3.1 Trastorno mental transitorio completo 63 3.3.1.1 El trastorno mental transitorio debido a 64 3.3.1.1.1 La ebriedad 64 3.3.1.1.2 Las epilepsias 64 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Página 3.3.1.1.3 La emoción 66 3.3.1.1.4 El sueño 67 3.3.1.1.5 El sonambulismo 68 3.3.2 Trastorno mental transitorio incompleto 69 3.4 Diferencia entre trastorno mental transitorio y enfermedad mental 69 3.5 ¿Cómo detectar el trastorno mental transitorio en la entrevista? 69 Análisis y comprensión 70 Capítulo IV ESTADO EMOTIVO Y MIEDO INVENCIBLE DESDE EL PUNTO DE VISTA PSICOLÓGICO 71 Objetivos específicos 72 4.1 Estado emotivo: 73 4.1.1 ¿Qué es una emoción? 74 4.1.1.1 Tipos de emociones 75 4.2. Estado de emoción violenta 75 4.2.1 Definición 75 4.2.2 Características del estado de emoción violenta 75 4.3 Miedo invencible 76 4.3.1 Definición 76 4.3.2 Características del miedo invencible 78 4.3.3 Cuadro comparativo 79 Análisis y comprensión 80 Capítulo V DESARROLLO PSÍQUICO INCOMPLETO, INFERIORIDAD PSÍQUICA O INMADUREZ PSICOLÓGICA 81 Objetivos específicos 82 5.1 Marco legal 83 5.2 ¿Qué es desarrollo psíquico incompleto? 83 5.2.1 Características del desarrollo psíquico incompleto 84 5.2.2 Tipos de desarrollo psíquico incompleto 85 5.2.2.1 Discapacidad intelectual (antes retraso mental) 85 5.2.2.2 Retraso sociocultural 85 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Página 5.2.2.3 Fronterizo (Discapacidad intelectual no especificada) 86 5.2.2.4 Leve 86 5.2.2.5 Moderado 87 5.2.2.6 Grave 88 5.2.2.7 Profundo 88 5.2.2.8 Autismo 89 5.2.2.9 Síndrome de Down 90 5.2.2.10 Asperger 91 5.3 Desarrollo psíquico incompleto e inimputabilidad 91 5.4 ¿Cómo detectar el desarrollo psíquico incompleto en la entrevista? 92 5.5 ¿Cómo sustentar científicamente el desarrollo psíquico incompleto? 93 5.6 Pruebas psicométricas 94 Análisis de caso y comprensión 95 Capítulo VI TRASTORNOS DE TIPO SEXUAL 97 Objetivos específicos 98 6.1 Parafilias 99 6.1.1 Exhibicionismo 100 6.1.2 Fetichismo 100 6.1.3 Frotteurismo o frotación 100 6.1.4 Pedofilia 100 6.1.5 Masoquismo sexual 101 6.1.6 Sadismo sexual 101 6.1.7 Fetichismo transvestista 102 6.1.8 Voyeurismo 103 6.1.9 Algunas parafilias atípicas 103 6.2 Disforia de género 104 6.3 Trastornos sexuales e inimputabilidad105 Análisis de caso y comprensión 107 Bibliografía 109 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 11 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal La Psicología Forense es un campo de acción de la Ciencia Psicológica, sus aportes son importantes para la sociedad en cuanto al tema de justicia se trate, constituyéndose en una ciencia auxiliar cuando deba abordarse el estudio de caso de forma multidisciplinaria. Siendo una ciencia que apoya los procesos de justicia se considera necesaria la recopilación teórica de los términos generalmente utilizados por los profesionales de la conducta humana. Así que este trabajo se ha concebido como una herramienta pertinente que los abogados deben conocer y estar familiarizados con ello, con la finalidad de comprender de forma clara los conceptos utilizados en este tipo de intervenciones. Ha sido elaborado para presentar de forma didáctica al profesional de la justicia los conceptos, términos y enunciados más importantes que la psicología forense emplea en sus procesos, además busca que el lector se asegure de su aprendizaje encontrando al final de cada capítulo una guía con preguntas que le servirán de reflexión sobre el tema estudiado. Cada temática y los términos claves que encierran, han sido seleccionados por su utilidad, su frecuencia y el manejo profesional que los psicólogos manejan en cada proceso, se redactaron en base a la práctica psicológica forense en el contexto de la justicia guatemalteca incluyendo además aportes bibliográficos. Se espera entonces que cumpla su objetivo trazado y sea útil para el profesional y todo aquel que esté interesado en comprender de forma documental de ¿qué es la psicología forense? y ¿qué contempla su objeto de estudio y contribución para la sociedad? INTRODUCCIÓN 12 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 13 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Siendo las Ciencias tan diferentes unas de las otras, coexisten a la vez en bien de la humanidad, sin embargo; existe la dificultad de entender su metodología y objeto de estudio entre sí, creando a la vez un abismo relacional entre cada una al momento de comunicar sus descubrimientos o resultados. Es por eso que este proyecto tiene como propósito orientar de forma básica al defensor público sobre la temática utilizada por la Psicología Forense, mejorar la comprensión científica de los hallazgos en la exploración psicológica y crear un vínculo multidisciplinario ético y objetivo en el estudio de los casos que la justicia demande. El fin no es convertirlos expertos en el tema sino informar de forma general sobre el qué hacer del Psicólogo Forense y su aplicabilidad para la sociedad en general. En pocas palabras lo que se pretende con este material es acortar cada vez más ese distanciamiento conceptual entre cada una, en este caso las Ciencia Psicológica y las Ciencias Jurídicas y Sociales. De este modo se optimizará aún más la profesionalización en el estudio de caso ya que los abogados estarán familiarizados con los términos y conceptos teóricos de cada una de las diferentes temáticas que aborda la Psicología Forense. JUSTIFICACIÓN 14 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Contar con el conocimiento básico de los términos utilizados en la psicología forense para relacionar y comprender el trastorno mental, el transtorno mental transitorio, el estado emotivo, miedo invensible, desarrollo psiquíco incompleto, inferioridad psiquíca o inmadurez psicológica y trastorno de tipo sexual; con el fin de generar un pensamiento crítico que evalue la necesidad de solicitar la exploración psicológica. OBJETIVO GENERAL 15 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1 CAPÍTULO 1 1.1. Fundamentos 1.1.1 Contribución de la psicología a la psicología forense. 1.1.2 Generalidades de la psicología forense. 1.1.3 Características del ejercicio de la psicología forense. 1.1.4 Diferencias entre la psicología forense y la psicología clínica: 1.1.5. Las funciones psíquicas en la exploración psicológica forense. 1.1.6. Objetivos de la psicología forense en materia penal. 1.2 Objeto de estudio. 1.2.1. El comportamiento o conducta humana. 1.2.2. Salud y enfermedad (Un binomio inseparable). 1.2.3. Salud y rormalidad son relativas. 1.3 Análisis y comprensión LA PSICOLOGÍA COMO DISCIPLINA AUXILIAR EN EL PROCESO PENAL 16 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Al terminar de leer y de analizar el capítulo 1 el defensor o defensora podrá: 1. Comprender que es la psicología forense. 2. Comprender cuál es el rol de la psicología forense en el ámbito penal. 3. Establecer la diferencia entre psicología clínica y forense. 4. Discriminar los conceptos entre normal y anormalidad en el comportamiento humano. OBJETIVOS ESPECÍFICOS 17 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1 Días Barriga, Frida. (2010). ESTRATEGIAS DOCENTES PARA UN APRENDIZAJE SIGNIFICATIVO. Tercera Edición. México; Pág. 245. GUÍA DE LECTURA “Cuando se inicia una actividad de lectura, siempre debe existir un propósito que la antecede… por ello, se considera que establecer el propósito de la lectura es una actividad fundamental porque determina la forma en que el lector se dirigirá al texto como la forma de regular y evaluar todo el proceso.”1 Ejemplo de guía de lectura. (Tomado de Monereo y Castelló, 1997: 93-94) Antes de leer: Piense en el objetivo de la lectura ¿Por qué voy a leer este texto? ¿Cuál es mi intención? Recuerde lo que sabe sobre el tema ¿Tengo algún conocimiento del tema que me pueda ayudar? ¿Será fácil? ¿Lo podré entender? Decida cómo empezará a leer ¿Cómo voy a leer el texto, subrayaré, tomaré notas o lo leeré más de una vez? Durante la lectura: Compruebe si va bien ¿Puedo resumir o explicar con mis propias palabras lo que acabo de leer? ¿Lo que voy comprendiendo me ayuda a conseguir lo que pretendo? ¿Responde a mi objetivo? ¿Tengo que cambiar la forma de leer? Después de la lectura: Revise lo que ha hecho y lo que ha comprendido ¿He cumplido con el objetivo que pretendía? ¿He entendido bien el texto? ¿Si volviera a leerlo, lo haríamos de la misma forma? ¿Por qué? Conozca todas las teorías, domine todas las técnicas, pero al tocar un alma humana sea apenas otra alma humana.” Carl Gustav Jung (Fundador de la Psicología Analítica) 18 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1.1. Fundamentos 1.1.1 Contribución de la psicología a la psicología forense. Concepto de Psicología. La Psicología es la ciencia que estudia la conducta (comportamiento de un individuo, sea de manera general o en una ocasión específica, por lo regular como se conforma o transgrede las normas sociales)2 y los procesos mentales (cualquiera de las funciones mentales que se supone participan en las actividades cognitivas, como la atención, la percepción, el lenguaje, el aprendizaje, la memoria, la solución de problemas y el pensamiento)3. Trata de describir y explicar todos los aspectos del pensamiento, de