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LIT ARGENTINA PARCIAL

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PARCIAL DE LITERATURA ARGENTINA II
DOCENTE: ECKHARDT MARCELO
ESTUDIANTE: LAVENA BELÉN
“TIEMPO Y DUALIDAD: ENTRE LO ETERNO Y LO MORTAL”
Borges tiene la capacidad de ver el universo “en este gigantesco, he visto millones de actos deleitables y atroces; ninguno me asombró como el hecho de que todos ocuparan el mismo punto, sin superposición y sin transparencia”. Borges hace una buena y exquisita literatura con lo que percibe en el Aleph porque está enamorado “vi la reliquia atroz de lo que deliciosamente había sido Beatriz Viterbo, vi la circulación de mi oscura sangre, vi el engranaje del amor y la modificación de la muerte, vi el Aleph…” Borges dice que no todos pueden ver la belleza del universo, pero él sí puede hacerlo, al estar enamorado le da valor a las imágenes del mundo. Para Borges, la muerte es nostalgia y la transforma en belleza, belleza general y particular de ese universo que sólo él puede leer porque está enamorado, relaciona las particularidades del mundo en y del que se sorprenden los enamorados. 
Borges está en un tiempo presente, pero vive recordando a su amada que ya murió, por lo tanto, en el Aleph está el tiempo pasado “noté que las carteleras de fierro de la plaza Constitución había renovado no se qué aviso de cigarrillos rubios; el hecho me dolió, pues comprendí que el incesante y vasto universo ya se apartaba de ella y que ese cambio era el primero de una serie infinita”. A Borges esto lo angustia porque este cambio de cartelera determina que el tiempo pasa y se queda en el pasado.
Borges exploraba la noción del tiempo de manera profunda en su poética. Sus relatos a menudo desafían las nociones lineales del tiempo y proponen una concepción más fluida y cíclica. Además, la idea de la eternidad es recurrente en su obra, donde el tiempo se convierte en un laberinto infinito y se plantea la posibilidad de la existencia simultánea de todas las épocas “no me resultó muy difícil compartir su congoja. Ya cumplidos los cuarenta años, todo cambio es un símbolo detestable del pasaje del tiempo” Borges tenía una fascinación por el tiempo y el espacio en su literatura. Piglia señala que Borges a menudo exploraba conceptos como la eternidad, los laberintos temporales y los mundos paralelos en sus cuentos. Esto refleja su interés en la filosofía y la metafísica.
Como en Funes, el memorioso “Dos veces lo vi atrás de la reja, que burdamente recalcaba su condición de eterno prisionero: una, inmóvil, con los ojos cerrados; otra, inmóvil también, absorto en la contemplación de un oloroso gajo de santonina” puesto esto en palabras de Piglia "Para Borges, lo eterno es la literatura, el juego infinito de la escritura, la posibilidad de volver infinitamente sobre los mismos temas, de leerse una y otra vez, en diferentes textos, con distintos nombres. Pero lo eterno, en Borges, está condenado a habitar las formas de lo finito. La eternidad es, en definitiva, un infierno: ese laberinto sin salida que es la escritura y la literatura, su lugar de prisión y de condena."
En su cuento El Fin “De la otra pieza le llegaba un rasgueo de guitarra, una suerte de pobrísimo laberinto que se enredaba y desataba infinitamente… Recobró poco a poco la realidad, las cosas cotidianas que ya no cambiaría nunca por otras. Miró sin lástima su gran cuerpo inútil, el poncho de lana ordinaria que le envolvía las piernas” “Cumplida su tarea de justiciero, ahora era nadie. Mejor dicho, era el otro: no tenía destino sobre la tierra y había matado a un hombre” Borges aborda la idea del fin del mundo y cómo enfrentar la mortalidad y la destrucción. Es un cuento sombrío que explora la fugacidad de todas las cosas. Piglia destaca cómo Borges ve la literatura como algo eterno, un juego infinito de escritura que trasciende el tiempo y la mortalidad. Sin embargo, también sugiere que esta eternidad está atrapada en las limitaciones de las formas literarias y que la escritura misma puede convertirse en una especie de prisión. Es decir, la eternidad de la literatura coexiste con la finitud de los textos y los temas recurrentes en las obras de Borges.
