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Introdução de Variedades de Clavel

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1
UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉS 
FACULTAD DE AGRONOMÍAFACULTAD DE AGRONOMÍAFACULTAD DE AGRONOMÍAFACULTAD DE AGRONOMÍA 
CARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICACARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICACARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICACARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICA 
TESIS DE GRADO 
 
INTRODUCCION DE CUATRO VARIEDADES DE CLAVEL 
(Dianthus caryophyllus) BAJO EL SISTEMA DE 
SEMISOMBRA EN LA PROVINCIA CARANAVI DEL 
DEPARTAMENTO DE LA PAZ. 
 
Presentado por: 
 
MILENKA SONIA ORTIZ HERRERA 
 
La Paz – Bolivia 
2005 
2
UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉSFACULTAD DE 
AGRONOMÍACARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICA 
INTRODUCCION DE CUATRO VARIEDADES DE CLAVEL 
(Dianthus caryophyllus) BAJO EL SISTEMA DE 
SEMISOMBRA EN LA PROVINCIA CARANAVI DEL 
DEPARTAMENTO DE LA PAZ. 
 
Tesis de grado para obtener el título de: 
 
INGENIERO AGRONOMO 
 
Presentado por: 
 
MILENKA SONIA ORTIZ HERRERA 
 
ASESORES: 
 
Ing. René Calatayud Valdéz _________________ 
 
COMITÉ REVISOR: 
 
Ing. Frida Maldonado de Kalam __________________ 
 
Ing. Teresa Ruiz Diaz _________________ 
Dr. Abul Kalam Kurban _______________ 
 
Vo.Bo _______________________________ 
Ing. M. Sc. Jorge Pascuali Cabrera 
DECANO 
 - 2005 - 
3
DEDICADO A :DEDICADO A :DEDICADO A :DEDICADO A : 
Dios creador de la vida 
A mi esposo Rafael, a mis padres 
A Mario y Alcira, a mi hermana Ginelda 
Y a mi pequeño Salvador.
4
AGRADECIMIENTOSAGRADECIMIENTOSAGRADECIMIENTOSAGRADECIMIENTOS 
A la Facultad de Agronomía de la Universidad Mayor de San Andrés, a las Autoridades, 
Docentes, Compañeros y Amigos que me ayudaron en mi formación profesional. 
Al Ing. René Calatayud por su valiosa colaboración y guía prestada en la realización de este 
trabajo. 
A la granja “Primavera” por haberme acogido y apoyado en la ejecución de mi trabajo. 
Al Ing. Rafael Collazos mi esposo por su infatigable cooperación prestada durante el curso de 
la investigación y por toda su comprensión. 
Al Sr. Mario Ortiz y Sra. Alcira Herrera, mis padres al Ing. Carlos Collazos por su 
incalculable apoyo, sin el cual no hubiera sido posible la elaboración de esta tesis. 
A mis hermanas Elizabeth, Abigail y Ginelda por toda la ayuda moral recibida. 
A mis amigos Ramón, Wilfredo y Gregory por toda la colaboración prestada. 
 
5
INDICE GENERAL 
 
Página 
 CONTENIDO……………………………………………………i 
 INDICE DECUADROS………………………………………...vii 
 INDICE DE FIGURAS………………………………………….viii 
 RESUMEN…………………………….....................................ix 
 
1. INTRODUCCIÓN……………………………………………… 11 
2. OBJETIVOS……………………………………………………. 13 
2.1. Objetivo General…………………………………………….. 13 
2.2. Objetivos Específicos……………………………………… 13 
3. HIPOTESIS……………………………………………………… 14 
4. REVISION DE LITERATURA………………………………… 14 
4.1. Características Generales del Clavel……………………… 14 
4.1.1. Origen…………………………………………………………. 14 
4.1.2. Clasificación Taxonómica………………………………….. 15 
4..1.3. Antecedentes Botánicos……………………………………. 16 
4.1.4. Propagación Vegetativa……………………………………… 16 
4.1.5.Variedades…………………………………………………….. 17 
4.2. Factores de Adaptación del Cultivo del Clavel……………. 19 
4.2.1. Factores Climáticos..………………………………………… 19 
4.2.1.1.Luz…………………………………………………………….. 19 
4.2.1.2.Temperatura…………………………………………………. 20 
4.2.1.3.Humedad Relativa………………………………………….. 21 
4.2.2. Factores Edáficos…………………………………………… 21 
4.2.2.1.Suelo…………………………………………………………. 21 
4.2.2.2. pH…………………………………………………………….. 22 
4.3. Labores Culturales…………………………………………….. 23 
4.3.1.Preparación del Suelo……………………………………….. 23 
4.3.2. Colocación de Mallas Tutoras………………………………. 24 
4.3.3. Plantación…………………………………………………….... 24 
4.3.4. Espaciamiento de las Plantas………………………………. 25 
4.3.4. Fertilización…………………………………………………… 26 
4.3.5. Riego…………………………………………………………… 27 
4.3.6. Despuntado o Pinzamiento y Tipos de Pinzamiento…. 28 
4.3.7. Desbotonado o Desyemado……………………………….. 29 
4.3.8. Cosecha de Flores…………………………………………… 30 
4.3.9. Preparación de Flor Cortada y su Clasificación……….. 31 
4.4. Problemas Sanitarios y su Control………………………. 35 
4.4.1. Plagas………………………………………………………… 35 
4.4.2. Enfermedades……………………………………………….. 36 
4.4.3. Otras Alteraciones Fitosanitarias………………………… 38 
4.5. Influencia del Sombreado…………………………………. 39 
 
5. MATERIALES Y MÉTODOS……………………………… 
 
40 
5.1. Localización del Ensayo…………………………………… 40 
5.1.1. Ubicación Geográfica………………………………………. 41 
5.1.2. Descripción Agro ecológica……………………………….. 41 
5.2. Materiales…………………………………………………….. 43 
5.2.1. Material Vegetal……………………………………………… 43 
5.2.2. Material de Campo………………………………………… 43 
5.2.3. Insumos………………………………………………………. 44 
5.3. Método………………………………………………………… 44 
6
5.3.1. Diseño Experimental ………………………………………. 44 
5.3.2. Modelo Lineal Aditivo………………………………………. 44 
5.3.3. Establecimiento de la Semisombra………………………. 45 
5.3.4. Registro de Temperatura y Humedad Relativa………… 45 
5.3.5. Preparación del Terreno……………………………………. 46 
5.3.6. Formación de las Banquetas………………………………. 46 
5.3.7. Armado del Tutorado……………………………………….. 47 
5.3.8. Plantación…………………………………………………….. 47 
5.3.9. Operaciones Posteriores a la Plantación……………….. 47 
5.3.9.1 Pinzamiento o Despuntado………………………………. 48 
5.3.9.2. Riego……………………………………………………….. 48 
5.3.9.3. Fertilización……………………………………………….. 48 
5.3.9.4. Deshierbe…………………………………………………… 49 
5.3.9.5. Registro y Control de Enfermedades y Plagas………. 49 
5.3.9.6. Desbotonado y desyemado………………………………. 49 
5.3.9.7. Recolección de Flores……………………………………. 50 
5.3.9.8. Clasificación y Empaque de las Flores……………….. 50 
5.4 Variables de Respuesta………………………………….. 50 
5.4.1. Porcentaje de Prendimiento……………………………. 51 
5.4.2. Días al Inicio de la floración……………………………. 51 
5.4.3. Altura de la Planta………………………………………… 51 
5.4.4 Longitud del Tallo Floral……………………………….. 51 
5.4.5. Diámetro de la Flor………………………………………… 52 
5.4.6. Número de Flores por Planta………………………….. 52 
5.4.7 Rendimiento………………………………………………. 52 
5.4.8. Análisis Parcial del Beneficio Costo…………………. 52 
6. RESULTADOS Y DISCUCIONES……………………… 52 
6.1. Evaluación Fonológica del Cultivo…………………… 53 
6.1.1 Porcentaje de Prendimiento…………………………… 53 
6.1.2. Días al Inicio de la Floración…………………………… 56 
6.1.3 Altura de la Planta Al Primer Corte…………………… 59 
6.2. Características Agronómicas………………………….. 61 
6.2.1. Diámetro de la Flor……………………………………… 61 
6.2.2. Longitud del Tallo Floral………………………………... 65 
6.2.3. Diámetro del Tallo Floral………………………………... 67 
6.2.4. Número de Flores por Planta…………………………. 70 
6.2.5 Rendimiento de Flores por metro cuadrado………. 72 
6.2.6. Resumen de los Efectos de la Semisombra sobre los 
Resultados…………………………………………… 
 
74 
6.2.7. Cálculo Parcial del Beneficio Costo…………………. 76 
 
7. CONCLUSIONES………………………………………... 78 
8. RECOMENDACIONES……………………………………. 80 
9. BIBLIOGRAFIA…………………………………………….. 81 
 
7
INDICE DE CUADROS
CUADRO 1 Clasificación del clavel común por la Sociedad de 
Floristas Norteamericanos 
32 
CUADRO 2 
 
Temperatura de las flores del tulipán Apeldoorn 
en un invernadero en día soleado de invierno 
 
30 
CUADRO 3 
 
Promedios de Porcentajes de Prendimiento en un 
promedio de N° de Días al Prendimiento. 53 
CUADRO 4 
 
Análisis de Varianza para el Porcentaje de 
Prendimiento. 54 
CUADRO 5 
 
Análisis de Varianza, para el Promedio de Días al 
Inicio de la Floración
56 
CUADRO 6 
 
Analisis de Varianza para Altura de la Planta al 
Primer Corte 59 
CUADRO 7 
 
Análisis de Varianza, para el Diámetro de la Flor
61 
CUADRO 8 
 
Análisis de Varianza, para la Longitud del Tallo 
Floral 
 
65 
CUADRO 9 Análisis de Varianza, para el Diámetro del Tallo 
Floral 
 
67 
CUADRO 10 Análisis de Varianza, para el Número de Flores 
Comerciales por Planta 
 
70 
CUADRO 11 Análisis de Varianza para el rendimiento de Flores Por 
Metro Cuadrado.
72 
CUADRO12 Análisis Económico en cuanto a la relación 
Beneficio 
 
76 
8
INDICE DE FIGURAS 
 
FIGURA 1. Localización del Estudio y Mapa 40
FIGURA 2. Descripción de los Bastidores de Tutorado. 
 
