Zapatas_de_lindero

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Zapatas de lindero
Las zapatas de lindero se emplean en edificios confinados en lotes rodeados, donde no se puede utilizar una zapata centrada en la columna ya que se saldría del límite de propiedad.
Conforman la cimentación perimetral, soportando los pilares o muros excéntricamente; la sección del conjunto muro-zapata tiene forma de L para no invadir la propiedad vecina.
Las zapatas de lindero deben estar unidas entre sí para un mayor equilibro y soporte, y así evitar fallas estructurales.
Una forma de unir las zapatas de lindero es por medio de trabes, ya sea que estén conectadas a una columna situada en el centro del terreno, o bien, conectando las zapatas de lado a lado o extremo a extremo.
Otra forma es unir las zapatas por medio de una losa rectangular, que consiste en emplear una sola zapata rectangular para dos columnas. Puede resolverse sin emplear trabes, descansando las columnas directamente sobre la losa de cimentación.
También se pueden emplear trabes transversales bajo las columnas, que sirven para llevar las reacciones de la losa de cimentación a las columnas y trabajan como doble ménsula empotradas a la columna.
Una tercera manera de unir las zapatas consiste en emplear una trabe longitudinal, como se muestra en la imagen, trabe que divide a la losa en dos ménsulas o cantiliver. La trabe trabaja como una viga empotrada y en voladizo.
La losa de cimentación también se puede hacer en forma trapecial sin trabes, con trabes transversales o con trabes longitudinales.
En los suelos resistentes, es común hacer de carga los muros exteriores, y en las construcciones pequeñas todos los muros exteriores de hacen, generalmente, de carga.
También existen las zapatas de lindero sin ligas a columnas adyacentes, es decir, no están conectadas entre sí de ninguna manera.