los sentimientos, de las percepciones y de las acciones humanas. Por ser una ciencia, la Psicología se basa en el método científico para encontrar respuestas. Etimológicamente, psicología, proviene del griego psique: alma y logos: tratado, ciencia. Literalmente significaría ciencia del alma; sin embargo, contemporáneamente se le conceptualiza a la psicología como una parte de las ciencias humanas o sociales que estudia: • El comportamiento de los organismos individuales en interacción con su ambiente. • Los procesos mentales de los individuos. • Los procesos de comunicación desde lo individual a lo micro social. La psicología es el estudio científico de la conducta y la experiencia de como los seres humanos y los animales sienten, piensan, aprenden, y conocen para adaptarse al medio que les rodea. Una vez explicado a grandes rasgos que es la psicología se pueden abordar algunas de las contribuciones que ha hecho a la psicologíaforense; esto con el propósito de entender ciertos términos comúnmente utilizados en la realización de los dictámenes periciales psicológicos. Por ejemplo: Cognición: toda forma de conocimiento y consciencia, como en la percepción, pensamiento, recuerdo, razonamiento, juicio, imaginación y solución de problemas. Junto con el afecto y la conación, es uno de los tres componentes de la mente tradicionalmente identificados.4 Juicio: la capacidad racional humana que le posibilita elegir y valorar entre el bien y el mal.5 2 Viveros Fuentes, Santiago, (2010). (Ed.) APA, DICCIONARIO CONCISO DE PSICOLOGÍA. México: Editorial Manual Moderno; Pág. 97 3 Ibídem, pág. 394 4 Ibídem, pág. 84 5 Fuente: De conceptos, ciencias Jurídicas, Copyright 2016 http://deconceptos.com/ciencias-juridicas/juicio#ixzz3pmWcgM00 19 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Conación: la parte proactiva de la motivación que conecta el conocimiento, el afecto, los impulsos, deseos e instintos con la conducta.6 Emoción: es un estado afectivo que se experimenta, una reacción subjetiva al ambiente que viene acompañada de cambios orgánicos (fisiológicos y endocrinos) de origen innato, influidos por la experiencia. Las emociones tienen una función adaptativa de nuestro organismo a lo que nos rodea. Es un estado que sobreviene súbita y bruscamente, en forma de crisis más o menos violentas y más o menos pasajeras. En el ser humano la experiencia de una emoción generalmente involucra un conjunto de cogniciones, actitudes y creencias sobre el mundo, que utiliza para valorar una situación concreta y, por tanto, influyen en el modo en el que se percibe dicha situación.7 Motivación: el impulso que da propósito o dirección a la conducta humana o animal y que opera a un nivel consciente o inconsciente. Los motivos se dividen a menudo en (a) motivos fisiológicos, primarios u orgánicos, como el hambre, la sed y la necesidad de dormir, y (b) motivos personales, sociales o secundarios, como la filiación, la competición y los intereses y metas individuales.8 Personalidad: el concepto de personalidad es complejo y constituye el resultado de una serie de factores de orden genético, ambientales, sociales, relacionados con el aprendizaje y la identificación con las primeras figuras significativas del niño. 9 Desarrollo Psíquico: desarrollo de la personalidad a través de la niñez y la adolescencia.10 Aprendizaje: proceso de adquirir información, patrones de conducta o habilidades nuevas y relativamente duraderas, que se caracterizan por la modificación de la conducta como resultado de la práctica, el estudio o la experiencia.11 Técnicas e instrumentos de evaluación en psicología: los instrumentos de evaluación psicológica son las técnicas mediante las cuales se recogen los datos referentes a las características psicológicas de las personas estudiadas. Son muchos los instrumentos que sirven para este fin y constituyen la base sobre la cual descansan los fundamentos de la exploración y el análisis del comportamiento del hombre.12 6 Viveros, op. cit. pág. 93 7 Fuente: Artículos Las Emociones, relacionados y extraídos con: "La Inteligencia Emocional" de Goleman, D. (1996), "La motivación y emoción" (1994), de Reeve, J. y "Activación y Conducta" de Vila, J. Fernández, http://www.psicoactiva.com/emocion.htm. Copyright © 1998-2016 PsicoActiva. 8 Viveros, op. cit. pág. 328 9 Brainsky, Simon. (1984). MANUAL DE PSICOLOGÍA Y PSICOPATOLOGÍA DINÁMICAS. Bogotá: Editorial Pluma. 10 Elkonin, D.B. (1971). "ACERCA DEL PROBLEMA DE LA PERIODIZACIÓN DEL DESARROLLO PSÍQUICO EN LA EDAD INFANTIL", En revista Vaprogi Psicología Nº 4 (traducción selección de lecturas de psicología Infantil del Adolescente 1ra. parte) Universidad de La Habana. 11 Viveros, op. cit. pág. 38 12 González Llaneza, Felicia Miriam. (2007). INSTRUMENTOS DE EVALUACÍON PSICOLÓGICA. La Habana: Editorial Ciencias Médicas; Pág. 18 20 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal La psicología social también ha hecho ciertos aportes como los fenómenos intrapersonales entre los que se puede mencionar: Persuasión: el tema de la persuasión ha recibido mucha atención durante los últimos años. La persuasión es un método activo de influencia que intenta guiar a la gente hacia la adopción de una actitud, una idea o un comportamiento por medidas racionales o emotivas.13 Influencia social: la influencia social refiere a la manera en que la gente afecta los pensamientos, sentimientos y comportamientos de otros. Como el estudio de actitudes, es un tema central tradicional en la psicología social. De hecho, la investigación en la influencia social coincide mucho con la investigación de actitudes y persuasión. La influencia social también está relacionada al estudio de la dinámica de grupos, como la mayoría de los principios de influencia son más fuertes cuando tienen lugar en grupos sociales.14 Dinámica de grupo: un grupo es dos o más personas que interactúan, influencian a los otros y comparten una identidad común. Los grupos tienen un número de cualidades emergentes que los distinguen de los agregados: • Normas: reglas y expectaciones implícitas que los miembros del grupo siguen, por ejemplo, dar las gracias, estrechar la mano. • Roles: reglas y expectaciones implícitas para miembros específicos dentro del grupo, por ejemplo, el niño mayor quien quizás tiene responsabilidades adicionales en la familia. • Relaciones: pautas de gustar dentro del grupo, y también diferencias en prest igio o estatus, por ejemplo, l íderes, gente popular.1 5 Un ejemplo de esto son los grupos denominados maras o pandillas. Además, es necesario mencionar la influencia de corrientes sociológicas en la psicología forense, como lo es la perspectiva de género, que revolucionó desde los años setentas el abordaje de la violencia intrafamiliar, creando leyes al respecto de esta problemática. 1.1.2 Generalidades de la Psicología Forense • Definición: Se define a la psicología Forense como la rama de la Psicología que auxilia al Derecho, en la aplicación de sus conocimientos y profesión a las cuestiones y asuntos legales, para la administración de la justicia, dentro de un foro o tribunal. Es decir, es una psicología aplicada que se relaciona con el Derecho en cuanto a la práctica profesional. 13 https://es.wikipedia.org/wiki/Psicolog%C3%ADa_social 14 ibídem 15 ibídem 21 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal La definición anterior, resalta la diferencia entre la psicología forense y la psicología jurídica, términos usualmente vistos como sinónimos. Sin embargo, la psicología jurídica es más que una psicología teórica sobre la filosofía y origen del derecho y la evolución de las leyes. La primera es práctica, la segunda filosófica. La psicología jurídica se define entonces, como la rama de la psicología que trata sobre el comportamiento legal de las personas. Clásicamente, la psicología forense está relacionada con las ciencias naturales y la psicopatología forense, es decir la vinculación de ciertos trastornos mentales con conductas criminales, mientras que la psicología jurídica está relacionada con la antropología y la sociología, importándole el estudio del comportamiento de los actores jurídicos en el ámbito del derecho. • El Profesional de la Psicología Forense: Un psicólogo forense es aquel profesional de la psicología que, habiéndosele discernido y aceptado el cargo como tal o habiendo sido nombrado para el efecto, pasa a convertirse de un experto en su área a un perito forense, con el objeto de realizar un dictamen pericial sobre un objeto de litigio. Es decir, que, con base a sus conocimientos psicológicos, da una opinión técnica o especializada, acerca de la existencia de un hecho y la naturaleza del mismo, de manera objetiva e imparcial, para auxiliar en la administración de justicia. Específicamente, el psicólogo forense actúa en el ámbito penal, al emitir informes sobre su pericia al evaluar a una víctima, en cuanto al daño sufrido, sobre la existenciade daño psicológico o moral, existencia de daño psíquico, si tendrá curación o rehabilitación, si quedara incapacidad, etcétera. Así mismo, para determinar el estado mental del procesado al momento de cometer el crimen por el que es acusado, es decir si estaba en uso de sus facultades mentales, para que