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ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com “EL JUEGO Y EL JUGUETE” AUTORÍA CARMEN MARIA CONTRERAS NAVARRO TEMÁTICA EL JUGUETE ETAPA EDUCACIÓN INFANTIL Resumen En el desarrollo evolutivo del niño aparecen una serie de etapas en el que el juego estará presente desde los primeros meses, en los primeros meses su juego se centrara en su cuerpo, y mas tarde en los objetos que le rodean, los objetos o juguetes que llamen la atención del niño cambiarán a medida que el niño vaya creciendo e irán contribuyendo a su desarrollo motor, cognitivo, afectivo, sensorial y social. Palabras clave La infancia y el juego Introducción El juego es una actividad indispensable para el desarrollo del niño/a; cuando juega con su cuerpo, cuando mueve un muñeco o arrastra un objeto por el suelo se divierte, al mismo tiempo que aprende a conocer el mundo que le rodea. El juego le ayudará a desarrollar su personalidad a conocerse a sí mismo y a los demás, le servirá de refugio frente a las dificultades que el mundo adulto le plantea y será al mismo tiempo fuente de placer ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com El juego del niño va a influir en su desarrollo mental, afectivo, motor y social. En el desarrollo mental; el niño al jugar, crea, inventa situaciones, explora y busca posibilidades y soluciones, aprende a prestar atención y concentrarse. Desarrollo afectivo y emocional; en el juego van siempre implícitas las emociones y la afectividad. De él se va a servir para manifestar y canalizar las pulsiones agresivas así como para exterioriza tantos sus deseos como sus temores reprimidos. Desarrollo motor; el desarrollo muscular, la coordinación y el equilibrio, las capacidades sensoriales, las habilidades manuales son favorecidas mediante el juego. Desarrollo social: el juego estimula la incorporación al grupo, la relación, la cooperación. Permite al niño aprender a colaborar, a esperar su turno, a compartir. Etapas del Desarrollo del Juego El niño pasar por distintas etapas evolutivas, comunes y necesarias para su desarrollo. En cada una de ellas se va logrando una serie de adquisiciones que permiten su pleno desarrollo y maduración. El juego tiene un papel importante en todo este proceso. De acuerdo con Piaget, consideramos 3 etapas fundamentales: 1- Juego Sensoriomotriz. 2- Juego Simbólico. 3- Juego de reglas. Juego sensoriomotriz o funcional Es el primero que se presenta y abarca hasta el 2º año de vida. En los primeros meses los movimientos espontáneos del niño adquieren un carácter lúdico. Es un juego de simple ejercicio centrado en sí mismo. El niño juega con las distintas partes de su cuerpo, mueve las manitas, las junta, se las mira, entrecruza los deseos se tira de ellos, se los mete en la boca y a continuación empieza a jugar con sus pies, la nariz las orejas, etc. Estos movimientos los repite una y otra vez inintencionadamente. Más tarde empieza a interesarse por el cuerpo de los demás. Pasa la mano por la cara dela madre, le mete el dedo en la boca, en los ojos le tira del pelo. A los 3-4 meses descubre el mundo de los objetos, interesándose por las cosas que le ofrecen, los mira y manipula atentamente, los mueve, se los lleva a la boca, los tira y golpea contra el suelo. En esta etapa se distrae con las anillas, campanitas y otros objetos colgantes y móviles de su cunita, o si está al aire libre, contempla entusiasmado todo lo que tiene movimiento, las ramas de los árboles, los pájaros, la gente que pasa. ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com Unos meses después podrá manejar dos objetos a la vez, para golpearlos uno contra otro, introducir el uno en el otro, colocarlos uno sobre otro, hacerlos aparecer y desaparecer de su vista, descubriendo así múltiples aspectos: color, tamaño, forma, sonido; así como la condición de permanencia y ausencia. La curiosidad y el afán de exploración le estimulará a desplazarse, ya sea a gatas, arrastrándose o raptando para alcanzar y manipular los objetos que le rodean. La marcha ampliará el contacto con el mundo exterior, le dará autonomía y mayor posibilidad de apoderarse de los objetos. Se interesa por el lenguaje. El lenguaje irá siempre unido a la actividad lúdica. En esta etapa puede jugar en grupo, pero tiene su propia actividad y habla para sí mismo. Se dan juegos violentos (no agresivos), corren, saltan, se empujan, se zarandean, todo esto en medio de risas, gritos y gestos muy pronunciados. Juego Simbólico Se da entre los 3 y los 6 años. El niño puede transformar los objetos o las situaciones en lo que él desea. Además por medio del símbolo puede interiorizar el mundo exterior, acomodándolo a sus deseos o necesidades. Al principio imita sus propias acciones habituales, hace como si durmiera, se levara, peinara o comiera. A continuación imita las acciones y gestos de otros. Son los juegos de papeles: juega a ser médico, mamá, bombero, es decir, se empieza a identificar con el mundo adulto y a familiarizarse con toda una serie de cosas y nociones. Poco a poco van apareciendo formas nuevas en el juego simbólico. Puede ya imitar y asimilar escenas reales enteras en lugar de objetos aislados. Aparece la invención de seres imaginarios que sirven para que le escuchen y sean espectadores de sus actos. Mediante la representación simbólica exterioriza y descarga sus ansiedades o temores, desplaza a situaciones de juego sus conflictos, esto le ayudará a librarse de ellos. También se van interiorizando los valores sociales para insertarse en la sociedad. El niño empieza a jugar con otros niños, aunque todavía no se interesa por el juego de los demás sino por el suyo propio. La repetición de determinados juegos le ayuda a familiarizarse con experiencias que le pueden resultar desagradable o conflictivas. Por ejemplo cuando juega a “estar en la escuela, a ir al médico, o a estar en casa de la abuelita” lejos de su madre. Al representar estos papeles mediante el juego, supera y domina el miedo o rechazo que le producen. ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com Juego de Reglas Aparece en la última fase preescolar (5-6 años). El niño comienza a disfrutar de otros. Se interesa por las relaciones interpersonales reproduciéndolas en sus juegos. Hay ya asignación y diferenciación de papeles y unas normas y reglas que acatar, pasando de este modo de una relación consigo mismo a una relación de cooperación e interacción con los demás niños. A partir del juego de reglas, nace y se desarrolla la comunicación social propiamente dicha, renunciando muchas veces a sus propios deseos y sometiéndose a los ajenos. Esto supone, pues, un aprendizaje de las relaciones sociales y de la adaptación del individuo a su medio social. Desde los 6 hasta los 10 años son frecuentes los juegos competitivos, donde unos ganan y otros pierden. Es importante que aprendan a perder y ganar, los dos son factores necesarios para el desarrollo social. Cuando los adultos dirigen estos juegos deben intentar que no ganen y pierdan siempre los mismos pues tan perjudicial es una cosa como otra, y sobre todo, deben fomentar el juego por el juego más que la competición. LOS JUGUETES Son los objetos en los que generalmente se apoya el juego infantil. Estamos llamando juguete a cualquier objeto o material que el niño utilizar en sus juegos. Una bola, un palo, una caja, su dedo o su pie. En general el niño pequeño prefiere juguetes muy sencillos y simples que le permitan fantasear o imaginar.Un círculo hecho con piedras puede ser una casa para habitar, un establo o un garaje, la cáscara de una nuez puede servir de cuna, de canoa o de cuenco, en fin, cualquier objeto le puede servir para realizar infinidad de fantasías de acuerdo a sus necesidades y etapa de desarrollo. Con esto no se pretende quitar la importancia que tiene el juguete, sino hacer notar que el niño no necesita disponer de juguetes absolutamente perfectos, ni se le debe invadir con éstos. Al niño habrá que dejarle espacio y posibilidad para crear y disfrutar con sus propios juegos y ejercitar su imaginación. A medida que va creciendo necesitará juguetes más complicados, pero al niño pequeño le basta con tener algunos objetos, él se ocupará de transformarlos con su imaginación. Funciones del juguete La función del juguete será: - Ayudar al niño a satisfacer su gran necesidad de explorar, crear, inventar, imaginar y fantasear. - Favorecer la proyección en ellos de sus angustias, deseos insatisfechos y temores. - Facilitar el desarrollo de las aptitudes físicas y mentales. - Estimular el interés y el aprendizaje de los distintos roles sociales. ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com - Proporcionar placer y diversión. Condiciones que debe reunir el juguete Cuando los padres compran un juguete para sus hijos deben procurar que sea: - De un material fácilmente lavable. - Sin vértices ni aristas. - Agradable al tacto y a la vista. - Atractivos y fáciles de manipular. - Sin piezas o partes que puedan arrancarse o desprenderse fácilmente. Hay que tener presente que el niño se lleva a la boca sus juguetes para poder así comparar las distintas sensaciones. ¿Qué juguetes elegir? Cada etapa por las que atraviesa el niño requiere de unos juegos y unos juguetes determinados. Por tanto a la hora de comprar alguno será importante tener en cuenta la edad del niño, sus aficiones y gustos particulares. Para ello, conviene observarle mientras juega o, si es un poco mayor, pedir su opinión y participación directa en la compra. Ante la abundancia de juguetes que el mercado ofrece, es preciso tener algunas ideas claras sobre qué conviene comprar. Teniendo en cuenta que estamos inmersos en una etapa tecnológica cien por cien, por lo que lógicamente los juguetes que abundan son los electrónicos. Aún así, la opinión de la mayoría de los especialistas en el tema es que el juguete fabricado tan técnica y perfectamente obstaculiza todos los aspectos del desarrollo, fomentando la pasividad y la apatía. Es más positivo ofrecer materiales y objetos de piezas con los que el niño pueda construir por sí mismo aquello que le satisfaga. Los adultos compran muy a menudo aquello que se anuncia en la TV o que les ofrecen en la tienda, sin preocuparse si gustan o no conviene al niño Otras veces, adquieren aquellos que les gustan a ellos o les hubiera gustado tener de pequeños. Con frecuencia necesitan comprar el juguete más caro para compensar la falta de atención hacia el niño para “figurar” ante los demás, avergonzándose del hijo que le limita a pedir juguetes simples. Hay que tener presenta que tanto la carencia como la superabundancia de juguetes son negativos. Los juegos y juguetes más apropiados para cada período del desarrollo serían: ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com - Hasta los 3 meses: sonajeros, colgantes de colores vivos y móviles para suspender de la cuna, objetos de madera para manipular. - De los 3 a los 6 meses: sonajeros, cascabeles, objetos de goma para morder, y de diferentes texturas y colores para manipular y mirar: pelotas, animalitos, muñecos de trapo o goma. - De 6 a 12 meses: anillas, pelota de trapo, cubos, muñecos. - De 1 a 2 años: juguetes de arrastre para tirar y empujar, que motiven su interés por desplazarse. Bloques para formar, alinear o apilar torres. Juguetes para llenar, vaciar y cargar. - De 2 a 3 años: Objetos que le ayuden a deslizarse y moverse: coches, trenes, carretillas. Construcciones para hacer torres. Tableros para encajar piezas de diversas formas geométricas. Arena agua, palas, cubos. - De 4 a 5 años: Bicicletas, tobogán, patines, columpios, aros, balancines, combas, pelotas, cajas de disfraces; acciones que requieran coordinación visomanual, pintar, recortar, pegar, modelar, ensartar bolas, dibujar. - De 6 a 7 años: juegos de adivinanzas, clasificaciones, seriaciones, rompecabezas, juegos de letras. Títeres, marionetas, juegos dramáticos. Libros de historietas y cuentos. Juegos de fuerza, equilibrio y destreza. Material que estimule la escritura. - De 8 a 10 años: Deportes, juegos de competición: canicas, dianas, arcos, herramientas para bricolaje y modelados. Libros de aventuras. Material de costura. Juegos de construcción: Colecciones (sellos, cromos, piedras). - De 11 a 12 años: Todo tipo de útiles para construir por sí mismo, dibujar, pintar. Etc. Cámaras de fotos, tocadiscos y discos, magnetófonos para grabar. Microscopio. Libros