Vista previa del material en texto
Museo del Hombre Chaqueño “Profesor Ertivio Acosta” Juan B. Justo 280 - Resistencia - Chaco museohchaqueno@gmail.com www.muhoch.blogspot.com Tel: +54 0362 4 453005 Mitología guaraní. Investigaciones de Ertivio Acosta. Textos originales: Ertivio Acosta Selección: Gabriela Barrios Fotografías: Julio Laurino Mitología guaraní. Relatos para niños. Textos: Gabriela Barrios Ibanna Pérez Eduardo Kasibrodiuk Ilustraciones: Freddy Filete Diseño gráfico, diagramación y diseño de tapa: D.G. Lujan Signoris Dirección de Comunicación y Producción de Contenidos Instituto de Cultura del Chaco Corrección: Claudia Goy INSTITUTO DE CULTURA DEL CHACO http://chacotodaslasculturas.blogspot.com Arturo Illia 245. H3500AVE Resistencia. Chaco Tel: 54 0362 4-453547 chacotodaslasculturas@gmail.com Acosta, Ertivio Mitología guaraní / Ertivio Acosta ; contribuciones de Ibanna Perez ; María Gabriela Ba- rrios ; Eduardo Kasibrodiuk ; fotografías de Julio Horacio Laurino . - 1a ed . - Resistencia : Instituto de Cultura de la Provincia del Chaco, 2020. Libro digital, PDF - (Identidad Chaco) Archivo Digital: descarga y online ISBN 978-987-3976-02-5 1. Literatura Folklórica para Niños. 2. Mitología. 3. Relatos. I. Perez, Ibanna, colab. II. Barrios, María Gabriela, colab. III. Kasibrodiuk, Eduardo, colab. IV. Laurino, Julio Horacio, fot. V. Título. CDD 398.2089 PRESENTACIÓN DE LA NUEVA EDICIÓN La primera publicación de los textos de Ertivio Acosta se lla- mó La riquísima mitología guaraní desde sus personajes dia- bólicos, fue impresa en el 2000 y reeditada con igual formato en el 2005. La edición que presentamos ahora partió de bucear en los textos originales del autor, ampliando la ofrecida inicialmente en ese folleto. Como toda selección es arbitraria, pretendimos ser muy rigurosos indicando en cada párrafo los recortes reali- zados a la publicación original de la que fue extraída. Esos do- cumentos pueden consultarse en la biblioteca y el archivo del Museo del Hombre Chaqueño. El profesor Ertivio Acosta es recordado en el país por su apa- sionado interés por la recopilación y la investigación de los sa- beres de la cultura popular, por su incansable lucha para su di- fusión y su reconocimiento en los ámbitos institucionales. Mitología Guaraní - 05 Toda la cultura de la que forma parte el idioma guaraní fue ocultada, marginada y hasta prohibida por una forma de cultura considerada universal, cuyo origen y legitimidad son similares a los de la guaraní, pero que alcanzó esa difusión por ser instru- mento de la civilización occidental. Alcanzó la universalidad que debía excluir a las otras particularidades. La mitología grecolatina, paradigma de la civilización occiden- tal, es tan mitología como la guaraní, pero su conocimiento ha tenido la categoría de una forma de sabiduría, en tanto la fre- cuentación de la mitología guaraní fue una forma de ignorancia, censurada, prohibida. Esto mismo ocurrió con las civilizaciones orientales, africanas y latinoamericanas originales. La revalorización de las culturas, como proceso inexorable, puso de manifiesto la riqueza de ellas, la confluencia de muchas y el carácter instrumental que tienen para las sociedades. Cuando los estructuralistas le atribuyen a la semiología el es- tudio de los signos en el seno de la vida social, abren perspecti- vas inagotables bajo el rótulo de antropología social, folklore o semiología; se descubren y se caracterizan esos signos vigentes dentro de la vida de las sociedades. La profundidad de esos estudios ha convertido temas que an- tes eran considerados subalternos en objeto de altas considera- ciones. Las mitologías particulares de los ámbitos folclóricos han pasado de ser elementos propios de una forma de ignorancia a PRÓLOGO Mitología Guaraní - 07 representar evidencias de verdaderos signos sociales. Pasaron a ser el núcleo de interpretación de realidades, luego de haber ocupado los suburbios del pensamiento. Y este cambio no es producto de una voluntad obstinada de popularización, ni de una moda demagógica, sino que es el resultado del progreso de las ciencias del hombre y de un serio trabajo intelectual. Esta síntesis apretada que acompaña