los jueces establezcan lo que en materia de derecho se llama responsabilidad penal, es decir si se le puede imputar o atribuir un delito o acción ilícita. También puede actuar un psicólogo forense en determinar sobre la habilidad o capacidad de una persona para testificar como agraviada, imputada o testigo. Asimismo, sobre la credibilidad de dicho testimonio. Se le puede requerir además para dar sugerencias sobre el tratamiento de la víctima y del acusado, opinión sobre factores atenuantes o de riesgo futuro por factores victimológicos, etcétera. En Guatemala los psicólogos forenses hacen peritajes en los ámbitos: 22 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Derecho Penal Se valoran cuestiones la responsabilidad criminal en caso de trastorno mental de un acusado (evaluación de la imputabilidad del procesado), la competencia de un individuo para ser juzgado o para prestar testimonio, las secuelas de las víctimas, etcétera.16 Derecho de Familia Temas de adopción y privación de derechos parentales de los progenitores (patria potestad), en la atribución de la custodia de los hijos en caso de divorcio, nulidad y separación, recomendaciones sobre planes de comunicación y contacto, adopciones, filiación, etcétera. Derecho Civil Principalmente procesos de tutela e incapacitación de adultos, internamientos psiquiátricos involuntarios, protección de menores, valoración de daño y secuelas psicológicas, etc. 16 ArchMarin, Mila y Jarne Esparcia Adolfo. (enero 2009). INTRODUCCIÓN A LA PSICOLOGÍA FORENSE. Documento docente, Universidad de Barcelona; Pág. 7. Debido a que el juez está en capacidad de estimar o desestimar el informe del psicólogo forense, es importante que dicho profesional goce de credibilidad. Credibilidad que se obtiene de una excelente preparación académica, de una adecuada intervención en el proceso actual y en procesos anteriores, de la capacidad de defender y sustentar su dictamen, producto de la formulación de las cuestiones psicológicas al uso de un lenguaje que sea claro y comprensible al personal legal, cuidando y sosteniendo una actuación moral y ética intachables. Como toda ciencia y profesión la psicología forense es sometida a cuestionamientos y percepciones críticas no sólo por cuestiones de competencia sino metodológicas también, que enriquecen al gremio. Resultando necesario la preparación y actualización académica con reconocimiento universitario y el hecho de hacer valer aun para fines de consecución de una plaza de trabajo. Su titulación profesional como perito le permite actuar ya sea como peritos oficiales, como peritos de parte o como consultores técnicos dentro un proceso. 23 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Se deduce entonces, que el dictamen de un psicólogo forense es crucial para administrar de mejor manera justicia, para que ésta sea pronta y efectiva; teniendo un papel decoroso en toda sociedad civilizada, como la nuestra, que lucha contra la violencia y el mal uso del poder. 1.1.3 Características del ejercicio de la psicología forense A. La obtención de evidencia testimonial o pericial, la credibilidad del testimonio, evaluación de abusadores sexuales mediante instrumentos de medición, evaluación de delincuentes con test estandarizados. B. Todo lo investigado deja de ser secreto, ya que la investigación se está haciendo por requerimiento judicial, el cual debe de ser replicable, ello implica que todas las operaciones que hayamos realizado deben constar en el capítulo dedicado a la metodología del informe forense realizado. C. Deja de ser un acto voluntario, ya que la persona que acude como sujeto a la pericia no ha solicitado estar allí, sino que lo hace de una manera obligado por el proceso que está pasando. Es preciso recalcar que aunque no sea un acto voluntario sino obligado, el profesional debe contar con el consentimiento de la persona a quien entrevistará y evaluará, esto conforme al Principio I, lineamiento 1.7, norma 1.7.2 del Código de Ética del Colegio de Psicólogos de Guatemala “…Solicitar el consentimiento informado explícito para cualquier tipo de servicios psicológicos o para la realización de alguna investigación”.)17 D. El psicólogo forense se encuentra actuando para el proceso no en función de las necesidades de una persona concreta sino en función de las necesidades del procedimiento. E. La finalidad de la pericia es presentar al juez un panorama lo más completo posible cerca de las variables que conforman la realidad psicológica de la persona o personas evaluadas en cuanto a su relación con el hecho legal concreto, lo que se llama técnicamente “análisis etiopatológico del delito”. 17 Colegio de Psicólogos de Guatemala. (2011). CÓDIGO DE ÉTICA. Guatemala: Servisa Litografía; Pág. 39 24 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 18 Echeburrúa, Enrique. Muñoz, José Manuel y Loinaz, Ismael. (2010). LA EVALUACIÓN PSICOLÓGICA FORENSE FRENTE A LA EVALUACIÓN CLÍNICA: PROPUESTA Y RETOS DE FUTURO. España; Pág. 144 1.1.4 Diferencias entre la psicología forense y la psicología clínica: TABLA No. 1 Evaluación Forense y Evaluación Clínica18 Objetivo Relación Evaluador- sujeto Secreto Profesional Destino de la evaluación Estándares y requisitos Fuentes de información Actitud del sujeto hacia la evaluación Ámbito de la evaluación Tipo de informe Intervención de la sala de justicia Evaluación Forense Ayuda a la toma de decisiones judiciales. E s c é p t i c a p e r o c o n establecimiento de un rapport adecuado No Variable (juez, abogado, seguros, etc.) Psico-Legales Entrevista. Test. Observación. I n f o r m e s m é d i c o s y psicológicos. Familiares. Expedientes judic ia les. Riesgo de simulación o de disimulación o de engaño (demanda involuntar ia) Estado mental en relación al objeto pericial Muy documentado, razonado t é c n i c a m e n t e y c o n conclusiones que contestan a l a d e m a n d a j u d i c i a l . Documento legal Esperable. En calidad de perito Evaluación Clínica Diagnóstico y tratamiento Ayuda en el contexto de una relación empática. Si El propio paciente M é d i c o - p s i c o l ó g i c o s Las mismas (excepto los expedientes judiciales) y el historial clínico En general, sinceridad (demanda voluntar ia) Global Breve y con conclusiones. Documento clínico No esperable. En calidad de testigo-perito 25 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal Teniendo como marco referencial el concepto que la psicología forense, es principalmente, una ciencia aplicada, fundamentalmente probatoria, se hace necesario remitir a un proceso judicial. Se debe considerar que la persona que acude como sujeto a la pericia no ha solicitado estar ahí. De hecho, las personas pueden prestar la colaboración que deseen y es labor del perito ser capaz de comprender cuál es la situación de la persona ante la prueba pericial. En este sentido, ser capaz de crear un clima de adecuada serenidad, de manera que la persona no perciba al perito como una amenaza, depende de las características del perito y de su habilidad social. De hecho, un perito puede actuar como amortiguador de la victimización secundaria debida al procedimiento o bien al contrario aumentando los costes emocionales debidos al proceso judicial. En segundo lugar, el perito se encuentra actuando para el proceso no en función de las necesidades de una persona concreta sino en función de las necesidades del procedimiento. Aunque evidentemente las necesidades de la persona y las del procedimiento no son incompatibles; muy al contrario, el hecho de escuchar y aplicar una intervención individualizada a cualquier implicado en un proceso judicial puede tener en sí mismo unefecto terapéutico porque disminuye la sensación de desamparo y alienación en la persona y le devuelve la sensación de control, todo ellos factores amortiguadores de estrés. En psicología Clínica el proceso es voluntario, su primer objetivo son las necesidades de la persona, es un informe clínico privado, no tienen ninguna intención pericial. En psicología forense, el proceso es involuntario, cubre las necesidades del proceso judicial, el informe es publico/privado, y los informes son presentados al proceso. 1.1.5. Las funciones psíquicas en la exploración psicológica forense La exploración psicológica como peritaje, se centra en: ü La conciencia de la ejecución del acto, fundamentalmente en el análisis de la responsabilidad de un individuo sobre su conducta. ü La conciencia que posea de sus acciones y cuán imputables le pueden ser. El ser humano posee tres funciones que guían sus acciones y la capacidad del juicio que las une en la resolución de problemas. Estas funciones son: pensar, sentir y actuar, descritas como sigue: § Funciones cognitivas: (pensar), relacionadas son las aptitudes de los individuos para incorporar la información del medio; incluye los procesos de senso-percepción y la capacidad intelectual. Estas aptitudes determinan si el individuo comprende lo que está haciendo. 