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Este informe está basado en los debates en línea albergados por el Foro Global sobre Seguridad Alimentaria y Nutrición en 2010. El Foro FSN es una comunidad en línea para compartir conocimientos y debatir sobre cuestiones relacionadas con la seguridad alimentaria y la nutrición que resultan fundamentales para el desarrollo y la lucha contra el hambre. Actualmente cuenta con más de 2 600 miembros de más de 140 países y recientemente ha sido galardonado con el Fondo de Innovación de la FAO. Para consultar todas las actas del debate puede visitar el sitio http://km.fao.org/fsn Las tecnologías desempeñan un papel esencial en la producción agrícola y afectan a la vida de los agricultores en todos los lugares. Las innovaciones tecnológicas como el arado, el riego, los molinos, las rotaciones de cultivos, los fertilizantes y muchas más han forjado la historia de la humanidad en el transcurso del tiempo. Incluso en nuestra época, en la existen numerosas tecnologías e innovaciones disponibles, el proceso y efecto de la aplicación de nuevas tecnologías agrícolas es complejo, constituye un desafío y conlleva muchas incógnitas y riesgos. Cuando se utilizan de forma arbitraria y sin una evaluación adecuada, las innovaciones tecnológicas pueden reemplazar rápidamente a sistemas más antiguos, probados, altamente especializados y bien adaptados, y esto puede tener un efecto perjudicial sobre la sostenibilidad y la seguridad alimentaria. La gente suele confiar en tecnologías probadas. En cambio, las nuevas tecnologías pueden correr el riesgo de ser consideradas como una novedad y/o herramienta para los ricos que se centra en aumentar los ingresos y descuida la seguridad alimentaria. En ocasiones esto puede dificultar su aceptación entre los pequeños agricultores, que tradicionalmente son reacios a correr riesgos. Entre los factores que habitualmente influyen en la aceptación de las nuevas tecnologías se encuentran, entre otros, el género, edad y nivel de educación del agricultor; el tamaño de la explotación agrícola, el acceso a la información, la propiedad de la tierra, los ingresos no agrícolas y la infraestructura. Cuanto mayor sea la explotación agrícola, la confianza e información del campesino y el nivel de ingresos procedentes de fuentes agrícolas y no agrícolas, más probable resultará la adopción de nuevas tecnologías. Para que tengan un efecto positivo y para ser ampliamente aceptadas por las partes interesadas, las tecnologías deben introducirse cuidadosamente, adaptarse fácilmente a las demandas de un entorno específico y resultar fáciles de utilizar y entender. Es importante que las tecnologías tengan en cuenta la base socio-económica y las prácticas agrícolas existentes, de forma que se obtenga un beneficio inmediato. Tecnologías al servicio de las personas Como consecuencia de las actuales restricciones económicas, educativas y de infraestructuras, los campesinos y otros miembros de las comunidades rurales no pueden beneficiarse a menudo de las nuevas tecnologías e innovaciones. Además, un enfoque de “talla única” puede ser perjudicial para la aplicación de las tecnologías, y pone de relieve la necesidad de considerar diferentes clases de agricultores. Es necesario que la introducción, aplicación y utilización de las tecnologías agrícolas sean respaldadas por servicios de extensión y otros proveedores de servicios capacitados y bien organizados. Muchas innovaciones agrícolas novedosas y valiosas acaban por caer en el olvido fruto de los errores y la mala información y aplicación. Algunas de las cuestiones clave son: • Se debería animar a los pequeños agricultores a agruparse para alcanzar las economías de escala necesarias que les permitirían adoptar nuevas tecnologías y actualizarse. Las organizaciones de campesinos suelen tener mejor posición negociadora para sus miembros, mejor acceso al crédito y a otros insumos agrícolas, y más posibilidades de adaptación a los cambios. • Generalmente la población rural no puede mantenerse al tanto del desarrollo técnico debido a la falta de habilidad, educación y/o recursos financieros. Pueden tener dificultades para comprender la información, incluso cuando está disponible. • A menudo las nuevas tecnologías parecen adaptarse mejor a su aplicación a la agricultura a gran escala y pueden ser fácilmente adoptadas por quienes no son reacios a correr riesgos. Por el contrario, los pequeños agricultores suelen ser vulnerables, carecen de recursos y están aislados, por lo que necesitarán apoyo técnico para adoptar las nuevas tecnologías. • Las nuevas tecnologías deberían tener el potencial para convertirse en comercialmente viables y contribuir a superar las limitaciones a las que se enfrentan los programas financiados con ayudas, que en ocasiones respaldan el cambio técnico pero fracasan una vez que han desaparecido las fuentes de financiación. Tecnologías agrícolas e innovación Oportunidades de mejora Ke ith B ac on gc o /F lic kr CC • La producción agrícola siempre ha dependido del género, con las mujeres copando las industrias alimentarias a pequeña escala. Se puede hacer mucho para asegurar que las nuevas tecnologías tengan en cuenta el género y puedan ser fácilmente adoptadas por las campesinas. En esto consiste el papel necesario para la planificación, extensión y/o I+D. • Los técnicos agrícolas y los responsables de las políticas tienen un papel clave en la preparación del enfoque necesario para la distribución y/o aplicación de las nuevas tecnologías; facilitando su difusión y fomentando su puesta en marcha. • La idoneidad de las nuevas tecnologías no se suele estudiar en detalle, y muchas aplicaciones fracasan como consecuencia de las limitaciones de los análisis previos. A veces las nuevas tecnologías tienen un campo de aplicación reducido y nunca se difunden más allá de los sectores y/o zonas de introducción. • Explotaciones agrícolas a pequeña escala pueden necesitar de un apoyo continuo mientras se introducen las nuevas tecnologías, para ayudar a que se adapten las personas y los sistemas. Valor de las tecnologías más antiguas Las tecnologías antiguas y/o tradicionales siguen desempeñando un papel importante para la seguridad alimentaria en las comunidades rurales dado su uso y aplicación generalizados por parte de la población local en África. Las tradiciones de este tipo ayudan a proporcionar redes de seguridad y protección en épocas de conflicto. Las tecnologías más antiguas y/o indígenas son de gran valor para las sociedades rurales, y habitualmente presentan una serie de ventajas en comparación con las nuevas tecnologías. Sin embargo, es importante que la población rural no esté anclada a las tecnologías anticuadas o de menor valor, y que busque oportunidades para el cambio a medida que haya disponibles nuevas tecnologías. Debe considerarse que: • Las tecnologías indígenas suelen basarse en la experiencia local de la gente y se han adaptado a lo largo del tiempo para adecuarse mejor al entorno, teniendo en cuenta las circunstancias, demandas y recursos específicos de las comunidades locales. • Las nuevas tecnologías relacionadas con la agricultura de conservación y la sostenibilidad de los sistemas agroecológicos pueden beneficiarse en ocasiones de las tecnologías heredadas del pasado. • La gente confía en sus tecnologías tradicionales: no se las considera ajenas o extrañas. En ocasiones las nuevas tecnologías se enfrentan a este problema en el momento de su introducción, pese a las numerosas ventajas que se pueden obtener con ello. • Las agencias de desarrollo podrían hacer más para fomentar la efectividad de muchas nuevas intervenciones, sin dejar de tener en cuenta el valor y la aplicación de las tecnologías existentes. En lugar de ser reemplazadas, estas tecnologías podrían a veces ser adaptadas aprovechando las nuevas condiciones. Esto se consigue trabajando con los agricultorespara determinar la forma óptima de llevar a cabo el cambio. • Muchas nuevas tecnologías están relacionadas en su origen con otras tradicionales. Por ejemplo, las muy aclamadas variedades de arroz NERICA proceden de plantas madre basadas en las variedades tradicionales de arroz africanas y asiáticas, Glaberrima y Sativa respectivamente. Extender el uso de las tecnologías Las tecnologías tienen que ampliar su alcance y adaptarse para adecuarse mejor a los destinatarios y a sus necesidades; pocas veces resultan válidas para todos los cultivos, sistemas y regiones. Las tecnologías han de hacer uso de los recursos naturales, mano de obra, necesidades comunitarias y canales de comercialización existentes. Debe considerarse que: • Extender su uso de acuerdo a las necesidades locales puede resultar en ocasiones difícil debido a las numerosas variables implicadas. Los recursos necesarios para realizar una evaluación apropiada previa a la aplicación y el posterior seguimiento y análisis tras un período de puesta en marcha pueden ser exigentes. • Comprender la dimensión social de las tecnologías es más difícil que centrarse en los aspectos técnicos de la aplicación. • Existirá una necesidad continua para que el sector público de I+D proporcione apoyo para la adaptación tecnológica, ayudando en el proceso de adopción y garantizando la sostenibilidad. • Un método justo de incentivos, recompensas y reconocimiento es típico de un sistema efectivo de I+D. El programa de Tecnologías para la Agricultura (TECA) puesto en marcha por la FAO proporciona una base interactiva de tecnologías agrícolas y buenas prácticas probadas con pequeños agricultores. El TECA se puede consultar en: http://www.fao.org/TECA Prestar servicio a África Aunque han existido numerosas historias de éxito en África, a menudo no salen a la luz. Gran parte del desarrollo se ha fragmentado, y el desarrollo nacional y regional puede verse limitado por estructuras anticuadas, burocracia lenta y sobrecargada y un enfoque vertical tradicional: • Los pequeños productores en África han sido identificados durante mucho tiempo como un recurso clave para el desarrollo de la agricultura; por tanto deben de ser uno de los objetivos de una innovación agrícola adecuada. • Para aumentar la productividad de los pequeños agricultores y fomentar su papel a la hora de alimentar al continente, es fundamental apoyarles dentro de las asociaciones entre entidades públicas y privadas adecuadas, incluyendo la formación de grupos de agricultores y/o cooperativas. Agruparse les permite aunar recursos, compartir riesgos y mejora el acceso a las tecnologías y la innovación. • Se pueden aprender lecciones de la “Revolución Verde” asiática; y su dependencia de los sistemas con alto nivel de insumos y rendimiento puede modificarse para adaptarse a los campesinos y a los sistemas de producción en África. • Existe una dicotomía entre las ciudades y las zonas rurales, dominando las primeras la agenda socio-económica, dirigiendo las inversiones y atrayendo a la gente, pero también proporcionando mercados para los bienes y servicios. • Se siguen canalizando muy pocos recursos a los institutos de I+D, universidades y bloques agrícolas comerciales en África para hacer posible el desarrollo de innovaciones tecnológicas. Este informe es el resultado de una consulta en línea albergada por el Foro Global sobre Seguridad Alimentaria y Nutrición. Las opiniones y puntos de vista recogidos en este documento corresponden exclusivamente a los participantes de la discusión y no reflejan necesariamente las opiniones de la FAO. dis eñ ad or a: D an ie la V er on a
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