las fotografías es es- clarecedora de los personajes diabólicos dentro de la mitología guaraní, y del carácter instrumental de ellos. Baste considerar que el origen de algunos se remonta a la época en que los gua- raníes eran acosados por los bandeirantes portugueses que los apresaban y luego vendían como esclavos en San Pablo, o cuan- do eran acosados por los españoles que también los apresaban para que trabajaran en las encomiendas, otra forma de escla- vitud. Época en que solo encontraban libertad y respeto en las misiones jesuíticas. Y seguramente representaron instrumentos para interpretar la compleja realidad de que individuos de una sola etnia (portugueses, españoles y misioneros) tuvieran com- portamientos tan dispares respectos de sus cuerpos y sus almas. En las formas vigentes, es posible hacer una interpretación de su carácter instrumental. Y valga como ejemplo el mito del Pom- bero: cincuenta años atrás era común que en las familias de cla- se media resistenciana el embarazo de una mujer soltera fuera desintegrador del núcleo. Muchas veces terminaba con que el padre o un hermano trataban de lavar el honor familiar con mé- todos violentos. O la muchacha era expulsada del núcleo fami- liar y corría una suerte imaginable para una mujer abandonada 08 - Mitología Guaraní por su novio y su familia. También ocurrieron, según la referencia de memoriosos, suicidios por este motivo. El conflicto que se planteaba dentro de una cultura que enfrentaba tesoneramente una férrea moral y a todo lo consideraba pecado, era real y de consecuencias trágicas. En los estratos de cultura rural y de ver- tientes aborígenes, como la guaraní, existía la creencia en mitos armonizadores como el del Pombero, que podía poseer y em- barazar a una mujer sin su consentimiento, y sin que lo pudiera evitar. Cuando hablo de mitos armonizadores quiero decir que tienen atajos para prevenir la desintegración familiar, promue- ven la continuidad del grupo. El embarazo no fue pecado: fue el Pombero, un ser mitológico, un duende. Otro tanto ocurre con el mito del Karaí Octubre. El primero de octubre, cuando el duende persigue a los que no tienen comida, es la época en que no existen frutos frescos; tienen comida so- lamente aquellos que la han guardado. Para el tiempo y el lugar en que se originó, se trató de una forma de educar acerca de la previsión, con el instrumento del mito. Se trata sin duda de formas de sabiduría y no de ignorancia. Demasiado sabía Ertivio Acosta lo que nos ha costado a los que, como él, buscábamos una mirada respetuosa de todos y de los intelectuales hacia nuestra cultura original, y un equilibrio en la consideración de todas las culturas que coexisten entre nosotros. Dr. Eduardo Gómez Lestani, julio de 2000 Mitología Guaraní - 09 Los datos más antiguos sobre la presencia de espíritus diabó- licos en Indoamérica nos indica que a la llegada de los prime- ros europeos al área guaranítica americana (...) no existía en la creencia de los indígenas el mal con el sentido que le daban los conquistadores, representado por el diablo, la tentación a las malas acciones y opuesto al Dios cristiano. Los espíritus malignos que poblaban la vasta región guaraní solo aparecían a modo de castigo contra los que depredaban la selva destruyendo los recursos necesarios para la subsistencia de las comunidades. (...). Nuestra intención es introducirnos en el mundo mítico guaraní desde el siglo XVI, recorrer la posible senda que diera existencia a tantos duendes traviesos de la creencia popular. (...). Estos duendes, que han persistido a pesar del ocultamiento del que fueron objeto por la colonización cultural europea que sufriera nuestro país durantesu historia, se han ido adecuando con el tiempo, por lo que actualmente podemos afirmar que son parte vigente de nuestra cultura , como prueba irrefutable de re- sistencia y supervivencia de las raíces indoamericanas en nues- tro territorio. Con la presencia de los europeos en territorio de los guaraníes se inicia un proceso de ocultamiento y de suplantación de los LA MITOLOGÍA GUARANÍ Mitología Guaraní - 11 valores de la cultura autóctona. Sistemáticamente se produce una aculturación que, con