Logo Studenta

OIT_2_62

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.1 SUMARIO 62.1
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
MINERALES Y
PRODUCTOS QUIMICOS
PARA LA AGRICULTURA PRODUCTOS QUIMICOS
Directoras del capítulo
Debra Osindky y
Jeanne Mager Stellman 62
Sumario
SUMARIO
Minerales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62.2
Productos químicos para la agricultura
Gary A. Page . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62.7
Plaguicidas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62.9
Directrices de la OMS para la clasificación de los
plaguicidas según el riesgo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62.18
• MINERALES*
MINERALES
Se utilizan minerales en las industrias de la cerámica, el vidrio, la
joyería, el aislamiento, la talla de piedra, los abrasivos, los plás-
ticos y otras varias, todas las cuales presentan sobre todo un
riesgo por inhalación. También la cantidad y tipo de impurezas
contenidas en ellas pueden afectar al riesgo asociado a la inhala-
ción de polvo. El principal motivo de preocupación en las activi-
dades mineras y de producción de minerales es la presencia de
sílice y de asbesto. El contenido de sílice en diferentes forma-
ciones de rocas, como la arenisca, el feldespato, el granito y la
pizarra, puede variar entre el 20 % y casi el 100 %. Por lo tanto,
resulta imprescindible reducir al mínimo la exposición de los
trabajadores a las concentraciones de polvo mediante la aplica-
ción de medidas de control estricto.
Para prevenir el desarrollo de enfermedades pulmonares en
los trabajadores de la minería se recomienda mejorar los
controles técnicos mediante el barrenado en húmedo, la ventila-
ción y la manipulación a distancia. En los casos en que no sean
posibles controles técnicos eficaces, es obligado el uso de equipos
de protección respiratoria aprobados, incluidos los respiradores.
La sustitución industrial de los agentes menos peligrosos puede
reducir también la exposición ocupacional. Por último, es funda-
mental en cualquier programa de prevención la formación de
los trabajadores y de las empresas en lo que respecta a los riesgos
y medidas de control adecuadas.
Los reconocimientos médicos habituales de los trabajadores
expuestos al polvo de minerales deben incluir evaluaciones de
los síntomas respiratorios, de las alteraciones de la función
pulmonar y de posibles enfermedades neoplásicas. Los trabaja-
dores que presenten los primeros signos de cambios pulmonares
han de ser asignados a otros puestos en los que no están
expuestos a los riesgos del polvo. Además de los informes indivi-
duales de la enfermedad, se deben recopilar datos de grupos de
trabajadores para los programas de prevención. En el capítulo
Sistema respiratorio se ofrecen más detalles acerca de los efectos
sobre la salud de varios minerales que se describen en éste.
Apatita (fosfato cálcico)
Presentación y usos. La apatita es un fosfato cálcico natural, normal-
mente con flúor. Se presenta en la corteza terrestre como mineral
de fosfato, y constituye también el principal componente de la
estructura ósea de los dientes. Pueden encontrarse depósitos de
apatita en Canadá, Europa, Federación Rusa y Estados Unidos.
La apatita se utiliza en cristales de láser y como fuente de
fósforo y de ácido fosfórico. También se emplean en la fabrica-
ción de fertilizantes.
Riesgos para la salud. El contacto con la piel, la inhalación o la
ingestión pueden provocar irritación de la piel, ojos, nariz,
garganta o sistema digestivo. El polvo puede contener flúor,
causante de efectos tóxicos.
Arcillas (silicatos de aluminio hidratados)
Presentación y usos. La arcilla es un material plástico maleable
formado por los residuos procedentes de la desintegración de
rocas de silicatos arcillosos por los agentes atmosféricos; normal-
mente contiene de un 15 a un 20 % de agua y es higroscópica. Se
presenta como sedimento en muchas formaciones geológicas en
todas partes del mundo, y contiene cantidades variables de feldes-
pato, mica y agregados de cuarzo, calcita y óxido de hierro.
La calidad de la arcilla depende de la cantidad de alúmina
que contiene; así, una buena arcilla de porcelana tiene aproxi-
madamente un 40 % de alúmina, mientras que el contenido de
sílice es del 3 al 6 %. Por término medio, el contenido de cuarzo
de los depósitos de arcilla está comprendido entre el 10 y 20 %,
pero en los peores casos, cuando hay menos alúmina de lo habi-
tual, puede llegar al 50 %. El contenido puede variar dentro de
un mismo depósito, y la separación de éstos puede realizarse en
el pozo. En su estado plástico, la arcilla se puede moldear o
comprimir, pero cuando se somete al fuego se endurece y
conserva la forma que se le ha dado.
La arcilla se extrae a menudo a cielo abierto, pero otras veces
se extrae de minas subterráneas. En los yacimientos a cielo
abierto, el método de extracción depende de la calidad del mate-
rial y la profundidad del depósito; algunas veces se requiere
el uso de herramientas neumáticas manuales, pero, siempre que
sea posible, la mina debe estar mecanizada, utilizándose excava-
doras, palas mecánicas, cortadoras de arcillas, máquinas draga-
doras de profundidad, etc. La arcilla se saca a la superficie
con camiones o transportándola por cable. Una vez en la super-
ficie, puede someterse a un proceso preliminar antes de su expe-
dición (secado, triturado, amasado, mezclado, etc.) o venderse
tal cual (véase el capítulo Minas y canteras). En ocasiones, como
ocurre en muchas fábricas de ladrillos, el yacimiento de arcilla
está situado junto a la fábrica donde se elaboran los productos
terminados.
El material básico para la fabricación de cerámica, ladrillos,
tejas y refractarios está formado por diferentes tipos de arcillas.
La arcilla puede utilizarse en estado natural en la construcción
de diques; in situ, algunas veces sirve de cubierta para no dejar
escapar gas almacenado en un estrato inferior. Se requiere una
ventilación adecuada y controles de ingeniería.
Riesgos para la salud. Las arcillas contienen habitualmente
grandes cantidades de sílice libre, por lo que la inhalación
crónica puede provocar silicosis. El contacto cutáneo con la
arcilla húmeda puede causar sequedad de piel e irritación.
Existe un riesgo de silicosis para los trabajadores del subsuelo de
minas mecanizadas de arcilla con un elevado contenido de
cuarzo y poca humedad natural. En este caso, el factor decisivo
no es solamente el contenido de cuarzo, sino también la
humedad natural: si éste es inferior al 12 %, es probable que
la extracción mecánica genere mucho polvo fino.
Arenisca
Presentación y usos. La arenisca es una roca sedimentaria siliciclás-
tica que consta principalmente de arena, normalmente arena de
cuarzo. Suele estar poco cementada y se puede disgregar fácil-
mente en arena. No obstante, la arenisca fuerte, duradera, en
colores marrones y grises, se utiliza como arenisca a medida en
paramentos y adornos de edificios, en casas, como piedra de
bordillo, en estribos de puentes y en distintos muros de retención.
Las areniscas firmes se trituran para su uso como agregados de
hormigón, balastos de vías y encachado. No obstante, muchas
areniscas comerciales están muy débilmente cementadas y por lo
tanto se desmenuzan y utilizan para arena de moldeo y arena
para vidrio. La arena para vidrio es el principal ingrediente del
vidrio. En la industria del metal, la arena con buenas propiedades
de cohesión y refractarias se utiliza para fabricar moldes de
formas especiales en los que se vierte el metal fundido.
La arenisca se encuentra en todo el territorio de Estados
Unidos: Illinois, Iowa, Minnesota, Missouri, Nueva York, Ohio,
Virginia y Wisconsin.
Riesgos para la salud. Los principales riesgos proceden de
la exposición al sílice, tema tratado en el capítulo Sistema
respiratorio.
62.2 MINERALES ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO
PRODUCTOS QUIMICOS
*Adaptadode la 3ª edición de la Enciclopedia de salud y seguridad en el trabajo. La
revisión incluye información de A. Bruusgaard, L.L. Cash, Jr., G. Donatello, V.
D’Onofrio, G. Fararone, M. Kleinfeld, M. Landwehr, A. Meiklejohn, J.A.
Pendergrass, S.A. Roach, T.A. Roscina, N.I. Sadkovskaja y R. Stahl.
Asbesto
Presentación y usos. Se agrupan bajo el término asbesto un grupo de
minerales fibrosos naturales, ampliamente distribuidos por todo el
mundo. Dentro de ellos se distinguen dos grupos: el grupo de la
serpentina, que incluye el crisotilo, y el de los anfíboles, del que
forman parte la crocidolita, la tremolita, la amosita y la antofilita.
Los dos grupos se diferencian en la estructura, en las caracterís-
ticas químicas y superficiales, y en las características físicas de las
fibras.
Las propiedades industriales que hicieron de los asbestos un
material tan útil en el pasado son la elevada resistencia a la
tensión y la flexibilidad de las fibras, así como la resistencia al
calor, a la abrasión y a muchas sustancias químicas. Son muchos
los productos manufacturados que contienen asbesto, como
productos para la construcción, materiales de fricción, fieltro,
envases y juntas, baldosas, papel, aislamientos y tejidos.
Riesgos para la salud. La asbestosis, una enfermedad pleural
relacionada con los asbestos, el mesotelioma maligno y el cáncer
de pulmón son enfermedades específicas asociadas a la exposi-
ción al polvo de asbestos. Los cambios fibróticos que caracte-
rizan la neumoconiosis, la asbestosis, son consecuencia de un
proceso inflamatorio provocado por las fibras retenidas en el
pulmón. Los asbestos se estudian en el capítulo 10, Aparato
respiratorio.
Bauxita
Presentación y usos. La bauxita es la principal fuente de aluminio.
Se trata de una mezcla de minerales formada por la acción de los
agentes atmosféricos sobre rocas que contienen aluminio.
