Logo Studenta

Caso Dora

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
1 
Fragmento de análisis de un caso de histeria (1905 [1901]): Caso Dora. 
 
Nota introductoria (habla del contexto en el que Freud desarrolló este trabajo): 
 
- El título original iba a ser “Sueños e Histeria, fragmento de un análisis”. 
- Las elucidaciones del caso versan en torno a dos sueños; por esto es una continuación 
del libro La interpretación de los sueños (1900). 
- Este trabajo contiene: soluciones de síntomas histéricos y consideraciones acerca del 
fundamento sexual-orgánico de esa enfermedad. 
- Lo fundamental de este trabajo es lo psicológico: apreciación de la importancia de los 
sueños y la descripción de algunas peculiaridades de las representaciones inconscientes. 
- Se trata de una histeria con tussis nervosa y afonía, que se reconducen a las 
características propias de una “chupadora”. En los procesos psíquicos conflictivos, el papel 
principal lo desempeña la oposición ante una inclinación hacia el hombre y otra hacia la 
mujer. 
- Este trabajo es un eslabón escrito entre La interpretación de los sueños y Tres ensayos de 
teoría sexual. 
 
Palabras preliminares 
 
- Tratamiento: no superó los 3 meses. Esto muestra por qué Freud no pudo obtener una 
solución definitiva a los síntomas y por qué sus resultados analíticos tienen carácter 
incompleto. 
- Freud redactó el historial clínico después de concluida la cura y apoyándose sólo en su 
memoria. 
- Freud intenta mostrar cómo la interpretación de los sueños se entreteje en el historial de 
un tratamiento y cómo con su ayuda permiten llenarse las amnesias y esclarecerse los 
síntomas. 
- Freud utiliza cierta técnica: el enfermo mismo determina el tema de trabajo cotidiano; 
esto le permite partir de la superficie que el inconsciente ofrece a su atención. 
- Otra insuficiencia del trabajo es que Freud no expuso el trabajo interpretativo al que 
sometió las ocurrencias y comunicaciones de la paciente, sino solo sus resultados. Esto fue 
así porque a Freud solo le interesaba poner de relieve el determinismo de los síntomas 
 
Cuadro clínico: Fechas a tener en cuenta para orientarse a lo largo del caso: 
 1882: nacimiento de Dora 
 1888: el padre se enferma de tuberculosis y la familia se traslada a B 
 1889: enuresis 
 1890: a los 8 años Dora tiene disnea 
 1892: el padre tiene un desprendimiento de retina 
 1894: el padre sufre un ataque de confusión y lo atiende Freud. Dora tiene migraña 
 y tussis nervosa 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
2 
 1896: a los 14 años es la escena del beso (entre Dora y el Señor K, en su tienda) 
 1898: a los 16 años Dora acude por primera vez al consultorio de Freud. Más 
 adelante en Junio ocurre la escena del lago (con el Señor K) 
 1899: a los 17 años Dora tiene apendicitis 
1900: a los 18 años Dora hace el intento de suicidio. Inicia el tratamiento con Freud 
de octubre a diciembre 
 1901: Freud escribe el historial clínico 
 1902: es la última oportunidad en que Dora acude al consultorio de Freud 
 1905: Freud publica el historial clínico 
 
- Freud dice que los sueños: 
+ son uno de los caminos para que llegue a la conciencia aquél material psíquico 
que, por la aversión que genera su contenido, fue bloqueado de la consciencia, fue 
reprimido y así se volvió patógeno. 
+ son uno de los rodeos por los que puede sortear la represión 
+ son uno de los principales recursos de la figuración indirecta en el interior de lo 
psíquico. 
- En todo historial clínico se debe atender tanto a las condiciones humanas y sociales 
como a los datos somáticos y a los síntomas patológicos del paciente. Su interés se enfoca 
sobre todo en las relaciones familiares de los pacientes. 
 
- El círculo familiar de Dora: 
- Padre: 
_ persona dominante por su inteligencia, sus rasgos de carácter y 
sus circunstancias de vida. Éstas proporcionaron el armazón en 
torno al cual se edificó la historia infantil y patológica de la paciente. 
_ tenía una gran industria y una situación material muy holgada. 
- Madre: 
_ mujer de escasa cultura, poco inteligente. 
_ tras la enfermedad de su marido y el distanciamiento, concentró 
sus intereses en la economía doméstica, dando como resultado el 
cuadro de psicosis de ama de casa. 
_ no se ocupaba de los intereses de sus hijos. 
_ relación madre-hija: era inamistosa; Dora no hacía caso a su 
madre, la criticaba duramente y se sustrajo por completo de su 
influencia. 
- Hermano mayor: 
_ había sido el modelo al cual ambicionaba parecerse, en épocas 
anteriores, pero en los últimos años su relación se había vuelto más 
distante. 
 
- Relación padre-hija: 
_ Dora estaba apegada a él con particular ternura, y ésta se había acrecentado por 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
3 
las enfermedades que el padre padeció desde que ella cumplió 6 años: 
+ Se enfermó de tuberculosis y la familia se trasladó a una pequeña ciudad 
que será llamada B, donde había mejor calidad de aire y se convirtió en el 
lugar principal de residencia de la familia. 
+ Cuando Dora tenía 10 años, el padre sufrió de desprendimiento de retina 
y tuvo como consecuencia la disminución permanente de visión. 
+ La dolencia más seria fue un ataque de confusión, seguido por 
manifestaciones de parálisis y ligeras perturbaciones psíquicas. Aquí acude 
a la consulta de Freud, quien le diagnostica una afección vascular difusa. El 
paciente confiesa que antes del matrimonio contrajo una infección 
específica y Freud le recomendó una cura antiluética con la que cedieron 
todas las perturbaciones que tenía. Frente a esta satisfacción, el padre le 
presentó a Freud a su hija cuando ésta tenía 16 años, y pasados dos años 
más, ésta comienza definitivamente el tratamiento. 
- La familia paterna tenía también enfermedades: 
_ la hermana del padre tenía una grave forma de psiconeurosis y 
_ el hermano del padre era hipocondríaco. 
_ Freud dice que de esta familia le venían a Dora tanto sus dotes 
intelectuales como su disposición a enfermar. 
 
 8 años: Dora presentaba síntomas neuróticos: contrajo una disnea permanente, en 
forma de ataques muy agudos, que apareció tras una pequeña excursión por las 
montañas y fue atribuido a un surmenage. Su hermano solía contraer la enfermedad 
en grado leve y ella seguía con manifestaciones más serias. 
 12 años: aparecieron migrañas y ataques de tos nerviosa. Luego la migraña 
desaparece a los 16 años y los ataques de tussis nervosa, que iniciaron como un 
catarro común, perduraron todo el tiempo hasta en el análisis con ya 18 años de edad. 
En los últimos años, el síntoma más molesto era una afonía total. 
- Intentaron con distintos tratamientos pero ninguno había dado resultado. 
 16 años: Freud la ve por primera vez. Ella sólo acudió por la palabra autoritaria del 
padre. En ese entonces estaba aquejada de una tos y afonía, que desapareció 
espontáneamente. Durante el invierno del año siguiente estuvo en Viena en casa de su 
tío y tuvo unos cuadros febriles que se diagnosticó como apendicitis. 
 
- Dora había crecido y los signos principales de su enfermedad eran una desazón y una 
alteración del carácter. No estaba satisfecha consigo misma ni con los suyos. Se 
enfrentaba hostilmente a sus padres y evitaba el trato social. 
- Un día sus padres se horrorizan cuando encuentran una carta de suicidio en la que Dora 
se despedía porque ya no podía soportar la vida. Tras una discusión entre padre e hija, 
esta sufrió un primer ataque de pérdida de conocimiento (del cual persistió una amnesia). 
El padre ante esta situación decide poner a Dora bajo el tratamiento de Freud. 
- Freud la describe como una Petite hystérie (pequeña histeria) con los más corrientes 
síntomas somáticos y psíquicos: disnea, tussis nervosa (tos nerviosa), afonía, migrañas, 
desazón, insociabilidad histérica y taedium vitae (tedio vital). 
 
Este archivo fue descargadode https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
4 
- Es el padre de Dora el que le informa a Freud de toda la situación. 
- Cuando padre e hija fueron a ver a Freud, estaban a punto de viajar para encontrarse con 
los K, con quienes pasarían el verano. Dora iba a pasar varias semanas en casa de los K, 
mientras que el padre se había propuesto regresar a los pocos días. Pero cuando el padre 
estaba haciendo los preparativos para regresar, Dora declaró que viajaría de regreso con 
él. Algunos días después, explicó su repentina conducta contando a su madre que: 
 
 
 
 
- El padre y el tío de Dora increparon al Señor K, y éste dijo desconocer tal acción y que 
debe haber sido una fantasía de Dora porque, por lo que le contó la Señora K, ella sólo 
tenía interés por asuntos sexuales y leía libros de esa temática. 
 
 
 
- El padre no puede hacerlo porque considera que lo que Dora dijo del Señor K es una 
fantasía de ella, y porque lo une a la Señora K una sincera amistad: son dos seres que se 
consuelan el uno al otro. 
- El último ataque de Dora le sobrevino después de una discusión con su padre donde le 
hizo el mismo pedido. El padre de Dora le dice a Freud que la ponga en el “buen camino”. 
 
- Dora comunicó a Freud una vivencia anterior con el Señor K que es apropiada para 
producir el efecto de un trauma sexual: 
 
- Esta situación en cualquier muchacha virgen habría causado una sensación de excitación 
sexual, pero Dora sintió asco y salió corriendo de la tienda. Por un tiempo evitó 
encontrarse con el Señor K, todo prosiguió como si esa escena nunca ocurrió. 
- Freud determina que ya en esta época (14 años) convendría llamar la conducta de Dora 
como “histérica”. 
 