En Girondo cuando en su poema n°1 de espantapájaros dice: ¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos? ¿Qué me importan sus extremidades de palmípedo y su mirada de pronóstico reservado? ¡María Luisa era la verdadera pluma! Desde el amanecer volaba del dormitorio a la cocina, volaba del comedor a la despensa. Volando me preparaba el baño, la camisa. Volando realizaba sus compras, sus quehaceres...” presenta su yo lírico desencacillado, esta voz produce una operación del significante entre el sujeto y el objeto. Ese yo lírico produce metamorfosis, transmigración, desorientación, extrañamiento, busca sacudir y desacomodar al lector, sacarlo de las casillas. En este poema, se produce la dis/locación corporal, espacial. Disloca el cuerpo y el lugar, produce un desplazamiento a través de saturación de sentidos.
En su poema n°3 “¿Recuerdas las que tenía cuando me conociste?... En ese tiempo me imaginaba que serías soldado y mis pezones se incendiaban al pensar que tendrías un pecho áspero, como un felpudo. “eras fuerte. Escalaste los muros de un monasterio. Te acostaste con la abadesa. La dejaste preñada. ¿A qué tiempo, a qué nación pertence tu historia?... Te has jugado la vida tantas veces, que posees un olor a barajas usadas. ¡con qué avidez, con qué ternura yo te basaba las heridas! Eras brutal. Eras taciturno. Te gustaban los quesos que saben a verija de sátiro... y la primera noche, al poseerme, me destrozaste el espinazo en el respaldo de la cama.” Girondo utiliza una estructura fragmentada y desordenada que refleja la experiencia de la temporalidad fragmentada. Estos versos están llenos de imágenes y sensaciones que se suceden rápidamente, creando una sensación de caos temporal. Juega con la percepción del tiempo y cómo el individuo lo experimenta de manera subjetiva.
Girondo está en el tiempo presente, pasado y futuro. En el poema 14 su abuela le da consejos y lo hace en un tiempo presente. Desde su experiencia (pasado), aconsejándolo para la vida (futuro). “La vida, te lo digo por experiencia, es un largo embrutecimiento” “nunca me cansaré de repetirte que no debes renunciar ni a tu derecho de renunciar”. La vida cotidiana embrutece, enajena, automatiza, empobrece. Y en cuanto a esto, Sarlo dice: “La costumbre es odiosa porque no permite ver: esta máxima moral y estética gobierna la literatura de Girondo. Los poetas de los que quiere separarse 'sienten', 'expresan' o 'imaginan'; cuando escriben, hacen pasar el mundo por la grilla de un yo lírico que Girando prefiere evitar: 
Como en el poema n°8 "Yo no tengo una personalidad; yo soy un cocktaiL un conglomerado, una manifestación de personalidades. "En mí la personalidad es una especie de forunculosis anímica en estado crónico de erupción; no pasa media hora sin que me nazca una nueva personalidad."
Sarlo dice “La escena urbana, que para Girando es una naturaleza, no tiene historia, en consecuencia, nada puede perderse ni convertirse en objeto de evocación: el presente es más extenso que el pasado; lo que se ve cubre y obtura lo que otros poetas construyen como recuerdo. En este mundo no es necesaria la posesión porque no es necesario asegurarse contra la pérdida”. Y con esta cita, se puede decir que, a diferencia de Borges, para Girondo el paso del tiempo o la finitud de la vida no es un problema, para él todo se transforma. Se caracteriza por la exploración del lenguaje, la crítica social y existencial. Mediante el título, utiliza la figura del espantapájaros como símbolo de la fusión entre lo humano y lo animal, en una especie de liberación de las restricciones sociales y culturales que imponen la razón y lo moral.
En Quiroga, la clave de su poética está en el primer párrafo de su relato "Los desterrados" 
“Misiones, como toda región de frontera, es rica en tipos pintorescos. Suelen serlo extraordinariamente aquellos que, a semejanza de las bolas de billar, han nacido con efecto. Tocan normalmente banda, yemprenden los rumbos más inesperados. Así Juan Brown que, habiendo ido por sólo unas horas a mirar las ruinas, se quedó 25 años allá; el doctor Else, a quien la destilación de naranjas llevó a confundir a su hija con una rata; el químico Rivet, que se extinguió como una lámpara, demasiado repleto de alcohol carburado; y tantos otros que, gracias al efecto, reaccionaron del modo más imprevisto”
Allí explica que lo que le atrae y produce su literatura son esos tipos con efecto que, a partir de una fatalidad de la naturaleza, de la frontera, derivan. La deriva, por tanto, es el combustible de la literatura de Quiroga.
“Las tardes pasaban de este modo, perdidos ambos de extrañeza en la flamante Misiones…” a partir de esta cita se puede observar la deriva como la experiencia en el lenguaje que cae. en este momento de la historia, es cuando los mensú comienzan a derivar, derivan en aquella Misiones nueva, transformada y para ellos tan hostil e incómoda, derivan en el lenguaje que cae, que ya no los comprende ni los acobija como antes.
“El viaje, de este modo, quedó resuelto. y no hubo en cruzado alguno mayor fe y entusiasmo que los de aquellos dos desterrados casi caducos, en viaje hacia su tierra natal…” se ve aquí la deriva que se enfrenta, el destino que los atraviesa como un acto heroico, la última esperanza que tienen y con la que ellos creen dejar de derivar, pero que, en realidad es la misma deriva del principio del fin. este viaje que emprenden es la única ilusión que tienen para lograr regresar a su tierra y sentirse nuevamente “en casa”.
“iban así, riquísimos de ternura y cansancio, pues la sierra central de misiones no es propicia al paso de los viejos desterrados” la deriva, entre la vida y la muerte, la supervivencia y los actos heroicos sin resultados.
“Joao pedro no respondió esta vez. ya había llegado…” pues mueren creyendo haber llegado a Brasil, y esta deriva llega a su fin. se escribe esta historia en un tiempo presente que se sufre, en el que los mensualeros deciden derivar en busca de un futuro feliz pero no logran su cometido. para Quiroga, estos dos mensualeros son tipos con efecto, tipos que ante una situación crucial, deciden actuar y hacer algo al respecto, son quienes se enfrentan a su destino con dignidad y valentía, aun sabiendo que van a morir.
“El hombre pisó algo blanduzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie…” (A la deriva) la historia comienza con un hecho inesperado que le sucede a un tipo común, un hecho que se da en la naturaleza extrema, al límite fronterizo, pero también al límite entre la vida y la muerte, que dispara un destino incierto de un momento a otro.
“Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. sentóse en la popa y comenzó a palear hasta el centro del Paraná…” “el hombre tuvo aun valor para llegar hasta su canoa, y la corriente, cogiéndola de nuevo, la llevó velozmente a la deriva…” (A la deriva) el hombre no quería morir y, aunque era su destino, lo enfrentó y trató de esquivarlo derivando. nuevamente, con en el relato anterior está el tiempo pasado y presente, no hay futuro. el personaje vive un presente que se sufre, en donde la vida, la muerte y los actos heroicos sin resultados se relacionan.
“Estos buques abandonados por a o por b, navegan obstinadamente a favor de las corrientes o del viento” (Los Buques suicidantes) para Quiroga todo lo que conlleve un futuro incierto, significa estar a la deriva. como estos buques, que quedaban abandonados en el mar.
“Un momento después dejó la camiseta en el rollo, avanzó a la borda y se tiró al agua” (Los buques suicidantes) este es el momento en el que se tira el primer compañero de este tripulante. este buque provocaba en ellos una suerte de sonambulismo y desgano.
“Al rato otro se desperezó, restregóse los ojos caminando, y se tiró al agua”
“Miró largo rato mi pantalón, distraído. al fin se tiró al agua”
“Los otros desaparecieron uno tras otro. a las seis el último de todos, se levantó, se compuso la ropa, apartóse el pelo de la frente, caminó con sueño aún, y se tiró al agua” por un lado, este buque particularmente no se sabe por qué provocaba estas reacciones en sus tripulantes, de querer huir de ese presente que los atormenta, de ese futuro que desconocen y del que creen que no será posible. sugestionados con la historia de los tripulantes anteriores, ¿por qué sus finales serían diferentes? se dejaron llevar por la deriva, por la corriente y ese terror supersticioso que los atormentaban.
“Entonces quedé solo, mirando como un idiota el mar desierto. todos sin saber lo que hacían se habían arrojado al mar, envueltos en el sonambulismo moroso que flotaba en el buque” “en vez de agotarme en una defensa angustiosa y a toda costa contra lo que sentía…” “acepté sencillamente esa muerte hipnótica” en este caso, a diferencia de sus compañeros, este hombre elige vivir o morir, pero con dignidad, él elige esa deriva, se abandona a su suerte y por eso se salva. a pesar de todo lo que atraviesa, elige la dignidad y el honor.
Como se puede observar en sus cuentos, prevalece el tiempo pasado y presente, no hay futuro. En los relatos de Quiroga, los personajes están todos en un tiempo presente que se sufre, como en el Aleph. Porque están a la deriva, en donde la vida, la muerte y los actos heroícos sin resultados se relacionan. “Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. Sentóse en la popa y comenzó a palear hasta el centro del Paraná” (A la deriva). 
De Alfonsina Storni, dice Sarlo, que el impulso que toma a la hora de escribir se debe al intento de querer refutar la hipocresía y el doble discurso como forma de relación entre hombres y mujeres, en especial respecto a cuestiones básicas de moral. Es por esto que encuadra su poesía en un estadío salvaje de la liberación femenina.
La voz poética, su yo lírico, poetiza en un tránsito entre una situación inicial, cotidiana y común pero adversa, donde esa voz, ese signficante debe TAMIZARSE, FILTRARSE, IN/CORPORAR/SE, en la TIERRA, en lo NATURAL, en la NATURALEZA: allí aparece el CUERPO. Es el pasaje (tránsito, viaje) que esa voz poética hizo y desde allí puede escribir su poesía. O sea, desde allí percibe el mundo (una nostalgia hacia la naturaleza que es, también, origen de la perfección, de lo perdurable, de lo eterno/clásico). Es una TRADUCCIÓN de lo (hetero)normativo pasado en el FILTRO de la naturaleza: allí el cuerpo vuelve a ser cuerpo, se libera, se iguala, se recompone, se reencuentra. Como en este poema, clave importante de su poética:
Fragmento de “TU ME QUIERES BLANCA”
Tú que en los jardines
Negros del Engaño
Vestido de rojo
Corriste al Estrago.
Tú que el esqueleto
Conservas intacto
No sé todavía
Por cuáles milagros,
Me pretendes blanca
(Dios te lo perdone),
Me pretendes casta
(Dios te lo perdone),
¡Me pretendes alba!
Sarlo define a Alfonsina como una poetisa de mal gusto, y que, este mal gusto le valió un éxito extrañamente continuado. Según Beatriz, Storni escribe así gracias a los desfasajes entre las estéticas de vanguardia y una línea media de poesía de repercusión amplia.
Su poesía se lee con una facilidad y rapidez, similares a las novelas sentimentales de la época. Fácil de memorizar, con un lenguaje claro, preciso y cursi. ¿Pero por qué es cursi? ¿Por qué dice que no sabe escribir de otro modo? Dice Sarlo, que Alfonsina era inculta en lo que respectaba a las tendencias de la cultura letrada de la década de 1920.
En su poesía se invierten los roles sexuales tradicionales y se rompe con un registro de imágenes atribuidas a la mujer. Su literatura será sentimental y erótica, su relación con la figura masculina será de queja, de reivindicación de la diferencia; los lugares de la mujer, sus acciones y cualidades en contra de las tendencias de la moral, la psicología de las pasiones y la retórica convencional. 
¿Qué diría?
¿Qué diría la gente, recortada y vacía,
Si en un día fortuito, por ultra fantasía,
Me tiñera el cabello de plateado y violeta,
Usara peplo griego, cambiarala peineta
Por cintillo de flores: miosotis o jazmines,
Cantara por las calles al compás de violines,
O dijera mis versos recorriendo las plazas
¿Libertado mi gusto de vulgares mordazas?
¿Irían a mirarme cubriendo en las aceras?
¿Me quemarían como quemaron hechiceras?
¿Campanas tocarían para llamar a misa?
En verdad que pensarlo me da un poco de risa.
La mujer del poema se identifica por una serie de atributos, acciones y posesiones atribuidos a la masculinidad. En ello reside y resalta su fuerza ideológica, la conquista de otros roles y poderes, independencia económica, autoabastecimiento en el sostén de sí misma y de su hijo, intelectualidad, defensa frente al mundo y la violencia como defensa propia.
Bien pudiera ser...
Pudiera ser que todo lo que en verso he sentido
No fuera más que aquello que nunca pudo ser,
No fuera más que algo vedado y reprimido
De familia en familia, de mujer en mujer.
Dicen que en los solares de mi gente, medido
Estaba todo aquello que se debía hacer...
Dicen que silenciosas las mujeres han sido
De mi casa materna... Ah, bien pudiera ser...
A veces en mi madre apuntaron antojos
De liberarse, pero se le subió a los ojos
Una honda amargura, y en la sombra lloró.
Y todo eso mordiente, vencido, mutilado,
Todo eso que se hallaba en su alma encerrado,
Pienso que sin quererlo lo he libertado yo.
Aunque el tiempo no es un tema central en la poética de Alfonsina Storni, su obra refleja una conciencia de la temporalidad y lo efímero de la vida. A través de su poesía, Storni explora la condición humana, los sentimientos y las experiencias personales, utilizando el lenguaje poético para expresar la complejidad y la transitoriedad de la existencia. “Recuerdo el dulce tiempo de sierras cordobesas Pasado con el alma sin un solo deseo, Vagando entre las matas de menta y de poleo” (Un recuerdo).
IMAGINARIO SIMBÓLICO
Borges utiliza símbolos recurrentes como los espejos, los laberintos y los libros, que representan la búsqueda de conocimiento, la complejidad de la realidad y sus antídotos ante lo in/finito. La totalidad del universo es un símbolo de la infinitud y la unidad, y al mismo tiempo, es inalcanzable e indescriptible para la mente humana. Borges utiliza este símbolo para reflexionar sobre la naturaleza de la realidad y la imposibilidad de comprenderla en su totalidad “vi un laberinto roto (era Londres), vi interminables ojos inmediatos escrutándose en mí como en un espejo, vi todos los espejos del planeta y ninguno me reflejó”. Además, Borges utiliza la puesta en abismo para explorar los límites de la percepción y la naturaleza ilusoria de la realidad, plantea la idea de que la realidad puede ser una construcción subjetiva. “Vi en un gabinete de Alkmaar un globo terráqueo entre dos espejos que lo multiplican sin fin”. 
En la poética de Borges los espejos se presentan como un elemento que refleja la multiplicidad y la simultaneidad de la existencia. Utiliza los espejos para crear una sensación de laberinto y jugar con la noción de la perspectiva y la percepción. A través de los espejos busca reflejar la ilusión, la multiplicidad de realidades y la interconexión entre todos los elementos del universo.
Girondo juega con imágenes surrealistas y evoca objetos cotidianos de una manera inusual. El cuerpo humano y sus partes son constantes en el imaginario simbólico de Girondo. Explora la sensualidad, la sexualidad y las relaciones humanas a través de imágenes relacionadas con el cuerpo. Estas imágenes pueden ser disruptivas, descontextualizadas o incluso grotescas. Acude a la dislocación del cuerpo, lo separa, lo desplaza y lo transmuta dándole vida propia, estados y sentimientos. “¿Qué me importaban sus labios por entregas y sus encelos sulfurosos? ¿Qué me importan sus extremidades de palmípedo y su mirada de pronóstico reservado?” (Poema 1) “y una cosa es mirar el mar desde la playa, otra contemplarlo con unos ojos de cangrejo” (Poema 16) “No hay más que piernas y brazos por todas partes: bajo los asientos, entre los durmientes de la vía, sobre las redes donde se colocan las valijas” (Poema 20) 
Storni utiliza símbolos relacionados con el cuerpo y la sexualidad para expresar sus ideas y emociones. Explora las transformaciones físicas, las sensaciones y los desafíos que enfrenta una mujer en una sociedad patriarcal. Alfonsina escribe su poesía partiendo de una situación inicial adversa que no le gusta, que le hace ruido. Esa voz, se tamiza, se filtra, se incorpora en la tierra y en el fondo del mar. El cuerpo se convierte en una fuente de poder y resistencia, que en la naturaleza esos cuerpos vuelven a ser cuerpos. Cuando escribe, la poeta ya está desplazada, salida de sus casillas y lleva su poesía a un estado de trance cíclico. “(Piernas de cazadora, suelta la cabellera, Y el fino seno blanco celoso de su arranque)” (Verso decorativo) 
“Un bosque de piernas, un torbellino de círculos rodantes, una nube de gritos y ruidos, me separan la cabeza del tronco, las manos de los brazos, el corazón del pecho, los pies del cuerpo, la voluntad de su engarce” En esta cita se puede observar cómo la poética de Storni se asemeja a la de Girondo, los dos juegan con los cuerpos, los desmembran y le dan nueva significancia. 
Storni utiliza imágenes de la naturaleza, en particular el mar, para simbolizar la libertad, la fuerza y la liberación de las limitaciones impuestas por la sociedad. El mar representa un espacio vasto y salvaje donde se pueden encontrar respuestas y buscar la emancipación. También puede simbolizar la inmensidad de los deseos y los anhelos internos de la poeta. “En las bellas mañanas, cuando miras Las ventanas abiertas, Tus brazos verdes y jugosos, buscan El espacio sin vidrios, y penetran Al interior del cuarto: —buenos días! Tus corolas intentan Decir con sus rosados labiezuelos a la modesta pieza”.
“Mueres de sed: no he de oprimirte tanto... Anda, camina por el mundo, sabe; Dispuesta sobre el mar está tu nave: Date a bogar hacia el mejor encanto”. 
Quiroga emplea el simbolismo de la naturaleza y la utiliza como escenario para explorar la fragilidad y la brutalidad de la vida humana. La selva y la flora y fauna tropical son símbolos de extremo peligro y que, casi siempre derivan en la muerte. A través de descripciones detalladas y vividas, crea un ambiente amenazador que refleja los conflictos y las tensiones internas de los personajes. “Desde las sierras escalonadas del Paraguay, desde la cuenca fluvial del sudeste, llegaba una impresión de humedad, de selva mojada y caliente. Pero mientras en todos los confines del horizonte los golpes de agua lívida rayaban el cielo, San Ignacio continuaba calcinándose ahogado” (El techo de incienso) “No hicieron los destiladores en esos duros días más que cortar y cortar, estrujar y estrujar naranjas bajo un sol de fuego y almibarados de zumo de la barba a los pies” (Los destiladores de naranja) 
Los animales, también desempeñan un papel destacado en el imaginario de Quiroga. Representan la fuerza primitiva, el instinto y la violencia latente en la naturaleza humana. Los animales en sus cuentos adquieren características humanas o se convierten en metáforas de los impulsos y deseos incontrolables del ser humano. Los encuentros y las interacciones con animales pueden simbolizar la lucha entre el hombre y la naturaleza, así como los conflictos internos y la inevitabilidad de la muerte “por sus piernas trepaba un precipitado río de hormigas negras. Alrededor de él la corrección devoradora oscurecía el suelo, y el contador sintió, por bajo del calzoncillo, el río de hormigas carnívoras que subían” (La miel silvestre) “El hombre pisó algo blanduzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento vio una yararacusú que arrollada sobre sí misma esperaba otro ataque” (A la deriva).

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