sobre los grandes genios, viajes e historia. En esta edad empieza a ser más reflexivo e introvertido, por tanto necesitará su propio espacio para aislarse y pensar en determinados momentos. Conviene apuntar lo negativo que resulta la elección de juguetes dependiendo del sexo (muñecas y utensilios de cocina para la niña, coches y juegos de construcción para el niño). Es una manera de transmitirles nuestros prejuicios o tópicos sociales. Desde el desarrollo psicológico y emocional, tanta necesidad tiene el niño como la niña de jugar con muñecas y juguetes que representen la vida cotidiana, así como de realizar juegos más violentos donde poder descargar su hostilidad. El sitio para jugar Cuando el jugar es interior hay que procurar que haya espacio suficiente para que el niño pueda moverse con libertad y que esté bien iluminado, soleado y ventilado. ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com Es importante que disponga de un lugar propio, que sepa que tiene un sitio para él y sus juguetes. Por supuesto, necesita además andar por toda la casa en su necesidad de movilidad y de buscar la presencia de los mayores y esto hay que permitírselo. Habrá que acostumbrarle a recoger los juguetes que utilice. Lo mejor es hacerlo con él, en los primeros años. Es difícil que hasta los 4 años lo haga sólo pero conviene irle acostumbrando a adquirir el hábito de ordenar sus cosas. No es aconsejable imponerlo como una tarea u obligación. Lo mejor es hacérselo ver como parte del juego. El juego al aire libre con espacio amplio y abierto es lo más saludable. El niño tiene opción a un sin fin de materias naturales para jugar –agua, tierra, piedras, flores, hojas- y sobre todo espacio para correr, saltar, rodar y reír libremente. Por tanto, es aconsejable que los niños salgan lo más posible a los parques y, siempre que se pueda al campo. En cuanto a pretender que no se manchen mientras juegan, es un poco absurdo. El niño disfruta con el contacto de las cosas (el agua, la tierra, la hierba) ¿cómo reprimir este deseo? No es lógico que por miedo a una regañina no se atreva a jugar para no mancharse, es cuestión de educarlos pero no de inhibir sus deseos de jugar. Conclusiones El deseo de jugar es un excelente señal de salud en el niño. El niño necesita jugar y no permitírselo es obstaculizar sus posibilidades de desarrollo. El adulto debe ofrecer al niño juguetes que favorezcan y estimulen la imaginación, la participación y la manipulación directa, no el que induzca a la pasividad, a apretar un simple botón y observar cómo funciona. Los padres tienen que prestar atención a los juegosde sus hijos, admitirlos, favorecerlos y estimularlos. El niño tiene que elegir y decidir sus propios juegos. El adulto puede sugerirlos pero no imponerlos. Mientras juega se debe vigilar su seguridad y enseñarle a descubrir y reconocer los riesgos que pueda correr. Hay que dar tanta o más importancia al juego que al resto de actividades que realiza. La publicidad dedica mucho tiempo a anunciar juguetes. El niño de corta edad aún no tiene suficientemente desarrollada la capacidad de juicio y criterio propio, como para protegerse de la influencia de la propaganda. Habrá pues, que iniciarle en la posibilidad de seleccionar por sí mismo, entre el cúmulo que se le brinda. ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com Bibliografía - DAVIS, M.1971. Teoría del juego. Edit. Alianza Universidad. Madrid. - MYERS, ROBERT. 1993 Los doce que sobreviven. Copublicación OPS, OMS, UNICEF. 1993 - MOOR, P.1972 El juego en la educación. Edit. Herder. Barcelona. - PIAGET, JEAN. 1985 Psicología y Pedagogía. Edit. Sudamericana - Planeta. Bs. As. - SARAZANAS, R. y BANDET, 1972. El niño y sus juguetes. Edit. Narcea. S. A. Madrid - BARALDI, CLEMENCIA. 1999. Jugar es cosa seria. Homo Sapiens. Rosario. Autoría Nombre y Apellidos: Carmen María Contreras Navarro Centro, localidad, provincia: CEIP “Atenea” Torremolinos (Málaga). E-mail:conac80@hotmail.com ISSN 1988-6047 DEP. LEGAL: GR 2922/2007 Nº 15 – FEBRERO DE 2009 C/ Recogidas Nº 45 - 6ºA 18005 Granada csifrevistad@gmail.com
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