Él y su familia habían trabado una íntima amistad en B. con un matrimonio que residía 
allí desde hacía varios años: la Señora K lo había cuidado durante su larga enfermedad, 
y el Señor K siempre se había mostrado muy amable hacia Dora, salía de paseo con ella 
y le hacía pequeños obsequios. Dora incluso atendía a los hijos del matrimonio K, les 
hacía de madre. 
 
El Señor K durante una caminata, tras un viaje por el lago, le había hecho 
una propuesta amorosa. (Escena conocida como la escena del lago) 
 
Dora le pide a su padre que rompa relaciones con el Señor K y, 
particularmente, con la Señora K. 
 
Tenía 14 años. El Señor K había quedado con ella y su mujer que, después del 
mediodía, las damas vendrían a su tienda. El Señor K hizo que su mujer se quedara en 
casa, despachó a los empleados y estaba solo cuando Dora entró al negocio. 
Pidió a Dora que espere en la puerta mientras él bajó las cortinas y cuando regresó le 
estampó un beso en los labios. 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
5 
 
- Freud plantea que se ha producido un trastorno de afecto sumado a un desplazamiento 
de la sensación: 
1- en lugar de la sensación genital que habría sentido una muchacha sana, le 
sobreviene una sensación de displacer propia de la mucosa del tramo de entrada 
del aparato digestivo (asco). Este asco sólo estuvo en el análisis de manera 
potencial, no permanente: confesaba cierta repugnancia por los alimentos. 
2- Esa escena le dejó una alucinación sensorial que le sobrevenía a veces: sentía la 
presión del brazo del Señor K sobre la parte superior de su cuerpo. En base a esto, 
Freud dice que durante el apasionado abrazo, ella no sintió meramente el beso 
sobre sus labios, sino la presión del miembro erecto contra su vientre. Esta 
percepción fue eliminada del recuerdo, fue reprimida y sustituida por la sensación 
de presión en el tórax. Este es otro desplazamiento del sector inferior al sector 
superior del cuerpo. 
3- Otra particularidad de Dora luego de la escena es que no quería pasar junto a 
ningún hombre a quien viera en tierno o animado coloquio con una dama. 
 
- Freud determina 3 síntomas que provienen de una misma vivencia: 
1- el asco: corresponde al síntoma de represión de la zona erógena de los labios. 
(Para resaltar, Freud acá dice que el asco es un síntoma pero abajo dice que es una 
manifestación de afecto, así que no se confundan por más que diga que es un 
síntoma, los profes siempre remarcan que es un afecto no un síntoma). 
2- la sensación de presión en la parte superior del cuerpo, en el tórax: la presión 
del miembro erecto provocó una alteración en el clítoris, la excitación de esta zona 
quedó fijada en el tórax por el desplazamiento de la sensación de presión. 
3- el horror a los hombres en una situación tierna: este obedece al mecanismo de 
una fobia destinado a protegerla contra una revivencia de la percepción reprimida. 
 
- Freud deduce que la sensación de asco parece ser originariamente la reacción frente al 
olor de los excrementos. Ahora bien, los genitales y en especial el miembro masculino, 
pueden recordar las funciones excrementicias porque aquí el órgano, además de servir a 
la función sexual, sirve a la micción. Así el asco se incluye entre las manifestaciones de 
afecto de la vida sexual. 
 
- Dora no podía perdonarle a su padre que continuase tratando con el Señor K, y en 
particular, con la mujer de este. 
 
 
 
Freud llama HISTÉRICA a toda persona, sea o no capaz de producir síntomas 
somáticos, en quien una ocasión de excitación sexual provoca predominantemente 
o exclusivamente sentimientos de displacer. 
Dora no tenía dudas de que su padre había entablado con esa mujer 
joven y bella una vulgar relación amorosa. 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
6 
 
- El trato con la Señora K sólo se volvió íntimo cuando el padre enferma de gravedad y ella 
hace de su cuidadora. Hubo acontecimientos que daban cuenta de esa relación entre 
ambos: 
- en las vacaciones de verano ambas familias alquilaron un pabellón de un hotel; 
tanto el Padre como la Señora K abandonaron sus habitaciones iniciales y se 
mudaron a otras alejadas de sus familiares y separadas entre sí por un pasillo; 
- Dora los había visto juntos en el bosque y frente a sus reproches, el padre se 
había inventado una historia de un intento de suicidio suyo para justificar su cita. 
- el padre iba todos los días a la casa de la Señora K, a ciertas horas en que no 
estaba su esposo. 
- a veces el padre decía que no podía soportar el clima y que debía volver a B por 
su salud. Todas esas enfermedades eran pretextos para volver a ver a su amiga. 
- el padre decide mudarse a Viena. Dora empieza a sospechar una combinación y 
se entera que el matrimonio K hacía ya varias semanas que se había traslado a esa 
ciudad. Dora solía encontrarse por la calle al padre con la Señora K, y a veces 
también se encontraba con el Señor K, que la seguía con la mirada y la perseguía 
para ver si no iba a una cita. 
- No había duda de que la Señora K le aceptaba dinero al padre, porque hacía gastos que 
no podía solventar con sus recursos o los de su marido. El padre le empezó a hacer 
grandes regalos a la Señora K, y para encubrirlos se volvió generoso con Dora y su madre a 
quienes también les hacía regalos. 
 
 
Tanto el padre como el Señor K evitaban hablar de la situación y no exponían la 
conducta del otro por miedo a que saliera a la luz lo que ellos hacían. Esto permitió 
que el Señor K pueda obsequiar a Dora un ramo de flores todos los días y por todo 
un año, hacerle regalos costosos y pasar con ella todo su tiempo libre sin que los 
padres de ella discernieran esta conducta como algo amoroso. 
 
- Freud dice que todo esto que Dora cuenta está correctamente fundado y plantea que 
unos reproches dirigidos a otras personas hacen sospechar de autorreproches de idéntico 
contenido. 
 
Dora tenía razón en que su padre no quería aclararse la conducta del Señor K hacia 
su hija para no ser molestado en su relación con la Señora K, pero Dora había 
hecho exactamente lo mismo: se había vuelto cómplice de esa relación,y había 
hecho lo posible para encubrirla. Solamente desde la aventura en el lago, la 
Cuando Dora estaba de mal humor, se le imponía la idea de que había sido 
entregada al Señor K como precio por la tolerancia que este mostraba hacia las 
relaciones entre su padre y la señora K. 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
7 
situación entra en crisis y Dora comienza con los reproches al padre. 
 
- En casa de Dora, había una gobernanta (señorita mayor y leída sobre temas sexuales) 
que le abrió los ojos sobre las relaciones del padre con la Señora K, y quiso incitarla a 
tomar partido en contra de esta mujer. Dora hizo caso omiso, y llegó a irritarse con la 
gobernanta porque estaba enamorada de su padre. Dora se molestó cuando notó que ella 
era indiferente para la gobernanta, y que el amor que le mostraba en realidad iba dirigido 
al padre (se mostraba servicial y amable con Dora sólo cuando estaba su padre). El 
comportamiento que la gobernanta tenía a veces hacia Dora, era el mismo que Dora había 
tenido hacia los hijos del Señor K: les hacía de madre sustituta, salía con ellos. 
 
 
- El compartido interés por los niños había sido un medio de unión en el trato entre 
el Señor K y Dora. De su conducta hacia los niños se extraía la misma conclusión 
que de su tácito consentimiento al trato de su padre con la Señora K: todos esos 
años, ella había estado enamorado del Señor K. Si bien Dora dice que esto no es 
así, más adelante parece reconocer que estando en B estaba enamorada del Señor 
K, pero desde la escena del lago quedó todo superado. 
 
- Vale remarcar que el reproche que ella dirigía contra el padre, recaía sobre su propia 
persona. 
 
 
 
 
 
- El otro reproche de que “su padre creaba enfermedades como pretextos y las 
explotaba como un recurso” coincide también con todo un fragmento de su propia 
historia secreta: 
 
- Cierto día se quejó de un supuesto nuevo síntoma: unos fuertes dolores de 
estómago y Freud le pregunta a quién se lo está copiando: el día anterior había 
visitado a sus primas. La más joven había formalizado noviazgo y con esto la mayor 
sufría dolores de estómago, y Dora pensaba que era envidia. 
- Sus propios dolores de estómago decían que Dora se identificaba con su prima, 
ya sea porque envidiaba el amor de la prima más joven o porque veía 
representado su destino en el de la hermana mayor, que poco antes había tenido 
una relación amorosa de final desdichado. 
 
- Dora también se percata que la Señora K se enfermaba cada vez que el Señor K volvía de 
algún viaje. Dora comprendió que era la presencia del marido lo que hacía enfermar a la 
mujer y lo que le permitía sustraerse de los deberes conyugales. Dora hacía exactamente 
lo mismo durante los primeros años que pasó en B. 
“haber hecho oídos sordos a ciertos deberes irrenunciables y haber arreglado las 
cosas de la manera más cómoda para su propio enamoramiento” 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
8 
 
 
- Dora había presentado gran cantidad de ataques de tos con afonía. La duración 
media de estos ataques era de 3 a 6 semanas. Justamente, la misma duración de 
ausencia del Señor K. 
- Así con sus enfermedades, Dora demostraba su amor por el Señor K: enfermaba 
cuando él estaba ausente y sanaba cuando él regresaba. 
- En los primeros días de su afonía la escritura le fluía con particular facilidad de la 
mano. El Señor K le escribía mucho cuando estaba de viaje, le enviaba postales. 
 