la presencia organizada de los religio- sos, se hace más notable. El mundo mítico de los guaraníes entra así en un cono de sombra del que no puede salir hasta princi- pios de nuestro siglo, cuando unos pocos estudiosos rescatan las vivencias mitológicas que supervivieron a la desculturización americana de más de cuatro siglos (...). La visión cosmogónica de los guaraníes nos muestra, al decir de Moisés Bertoni, un Olimpo con dioses superiores y divinida- des menores. En la primera clasificación estaría el Dios Creador y las divinidades superiores del proceso de creación (...). Son cuantiosas las leyendas míticas sobre la creación del cos- mos, en especial de la tierra (...). Nuestro trabajo se relaciona más directamente con los dioses menores o almas celestiales con misiones comunes en la tierra. Estas almas o poras metafísicas son las que toman en las cul- turas guaraníes modernas el nombre de Yaras, a las que Moisés Bertoni denomina divinidades menores o genios tutelares. Estos Yaras (dueños), con la aculturación religiosa europea de su con- dición astral menor, por obra de la confusa suplantación de que fueron objeto, en algunos casos toman nivel superior y hasta función creadora, tal el caso de Ñande Yara, ser supremo y único Dios, creador del mundo y del hombre, por lo tanto también su dueño (...). Esta acción divina se produce por metamorfosis que transforma al cuerpo humano en elementos de la naturaleza. (...) Datos recogidos en investigaciones folclóricas desde fines del siglo pasado muestran cierta confusión entre el alma tutelar o Pora y la existencia de otros genios de la naturaleza. Esto hace que no haya mucha claridad en la individualización del alma Pora. En nuestro siglo el problema aumenta y ya no solamente se la confunde con la aparición de otros seres sobrenaturales, sino que se la identifica con el alma humana, y ya es común — principalmente en las zonas urbanas— referirse al fantasma te- rrenal con el nombre de Pora. Extraído de El pombero, un héroe moderno. Primer premio en Ensayo Folcló- rico- Premio Guillermo Perkins Hidalgo- IV Centenario de la Fundación de la Ciudad de Corrientes, 1988. 12 - Mitología Guaraní KURUPÍ (cuero de sapo) talla de Ricardo Jara Mitología Guaraní - 13 En épocas del encuentro español-guaraní, al parecer solo exis- tían dos creencias principales sobre duendes malignos: el Kurupí y el Yashí-Yateré, con una coexistencia tan ligada que sus rasgos y atributos fueron motivo de confusión dando pie a polémicas por saber el origen y las relaciones de cada uno (...). Mayor es la confusión si nos remitimos a los variados nombres que toman según los dialectos de origen guaraní (...). Citaremos los más co- nocidos: Coropio, Jurupári, Curipári, Teguaigba, Temotí, Taubi- máma, Kaapóra, Kahipóra y Kurupíra (...). Aparecen para castigar o perseguir a indígenas que hubieran depredado los alimentos que da la floresta. El Kurupí, según versiones tomadas de los indígenas, era un pigmeo con las partes sexuales extraordinarias, en el varón tan deforme que alcanzaba a dar la vuelta por la cintura de su pe- queño cuerpo; en las hembras el sexo tomaba la forma de una T mayúscula. (...) Dotado de una fuerza prodigiosa, anda armado de un hacha de piedra y casco javotí, hace su habitáculo en el tronco de los árboles, los golpea con su pene, muestra y escon- de la caza y atrae o desorienta al cazador enemigo. (...) Para Juan Ambrosetti (1893) el Kurupí es un personaje de cara overa, petiso, fortachón, siempre anda desnudo por el monte a la hora de la siesta. (...) Otros estudiosos señalan que camina en cuatro pies con el órgano sexual exageradamente de- sarrollado, tanto que le permite enlazar con él a las personas que quiere secuestrar. Cortándoselo, se vuelve inofensivo y se salva la persona enlazada. Persigue a las mujeres que van al bosque en busca de leña. Las mujeres con solo verlo pierden la razón para el resto de sus días. (...) Actualmente, en territorio guaraní argentino se lo conoce como un niño moreno de rostro diabólico que al caer la tarde llo- ra a orillas de los montes, y para evitar las molestias que le puede acarrear este duende los lugareños dan un corte al tronco del árbol llamado “kurupi kahi”, para que el pequeño Kurupí acuda a beber el líquido lechoso que segrega y calme de esa manera el molesto e interminable llanto. Extraído de El pombero, un héroe moderno. Primer Premio en Ensayo Folcló- rico- Premio Guillermo Perkins Hidalgo- IV Centenario de la Fundación de la Ciudad de Corrientes, 1988. ilustración D’ Ambrossio Libro - Seres sobrenaturales de la cultura popular argentina 14 - Mitología Guaraní YASHI YATERÉ (pedacito de luna) talla de Ricardo Jara Mitología Guaraní - 15 El Yashí-Yateré, para algunos estudiosos, es una variante de Kurupí, ya que los datos históricos de su presencia en el área guaranítica solo tendrían unos doscientos años (...). Además de su aspecto casi humano, posee el don de convertirse en pájaro “Tincuan” o “Guyrá Payé” (pájaro hechicero), posee una sola pata y en las noches vaga cantando “Yashí taperé che pirá siete”. Yas- hí, según la mayoría de las versiones, sería un niño ligeramente travieso y maligno, que roba miel y tabaco a los viajeros. (...) Los estudiosos no se han puesto de acuerdo sobre la eti- mología de su nombre. Para R. Coman, Yashí-Yateré sería “el duende de la luna”. M. Bertoni asegura que significa “Fragmento de la luna”. (...) Cuando se presenta en forma humana, lo hace como un niño de cabellos rojizos que emite agudos silbidos, se alimenta con miel de abejas y en sus manos lleva un pequeño bastón de oro que le da el poder sobrenatural. Muchos paisanos de gran coraje han enfrentado en leal pelea al maléfico duende- cillo; si en la lucha consiguen arrebatarle el famoso bastoncito, el duende inmediatamente desaparece (...). En territorio argentino su oficio predilecto sería el de robar ni- ños, llevarlos a lo profundo del monte y jugar con ellos convidán- doles miel y frutos dulces para luego lamerlos y abandonarlos. Todo niño que haya sido víctima de estos juegos indefectible- mente sufre por largo tiempo ataques de epilepsia. Extraído de El pombero, un héroe moderno. Primer Premio en Ensayo Folclórico- Premio Guillermo Perkins Hidalgo- IV Centenario de la Funda- ción de la Ciudad de Corrientes, 1988. Es el más popular de los duendes guaraníes; sin embargo es sumamente difícil describirlo. (...) Al analizarlo nos daremos cuenta de que en él se concentran casi todas las formas, cua- lidades y atributos de los otros ya estudiados. Pareciera que la gente guaraní quiso aunar en él, y sobre todo en su inexplicable nombre, toda la gama de duendes que habitaron nuestros mon- tes por más de tres siglos (...). En las últimas décadas, por lo menos en la zona guaranítica argentina, la figura del Pombero generalmente es la de un pe- queño y robusto enano que muestra una enorme panza, muy velludo, con espesa y larga barba, que anda desnudo, con órga- nos genitales desproporcionados para su pequeño cuerpo. Su enorme sombrero de paja casi tapa su enjuto rostro, su boca pe- queña, sus ojos oblicuos y sus grandes y redondas orejas. En sus manos porta una larga vara con la que castiga a sus enemigos. (...) En nuestra región el Pombero toma varios nombres, deriva- dos de su feo aspecto o de sus acciones nada morales; estos serían: “El pata de lana”, “El polana”, “Sombrero Caá”, “SombreroLargo”, “El Carapé” y “el Cabeza Colorada” (...). El pueblo asegura que el Pombero silba, pía, remeda el canto de las aves, se mimetiza en troncos o camalotes, se torna invi- sible para penetrar por el ojo de una cerradura. Gusta del huevo fresco y de la miel silvestre, masca tabaco negro y pernocta en POMBERO (Señor de la siesta) talla de Ricardo Jara 16 - Mitología Guaraní ilustración D’ Ambrossio Libro - Seres sobrenaturales de la cultura popular argentina Mitología Guaraní - 17 los hornos, principalmente en invierno, por lo que las familias correntinas acostumbran a tapar la boca de los hornos y a apa- gar restos de fuego en las cocinas. (...) También pernocta en los corrales y tacurúes y gusta de alimentos dulces: si le ofrecen co- midas no deben tener sal. Se esconde entre las tacuarillas, mo- gotes y bananales(...). Su tarea primitiva de perseguir niños que vagaban a orillas de los montes pronto se extiende en la creencia popular a toda clase de maldades que ennoblecen su orgullo como Señor del Mal (...). Lo que el pueblo guaraní más teme del Pombero son sus do- tes de galán empedernido, que en su afán de conseguir el amor de la mujer a quien “echó el ojo” no mide las consecuencias que puede acarrearle si es que la pretendida tiene dueño (...). Para que este “Don Juan” guaranítico no llegue hasta la cama de las muchachas solteras, los padres dejan colgados sobre la puer- ta del rancho collares de ajos o ramilletes de ruda macho: aun así no pueden garantizar el triunfo sobre el Pombero porque el duende fue sorprendido en ocasiones haciendo lugar entre las pajas del techo para llegar hasta su pretendida(...). La mujer del Pombero es reconocida en el campo por tener la piel amarillenta y ser muy delgada, y como prueba de amor hacia el Pombero debe lucir constantemente vestidos de color rojo vivo, incluso en días profundamente religiosos como Vier- nes Santo. (...) La única forma posible de librarse de la ira de estos pequeños y malignos seres es realizar novenas en el rancho endiablado, y regar las esquinas de la casa con agua bendita. Durante la Sema- na Santa, especialmente el día Viernes Santo, reunir en un altar levantado especialmente al efecto todas las reliquias poderosas que existan en las inmediaciones. Esa unión de fuerzas milagro- sas hace que el Pombero se retire asustado y las víctimas nueva- mente se cristianicen. (...) Debo advertirles que cuando hablen de él lo hagan en voz baja para evitar su aparición, y por las noches con el fin de con- seguir su afecto, se debe dejar fuera de la casa colgados en al- gún arbolito recipientes de con abundante comida sin sal, taba- co negro, miel y “guarapiola” (caña). Extraído de El pombero, un héroe moderno. Primer Premio en Ensayo Folclórico - Premio Guillermo Perkins Hidalgo - IV Centenario de la Fundación de la Ciudad de Corrientes, 1988. 18 - Mitología Guaraní PATA DE LANA (Sombrero Caá) talla de Ricardo Jara Mitología Guaraní - 19 (...) Es fama del Pombero llegar hasta la cama de sus pretendidas sin hacer ningún ruido que altere a los padres o a los maridos, pues aseguran que las plantas de los pies las tiene cubiertas de pelos o plumas. La imaginación popular vio al duende cubrir sus pies con “ovechá piré” (lana de oveja) para no ser escuchado en sus traicioneras visitas, por lo que lo popularizaron con el nombre de Pata de Lana. Con el fin de conseguir el amor de una mujer, muchas veces se transformó en un mozo bien parecido, vestido lujosamente, que llega a bailes haciendo ostentación de dinero, compra al “bastonero” para poder bailar con quien le place y convertirse en el preferido de las damas. Elegía entre ellas la que más le gustaba para divertirse o convertirla en víctima de sus próximas fechorías. Se cuenta además que es el colmo de celoso y defiende a su pareja a toda costa. Pelea a muerte por su amada, corriendo con sus artimañas a cualquier posible pretendiente, causándole un sinfín de molestias como darle vuelta el sombrero, asustar el caballo, aturdirlo a silbidos, convertirse en un gallo para picotearlo, perseguirlo con tizones encendidos, retirarle la silla en el momento en que se sienta, tirarle de la punta del saco o producirle quemaduras largando llamas por su pequeña boca. La mayoría de los informantes lo conocen como Abá Talón Yobay, pues aseguran que sus ancestros fueron los indios del Chaco, tanto los temibles guaycurúes como los combativos abi- pones, quienes periódicamente atacaban y saqueaban ciudades como Asunción, Corrientes o las estancias jesuíticas. Actualmente lo describen como una especie de Pombero por su pequeña estatura y el gran sombrero que tapa casi todo su cuerpo, solo deja ver su enorme sexo y sus piernas que terminan a modo de dos talones encontrados (”yobay”, en guaraní”). Este atributo le da una enorme ventaja, no solo para robar co- mida, sino para todas sus acciones eróticas, ya que cometido el delito, quien quiera perseguirlo seguramente termina en el fra- caso, puesto que las huellas que deja al escapar confunden al más mentado rastreador; los dos taloncitos encontrados, si se marcan en círculo, aseguran definitivamente el escape del fa- moso Talón Yobay. Publicado en el folleto La riquísima mitología guaraní, desde sus personajes diabólicos. Subsecretaría de Cultura de la Provincia del Chaco, Resistencia, 2000. 20 - Mitología Guaraní TALÓN YOBAY (otra versión del Pombero) talla de Ricardo Jara KARAÍ OCTUBRE (otra versión del Pombero) talla de Ricardo Jara Mitología Guaraní - 21 La mitología del área guaranítica argentina ha dejado muestras de varios personajes diabólicos con el apelativo de Karaí, pero hay uno que escapó a esa regla social: se lo conoce como el “Karaí Oc- tubre” o “Señor de la Miseria”. Su misión en este mundo es tomar el aspecto de un viejito encorvado luciendo un gran sombrero de paja; anda generalmente descalzo, pero lo identifica una enorme “guacha” que lleva en sus manos para castigar a aquellos hombres que no cumplieron con un deber social de estas regiones, el de guardar comidas conservadas para pasar la época de la miseria que empieza el 1 de octubre y termina el 24 de diciembre. En rea- lidad es un duende inspector, porque el primero de octubre desde la madrugada recorre los caminos de los poblados mirando casa por casa si en sus sementeras guardaron comida suficiente para la difícil época. Las familias ese día realizan grandes comilonas al aire libre, gene- ralmente frente a sus casas, para de esa manera demostrar al Karaí octubre que ostentan suficientes alimentos en el mes de la mise- ria. Si no es así, el duende persigue a los responsables del grupo familiar para castigarlos con su guacha y enloquecerlo con fuertes silbidos. En ocasiones, como castigo elige hacerse invisible e intro- ducirse en la casa de aquel que no cumplió con su orden y duran- te un tiempo causa un sinfín de molestias a la familia. Para poder desprenderse del molesto duende, se dio la costumbre de “soplar el rancho”, que consiste en soplar con distintos elementos tres es- quinas del rancho, dejando una libre para que por allí se escape asustada la miseria (...). Publicado en diario Norte - 1º de octubre de 1993 “La creencia de transformación del hombre en animal quizás sea la más universal de las leyendas (...). Para Aníbal Pelayo el nombre con que se popularizó en nuestro país hacia el año 1700, proviene de los portugueses asentados en las islas Azores que lo llamaban “lobishomen”. Hay que dejar aclarado que desde épo- cas precolombianas los guaraníes creían ya en la transformación del “Yaguareté-avá” (hombre tigre) (...). En nuestro país Juan B. Ambrosetti es el primero que recopila versiones sobre esta leyenda hacia 1880. (...). Su área de difusión abarcaría Formosa, Chaco, Santa Fe, Corrientes, Entre Ríos y Mi- siones, extendiendo su influencia también en Río Grande Do Sul y otras regiones de América con nombres que mantienenel ori- gen portugués, tales como Lobisone, Lubisone, Lobisonte, Lubi- són y Luisón, y en Corrientes, además de Loción, las expresiones lugareñas de Yapá Guasú” (perro grande), “Yaguá Garañón” (pe- rro diabólico) o como en Goya, “Yaguá Carú” (perro que come). “... Se produce un sincretismo en la creencia, su figura deja de ser un tigre o un lobo de donde proviene su nombre, para apa- recer como un perro corpulento, de orejas desmesuradas que le cubren la cara y con las que produce un infernal ruido. Sus patas terminan en afiladas pezuñas y de sus ojos incandescentes salen lenguas de fuego. Algunas veces aseguran que su transforma- ción le da apariencia de mitad cerdo y mitad perro...”. 22 - Mitología Guaraní LOBIZÓN (u hombre lobo) talla de Ricardo Jara ilustración D’ Ambrossio Libro - Seres sobrenaturales de la cultura popular argentina Mitología Guaraní - 23 Si bien el origen de la transformación del hombre en animal daba como causa una “maldición divina”, en épocas más recien- tes se populariza su nacimiento en la maldición de haber naci- do séptimo hijo varón seguido de una pareja. A principio del si- glo [veinte] aseguraban que la persona maldita o “enferma”, se transformaba todos los viernes por la noche y a veces también los martes.(...) La presencia del lobizón se advierte por el ladrido de los perros, que se asustan por el tamaño del animal. La única forma de terminar con el lobizón es hiriéndolo con bala “bende- cida”; si no muere y queda herido, aseguran que perseguirá a su oponente hasta darle muerte. La maldición cesa a la claridad del nuevo día o al primer canto del gallo”. Publicado en diario Norte - 16 de junio de 1985. Hasta ahora describimos espíritus diabólicos antropormorfos bien determinados, pero es necesario apuntar que en este parti- cular mundo mítico existen otros con formas no humanas, aun- que no por ello dejan de ser entes fantásticos que escapan a las leyes de la naturaleza. Entre estos sobresale el Caá-Pora (espíritu del monte), que por lo común aparece en la selva con la forma de cerdo o perro, que echa fuego por la boca y aterroriza a los animales y a los caza- dores furtivos. Los animales de la selva están a su cuidado para mantener el equilibrio ecológico. A veces se presenta como el tronco de un árbol con algunos rasgos humanos; sostiene en sus manos una pipa hecha con un cráneo y una tibia. Dicen que devora a la gente chupándola. Si a este protector de la naturaleza le cae bien un cazador, lo ayuda a atrapar la mejor presa,; de lo contrario, lo confunde has- ta que pierde el sentido, permitiendo así que los animales en peligro se pongan a salvo. Extraído de El pombero, un héroe moderno. Primer Premio en Ensayo Folcló- rico- Premio Guillermo Perkins Hidalgo- IV Centenario de la Fundación de la Ciudad de Corrientes, 1988. 24 - Mitología Guaraní CAÁ PORA (Espiritu del Monte) ilustración D’ Ambrossio Libro - Seres sobrenaturales de la cultura popular argentina talla de Ricardo Jara KUARAJHÍ YÁRA (Dueño del Sol) talla de Ricardo Jara Mitología Guaraní - 25 Describir este mito, cuya existencia está difundida en algunas regiones de Corrientes, Paraguay y sur del Brasil, es sumamente difícil, ya que en su origen habría sido un dios menor de la mito- logía guaraní, que baja a este mundo para custodiar la naturaleza. Tomó el aspecto de un pájaro de color rojo brillante, que apare- cía a media siesta. De allí su nombre: “Dueño del sol”. En los para- jes de la Laguna Iberá de Corrientes lo conocen como “Guirá Pitá” (pájaro rojo). Este personaje diabólico se ha convertido desde el siglo XIX en terror de las mujeres que van a juntar leña al monte. En esas cir- cunstancias el “Kuarajhí Yara” surge como un ave que desde sus alas lanza colores brillantes como el arco iris. Esto domina a la mu- jer, que es conducida por el pájaro hechicero al medio de la selva. Allí desciende bruscamente hasta el suelo y resurge con la figura de un individuo de gran estatura, delgado, con rasgos de un ave de enorme pico, luciendo un sombrero de paja y en su mano derecha una larga caña, signo de su poder sobrenatural. Acto seguido, viola a su víctima y vuelve a su forma natural. También se lo ha visto robando criaturas que se aventuran a ju- gar a orillas de la floresta. En Chaco y Corrientes se lo conoce en las últimas décadas del siglo XX como “El Pájaro de Oro”, aunque la gente siente un gran temor de caer en sus engaños, ya que es fundamentalmente pro- teico y antropomorfo. Publicado en el folleto La riquísima mitología guaraní, desde sus persona- jes diabólicos. Subsecretaría de Cultu- ra de la Provincia del Chaco. Resisten- cia, 2000. CITADA POR EL AUTOR Ambrosetti, Juan B. Superticiones y leyendas, Editorial Castellví, Santa Fe, 1967. Bertoni, Moisés. La civilización guaraní – 2 parte- Religión y moral, Edito- rial Indoamericana, Buenos Aires, 1959. TEXTOS ORIGINALES DE ERTIVIO ACOSTA El Pombero, un héroe moderno. Premio Guillermo Perkins Hidalgo. Bue- nos Aires, 1988. La riquísima mitología guaraní, desde sus personajes diabólicos. Subse- cretaría de Cultura de la Provincia del Chaco. Resistencia, 2000. “Karaí Octubre o Señor de la Miseria”. Publicado en diario Norte - 1º de octubre de 1993. “La leyenda del Lobizón”. Publicado en diario Norte - 16 de junio de 1985. 26 - Mitología Guaraní BIBLIOGRAFÍA ERTIVIO ACOSTA Autor de los textos Mitología Guaraní - 27 Nació en San Luis del Palmar, provincia de Corrientes, en 1940. Residió en el Chaco desde 1942. Cursó estudios de Historia en la Facultad de Huma- nidades de la Universidad Nacional del Nordeste. Se recibió de profesor de Moral y Civismo para Nivel Secundario en el Instituto del Profesorado de Resistencia y de Técnico Nacional de Museos en el Instituto de Museología de la ciudad de La Plata. Desde adolescente se interesó por los relatos de los vecinos sobre las creencias populares. Se inició como bailarín de folclore en la Peña Nativa Martín Fierro de Resistencia. En 1965, de la mano de Raúl Oscar Cerrutti, incursiona en los estudios e investigación del folclore regional. Organizó en 1965 el primer Centro de Estudios del Folclore del Chaco; en 1980, el Centro de Estudios del Folclore Regional. Investigó y publicó sobre más de 200 temas de la tradición guaraní y su vigencia en la región. Dictó charlas, cursos y conferencias sobre folclore re- gional en los distintos centros de estudios del país y de la región. Se ocupó fervientemente de la difusión de estos saberes a través de los medios de prensa, gráficos y radiales: “La siesta del Pombero” fue una serie de artícu- los y espacios radiales que lo recuerdan. Obtuvo varios premios y distincio- nes por su labor de investigador del folclore del área guaranítica. Su tarea como museólogo se inicia en 1988. Es creador y director del Mu- seo del Hombre Chaqueño (1990), que en honor a su trayectoria lleva su nombre; organizador del Museo Histórico de la Isla del Cerrito (1996); or- 28 - Mitología Guaraní ganizador del Sitio Histórico y Museo Luis Geraldi de la Inmigración Ita- liana (1999); organizador de los primeros cursos de Museología Aplicada a la Educación y Cultura. Asesoró en Museología a instituciones educativas y culturales del Chaco. Es recordado y reconocido en todo el país por su ardua labor. En el año 2000 recibió el reconocimiento en el Salón “Jorge Luis Borges” en la Feria del Libro Buenos Aires y el reconocimiento de la Cámara de Di- putados de la Provincia del Chaco. Falleció el 7 de julio de 2000 a los 59 años. En su homenaje esta fecha fue instituida como día provincial de los museos. RICARDO JARA Autor de las esculturas de la mitología guaraní que forman parte del acervo del Museo del Hombre Chqueño Nació en Quitilipi (Chaco), 1943. Profesor de Dibujo, Pintura y Escultura, egresado del Instituto Superior del Profesorado de Bellas Artes de la Provincia del Chaco. Estudió xilografía con el grabador ClementeMoreau, xilografía color con el maestro Jorge Díaz Arduino y técnicas modernas del grabado a color simultáneo con el maestro Alfredo de Vincenzo. Ha participado desde 1965 en exposiciones y salones en el país y en el ex- tranjero, tales como el Salón Nacional, Bienal Carlos Filevich, el Salón Nacio- nal Manuel Belgrano, el Salón Nacional de Santa Fe, la Bienal Internacional de Grabado de Digne-Les Bains (Francia), la Bienal Internacional de Arte (Valparaíso, Chile). Ha recibido numerosos premios. Sus obras se encuentran en algunos museos de Argentina y de Latinoa- mérica, y en colecciones particulares del país y del extranjero. Algunas distinciones: 1991 1ª Mención, 2do Salón Anual del Pequeño Formato de Escultura, Chaco. 1992 Premio del Público, 1er Salón Regional de Dibujo y Pintura, Corrientes. 1999 Diploma de Honor Museo Nacional del Grabado XXXV Salón Nacional de Grabado y Dibujo. 1999 Premio Chaco a la Excelencia en Grabado. Falleció el 3 de mayo de 2001 a los 57 años. Mitología Guaraní - 29 La mitología guaraní en el Chaco Esta versión reúne los relatos que surgen de la experiencia de la guía a niños en la Sala de Mitología del Museo del Hombre Chaqueño. Son relatos sagrados: por eso debemos contarlos y escu- charlos con mucho respeto. Los mitos de cada cultura explican cómo fue el origen del mundo y de la vida en él. En esas explica- ciones aparecen seres especiales, que enseñan a las personas secretos de la vida y les aconsejan cómo deben comportarse. Se los considera mitológicos porque mucha gente sigue cre- yendo en ellos y en el poder que tienen. Por eso les propone- mos conocer y respetar las creencias de otras personas. ¿Qué son los mitos? Mitología Guaraní - 03 Vamos a conocer desde estas páginas a algunos de esos perso- najes de la mitología guaraní. El Pueblo Guaraní es uno de los pueblos indígenas que habitan estas tierras antes de que vinieran los españoles. Los guaraníes vi- ven en lo que hoy llamamos Corrientes, Misiones, