Logo Studenta

Oso Andino: Guardião dos Bosques

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

OSO ANDINO 1
HABLEMOS DEL 
OSO ANDINO
El guardián del bosque 
y del páramo 
El oso polar se ha convertido en un símbo-
lo del cambio climático en el mundo. Sin 
embargo, el oso andino (Tremarctos orna-
tus), el único de Suramérica, podría ser uno 
de los primeros carnívoros en desaparecer. 
Por ello, debemos actuar cuanto antes 
para preservar su especie. 
Endémico de los Andes tropicales, esta 
especie se le encuentra desde la frontera 
entre Colombia y Panamá y la Sierra de 
Portuguesa en Venezuela, hasta Bolivia y 
el norte de Argentina, en bosques andinos, 
páramos y punas. Precisamente, su amplia 
distribución ha hecho que tenga distintos 
nombres a lo largo del continente: oso de 
anteojos (Colombia), frontino (Venezuela), 
wii (en lengua embera), y ukumari (en len-
gua quechua), por mencionar algunos. 
Sus manchas alrededor de los ojos, hocico 
y pecho son distintas en cada individuo, 
por lo que equivalen a la huella dactilar 
de los humanos. Al igual que el panda y el 
oso malayo, esta especie no hiberna. Son 
excelentes trepadores gracias a sus garras, 
con las que cavan en la tierra y manipulan 
ramas y tallos de plantas. Aunque son om-
nívoros, consumen principalmente 
frutas y plantas. 
¿Por qué es importante? 
• Por su dieta y sus largos recorridos, el 
oso andino ayuda a diseminar semi-
llas permitiendo la perdurabilidad de 
los bosques que habitan, así como la 
apertura de paso para especies más 
pequeñas como roedores y venados. 
 
• Su presencia es, además, un poderoso 
indicador de la salud de los ecosiste-
mas y dinamiza la vida de los bosques 
cuando derriba arbustos y ramas para 
buscar alimento. Para numerosos pue-
blos indígenas el oso de anteojos es 
un animal sagrado, un ser mágico que 
algunas culturas era un vínculo entre 
el cielo y la tierra, un mediador entre el 
bien y el mal o un hermano mayor. 
 
• El oso de anteojos es una especie som-
brilla. Su conservación beneficia la 
protección del páramo, de los bosques 
de niebla y de decenas de especies que 
habitan estos ecosistemas. Por ejemplo, 
de estos ecosistemas viene el 70% del 
agua que consumen los colombianos.
 2 OSO ANDINO
Algunos datos curiosos 
sobre la especie 
• El oso de anteojos vive en los páramos, 
punas y bosques andinos de Suramé-
rica, desde los 1.000 metros de altura 
hasta los más de 4.000 metros. Los 
machos miden entre 1,5 y 2 metros y 
pesan hasta 175 kilogramos. 
 
• Los osos del páramo son más grandes 
que los de las tierras más bajas, lo que 
hace de ellos los carnívoros más gran-
des de toda Suramérica. 
 
• Llegan a la edad adulta entre los tres y 
cinco años. El tiempo de gestación del 
oso de anteojos dura entre seis y ocho 
meses; luego, la hembra pare hasta dos 
crías y les brinda sus cuidados los pri-
meros dos años de vida. 
 
• El único oso de Suramérica es en gran 
medida vegetariano. Come sobre todo 
frutas silvestres, rizomas, bulbos y bro-
melias, aunque también llega a consu-
mir carcasas de animales muertos o 
insectos, reptiles y roedores. 
 
• Transita por áreas muy amplias. Un 
macho cubre hasta 61 kilómetros cua-
drados y también son excelentes tre-
padores, gracias a sus fuertes garras; 
para marcar su territorio deja rasguños 
y rastros de olor. 
 