 
 
 
 
 
- Freud plantea que todo síntoma histérico requiere la contribución de dos partes: lo 
psíquico y lo somático. 
_No se produce si no posee un significado psíquico, un sentido: el síntoma 
histérico no lo trae consigo, sino que le es prestado y puede ser diverso de acuerdo 
con la naturaleza de los pensamientos sofocados que buscan expresarse. Así los 
síntomas se solucionan en la medida en que se explora su intencionalidad psíquica. 
_No puede producirse sin cierta solicitación (transacción) somática: brindada por 
un proceso normal o patológico en el interior de un órgano del cuerpo, o relativo a 
ese órgano. La solicitación somática se agrega de manera secundaria y le brinda a 
los procesos psíquicos inconscientes una salida hacia lo corporal. Esta solicitación 
somática es el carácter particular de la histeria. 
 
- Freud tuvo que llamar la atención sobre el hecho de que su actual enfermedad 
respondía a motivos y era tendenciosa tanto como la de la Señora K. Ella tenía en vista un 
fin que esperaba alcanzar mediante su enfermedad. 
 “hacer que el padre se alejase de la Señora K” 
 
- Observaciones generales sobre el papel de los motivos de la enfermedad en el caso de la 
histeria: 
 _ no son lo mismo que las posibilidades de enfermedad. 
 _ no participan de la formación de síntoma, ni siquiera tienen existen en el 
 comienzo de la enfermedad; sólo secundariamente se agregan. 
 _ sólo con su advenimiento se constituye plenamente la enfermedad. 
_ en la vida psíquica el síntoma aparece primero como un huésped mal 
recibido y por eso se desvanece fácilmente con el paso del tiempo. Al 
comienzo no cumple ningún cometido útil dentro de la economía psíquica, 
pero muy a menudo lo obtiene secundariamente cuando una corriente 
psíquica halla cómodo servirse del síntoma, y entonces éste alcanza una 
 La afonía de Dora admitía esta interpretación: cuando el amado estaba lejos, ella 
renunciaba a hablar; el hacerlo perdía valor, pues no podía hablar con él. En cambio, la 
escritura cobraba importancia como el único medio por el cual podía tratar con el 
ausente. 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
9 
función secundaria y queda anclado en la vida anímica. 
_ el motivo para enfermar es en todos los casos, el propósito de obtener 
una ganancia. 
_ el enfermarse ahorra una operación psíquica, se presenta como una 
solución económicamente más cómoda frente a un conflicto psíquico. 
_a menudo, los motivos para enfermar empiezan a obrar ya en la infancia: 
la niña hambrienta de amor que comparte con sus hermanos la ternura de 
los padres observa que esta vuelve a afluirle si ella enferma y causa 
inquietud en los padres; ahora conoce un medio para granjearse el amor de 
sus padres. 
 
 
 
 
- Ningún proceder parecía irritar tanto a Dora como el pensar que la escena junto al lago 
era un producto de su fantasía. Freud concluye que el relato de Dora era verdad. En esa 
escena del lago, apenas Dora comprende los propósitos del Señor K no lo deja explicarse y 
le da una cachetada en el rostro y escapa. 
 
- Como las acusaciones contra el padre se repetían con monotonía, y al hacerlas ella tosía 
continuamente, Freud piensa que este síntoma debería tener un significado referido al 
padre. 
 
Freud plantea que por lo menos uno de los significados de un síntoma 
corresponde a la figuración de una fantasía sexual, mientras que los otros 
significados no están sometidos a esa restricción. Un síntoma tiene más de 
un significado y sirve para la figuración de varias ilaciones inconscientes de 
pensamiento. 
 
- Interpretación de la tos nerviosa a partir de una situación sexual fantaseada: 
_cuando Dora decía que la Señora K sólo amaba a su papá por ser un hombre de 
recursos, Freud nota que tras esa frase se ocultaba su contraria: que el padre era 
un hombre sin recursos. Esto sólo podía entenderse sexualmente: no tenía 
recursos como hombre, era impotente. Dora confirma esto por su conocimiento 
consciente, y remarca que hay más de una manera de satisfacción sexual, 
aludiendo al uso de otros órganos que en ella misma se encontraban en estado de 
irritación; es decir la garganta y cavidad bucal. 
_con su tos espasmódica ella se representaba una situación de satisfacción sexual 
per os entre las dos personas cuyo vínculo amoroso la ocupa tan de continuo:su 
padre y la Señora K. 
 
 La tos desaparece con este esclarecimiento 
 
La meta que Dora buscaba conseguir mediante su enfermedad era mover a 
compasión al padre y hacerlo apartarse de la Señora K. 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
10 
+ Siempre en el tratamiento de una histeria uno debe convencerse de que es inevitable 
tocar temas sexuales. Tiene que ser posible hablar sin indignarse de las perversiones 
sexuales entendidas como transgresiones de la función sexual tanto en el ámbito del 
cuerpo cuanto en el del objeto sexual. 
+ Las perversiones no son bestialidades ni degeneraciones; sino que son desarrollos de 
gérmenes contenidos en la disposición sexual indiferenciada del niño, cuya sofocación o 
vuelta hacia metas más elevadas asexuales o sublimatorias, están destinadas a 
proporcionar la fuerza motriz de logros culturales. Toda vez que alguien ha devenido 
perverso, ha permanecido tal: ejemplifica un estadio de inhibición del desarrollo. 
+ Todos los psiconeuróticos son personas con inclinaciones perversas muy marcadas pero 
reprimidas y devenidas inconscientes en el curso del desarrollo. Sus acciones 
inconscientes tienen idéntico contenido que las acciones que se observan en el perverso. 
Por esto, se considera que las psiconeurosis son el negativo de las perversiones. 
+ La constitución sexual, en la que va contenida también la expresión de la herencia, 
coopera en los neuróticos con influencias accidentales que sufrieron en su vida y 
perturbaron el despliegue de la sexualidad normal (tiene que ver con las series 
complementarias). 
+ Las fuerzas impulsoras para la formación de síntomas histéricos no provienen sólo de la 
sexualidad normal reprimida, sino también de las mociones perversas inconscientes. 
_ No es asombroso que Dora tuviera conocimiento de la existencia de esa clase de 
comercio sexual (la succión del miembro viril), hubiera desarrollado una fantasía 
inconsciente de esa índole, y la expresara a través de la sensación de estímulo en la 
garganta y la tos. 
_ Un hecho notable proporcionaba en ella la precondición somática para la creación 
autónoma de esta fantasía: Dora en su infancia había sido una chupeteadora. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
- La mucosa de los labios y de la boca pueden considerar una zona erógena primaria, pues 
una parte de esa satisfacción se ha conservado en el beso. La intensa activación de esta 
zona erógena a temprana edad es la condición para la posterior solicitación somática de 
parte del tracto de mucosa que empieza en los labios. 
- Esta fantasía perversa de la succión del pene tiene un origen inocente: es la nueva 
versión de una impresión prehistórica, la de la succión del pecho de la madre. 
 
Escena donde Dora estaba sentada en el suelo, en un rincón, 
chupándose el pulgar de la mano izquierda, mientras con la 
derecha daba tironcitos al lóbulo de la oreja de su hermano que 
estaba quieto, sentado. Costumbre que le duró hasta el cuarto o 
quinto año. 
 
Esta es la manera 
completa de 
autosatisfacción 
por el chupeteo 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
11 
- Otra observación sobre la interpretación del síntoma de la garganta de Dora: 
_ Freud se pregunta cómo se relaciona esta situación sexual fantaseada con la otra 
explicación: que el advenimiento y desaparición de las manifestaciones patológicas 
imitaba la presencia/ausencia del hombre amado (Señor K). 
 
 
+ Freud dice que no es necesario que los diversos significados de un síntoma sean 
compatibles entre sí. 
+ Un síntoma también puede expresar varios significados sucesivamente. El síntoma 
puede variar uno de sus significados o su significado principal en el curso de los años pero 
hay un rasgo conservador en el carácter de la neurosis: el hecho de que el síntoma ya 
constituido se preserva por más que el pensamiento inconsciente (que se expresa en el 
síntoma) haya perdido significado. 
+ Freud explica que es tan difícil la producción de un síntoma así y que requiere de 
muchas condiciones favorables para que ocurra y que en vez de crear una nueva 
conversión, parece más fácil producir nuevos vínculos asociativos entre un pensamiento 
nuevo urgido de descarga y el antiguo, que ha perdido esa urgencia. Así fluye la excitación 
desde su nueva fuente hacia el lugar anterior de la descarga (metáfora del síntoma que se 
asemeja a un odre viejo que es llenado con vino nuevo). 
 
- Freud plantea que pueden existir pensamientos hiperintensos, hipervalentes o 
reforzados: 
_ en el caso Dora es la incesante repetición de los mismos pensamientos acerca de 
la relación entre su padre y la señora K. 
_ no pueden ser destruidos ni eliminados por más esfuerzos conceptuales 
conscientes y deliberados que haga la persona. 
_ debe su refuerzo a lo inconsciente, y el trabajo conceptual no puede resolverlo 
porque tras él se oculta otro pensamiento inconsciente y este último es casi 
siempre su opuesto directo. Uno de los pensamientos es consciente con 
hiperintensidad, pero su contraparte está reprimida e inconsciente. Esta 
constelación es resultado del proceso represivo; la represión a menudo se produjo 
por el esfuerzo del opuesto del pensamiento que reprimía. A esto, Freud llama 
refuerzo reactivo, y llama pensamiento reactivo al que se afirma en lo consciente 
con hiperintensidad y se muestra indestructible. El pensamiento reactivo retiene 
en la represión al repelido; pero al hacerlo, él mismo queda como taponado y 
resguardado del trabajo conceptual consciente. Entonces, hacer consciente el 
opuesto reprimido es el camino que permite sustraer su refuerzo al pensamiento 
hiperintenso. 
 
- Freud analiza y plantea que el pensamiento hipervalente de Dora sobre la relación de su 
padre con la Señora K puede originarse por 2 opciones: 
 
1) Origen por refuerzo directo: 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
12 
_La raíz de su preocupación compulsiva por la relación del padre con la Señora K le era 
desconocida porque residía en lo inconsciente. La conducta de Dora rebasaba la esperaba 
para una hija, se comportaba como una mujer celosa y evidentemente ocupaba el lugar de 
la madre. 
_ Si deducimos correctamente la fantasía referida a una situación sexual que estaba en la 
base de su tos, ella ocupaba en esa fantasía el lugar de la Señora K. 
_Así se identificaba con las dos mujeres amadas por el padre. 
_La conclusión: se sentía inclinada hacia su padre en mayor medida de lo que creía, pues 
estaba enamorada de él. 
 
Las muchas enfermedades que éste contrajo aumentaron la ternura de Dora hacia él, y 
cuando apareció la Señora K, fue Dora (y no su madre) la suplantada de su posición. 
 
2) Orígen por refuerzo reactivo 
a) Primera forma: 
_ Dora estaba enamorada de su padre, pero durante varios años no lo exteriorizó; 
más bien, mantuvo en ese lapso la más cariñosa armonía con la mujer que la había 
desalojado del lugar junto a él, y aun favoreció su relación con este, como sabemos 
por sus autorreproches. 
_Ese amor se había renovado en fecha reciente y podría ser como síntoma 
reactivo para sofocar alguna otra cosa que era todavía más poderosa en el 
inconsciente. Freud deduce que lo sofocado era el amor por el señor K; piensa que 
el enamoramiento de ella perduraba y que la muchacha había retomado y 
reforzado su vieja inclinación hacia el padre a fin de no tener que notar nada en su 
conciencia de ese primer amor adolescente que se le había vuelto penoso. Por una 
parte, le consternaba tener que rechazar la solicitud de ese hombre, sentía 
nostalgia por su persona y sus signos de ternura; por otra parte, poderosos 
motivos como su orgullo, se revolvían contra estas mociones de ternura y 
nostalgia. 
_De tal modo, dio en imaginar que había terminado con el Señor K y, no obstante, 
tenía que llamar en su auxilioy exagerar la inclinación infantil hacia el padre a fin 
de protegerse contra ese enamoramiento que asediaba permanentemente su 
conciencia. Dora no aceptó esta interpretación, sino hasta el final del análisis 
cuando se obtuvo una prueba correcta. 
 
b) Segunda forma: 
_ Tras el itinerario de pensamientos hipervalentes que la hacían ocuparse de la 
relación de su padre con la Señora K se escondía una moción de celos hacia esa 
mujer; una moción que sólo podía basarse en una inclinación hacia el mismo sexo. 
_ En los neuróticos existe una fuerte disposición homosexual y en mujeres y 
muchachas histéricas cuya libido dirigida al hombre ha experimentado una 
sofocación enérgica, por regla general hallamos reforzada vicariamente la libido 
dirigida a la mujer. 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
13 
_ Cuando Dora se hospedaba en casa de los K, compartía el dormitorio con la 
señora: el marido era desterrado. Era la confidente y consejera de la mujer en 
todas las dificultades de su vida matrimonial. Cuando Dora hablaba de la Señora K 
solía alabar su “cuerpo deliciosamente blanco” con un tono que era más el de una 
enamorada. Nunca se escuchó de boca de Dora una palabra dura sobre esa mujer; 
en quien, según sus pensamientos hipervalentes, habría de ver a la causante de su 
desdicha. 
_ Luego de la escena del lago, cuando Dora acusó al Señor K, él puso a la muchacha 
por el suelo y sacó a relucir los libros que lee. Aquí es la Señora K quien traiciona a 
Dora al contarle al Señor K sobre el libro de Mantegazza que leían y los temas 
prohibidos que hablaban. La Señora K la había sacrificado sin reparos a fin de no 
verse perturbada en su relación con el padre de Dora. Así Dora se repite lo 
ocurrido con la gobernanta: tanto ella como la Señora K no amaban a Dora por su 
propia persona sino por la del padre. 
_ Quizás esta afrenta tuvo mayor eficacia patógena que la otra con que pretendió 
encubrirla: que el padre la había sacrificado. 
 
- Freud concluye: el hipervalente itinerario de pensamientos de Dora que la hacía 
ocuparse de la relación de su padre con la señora K, no estaba destinado sólo a sofocar el 
amor por el Señor K (amor que antes fue consciente), sino que también debía ocultar el 
amor por la Señora K, inconsciente en un sentido más profundo. 
- Respecto de esto último, aquellos pensamientos mantenían la relación de su opuesto 
directo. Dora decía sin cesar que su padre la había sacrificado a esa mujer haciendo ver 
que no la dejaría poseer a su papá, y de ese modo se ocultaba lo contrario: no dejaría al 
papá poseer el amor de esa mujer, que no le perdonaba a la mujer amada el desengaño 
que le causó su traición. 
 
 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
14 
Primer sueño 
 
 
 
 
 
 
- es un sueño recurrente. 
- Dora no recuerda cuándo lo soñó por primera vez, sin embargo Freud dice que puede 
demostrarse que lo soñó por primera vez en L (el lugar donde ocurrió la escena del lago 
con el Señor K) y que lo tuvo tres noches sucesivas y había vuelto a tenerlo unos días antes 
en Viena. 
- Freud exhorta a Dora a que le comunique lo que se le ocurra sobre el sueño, y Dora 
comenta que “en estos días su padre tuvo una disputa con mamá, porque ella cierra por la 
noche el comedor. Sólo se puede llegar a la habitación del hermano de Dora por el 
comedor. El papá de Dora no quiere que su hermano quede encerrado por la noche, 
porque algo podría pasar que obligase a salir.” 
 
 
Esto se relaciona con una vez, cuando Dora y su papá llegaban a L, y él 
expresó su angustia por el hecho de que pudiera producirse un incendio 
porque llegaron en medio de una tormenta y la cabaña no tenía pararrayo. 
 
- Dora había tenido el sueño después de la escena en el bosque con el Señor K, por ende 
Freud deduce que el sueño era una reacción frente a aquella vivencia. 
 
_ Dora comenta que a la siesta del día de su viaje por el lago, del que el Señor K y ella 
regresaron al mediodía, ella se había acostado sobre el sofá en el dormitorio. Dora se 
despertó y vio al Señor K en frente de ella. 
 
 Al igual que estaba su padre en su sueño frente a su cama. 
 
Dora increpa al Señor K sobre qué está haciendo y él dice que no dejará de entrar a su 
habitación cuando quisiese. Dora se alerta y le solicita a la Señora K una llave de la 
habitación. Cuando a la siesta quiere encerrarse para recostarse de nuevo, faltaba la llave 
y estaba segura que el Señor K la había quitado. 
 
He aquí el tema que se presenta en el sueño 
de cerrar o dejar abierta la habitación. 
 
- Las mañanas que siguieron Dora tenía miedo de que el Señor K la sorprendiera mientras 
se hacía la toilette y tenía que vestirse con rapidez. Como en el sueño 
 
“En una casa, hay un incendio; mi padre está frente a mi cama y me despierta. Me 
visto con rapidez. Mamá pretende todavía salvar su alhajero, pero papá dice: “No 
quiero que yo y mis dos hijos nos quememos a causa de tu alhajero”. 
Descendemos de prisa por las escaleras, y una vez abajo me despierto” 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
15 
- Freud dice que entiende que en la siesta del segundo día Dora se hizo el designio de 
sustraerse de esas persecuciones (que el Señor K la sorprendiera mientras se vestía), y 
entonces la segunda, tercera y cuarta noche que siguieron a la escena en el bosque tuvo 
tiempo de repetirse ese designio mientras dormía. A la segunda siesta, antes del sueño, 
Dora sabía que a la mañana siguiente no encontraría la llave para encerrarse mientras se 
vestía. Pero su sueño se repitió cada noche porque respondía a un designio y un designio 
persiste hasta que se lo ejecuta. Acaso Dora se dijo: “no tendré tranquilidad, no podré 
dormir tranquila hasta que no me encuentre fuera de esta casa”. 
 
 
Lo inverso dice Dora en el sueño: “una vez abajo me despierto”. 
 
- Teoría acerca del mecanismo de la formación del sueño: 
_ Todo sueño es un deseo al que se figura como cumplido. 
_ La figuración es encubridora cuando se trata de un deseo reprimido, que 
pertenece al inconsciente. 
_ Exceptuando el caso de los sueños infantiles, sólo el deseo inconsciente o que 
alcanza hasta el inconsciente tiene la virtud de formar un sueño. 
_ La tesis general de Freud restringe el sentido de los sueños a la figuración de 
deseos. 
 
- Interpretación e ideas en torno al alhajero del sueño el que su madre quiere salvar: 
 
_ A su mamá y a Dora les gustan las alhajas. La madre quería unos pendientes de 
gotas de perlas pero al padre no le gustaban entonces le regaló una pulsera. Esto 
fue motivo de discusión, poniéndose ella furiosa y diciendo que ya que había 
gastado tanto dinero en regalarle algo que a ella no le gustaba, que se lo regalase a 
otra. 
 
_ Dora cuenta que el Señor K le había regalado un alhajero un tiempo atrás. Freud 
plantea que correspondía retribuir el obsequio y que “alhajero” es una designación 
para los genitales femeninos. Freud dice que Dora se siente perseguida por el 
Señor K, que él quiere penetrar en su habitación; que su “alhajero” corre peligro y 
si ocurre alguna desgracia la culpa será del padre. Por eso en el sueño Dora se ha 
escogido una situación que expresa lo contrario: hay un peligro del que su papá la 
salva. En esta parte del sueño todo está mudado en lo contrario. 
 
_ El secreto reside en su mamá y en su aparición en el sueño: ella es la primera 
competidora contra Dora en el favor de su papá. Freud le revela que ella estaría 
dispuesta a aceptar de buena gana la pulsera que la madre había rechazado. 
Sustituyendo el “aceptar” por el “dar”, tenemos que Dora estaría dispuesta a dar a 
su papá lo que su mamá le rehúsa y eso tendría que ver con una alhaja. 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora16 
_ Con el recuerdo de que el Señor K le obsequió un alhajero a Dora se establece 
una serie paralela de pensamientos en que su papá debe ser reemplazado por el 
señor K, tal como sucedía en la situación de la cama. 
 
