Logo Studenta

EXPO PARTE 1 2

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

Visita de Maldonado de Buendia 
Después de cinco años de gobierno el Rey de España creyó conveniente relevar al Gobernador 
don Lope García de Castro. Nunca como en aquella oportunidad el monarca puso tanto celo para 
escoger a los que lo representarían en los Virreinatos de México y el Perú. El 30 de noviembre 
de 1568 se extendían a don Francisco de Toledo y Figueroa "” . .. los despachos de Virrey del 
Perú, cuando contaba unos 52 años. Sin mujer y sin hijos, habiendo llevado hasta entonces una 
vida casi austera, podía, como él mismo lo dice en una de sus cartas, dedicar toda su atención a 
los negocios que se le confiaran...” (590). Mucho antes de partir recibió instrucciones de una 
Junta Magna, integrada por la gente más interesada y conocedora de los problemas de las Indias 
y, después que salió del puerto de San Lucar rumbo a América, demostró que no venía a disfrutar 
de las sensualidades del poder sino a desplegar una intensa labor administrativa. No hubo ciudad 
tocada en su travesía donde no dejara sentir su presencia fiscalizando, dictando ordenanzas o 
construyendo edificios y otras obras materiales. Más aún, de Paita, donde desembarcó, en 
adelante, tanto “. ., para visitar la tierra como para ahorrarse las molestias de la navegación . ..” 
(591), avanzó por los caminos reales de los incas, observando con detenimiento todo lo que más 
tarde manifestaría como preocupación, como “' ...el caso concreto de haber encontrado en el 
trecho que separa Paita de Lima no menos de 17 pueblos sin doctrinero, de donde provenía que 
muchos indios hubiesen vuelto a la infidelidad ....” (592). Entró triunfalmente en Lima el 30 de 
noviembre de 1569, exactamente cuando se cumplía un año de su nombramiento. 
Antes de cumplir su primer año de gobierno, Toledo quiso poner en práctica el más importante 
de sus proyectos: la Visita General al Virreinato de su mando, cumpliendo con una de las 
principales instrucciones de la Junta Magna. No era simplemente un recorrido por el país 
observando y registrando, como el que realizó Francisco de Mendoza, por encargo de su padre, 
el segundo Virrey don Antonio de Mendoza, sino, mucho más, Era una institución jurídica, un 
proceso administrativo de fiscalización y control, que el monarca encargaba a un funcionario de 
su mayor confianza, el mismo que tenfa facultades para aplicar de inmediato acciones 
correctivas. 
Aunque la primera Visita General del Perú correspondió al gobierno de La Gasca en 1549, existen 
antecedentes de similar propósito durante los gobiernos de Francisco Pizarro y Vaca de Castro. 
Posteriormente se dieron otras '*... entre las cuales cabe destacar las de Damián de la Bandera 
en 1557 y Cristóbal de Castro y Ortega Morejón en 1558” (593). 
Hacia octubre de 1570 salió de Lima acompañado de un imponente séquito, El recorrería, 
personalmente, las principales ciudades de la sierra del centro, el sur y el Altiplano, disponiendo, 
a la vez, que personalidades de su mayor confianza llegaran a las localidades que él no iba a 
visitar. Fue así como Toledo subió por Huarochirí a Jauja; siguió por Huamanga y Cuzco; avanzó 
por el Altiplano tocando La Paz, La Plata y Potosí; y, después de cinco años de peregrinaje, 
regresó por Arequipa hacia 1575, entrando en Lima el 20 de noviembre. 
Entre las personalidades encargadas de realizar la visita en las jurisdicciones que no tocaría 
Toledo estaba el “... Capitán Juan Maldonado de Buendía, (que) más tarde (sería) alcalde de Lima 
,..” (594), Este “.., visitó la provincia de Collesuyo (Moquegua) y en carta dirigida al Rey de España 
desde la ciudad de La Plata el 25 de marzo de 1575 le manifestaba que esa provincia se extendía 
desde el río de Arequipa (o Tambo) hasta el de Loa con una longitud de 120 leguas y 20 a 30 de 
latitud. Esta provincia, que ocupa el mismo territorio que el cronista Gonzalo Fernández de 
Oviedo reconocía como “Provincia de Tácana”, incluía a Moquegua y sus cabeceras, llo, los 
pueblos de la cuenca superior del río Tambo, la cuenca de los ríos Locumba y Sama con sus 
cabeceras, Tacna y la corta cuenca del Caplina, Lluta, Arica y su interior y los valles de Tarapaca 
"*. (Málaga . .. Visita... pág. 69). 
Se puede afirmar que hacia 1573 tuvo lugar la visita de Tácana y que fue precisamente el capitán 
don Juan Maldonado de Buendía el fundador de la reducción o pueblo de indios de Tácana, base 
demótica y urbanística de la actual ciudad de San Pedro de Tacna. 
 
 
EL PUEBLO DE SAN PEDRO DE TACANA 
Procedente de Arequipa llego al valle de Tacana don Juan Maldonado de Buendia, para aplicar 
las ordenanzas toledanas de reducir de naturales en pueblos de indios. En Tacana el modesto 
poblado vivía alrededor de la vivienda del cacique, el resto de la población vivía dispersa en los 
ocho aillus circundantes: Collana, Capanique, Umo, Ayca, Olanique, Silpay, Tonchaca y Aymara. 
El plano de las reducciones era una reproducción en pequeño la concepción europea y el sitio 
para establecerla debería ser de buen temple con abundancia de tierras para cultivo, aguas, 
pastos, montes sobre todo respetando ancestrales concepciones de los pueblos prohilepenicos 
(no destruir campos de cultivo) Por eso eligieron una pequeña pampa con restos aluviónicos que 
en épocas pretéritas habían formado los desbordes del Caplina y el Caramolle, Próximo al 
Caplina, para facilitar la regular provisión de agua, pero, a prudente distancia de su cauce para 
protegerse de las sorpresivas y destructoras ““entradas”. Era importante que el poblado 
albergara a los 660 indios tributarios del repartidor de Tacana. 
La calle Zela era el único jirón longitudinal, orientada de suroeste a noreste, para aprovechar mas 
horas de sol durante todo el año, así como protegerse de los vientos. 
Es posible que en los primeros años se levantaran ranchos rodeados de huertas, divididos por 
paredes medianeras. Las calles traveseras las frenteras nos se alinearon armónicamente por la 
desigual ubicación del edificio de la vivienda dentro de la huerta, que en el siglo XVIII seles 
conocía como “plazoletas”. 
A pesar de su origen modesto la reducción de tacana tenía reservados días de prosperidad

Continuar navegando