Las bauxitas constituyen la forma más rica de estas menas alte-
radas que contienen hasta un 55 % de alúmina. Algunas menas
lateríticas (con un porcentaje elevado de hierro) contienen hasta
un 35 % de Al2O3. Los depósitos comerciales de bauxita son
sobre todo gibbsita (Al2 O3 ⋅3H2 O) y boehmita (Al2 O3 ⋅H2 O), y
se encuentran enAustralia, Brasil, Francia, Ghana, Guinea,
Guayana, Hungría, Jamaica y Surinam. La gibbsita se solubiliza
con más rapidez en soluciones de hidróxido sódico que la boeh-
mita, y por lo tanto se prefiere para la producción de alúmina.
La bauxita se extrae a cielo abierto. Las menas más ricas se
utilizan tal y como se extraen, y las menas de grado inferior se
pueden enriquecer triturando y lavando para retirar los restos de
arcilla y sílice.
Riesgos para la salud. Se ha comunicado una grave discapacidad
pulmonar en trabajadores dedicados a la fundición de bauxita
combinada con carbón, hierro y cantidades muy pequeñas de
sílice. La dolencia se conoce como “enfermedad de Shaver”.
Dado que la contaminación por sílice de las menas con aluminio
es habitual, los riesgos para la salud asociados con la presencia
de sílice cristalina libre en menas de bauxita se debe considerar
un factor causal importante.
Carbón
Presentación y usos. El carbón es un combustible natural, sólido,
formado a partir de plantas prehistóricas. Se presenta en capas o
vetas en rocas sedimentarias. Las condiciones favorables para la
formación natural de carbón se presentaron hace entre 40 y
60 millones de años en la Era Terciaria (formación de carbón
blando) y hace más de 250 millones de años en la Era Carboní-
fera (formación de carbón bituminoso), cuando los bosques de los
pantanos se extendieron en un clima cálido y gradualmente se
hundieron durante los movimientos geológicos. Los depósitos
principales de carbón blando se encuentran en Australia, Europa
Oriental, Alemania, Federación Rusa y Estados Unidos. Las prin-
cipales reservas de carbón bituminoso se encuentran en Australia,
China, India, Japón, Federación Rusa y Estados Unidos.
El carbón es una fuente importante de materias primas
químicas. Mediante pirólisis o destilación destructiva se obtienen
alquitrán de hulla y gases hidrocarbonados, que pueden ser
mejorados mediante hidrogenación o metanación a petróleo
sintético y gas combustible. La hidrogenación catalítica da lugar
a hidrocarburos y gasolina. La gasificación produce monóxido
de carbono e hidrógeno (gas sintético), de los que se obtienen
amoniaco y otros productos. Mientras que en 1900 el 94 % de
las necesidades energéticas mundiales se cubrían con carbón y
solamente un 5 % con petróleo y gas natural, el carbón ha sido
gradualmente sustituido por combustibles líquidos y gaseosos en
todo el mundo.
Riesgos para la salud. Los riesgos de la minería y del polvo de
carbón se comentan en los capítulos Minas y canteras y Sistema
respiratorio.
Corindón (óxido de aluminio)
Presentación y usos. El corindón es uno de los principales abrasivos
naturales. Tanto el corindón natural como el artificial (óxido de
aluminio o esmeril artificial) son relativamente puros. El material
artificial se produce a partir de bauxita mediante fusión en un
horno eléctrico. Debido a su dureza, el corindón se utiliza para
moldear metales, madera, vidrio y cerámica, mediante un
proceso de molturación o pulido. Los riesgos para la salud se
comentan en otros capítulos de esta Enciclopedia.
Erionita
Presentación y usos. La erionita es una zeolita cristalina y fibrosa.
Las zeolitas, un grupo de silicatos alumínicos encontrados en las
cavidades de las rocas volcánicas, se utilizan en la filtración de
agua dura y en el refino del petróleo. Se encuentra erionita en
California, Nevada y Oregón en Estados Unidos, y en Irlanda,
Islandia, Nueva Zelanda y Japón.
Riesgos para la salud. La erionita es un cancerígeno humano
conocido. La inhalación crónica puede provocar mesotelioma.
Feldespato
Presentación y usos. Se da con el nombre común de feldespato a un
grupo de silicatos de aluminio y sodio, potasio, calcio y bario.
Comercialmente, el término se aplica a los feldespatos potásicos
de fórmula KAlSi3 O8, normalmente con un bajo contenido de
sodio. Se encuentra feldespato en Estados Unidos. Se utiliza en
alfarería, esmaltes y cerámica, vidrio, jabones, abrasivos,
cementos y hormigones. El feldespato sirve de unión en ruedas
abrasivas, y se utiliza en compuestos aislantes, materiales
embreados para tejados y fertilizantes.
Riesgos para la salud. La inhalación crónica puede provocar sili-
cosis debido a la presencia de cantidades sustanciales de sílice
libre. Asimismo el feldespato puede contener óxido sódico irri-
tante (espatos de sosa), óxido potásico (espato de potasa) y óxido
de calcio (espatos de cal) en forma insoluble. Véase la sección
“Sílice” más adelante.
Fluorita (fluoruro cálcico)
Presentación y usos. La fluorita es un mineral que contiene del 90 al
95 % de fluoruro cálcico y del 3,5 al 8 % de sílice. Se extrae
mediante barrenado y voladura. La fluorita es la principal fuente
de flúor y sus compuestos. Se utiliza como fluido en hornos de
acero abiertos y en fundición de metales. Asimismo se emplea en
cerámica, pinturas y en la industria óptica.
Riesgos para la salud. Están causados sobre todo por los efectos
nocivos del contenido de flúor y de sílice. La inhalación aguda
puede provocar problemas gástricos, intestinales, circulatorios y
en el sistema nervioso. La inhalación crónica o la ingestión
ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.3 MINERALES 62.3
PRODUCTOS QUIMICOS
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
puede provocar pérdida de peso y apetito, anemia, y defectos
óseos y dentales. Se han observado lesiones pulmonares
en personas que inhalan polvo con un 92 a un 96 % de fluo-
ruro cálcico y un 3,5 % de sílice. Parece que el fluoruro cálcico
estimula la acción fibrogénica de la sílice en los pulmones.
Entre los mineros de fluorita se han comunicado casos de bron-
quitis y silicosis.
En la extracción de fluorita debe realizarse un control cuida-
doso del polvo, mediante técnicas como el barrenadoen
húmedo, el regado de rocas sueltas y la ventilación por extrac-
ción o general. Al calentar la fluorita existe el riesgo de forma-
ción de ácido fluorhídrico, y deben aplicarse las medidas de
seguridad pertinentes.
Grafito
Presentación y usos. El grafito se encuentra en casi todo el mundo,
pero la mayor parte de la producción del mineral natural se
concentra en Austria, Alemania, Madagascar, México, Noruega,
Federación Rusa y Sri Lanka. La mayoría de los grafitos natu-
rales, si no todos, contienen sílice cristalina y silicatos.
Grafito en masas. Se encuentra en filones que atraviesan dife-
rentes tipos de rocas ígneas y metamórficas que contienen impu-
rezas minerales como feldesfato, cuarzo, mica, piroxina,
zirconio, rutilo, apatita y sulfuros de hierro. Frecuentemente las
impurezas se encuentran en bolsas aisladas en los filones del
mineral. La extracción se realiza generalmente en minas subte-
rráneas, con taladros manuales para la extracción selectiva de
venas estrechas.
Los depósitos de grafito amorfo son también subterráneos,
aunque suelen encontrarse en lechos mucho más gruesos que los
filones de grafito en masas. En general están asociados con
arenisca, pizarra, caliza y minerales de cuarzo y sulfuros de
hierro. El mineral se barrena, se arranca con explosivos y se
carga a mano en vagonetas para llevarlo a la superficie, donde se
tritura y se separan las impurezas.
El grafito en escamas está asociado generalmente con rocas sedi-
mentarias metamorfoseadas como gneis, esquistos y mármoles.
A menudo los depósitos están en la superficie o cerca de ella.
En consecuencia, en la extracción a cielo abierto se utilizan
equipos normales de excavación, como palas, buldozers o escari-
ficadoras, siendo necesario un mínimo de perforación y
voladura.
El grafito artificial se produce calentando carbón o coque de
petróleo, y no suelen contener sílice libre. El grafito natural se
utiliza en la fabricación de revestimientos de fundición, lubri-
cantes, pinturas, electrodos, baterías secas y crisoles para meta-
lurgia. La “mina” de los lápices también es de grafito.
Riesgos para la salud. Durante la extracción y tratamiento del
grafito natural y durante la fabricación del grafito artificial se
puede producir inhalación de carbón, así como del polvo
asociado. Las exploraciones radiográficas de trabajadores que
manipulan grafito natural y artificial han demostrado distintos
tipos de neumoconiosis. El examen histopatológico ha revelado
la existencia de acúmulos de pigmento, enfisema focal, fibrosis
colagenosa, pequeños nódulos fibrosos, quistes y cavidades. Estas
últimas contienen un líquido de aspecto semejante a la tinta en
el que se han identificado cristales de grafito. En informes
recientes se ha señalado que los materiales implicados en exposi-
ciones que provocan casos graves de fibrosis pulmonar masiva
son probablemente mezclas de polvos.
La neumoconiosis por grafito es progresiva, incluso después
de que el trabajador haya abandonado el área contaminada. El
sujeto puede permanecer asintomático durante muchos años de
exposición, y la incapacidad sobreviene a menudo repentina-
mente. Es esencial la realización de análisis periódicos de sílice
cristalina y silicatos en el mineral bruto y en el polvo en suspen-
sión en el aire, prestando especial atención al feldespato, talco y
mica. Se pueden ajustar unos niveles de polvo aceptables para
controlar el efecto nocivo para la salud de los trabajadores.
Además de la exposición a los riesgos físicos de la minería, los
trabajadores que manipulan grafito pueden enfrentarse también
a riesgos químicos, como los relacionados con el ácido fluorhí-
drico y el hidróxido sódico, utilizados en la purificación de
grafito. Cualquier programa de prevención sanitaria debería
incluir la protección contra los riesgos asociados a estos
productos químicos.
Granito
Presentación y usos. El granito, una roca ígnea de grano grueso, está
compuesto por cuarzo, feldespato y mica en granos amorfos.