El Señor K le obsequió un alhajero, entonces 
ahora Dora tiene que obsequiarle su alhajero, 
por eso Freud habla de retribución del 
obsequio. 
 
En esta serie de pensamientos, su mamá tiene que ser sustituida por la 
Señora K, quién sí estaba presente en L por aquél entonces en que tuvo el 
sueño. Por lo tanto, Freud interpreta que Dora está dispuesta a obsequiarle 
al Señor K lo que su mujer le rehúsa. 
 
- Freud concluye aquí que el sueño refresca su viejo amor por su papá a fin de protegerse 
de su amor por K. 
 
Esto demostraría que no sólo tuvo miedo del Señor K, sino que también 
temió ceder a la tentación; esto confirma la intensidad de su amor por él. 
Dora no quiso acompañar a Freud en esta interpretación. 
- Freud plantea que un sueño en regla se apoya en dos piernas: una de las cuales está en 
contacto con la ocasión actual y la otra con un episodio relevante de la infancia. Entre 
estas dos vivencias, la infantil y la presente, el sueño establece una conexión: procura 
refundir el presente según el modelo del pasado más remoto. 
 
 
El deseo que crea al sueño proviene siempre de la infancia; quiere 
transformarla una y otra vez en realidad, corregir el presente según la 
infancia. 
- Freud le pregunta a Dora si sabe por qué a los niños se les dice que no jueguen con 
fuego, ella responde que es por el peligro de un incendio y Freud agrega que se teme que 
se mojen en la cama. 
 
En la base de esto se encuentra la oposición de agua y fuego, acaso que 
sueñen con fuego hace que se vean tentados a apagarlo con agua. 
 
 
 Dora le presta claros servicios a esta oposición de agua y fuego en su sueño: 
 
 
_ En el sueño, la madre de Dora quiere salvar el alhajero para que no se queme; en 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
17 
cambio, en los pensamientos oníricos se trata de que el alhajero no se moje. Pero 
“fuego” no se emplea sólo como opuesto de “agua”; sirve también como 
subrogación directa de amor, de estar enamorado, abrasado. Así, desde fuego 
parten unos rieles que llegan hasta los pensamientos amorosos. 
_ Freud vuelve a plantearle a Dora la frase podría pasar algún percance que 
obligase a salir, y la entiende como una necesidad física y que, llevada a la infancia, 
no puede ser otra cosa que mojar la cama. Freud dice que lo que se hace para 
evitar que los niños mojen la cama es despertarlos por la noche. Como hace su 
padre en el sueño. Dora después admite que mojó la cama hasta el séptimo u 
octavo año, y habiendo consultado al doctor le diagnosticó una debilidad nerviosa. 
 
Este sería el episodio real del que Dora se vale para sustituir 
al Señor K que la despertó mientras ella dormía, por su papá. 
_ Más tarde Dora cuenta que todas las veces, tras despertar, había sentido olor a 
humo. Dora comenta que tanto su papá como el señor K eran fumadores 
apasionados, como también lo era Freud. El olor a humo apareció en los tres 
sueños seguidos que tuvo en L. 
Freud plantea que la sensación de humo se agregara tras haber vencido un 
particular esfuerzo de la represión que probablemente pertenecía al 
pensamiento mejor reprimido y más figurado en el sueño: la tentación de 
mostrarse complaciente con el hombre. Además la sensación de humo no 
significa otra cosa que la nostalgia de un beso que dado por un fumador 
sabe a humo. Freud relaciona estos pensamientos de tentación con el beso 
que tuvo Dora con el señor K. 
_ Freud se vale de los indicios de una posible transferencia sobre él para pensar lo 
siguiente: como él también es fumador, a Dora se le ocurrió un día en la sesión que 
desearía ser besada por él. Esta fue la ocasión que la llevó a repetir el sueño de 
advertencia y a formarse el designio de abandonar la cura. 
- Freud plantea la importancia que tiene el mojarse en la cama para la prehistoria del 
neurótico, y destaca que Dora no era en este aspecto el habitual: 
_ Este trastorno había proseguido más allá de lo normal, 
_ Este trastorno primero desapareció y volvió a aparecer después del sexto año de 
vida. 
_ La causa más probable de una enuresis de esta clase es la masturbación. 
- Dora había preguntado por qué había enfermado y antes de que Freud responda, echó la 
culpa al padre. La justificación para esto era un conocimiento consciente. Dora conocía de 
qué clase había sido la enfermedad del padre y ella oyó decir que él estaba enfermo antes 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
18 
de casarse. 
Por tanto, el padre había enfermado por llevar una vida disipada y ella suponía que 
le había contagiado la enfermedad por vía hereditaria. Esta ilación de 
pensamientos de acusación proseguía a través de un material inconsciente. 
- Dora se identificó con su madre en pequeños síntomas y singularidades: 
_ La madre padecía de dolores en el bajo viento y de un flujo (catarro), que 
hicieron necesaria una cura de aguas. Dora pensaba que esa enfermedad se la 
debía a su papá, quien había contagiado a su madre su afección venérea. Freud le 
pregunta a Dora si ella tenía alguna enfermedad venérea y Dora respondió que 
estaba aquejada por un catarro (fluor albus) que no podía recordar cuando 
empezó. 
- Tras la ilación de pensamiento que acusaba al padre, se escondía una autoacusación. 
Freud le asegura a Dora que el flour de las jóvenes solteras era un indicio de 
masturbación. Dora negó poder acordarse de haber hecho algo así en su infancia, pero 
días después hizo algo que se puede interpretar como una confesión: 
_ Llevó colgando una carterita portamonedas y jugaba con ella mientras 
hablaba tendida en el diván: la abría, introducía un dedo, volvía a cerrarla. 
 
+ Freud le explica que eso es una acción sintomática; es decir, aquellos manejos 
que el ser humano realiza de manera automática, inconsciente, como jugando. 
Tales acciones, de las que la consciencia nada quiere saber, expresan 
pensamientos e impulsos inconscientes. 
+ Hay dos modos de conducta consciente frente a las acciones sintomáticas: por un 
lado atribuirles una motivación corriente cuando se toma conocimiento de ellas, y 
por otro lado no reparar en que se las ejecuta. En el caso de Dora su motivación 
era fácil, ¿cómo no llevar una carterita así, que está tan de moda? 
+ Freud interpreta la carterita como una figuración de sus genitales, y su acción de 
juguetear abriéndola y metiendo un dedo adentro como la comunicación 
inconfundible de lo que querría hacer: la masturbación. 
- Dora tuvo otra acción sintomática: cuando Freud entra en la sala donde Dora esperaba, 
ella esconde rápidamente una carta que estaba leyendo. Freud pregunta de quién es y al 
principio, no quiere contárselo pero después lo hace. Se trataba de algo insignificante para 
la cura: era una carta de la abuela que la exhortaba a escribirle más a menudo. Freud 
entiende que ahora Dora se “dejaría arrancar” su secreto por el médico. Dora tenía 
renuencia frente a cualquier médico nuevo por la angustia de que pudiera llegar a saber la 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
19 
razón de su sufrimiento: la masturbación. 
Después de todos estos esclarecimientos, Freud considera 
establecida la prueba indiciaria de la masturbación infantil. 
+ Freud ya sospechaba de la masturbación cuando Dora le contó sobre los 
espasmos estomacales de la prima, identificándose luego con ésta y quejándose de 
idénticas sensaciones dolorosas. Es sabido que a los masturbadores les 
sobrevienen con frecuencia espasmos estomacales. 
- Los síntomas histéricos casi nunca se presentan mientras los niños se masturban, sino 
con la abstinencia; expresanun sustituto de la satisfacción masturbatoria, que seguirá 
anhelándose en el inconsciente hasta que aparezca una satisfacción más normal. En este 
punto suele insertarse una curación de la histeria por el matrimonio y el comercio sexual 
normal. 
- Freud dice que Dora se mojó en la cama hasta que tuvo su primera disnea. En esa época 
su papá había salido de viaje por primera vez después de su mejoría. Freud plantea que las 
acciones sintomáticas y otros indicios le proporcionaron razones para suponer que Dora, 
cuyo dormitorio era contiguo al de sus padres, espió con las orejas una visita nocturna del 
padre a su mujer y lo oyó jadear en el coito. 
 
+ Freud plantea que la disnea y las palpitaciones en la histeria y en la neurosis de 
angustia son fragmentos desprendidos de la acción del coito. 
+ El síntoma de Dora de la disnea y el asma nerviosa pueden reconducirse al 
mismo ocasionamiento: espiar con las orejas el comercio sexual de personas 
adultas. 
+ La coexcitación producto de esa vivencia pudo producir el ímpetu subvirtiente de 
la sexualidad en Dora, quien sustituyó la inclinación a masturbarse por la 
inclinación a la angustia. 
- Tiempo después, estando el padre ausente y extrañándolo Dora enamorada, se repitió 
como ataque de asma. Puede llegarse hasta la ilación angustiada de pensamientos que 
acompañó el ataque: 
El ataque de asma lo tuvo por primera vez tras haberse fatigado en una excursión a 
la montaña, durante la cual sintió una falta de aliento real. A esto se sumó la idea 
de que el padre tenía prohibido trepar montañas, no podía fatigarse por su 
hipopnea. Después, el recuerdo de cuánto se había esforzado por la noche con la 
mamá (¿no le habría hecho daño?); además la preocupación que ella misma se 
hubiera esforzado mucho con la masturbación que, igualmente, llevaba al orgasmo 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
20 
con algo de disnea. Por último, el retorno reforzado de esta disnea como síntoma. 
- Se vislumbra una comprensión más amplia de los síntomas de Dora si consideramos el 
fluor albus: 
+ La palabra “catarro” con que aprendió a designar su afección es un cambio de 
vía, a través del cual toda la serie de pensamientos referidos a la culpa de su papá 
en la enfermedad encontró abierto el acceso hacia su manifestación en el síntoma 
de la tos. 
+ Esta tos, surgida de un catarro real, era además una imitación de su padre 
aquejado por una afección pulmonar, y pudo expresar su compasión y cuidado por 
él. Pero también proclamaba al mundo: “Soy la hija de papá. Tengo un catarro 
como él. Él me ha enfermado, como enfermó a mi mamá”. 
- Ahora reunimos las diversas determinaciones que se hallaron para los ataques de tos y 
afonía: 
_Debajo de todo cabe suponer un estímulo de tos real, orgánicamente 
condicionado. Este estímulo es susceptible de fijación porque afecta a una región 
del cuerpo que conservó en alto grado la significación de una zona erógena. Por 
tanto es apto para dar expresión a la libido excitada. Quedó fijado primero por la 
imitación compasiva del padre enfermo, y después por los autorreproches a raíz 
del catarro. 
_Este mismo grupo de síntomas es susceptible de figurar las relaciones con el 
Señor K, de lamentar su ausencia y expresar el deseo de ser una mejor esposa. 
_Cuando una parte de la libido se vuelca de nuevo al padre, el síntoma cobra 
quizás su último significado: la figuración del comercio sexual con el padre en la 
identificación con la Señora K. 
- Freud plantea que los órganos genitales afectados son capaces de inspirar repugnancia o 
asco en las mujeres. Recordemos que a Dora, tras el beso con el Señor K, le sobrevino una 
sensación de asco. Freud averiguó que la misma gobernanta a quién Dora hizo echar, le 
había dicho que todos los hombres eran frívolos e inconstantes. Para Dora, esto debió 
significar que todos los hombres eran como su papá. Ella consideraba que su padre sufría 
una enfermedad venérea y pudo imaginarse que todos los hombres sufrían de las mismas. 
El concepto que Dora se había formado sobre éstas enfermedades era derivaba de su 
propia experiencia personal. Por tanto, padecer esa enfermedad significaba para ella estar 
aquejada por un asqueroso flujo. Este asco, transferido al contacto con el hombre, sería 
entonces un asco referido en última instancia a su propio fluor y proyectado según el 
mencionado mecanismo primitivo. 
- El sueño de Dora corresponde a un designio que ella retomó durmiendo, y que 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
21 
conscientemente podría formularse así: “alejarme de esta casa en la cual, según he visto, 
mi virginidad corre peligro; partiré con papá y por la mañana, al hacerme la toilette, 
tomaré mis preocupaciones para no ser sorprendida”. 
 
Tras estos pensamientos se puede evidenciar un itinerario de pensamientos de 
subrogación más oscura que corresponde a la corriente contraria y por eso, cayó 
bajo la sofocación: la tentación de entregarse al hombre en agradecimiento por el 
amor y la ternura que él había demostrado en los últimos años, y convoca quizás el 
recuerdo del único beso que había recibido de él. 
 
De todos modos, esto no basta para formar un sueño: un sueño no es un designio 
que figure como ejecutado, sino un deseo que se figura como cumplido y en lo 
posible, un deseo que proviene de la vida infantil. 
- La niña resuelve a huir con su padre; en realidad, huye a refugiarse en su padre por 
angustia frente al hombre que la asedia; convoca una inclinación infantil hacia el padre 
destinada a protegerla de su inclinación reciente hacia el extraño. 
- Del peligro presente, el padre mismo es culpable, pues llevado por sus propios intereses 
la ha ofrecido al extraño. 
- El designio de huir de la casa no es en sí y por sí soñable; se convierte en tal asociado con 
otro designio que se apoya en un deseo infantil. 
- El deseo de sustituir al señor K por el padre presta la fuerza impulsora para el sueño. Se 
había despertado, evocado, una inclinación infantil hacia el padre a fin de poder mantener 
en la represión el amor reprimido hacia el señor K. 
- Teoría: existe toda una clase de sueños cuya incitación proviene de los restos de la vida 
diurna. Sin embargo esto no es suficiente para la formación del sueño; sino que la fuerza 
impulsora que le hace falta a este tiene que ser aportada por un deseo. El pensamiento 
onírico es el empresario que tiene la idea y el empuje para ponerla en práctica; pero 
necesita de un capitalista que costee el gasto psíquico y que es en todos los casos un 
deseo que procede del inconsciente. 
- Si Dora se siente incapaz de ceder al amor por ese hombre, si llega a reprimirlo en vez de 
entregársele, es porque esta decisión se entrama de manera íntima con su prematuro 
goce sexual y sus consecuencias (el mojarse en la cama, el catarro y el asco). Una 
prehistoria así puede, según cual sea la sumatoria de las condiciones constitucionales, ser 
el fundamento de dos tipos de conducta hacia el reclamo de amor en la edad madura: o 
bien la plena entrega a la sexualidad, sin resistencia alguna y lindante con lo perverso; o 
bien su desautorización y la contracción de una neurosis. La constitución de Dora y el nivel 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
22 
de su educación intelectual y moral habían permitido que ocurriera esto último. 
- El trabajo del sueño comienza la siesta del segundo día tras la escena del bosque, 
después que notó ya no podía cerrar más con llave su habitación. Entonces Dora se dijo: 
“aquí se corre peligro” y se formó el designio de no permanecer sola en la casa, de partir 
con su papá. Este designio devino susceptible de formar un sueño porque pudo 
continuarse en el inconsciente y ahí tuvo su correspondiente: 
 
Convocó al amor infantil por elpadre como protección contra la tentación actual. 
Luchan en ella la tentación de ceder al hombre que la corteja y la renuencia 
compuesta de hacerlo: ya sea por prudencia, por mociones hostiles de la 
gobernanta y por el elemento neurótico de la repugnancia sexual a que estaba 
predispuesta y que tenía raíces en su historia infantil: el amor hacia el padre, 
llamado para protegerla de la tentación, proviene de esa historia infantil. 
- El sueño muda el designio de refugiarse en el padre, ahincado en el inconsciente, en una 
situación que muestra cumplido el deseo de que el padre la salve del peligro. Para ello es 
preciso hacer a un lado un pensamiento que estorba, pues es el padre quien la ha 
expuesto a ese peligro. 
- De acuerdo con las condiciones en que se forman los sueños, la situación fantaseada se 
escoge de suerte que repita una situación infantil. En el caso de Dora tal como el Señor K 
apareció ante su sofá y la despertó, a menudo solía hacerlo su padre en la niñez. Pero el 
padre, en aquel tiempo, la despertaba para que ella no se mojase la cama. Este mojar pasa 
a ser determinante respecto del resto del contenido onírico. 
 
+ El opuesto de mojadura, de agua, fácilmente puede ser fuego, quemar. La 
contingencia de que el padre, al llegar a aquel lugar, expresara angustia frente al 
peligro de fuego contribuye a decir que el peligro del cual la salva sea un incendio. 
Esta proferencia casual del padre armoniza con la corriente afectiva que triunfó, la 
que a toda costa se empeña en que aquél sea auxiliador y el salvador. “Él 
vislumbró el peligro no bien llegó, y tenía razón” (en realidad, había expuesto a 
Dora a ese peligro). 
- En los pensamientos oníricos, la mojadura recibe el papel de un punto nodal para varios 
círculos de representaciones. 
+ Mojadura no pertenece sólo al mojarse en la cama, sino al círculo de los 
pensamientos de tentación sexual. Dora sabe que hay también un mojarse a raíz 
del comercio sexual, que en el coito el hombre regala a la mujer algo líquido en 
forma de gotas. Ella sabe que el peligro reside justamente en eso, que es asunto de 
ella precaverse de que los genitales le sean mojados. 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
23 
+ Con mojadura y gotas se abre el otro círculo asociativo del asqueroso catarro. 
Mojado tiene el mismo significado que ensuciado. Los genitales que deben 
mantenerse limpios, ya han sido ensuciados por el catarro; por lo demás, lo mismo 
le ocurrió a su mamá. Dora parece comprender que l manía de limpieza de su 
mamá es la reacción contra este ensuciamiento. 
 
Ambos círculos coinciden en uno: la mamá ha recibido las dos cosas del papá, la 
mojadura sexual y el fluor que ensucia. 
 
 
Este recuerdo es el episodio de las gotas que la mamá deseaba como alhaja. 
 
El recuerdo proviene del material de los celos hacia la mamá, celos de raíz infantil. A 
través de ambos puentes verbales, todo el significado que adhiere a las representaciones 
del comercio sexual, de la contracción del fluor y de la martirizadora manía de limpieza de 
la mamá puede ser transferido a una única reminiscencia, la de las gotas-alhaja. 
- En el contenido del sueño se recogió la palabra alhaja. Al insertarse este elemento pudo 
decirse: “mamá quiere todavía salvar sus alhajas”. Ahora bien, en la nueva modificación, 
alhajero, se hace valer la influencia de elementos que provienen del círculo de la tentación 
por el Señor K. éste no le ha obsequiado alhajas pero sí una cajita para ellas: un alhajero, 
que es un subrogado de los genitales femeninos intactos e impolutos. 
- Así, en el contenido del sueño se dice en dos lugares: alhajero de la mamá y este 
elemento sustituye a la mención de los celos infantiles, de las gotas; por lo tanto, de la 
mojadura sexual, del ensuciamiento por el fluor y, por otra parte, de los pensamientos de 
tentación actuales y contemporáneos que presionan a retribuir el amor contrario y pinta 
la situación sexual inminente –anhelada y amenazadora-. 
- El sueño es la reacción frente a una vivencia fresca, de efecto excitador que 
necesariamente despierta el recuerdo de la única vivencia análoga que ella tuvo años 
antes. Fue la escena del beso en la tienda, a raíz de lo cual surgió el asco. 
- Hay un incendio… el beso supo a humo (tabaco) y por eso el contenido del sueño se 
huele a humo, y se lo sigue oliendo tras el despertar. 
Para la figuración del sueño, se necesita un 
recuerdo que mantenga una relación con los 
círculos de la mojadura. 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
24 
Segundo sueño 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
- Este sueño sobrevivo pocas semanas después del primero; y con su solución terminó el 
análisis. 
- Interpretación del fragmento: Ella deambula sola por una ciudad extraña, ve calles y 
plazas. 
+ Dora agrega que en una de las plazas ve un monumento. 
+ Freud relaciona esto con un álbum con postales de una ciudad alemana que le 
manda un joven ingeniero a Dora para Navidad. Ella había estado buscando ese 
álbum en una cajita donde lo tenía guardado y había preguntado a su mamá 
¿dónde está la cajita?, así como en el sueño pregunta ¿dónde está la estación? Una 
de las fotos era de una plaza con un monumento. 
+ Dora recuerda una estadía que tuvo en Dresde y que deambuló como extranjera. 
Su primo quiso hacer de guía en el recorrido a una galería, pero ella lo rechazó y se 
fue sola, deteniéndose ante las imágenes que le gustaban: permaneció dos horas 
frente a la Sixtina. 
+ Freud nota que en esta primera parte del sueño ella se identifica con un joven 
que deambula por el extranjero, se afana por alcanzar una meta, pero se ve 
demorado, hace falta paciencia. Si ella tenía en mente al ingeniero, condeciría muy 
bien que esa meta fuera de la posesión de una mujer, de su propia persona. En vez 
de eso era una estación ferroviaria, que por lo demás nos es lícito sustituir por una 
cajita. 
- Interpretación del fragmento: Pregunta unas cien veces… 
Ando paseando por una ciudad a la que no conozco, veo calles y plazas que me son 
extrañas. Después llego a una casa donde yo vivo, voy a mi habitación y hallo una 
carta de mi mamá tirada ahí. Escribe que, puesto que yo me he ido de casa sin 
conocimiento de los padres, ella no quiso escribirme que papá ha enfermado. «Ahora 
ha muerto, y si tú quieres, puedes venir». Entonces me encamino hacia la estación 
ferroviaria (Bahnhof) y pregunto unas cien veces ¿dónde está la estación? Todas las 
veces recibo una respuesta «cinco minutos». Veo después frente a mí un bosque 
denso; penetro en él, y ahí pregunto a un hombre a quien encuentro. Me dice 
«Todavía dos horas y media». Me pide que lo deje acompañarme. Lo rechazo, y 
marcho sola. Veo frente a mí la estación y no puedo alcanzarla. Ahí me sobreviene el 
sentimiento de angustia usual cuando uno en el sueño no puede seguir adelante. 
Después yo estoy en casa; entretanto tengo que haber viajado, pero no sé nada de 
eso… Me llego a la portería y pregunto al portero por nuestra vivienda. La muchacha 
de servicio me abre y responde: «la mamá y los otros ya están en el cementerio». 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
25 
+ Ayer a la noche, tras la tertulia, el padre le pidió que le buscase coñac porque no 
puede dormir si antes no ha bebido coñac. Dora pidió a su madre la llave del 
bargueño, pero ella estaba en una conversación y lo dio respuesta. Dora le dijo con 
exageración: “te he preguntado ya cien veces dónde está la llave”. Pero en realidad 
lo había hecho sólo unas cinco veces. 
- Interpretación del fragmento: ¿Dónde está la llave? 
+ Es el correspondiente masculino de la pregunta ¿dónde está la cajita? Por tanto, 
son preguntas por los genitales. 
- Interpretación del contenido de la carta queaparece en el sueño. 
+ Freud le recuerda la carta de despedida que había escrito a sus padres. Esa carta 
estaba destinada a horrorizar al padre para que renunciase a la Señora K, o a 
vengarse de él si no era posible moverlo a que lo hiciese. Así se llega al tema de la 
muerte de ella y de la muerte de su padre. Esto correspondería a una manía de 
venganza por parte de Dora contra su padre. 
- Interpretación del fragmento de la pregunta de la carta: ¿si tú quieres? 
+ Dora la individualizó como cita de la carta de la Señora K que contenía la 
invitación a L (el paraje junto al lago). Esto nos lleva a la escena junto al lago 
 
El señor K había comenzado una seducción seria; pero ella no lo deja terminar. Tan pronto 
comprendió de qué se trataba, le dio una bofetada en el rostro y escapó. Ella recuerda 
que el Señor K alegó “Usted sabe, no me importa nada de mi mujer”. En ese momento ella 
quiso regresar a L bordeando el lago a pie, y preguntó a un hombre a quién encontró qué 
distancia había. Tuvo como respuesta dos horas y media, abandonando ese propósito y 
volviendo a buscar la embarcación. El Señor K estaba de nuevo ahí, se acercó, le pidió 
disculpas y que no contara nada de lo sucedido. El bosque del sueño era un todo parecido 
al bosque de la orilla del lago donde ocurrió esta escena. 
- Freud relaciona los términos estación ferroviaria (patio de vías) y cementerio (patio de 
paz) y concluye que representaban los genitales femeninos. Cuando se agregaron las 
ninfas que se veían en el trasfondo del bosque denso, Freud se percata que se trataba de 
una geografía sexual, simbólica. Se llaman ninfas a los labios menores que se hallan en el 
fondo del denso bosque del vello pubiano. Pero estos términos no estarían al alcance de 
Dora si no hubiese leído cierto libro de conocimientos más técnicos, enciclopédicos. 
 
Tras la primera situación del sueño se oculta una fantasía de desfloración: un 
hombre se esfuerza por penetrar en los genitales femeninos. 
- Freud comunica esto a Dora y ella agrega un fragmento olvidado del sueño: “ella se va 
tranquila a su habitación y ahí lee un gran libro que yace sobre su escritorio”. El acento 
recae en las palabras tranquila y grande. Dora dice que el libro tenía el formato de una 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
26 
enciclopedia. Freud dice que los niños nunca leen tranquilos sobre temas prohibidos. Pero 
Dora soluciona ésta molesta situación en el sueño: el padre había muerto y los otros ya 
habían viajado al cementerio. Ella podía leer tranquila lo que quisiese. ¿No querría decir 
esto que una de sus razones para la venganza era también la sublevación contra la 
coerción que le imponía sus padres? Si el padre había muerto, ella podía leer o amar como 
quisiese. 
- Dora admite otro recuerdo: en la época en que ya se había decidido el viaje de Dora a 
Viena, llegó una carta de otro tío, anunciando que ellos no podían viajar a Viena pues su 
hijo había contraído una apendicitis peligrosa. Entonces Dora buscó en la enciclopedia 
para averiguar los síntomas de una apendicitis. De lo que leyó, recuerda todavía el 
característico dolor localizado en el vientre. 
Freud recuerda que poco después de la muerte de su tía, Dora había tenido en 
Viena una supuesta apendicitis. Los primeros días tuvo mucha fiebre y sintió en el 
bajo vientre ese mismo dolor sobre el cual había leído en la enciclopedia. Al 
segundo día le vinieron fuertes dolores, anunciadores del período; por esa época 
había padecido constantemente de obstrucción intestinal. 
- Interpretación del fragmento: “con particular nitidez, ella se ve subir por la escalera” 
+ Dora cuenta que tras la apendicitis había tenido dificultades para caminar, pues 
arrastraba el pie derecho. Así le ocurrió durante mucho tiempo, y por eso evitaba 
las escaleras. 
Era un genuino síntoma histérico. Ella se había procurado una enfermedad sobre 
la cual había leído en la enciclopedia y se había castigado por esa lectura: el castigo 
no fue por la lectura, sino que se produjo un desplazamiento, después que a esa 
lectura siguió otra, más culpable. 
- Freud pregunta cuándo aconteció la apendicitis, si antes o después de la escena junto al 
lago, a lo que Dora responde diciendo nueve meses después. La supuesta apendicitis 
había realizado entonces la fantasía de un parto con los modestos recursos a disposición 
de la paciente, los dolores y el flujo menstrual. 
- La pierna arrastrada por la apendicitis se representaba como el hecho de dar un mal 
paso, como cuando uno se ha torcido el pie. Freud dice que tales síntomas sólo se forman 
cuando se tiene un modelo infantil para ellos. Dora lo confirma ya que de niña (antes de 
los ocho años) se había torcido ese mismo pie. En B, al bajar las escaleras, resbaló, se le 
hinchó y debió ser vendado, por lo que guardó reposo algunas semanas. 
 
Freud dice a Dora: “si nueve meses después de la escena del lago usted pasó por un parto 
y hasta el día de hoy ha debido soportar las consecuencias del mal paso, ello prueba que 
en el inconsciente usted lamenta el desenlace de la escena. La corrigió entonces en su 
pensamiento inconsciente. La premisa de la fantasía de parto es que esa vez ocurrió algo, 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
27 
que usted vivenció y experimentó todo lo que más tarde tuvo que tomar de la 
enciclopedia. Su amor por el Señor K no terminó con aquella escena, sino que prosiguió 
hasta el día de hoy, al menos en su inconsciente”. Dora ya no contradijo. 
- Dora notifica a Freud que era la última sesión y que tomó esa decisión 14 días atrás. 
Freud dice que suena como si se tratase de una muchacha de servicio, de una gobernanta 
con un preaviso de 14 días. 
Dora cuenta que una gobernanta también dio preaviso en casa de los K cuando los 
visitó en L, junto al lago. Era una muchacha joven con una mala conducta hacia el 
Señor K; no lo saludaba, no le daba respuesta alguna, y él tampoco era cortés con 
ella. La gobernanta le cuenta a Dora que el Señor K se le había acercado (en una 
época en que su mujer estaba ausente) y la había requerido de amores, pidiéndole 
que gustase de él le dijo que nada le importaba su mujer. Freud repara en que ésta 
frase era la misma que le había dicho a Dora. Luego la gobernanta cedió pero el 
Señor K ya no le hizo caso y desde entonces ella lo odiaba. La gobernanta esta por 
dar el preaviso pero quiso esperar a ver si él cambiaba de opinión. En cuanto ella 
se sintió abandonada les contó lo sucedido a sus padres y abandonó la casa de los 
K. 
 