26 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal § Funciones afectivas: (sentir), relacionadas con las emociones y sentimientos. § Funciones volitivas:(actuar), que comprenden las motivaciones que tiene un individuo para actuar, como la voluntad de ejecutar un acto, es decir, si desea o no se desea hacer. § La capacidad de juicio: analizar la congruencia y adaptabilidad de la conducta que presenta un sujeto en relación con la resolución de los problemas que genera el miedo; es decir, decide y emite su conducta según su criterio e interés. Se ha estudiado mucho en lo jurídico sobre las funciones cognitivas y la capacidad de juicio, sin embargo, aún falta mayor profundidad de estudio de las funciones afectivas y volitivas, en la búsqueda de las motivaciones que tiene un individuo al momento de actuar ilícitamente; es decir la motivación para delinquir o delitogénesis. Para tratar de comprender en conjunto al ser humano, es necesario entonces estudiarlo en un contexto más amplio y que abarque lo psicológico: estudiar su personalidad. La personalidad es tema común, de interés, para la psicología y el derecho. Por ejemplo: no es lo mismo que una mujer mate a su marido, de forma despiadada, sin sentir dolor por lo que hizo, a que lo haga como una respuesta al miedo que siente a perder la vida por las amenazas continuas de aquel. El estudio de la personalidad y el análisis de las circunstancias son útiles a la psicología forense para atender las motivaciones del individuo, las cuales influyen en la culpabilidad, que es una figura que prueba el derecho, y que es determinante en la pena a aplicar. Entonces, según la personalidad, la autoridad judicial se apoyará en la pericia psicológica para establecer el grado de peligrosidad e intencionalidad, lo que le permitirá inferir lo doloso del delito y de ahí la pena. Cuestiones por demás difíciles de resolver, aun cuando estén presentes serios trastornos de personalidad, que permitan eximir, atenuar o agravar la pena. Los avances de la psicología y sus aportaciones al derecho, le permitirán ampliar sus conocimientos y por ende el panorama del caso, aunque no siempre sea vinculante a la culpabilidad del imputado. Aquí debemos definir “culpabilidad” e “imputabilidad”. • Imputabilidad: es la capacidad que tiene un sujeto para ser sancionado por la ley penal, está condicionada por la madurez y salud mentales y es considerada por algunos teóricos como un presupuesto de la culpabilidad, nos dice que para que un sujeto sea considerado capaz de cometer un delito es necesario que sea imputable. • Culpabilidad: en derecho penal, es la conciencia de la antijuricidad de la conducta (la conducta que se ha realizado está prohibida por el ordenamiento jurídico). Supone la reprochabilidad del hecho, fundada en que su autor, pudiéndose someterse a los mandatos del derecho en la situación concreta, no lo hizo ejecutándolo. 27 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal La inclinación al delito por parte del imputado, no sólo debe ser estudiado por causas psíquicas, sino también físicas o somáticas, el ambiente en el que vive, la hostilidad intrafamiliar o extrafamiliar, la educación recibida, el abandono en el que pudo haber crecido, la herencia recibida (genética), etcétera; como factores endógenos y exógenos, que están relacionados a la conducta. 1.1.6. Objetivos de la psicología forense en materia penal El psicólogo forense tiene actuación en distintas ramas del derecho, entre ellas y principalmente, en la rama penal, además en la civil, del derecho laboral, etcétera. Entre sus funciones se podrá mencionar: § Evaluar y diagnosticar las condiciones psicológicas de los actores jurídicos. § Asesorar y orientara a los órganos judiciales, en cuestiones propias de su disciplina, y de acuerdo a la rama del derecho que le requiera peritaje. § Diseñar programas de prevención, tratamiento, rehabilitación e integración de los actores jurídicos a la comunidad y al medio penitenciario, a nivel individual o colectivo. § Investigar la problemática de la psicología forense. § Estudiar la problemática de la víctima y su relación con el ambiente legal. § Contribuir a atenuar y prevenir el daño emocional y social. § Participación en la tipicidad del dolo y la culpa, en cuanto a la evaluación psicología de los sujetos, así: Dolo: ayudara establecer la capacidad de conocimiento de la ilicitud. Sobre la cognición deberá emitir criterio sobre la capacidad del autor para entender cuál es la acción que se realiza. Sobre la volición, emitir criterio sobre la predisposición o potencialidad del autor para querer y aceptar el resultado de sus actos. Culpa: entendiendo que hay responsabilidad de la acción, pero sin intencionalidad, el psicólogo forense emitirá dictamen sobre la cognición, en el sentido de la capacidad de prever el resultado (causa-efecto). En pocas palabras, en cuanto al dolo (donde hay intención de dañar, el psicólogo forense emitirá opinión en cuanto a si el autor entiende la acción ilícita que realizó y en cuanto al querer hacerla y aceptar el resultado de dicha acción. En relación a la culpa (sin intención de dañar, informará sobre si el autor pudo prever el resultado perjudicial de su acción y si tuvo el deseo de su ejecución y la aceptación de medios no legales). 28 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1.2 Objeto de estudio 1.2.1. El comportamiento o conducta humana El término conducta o comportamiento ha sido incorporado a la psicología desde otros campos del conocimiento; fue ya anteriormente empleado en la química, y lo sigue siendo aún, para referir o dar cuenta de la actividad de una sustancia, un cuerpo, un átomo, etcétera. Posteriormente, es introducido en biología para referirse también a las manifestaciones de la sustancia viva: célula, núcleo, etcétera. En estos campos, el término se refiere al conjunto de fenómenos que son observables o que son factibles de ser detectados, lo cual implica la consigna metodológica de atenerse a los hechos tal cual ellos se dan, con exclusión de toda inferencia animista (que engloba diversas creencias en las que tanto objetos (útiles de uso cotidiano o bien aquellos reservados a ocasiones especiales) como cualquier elemento del mundo natural (montañas, ríos, el cielo, la tierra, determinados lugares característicos, rocas, plantas, animales, árboles, etc.) están dotados de alma o consciencia propia) o vitalista (fuerza inmaterial específica, distinta de la energía estudiada por la física y otro tipo de ciencias que, actuando sobre la materia organizada, daría como resultado la vida y sin la que sería imposible su existencia). Se busca, por lo tanto, que su descripción yestudio sean una investigación libre -o lo más libre posible— de adiciones antropomórficas. El término conducta, aplicado a las manifestaciones del individuo, tiene siempre la connotación de estar dejando de lado lo más central o principal del ser humano: los fenómenos propiamente psíquicos o mentales. Estos últimos serían realmente los fenómenos más importantes, dado que originan la conducta; y si se estudia únicamente esta última, se estaría ocupando sólo de productos y derivados, pero no del fenómeno central. Etimológicamente la palabra conducta es latina y significa conducida o guiada; es decir, que todas las manifestaciones comprendidas en el término de conducta son acciones conducidas o guiadas por algo que está fuera de las mismas: por la mente. De esta manera, el estudio de la conducta, considerada así, asienta sobre un dualismo o una dicotomía cuerpo-mente, sobre la tradición del más puro idealismo, en el que la mente tiene existencia de suyo y es el punto de origen de todas las manifestaciones corporales; según esta perspectiva, el cuerpo es solamente un instrumento o un vehículo del que se vale la mente (alma) para manifestarse.19 Otras definiciones de conducta podrían ser: -La conducta está relacionada a la modalidad que tiene una persona para comportarse en diversos ámbitos de su vida. Esto quiere decir que el término puede emplearse como sinónimo de comportamiento, ya que se refiere a las acciones que desarrolla un sujeto frente a los estímulos que recibe y a los vínculos que establece con su entorno20. 19 Bleger, José. (1983). Psicología de la Conducta. Buenos Aires, Argentina: Editorial Paidos; Págs. 23-26 20 Fuente: Diccionario de definiciones, A-Z. Copyrigth 2008-2016, definicion.de http://definicion.de/conducta/. 29 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal -Modo de conducirse de un ser humano, en sus relaciones con las demás personas, de acuerdo a las normas preestablecidas por lo moral, la sociedad y la cultura. 21 -Manera de comportarse de un sujeto. La conducta no se reduce a datos materiales y objetivos como las reacciones motrices, según creían los conductistas, ni a las reacciones del organismo considerado en su medio y tratando de reducir las tensiones provocadas por este. Constituye en cambio, una respuesta a una motivación, que pone en juego componentes psicológicos, motores y fisiológicos. 22 1.2.2. Salud y Enfermedad (Un binomio inseparable) La Organización Mundial de la Salud (OMS) en su Constitución de 1948, define salud como el estado de completo bienestar físico, mental, espiritual, emocional y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. La salud implica que todas las necesidades fundamentales de las personas estén cubiertas: afectivas, sanitarias, nutricionales, sociales y culturales. En estos términos, esta definición resultaría utópica, pues se estima que según parámetros mundiales sólo entre el diez por ciento y el veinticinco por ciento de la población mundial se encuentra completamente sana.23 Una definición más dinámica de salud podría añadir que es el logro del más alto nivel de bienestar físico, mental, social y de capacidad de funcionamiento que permitan los factores sociales en los que viven inmersos el individuo y la colectividad. La salud y la enfermedad forman un proceso continuo, donde en un extremo se encuentra la muerte prematura, muchas veces prevenible, y en el otro extremo se encuentra un elevado nivel de salud, al que difícilmente llega todo el mundo. En la parte media de este continuo o equilibrio homeostático se encontraría la mayoría de la población, donde la separación entre salud y enfermedad no es absoluta, ya que es muy difícil distinguir lo normal de lo patológico. La definición de salud es difícil, siendo más útil conocer y analizar los determinantes de la salud o condicionantes de la salud. La salud, en términos físicos, forma parte de uno de los pilares de la calidad de vida, bienestar y en definitiva de la felicidad. El objetivo de alcanzar la salud, no solamente corresponde a la medicina, sino también a los políticos, a la sociedad y al individuo. En los países en vías de desarrollo, 21 Ortin Girón, Victoria, PROBLEMAS DE CONDUCTA, Universidad de San Carlos de Guatemala; Pág. 3 22 Enciclopedia de la Psicología OCEANO, Diccionario, 23 Fuente: Profesor en Línea tema de "salud y enfermedad" Extraída de del Portal de la Organización Mundial de la Salud. http://www.profesorenlinea.cl/Ciencias/SaludyEnfermedad.htm. 30 la salud empezaría a conseguirse cuando se satisfagan sus necesidades de alimentación, infecciones, vivienda, trabajo y, en definitiva, sus problemas económicos, mientras que, en los países desarrollados, la salud se consigue previniendo los efectos secundarios que la riqueza produce como la obesidad, la ausencia de ejercicio físico, los accidentes de tráfico, el tabaquismo, la depresión, la contaminación, etc. Enfermedad Para comprender lo que es la enfermedad es necesario reiterar y ampliar la definición de lo que es la salud. Ella se define como la capacidad que tienen los organismos para adaptarse a los distintos estímulos, ya sea el estrés, la toxicidad medioambiental, cambios en la alimentación, etc. El cuerpo se mantiene siempre en un equilibrio inestable. La salud está directamente relacionada con el estado emocional, mental y estructura psicológica, es decir, con la forma de ser, de enfrentar la vida y la constitución genética. Ante una enfermedad (resistencia al cambio) es necesario preguntarse ¿Qué hay en mi estilo de vida, dieta o comportamiento que ha causado el desequilibrio? Solamente en ese momento, cuando encuentre la razón o el “foco”, es decir lo que la enfermedad le quiere enseñar, retornara a su centro, al punto de equilibrio. 1.2.3. Salud y Normalidad son relativas Normalidad como salud. Esta idea deriva del enfoque médico tradicional: “uno es normal cuando está sano”; lo “normal” es que la mayor parte de la gente no padezca enfermedades; en cuanto aparecen síntomas y signos patológicos el individuo se aparta de la normalidad. En el terreno de la psiquiatría ocurre lo mismo: una persona se considera normal mientras no presente síntomas de perturbaciones psíquicas, tipo depresiones profundas, reacciones vivenciales anómalas, etc. La forma más simplista de esta perspectiva afirma que una persona está sana cuando se encuentra razonablemente libre de dolores, molestias e incapacidades. Normalidad como utopía. Es lo ideal, lo óptimo, cuando todos los elementos del cuerpo, y en este caso de la mente, trabajan de forma más armoniosa y perfecta. Esto es, como su propia definición dice, una utopía. Ya Freud afirmó: “Un YO normal es, como la normalidad en general, una ficción ideal”. Normalidad como promedio. Esta perspectiva se basa en el principio de “la curva de campana” que maneja la estadística. Lo que todo el mundo hace, tiene o es, se considera lo normal. Este concepto de normalidad es el que se emplea en los test: tras aplicarlos a muchas personas, se obtienen los valores promedios y alrededor de ellos se estructuran las puntuaciones normales y anormales. Hoy en día se emplea cada vez más esta orientación, así como los test y otras pruebas de valoración objetivas. Normalidad como sistema de transacción. Según esta perspectiva, la conducta normal Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 31 es el resultado de una serie de sistemas que interactúan. Con esto se da a entender que hay cambios temporales en la situación de una persona que entran dentro de la normalidad. La normalidad no es estática, sino que varía con el tiempo. Como, por ejemplo: Uno de los más ilustrativos es el de la caries dental. Lo normal y sano es no tenerla, pero el problema es tan frecuente que se considera como normal tener alguna. Entran en juego la norma como salud y la norma como promedio. También interviene la norma como sistema de transacción ya que, al reparar la caries, desaparece, luego es algo temporal. Otro ejemplo sería la tristeza,que no la depresión. Todo individuo puede atravesar una fase de tristeza, por ejemplo, tras un grave contratiempo o la muerte de un ser querido: es una tristeza comprensible, que pasa y no llega a constituir una enfermedad. 24 Anormalidad Un criterio para "anormalidad" que se utiliza en el caso de comportamiento anormal es su baja ocurrencia estadística. Esto sin embargo posee una falla obvia, la persona extremadamente inteligente, honesta, o feliz son tan anormales como las personas que poseen las características opuestas. Tradicionalmente se ha usado y se usa como una característica, para hablar o dar cuenta de aquellas personas que poseen condiciones disfuncionales o raras, es decir, que no cuajan con el estereotipo común de aquellos que sí son considerados como tipos comunes y corrientes. “La NORMA es una NORMA INDIVIDUAL, y lo que es normal para algunos, puede no serlo para otros” JJM Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 24 Fuente: La página de la Vida, Organización No Gubernamental, de información, Meditación, reflexión y discernimiento. http://www.proyectopv.org/2- verdad/queesnormpsic.htm, la página de la Vida, que es normal en Psicología. 32 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1. Después de haberle dado lectura al capítulo 1 defina con sus propias palabras ¿Qué es psicología forense? 2. ¿Cuáles son algunos de los objetivos que busca la psicología forense en materia penal que más le interesaron? 3. Comente ¿Por qué es importante la psicología como ciencia en el proceso penal? 4. Mencione algunas diferencias entre psicología clínica y psicología forense 5. Defina con sus propias palabras ¿Qué es normal y anormal? ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN 33 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 1 CAPÍTULO 2 2.1 ¿Qué es trastorno mental? 2.2 Enfermedad mental he inimputabilidad 2.2.1 Definición de inimputabilidad 2.2.2 ¿Quién es un sujeto inimputable? 2.2.3 ¿Qué enfermedades mentales causan inimputabilidad? 2.2.3.1 Retraso mental (actualmente conocido como discapacidad intelectual) 2.2.3.2 Delirium 2.2.3.3 Demencias 2.2.3.4 Drogodependencias 2.2.3.5 Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos 2.2.3.6 Trastornos del estado de ánimo 2.2.3.7 Trastornos del control de impulsos 2.2.3.8 Trastornos de la personalidad 2.3 Herramientas dirigidas al defensor público en casos con supuestos enfermos mentales. 2.3.1 Como detectar la enfermedad mental en la entrevista 2.3.2 Descripción de la simulación de enfermedad mental 2.3.3 Criterios de valor para solicitar la exploración psiquiátrica o psicológica del sujeto. Análisis de caso y comprensión LA ENFERMEDAD MENTAL 34 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal OBJETIVOS ESPECÍFICOS Al terminar de leer y de analizar el capítulo el defensor o defensora podrá: 1. Conceptuar ¿qué es enfermedad mental? 2. Diferenciar una simulación de enfermedad mental 3. Comprender la relación de enfermedad mental e inimputabilidad 4. Utilizar herramientas para detectar alguna posible enfermedad mental 35 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 25 Fuente: Revista Despertad, diciembre de 2014, "¿Que son las enfermedades mentales?". https://www.jw.org/es/publicaciones/revistas/g201412/enfermedades-mentales/ 2.1 ¿Qué es trastorno mental? Desarrollar una explicación totalitaria del término “enfermedad mental o trastorno mental” es algo muy complejo y extenso. Empíricamente en la sociedad las personas pueden notar a simple vista cuándo un sujeto sobrepasa el estándar de lo normal, definiéndolo por su apariencia externa, por su comportamiento, ideas y formas de comunicarse; llamándole “loco” “desquiciado” o “demente” a aquel sujeto cuyo caminar por las calles es extraño, vestido con harapos, sucio, hablando solo y con la mirada perdida. Generalmente ese concomimiento empírico fundamentado en el sentido común y en el aprendizaje cultural, permite el paso progresivo al conocimiento científico y es entonces donde surge el interés y preocupación por el estudio de estos fenómenos, con el fin de contribuir con la sociedad en su comprensión y manejo. Es por eso que la sociedad ha confiado su estudio e investigación a la psiquiatría y psicología clínica para proporcionar un análisis, un diagnóstico y un tratamiento basado en tratados, manuales y guías que orientan, explican y describen las diferentes alteraciones de la mente humana. El aporte que este capítulo ofrece sobre el trastorno mental constituye una herramienta de conocimiento científico y antes de explicar el significado de enfermedad mental es preciso partir del concepto de salud mental como base, para crear una comparación equilibrada de lo que representa una anomalía en esta área de los sujetos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad. Es preciso prestar atención al término consciencia, como un término que encierra el conocimiento que tiene el sujeto de sí mismo y de su entorno, tanto como de las significaciones que le atribuye a los diferentes estímulos internos y externos que percibe por medio de los sentidos. La consciencia es uno de los denominadores de la enfermedad mental y un factor importante para el análisis de la inimputabilidad, el cual se explicará más adelante. “De acuerdo con los expertos, las enfermedades mentales son una alteración importante de la facultad de pensar y de controlar las emociones y la conducta. Disminuyen la capacidad de relacionarse con los demás y hacer frente a las situaciones normales de la vida. Los síntomas varían en duración e intensidad dependiendo de la persona, de la enfermedad específica y de las circunstancias. Las enfermedades mentales no distinguen sexo, edad, cultura, nivel educativo, clase social, raza ni religión. Tampoco son el resultado de alguna debilidad personal o defecto de carácter. Con la debida atención médica y un tratamiento adecuado, es posible llevar una vida productiva y plena” 25. 36 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 26 Asociación Psiquiátrica Americana. op. cit. Pág. 5 27 Ibidem, Pág. 5 Dependiendo del concepto de enfermedad que se utilice, algunos autores consideran más adecuado utilizar en el campo de la salud mental el término "trastorno mental" (que es el que utilizan los dos sistemas clasificatorios de la psicopatología más importantes en la actualidad: la CIE-10 de la Organización Mundial de la Salud y el DSM-V de la Asociación Psiquiátrica Americana). Sobre todo, en aquellos casos en los que la etiología biológica no está claramente demostrada, como sucede en la mayoría de los trastornos mentales. Además, el término "enfermedad mental" puede asociarse a estigmatización social. Por estas razones, este término está en desuso y se usa más trastorno mental, o psicopatología. El término “trastorno mental” implica, desafortunadamente, una distinción entre trastornos “mentales” y “físicos”. Los conocimientos actuales indican que hay mucho de “físico” en los trastornos mentales y mucho de “mental” en los trastornos físicos. No existe una definición que especifique adecuadamente los límites del concepto “trastorno mental”. Los trastornos mentales han sido definidos también mediante una gran variedad de conceptos (p. ej. malestar, descontrol, limitación, incapacidad, inflexibilidad, irracionalidad, conjunto de síntomas, etiología y desviación estadística). Cada uno es un indicador útil para el tipo de trastorno mental, pero ninguno equivale al concepto y cada uno requiere una definición distinta. De acuerdo con el Manual Diagnóstico Y Estadístico De Los Trastornos Mentales (DSM-V), “un trastorno mental es un síndrome caracterizado por una alteración clínicamente significativa del estado cognitivo, la regulación emocionalo el comportamiento de un individuo, que refleja una disfunción de los procesos psicológicos, biológicos o del desarrollo que subyacen en su función mental”.26 Al hacer una comparación entre salud y enfermedad mental y tratar de elaborar una definición justa se constata entonces que la enfermedad mental conlleva una alteración clínicamente significativa en las áreas cognitiva (conciencia), afectiva (emociones) y comportamental (conducta), evidenciando la disfuncionalidad en los procesos biológicos, psicológicos y del desarrollo en la mente del sujeto que la presenta, ocasionándole incapacidad para afrontar las situaciones normales de estrés, relacionarse socialmente y laborar de forma productiva. Esa significación clínica, establece entonces el límite entre lo culturalmente aceptable y lo anormal ante una respuesta predecible o esperada por la sociedad cuando el sujeto deba resolver o enfrentar situaciones críticas como: la separación, muerte, divorcio, abuso, daño; etcétera y aun así tampoco “un comportamiento anómalo (ya sea político, religioso o sexual) y los conflictos existentes principalmente entre el individuo y la sociedad, no pueden ser considerados como trastornos mentales, a menos que el conflicto o la anomalía sea el resultado de una disfunción del individuo, tal y como se describe anteriormente”.27 Para concluir entonces es preciso remarcar los elementos importantes a tomar en cuenta para abordar el tema de enfermedad mental: 37 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 28 Fuente: Diccionario de definiciones, A-Z. Copyrigth 2008-2016, definicion.de http://definicion.de/inimputabilidad/ • Debe ser una alteración clínicamente significativa. • El estado cognitivo, la respuesta emocional y comportamental del individuo evidencian esa alteración. • Los procesos biológicos, psicológicos y del desarrollo en la mente del sujeto se presentan disfuncionales. • Incapacita al sujeto para afrontar las situaciones normales de estrés, relacionarse socialmente y laborar de forma productiva. Como se ha mencionado anteriormente, existe una amplia gama de definiciones sobre lo que es un trastorno mental por lo que su uso deberá ser cuidadoso ya que los síntomas varían de una persona a otra. 2.2 Enfermedad mental he inimputabilidad 2.2.1 Definición de inimputabilidad Inimputabilidad es un término que se vincula a la condición de inimputable. Un sujeto inimputable es aquel que no es responsable penalmente de un ilícito que cometió ya que no está en condiciones de comprender su accionar o las consecuencias de éste. El concepto de inimputabilidad acarrea otra noción: imputabilidad. La imputabilidad implica que una persona entiende que su accionar afecta los intereses de otros; por lo tanto, adapta su conducta a dicho entendimiento. Si el individuo carece de esa comprensión, resulta inimputable y, por lo tanto, no es penalmente responsable del daño que causa. La inimputabilidad es una circunstancia que exime a alguien de su responsabilidad y culpabilidad en sus actos. Suponga que un hombre diagnósticado con esquizofrenia agrede a otro y le causa una lesión cerebral. La víctima decide demandar al agresor, pero el juez, tras una pericia psicológica, advierte sobre su condición de esquizofrénico y declara su inimputabilidad. De todos modos, el magistrado ordena un tratamiento médico ya que considera que el agresor es peligroso para la sociedad. 2.2.2 ¿Quién es un sujeto inimputable? Artículo 23. No es Imputable. 1. El menor de edad. 2. Quien, en el momento de la acción u omisión, no posea, a causa de enfermedad mental (7), de desarrollo psíquico incompleto o retardado o de trastorno mental transitorio (8). la capacidad de comprender el carácter ilícito del hecho o de determinarse de acuerdo con esa comprensión, salvo que el trastorno mental transitorio, haya sido buscado de propósito por el agente. (7) ver artículo 9 del Código Civil (8) Ver artículo 10 del Código Civil 38 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 29 Asociación Psiquiátrica Americana. Op. cit. Pág. 33-41 30 Rodes, F. y Martí, J.B. (1997). Valoración médico-legal del enfermo mental. Alicante: Universidad de Alicante 31 Cabrera, J. y Fuertes, J.C. (1997). Psiquiatría y Derecho: dos ciencias obligadas a entenderse. Madrid: Cauces Editorial. 32 Cabrera y Fuertes, op. cit. 2.2.3 ¿Qué enfermedades mentales causan inimputabilidad? Para establecer una relación entre enfermedad mental e inimputabilidad es preciso tomar en cuenta los aspectos clínicos esenciales de enfermedad mental y el principio legal que determina quién es un sujeto inimputable. La ley contempla un concepto que se interrelaciona muy bien con lo referente a la enfermedad mental y es el verbo “comprender”, la comprensión es un proceso mental (cognitivo) el cual requiere que el sujeto se encuentre facultado para percibir de forma idónea la realidad, analizarla, construir una idea y producir una conducta o emitir un pensamiento. Tomando en cuenta el término “comprensión” en la enfermedad mental y en la inimputabilidad es preciso entonces valorar el estado mental del sujeto y establecer si ese estado le impidió comprender la ilicitud o autorregulación de su comportamiento de acuerdo con esa comprensión para el momento de cometer el hecho. A continuación, se revisan aquellos trastornos mentales de mayor relevancia y trascendencia en el peritaje psicológico de la inimputabilidad. 2.2.3.1 Retraso mental (actualmente conocido como discapacidad intelectual)29 La característica esencial del retraso mental es una capacidad intelectual significativamente inferior al promedio, acompañada también de limitaciones típicas de la actividad adaptativa, como: la comunicación, el cuidado personal, habilidades sociales, autogobierno, salud y seguridad, habilidades para el aprendizaje, el trabajo y actividades de recreación. La capacidad delictiva asociada al retraso mental depende del nivel de gravedad de la discapacidad y de su modalidad clínica;30 es decir que, a un grado mayor de retraso mental, menor será la posibilidad de cometer actos delictivos, debido a su misma incapacidad psicofísica; entonces, delito aumenta en frecuencia y variedad en las formas moderadas y leves del retraso mental.31 No cabe duda de que los sujetos con retraso mental profundo son inimputables. Existen, sin embargo, una gran cantidad de casos límites o fronterizos en los que la pericia psicológica es delicada. Sólo del estudio global del sujeto y de los hechos presumiblemente delictivos, se podrá deducir si cumplen o no los requisitos que marca la ley para ser inimputables.32 39 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal En muchos casos, la existencia de un retraso mental será sólo atenuante de responsabilidad ya que las características del tipo de delito ejecutado no precisan de un elevado nivel intelectual para comprender su ilicitud. En otras ocasiones la complejidad delictiva es mayor y requiere también una elevada capacidad intelectual para ejecutarlo. En estos casos se puede abogar por la inimputabilidad o semi-imputabilidad. Habrá casos en los que la imputabilidad sea plena ya que el individuo a pesar del déficit intelectual que presenta puede entender que ha ejecutado una acción ilegal. No obstante, como dice la jurisprudencia, habrá que ir al caso concreto y no aplicar principios doctrinales generales33. Ejemplo: Persona de sexo masculino de veintidós años de edad, sin escolaridad y de trabajo practico como ayudante de albañil, es sindicado de violación agravada. Dentro de su narrativa en la historia personal indica que no ha estudiado debido a que le cuesta que se le queden las cosas y que desde los diez años ha trabajado como ayudante de albañil. Su relato es poco detallado y centrado únicamente en sucesos concretos, no existe una estructura lógica y continuada, sabe lo que es bueno y lo que es malo, por lo tanto, su juicio sobre las circunstancias no está totalmente afectado. El sujeto refiere que: “a los diecisiete años tuveuna novia y también tuve mi primera relación sexual” con la supuesta agraviada, “fue de mutua acuerdo, después ella se fue a Quiche como nueve o cinco meses y cuando vino ya venía embarazada, yo pensé que el niño no era mío, pero yo me quería hacer responsable porque la quiero, yo pague el trasporte para el Roosevelt, allí se compuso, le di dinero al papá de ella para que se viniera en bus porque no cabía en el taxi. Mire de plano la hermana puso la denuncia porque no le hice caso a ella, eso estuvo malo usted porque yo me iba a hacer cargo del niño, me siento mal de estar preso, a veces me quisiera morir e irme al cielo”. Conclusión: el sujeto presenta incapacidad intelectual leve y en este caso en particular la persona es imputable ya que posee la capacidad para valorar las circunstancias que le rodean o las comprendidas en su comportamiento (su actuar). 2.2.3.2 Delirium El paciente con delirium presenta importantes dificultades para mantener la atención, grave deterioro de la memoria (sobre todo de la memoria a corto plazo), desorientación (espacio-temporal) y alteraciones del lenguaje (que van desde la incoherencia hasta un lenguaje vago e irrelevante). Por definición este trastorno supone un cierto grado de incapacidad que puede llegar a ser absoluta. Es un trastorno que limita e incluso puede anular las capacidades cognoscitivas y volitivas del sujeto. En cada caso será preciso determinar el grado de deterioro de las funciones psíquicas superiores. 33 Ibídem 40 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 34 Ibídem 35 Gisbert Calabuig, J.A. y Sánchez, A. (1991). Trastornos mentales orgánicos. En J. A. Gisbert Calabuig. Medicina legal y toxicología (4ª edición). Barcelona: Ediciones Científicas y Técnicas, S. A.; Pág. 875-893 36Rodes y Martí, op. cit. Si se demuestra que la acción se produjo en un estado de delirium establecido y pleno, la inimputabilidad será total ya que la clínica de un delirium le impide obviamente comprender lo injusto del hecho y orientar su voluntad con arreglo a ese conocimiento. No obstante, hay situaciones intermedias en las que la sintomatología no es tan intensa como para anular completamente la imputabilidad dando lugar a situaciones de semi- imputabilidad, teniendo siempre que analizar cada caso en particular y valorar con precisión todas las circunstancias que concurran.34 Para algunos autores constituye una de las pocas veces en que está justificada la eximente de trastorno mental transitorio. En estos casos se exige que se trate de una perturbación mental de causa inmediata evidenciable, pasajera, que termine con la curación sin secuelas, desarrollada sobre una base patológica probada y que sea de tal intensidad que produzca la anulación de la voluntad y entendimiento. 35 Este trastorno plantea al perito la problemática de que, en ocasiones, la exploración tiene lugar cuando ha desaparecido el cuadro de delirium, teniendo que hacer un diagnóstico retrospectivo.36 Ejemplo: hombre de 20 años, soltero, de profesión estudiante; sindicado por intentar matar a su madre. En la entrevista el joven se presenta confundido en tiempo y espacio, agitaba manos y pies, su conversación se volvía de vez en cuando incoherente e incomprensible, cuando se refería a su madre lo hacía con enojo. Indicaba en su relato, que su madre lo intentaba envenenar con jabón, además se mostraba temeroso por unos seres de otro planeta quienes se apoderaban de su mente y controlaban sus pensamientos para lastimar a otros, principalmente a su madre ya que ella quería matarlo y así quedarse con su piel. Conclusión: de acuerdo con lo recopilado en la entrevista, observación clínica y estudio de caso, el sujeto presenta una perturbación mental basada en ideas delirantes, las cuales ha utilizado para guiar su comportamiento agresivo y peligroso, resultado de un juicio alterado, por lo que lo hace una persona inimputable y se hace necesario buscar aparte una medida de seguridad para su tratamiento. 2.2.3.3 Demencias Las demencias se caracterizan por el desarrollo de múltiples déficits cognoscitivos que incluyen el deterioro de la memoria. Las demencias más relevantes son la demencia tipo Alzheimer y la demencia vascular. 41 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 37 Gisbert Calabuig y Sánchez, op. cit. Son uno de los casos más claros de eximente de responsabilidad. El problema surge en los períodos iniciales de la enfermedad en los que la sintomatología todavía no es muy evidente. Un completo examen neuropsicológico y clínico nos dará la clave del trastorno y, por tanto, de la inimputabilidad en materia penal. Sí es necesario matizar que aunque la infracción delictiva cometida en los primeros momentos de desarrollo de la demencia debiera inclinar a la propuesta de semi-imputabilidad, la mayoría de los autores opinan que nunca una persona con demencia debería ser sancionada. Es conocida la condición progresiva de la mayoría de las demencias. Esta persona que está desarrollando una demencia aún no suficientemente grave como para serle inimputable su acción, muy pronto carecerá de medios para conocer el valor de la sanción que no podrá comprender en toda su plenitud. La labor del perito es comprobar la capacidad de conocer y querer en el momento de comisión del delito pero también es su deber informar al jurista sobre la índole del trastorno y el desarrollo que éste experimenta con el tiempo.37 Ejemplo: persona de sexo femenino, de aproximadamente setenta y cinco u ochenta años de edad, ama de casa sindicada de agredir físicamente a otra persona. En la historia proporcionada por la familia indicaron que desde hace aproximadamente dos años la persona ha venido perdiendo la memoria, no recuerda en donde vive y que pregunta por sus hijos, pero que al decirle que están enfrente de ella, ella indica que ellos no son, que son más pequeños y se pone agresiva. Conclusión: el diagnóstico de la persona es de una posible demencia senil, esto le afecta en gran manera su capacidad para discernir entre lo bueno y malo, actúa impulsivamente y su juicio se encuentra alterado; asiéndola inimputable. 2.2.3.4 Drogodependencias No cabe duda de la trascendencia que la toxicomanía tiene en la actualidad, no sólo por sus repercusiones socio-sanitarias, sino por la elevada tasa de delincuencia que con tanta frecuencia lleva asociada. Toda ingestión de drogas tiene una gran repercusión psicológica forense ya sea por sus efectos tóxicos, ya sea por su acción desinhibidora de psicopatología latente o exacerbación de la ya existente, ya sea por la progresiva desestructuración psicosocial del consumidor o por la proclividad a cometer delitos. Siendo los legisladores conscientes de que las drogodependencias son un problema de primera magnitud han previsto la adopción de una serie de medidas de seguridad que sustituyen a la prisión quedando a criterio del Tribunal sustituir las penas privativas de libertad por internamientos en centros de deshabituación. 42 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal El perito forense debe valorar si, en el momento de la comisión del delito, el sujeto se encontraba en alguno de los tres supuestos: en estado de intoxicación plena, bajo la influencia de un síndrome de abstinencia o actúa a causa de su grave adicción. Uno de los mayores problemas que plantea el peritaje de un drogodependiente es saber si, en el momento de los hechos (los peritajes se hacen muchas veces tiempo después de transcurridos los hechos), el presunto delincuente drogodependiente se encontraba bajo los efectos de un síndrome de abstinencia, ya que el índice de simulación, disimulación y falsedades es elevado. Los drogodependientes conocen muy bien la clínica propia de estas afecciones lo que puede contribuir a dudar si es una situación real o simulada. Por ello, es importante el reconocimiento médico de forma inmediata al hecho delictivo. Ejemplo: persona de sexo masculino, de veinte años de edad, con primero básico de escolaridad, albañil, sindicadode femicidio en grado de tentativa. El sujeto refirió: “[…] no me recuerdo de nada, para decirle que hasta el siguiente día que desperté pensé que estaba aquí por andar haciendo escándalo, pero no sabía nada de lo que hice. Ese día desde las seis de la mañana comenzamos a tomar con los compañeros de trabajo, tomamos hasta como a las seis o siete de la noche, tomamos de todo por eso ya ni me recuerdo. Me recuerdo que tomamos en una cevicheria que está arriba de la gasolinera de Cuilapa. Cuando recibí mi visita vino mi mujer y me contó todo lo que pasó, me dijo que llegué bien bolo, que casi no me podía parar y no se me entendía lo que decía, que yo quise volver a salir para seguir tomando pero que ella no me dejó y fue allí cuando sucedió todo. Yo me disculpé con ella, como ya le dije no habíamos tenido ningún problema, ella aceptó mis disculpas y siempre viene a visitarme”. Conclusión: en el presente caso hubiese resultado sumamente útil un análisis toxicológico para determinar el nivel de alcohol en la sangre; se intentó alegar un trastorno mental transitorio debido a intoxicación alcohólica, que era viable y comprobable después de la elaboración y análisis del dictamen pericial psicológico, pero no fue posible. 2.2.3.5 Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos Quizá sean las esquizofrenias el grupo de enfermedades mentales más representativo de lo que popularmente se conoce como "locura". Su presencia incapacita al sujeto para valorar adecuadamente la realidad y para gobernar rectamente su propia conducta. Entre los síntomas más característicos de la esquizofrenia se encuentran la presencia de ideas delirantes, alucinaciones, lenguaje desorganizado, comportamiento catatónico o desorganizado, aplanamiento afectivo, etc. El esquizofrénico debe ser considerado a efectos penales como inimputable dada la grave afectación imperante. No obstante, no es lo mismo peritar un delito cometido en pleno delirio que el cometido por un esquizofrénico residual con una discreta afectación 43 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 38 Cabrera y Fuertes, op. cit. 39 Ibídem 40 Ibidem de la personalidad. Por ello, no es prudente hablar taxativamente de inimputabilidad para todos los delincuentes con esquizofrenia. Siendo siempre necesario poner en relación la enfermedad (forma, evolución, número de brotes, tratamientos, etc.) con el hecho delictivo en cuestión.38 Consideraciones especiales merecen la peligrosidad del paciente con trastorno delirante (paranoia) que radica, por un lado, en su aparente normalidad psíquica ya que sólo está afectada una parcela del psiquismo, aquella a la que se refiere su deliro, manteniendo intactas sus facultades intelectivas y, por otro, en el fuerte convencimiento de sus ideas delirantes y ausencia completa de conciencia de enfermedad.39 Los delitos del paranoico están relacionados con el contenido de sus ideas delirantes. Aunque el perito no tiene dudas respecto a la inimputabilidad o semi-imputabilidad de estos pacientes, una cosa es la convicción personal y clínica y otra muy diferente la exposición y la debida argumentación de los informes periciales ante los Tribunales de Justicia. Es a veces muy difícil hacer comprender a jueces y magistrados de que el paranoide es inimputable o semi-imputable, tanto más cuanto que el resto de su vida social suele ser incluso un ejemplo de perfección y organización. Para ello el informe pericial se deberá basar en una completa y detallada historia clínica y en una prolongada observación a través de la cual se pondrá en relación el delito con la temática delirante, siendo esta relación causa-efecto la condición esencial, como ocurría en el esquizofrénico, para determinar la imputabilidad. Si su delito está vinculado a su trama delirante, será fruto de esas ideas patológicas. Demostrada la existencia del estado delirante y la adecuación del delito al contenido del delirio, no se puede concluir sino la inimputabilidad40. De acuerdo a esta opinión, es posible que el paciente realice un delito al margen de su delirio. En tal caso, si estudiando el delito, tanto en su motivación como en su utilidad inmediata, no se encuentra ninguna relación con el contenido delirante, se debería pronunciar por la imputabilidad. Ejemplo: persona de sexo masculino, de veintiséis años de edad, con tercero básico de escolaridad, sastre de profesión y oficio, sindicado de robo en grado de tentativa. Se procede a la evaluación en el Hospital de Nacional de Salud Mental Dr. Carlos Federico Mora, en sus antecedentes indica “me agarraron por andar borracho, yo andaba descalzo porque se me había perdido un zapato, me llevaron a la cárcel y de allí me trajeron para acá porque les dije que estaba enfermo de cáncer, fíjese que una vez ya había estado acá y también me curaron de cáncer y ahora que me volvió a dar, ya me están curando”. El diagnóstico de ingreso es esquizofrenia, se encontraba bajo tratamiento médico para controlar sus impulsos agresivos y hipersexuales ya que intentó agredir a una enfermera. Conclusión: se considera un sujeto inimputable ya que su condición afecta su capacidad para valorar las circunstancias, pero puede presentar riesgo para la sociedad por lo que se le otorgó una medida de seguridad, internándolo en un centro especial para su tratamiento. 44 Psicología Forense Instituto de la Defensa Pública Penal 2.2.3.6 Trastornos del estado de ánimo Los trastornos del estado de ánimo son trastornos de muy diversos tipos. Los episodios depresivos se definen por la presencia de un estado de ánimo deprimido acompañado de una pérdida del interés o placer por todas o casi todas las actividades habituales. Junto a ello, se suelen apreciar síntomas como pérdida de apetito y peso, insomnio, excitación o enlentecimiento psicomotor, sensación de fatiga o pérdida de energía, sentimientos de inutilidad, sentimientos de culpa o disminución de la capacidad de concentración. En el otro lado de la moneda se sitúan los episodios de manía caracterizados por la presencia de un estado de ánimo inconfundiblemente elevado, eufórico, expansivo o irritable, que dura un tiempo prolongado y altera la conducta del paciente. Suele acompañarse de aumento de la actividad social, laboral o sexual. La delincuencia de los trastornos del estado de ánimo no es muy importante sobre todo si se compara con el resto de los cuadros psicopatológicos. Ahora bien, existen una serie de peculiaridades en el comportamiento violento cuando se produce en este tipo de pacientes. La más destacable es la de que esta agresión suele estar dirigida hacia las personas más allegadas al paciente. La depresión puede ocasionar autoacusación de delitos (por las ideas delirantes de indignidad, culpa y ruina personal) pudiendo llegar a crear una cierta confusión policial. Otro aspecto psicológico forense importante a considerar es el tema del suicidio. Un problema específico de las depresiones es el denominado "suicidio ampliado". El paciente mata a sus seres más queridos para "aliviarles de la insoportable carga de la vida y evitarle los sufrimientos que tendrían, máxime cuando él falte". Después de matar a sus seres queridos, el depresivo se quita la vida. Puede darse el caso de que falle en este intento, debiendo responder penalmente de su conducta.41 La manía, por sus propias características clínicas, tiene tasas más elevadas de delincuencia. En general, el maníaco no se esconde tras el delito, no trata de excusarse y actúa sin o con muy poca premeditación. Es por todo lo anterior por lo que son fácilmente detectables y conducidos ante la Justicia. En los períodos interfásicos el sujeto es prácticamente normal y su delictividad es igual a la de cualquier otro ciudadano. Aspecto éste muy a tener en cuenta al efectuar el informe pericial. No es posible dudar de la inimputabilidad de los trastornos del estado de ánimo (tanto episodios depresivos como maníacos) en sus fases agudas y graves42. Más problemática forense acarrean los llamados períodos intercríticos así como el
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