Se utiliza en gravilla y como granito a medida. Después de
romperlo al tamaño deseado, el granito se puede utilizar para
agregados de hormigón, grava para carreteras, balasto ferro-
viario, lechos filtrantes, y para encachado (bloques grandes) en
pilares y tajamares. Los colores —rosa, gris, salmón, rojo y
blanco— son deseables para el granito a medida. La dureza, la
uniformidad de la textura y otras propiedades físicas hacen de
este último un producto ideal para monumentos, bloques de
cimientos, escalones y columnas.
El granito en gravilla se produce principalmente en Cali-
fornia, con cantidades importantes en otros estados de Estados
Unidos como Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur y
Virginia. Las principales áreas de producción del granito a
medida en Estados Unidos son Georgia, Maine, Massachusetts,
Minnesota, Carolina del Norte, Dakota del Sur, Vermont y
Wisconsin.
Riesgos para la salud. El granito presenta una elevada contami-
nación con sílice. Por consiguiente, la silicosis es un riesgo
importante para la salud en la extracción de este mineral.
Mármol (carbonato cálcico)
Presentación y usos. El mármol se define geológicamente como una
piedra caliza metamorfoseada (recristalizada) compuesta princi-
palmente por granos cristalinos de calcita, dolomita o ambos, con
una textura cristalina visible. El uso generalizado del término en
la industria de la cantería y del acabado ha llevado a la utiliza-
ción del término “mármol comercial”, que incluye todas las rocas
cristalinas que pueden ser pulimentadas, y que están formadas
principalmente por uno o más de los minerales siguientes: calcita,
dolomita o serpentina.
El mármol se ha utilizado a lo largo de toda la historia como
material de construcción importante debido a su resistencia,
duración, facilidad de trabajado, adaptabilidad a la arquitectura
y satisfacción estética. La industria del mármol comprende dos
grandes ramas: la del mármol a medida y la del mármol macha-
cado y partido. El mármol a medida es el que se extrae para
obtener bloques o losas que cumplan las especificaciones de
tamaño y forma. Sus usos son conocidos: piedras de construc-
ción, monumentos, sillería, revestimientos, paneles, enlosados,
estatuas, etc. El mármol machacado y partido tiene un tamaño
variable desde grandes bloques hasta productos fina-
mente pulverizados, y contiene aglomerados, lastres, gravilla
para tejados, lascas de terrazo, aprestos, pigmentos, cal para
abonos, etc.
Riesgos para la salud. No se han descrito enfermedades profesio-
nales relacionadas específicamente con la minería, extracción y
elaboración de mármol. En la minería subterránea puede
producirse una exposición a gases tóxicos provocados por vola-
duras y algunos tipos de equipos motorizados; son necesarias
una ventilación adecuada y equipo protector de la respiración.
62.4 MINERALES ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO
PRODUCTOS QUIMICOS
En las voladuras abrasivas podría producirse exposición a sílice
si se utilizara arena, pero el carburo de silicio o el óxido de
aluminio son igualmente eficaces, no tienen riesgo de silicosis y
deberían emplearse en su lugar. Han de controlarse las grandes
cantidades de polvo generado en la elaboración del mármol,
bien mediante el uso de método húmedos, bien mediante
métodos de ventilación por extracción.
Mica
Presentación y usos. La mica (del latín micare, fulgurar, brillar) es un
silicato mineral, principal componente de las rocas ígneas, en
particular los granitos. También es un constituyente común de
silicatos como el caolín, producidos por la acción de los agentes
atmosféricos sobre estas rocas. En las masas rocosas, especial-
mente en las vetas de pegmatita, la mica aparece en forma de
masas lenticulares de hojas partidas (conocidas como libros) de
más de 1 m de diámetro o como partículas. Existen muchas varie-
dades, de las cuales las más útiles son la moscovita (mica común,
transparente o blanca), flogopita (mica ámbar), vermiculita, lepidolita
y sericita. La moscovita se encuentra generalmente en lasrocas
silíceas. Los mayores depósitos de esta variedad están en India,
Sudáfrica y Estados Unidos. La sericita es una variedad de la
moscovita en pequeñas láminas; se produce como consecuencia
del desgaste por la acción de los agentes atmosféricos sobre
esquistos y gneis. La flogopita, que se encuentra en rocas calcá-
reas, se concentra en Madagascar. La principal característica de
la vermiculita es su considerable poder de expansión cuando se
calienta con rapidez a aproximadamente 300 °C. Existen grandes
depósitos de vermiculita en Estados Unidos. El principal valor de
la lepidolita radica en su gran contenido de litio y rubidio.
La mica se utiliza aún para las estufas de combustión lenta,
farolas o mirillas de los hornos. Su propiedad más sobresaliente
es que es dieléctrica, lo que la convierte en un material esencial
en la industria aeronáutica. El polvo de mica se utiliza en la
fabricación de cables eléctricos, neumáticos, electrodos soldados,
cartón bituminado, pinturas y plásticos, lubricantes secos, recu-
brimientos dieléctricos y aisladores ignífugos. A menudo se
compacta con resinas alquídicas. La vermiculita se utiliza como
material aislante en la industria de la construcción. La lepidolita
se utiliza en las industrias de vidrio y cerámica.
Riesgos para la salud. Al trabajar con mica es posible la genera-
ción de electricidad estática, que puede descargarse técnica-
mente sin problemas. Los mineros de mica están expuestos a la
inhalación de una gran variedad de polvos, como los de cuarzo,
feldespato y silicatos. La inhalación crónica puede causar sili-
cosis. La exposición al polvo de mica puede producir irritación
del aparato respiratorio y, después de muchos años, neumoco-
niosis fibrótica nodular, considerada durante mucho tiempo
como una forma de silicosis; hoy en día se ha descartado esta
hipótesis debido a que el polvo de mica pura no contiene sílice
libre. Sin embargo, el cuadro radiológico suele ser muy parecido
al de la asbestosis. Se ha demostrado experimentalmente que la
mica posee una citotoxicidad débil sobre los macrófagos y que
sólo induce una pequeña respuesta fibrógena, limitada a la
formación de fibras gruesas de reticulina.
La inhalación crónica de vermiculita, que a menudo contiene
asbesto, puede provocar asbestosis, cáncer de pulmón y mesote-
lioma. Su ingestión puede causar cáncer de estómago y de
intestino.
Pedernal
Presentación y usos. El pedernal es una forma cristalina de sílice
nativa o cuarzo. Se encuentra en Europa y Estados Unidos. Se
utiliza como abrasivo, diluyente de pinturas y relleno de fertili-
zantes. Se emplea también en insecticidas, caucho, plásticos,
asfalto y cerámica. Históricamente ha sido un mineral importante
debido a que se utilizó para fabricar algunas de las primeras
herramientas y armas conocidas.
Riesgos para la salud. Relacionados con las propiedades tóxicas
de la sílice.
Piedra caliza
Presentación y usos. La piedra caliza es una roca sedimentaria
compuesta principalmente por carbonato cálcico en forma de
calcita mineral. Se puede clasificar según las impurezas que
contenga (caliza dolomítica, que contiene cantidades importantes
de carbonato magnésico; caliza arcillosa, con un alto contenido
de arcilla; caliza silícea, con arena o cuarzo; etc.), o según la
formación en la que se presente, (por ejemplo mármol, una caliza
cristalina). Los depósitos de caliza están ampliamente distribuidos
en toda la corteza terrestre y se extraen en canteras.
La piedra caliza se ha utilizado desde tiempos remotos en
construcción. También se tritura para su uso como fundente en
fundición, refino, y para la fabricación de cal. Se emplea como
firme y balastro en la construcción de carreteras, y se mezcla
con arcilla para la fabricación de cemento.
Riesgos para la salud. Durante la extracción deben adoptarse las
medidas adecuadas de seguridad en la cantera, y observarse las
normas de protección de la maquinaria en las trituradoras.
El principal riesgo para la salud es el relacionado con la
presencia, en el polvo de piedra caliza transportado en el aire,
de sílice libre en proporción del 1 al 10 % de la roca caliza.
En estudios realizados con trabajadores de canteras y trata-
miento de piedra caliza, los exámenes radiográficos revelaron
cambios pulmonares, y la exploración clínica indicó la existencia
de faringitis, bronquitis y enfisema. Los obreros que preparan la
piedra para las obras de construcción deberían observar las
medidas de seguridad apropiadas para la industria de la piedra.
Piedra pómez
Presentación y usos. La piedra pómez es una roca porosa, grisácea o
blancuzca, frágil y de bajo peso específico, procedente de magma
volcánico reciente; está compuesta por cuarzo y silicatos (princi-
palmente feldespato). Se encuentra pura o mezclada con varias
sustancias, sobre todo obsidiana, que se distingue por su color
negro brillante y por su densidad relativa, cuatro veces mayor.
Se encuentra sobre todo en Etiopía, Alemania, Hungría, Italia
(Sicilia, Lípari), Madagascar, España y Estados Unidos. Algunas
variedades, como la piedra pómez de Lípari, tienen un contenido
elevado de sílice total (71,2 a 73,7 %) y una cantidad considerable
de sílice libre (1,2 a 5 %).
En el comercio, y para aplicaciones prácticas, se distingue
entre piedra pómez en bloques y en polvo. Cuando está en
forma de bloque, se designa de forma diferente en función del
tamaño del bloque, color, porosidad, etc. La forma en polvo se
clasifica mediante números según el tamaño del grano.
El proceso industrial comprende varias operaciones: selección
para separar la obsidiana, molido y pulverización en máquinas
con muelas de piedra o de metal, secado en hornos abiertos,
cernido y tamizado usando cedazos abiertos manuales y tamices
rotatorios y oscilantes, recuperándose generalmente la materia
residual.
La piedra pómez se utiliza como abrasivo (en bloque o en
polvo), como material ligero de construcción y para la fabrica-
ción de artículos de piedra, explosivos, etc.