• Los osos y los humanos han vivido 
juntos durante milenios. Por su forma 
parecida a los humanos, su fuerza y su 
lado salvaje, los osos han sido motivo 
de leyendas, creencias y celebraciones 
alrededor del mundo. El oso andino no 
escapa a esto.
El oso andino en Colombia 
• En Colombia, el oso andino tiene regis-
tros de avistamiento en los páramos 
de las cordilleras Central, Occidental y 
Oriental y se encuentra en 22 de los 59 
Parques Nacionales Naturales (PNN). 
Por ejemplo: el PNN Chingaza (Cundina-
marca), el PNN Farallones de Cali (Valle 
del Cauca), PNN Cueva de los Guácha-
ros (Huila), en el Santuario de Fauna y 
Flora Guanentá Alto Río Fonce (Santan-
der), entre otros. 
 
 
• Se estima que podría haber hasta 8.000 
osos de anteojos en nuestro país. 
 
• El oso andino es identificado como 
especie valor objeto de conservación en 
varias de las 22 áreas de Parques Nacio-
nales Naturales que lo reportan y, por 
lo menos, cuatro áreas regionales. Esto 
significa que existen procesos estanda-
rizados para su monitoreo y seguimien-
to y es posible avistarlos en algunas de 
estas áreas con los debidos protocolos.
 OSO ANDINO 3
Amenazas para la especie 
• Las poblaciones aisladas de osos en el 
páramo están entre los mamíferos más 
amenazados del mundo. Su hábitat 
se contrae rápidamente a causa de la 
expansión veloz de la frontera agríco-
la (el límite que separa las áreas para 
actividades agropecuarias, de aquellas 
para la conservación o protección de 
la biodiversidad). Algo similar sucede 
con otras actividades humanas como la 
construcción de líneas eléctricas, duc-
tos, carreteras, minas, canteras, etc. 
 
• En Suramérica, la expansión de la fron-
tera agrícola en los bosques ha hecho 
que el nivel de interacción entre los 
osos andinos y los humanos se haya 
incrementado, lo que provoca tensiones 
entre ambas especies. 
 
• Algunas comunidades prefieren cazar 
los osos de anteojos para evitar que 
dañen sus cultivos, ataquen el ganado 
o también para comercializar su grasa, 
pelaje o garras; incluso todavía hay gen-
te que los quiere como trofeos. A pesar 
de ser un animal huidizo, tímido y del 
que no hay registros de ataques contra 
humanos, se piensa que es peligroso. 
 
• La deforestación y la transformación de 
los ecosistemas andinos son la princi-
pal causa de la pérdida de habitar del 
oso de anteojos. Asimismo, al reducirse 
cada vez más las franjas de coberturas 
naturales, se pierde la conectividad en 
el ecosistema y minimiza el flujo de la 
especie y, por ende, el debilitamiento 
genético de sus poblaciones al cruzarse 
entre los mismos miembros de unas po-
cas familias (endogamia). 
 
• Según la UICN (Unión Internacional para 
la Conservación de la Naturaleza), el 
oso andino es una especie amenazada. 
Actualmente, se le ubica en la 
categoría Vulnerable.
¿Qué puedes hacer para apoyar 
su conservación? 
• Infórmate más sobre la especie y sus 
amenazas. Usa tus redes sociales y 
comparte tus aprendizajes con otros. 
 
• Compra sostenible y no apoyes las 
actividades que perjudican su hogar 
como el tráfico ilegal de madera, fauna 
y minerales. 
 
 OSO ANDINO 4
• Usa tu voz y exige al Gobierno acciones 
más contundentes para proteger el oso 
andino y sus ecosistemas. 
 
• Apoya a las organizaciones que buscan 
protegerlos: algunas tienen programas 
de adopción del oso andino, con la que 
buscan proteger su hábitat, así como 
seguir estudiando la especie para pro-
mover acciones en favor de su con-
servación. 
 
• Apoya el turismo sostenible: existen 
algunas iniciativas de avistamiento de 
oso andino en los Andes colombianos 
que pretenden conservar la especie a 
través de su conocimiento. 
 
• Si te animas a conocer el hogar del oso 
andino y tienes la suerte de encontrar-
lo, te recomendamos: 
 
• Asesórate y realiza la incursión con un 
experto u operador local autorizado 
para el avistamiento de esta especie. 
También con los guardaparques de las 
áreas protegidas que visites. 
 
• No lo ataques, acorrales ni amenaces, 
por el contrario, aléjate, sobre todo si 
se trata de una hembra con sus crías 
(oseznos). Es importante mantener 
siempre la calma y una distancia pru-
dencial, mínima de 5 metros. 
 
• No hagas sonidos fuertes. 
 
• Desplázate con lentitud y apártate, para 
que el animal continúe su camino. 
 
• Evita el contacto visual directo. 
 
¿Qué hace WWF por el 
oso andino? 
WWF, en alianza con Isagen y Parques 
Nacionales Naturales de Colombia, trabaja 
en la zona del Corredor Cordillera Central 
que incluye un área localizada sobre las 
vertientes Oriental y Occidental de la Cordi-
llera Central, entrelas cuencas alta y media 
de los ríos Magdalena y Cauca. Comprende 
84 municipios en ocho departamentos, con 
un área total de 3.930.434 de hectáreas, en 
un rango altitudinal que va de los 367 a los 
5.388 ms.n.m. Allí contribuimos al monito-
reo del oso andino en el marco de efectivi-
dad de manejo del área protegida PNN Las 
Hermosas. 
En 2019, se registró avistamiento del oso 
en dos sectores del Parque. 
Igualmente, WWF Colombia apoya y brinda 
herramientas para la gestión de ecosiste-
mas y áreas que son clave para el ciclo de 
vida del Oso de anteojos. En áreas protegi-
das, trabajamos de la mano con las auto-
ridades ambientales para la conservación 
de páramos y bosques andinos en las 3 
cordilleras de la región de los andes y sus 
piedemontes, y aportamos a la mejora del 
manejo efectivo de áreas clave para refugio 
del oso como son el PNN Chingaza, PNN 
Tatamá, PNN Farallones de Cali, PNN Su-
mapaz, PNN Las Hermosas, por mencionar 
solo algunos. Adelantamos múltiples cam-
pañas para promover el cuidado del oso 
(detalle de campaña del oso andino) y ge-
neramos acciones técnicas para la mejora 
de la conectividad en varias de las regiones 
donde habita la especie. Con nuestra visión 
de trabajo a escala de paisaje, contribui-
mos al mantenimiento de las poblaciones 
de oso andino en paisajes representativos 
de Colombia. 
Fuentes consultadas 
• Dangles, O. y Mena, B. (2017). Oso + páramo. 
Cumbia Books. 
• WWF Colombia. (2022, 20 de febrero). Un mun-
do de osos. https://www.wwf.org.co/?uNew-
sID=360070 
• WWF Colombia. (2022, 21 de febrero). Las cla-
ves del oso de anteojos. https://www.wwf.org.
co/?260913/Las2Dclaves2Ddel2Doso 
• El Oso Andino en el Macizo de Chingaza. / José 
F. González-Maya, Robinson Galindo-Ta- razona, 
Marcos Manuel Urquijo Collazos, Maritza Zárate 
Vanegas & Angela Parra-Romero, editores — 
Bogotá: Empresa de Acueducto, Alcantarillado y 
Aseo de Bogotá D.C. / EAB-ESP, Corporación Au-
tónoma Regional del Guavio - CORPOGUAVIO, 
Parques Nacionales Natu- rales de Colombia 
(Parque Nacional Natural Chingaza, Dirección 
Territorial Orinoquía) & Proyecto de Conser-
vación de Aguas y Tierras – ProCAT Colombia, 
2017. 
• https://www.parquesnacionales.gov.co/portal/
es/

Continuar navegando