47
FIGURA 3. Porcentaje de Prendimiento. 
 
55
FIGURA 4. Días al Inicio de la Floración. 
 
58
FIGURA 5. Altura de la Planta al Primer Corte 
 
60
FIGURA 6. Diámetro de Flor__ 63
FIGURA 7. Longitud del Tallo Floral 
 
67
FIGURA 8. Diámetro del Tallo Flora 
 
69
FIGURA 9. Número de Flores Comerciales por Planta 
 
71
FIGURA 10. 
 
Rendimiento de Flores en un Metro Cuadrado 
 
73
9
RESUMEN 
 
El trabajo de tesis consistió en la evaluación agronómica de cuatro variedades de clavel 
(Vittorio color rojo, Vissa color rosado, Presto color amarillo con matiz rojo y Malibù color 
blanco), bajo el sistema de semisombra en la provincia Caranavi del departamento de La 
Paz, para lograr este objetivo se requirió la evaluación de de las principales diferencias de 
comportamiento fisiológico, precisar cual de las cuatro variedades tuvo mejor adaptación a 
la zona y finalmente se realizó un análisis económico parcial de la relación beneficio costo 
de la producción del cultivo. 
 
Para la obtención de respuestas de estos puntos se empleó el diseño experimental de 
bloques completamente al azar, establecidos en una superficie de 32,5 m2 bajo 
condiciones de suelo y semisombra iguales. 
En este ambiente se procedió a la medición diaria de temperaturas y humedad relativa por 
espacio de un año, realizadas estas mediciones a la misma hora diariamente. 
Se tomó también el cuidado de preparar las banquetas, el armado del tutorado para la 
posterior plantación. 
 
Las operaciones posteriores a la plantación fueron el pinzamiento o despuntado, 
simultáneamente al riego y fertilización foliar. Por otra parte los cuidados en el control de 
enfermedades y plagas y deshierbes, por último la operación de desbotonado, recolección 
de flores, y su posterior clasificación. 
La duración del estudio tuvo una duración de diez meses, en donde el cultivo precisó 
 De un promedio de 165 días para alcanzar su periodo vegetativo y un promedio de 90 días 
para alcanzar la etapa de producción. 
 
Las variables de respuesta evaluadas para responder a los objetivos principales fueron: 
porcentaje de prendimiento, días al inicio de la floración, altura de la planta al primer corte. 
Para determinar las características agronómicas se evaluaron el diámetro de la flor, la 
longitud del tallo floral, el diámetro del tallo floral, el número de flores comerciales por planta 
y finalmente el rendimiento de flores por metro cuadrado. 
 
10
Después de observar los resultados se pudo evidenciar que existieron diferencias entre las 
variedades que fueron empleadas en el estudio para las condiciones de semisombra 
establecidas para el trabajo. Llegándose a las siguientes conclusiones: 
 
Existen diferencias entre variedades debido a que cada una posee diferente capacidad 
genética de poder adaptarse a las condiciones ambientales del lugar de estudio y sobre 
todo a las condiciones de semisombra. 
 
Tomando en cuenta las características fenológicas se pudo evidenciar que la variedad 
Vittorio color rojo registró el mayor porcentaje de prendimiento. 
 
La variedad Visa fue la que empleó la menor cantidad de días para su primera floración. 
Con respecto a las características agronómicas podemos concluir que la variedad Vittorio 
color rojo alcanzó el mayor diámetro de flor 7,25 cm. Así mismo el mayor diámetro de tallo 
5,55, cm. Como también registró la mayor altura de tallo floral alcanzando un promedio de 
61,66 cm. 
 
La variedad Visa color rosado logró alcanzar el mayor número de flores comerciales por 
planta presentando 7 botones. 
 
Igualmente la variedad Visa fue la que logró obtener el mayor rendimiento de flores por 
metro cuadrado llegando a 213 flores como promedio, seguida por la variedad Vittorio color 
rojo con 210 flores, presentando similar rendimiento. 
 
En el análisis parcial beneficio costo se observa que la variedad que alcanzó mayor precio 
fue Vittorio por su mejor calidad, luego estuvo la variedad Presto y Visa que tiene 
preferencia por el color, finalmente está ubicada la variedad Malibù color blanco por 
presentar menor preferencia. 
 
11
1. INTRODUCCIÓN. 
 
A principios del siglo XIX la mayor parte de las flores se propagaban únicamente en 
los huertos, esto daba como resultado flores pequeñas y de mala calidad. (Salinger 
J. 1991). 
 
A medida que aumentó la demanda, tras los años de la Segunda Guerra 
Mundial, en la década de los cuarenta, los invernaderos empezaron a producir flores 
todo el año dando así inicio a la floricultura comercial, adquiriendo en los últimos 
años un puesto relevante tanto como forma de utilización de la tierra, como también 
en actividad exportadora. (Salinger J. 1991). 
 
En cada una de las flores existen colores que tiene una significación especial, 
y los países en el mundo según su cultura fueron cultivando las especies que más 
se vinculan con sus costumbres y creencias sociales o religiosas, demandando para 
algunas ocasiones y/o celebraciones especiales algunas flores que no se producían 
en la región; justificándose así el comercio internacional, en el ámbito mundial 
acrecentando su demanda cada año y exigiendo a los proveedores como a los 
comercializadores mejoren la oferta en calidad y variedad del producto. (Larson R. 
1988). 
 
En América Latina, esta actividad comenzó hace unos veinte años, como 
actividad destinada a satisfacer las necesidades principalmente del mercado local 
posteriormente países pioneros en esta actividad como Colombia, México y Costa 
Rica ampliaron sus horizontes con el fin de exportar sus productos a mercados 
bastante atractivos y con precios mucho más competitivos. (C-PROBOL, 1999). 
 
La floricultura en Bolivia se inició a partir de 1980 de manera tradicional, en 
inicio solo con el fin de llevar al mercado interno, principalmente a los centros 
urbanos de Cochabamba, Sucre y Santa Cruz; actualmente la producción florícola 
de nuestro país ha crecido bastante ya sea en extensión como también en volumen 
de flores, motivado principalmente por la creciente demanda externa y por las 
12
características agroclimáticas idóneas de nuestro territorio. (Diagnóstico De La 
Floricultura Nacional 1999). 
 
Bolivia posee zonas ecológicas con perspectiva de producir flores, similares a las de 
Colombia, como es la zona de los Yungas que presenta condiciones climáticas 
adecuadas para el desarrollo de este cultivo y como este, goza de ciertas ventajas 
que no tienen grandes productores de Europa o Estados Unidos como ser mano de 
obra barata, prescindir de calefacción en los invernaderos durante el invierno y la 
no-refrigeración en verano, haciendo de esta manera posible la competencia en los 
mercados exteriores; convirtiéndose además en alternativa importante de producción 
para la zona. 
 
De acuerdo a su importancia las flores que más se están produciendo son 
rosas, claveles y crisantemos; por los requerimientos del mercado en colores y 
variedades existe mayor interés por los claveles que ocupan una extensión de 
294600 m2, ocupando la mayor extensión de terreno lo que representa un 44% del 
total del suelo destinado a la producción florícola con una cantidad de 1491000 
plantas (Diagnóstico De La Floricultura Nacional, 1999). 
 
El clavel es una de las flores de corte más importante del mundo ya que se 
cosecha durante todo el año y es una flor básica para floristas, por la floración 
perpetua además de estar disponibles en amplia gama de colores con rasgos y 
vetas de otros matices. 
 
Por la importancia que representa este cultivo debido a la demanda en el 
mercado interno como externo, hace que exista la necesidad de contar con estudios 
que proporcionen las mejores condiciones ambientales favorables para el cultivo, 
como es el establecimiento de la semisombra,que adecua estas condiciones 
existentes, para favorecer el desarrollo de estas flores; ya que uno de los 
principales impedimentos para un crecimiento de la floricultura en estas zonas es 
el reducido conocimiento en cuanto al manejo integral de un plantel o en lo que se 
13
refiere a la adaptabilidad y sistema de producción que resulte económicamente 
favorable. 
 
Por lo anteriormente mencionado y con la finalidad de buscar mayor 
información agronómica a cerca del cultivo del clavel en lugares ya citados, se 
plantea el presente estudio. 
 
2. OBJETIVOS.
2.1. Objetivo General. 
 
• Evaluar agronómicamente el comportamiento de cuatro variedades de clavel bajo 
el sistema de semisombra en la provincia Caranavi del departamento de La Paz. 
2.2. Objetivos Específicos. 
 
• Evaluar principales diferencias de comportamiento fisiológico de cuatro 
variedades de clavel, bajo el sistema de semisombra. 
• Precisar la variedad de mejor adaptación a la zona de Caranavi bajo el sistema 
de semisombra. 
 
• Realizar un análisis económico parcial, de relación beneficio costo de la 
producción del cultivo de clavel, bajo semisombra. 
14
3. HIPOTESIS. 
 
Ho : Las cuatro variedades de clavel presentan similar adaptación a la zona de 
Caranavi, bajo el sistema de semisombra. 
 
Ho : Las cuatro variedades de clavel tienen el mismo comportamiento fisiológico en 
la zona de Caranavi, bajo el sistema de semisombra. 
 
Ho : Las cuatro variedades de clavel tienen el mismo comportamiento agronómico 
en la zona de Caranavi, bajo el sistema de semisombra. 
 
4. REVISION DE LITERATURA. 
 
4.1. Características Generales del Clavel. 
 
4.1.1. Origen. 
 
Larson (1988), señala que el cultivo del clavel se remonta a la antigüedad, se 
tiene noticias de que los griegos, 300 años a. C., utilizaban la flor para aromatizar 
vinos; el clavel ha sido cultivado por el hombre desde hace unos 2000 años. Por el 
año 300 a. C. Teofrasto escribió del “Dianthus”, lo que traducido del griego significa 
“Flor Divina”, por su deliciosa fragancia. El nombre de la especie, caryophyllus, 
alguna vez se utilizó como nombre genérico para el clavo, la fragancia básica del 
clavel. 
 
El clavel es originario del área del mediterráneo. Las especies nativas 
florecían solamente en primavera como reacción a fotoperiodos y temperaturas en 
aumento. 
 
Así también Vidalie(1992), indica que el origen del clavel se remonta a 1845 
en Lyon, seguidos por hibridaciones y mutaciones obtenidas a partir de 1942 en 
EEUU por W. Sim y que llevan su nombre. A partir de 1950- 1960 tuvieron un 
15
desarrollo espectacular en el mundo entero, cuando la producción comenzó a 
realizarse en invernaderos y bajo túneles. 
 
Por su parte Guerrero(1987), menciona que el cultivo del clavel se remonta a 
la Antigüedad. Se tiene noticias de que los griegos, 300 años a. C., utilizaban la flor 
para aromatizar vinos, claro que el clavel que se cultiva actualmente tiene un 
parecido muy remoto con los primeros claveles cultivados, que se asemejaban más 
al clavel silvestre. 
 
Al respecto López (1989), manifiesta que el clavel es una planta de origen 
mediterráneo, que antiguamente solía crecer silvestre. 
 
En el siglo XVI adquiere gran prestigio como flor de jardín. Por mejoras y 
cruces entre los claveles franceses, italianos y españoles se obtienen en el siglo XIX 
el llamado clavel de Niza, que es la base de las actuales variedades conocidas 
como italianas. 
 
4.1.2. Clasificación Taxonómica 
 
Wilson (1980), indica que la familia Caryophyllaceae comprende unas 1400 
especies, en su mayor parte herbáceas anuales o perennes, muy abundantes en las 
regiones templadas septentrionales. Tiene importancia por el gran número de malas 
hierbas y plantas de ornato que contiene. Los claveles y las especies de Gypsophila 
son probablemente las más conocidas, pero hay muchas otras que se cultivan en los 
jardines de flores y en los jardines sobre rocas. 
 
Font Quer (1982), clasifica al clavel de la siguiente manera: 
 
División : Angiospermae 
 Clase : Dicotiledóneas 
Sub clase : Arquiclamídeas 
16
Orden : Centroespermales 
Familia : Cariophylláceae 
 Género : Dianthus 
Especie : D. cariophyllus 
 
4.1.3. Antecedentes Botánicos. 
 
Wilson (1980), indica que el clavel es una planta herbácea que posee una raíz 
principal, los tallos generalmente están hinchados a nivel de los nudos y las hojas 
son opuestas sin estípulas. Las flores tienen cuatro sépalos (verticilos florales 
externos) los que en el clavel parecen pétalos son en realidad sépalos muy 
modificados y lo que parecen sépalos son brácteas (hojas modificadas que brotan 
del eje floral), tienen entre uno y tres verticilos de estambres; los estilos del pistilo 
están separados en lugar de estar unidos. El ovario compuesto es superior. Los 
óvulos están unidos a una columna central que sale de la base del ovario. 
 
Así también Bornás (1953), manifiesta que la especie Dianthus caryophyllus.
(clavel de los floristas) constituye el punto de arranque para todas las razas y 
variedades de clavel que se cultivan para flor cortada, y por tanto, comercialmente 
la más interesante. 
 
Si atendemos a sus esenciales características botánicas, la Dianthus caryophyllus se 
considera como planta vivaz, aún cuando en determinados climas no lo sea, tiene 
vegetación glauca (verde claro) y presenta flores solitarias o en panículas, con cinco 
pétalos de uña larga y limbo que pueden ser dentados o no. 
 
4.1.4. Propagación Vegetativa. 
 
Salinger (1991), señala que los claveles se propagan a partir de esquejes obtenidos 
de un stock de plantas madre no de lechos en floración, el stock de plantas madres 
del cultivo clavel se establece en un área fresca bien iluminada y que se “para” 
regularmente para asegurar un suministro de esquejes. 
17
Por su parte Larson (1988), manifiesta que las empresas dedicadas a la floricultura 
por razones económicas y por la experiencia que poseen, prefieren adquirir 
esquejes de buena calidad, libres de enfermedades que serán utilizadas para el 
establecimiento de plantas madres 
 
El propagador comercial sigue un complicado sistema de renovación continua de un 
“núcleo certificado” de plantas para cada cultivar; obteniendo así plantas madres 
uniformes y sanas para la producción en masa de esquejes. 
 
4.1.5. Variedades. 
 
Vidalie (1992), sostiene que hasta 1975 sólo se cultivaban dos tipos de clavel: 
 
• Clavel de Niza. Flor gruesa con cáliz hendido; cultivado en abrigos simples y 
al aire libre en los Alpes Marítimos. 
• Clavel Americano: flor mediana, con el cáliz más largo y poco cerrado; se 
cultiva en invernaderos túneles. 
 
Desde hace algunos años han aparecido nuevas formas de plantas: 
 
• Claveles miniaturas: multiflores (y a veces uniflores); representan el 20-30% 
del holandés. 
• Claveles mediterráneos: híbrido entre Clavel de Niza y Clavel americano; con 
cáliz no cerrado y menos exigente en temperatura que los americanos. 
• Actualmente el esfuerzo de seleccionadores se orienta a la creación de 
cultivares resistentes (o tolerantes) a una enfermedad grave como es la 
fusariosis vascular, provocada por Fusarium oxysporum sp dianthi. Ellos 
proponen clones cuya morfología y cualidades sean comparables a las de los 
Claveles americanos; los cultivares son clasificados en 4 grupos de 
“resistencia” a la fusariosis definidos por Garibaldi (Italia): 
18
• Clavel de Niza (superficie cultivada en disminución): “Legión d’ Honneur”. “BB” 
(rosa), “Candide” (blanco). 
• Clavel americano o Sim o Estándar (uniflores): “Ember”, “Scania 3 C”(rojo), 
“Le Rêve”, “Nora” (rosa), “Florence”, “Majestic”(blanco), “Tangerine”, “Harvest 
Moon” (naranja), “Arthur Sim” (estriado). 
• Clavel mediterráneo o Claveles híbridos Uniflores: los más resistentes a la 
fusariosis son: “Tanga”, “Hit”, “Amapola”(rojo); “Pink Chinera”, “Pink Candy”, 
“Sacha”, “Happy Candy” (bicolor);“White Ronja” (blanco). 
• Estos claveles son cada vez más cultivados y nuevos cultivares muy 
resistentes aparecen regularmente. 
Al respecto López (1989), sostiene que al escoger alguna de las variedades se 
deberá tomar en cuenta que un esqueje adecuado debe gozar de las siguientes 
características: 
 
• pesar más de 10 gramos. 
• longitud inferior a los 15 cm. 
• tener entre cuatro y cinco pares de hojas. 
 
Así mismo Salinger (1991), indica que la variedad que se seleccione deberá cumplir 
con los siguientes rasgos, característicos de un clavel de calidad: 
 
1. El tallo fuerte y derecho con hojas limpias y anchas. 
2. El pedicelo recto, manteniendo firmemente erguida la flor. 
3. El cáliz entero no rasgado. Los pétalos espaciados uniformemente y el centro 
lleno, pero no atestado, no deberían ser manifiestos ni estambres ni estilos. 
4. El color de pétalo es neto y los pétalos no están con bandas por ataques de 
áfidos y thrips. 
5. Finalmente, debe tener una buena vida en jarrón. 
 
19
4.2. Factores de Adaptación del Cultivo del Clavel. 
 
4.2.1. Factores Climáticos. 
 
4.2.1.1. Luz. 
 
Larson (1988), sostiene que la luz es un factor ambiental que influencia en mayor 
medida el índice de crecimiento y floración de los claveles durante el año. Los 
fotoperiodos y la intensidad luminosa a diferentes latitudes tiene mucho que ver con 
el cambio económico de la producción de clavel hacia los climas “naturales” en el 
mundo. 
 
Salinger (1991), sostiene que el crecimiento vegetativo inicial del clavel está 
relacionado por entero con la intensidad de la luz, con un nivel elevado de 
crecimiento a una alta intensidad de luz. Por ello, el tiempo empleado en producir 
yemas florales depende tanto de la intensidad de la luz como de la longitud del día; 
se producen más flores en días largos con altos niveles de luz. 
 
Por su parte Guerrero (1987), señala que la intensidad lumínica es uno de los 
factores dominantes tanto sobre el crecimiento de las plantas como sobre la 
inducción de la floración. Por ello durante invierno se constata una reducción en la 
producción y calidad de las flores. Sobre la floración además de la intensidad 
lumínica, también influye el número de horas luz en los periodos de días largos o 
con luz artificial continúa, se ha observado que las flores se forman cuando las 
plantas se encuentra en un estado de desarrollo primario. 
 
El número óptimo de horas luz para el buen desarrollo de esta técnica es de 
dieciséis horas. 
 
20
4.2.1.2. Temperatura. 
 
Larson (1998), cita que la temperatura es el segundo factor en importancia para los 
claveles y es asociado directamente con la energía luminosa varios estudios han 
documentado los efectos de los fotoperiodos estacionales y la temperatura en el 
índice de crecimiento y en la producción floral de los claveles. 
 
Uno de los problemas debido a este factor es la división del cáliz que ocurre en 
muchos cultivares de clavel donde las temperaturas son demasiado frías durante el 
crecimiento del botón floral. 
 
También sobre este punto Guerrero (1987), sostiene que los claveles 
mediterráneos son capaces de resistir ciertas variaciones de la temperatura 
ambiental si estas no son extremas. 
 
Para vegetar necesita al menos de 5 a 6 °C de calor, por debajo de los cuales 
detiene su crecimiento. A 0 °C las flores, yemas y brotes mueren, y lo mismo sucede 
a la planta si la temperatura persiste durante mucho tiempo por debajo de bajo cero. 
La temperatura óptima para el cultivo al aire libre es de 15 a 22 °C. 
 
La rotura del cáliz también se producen si existen variaciones de temperatura; 
las oscilaciones de temperatura pueden asimismo, provocar enfermedades en los 
tallos y en las hojas ya que el descenso rápido de la temperatura del aire dentro del 
invernadero produce la condensación del agua sobre las plantas. 
 
Albertos, J. (1981), refiere que la temperatura es un factor limitante tanto por 
exceso como por defecto. 
 
La temperatura máxima que resiste es de 38 a 40°C aunque le son ya perjudiciales 
entre 40 a 45°C lleva esto a resultados y debajo de los 0°C existe rotura de tallos, 
los saltos bruscos de temperatura favorecen a la rotura de los cálices. 
21
Al respecto Vidalie (1992), manifiesta que aunque el clavel soporta hasta los -4°C sin 
helarse, la formación de yemas florales se para prácticamente por debajo de 8°C y 
por encima de 25°C; las temperaturas óptimas son: en invierno la temperatura diurna 
será de 15 a 18°C y nocturna 10 a 12 °C, en el verano la temperatura diurna será de 
21°C y nocturna de 12°C. 
 
4.2.1.3. Humedad Relativa. 
 
Guerrero (1987), indica que la humedad relativa debe mantenerse por encima 
del 70 y el 80 %, sobre todo en las estaciones en que las temperaturas suben. 
 
Así también Vidalie (1992), menciona que la higrometría media apta para el 
desarrollo del clavel es de 70 %. 
 
Por su parte Miranda J.(1975), señala que la humedad relativa óptima se encuentra 
entre 65 y 70 %. 
 
4.2.2. Factores Edáficos.
4.2.2.1. Suelo. 
 
Larson (1988), sostiene que un suelo franco-arenoso es más adecuado para 
el cultivo de claveles. Los suelos con barro y limo son más difíciles de manejar y 
pueden mejorarse con la incorporación de materia orgánica para optimizar la 
aireación. El drenado de la parte superior del suelo es importante, idealmente a una 
profundidad de 30 cm. Si el drenado no es adecuado, se deben instalar las tejas de 
drenado en el centro de cada cama de cultivo o se debe construir camas de tipo caja 
por encima del suelo. 
 
Al respecto de este punto López (1989), señala que el clavel prefiere un suelo 
arenoso. Es una planta que tolera muy mal la compactación, por eso en la 
22
preparación del suelo se debe buscar fundamentalmente la porosidad y la 
aireación. 
 
Guerrero (1887) menciona que el clavel requiere suelos con buena estructura, 
porosos y aireados, que permitan un buen desarrollo del sistema radicular y una 
correcta distribución del agua de riego, y que mantengan la temperatura sin 
demasiadas oscilaciones. 
 
El clavel necesita suelos ricos en materia orgánica bien descompuesta, que le 
proporcione una estructura estable. 
 
Así mismo Salinger (1991), señala que el clavel crece bien en una gama de suelos 
minerales desde margas arcillosas a arenas limosas; ni las arcillas ni las arenas son 
deseables debido a sus capacidades de retención de agua y aireación. Es esencial 
un buen drenaje e inicialmente el suelo debe tener un nivel satisfactorio de materia 
orgánica, al menos del 4 por ciento. Una forma de larga duración tal como la turba, 
restos de lana o suelo procedente de pastos, todos asegurarán una buena 
estructura. 
 
4.2.2.2. pH. 
 
López (1989), indica que el pH para el adecuado desarrollo del clavel está 
entre 6,5 y 7,0.Coincidiendo con lo señalado Vidalie (1992), manifiesta que el clavel 
se cultiva en suelos que tengan un pH de 6,8 a 7,2. 
 
Por su parte Guerrero (1987), sostiene que el clavel puede cultivarse en casi 
todo tipo de terreno, incluso si éste es ligeramente ácido, si bien es preferible un pH 
neutro o ligeramente alcalino. Puede estar comprendido entre 6,5 y 7,5; los suelos 
demasiado ácidos (pH inferior a 6,5) favorecen el desarrollo de ciertos hongos 
parásitos. 
 
23
4.3. Labores culturales. 
 
Las labores culturales que se realizan en el clavel son las siguientes: 
 
4.3.1. Preparación del Suelo. 
Larson (1988), manifiesta que un suelo franco arenoso es más adecuado para 
el cultivo de claveles. Los suelos con barro y limo son más difíciles de manejar y 
pueden mejorarse con la incorporación de materia orgánica para optimizar la 
aireación. El drenado de la parte superior del suelo es importante, idealmente a una 
profundidad de 30 cm. Si el drenado no es el adecuado, se deben instalar las tejas 
del drenado en el centro de cada cama de cultivo o se debe construir camas de tipo 
caja por encima del suelo. La buena aireación del suelo es más importantepara 
maximizar el crecimiento del clavel y también para proporcionar un ambiente menos 
propicio a las enfermedades. 
 
De acuerdo con este punto López (1989), manifiesta que la idea principal en la 
preparación de un suelo es dotarlo de buenas propiedades físicas, en especial la 
aireación. El clavel es una planta que tolera muy mal la compactación; por eso se 
insiste en que la preparación del suelo debe buscarse fundamentalmente la 
porosidad y la aireación. Terrenos compactos y siempre húmedos implican 
enfermedades de raíz y cuello. 
 
Una buena mezcla para un suelo medio se obtiene colocando sobre él una capa de 
turba de 10 cm. de espesor y otra de arena gruesa de la misma medida y efectuando 
un desfonde hasta 40 cm de profundidad, se prefiere el empleo de turba al del 
estiércol por varios motivos. Primero la turba (sobre todo si es rubia) se descompone 
lentamente debido a su pH ácido y a su elevada relación C/N. Cuanto más tarde en 
mineralizarse, más durarán sus efectos. 
 
24
4.3.2. Colocación de Mallas Tutoras. 
 
López (1989), indica que el clavel, como planta herbácea que es, necesita 
soportes para mantenerse erguida. Lo primero que se necesita son unos buenos 
soportes en el principio y final de cada jardinera. Deben ser muy robustos, con 
refuerzos. Cada 5-10 metros se colocan soportes intermedios de construcción más 
sencilla. El clavel necesita entre cinco y siete mallas y es mejor colocarlas juntas 
antes de plantar e irlas subiendo conforme la plantación lo requiera. 
 
También Bornás (1953), señala que el cultivo del clavel exige la colocación de 
un sistema de tutores y red de hilos, porque sino las plantas, al encorvarse, se 
enmarañan, con gran depreciación de sus capullos y grandes pérdidas, no solo en la 
cantidad de flores producidas, sino en su calidad, como consecuencia del 
enrollamiento de los pedúnculos y de la falta de insolación en los botones florales. 
 
El sistema consiste en colocar con simetría una serie de cañas en las que va 
enrollándose, mediante una vuelta, el hilo trazando una red a distintas alturas, según 
se desarrollen las plantaciones, lo que hay que prevenir a su debido tiempo. 
 
Así mismo Salinger (1991), manifiesta que las plantas se sostienen mediante 
una red cuando crecen. En origen está se hacía mediante alambre galvanizado en 
la parte baja de los lechos y que corrían a lo largo de ellos y anudando cuerdas 
cruzadas hasta hacer una malla cuadrada o romboidea; es una operación que exige 
mucha mano de obra, pero aún se utiliza en muchas propiedades. Un método más 
satisfactorio es sostener las plantas con redes de plástico con una malla de 75 a 
100 mm. 
 
4.3.3. Plantación. 
 
Larson (1988), La profundidad a la cual se plantaban los esquejes enraizados 
de clavel puede ser un factor crítico para el éxito o fracaso de la plantación. Los 
25
claveles son muy sensibles a plantarse demasiado profundos. El plantado profundo 
también incrementa el potencial de la putrefacción del tallo causada por el hongo 
Rhizoctonia solani.
Por otra parte López (1989), asevera que el esqueje de clavel apenas se 
entierra y más bien parece apoyarse en los alambres de cuadrícula la malla que 
marca el sitio exacto de colocación y facilita enormemente la plantación, puesto que 
las raíces todavía no están bien desarrolladas es imprescindible regar bien el clavel 
dos o tres veces al día durante la primera semana. 
 
Acerca de ese punto Salinger (1991), afirma que después de colocar al menos dos 
capas de la red de soporte, los esquejes se plantan superficialmente en el medio 
húmedo del área de cultivo. Se humedecen utilizando un aspersor de finas gotitas y 
luego se sombrean durante unos tres días. Las plantas se humedecen dos o tres 
veces al día en tiempo soleado lo que favorece su rápido arraigo. 
 
4.3.4. Espaciamiento de las Plantas. 
 
Larson (1988), afirma que los claveles pueden ser plantados en varios patrones 
de espaciamiento. Numerosos estudios sobre las densidades de las plantas han 
comparado la producción floral total y la calidad de la flor con espaciamientos que 
varían de 25 a 180 plantas/m2. Las plantaciones de altas densidades de 60 a 80 
plantas/m2 han sido utilizadas ocasionalmente para una sola cosecha o cosechas 
iniciales de alto rendimiento, pero estas densidades rara vez producen más flores 
en un periodo de 2 años que una plantación menos densa por lo tanto es 
espaciamiento lógico es de 35 a 45 plantas/ m2 para un cultivo de 2 años. Este es el 
mejor balance de los costos de plantas, la calidad y producción de las flores. 
Al respecto Salinger (1991), también señala que el espaciamiento denso, 
intensifica el primer flujo de producción, pero reduce la producción total durante el 
26
primer año; como corolario, un espaciamiento mayor extiende la producción y 
también contribuye a mantener la calidad de la flor. 
 
Del mismo modo, López (1989), sostiene que las densidades normales para 
cultivos de dos años varían entre 33 y 44 plantas por metro cuadrado. Hay todavía 
densidades superiores (10 x 10 cm) pero solo se usan para cultivos de un año 
porque en dos años no producen más que las densidades anteriores. 
 
4.3.4. Fertilización. 
 
Lopez (1989), señala que con la fertilización de mantenimiento se hace en base 
a los análisis de suelo y hojas con esto, lo que se pretende es mantener la planta o 
el suelo, de forma que sus Análisis den los niveles considerados como óptimos. Para 
evitar al máximo todas las complicaciones, se le sugiere que cada vez que riegue 
disuelva en el agua una pequeña cantidad de fertilizante. En verano 400 mg/l de 
nitrato de potasa y 410 mg/l de nitrato amónico de 33%, es una dosis media que 
casi siempre es suficiente. En invierno hay que aumentar el nitrato potásico hasta 
650 a 700 mg/l y bajar el nitrato amónico a 170 mg/l. Estas cantidades se refieren a 
mg por cada litro de agua de riego. 
 
Así también Guerrero (1987), manifiesta que el suelo generalmente contiene 
todos los elementos minerales necesarios para la planta, pero no siempre en 
cantidades suficientes, por lo que se deben añadirse a medida que se agoten. 
Los elementos minerales mayores (N, P, K) son los primeros en acabarse; en 
cambio, los contenidos de los demás elementos en el suelo suelen ser suficientes 
para que el cultivo pueda completar su ciclo satisfactoriamente. 
 
Según (C-PROBOL, 1999) de Cochabamba, el abonado de fondo siempre 
dependerá de las características del suelo y de su composición, por lo que se 
aconseja hacer un análisis de suelo previo a la plantación, y adaptar el abonado a 
27
las necesidades del suelo. En el caso de no hacerlo este puede ser un abonado 
orientativo: 
 
Estiércol de vaca bien descompuesto...........................20 a 25 kg/m2
Superfosfato de Cal......................................................200 gr./m2
Sulfato de Potasio.........................................................150 gr./m2
Sulfato de Magnesio.......................................................50 gr./m2
Fertifol.............................................................................2 gr./m2
4.3.5. Riego. 
Larson (1988), señala que al principio, los esquejes enraizados se marchitan 
fácilmente. La mayoría de los cultivadores aplican riego por aspersión a los mismos 
por algunos minutos varias veces al día si el clima es cálido y soleado. Las raíces se 
alargan rápidamente del medio enraizante y después de cinco días las plantas 
requieren menos humedad ambiental. Se pueden comenzar el riego rodado normal 
dos semanas después de la plantación, aunque el riego por aspersión también 
puede ser utilizado hasta que aparezcan los botones florales. Para entonces se 
deberá utilizar el sistema de riego por agua rodada durante la vida entera de las 
plantas, para evitar mojar a las flores y el follaje. 
 
La frecuencia de riego varía una vez cada dos semanas en los meses de invierno a 
cada dos a tres días en el periodo del verano. 
 
Según boletinesde C- PROBOL y ASOBOFLOR (1999), indican que el 
sistema de riego recomendable es el de goteo. El uso de riego por aspersión no está 
aconsejado por el incremento de enfermedades fúngicas. 
 
Además menciona que en las primeras fases del cultivo (un mes) es necesario 
disponer de un sistema de riego por microaspersión que facilite el arraigo del 
esqueje y que evite la deshidratación. 
28
Así mismo Salinger (1991) indica que es necesario mantener el medio de 
cultivo para los claveles cerca de su capacidad de campo de modo que se requiere 
un riego regular. Las necesidades de agua están en relación directa a la radiación 
solar recibida por el cultivo. La aplicación del agua necesita estar controlada por un 
tensiómetro de suelo colocado en un lecho tipo, así como verificación usual del 
cultivo; un grupo de plantas que tienden a color gris supone sequía mientras que un 
área húmeda permanentemente sugiere la falta de un tubo de drenaje. 
 
Al respecto Lopez (1989), menciona que el clavel es de las plantas que más 
agua necesita y por lo mismo el riego tiene que estar muy bien diseñado. Asimismo 
señala que si no se quiere instalar ningún sistema de riego lo mejor es regar con 
una manguera. Se cavan pequeñas trincheras en sentido transversal a la jardinera y 
se llenan de agua; este sistema es común en Colombia y es bueno porque el agua 
no moja el cuello de la planta. 
 
4.3.6. Despuntado o Pinzamiento y Tipos De Pinzamiento. 
 
Larson (1988), sostiene que el despuntado es una práctica común en el cultivo 
de claveles. Cuando las plantas se han ambientado de 4 a 6 semanas y los brotes 
laterales de los pares de hojas inferiores tienen como 5 cm de largo, la punta del 
tallo se rompe con la mano, generalmente justo encima del sexto nudo contando 
desde la parte inferior de la planta el despuntado no se debe apresurar. 
 
Además menciona que hay esencialmente cuatro sistemas de despuntado, 
cada uno con una influencia en el tiempo de la futura floración y en la producción y la 
calidad de las flores producidas. 
 
1. Despuntado simple. 
2. Despuntado y medio. 
3. Eliminación doble 
4. Un solo despuntado más despuntes de extracción. 
29
De acuerdo a este punto Lopez (1989), manifiesta que a los 25 días de la 
plantación, la joven planta estará recuperada del todo y los entrenudos habrán 
comenzado a alargarse. Entonces deben pinzarse ya que de lo contrario la 
producción sería muy baja y la flor muy corta. Con el pinzamiento se consigue que la 
planta se ramifique y que las primeras flores sean más largas. Cuanto más alto se 
efectúa el pinzado más flores se obtendrán, pero la calidad puede no ser muy buena 
al ser demasiadas para la planta. Por el contrario si se pinza muy cerca del suelo, 
saldrán pocas flores aunque serán de buena calidad. Un buen compromiso entre 
estos extremos es pinzar dejando de cuatro a seis pares de hojas por planta. Esta 
forma de actuación se conoce como “single pinch” y hace que toda la producción 
venga de golpe, luego le sigue un vacío y posteriormente otra vez vuelve a haber un 
pico de producción, hasta que finalmente, la cosecha se estabiliza. 
 
C- PROBOL y ASOBOFLOR (1999), señala que el objetivo del pinzado es 
cortar la dominancia apical del clavel y estimular la brotación de tallos en la 
planta.Haciendo un solo pínzado un mes después de la plantación, obtendremos 
una cosecha de flores concentrada (“flush” o pico). Una vez pasado este pico, la 
producción decae notablemente. Un tiempo después se tiene el segundo pico, 
menos acentuado. El tercer pico es ya apreciable, dándose mas bien una producción 
continua. 
 
4.3.7. Desbotonado o Desyemado. 
 
Lopez (1989), afirma que el desbotonado consiste en quitar los brotes 
laterales del tallo principal. Se debe quitar los primeros siete brotes y es importante 
hacerlo bien. Se deben arrancar de lado, deslizándolos entre el tallo y la hoja. Es 
importantísimo ser muy estricto en esta norma y educar al personal para que 
desbotone justo hasta el séptimo nudo. Si se hace así, cuando se corta la flor, el 
brote de este nudo está muy desarrollado y el retorno de la floración es mucho más 
rápido. A final del año, la producción será mucho mayor. 
 
30
Hay un momento oportuno para desbotonar. Si se hace muy pronto es posible que 
aparezcan de nuevo antes de recolectar la flor. Si se retrasa, puede que la flor 
principal pierda algo de tamaño. 
 
Posteriormente Salinger (1991), manifiesta que el desyemado, si es necesario, 
de flores normales es llevado a cabo debajo del séptimo nudo; aunque la yema 
natural más cercana a la yema apical se quita bastante antes de que la flor se haya 
abierto. 
 
También Vidalie (1992), indica que el desyemado permiten conservar solo la 
flor terminal, en caso de los claveles miniaturas se quita el primer botón cuando 
mide 3-4 mm de diámetro y se deja que la floración se efectué normalmente. Del 
mismo modo señala que la reducción de tiempo en relación con clavel unifloro es 
muy importante en cuestión de mano de obra (del orden del 20%). 
 
4.3. 8. Cosecha de Flores 
 
Vidalie (1992), menciona que la recolección de los claveles se lleva a cabo 
por lo general en el estado en el que el botón floral presenta los pétalos exteriores 
abiertos. Se corta aproximadamente a 1 cm por encima de un nudo del tallo floral 
con 5 a 7 pares de hojas (longitud superior a 50 cm). 
 
La primera cosecha tiene a lugar tres meses y medio a cuatro meses después de la 
plantación. 
 
Según López (1989), la flor de clavel está muy adaptada a los malos tratos 
posteriores al corte y en este sentido es mucho más resistente que una rosa; de 
todas formas no hay que abusar de esta cualidad. En el almacén se procede a su 
clasificación con arreglo a su longitud, calidad de la flor y al empaquetado. 
 
31
Con referencia a este tema Larson (1988), señala que las flores de clavel 
normal han sido cosechadas tradicionalmente cuando los pétalos exteriores se han 
desdoblado casi perpendicularmente al tallo. En años recientes la tendencia ha sido 
cosechar flores en una condición más apretada. 
 
4.3.9. Preparación de Flor Cortada y Su Clasificación. 
 
Larson (1988), indica que las actividades después de la cosecha representan 
un 30 % del costo total antes de la comercialización. Una buena selección y 
presentación puede aumentar la calidad de las flores y merecer un sobreprecio con 
relación a las flores de igual calidad pero mal clasificadas. A través de los años se 
han propuesto varias categorías o calidades uniformes basados en la medida física, 
aunque estos criterios tienen alguna relación con la calidad, no se ha desarrollado 
ningún método para remplazar el juicio humano. Los factores que requieren de las 
decisiones humanas en la separación por calidades son la ausencia de 
enfermedades e insectos y otras mancha son las flores o el follaje, adormecimiento 
en las flores, el torcimiento en los tallos, flores planas y abultadas, cálices divididos y 
colores tenues. Las categorías más recientes desarrolladas para el clavel común por 
la Sociedad de Floristas Norteamericanos se muestran en el siguiente cuadro. 
 
32
CUADRO 1. Clasificación del clavel común por la Sociedad de Floristas 
Norteamericanos 
 
En cuanto a la estandarización del cultivo Sánches F. (1996), sostiene que es 
aplicada a claveles frescos cortados de una flor, de variedad (cultivar) de Dianthus 
caryophyllus y sus híbridos, utilizadas en bouquet y con propósito decorativo. 
 
Los requerimientos mínimos son: 
 
o Entero (que no presente signo de daño que afecten su apariencia y 
presentación) 
o Fresco 
 1 2 3 
Factores Azul (larga) Roja ( normal) Verde (corta) 
Diámetro mínimo de 
la flor (mm) 
Apretado 50 
Ligeramente apretado 
62 
Abierto 75 
Apretado 44 
Ligeramente 
Apretado 56 
Abierto 69 
Apretado ninguno 
Ligeramente 
Apretado ninguno 
Abierto ninguno 
Longitud mínima 
total (cm) 55 43 30 
Fuerza del Tallo 
Deberá ser determinada tomandoel tallo horizontalmente en un 
punto a 25 mm por encima de la longitud mínima para la categoría, y 
la desviación de la cabeza de la flor no deberá tener más de 30° 
abajo del plano horizontal con la curvatura natural del tallo hacia 
abajo. 
Defectos 
La categoría azul debe consistir en flores llenas, simétricas razonablemente 
sin defectos, tales como botones planos, abultados, de cabeza café, 
sencillas, de apariencia de adormecimiento, con divisiones, descoloridas, 
insectos, enfermedades y otros daños. La calidad azul deberá tener un tallo 
esencialmente derecho libre de desyemes, daño o decoloración por 
insectos, enfermedades y por otros medios. La categoría roja, aparte del 
diámetro de la flor y la longitud del tallo, deberá tener los mismos 
requerimientos que la azul con variaciones moderadas. 
33
o Libre de parásitos animal 
 
El desarrollo y condición del clavel cortado debe ser de tal manera, que permita un 
transporte y manejo seguro llegando en condiciones satisfactorias al lugar de 
destino. 
 
Los claveles cortados son clasificados en tres clases, estas son: 
 
• Clase Extra, los claveles cortados de esta clase deben ser de calidad superior. 
Ellas deben tener características de la especie y de la variedad. Todas las partes 
de la flor deben ser: 
 
- Libre de daño causado por parásitos de origen animal y vegetal. 
- Libre de materia extraña visible que afecte la apariencia. 
- Sin roce 
- Libre de defectos de crecimiento y formación: para el clavel tipo mediterráneo la 
división del cáliz no es considerado un defecto de desarrollo. 
 
El tallo debe ser de acuerdo a la especie y variedad, rígido, recto y fuerte de modo 
que sirva d soporte a la flor, y sin crecimiento axilar, provisto de hojas sanas, verde 
el cual puede estar ausente en un tercio de la parte baja del tallo. El cáliz debe ser 
lleno y firme. 
 
• Clase I, el clavel de esta clase debe ser de buena calidad. Ellos deben tener 
características de la especie y de la variedad. Todas las partes de esta flor deben 
estar: 
 
- Prácticamente libre de daño causado por parásitos de origen animal y vegetal. 
- Prácticamente libre de material extraño visible que afecte la apariencia. 
- Sin roce. 
34
- Prácticamente libre de defectos de desarrollo. Para el clavel tipo americano, las 
flores con cáliz dividido deben ser atadas y puestas separadamente en lotes 
uniformes siendo envasadas con la marca correspondiente. Para el clavel 
mediterráneo el cáliz dividido no es considerado un defecto de desarrollo. 
 
El tallo debe ser, de acuerdo a la especie y variedad, rígido y soporte suficiente para 
la flor, sin crecimiento axilar, provisto de hojas normalmente desarrolladas, verde el 
cual puede faltar en un tercio de la parte baja del tallo. 
 
• Clase II, Esta clase comprende a los claveles que no están incluidas en las 
clases mencionadas anteriormente, pero que satisfacen los requerimientos 
mínimos de dichas clases. Las flores pueden tener los siguientes defectos: 
 
- Leve defecto causado por enfermedades, parásitos y tratamientos de productos. 
- Leve materia extrañas visibles. 
- Leve roce. 
- Leve mal formación. 
 
El tallo puede ser menos rígido, menos vigoroso y provisto con hojas, las cuales 
pueden estar descoloridas en un tercio en la parte baja del tallo. Los defectos 
permitidos no deben empeorar la calidad, apariencia o utilidad del producto. 
 
López (1989), señala que la flor de clavel está muy adaptada a los malos tratos 
posteriores al corte y en este sentido es mucho más resistente que una rosa, en el 
almacén se procede a su clasificación con arreglo a su longitud y calidad de la flor y 
al empaquetado. 
Los paquetes (de 20 a 25 flores) se enrollan con cartón ondulado o papel celofán 
para proteger las cabezas y se almacenan en la cámara fría, dentro del agua, entre 
1 y 4 grados hasta su envío o reparto. 
 
35
4.4. Problemas Sanitarios y Su Control. 
 
4.4.1. Plagas. 
 
Según Larson (1988), los cuatro grupos principales de plagas de invertebrados 
que requieren control en la mayoría de las áreas de producción son los pulgones, 
araña roja, trips y larvas de polilla. 
 
Las últimas incluyen los gusanos medidores, los enrolladores de la hoja de clavel, el 
tortrícido anaranjado, el gusano de yema de tabaco y el gusano soldado de la 
remolacha. 
 
Generalmente, los pulgones aparecen en condiciones frescas y causan distorsión en 
las ramas del clavel o los botones; alimentándose de la savia por succión. Un 
volumen relativamente bajo de insecticida aplicado sobre las puntas de las plantas 
controlará los pulgones. La araña roja típicamente es un problema durante 
condiciones de clima de verano, seco y cálido y se alimenta del envés del follaje así 
como de los botones. Una aplicación completa de gran volumen de acaricida se 
debe aplicar desde la parte más baja de las plantas. Debido a que pocos productos 
químicos controlan la etapa de huevo, son necesarias tres aplicaciones de acaricida 
distanciadas 10 días. 
 
Algunas especies de trips se alimentan del follaje del clavel, mientras que los trips de 
flores causan un daño particular a los pétalos de las flores. Debido a que los trips de 
flores son muy delgados los adultos pueden entrar al hoyo de la punta del botón que 
es como un alfiler y poner sus huevos adentro, y después de la eclosión las fases 
juveniles causan mucho daño y decoloración de los pétalos mucho antes de que las 
flores estén listas para la cosecha. 
 
Las larvas de polilla son generalmente activas durante condiciones de temperaturas 
cálidas. La cubierta de los invernaderos es ambiente controlados mantiene afuera la 
36
mayoría de las polillas adultas. Las larvas de polilla son más fáciles de controlar 
cuando son jóvenes. Por lo tanto, las aplicaciones de insecticidas deberán hacerse 
tan pronto como aparece primero el daño a las hojas. 
 
Del mismo modo Vidalie (1992) y Salinger (1991), indican que los ácaros, la 
araña roja (tetranychu sp.) es la mayor plaga de los claveles, mostrándose 
inicialmente manchas amarillentas y rojizas sobre las hojas, luego se secan los 
tejidos; en caso de severa infección se producen telarañas, atando los ápices y 
hojas de las plantas. Una vez establecidas son plagas difíciles de erradicar debido a 
su reproducción continuada y ciclo vital así como a la densidad del follaje de la 
planta. 
 
De igual forma manifiesta que los áfidos (Myzus persicae) vectores de virus, se 
aglomeran sobre los ápices de las yemas florales y de brotes, originando una 
deformación del crecimiento, los productos utilizados para su control son los 
piretroides, dimetoato, metomilo. Las orugas que se desarrollan en invernaderos de 
cultivo que están ventilados libremente desde comienzos del verano, originando 
daños en yemas, capullos al abrirse, además se observará daños en los ápices de 
los vástagos atados juntos o agujeros en las hojas, los productos tales como 
carbaryl, diazinon o algunos piretroides proporcionarán el control. 
 
Son numerosos los nemátodos que atacan al clavel, se ralentiza la vegetación, la 
coloración es mala, y se desecan a partir de la base; los medios de lucha son la 
desinfección del suelo. 
 
4.4.2. Enfermedades. 
 
Larson (1988), indica que la principal enfermedad del clavel en el mundo entero 
es el marchitamiento por Fusarium (Fusarium oxysporum f. dianthi) y
marchitamiento por Phialophora (Phialophora cinerescens). Estas dos enfermedades 
son sistémicas, usualmente invaden a la planta desde el suelo contaminado. Los 
37
hongos se mueven de las raíces hacia arriba por el sistema vascular. El efecto de 
taponamiento del hongo en los tejidos de conductores de agua tiene como resultado 
una decoloración amarillenta en el follaje de la planta y marchitamiento. 
 
Las enfermedades del follaje más comunes para los claveles son la mancha foliar o 
pudrición de la rama (Alternaria dianthi y A. Dianthicola), roya (Uromyces 
caryophyllinus), manchas grasosas (Zigophials jamaicensis) yla mancha anular en 
las hojas (Heterosporium echinulatum). Tres enfermedades que afectan los botones 
florales son el moho gris (Botrytis cinerea), la pudrición del botón por Fusarium 
(Fusarium tricinctum) y pudrición del cáliz (Pleospora herbarum). 
 
Los cinco principales virus de los claveles son el que causa moteado de las venas, el 
veteado, el jaspeado y del tipo mancha anular. El que provoca moteado de las venas 
es diseminado por los pulgones, mientras que la mancha anular y el jaspeado se 
esparcen por herramientas de corte y manipulación y los vectores se desconocen. 
No hay control conocido para los virus una vez que las plantas en producción se han 
infectado. 
 
Asimismo Vidalie (1992), afirma que entre las enfermedades viróticas más 
frecuentes y graves están las siguientes: 
 
• Mottle: ligera decoloración de las hojas, disminución de vigor, una de las más 
importantes y de las más difíciles de eliminar porque penetra en los 
meristemas. 
• Ring Spot: manchas circulares, seguidas de necrosis. Deformación de hojas y 
flores. 
• Vein Mottle: decoloración de los nervios, manchado y deformación de las 
flores (crispaciones). 
• Etched Ring: manchas redondas en el borde de las hojas. Las plantas se 
secan. 
• Streack: decoloración en estrías discontinuas, amarillas. Desecación. 
38
Medios de lucha: termoterapia, cultivo de meristemas in vitro para la producción de 
esquejes sanos. Tratamientos aficidas. 
 
4.4.3. Otras Alteraciones Fitosanitarias. 
 
Con referencia a estas alteraciones Larson (1988) y Salinger (1991), señalan 
que las malezas causan pocos problemas en el cultivo del clavel, ya que la mayor 
parte de las hierbas mueren por la fumigación química. Otros trastornos que se 
presentan en el clavel son la conformación herbácea en el que las plantas 
permanecen en estado vegetativo produciendo ramas pero no flores, debiendo 
cortarse o sacarse a las que presenten esta característica; el hendido en los nudos 
donde el crecimiento de vástagos jóvenes tienden a ser arbustivos y a hendirse en 
los nudos desarrollándose nuevos brotes a través del hueco, la calidad de la flor es 
baja estas condiciones son causa de la deficiencia de Boro el cual se puede 
adicionar en Bórax (Borato de sodio) a razón de 2 g/m2 y regando luego. 
 
El cáliz hendido se debe a un excesivo número de pétalos dentro de la flor. Esta 
situación tiene lugar con más frecuencia en primavera, ya que las flores se han 
desarrollado lentamente en invierno con muchos pétalos y los sépalos son algo 
inflexibles. 
 
Hojas pequeñas y estrechas con ápices atados entre sí con aspecto glauco, la causa 
probable es la falta de nitrógeno, esta deficiencia se palia mediante riego con 
fertilizantes nitrogenados tales como la urea o nitrato de sosa y por la aplicación de 
fertilizantes nitrogenados de liberación lenta. 
 
Asimismo el manejo no apropiado de las plantas de clavel, pobres procedimientos 
de cosecha y una selección y empacado de flores sin cuidado causan más pérdidas 
monetarias. 
 
39
4.5. Influencia del Sombreado. 
 
López (1989), sostiene que los problemas del cultivo del clavel son más de 
exceso de temperatura que de falta de ella. Añadamos a esto además un 
invernadero y los problemas son todavía mayores. Por eso el clavel en las zonas 
mediterráneas, no necesita invernaderos. Sin embargo los rocíos, la lluvia y el 
viento dañan al clavel y en este sentido sí necesita protección, pero huyendo de que 
la misma sirva para aumentar la temperatura. 
Hay que cambiar la noción de invernadero (invierno) por la de protección contra el 
viento y la lluvia. 
 
Con referencia al acondicionado y remoción del calor del campo Salinger 
(1991), manifiesta que todos los tejidos que respiran producen calor, aunque éste 
se reduzca por transpiración. Sin embargo, algunas flores carecen de estomas, por 
ello no transpiran y por consiguiente se calientan, especialmente si se mantienen 
agrupadas en masa. En tiempo cálido las flores están a menudo a temperatura más 
elevada que el aire que las rodea. Incluso en los días soleados de invierno la 
temperatura de las flores puede ser más alta en estructuras protegidas que el aire en 
su interior o al exterior (Cuadro 2). 
 
CUADRO.2 Temperatura de las flores del tulipán Apeldoorn en 
un invernadero en día soleado de invierno (3- julio 
12:30) 
Temperatura en ° C 
Exterior 
Invernadero 
Flores abiertas 
11.0 
23.5 
28.0 
Fuente Salinger J. 1991 
40
Gordon y Barden (1979), señalan que los claveles, crisantemos, orquídeas, rosas y 
conejitos normalmente se fuerzan en invernaderos con temperaturas controladas. El 
nivel de irradiación puede controlarse por medio de materiales que proporcionan 
sombra y el fotoperiodo puede ser disminuido empleando una cubierta negra o 
incrementando con luz eléctrica. Estas cubiertas disminuyen el nivel de irradiación, la 
temperatura de las hojas y el acorchamiento. 
5. MATERIALES Y METODOS. 
 
5.1. Localización del Ensayo. 
 
El estudio se realizó en la provincia Caranavi del departamento de La Paz, 
cantón Entre Ríos central Chijchipani en la colonia Unión Berea I, situada a 25 Km. 
de la capital, a una altitud de 1.100 m.s.n.m presentando una temperatura media 
anual de 21 grados centígrados y 1500 mm de precipitación pluvial. 
 
Su ubicación geográfica está a 15° 54’ de latitud Sur y 67° 34’ de longitud Oeste. 
 
FIGURA 1. Localización del Estudio 
41
5.1.1. Ubicación Geográfica. 
 
La provincia Caranavi, ubicada al norte del Departamento de La Paz, consta de 18 
cantones y 483 colonias entre los cuales se encuentra el cantón Entre Ríos. 
 
La colonia Unión Berea I ubicada hacia el oeste del cantón Entre Ríos, limita hacia el 
Norte con la colonia Villa Exaltación, Este con la colonia Rosario Entre Rios 
Choronta, hacia el Sur con las colonias San Salvador y Segunda Berea, hacia el 
Oeste con las colonias Rio Espíritu y San Lorenzo; consta de treinta familias 
asentadas en el lugar desde hace aproximadamente 25 años; los cultivos 
tradicionales de la zona son: banano, plátanos, cítricos, café, tomate y achiote; 
siendo el café, tomate, banano y achiote los que mayor ingresos económicos 
aportan a los agricultores. Los suelos presentan topografía escabrosa con 
pendientes aproximadamente de 27%, el lugar específico dónde se realizó el ensayo 
tiene una pendiente de 2 %. 
5.1.2. Descripción Agroecológica. 
 
Según el Mapa Ecológico de Bolivia (Unzueta, 1975); la zona corresponde a la 
Región subtropical de tierras de valles, la cual se caracteriza por el predominio de 
áreas de climas muy húmedo hasta pluviales, combinados con suelos de pendientes 
moderadas a fuertemente inclinadas. Esta formación ocupa las vertientes del Sub- 
andino de rocas terciarias, que han originado serranías bajas de topografía 
suavemente ondulada a quebrada, sometidos a procesos de remoción en masa y 
en consecuencia muy erosionable. 
 
Según Morales C. (1990), originalmente crecía en esta zona un bosque de 
mediana altura, con una gran diversidad de especies como nogal y cedro, 
actualmente los cultivos tradicionales de la zona son: banano, maíz, tomate. Aparte 
de numerosas plantaciones de cítricos, café palta, mango, papaya y coca se ven 
también amplias áreas de “chumi” es decir bosques arbustivos secundarios, que se 
42
caracterizan por la presencia de numerosos arbustos y árboles pequeños, además 
del helecho. En los lugares empobrecidos, con suelos ácidos y que se queman a 
menudo, solamente se mantiene un pastizal alto con especies no apreciadas por el 
ganado y unos pocos árboles resistentes al fuego como el alcornoque (Tabebuia 
caraiba) y el papayón (Cybistax antisiphilítica). 
 
Entre otras especies presentes en la zona se encuentran el toborochi (Chorisia 
ventricosa),o flor de mayo, jatata (Geonoma deversa),motacú (Scheelea princeps), 
quina (Cinchona calizaya ), ambaibo (Cecropia angustifolia), palo santo ( Triplaris 
setosa). 
 
La región sufrió principalmente explotaciónmaderera, actualmente las 
organizaciones de colonos después de la quema del bosque, realizan una 
explotación de carácter agropecuario; aunque por las condiciones del suelo y la 
marcada pendiente no son apropiados para cultivo limpio y abierto de rendimiento 
permanente. 
 
Los Yungas del norte están ubicados en el extremo nor occidental de la 
cordillera de los Andes, a una altura promedio de 1.000 m.s.n.m. Las características 
del suelo y su ecología, permiten el cultivo de especies permanentes y de tipo anual 
como maíz, arroz, fríjol, tomate y frutales, principalmente cítricos, plátanos, cacao y 
café. 
 
La región tiene una precipitación pluvial de 1.500 mm. Anuales y una humedad 
relativamente alta, no se presentan meses secos. La temperatura promedio anual es 
de 22 °C. A medida que se baja se nota un aumento de los recursos hídricos 
provenientes de las partes más altas. 
 
Aunque es una región con excelente temperatura y humedad, su fisiografía de valles 
profundos, laderas inclinadas y fuentes de agua en las alturas, hacen vulnerable la 
43
conservación de los suelos. El promedio de superficie cultivada es de 90.000 ha. Y 
una producción de 390.000 TM. 
 
En los Yungas del norte, la producción de café, coca y frutales representan 
los rubros más importantes. Las frutas ocupan el primer lugar con el 58% del total 
pero solo ocupan unas 27.000 ha., los estimulantes (principalmente el café) ocupan 
31.000 ha. y su producción alcanza al 7 %. La producción de cereales con 20.000 
ha. representa el 6,5 % del volumen físico de producción. 
 
Antes de llegar a los llanos la topografía del terreno es menos accidentada, razón 
que ha permitido una fuerte migración de los excedentes de la población altiplánica. 
 
5.2. Materiales. 
 
5.2.1. Material vegetal. 
 
Los esquejes enraizados se obtuvieron de una empresa dedicada a la propagación 
vegetativa de plantas madres de clavel, pertenecientes a la línea Shemi Quality tipo 
mediterráneo provenientes de Chile. 
 
• 105 plantines de la variedad Vittorio color rojo. 
• 105 plantines de la variedad Visa color rosa. 
• 105 plantines de la variedad Malibú color blanco 
• 105 plantines de la variedad Presto color amarillo con matiz rojo. 
 
5.2.2. Material de Campo. 
 
• Malla de semisombra de 65 %. 
• Agrofilm 
• Termómetro de máxima y mínima 
• Tijeras de podar 
44
• Mochila aspersora 
• Vernier 
• Flexómetro 
• Regla 
• Alambre galvanizado 
• Postes 
• Viguillas 
• Listones 
• Hilo de cáñamo para el tutoraje 
• Regadera. 
 
5.2.3 Insumos. 
 
Se utilizaron los siguientes insumos, que fueron dosificados de acuerdo a sus 
correspondientes indicaciones. 
 
• Fertilizantes foliar, Abonofol (20,20,20). 
• Fertilizante 15,15,15. 
• Fungicidas Mancozeb. 
• Insecticidas, Folimir, Mapex. 
• Desinfectante del suelo (Basamid). 
 
5.3. Método 
 
5.3.1. Diseño Experimental. 
 
El Diseño que se utilizó fue de Bloques completamente al Azar. Calzada (1982). 
5.3.2. Modelo Lineal Aditivo. 
 
Y ijk = U +Vi + Bj +Eeij 
45
Donde: 
 
Yijk = Cualquier Observación 
U = Media general del Experimento. 
Vi = Efecto del factor Variedad 
Bj = Efecto del factor Bloque 
Eeijk = Error Experimental de la interacción de los factores variedad 
y bloque. 
 
Siendo : 
i = Variedades......... a 1............... 4
j = Bloques.............. b 1............... 3
5.3.3. Establecimiento de la Semisombra. 
 
La instalación de la semisombra tendió en una superficie de 32,5 m2, plantándose 
cuatro postes de 3m de altura, y 2 postes de 4 m de altura, se utilizaron 3 
transversales de 6 m, cada uno, posteriormente se procedió a la colocación de la 
malla de semisombra, en forma de dos aguas, de manera tal que pueda cubrir todo 
el techo y además un metro más de la superficie. Seguidamente se procedió a 
cubrir con agrofilm por encima de la malla para que el cultivo sea protegido de las 
precipitaciones. 
 
5.3.4. Registro de Temperatura y Humedad Relativa. 
 
Los datos de temperatura máxima y mínima se registraron diariamente a horas 
8, 12 y 18 durante un año, tanto debajo del ambiente de semisombra como 
exteriormente, para este propósito se utilizaron termómetros de mínima y máxima 
ubicados en el centro del campo experimental a una altura de 1,50 m. del suelo, 
para el registro de temperaturas externas el termómetro estaba situado a 4m. de la 
46
instalación de semisombra, a la misma altura que dentro de la instalación de 
semisombra. (Ver anexo 3). 
 
Para el registro de la humedad relativa se procedió a colocar dos termómetros 
en el ambiente, el primero con algodón Húmedo al 100%, y el segundo solo 
expuesto al ambiente; posteriormente se realizaron cálculos que determinaron la 
humedad del lugar de estudio. (Ver anexo 4). 
 
5.3.5. Preparación del Terreno. 
De acuerdo a los resultados obtenidos en laboratorio, del análisis físico químico (Ver 
anexo 4) se inició la preparación del terreno la primera semana de septiembre, 
comenzando con el desfondado de aproximadamente 40 cm. de profundidad, 
además de la adición de 4,8 m3 de arena de acuerdo a las necesidades del cultivo, 
continuando con la desinfección del suelo, utilizando para esto el desinfectante 
“Basamid” (producto granulado) aplicando un total de 400 gr/m2.
Con el propósito de evitar la posible fuga del producto desinfectante, se procedió a 
cubrir herméticamente el suelo con lonas de plástico, durante 20 días. 
Efectuándose todo este proceso 40 días antes de la plantación. 
 
5.3.6. Formación de las Banquetas. 
 
Las dimensiones utilizadas en la formación de las banquetas fueron de 1m de 
ancho y 4 m de largo con una altura de 20 cm a partir del nivel del suelo, utilizando 
para esto tablones de madera de las siguientes dimensiones: alto 5 cm; ancho 30 
cm; largo 4,40 m. 
 
Las medidas de cada uno de los tres pasillos de trabajo entre las camas fueron de 
60 cm. rellenados con grava para evitar formación de charcos de agua con una 
ligera pendiente que facilite el drenaje del exceso de agua de riego. 
5.3.7. Armado del Tutorado. 
 
Para el soporte del clavel se colocaron dos postes en cada extremo de la banqueta, 
con barras cruzadas a diferentes intervalos, además de esto se apostaron arquillos 
a la mitad de la platabanda todo esto con el objetivo de sujetar al alambre tendido a 
lo largo de cada lado de la red y así mantener rígidas las cintas plásticas, que a su 
vez sostienen los tallos de la planta; como describe en la figura 2. El tutorado se 
instala a medida que el cultivo crece. 
 
FIGURA 2. Desc
 
5.3.8. Plantación. 
 
La plantación se
medición y división de l
plantines utilizando un
con distancias de 15 cm
 
Los plantines enraizad
aproximada de 8 a 10 
18 cm 
Alambre 
Nivel del suelo 
2m La distancia entre 
arquillos serà 
como màximo de 
2- 2,5 m 
18 cm
12 cm 
15 cm 
15 cm 
47
ripción de los Bastidores de Tutorado. 
 efectuó en fecha 1 de Octubre, después de realizar la 
as platabandas, procediéndose primero a la ubicación de los 
a densidad de plantación de 34 plantas por metro cuadrado, 
. entre hileras y de 20 cm. entre plantas. 
os fueron plantados superficialmente a una profundidad 
cm. a fin de evitar enfermedades fúngicas que se presentan 
48
cuando la plantación se la hace muy profunda; a continuación se realizó el primer 
riego por aspersión para evitar deshidratación de las hojas y fijar bien las raíces al 
suelo. 
 
5.3.9 Operaciones Posteriores a la Plantación. 
 
5.3.9.1. Pinzamiento o Despuntado. 
 
Pasadas cinco semanas de la fecha en que se realizó la plantación, y las 
plantas alcanzaron una altura promedio de 30 cm. de largo se procedió al primer 
pinzado que consistió en cortar la dominancia apical a partir del cuarto nudo 
cercano al suelo contando de cuatro a seis pares de hojas por planta; con esta 
operación se consiguió que la planta ramifique para así dar inicio al segundo 
pinzamiento que se lo ejecutó a los 60 a 70 días posteriores a laplantación , que 
consistió en quitar la punta a la mitad de los brotes laterales de cada una de las 
plantas cuando estas alcanzaron una longitud superior a los cinco nudos. 
 
5.3.9.2. Riego. 
 
Previo a la plantación se procedió a regar abundantemente el terreno hasta 
la saturación del suelo. Durante los primeros quince días posteriores a la plantación 
de los esquejes se realizaron riegos de tipo lluvia para lograr la recuperación de la 
planta, debido al cambio de sustratos que sufren los plantines. 
 
Una vez establecido el cultivo la frecuencia de riego tuvo variaciones en la segunda 
quincena, donde se procedió a regar diariamente en el mes de Noviembre que es 
de mayor calor y posteriormente tres veces por semana en periodos invernales. La 
cantidad de agua utilizada fue de 10 litros por platabanda. 
 
49
5.3.9.3. Fertilización. 
 
De acuerdo a los resultados del análisis de las propiedades físicas y químicas 
de la muestra del suelo, se realizó el siguiente programa semanal de fertilización, 
inicialmente del suelo y posteriormente por aspersiones: 
 
Fertilizante (15,15,15) con el propósito de compensar al suelo de los 
contenidos de fósforo y potasio ; en la instalación de las platabandas. 
 
Fertilizante foliar “Abonofol” cada 20 días. 
 
5.3.9.4. Deshierbe. 
 
Los trabajos de deshierbe se realizaron tres días a la semana, durante todo el 
ciclo del cultivo, de forma manual; observándose reducida cantidad, por lo que no 
representó mayor dificultad ya que la mayoría de las malezas desaparecieron con la 
aplicación de herbicidas y con las anteriores desinfecciones del suelo. 
 
5.3.9.5. Registro y Control de Enfermedades y Plagas. 
 
Las observaciones y el posterior registro de todas las plagas y 
enfermedades que se presentaron en el cultivo se efectuó durante todo el desarrollo 
del trabajo. (Ver anexo 5) 
 
5.3.9.6 Desbotonado o Desyemado. 
 
La práctica del desbotonado se llevó a cabo de forma constante desde los 
meses de marzo, abril y mayo, meses donde se produjo la mayor floración del 
cultivo. El trabajo consistió en eliminar manualmente todos los botones laterales 
cuando estos todavía eran pequeños, teniendo el cuidado necesario de no lastimar 
50
las hojas o el tallo, esta práctica se la ejecutó con el fin de concentrar toda la fuerza 
de la planta sobre los botones que se reservaron para flor comercial. 
 
5.3.9.7 Recolección de Flores. 
 
La recolección de flores se realizó a los 212 días después de la implantación del 
cultivo, posteriormente se realizaron secuencial mente, una vez por semana dejando 
cuatro nudos desde la base del tallo floral dejando un follaje máximo para la 
segunda floración. 
 
Para la recolección de las flores se tomó en cuenta la posición estirada de los 
pétalos de las flores, pero que estos aún no alcancen la posición distendida o 
completamente abiertas, las flores se cosecharon temprano en la mañana utilizando 
pequeñas tijeras de podar, teniendo cuidado en la extracción a través de la red. 
Después de haber realizado el corte la selección de las flores se hizo tomando en 
cuenta solamente la calidad de la flor. 
 
5.3.9.8. Clasificación y Empaque de las Flores. 
 
Una vez realizada la recolección se colocaron las flores en recipientes llenos de 
agua durante dos horas y media, en ambientes frescos para evitar la pérdida de 
agua por la planta, posterior a esto se hicieron ramos de 25 flores, clasificando de 
acuerdo al color. 
 
5.4. Variables de Respuesta. 
 
Las mediciones se las realizaron diariamente a lo largo del desarrollo de todo el 
trabajo. Tomando en cuenta las siguientes variables de respuesta. 
 
51
5.4.1. Porcentaje de Prendimiento. 
 
El porcentaje de prendimiento de las plantas enraizadas se calculó mediante la 
fórmula: 
 
% P = (Número de Plantas Prendidas / Número Total de Plantas) * 100 
 
Tomando para su evaluación, un total de 72 plantas enraizadas. 
 
5.4.2. Días al Inicio de la Floración. 
 
La medición de días al inicio de floración se la realizó cuando el 50 % de un total de 
72 plantas enraizadas, escogidas para el registro de los datos, presentaron la 
aparición del botón floral. 
 
5.4.3. Altura de Planta. 
 
Para la medición de la altura de la planta se utilizó cinta métrica de 3 metros; 
tomando las medidas a 72 plantas evaluadas. 
 La altura de la planta se midió desde el suelo hasta el sexto a séptimo nudo, de 
acuerdo a la longitud alcanzada por el tallo floral lo que está determinado por las 
normas de calidad. 
 
5.4.4. Longitud del Tallo Floral. 
 
Para la toma de datos sobre la longitud del tallo, se procedió a la medición con cinta 
métrica por encima del séptimo nudo hasta el botón floral, ya que normalmente 
debajo del séptimo nudo el brote es vegetativo. 
 
52
Diámetro de la Flor. 
 
El diámetro de la flor se midió utilizando Vernier, en el momento en que los pétalos 
exteriores estaban extendidos por completo, pero que los pétalos interiores aún no 
terminaban de extenderse totalmente. 
 
5.4.5. Número de Flores por Planta. 
 
Para medir el número de flores producidas por una planta, se procedió al conteo de 
la cantidad de brotes florales para lo cual se evaluaron 35 plantas existentes en 
cada una de las parcelas. 
 
5.4.6. Rendimiento. 
 
El rendimiento de las flores se determinó mediante el conteo del número de botones 
florales producidos dentro de un metro cuadrado. 
 
5.4.7. Análisis Parcial Beneficio Costo. 
 
Para el cálculo de la relación beneficio costo se empleó la fórmula: 
 
B/C = Ingreso de Producción/ Costo de producción 
 
Donde se midió el valor absoluto de la producción entre el total de costos que se 
invirtió, en cada una de las variedades. 
Este coeficiente se determinó al final de todo el ensayo. 
 
6. RESULTADOS Y DISCUSIONES. 
 
La realización del estudio tuvo una duración de diez meses los cuales estuvieron 
comprendidos desde el mes de octubre del año 2001, fecha en la que se realizó el 
53
trasplante, hasta el mes de agosto del año 2002, fecha en la que se terminó la 
evaluación. 
 
El ciclo del cultivo se desarrolló en las instalaciones del sistema de semisombra, 
en donde el cultivo precisó un promedio de 165 días para alcanzar su periodo 
vegetativo, y un promedio de 90 días para el seguimiento de su posterior etapa de 
producción; los resultados obtenidos y discusiones se analizan a continuación. 
 
6.1. Evaluación Fenológica Del Cultivo. 
 
De acuerdo a la fase del desarrollo del cultivo, a continuación se presentan los 
datos, resultados y discusiones del estudio, de las principales variables fenológicas 
 
6.1.1. Porcentaje De Prendimiento. 
 
Para una mejor explicación de los resultados sobre el porcentaje de 
prendimiento de cada una de las variedades, se muestra el cuadro 3, donde se 
presenta un resumen de las medias de las diferentes mediciones. 
 
CUADRO 3. Promedios de Porcentajes de Prendimiento 
en un promedio de N° de Días al 
Prendimiento. 
Variedad 
Promedio del 
Porcentaje de 
Prendimiento 
Vittorio (rojo) 85,50 % 
Malibú (blanco) 82,83 % 
Visa (rosado) 80,44 % 
Presto (amarillo con matiz 
rojo) 75,00 % 
54
CV = 5,75 % 
Según el cuadro 4 de Análisis de Varianza (ANVA), correspondiente al porcentaje 
de prendimiento, se puede observar que existe diferencia estadística altamente 
significativa 
 
(P <0,01) entre las cuatro variedades, lo que nos indica que cada una de las 
variedades tuvo un comportamiento propio. 
Con respecto a las repeticiones no se tuvieron diferencias estadísticas significativas. 
 
El coeficiente de variación de 5,75 % se encuentra dentro de los parámetros 
estadísticos de aceptación lo que indica que las unidades experimentales fueron 
bien manejadas. 
 
Realizada la prueba de Duncan ( Ver Anexo 6 ,Cuadro 6) donde se confirma que en 
el sistema de semisombra no existen diferencias estadísticas significativas entre la 
variedad Vittorio con la variedad Malibú, pero si se revelan

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