Riesgos para la salud. Las operaciones más peligrosas son el
secado al horno y el tamizado, debido a la gran cantidad de
polvo producida. Aparte de los signos característicos de silicosis
observados en los pulmones y de la esclerosis de los ganglios
linfáticos hiliares, el estudio de casos mortales ha revelado daño
ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.5 MINERALES 62.5
PRODUCTOS QUIMICOS
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
en varias capas del árbol arterial pulmonar. La exploración
clínica ha revelado alteraciones respiratorias (enfisema y a veces
daño pleural), trastornos cardiovasculares (corazón pulmonar) y
renales (albuminuria, hematuria, cilindruria), así como signos de
deficiencia suprarrenal. La prueba radiológica de aortitis es
mucho más común y grave que en el caso de la silicosis.
El aspecto radiológico típico de los pulmones en la liparitosis es
la presencia de engrosamiento lineal debido a atelectasias
lamelares.
Pizarra
Presentación y usos. La pizarra es una roca arcillosa o esquisto-arci-
llosa sedimentaria y muy compacta, que se divide en láminas con
facilidad, de color gris plomo, rojizo o verdosos. Los princi-
pales depósitos se encuentran en Francia (Ardenas), Bélgica,
Reino Unido (Gales, Connwall), Estados Unidos (Pennsylvania,
Maryland) e Italia (Liguria). Junto a una gran cantidad de carbo-
nato cálcico, contiene también silicatos (mica, clorita, hidrosili-
catos), óxidos de hierro y sílice libre, amorfa o cristalina (cuarzo).
El contenido de cuarzo de las pizarras duras es de aproximada-
mente un 15 %, y el de las pizarras blandas inferior al 10 %.
En las canteras de Gales del Norte, el polvo de pizarra respirable
contiene entre el 13 y el 32 % de cuarzo respirable.
Las hojas de pizarra se utilizan para tejados, escaleras,
cubiertas de puertas, ventanas y porches; solado, chimeneas,
mesas de billar, paneles de conmutadores eléctricos y pizarras de
escuelas. La pizarra en polvo se ha utilizado como tapaporos o
pigmentosen pinturas inoxidables o aislantes, en mástiques y en
pinturas y productos bituminosos para superficies de carreteras.
Riesgos para la salud. La enfermedad de los trabajadores de la
pizarra ha sido objeto de atención desde principios del siglo
XIX, habiéndose descrito casos de “tisis del minero” sin inter-
vención del bacilo tuberculoso. Se ha encontrado neumoconiosis
en un tercio de los trabajadores estudiados en la industria de la
pizarra en Gales del Norte, y en un 54 % de los fabricantes de
lápices de pizarra en la India. La neumoconiosis de los trabaja-
dores de la pizarra puede tener características de silicosis debido
al elevado contenido de cuarzo de algunas pizarras. Frecuente-
mente se observan bronquitis y enfisema crónicos, sobre todo en
los trabajadores dedicados a la extracción.
La sustitución del pico manual por el equipo mecánico de
baja velocidad reduce considerablemente la generación de polvo
en las canteras de pizarra, y el uso de sistemas de ventilación por
extracción local permite mantener las concentraciones de polvo
transportado por el aire dentro de límites aceptables para una
exposición de ocho horas. La ventilación de las minas subterrá-
neas, el drenaje del agua del suelo en los pozos, la iluminación y
la organización del trabajo están mejorando las condiciones
generales de higiene y de trabajo.
El aserrado circular debe realizarse bajo chorros de agua,
mientras que el desbastado no suele generar polvo siempre que
los recortes no se dejen caer al suelo. Las láminas grandes se
suelen pulimentar en húmedo; cuando se realiza el pulimentado
en seco debe disponerse de una buena ventilación por extrac-
ción, ya que el polvo de pizarra no es fácil de recoger, ni aun con
aspiradores, al obstruirse con rapidez los filtros de las bolsas.
Los talleres deben limpiarse diariamente para evitar la
acumulación de depósitos de polvo; en algunos casos será prefe-
rible evitar que el polvo depositado en los pasillos sea llevado
por el aire cubriéndolo con serrín, mejor que humedeciéndolo.
Sílice
Presentación y usos. La sílice se presenta en estado natural en
formas cristalinas (cuarzo, cristobalita y tridimita), criptocrista-
linas (por ejemplo, la calcedonia) y amorfas (por ejemplo, el
ópalo), dependiendo la densidad relativa y el punto de fusión de
la forma cristalina.
La sílice cristalina es el mineral más extendido, encontrándose
en la mayoría de las rocas. La forma más corriente de sílice es la
arena de las playas de todo el mundo. La roca sedimentaria
arenisca consta de granos de cuarzo cementados con arcillas.
La sílice es un componente del vidrio común y de la mayor
parte de los ladrillos refractarios. También se utiliza amplia-
mente en la industria de la cerámica. Las rocas que contienen
sílice constituyen un material habitual en construcción.
Sílice libre y combinada. La sílice libre es la que no está combi-
nada con ningún otro elemento ni compuesto. El cuarzo es un
ejemplo de sílice libre. El término sílice combinada procede del
análisis químico de rocas, arcillas y suelos naturales. Los consti-
tuyentes inorgánicos son casi siempre óxidos unidos química-
mente, por lo común incluyen dióxido de silicio. La sílice así
combinada con uno o más óxidos se conoce como sílice combi-
nada. Por ejemplo, la sílice de la mica se presenta en estado
combinado.
En la sílice cristalina, los átomos de silicio y oxígeno están
dispuestos de forma regular y determinada en todo el cristal.
Las caras características del cristal son la expresión externa de la
disposición regular de los átomos. Las formas cristalinas de sílice
libre son cuarzo, cristobalita y tridimita. El cuarzo cristaliza en
el sistema hexagonal, la cristobalita en el cúbico o tetragonal y la
tridimita en el ortorrómbico. El cuarzo es incoloro y transpa-
rente en estado puro; los colores que presenta de forma natural
son debidos a la contaminación.
En la sílice amorfa, las moléculas diferentes guardan entre sí
una relación espacial distinta; como resultado no existe un
patrón regular definido entre moléculas algo separadas. Esta
ausencia de orden prolongado es característica de los materiales
amorfos. La sílice criptocristalina es un tipo intermedio entre la
cristalina y la amorfa, ya que consta de cristales menudos o cris-
talitos dispuestos sin una orientación regular entre sí.
El ópalo es una variedad amorfa de sílice con una cantidad
variable de agua combinada. Una forma comercialmente impor-
tante de sílice amorfa es la tierra de diatomeas o de infusorios (kiesel-
guhr). La calcedonia es una forma criptocristalina de sílice que
rellena las cavidades de las lavas o que se presenta asociada con
el pedernal. También se encuentra durante el recocido de mate-
riales cerámicos cuando, en condiciones de temperatura deter-
minadas, el cuarzo de los silicatos puede cristalizar en cristales
diminutos en el cuerpo del artículo.
Riesgos para la salud. La inhalación de polvo de sílice transpor-
tado por el aire puede provocar silicosis, una enfermedad
pulmonar fibrótica, grave y potencialmente mortal. Las formas
crónica, acelerada y aguda de silicosis reflejan intensidades de
exposición, períodos de latencia e historias naturales diferentes.
La silicosis crónica puede evolucionar a fibrosis masiva progre-
siva, incluso después de que la exposición a polvo que contiene
sílice haya cesado. En el capítulo Sistema respiratorio se exponen
con más detalle los riesgos de la sílice.
Talco
Presentación y usos. El talco es un silicato de magnesio hidratado,
cuya fórmula básica es (Mg Fe+2 )3 Si4 O10 (H2O), con los porcen-
tajes teóricos de peso siguientes: 63 % SiO2, 32 % MgO y 5 %
H2O. Se encuentra en diversas formas y frecuentemente está
contaminado con otros minerales, como sílice y asbestos. Se
produce talco en Australia, Austria, China, Francia y Estados
Unidos.
La textura, estabilidad y propiedades fribrosas o escamosas de
los diversos talcos los hacen útiles para numerosos fines. Los más
puros, esto es, los que se aproximan mucho a la composición
62.6 MINERALES ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO
PRODUCTOS QUIMICOS
teórica, tienen textura y color finos, y por lo tanto son muy utili-
zados en cosméticos y productos de tocador. Otras variedades
que contienen mezclas de distintos silicatos, carbonatos y óxidos,
y tal vez sílice libre, presentan una textura relativamente gruesa
y se utilizan en la fabricación de pinturas, cerámica, neumáticos
y papel.
Riesgos para la salud. La inhalación crónica puede provocar sili-
cosis si contiene sílice, o asbestosis, cáncer de pulmón y mesote-
lioma si están presentes asbesto o minerales similares al asbesto.
Los estudios de trabajadores expuestos a talco sin fibras de
asbestos asociadas revelaron una tendencia a una mayor morta-
lidad a causa de silicosis, silicotuberculosis, enfisema y
neumonía. Los principales síntomas y signos clínicos de la
neumoconiosis por talco son tos crónica productiva, disnea,
ruidos respiratorios disminuidos, expansión limitada del tórax,
estertores difusos y dedos en palillos de tambor. El examen
anatomopatológico del pulmón ha revelado varias formas de
fibrosis pulmonar.
Tierra de diatomeas (diatomita, kieselguhr,
tierra de infusorios)
Presentación y usos. La tierra de diatomeas es un material suave y
compuesto en bloque por restos de plantas acuáticas pequeñas
prehistóricas relacionadas con las algas. Algunos depósitos
contienen hasta un 90 % de sílice amorfa libre. Tienen formas
geométricas intrincadas y están disponibles como bloques de
colores claros, ladrillos, polvos, etc. La tierra de diatomeas
absorbe de 1,5 a 4 veces su peso en agua y tiene una gran capa-
cidad de absorción de aceite. Existen depósitos en Argelia,
Europa, Federación Rusa y oeste de Estados Unidos. La tierra de
diatomeas se puede utilizar en fundición, revestimientos de papel,
cerámica y en el mantenimiento de filtros, abrasivos, lubricantes y
explosivos. Se utiliza como medio filtrante en la industria
química. Se emplea también como espesante en lodos de inyec-
ción,como extendedor en pinturas, caucho y productos de plás-
tico, y como agente antiapelmazante en fertilizantes.