 Freud ahora conoce el motivo de la bofetada con que Dora respondió al cortejo 
+ Fue la venganza de celos. En el momento en que el Señor K usó las palabras “nada me 
importa mi mujer”, que había dicho también a la gobernanta, nuevas mociones se 
despertaron en Dora y se dijo: ¿cómo se atreve a tratarme como a una gobernanta, a una 
persona de servicio? A esta afrenta al amor propio, se sumaron los celos y los motivos de 
sensatez consciente. 
Dora se identifica con la gobernanta en su sueño y en su conducta: 
+ Dora notifica a sus padres lo sucedido tal como hizo la gobernanta. 
+ A su vez Dora se despide de Freud con un preaviso de 14 días. 
+ La carta del sueño que le permite a Dora regresar a casa se corresponde con la 
carta de los padres a la señorita, donde le prohibían hacerlo. 
+ Dora esperó también 14 días para comunicar a sus padres lo sucedido en la 
escena del lago, y lo hizo así por el mismo motivo que la gobernanta: esperar a ver 
si el Señor K renovaba su cortejo. 
- Cuando Dora acusa al Señor K con sus padres pudo haber tenido un propósito colateral: 
que el Señor K viaje hacia donde ella residía. Y eso es lo que justamente él se ofreció a 
hacer. 
- Freud le dice a Dora que quizá ella tomó su relación con el Señor K mucho más en serio 
de lo que era. Dora cuenta que sehablaba de un posible divorcio entre los K, pero que ella 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
28 
primero no quería por los niños, y ahora ella quiere pero él ya no. 
 
Freud deduce que el Señor K quiera divorciarse para casarse con Dora, pero que 
ahora ya no quiere porque no tiene ninguna sustituta. Así hubiera garantizado la 
libertad de la Señora K para que pueda estar con su papá. Esta hubiese sido la 
solución si el final de la escena del lago hubiese sido favorable. 
 
Freud cree que por eso lamentó Dora el desenlace de la escena del lago cuando no 
lo dejó terminar su propuesta y se fue, y lo corrigió en la fantasía presentada como 
apendicitis. 
Tuvo que haber sido un serio desengaño para Dora que en vez de un renovado 
cortejo, sus acusaciones tuvieran por resultado la negativa y las calumnias de parte 
del Señor K. 
Por eso Dora confiesa que nada la enfurece más que se crea que imaginó la escena 
del lago. Pero en realidad no quiere que le recuerden que ella imaginó que el 
cortejo iba en serio y que el Señor K no pararía hasta que ella se casara con él. 
- Dora escuchó todo lo que le dijo Freud y no contradijo. Se despidió de la manera más 
amable y no regresó. 
- Freud comenta que el padre apoyó la cura mientras pudo alentar la esperanza de que 
Freud disuadiría a Dora de la idea de que entre él y la Señora K había otra cosa más que 
amistad. Su interés se desvaneció al notar que eso no estaba en los propósitos de Freud. 
- Freud sabía que Dora no regresaría, fue un acto de venganza que ella aniquilase las 
esperanzas de Freud en el momento en que tenía expectativas de feliz término de la cura. 
- Freud dice que si el Señor K no hubiese hecho caso del primer “no” de Dora, 
representado por la cachetada, y hubiera continuado su cortejo el resultado habría sido 
otro. 
- La incapacidad para cumplir la demanda real de amor es uno de los rasgos de carácter 
más esenciales de la neurosis; los enfermos están dominados por la oposición entre la 
realidad y la fantasía. Lo que anhelan con máxima intensidad en sus fantasías es 
justamente aquello de lo que huyen cuando la realidad se los presenta; y se abandonan a 
sus fantasías con tanto mayor gusto cuando no es de temer que se realicen. 
 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
29 
Epílogo 
- Freud lo llama “fragmento de un análisis” porque dice que es una publicación incompleta 
ya que: 
_ no llegó a dar una serie de resultados porque el análisis fue interrumpido antes 
de que fueran discernidos con certeza. 
_ omitió la técnica que permite extraer los pensamientos inconscientes de las 
ocurrencias del enfermo. 
_ no fundamentó las premisas psicológicas que se traslucen en sus descripciones 
de los fenómenos psicológicos. 
- Con esta publicación tan incompleta Freud pretende por un lado mostrar la importancia 
de los sueños para descubrir lo escondido y lo reprimido en el interior de la vida anímica 
considerando la técnica de la interpretación de los sueños; y por otro lado quiere 
despertar el interés por este procedimiento que permite conocer cosas que la ciencia 
sigue ignorando. 
- Además le interesa demostrar que la sexualidad presta la fuerza impulsora para cada 
síntoma singular y para cada exteriorización del mismo. Los fenómenos patológicos son la 
práctica sexual de los enfermos. Freud descubre en cada caso que la sexualidad constituye 
la clave para el problema de las psiconeurosis. 
- Es cierto que los síntomas no desaparecen mientras dura el trabajo, pero sí un tiempo 
después, cuando se han disuelto los vínculos con el médico. La dilación de la cura o de la 
mejoría sólo es causa por la persona del médico. 
- En el curso de una cura psicoanalítica, la neoformación de síntoma se suspende pero la 
productividad de la neurosis no se ha extinguido en absoluta, sino que se afirma en la 
creación de un tipo particular de formaciones de pensamiento -casi siempre 
inconscientes- que Freud denomina transferencias. 
 
Son reediciones, recreaciones de las mociones y fantasías que a medida que el 
análisis avanza no pueden menos que despertarse y hacerse conscientes; pero lo 
característico es la sustitución de una persona anterior por la persona del médico. 
 
Toda una serie de vivencias psíquicas anteriores no se reviven como algo pasado, 
sino como vínculo actual con la persona del médico. Algunas sufren un cambio, una 
sublimación es su contenido, pero otras son reediciones sin cambios. 
 
La transferencia es algo necesario, no hay medio alguno para evitarla, y es preciso 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
30 
combatirla pero esta parte del trabajo es la más difícil. 
- La cura psicoanalítica no crea la transferencia sino que la revela, como a tantas otras 
cosas ocultas en la vida del alma. En el psicoanálisis son despertadas todas las mociones, 
tanto las tiernas como las hostiles; y haciéndolas conscientes se las aprovecha para el 
análisis. 
- La transferencia se convierte en el auxiliar más poderoso cuando se logra colegirla en 
cada caso y traducírsela al enfermo. 
- El factor de la transferencia le permitió a Freud esclarecer las particularidades del análisis 
de Dora: 
_ Freud no logró dominar a tiempo la transferencia 
_ En la fantasía de Dora, Freud hacía de sustituto del padre; facilitado por la 
diferencia de edad entre ambos. Dora lo comparó conscientemente con su padre al 
buscar asegurarse que Freud sea totalmente sincero con ella; ya que su padre 
prefería los secretos y rodeos. 
_ Cuando sobrevino el primer sueño, en que ella se alertaba para abandonar la 
cura como en su momento lo había hecho con la casa del Señor K, Freud dice que 
debería haber tomado precauciones, haciendo notar a Dora la posibilidad de que 
haya hecho una transferencia desde el Señor K hacia él. 
_ Había algo que hacía que Freud le recordara al Señor K, y por esto Dora se venga 
de Freud, así como lo hizo con el Señor K abandonando a ambos: actuó una parte 
de sus recuerdos y fantasías, en lugar de reproducirlo en la cura. 
_En el segundo sueño de Dora, la transferencia estaba subrogada por varias y 
nítidas alusiones. Cuando se lo contó a Freud, él todavía no sabía que sólo 
quedaban por delante dos horas de trabajo, el mismo tiempo que pasó ante la 
imagen de la Madonna Sixtina y también el que le indicaron como medida del 
camino costero del lago, que al final no transitó. 
_ La cura se le hacía larga, no tendría paciencia de esperar tanto. El rechazo del 
acompañante y la preferencia por ir sola que aparecen en el sueño, ahora tendría 
que experimentarlos Freud. 
Las mociones de crueldad y de venganza que sostenían los síntomas de Dora ahora se 
transfieren sobre el médico en el curso de la cura. ¿Qué mejor venganza para los médicos 
que mostrar, en su propia persona, la impotencia y la incapacidad de un médico? 
- Luego de quince meses de la conclusión del tratamiento, Freud recibe noticias del estado 
de Dora y del desenlace de la cura. Dora se presentó para poner fin a su historia y pedirle 
Este archivo fue descargado de https://filadd.com
�
 FI
LA
DD
.CO
M
 
 Macarena Gavotti 
Caso Dora 
 
 
31 
nuevo auxilio: 
Cuenta que en algunas semanas posteriores al fin del tratamiento, anduvo toda revuelta. 
Luego sobrevino una gran mejoría, los ataques ralearon, se puso de mejor talante. En 
mayo de ese año, murió un hijo del matrimonio K que siempre había sido enfermizo. A raíz 
del duelo, hizo a los K una visita de condolencias y ellos la recibieron como si nada hubiera 
ocurrido en los últimos tres años. En ese momento, se reconcilió con ellos; se vengó de 
ellos y llevó su asunto a una conclusión que le resultaba satisfactoria: 
 
Le dijo a la Señora K: “sé que tienes una relación con mi papá” y ella no lo negó. También

Continuar navegando