Riesgos para la salud. La tierra de diatomeas penetra con la
respiración. Para muchas aplicaciones industriales se calcina a
800-1.000 °C, produciéndose un polvo gris blanquecino llamado
kieselguhr, que puede contener un 60 % o más de cristobalita.
Durante la extracción y tratamiento de la tierra de diatomeas, el
riesgo de muertes por enfermedad respiratoria y cáncer de
pulmón se ha relacionado con la inhalación de polvo así como
con las exposiciones repetidas a sílice cristalina, como se
describe en el capítulo 10, Aparato respiratorio.
Wollastonita (silicato de calcio)
Presentación y usos. La wollastonita (CaSiO3 ) es un silicato de calcio
natural que se presenta en rocas metamórficas, en distintas
formas, en Nueva York y California en Estados Unidos, así como
en Canadá, Alemania, Rumania, Irlanda, Italia, Japón, Mada-
gascar, México, Noruega y Suecia.
La wollastonita se utiliza en cerámica, revestimientos de
soldadura, geles de sílice, lana mineral y revestimientos de papel.
También se utiliza como extendedor de pinturas, acondicio-
nador de suelos, y como material de relleno en plásticos, caucho,
cementos y maderas laminadas.
Riesgos para la salud. El polvo de wollastonita puede provocar
irritación cutánea, ocular y respiratoria.
Yeso (sulfato cálcico hidratado)
Presentación y usos. Aunque se encuentra en todo el mundo, el yeso
raramente se da en estado puro. Los depósitos de yeso contienen
por lo general cuarzo, piritas, carbonatos o materiales arcillosos y
bituminosos. Aparece en cinco variedades naturales: rocas de
yeso, gipsita (forma terrosa e impura), alabastro (una variedad
translúcida de grano fino y masiva), calcita fibrosa (una forma
sedosa y fibrosa) y selenita (cristales transparentes).
La roca de yeso puede triturarse y molerse para su uso en la
forma dihidratada, calcinándose a 190 a 200 °C (con lo cual se
elimina parte del agua de cristalización) para producir sulfato
cálcico hemidratado o yeso de París, o deshidratarse completa-
mente mediante calcinación a más de 600 °C para producir yeso
anhidro o muerto.
El yeso dihidratado triturado se utiliza en la fabricación de
cemento portland y productos a base de mármol artificial; como
acondicionador del suelo en la agricultura, como pigmento
blanco, carga o aditivo en pinturas, esmaltes, productos farma-
céuticos, papel, etc., y como agente de filtración.
Riesgos para la salud. Los trabajadores del yeso pueden estar
expuestos a altas concentraciones atmosféricas de polvo de yeso,
gases y humos de los hornos. Durante la calcinación del yeso, los
trabajadores están expuestos a elevadas temperaturas medioam-
bientales, y existe también el riesgo de quemaduras. El empleo
de los equipos de triturado, molturación, transporte y embalaje
lleva implícitos los riesgos de accidentes asociados a la maqui-
naria. La neumoconiosis observada en los mineros de yeso se ha
atribuido a la contaminación con sílice.
La formación de polvo en la elaboración del yeso debe
controlarse mediante la mecanización de las operaciones en las
que se genere polvo (triturado, carga, transporte, etc.), la adición
de hasta un 2 % en volumen de agua al yeso antes del triturado,
la utilización de transportadores neumáticos con cubiertas y
trampillas de polvo, el aislamiento las fuentes de polvo y el
empleo de sistemas de ventilación en las aberturas de los hornos
y en los puntos de transferencia para el transporte. En los
talleres donde se encuentren los hornos de calcinación es reco-
mendable cubrir paredes y suelos con materiales lisos para faci-
litar la limpieza. Las tuberías calientes, las paredes de los hornos
y las envolturas de los secadores deben recubrirse para reducir el
riesgo de quemaduras y para limitar la irradiación de calor al
medioambiente laboral.
•PRODUCTOS QUIMICOS PARA LA
AGRICULTURA
PRODUCTOS QUIMICOS PARA LA AGRICULTURA
Gary A. Page
Los productos químicos para la agricultura se agrupan normal-
mente en tres clases: plaguicidas, fertilizantes y productos para la
salud animal. La Environmental Protection Agency (EPA) de
Estados Unidos define los plaguicidas como cualesquiera mate-
riales fabricados o formulados con el fin de destruir alguna plaga.
Los herbicidas, fungicidas, insecticidas y acaricidas son, por tanto,
plaguicidas. Los fertilizantes son nutrientes químicos que estimulan
el crecimiento de las plantas. Contienen principalmente nitró-
geno, fósforo o potasio. El nitrógeno se encuentra frecuentemente
en forma de amoniaco, nitrato amónico, sulfato amónico, fosfato
amónico o soluciones de estos compuestos. Otros productos
químicos que contienen nitrógeno se utilizan para atender necesi-
dades especiales de nutrientes. La fuente normal de fósforo es el
fosfato amónico. La potasa (óxido potásico) es el nutriente de
potasio. Los productos para la salud animal son los que se utilizan
para promover la salud o el crecimiento de los animales. Se
pueden aplicar por vía tópica mediante baño o aplicación de
lociones, por vía oral como comprimido o gel, o en forma de
inyectables.
ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.7 PRODUCTOS QUIMICOS PARA LA AGRICULTURA 62.7
PRODUCTOS QUIMICOS
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
Plaguicidas
La innovación más significativa de la industria de fabricación de
plaguicidas ha sido la introducción de los plaguicidas ecológicos.
La familia de herbicidas de las imidazolinonas ha supuesto un
beneficio para los cultivos de soja y otros cultivos al aire libre, que
son ahora mucho más rentables; son además menos tóxicos para
los seres humanos, animales terrestres y peces, tienen una menor
persistencia en el suelo, y utilizan agua en lugar de disolventes
inflamables, en comparación con la antigua generación de nitroa-
romáticos. Simultáneamente a estas innovaciones se han desarro-
llado semillas resistentes a las imidazolinonas que pueden ser
protegidas frente al crecimiento de las malas hierbas. El cultivo
más beneficiado en este aspecto ha sido el maíz. Por otra parte, el
herbicida persistente de un año a otro es un problema insignifi-
cante, ya que en muchas áreas se rotan la soja y el maíz.
Otra novedad reciente ha sido la producción de piretroides
sintéticos, plaguicidas de amplio espectro. Se trata de
productos eficaces pero menos tóxicos para los animales y los
seres humanos que los antiguos organofosforados y carba-
matos. Son activados por el sistema biológico del insecto y, por
lo tanto, no suponen un peligro para los vertebrados. También
son menos persistentes en el medio ambiente, ya que son
biodegradables.
Se han producido igualmente avances en el uso de plaguicidas
y herbicidas de generaciones antiguas. Se han desarrollado
formulaciones de herbicidas que utilizan una tecnología de
dispersión en agua que elimina el uso de disolventes volátiles.
Con ello no solamente se reduce la cantidad de productos
químicos orgánicos volátiles que escapan a la atmósfera, sino
que se hacen más seguras la manipulación, conservación, formu-
lación y transporte. En el ámbito de los plaguicidas se ha desa-
rrollado un método de manipulación en el que el producto se
transfiere del recipiente cerrado al pulverizador llamado “Lock-
N-Load”. Con ello se reducen las posibilidades de exposición a
estos productos tóxicos. Los organofosforados se utilizan aún
con éxito para erradicar problemas sanitarios como la malaria y
la oncocercosis. Algunos de los organofosforados menos tóxicos
son eficaces en el tratamiento de los mamíferos contra los
insectos, tenias y ácaros, mediante aplicación directa sobre la
piel utilizando formulaciones líquidas o en aerosol.
La industria de los plaguicidas está regulada en muchos
países, controlándose el etiquetado, la aplicación a las plantas y
al suelo, la formación en su uso y el transporte. Muchos plagui-
cidas pueden ser aplicados solamente por personas autorizadas.
Las precauciones a adoptar en esteámbito se consideran en
otros capítulos de la Enciclopedia. Los vehículos para el transporte
de los plaguicidas a granel sólo pueden ser manejados por
conductores cualificados. Los productores de plaguicidas tienen
la obligación de facilitar su manipulación y aplicación seguras a
través de un etiquetado completo, el desarrollo de actividades de
formación y la entrega de Hojas de Datos de Seguridad del
material (véase el capítulo Utilización, almacenamiento y transporte de
productos químicos).
Otro problema es el que plantea la eliminación de los reci-
pientes vacíos. No se recomienda, y en algunos lugares es ilegal,
reutilizar los recipientes de plaguicidas. Se han realizado muchos
avances para mitigar este problema. Así, los recipientes de plás-
tico son recogidos por los distribuidores y reprocesados en tubos
de plástico. Se emplean recipientes a granel rellenables. Con la
llegada de los polvos humectables y de las dispersiones en agua,
el triple aclarado del recipiente en el tanque de la solución
permite al aplicador descontaminar el recipiente antes de su
vertido o reciclado. Se utilizan lancetas manuales con bocas
pulverizadoras que agujerean el recipiente y garantizan una
limpieza adecuada y la destrucción del recipiente, de forma que
no pueda ser reutilizado.
La finalidad de los plaguicidas es causar la muerte; por consi-
guiente, es necesario adoptar precauciones para manipularlos de
forma segura. Algunos de los problemas han sido superados por
los avances en los productos. En la mayoría de los casos, el
lavado con agua abundante es el mejor tratamiento de primeros
auxilios en caso de exposición superficial de piel y ojos. En caso
de ingestión es preferible disponer de un antídoto específico.
Es importante que el centro sanitario más próximo tenga infor-
mación sobre el producto y disponga del antídoto adecuado.
Por ejemplo, los organofosforados y los carbamatos provocan la
inhibición de la colinesterasa. Debería disponerse de atropina, el
antídoto específico para el tratamiento de esta reacción, allí
donde se utilicen estos plaguicidas.
En el artículo epónimo de este capítulo se trata con más
amplitud el tema de los plaguicidas.
Fertilizantes
El amoníaco es la base de los fertilizantes más importantes. Los
principales fertilizantes son el amoníaco, el nitrato amónico, la
urea, el sulfato amónico y el fosfato amónico. Parece existir un
problema medioambiental asociado al uso de nitrógeno, ya que el
agua subterránea de muchas áreas de cultivo está contaminada
con nitratos, lo que provoca problemas sanitarios cuando el agua
se consume como agua de bebida. Hay que convencer a los agri-
cultores para que utilicen menos fertilizantes y roten el maíz con
leguminosas que fijan nitrógeno, como la soja y el ballico.
El nitrato amónico, dotado de actividad oxidante, es explosivo
cuando se calienta. Los riesgos de este compuesto como agente
explosivo se demostraron en la destrucción de un edificio federal
de Oklahoma City, en Estados Unidos, en 1995. Para obtener
nitrato amónico resistente a la detonación suelen añadirse ingre-
dientes inertes. Hubo asimismo otra explosión industrial, con
varias víctimas, en una planta de soluciones de nitrato amónico
considerada segura contra la detonación en la que el nitrato
amónico se manipulaba en solución al 85 %. Los resultados de la
investigación indicaron que el incidente fue provocado por el
efecto combinado de una determinada serie de factores de
temperatura y contaminación, que no se dan normalmente en la
venta al detalle ni en el sector agrícola. El amoníaco anhidro, por
su parte, es un gas moderadamente tóxico a temperatura
ambiente y debe mantenerse a presión o refrigerado durante su
conservación o uso. Es un irritante de la piel, ojos y vías respirato-
rias, puede provocar quemaduras y es inflamable. Se aplica direc-
tamente sobre el suelo o se utiliza como solución acuosa.
En muchas áreas agrícolas se almacena en grandes cantidades.
Si este almacenamiento no se realiza correctamente, por ejemplo
controlando las fugas y aplicando procedimientos de emergencia
cuando se producen éstas, se crean condiciones de peligro.
Productos para la salud animal
El desarrollo y la comercialización de la somatotropina bovina
(BST) han suscitado una gran controversia. La BST, un producto
de fermentación, aumenta la productividad de las vacas lecheras
en un 10 a 20 %. Muchas personas se oponen al empleo de este
producto porque implica la introducción de una sustancia
química en la producción de leche. No obstante, la leche con
BST es indistinguible de la leche ordinaria, ya que la vaca lechera
produce BST de forma natural. Al parecer, este producto favo-
rece las infecciones mamarias en las vacas, y aunque se dispone
de antibióticos para combatirlas el uso de los mismos también es
controvertido. Los principales beneficios de la BST son el
aumento de la producción de leche con una reducción en el
consumo de alimento y una reducción similar en el estiércol,
material que plantea un problema de residuos sólidos en muchas
zonas. Un producto similar, la somatotropina porcina (PST), está
62.8 PRODUCTOS QUIMICOS PARA LA AGRICULTURA ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO
PRODUCTOS QUIMICOS
aún en fase experimental. Los animales crecen más deprisa,
utilizan menos alimento y tienen menos grasa.
El uso de antibióticos en explotaciones de vacuno también es
causa de controversia. Existe el temor de que el consumo de
grandes cantidades de vacuno provoque problemas hormonales
en humanos. Apenas existe confirmación en este sentido, pero la
preocupación persiste. Se han desarrollado productos para la
salud animal que controlan las tenias. Antes se utilizaban con
este fin productos químicos sintéticos, pero los productos de
nueva generación son el resultado de la tecnología de fermenta-
ción biológica. Son eficaces en muchos tipos de animales a
niveles muy bajos, incluso en animales domésticos; no obstante
son muy tóxicos para la vida acuática, por lo que se debe evitar
la contaminación de ríos y corrientes. Estos materiales son
biodegradables, de modo que no parece haber problemas acuá-
ticos residuales o largo plazo.
Fabricación de productos químicos para la
agricultura
La fabricación de los productos químicos para la agricultura
implica el desarrollo de muchos procesos y la utilización de
numerosas materias primas. Algunos productos se obtienen
mediante síntesis químicas que implican reacciones exotérmicas
en las que son importantes el control de la temperatura y los
dispositivos de seguridad de emergencia. Para garantizar que se
han considerado todos los riesgos es preciso realizar evaluaciones
de los mismos, a ser posible en la forma de estudios de riesgos y
de operabilidad (HAZOP). En lo que se refiere a los dispositivos
de emergencia, se debe utilizar la tecnología del Instituto de
Diseño de Sistemas de Seguridad de Emergencia (DIERS) y
datos de los equipos calorimétricos. Normalmente, debido a la
complejidad de las moléculas, la fabricación de productos
químicos para la agricultura implica un elevado número de
etapas. A veces se genera una gran cantidad de residuos líquidos
acuosos y orgánicos. Algunos de estos últimos pueden ser reci-
clados, pero la mayor parte de los residuos acuosos han de ser
tratados biológicamente o incinerados. Ambos métodos son difí-
ciles debido a la presencia de sales orgánicas o inorgánicas. Los
herbicidas de la generación anterior, que implicaban nitraciones,
se producían utilizando reactores continuos para minimizar las
cantidades de los materiales nitrados a las temperaturas de reac-
ción. Pueden producirse reacciones incontroladas graves
causantes de daños materiales y personales cuando los reactores
intermitentes de los compuestos orgánicos nitrados sufren una
desviación de temperatura o una contaminación.
Muchos plaguicidas modernos son polvos secos. Si se
presentan simultáneamente una concentración dada, un tamaño
de partícula determinado, una cierta concentración de oxígeno y
una fuente de ignición, puede producirse unaexplosión de
polvo. El uso de sustancias inertes, la exclusión de oxígeno y la
utilización de nitrógeno o dióxido de carbono minimizan la
fuente de oxígeno y pueden hacer el proceso más seguro. Estos
polvos pueden constituir también un problema de higiene indus-
trial. La ventilación, tanto general como local, es una solución a
tales problemas.
Los principales fertilizantes se fabrican por procesos conti-
nuos, no por lotes. El amoníaco se prepara por conversión de
metano a elevadas temperaturas y utilizando un catalizador
específico. También se forman dióxido de carbono e hidrógeno,
que deben ser separados del amoníaco. El nitrato amónico se
prepara a partir de amoníaco y ácido nítrico en un reactor
continuo. El ácido nítrico se forma mediante la oxidación
continua de amoníaco sobre una superficie catalítica. El fosfato
amónico se obtiene en una reacción entre amoníaco y ácido
fosfórico. El ácido fosfórico se obtiene haciendo reaccionar ácido
sulfúrico con minerales que contienen fosfato. El ácido sulfúrico
se forma quemando azufre a dióxido de azufre, convirtiendo
catalíticamente el dióxido de azufre a trióxido de azufre, y
añadiendo después agua para formar ácido sulfúrico. La urea es
un producto de la reacción continua a alta presión de dióxido de
carbono y amoníaco, y el dióxido de carbono procede normal-
mente de los subproductos de la reacción continua del
amoníaco.
Muchas de estas materias primas son tóxicas y volátiles. La
liberación de las materias primas o productos terminados debido
a un fallo en un equipo o a un error humano puede exponer a
los empleados y a la población general. La existencia de un plan
de respuesta de emergencia detallado es fundamental para mini-
mizar los efectos de estos escapes. Para elaborar este plan debe
determinarse un acontecimiento en el caso peor imaginable
mediante la evaluación de los riesgos y prever después las conse-
cuencias mediante un modelo de dispersión. Hay que incluir en
el plan un método para notificar el suceso a los empleados y a la
población, un plan de evacuación, unos servicios de emergencia
y un plan de recuperación.
El transporte de los productos químicos para la agricultura ha
de ser estudiado detenidamente para elegir la ruta más segura,
esto es, la que minimice la exposición en caso de accidente.
Debe disponerse asimismo de un plan de respuesta de emer-
gencia para hacer frente a los incidentes que se produzcan
durante el transporte, incluyendo en él un número de teléfono
de emergencia, la disponibilidad de personal para atender a las
llamadas y, en algunos casos, un equipo de emergencia que
acuda al lugar del accidente.
Algunos de estos productos se obtienen por fermentación,
proceso que normalmente no es peligroso, ya que implica el
desarrollo de un cultivo mediante el empleo de medios nutritivos
como aceite de manteca, glucosa o almidón. No obstante, en
ocasiones se utiliza amoníaco anhidro para controlar el pH
(acidez) o como nutriente, por lo que el proceso puede implicar
algunos riesgos. Se pueden utilizar disolventes para extraer las
células activas, pero las cantidades y la metodología aplicadas
son tales que se puede actuar con seguridad. El reciclado de
estos disolventes forma a menudo una parte del proceso.
•PLAGUICIDAS*
PLAGUICIDAS
La palabra plaguicida designa en general cualquier sustancia
química (mezclada o no con otras sustancias) utilizada para la
destrucción de un microorganismo perjudicial para el hombre.
Se trata, pues, de un término dotado de un significado muy
amplio, comprensivo de otros térmicos como insecticida, fungicida,
herbicida, rodenticida, bactericida, acaricida, nematocida o molusquicida,
que designan los microorganismos o plagas que un producto
químico determinado o clase de productos tiene por objeto
destruir. Dado que se utilizan distintos tipos de agentes químicos
en estas clases generales, es aconsejable indicar la clase concreta
del plaguicida.
Principios generales
La toxicidad aguda se mide mediante la DL50, valor que repre-
senta una estimación estadística del número de miligramos de
producto químico por kilogramo de peso corporal que se
requiere para causar la muerte del 50 % de una amplia población
de animales estudiados. La dosis se puede administrar por
ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.9 PLAGUICIDAS 62.9
PRODUCTOS QUIMICOS
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
*Adaptado de la 3ª edición de la Enciclopedia de salud y seguridad en el trabajo.
La revisión incluye información de A. Baiinova, J.F. Copplestone, L.A. Dobro-
bolskij, F. Kaloyanova-Simeonova, Y.I. Kundiev y A.M. Shenker.
diversas vías, aunque las más normales son la oral o la dérmica, y
la rata es el animal más utilizado en las pruebas correspondientes.
Se utilizan los valores DL50 según la vía oral o dérmica que
presente el valor más bajo para un producto químico específico.
Deben tenerse en cuenta también otros efectos, los derivados de
exposiciones de corta duración, como la neurotoxicidad o la
mutagenicidad, y los derivados de exposiciones de larga dura-
ción, como la carcinogenicidad, aunque los plaguicidas que
presentan propiedades conocidas de este tipo no están registrado
para su uso. La Clasificación Recomendada de Plaguicidas según el Riesgo
y las Directrices para la Clasificación 1996-1997 de la OMS, publicadas
por la Organización Mundial de la Salud (OMS), desglosan los
productos de clase técnica en función del riesgo agudo para la
salud humana de la forma siguiente:
• Clase IA—extremadamente peligrosos
• Clase IB—altamente peligrosos
• Clase II—moderadamente peligrosos
• Clase III—ligeramente peligrosos
Las directrices basadas en la clasificación de la OMS rela-
cionan los plaguicidas según su toxicidad y estado físico; dicho
listado se presenta en un artículo especial de este capítulo.
Los tóxicos pueden entrar en el cuerpo por la boca (ingestión),
por los pulmones (inhalación), por la piel intacta (absorción
percutánea) o por heridas en la piel (inoculación). El riesgo de
inhalación depende de la forma física y solubilidad del producto
químico. La posibilidad y el grado de absorción cutánea varían
con el producto químico; algunos de éstos ejercen una acción
directa sobre la piel, causando dermatitis. Los plaguicidas se
aplican de distintas formas: como sólidos, rociando en forma
diluida o concentrada, en polvo (fino o granulado), y como
neblinas y gases. El método de empleo condiciona la probabi-
lidad de absorción.
El producto se puede mezclar con sólidos (a menudo con
comida, usada como cebo), agua, queroseno, aceites o disol-
ventes orgánicos. Algunos de estos disolventes tienen cierto
grado de toxicidad propia y pueden influir en el índice de absor-
ción del plaguicida químico. Muchas formulaciones contienen
otras sustancias químicas que no son por sí mismas plaguicidas,
pero que aumentan la eficacia del plaguicida. Es lo que ocurre
con los agentes tensioactivos. Cuando en una misma formula-
ción se mezclan dos o más plaguicidas, la acción de alguno de
ellos puede ser reforzada por la presencia de otros. En muchos
casos no se conocen bien los efectos combinados de la mezcla;
un buena norma es considerar siempre las mezclas más tóxicas
que cualquiera de sus componentes por separado.
Debido a su naturaleza y finalidad, los plaguicidas tienen
efectos biológicos adversos al menos sobre algunas especies,
incluida la especie humana. A continuación se exponen los
mecanismos de acción de los plaguicidas y algunos de sus efectos
tóxicos. La carcinogenicidad, la monitorización biológica y las
medidas de seguridad en el uso de plaguicidas se tratan con más
detalle en otros capítulos de esta Enciclopedia.
Plaguicidas organoclorados
Los plaguicidas organoclorados (POC) han provocado intoxica-
ciones por absorción, por ingestión o por inhalación. Algunos
ejemplos son el endrín, el aldrín y el dialdrín. La tasa de absor-
ción y la toxicidad varían en función de la estructura química y
de los disolventes, tensioactivos y emulsionantesutilizados en la
formulación.
La eliminación de los POC del organismo se produce lenta-
mente a través de los riñones. El metabolismo celular implica
varios mecanismos, como los de oxidación, hidrólisis y otros. Los
POC tienen una fuerte tendencia a penetrar en las membranas
celulares y a acumularse en la grasa corporal. Debido a su atrac-
ción por los tejidos adiposos (propiedades lipotróficas), tienden a
acumularse en el sistema nervioso central (SNC), hígado,
riñones y miocardio. En estos órganos pueden dañar la función
de importantes sistemas enzimáticos y alterar la actividad
bioquímica de las células.
Los POC son muy lipófilos y tienden a acumularse en el tejido
adiposo mientras persiste la exposición. Cuando ésta cesa, se
liberan lentamente al torrente circulatorio, a menudo durante
un período de muchos años, de donde pueden ser transportados
a otros órganos en los que se pueden iniciar efectos genotóxicos,
incluido el cáncer. La mayor parte de los habitantes de Estados
Unidos tienen niveles detectables de plaguicidas organoclorados,
entre ellos productos de degradación del DDT, en su tejido
adiposo (grasa), y las concentraciones aumentan con la edad,
como reflejo de acumulaciones durante toda la vida.
Se han utilizado varios POC en todo el mundo, ya que se ha
probado o sospechado que los insecticidas y los herbicidas son
carcinógenos para los humanos. Esta cuestión se aborda con
más detalle en los capítulos Toxicología (33) y Cáncer (2) de esta
Enciclopedia.
Intoxicaciones agudas
El aldrín, el endrín, el dieldrín y el toxafeno son los compuestos
más frecuentemente implicados en las intoxicaciones agudas.
El retraso en la aparición de los síntomas en los casos graves es de
unos 30 minutos. En POC con menor grado de toxicidad, el
retraso es de varias horas, aunque nunca más de 12.
La intoxicación se manifiesta por síntomas gastrointestinales:
náuseas, vómitos, diarrea y dolores de estómago. Los síntomas
básicos son cerebrales: cefalea, mareos, ataxia y parestesias.
Gradualmente van apareciendo temblores que comienzan por
los párpados y los músculos de la cara, descendiendo hacia el
resto del cuerpo y las extremidades. En casos graves estos
síntomas determinan la aparición de convulsiones tónico-cló-
nicas, con extensión gradual a diversos grupos de músculos. Las
convulsiones pueden estar relacionadas con hipertermia o
inconsciencia, pudiendo llegar a producirse la muerte. Además
de los signos cerebrales, las intoxicaciones agudas pueden
producir parálisis bulbares de los centros respiratorio y/o vaso-
motor, con insuficiencia respiratoria aguda o apnea y colapso
grave.
Muchos pacientes desarrollan signos de hepatitis tóxica y
nefropatía tóxica. Tras la desaparición de estos síntomas,
algunos desarrollan signos de polineuritis tóxica prolongada,
anemia y diátesis hemorrágica debido a una trombocitopoyesis
alterada. Un signo típico de la intoxicación por toxafeno es la
bronconeumonía alérgica.
Las intoxicaciones agudas con POC duran hasta 72 horas.
Cuando las funciones orgánicas están muy alteradas, la enfer-
medad puede durar varias semanas. En caso de lesión hepática y
renal, las complicaciones pueden ser de larga duración.
Intoxicación crónica
Las intoxicaciones asociadas a la producción y a la aplicación de
los POC en agricultura, suelen ser de carácter crónico, esto es,
vinculadas a la exposición a dosis bajas a lo largo del tiempo. Las
intoxicaciones agudas (asociadas a exposiciones a dosis altas en
un breve período de tiempo) son menos frecuentes y normal-
mente se deben a un uso incorrecto o a accidentes, tanto en el
hogar como en la industria. Las intoxicaciones crónicas inducen
lesiones del sistema nervioso central, del aparato digestivo, del
sistema cardiovascular y hematopoyesis. Todos los POC son esti-
mulantes del sistema nervioso central y pueden producir convul-
siones, frecuentemente con características epilépticas. Se han
registrado electroencefalogramas (EEG) anormales, como ritmos
62.10 PLAGUICIDAS ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO
PRODUCTOS QUIMICOS
alfa irregulares y otras anomalías. En algunos casos se han obser-
vado ondas puntiagudas bitemporales de localización variable,
bajo voltaje y actividad theta difusa. En otros casos se han regis-
trado trazados paroxísticos constituidos por ondas puntiagudas
lentas, complejos puntiagudos y picos rítmicos de bajo voltaje.
Se han descrito polineuritis, encefalopolineuritis y otros
efectos sobre el sistema nervioso tras la exposición profesional a
los POC. Asimismo se han observado temblor de las extremi-
dades y alteraciones electromiográficas (EMG). En trabajadores
que manipulan POC como BHC, policloropineno, hexaclorobu-
tadieno y dicloroetano se han observado signos inespecíficos
(p. ej., signos diencefálicos) que a menudo se presentan junto a
otros típicos de la intoxicación crónica. Los signos más
frecuentes de intoxicación son cefalea, vértigo, parestesias en las
extremidades, cambios rápidos en la tensión arterial y otras alte-
raciones circulatorias. Con menos frecuencia, dolores cólicos
bajo los arcos costales derechos y en la región umbilical, y disci-
nesia de las vías biliares. También pueden aparecer alteraciones
del comportamiento, como trastornos sensoriales y del equili-
brio. Estos síntomas son a menudo reversibles una vez que cesa
la exposición.
Los POC causan lesiones hepáticas y renales. Se ha observado
una inducción de las enzimas microsomales y un aumento de la
actividad de ALF y aldolasa. También se alteran la síntesis de
proteínas, la síntesis de lípidos, la destoxificación, la excreción y
la función hepática. En trabajadores expuestos al pentacloro-
fenol se ha informado de una reducción del aclaramiento de
creatinina y de la reabsorción de fósforo. El pentaclorofenol,
junto con los miembros de la familia de los clorofenoles, se
considera también un posible cancerígeno humano [grupo 2 B
según la clasificación de la Agencia Internacional para la Investi-
gación sobre el Cáncer (IARC)]. El toxafeno se considera un
cancerígeno del grupo 2B.
Se han observado alteraciones cardiovasculares en personas
expuestas, generalmente manifestadas como disnea, taquicardia,
opresión y dolor en la región cardíaca, aumento del volumen
cardíaco y tonos cardíacos apagados.
También se han observado alteraciones hemáticas y capilares
tras el contacto con POC, en forma de trombocitopenia,
anemia, pancitopenia, agranulocitosis, hemólisis y alteraciones
capilares. La aplasia medular puede llegar a ser completa. Las
lesiones capilares (púrpura) se desarrollan al cabo de más o
menos tiempo, pero siempre por exposiciones intensas. En
trabajadores sometidos a exposiciones prolongadas se han obser-
vado eosinopenia, neutropenia con linfocitosis y anemia
hipocrómica.
Se han producido casos de irritación cutánea después del
contacto con algunos POC, en particular los terpenos clorados.
A menudo las intoxicaciones crónicas se hacen clínicamente
evidentes por la aparición de cuadros alérgicos.
Plaguicidas organofosforados
Los plaguicidas organofosforados son ésteres químicamente rela-
cionados del ácido fosfórico o algunos de sus derivados.
Comparten la propiedad farmacológica de inhibir la acción de la
enzima colinesterasa.
El paratión es uno de los organofosforados más tóxicos y se
trata aquí con detalle. Aparte de sus efectos farmacológicos,
ningún insecto es inmune a su acción letal. Sus propiedades
físicas y químicas lo hacen útil como insecticida y acaricida para
la agricultura. La descripción de su toxicidad es aplicable a otros
organofosforados, aunque sus efectos puedan ser menos rápidos
y extensos.
La acción tóxica de todos los plaguicidas organofosforados se
ejerce sobre el SNC a través de la inhibición de la enzima
colinesterasa, con la consiguiente estimulación excesiva y
continua de los músculos y glándulas activados por la acetilco-
lina, hasta llegar a un punto incompatible con la vida. El para-
tión es un inhibidor indirecto porque puede convertirse en el
medio ambiente o in vivo antesde inhibir efectivamente la
colinesterasa.
En general, los organofosforados pueden entrar en el orga-
nismo por cualquier vía. Si se ingiere una cantidad pequeña de
paratión al comer o fumar, por ejemplo, existe el riesgo de una
intoxicación grave e incluso mortal. Se puede inhalar asimismo
al manipular, incluso brevemente, polvos o compuestos volátiles.
Se absorbe además fácilmente a través de la piel y de los ojos.
Su capacidad de penetrar en la piel en cantidades mortales sin
producir la irritación hace que su manipulación sea especial-
mente difícil.
Los signos y síntomas de la intoxicación por organofosforados
se pueden explicar sobre la base de la inhibición de la colineste-
rasa. La intoxicación inicial o leve puede ser difícil de distinguir
debido a que otros cuadros, como el agotamiento por calor, la
intoxicación alimentaria, la encefalitis, el asma y las infecciones
respiratorias, comparten algunas de las manifestaciones y
confunden el diagnóstico. Los síntomas pueden presentarse
varias horas después de la última exposición, aunque casi nunca
más tarde de 12 horas. Normalmente aparecen en este orden:
cefalea, cansancio, mareos, náuseas, sudoración, visión borrosa,
opresión torácica, espasmos abdominales, diarrea y vómitos.
En una intoxicación más avanzada se observan después difi-
cultad respiratoria, temblores, convulsiones, colapso, coma,
edema pulmonar e insuficiencia respiratoria. Cuanto más avan-
zada esté la intoxicación, más evidentes serán los signos típicos
de inhibición de la colinesterasa, a saber: miosis, respiración
asmática rápida, debilidad acusada, sudoración excesiva, saliva-
ción excesiva y edema pulmonar.
En una intoxicación muy grave por paratión, en la que la
víctima haya permanecido inconsciente durante algún tiempo,
puede producirse lesión cerebral por anoxia. Tras una intoxica-
ción aguda se han registrado cansancio, síntomas oculares,
anomalías en el electroencefalograma, molestias gastrointesti-
nales, sueños excesivos e intolerancia a la exposición a paratión.
No existen pruebas de que se produzcan lesiones permanentes.
La exposición crónica al paratión puede ser acumulativa, en
el sentido de que exposiciones repetidas muy próximas pueden
reducir la colinesterasa más rápidamente de lo que ésta puede
regenerarse, hasta el punto de que una exposición muy pequeña
precipite la intoxicación aguda. Si cesa la exposición, la recupe-
ración clínica es a menudo rápida y completa en pocos días.
Se debe realizar un análisis de la inhibición de la colinesterasa
en hematíes y plasma cuando se sospeche una intoxicación con
éster fosfato. En una intoxicación grave, la actividad de la coli-
nesterasa de los hematíes está en la mayor parte de los casos
reducida y próxima a cero. La colinesterasa plasmática también
está muy reducida y es un indicador más sensible y rápido de
exposición. No aporta ninguna ventaja la determinación
química de paratión en sangre, debido a que el metabolismo del
plaguicida es demasiado rápido. No obstante, el p-nitrofenol, un
producto final del metabolismo del paratión, se puede deter-
minar en orina. Se pueden realizar pruebas químicas para iden-
tificar el plaguicida en ropa contaminada u otro material con el
que se sospeche que ha entrado en contacto.
Carbamatos y tiocarbamatos
La actividad biológica de los carbamatos se descubrió en 1923,
cuando se describió por primera vez la estructura del alcaloide
eserina (o fisostigmina) contenido en las semillas del haba del
Calabar. En 1929 se sintetizaron análogos de fisostigmina, y
ENCICLOPEDIA DE SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO 62.11 PLAGUICIDAS 62.11
PRODUCTOS QUIMICOS
6
2
.M
IN
ER
A
LE
S
Y
P
R
O
D
U
C
TO
S
Q
U
IM
IC
O
S
PA
R
A
LA
A
G
R
IC
U
LT
U
R
A
pronto se pudo disponer de derivados del ácido ditiocarbámico
tales como tiram y ziram. El estudio de los compuestos carbá-
micos comenzó el mismo año, y ahora se conocen más de 1.000
derivados del ácido carbámico. De ellos, más de 50 se utilizan
como plaguicidas, herbicidas, fungicidas y nematocidas. En 1947
se sintetizaron los primeros productos de esta clase dotados de
propiedades insecticidas. Algunos tiocarbamatos han demostrado
ser eficaces como aceleradores de la vulcanización, y se han utili-
zado derivados del ácido ditiocarbámico en el tratamiento de
tumores malignos, hipoxia, neuropatías, heridas por radiación y
otras enfermedades. También se utilizan como plaguicidas aril
ésteres del ácido alquilcarbámico y alquil ésteres del ácido
arilcarbámico.
Algunos carbamatos pueden producir una sensibilización en
individuos expuestos; asimismo se han observado distintos
efectos fetotóxicos, embriotóxicos y mutagénicos en miembros
de la familia.
Efectos crónicos
Se han descrito efectos específicos derivados de la intoxicación
aguda de cada una de las sustancias incluidas en la lista. Una
revisión de estos efectos realizada a partir de los datos publicados
permite distinguir ciertas características similares en la acción
crónica de diferentes carbamatos. Algunos autores creen que el
principal efecto tóxico de los ésteres del ácido carbámico es la
afectación el sistema endocrino. Una de las peculiaridades de la
intoxicación por los carbamatos es la posible reacción alérgica de
los individuos expuestos. Los efectos tóxicos de los carbamatos
pueden no ser inmediatos, lo que presenta un riesgo potencial
debido a la falta de alarma. Los resultados de experimentos con
animales indican efectos embriotóxicos, teratogénicos, mutagé-
nicos y carcinogénicos de algunos productos.
El baygón (isopropoxifenil-N-metilcarbamato) se obtiene por la
reacción de alquilisocianato con fenoles, y se utiliza como insec-
ticida. Es un tóxico sistémico. Inhibe la actividad de la colineste-
rasa sérica hasta un 60 % después de la administración oral de
0,75 a 1 mg/kg. Esta sustancia altamente tóxica tiene un efecto
muy débil sobre la piel.
El carbaril es un tóxico sistémico que produce efectos agudos
moderadamente graves cuando se ingiere, inhala o absorbe a
través de la piel. Puede provocar irritación cutánea local. Al ser
un inhibidor de la colinesterasa, es mucho más activo en insectos
que en mamíferos. Los reconocimientos médicos de trabajadores
expuestos a concentraciones de 0,2 a 0,3 mg/m3 pocas veces
revelan un descenso en la actividad de la colinesterasa.
El betanal (3-(metoxicarbonil) aminofenil-N-(3-metilfenil)
carbamato; N-metilcarbanilato) pertenece a los ésteres alquí-
micos del ácido arilcarbámico y se utiliza como herbicida. Es
ligeramente tóxico para el aparato respiratorio y gastrointes-
tinal. Su toxicidad dérmica y la irritación local son
insignificantes.
El isoplan es un miembro muy tóxico del grupo; su acción,
como la del sevin y otros, se caracteriza por la inhibición de la
actividad de la acetilcolinesterasa. El isoplan se utiliza como
insecticida. El pirimor (5,6-dimetil-2-dimetilamino-4-pirimidinil
metilcarbamato) es un derivado de ésteres alquílicos del ácido
arilcarbámico. Es muy tóxico para el tracto gastrointestinal. Su
absorción general y el efecto irritante local no son muy
pronunciados.
Esteres del ácido tiocarbámico
La ronita (sym -etilciclohexiletil tiocarbamato; Eurex); el eptam (sym
-etil-N,N-dipropil tiocarbamato) y el tillam (sym -propil-N-etil-N-b-
utiltiocarbamato) son ésteres sintetizados por reacción de alquil-
tiocarbamatos con aminas y de mercaptidas alcalinas con
cloruros de carbamoílo. Son herbicidas efectivos de acción
selectiva.
Los compuestos de este grupo son ligera a moderadamente
tóxicos, y la toxicidad se reduce cuando se absorben a través de
la piel. Pueden afectar el proceso oxidativo, así como los sistemas
nervioso y endocrino.
Los ditiocarbamatos y bisditiocarbamatos comprenden los pro-
ductos siguientes, que tienen mucho en común en lo que
respecta a su uso y sus efectos biológicos. El ziram se utiliza como
acelerador de la vulcanización para cauchos sintéticos y, en agri-
cultura, como fungicida y fumigante de semillas. Es muy irri-
tante de la conjuntiva y las mucosas de las vías respiratorias

Continuar navegando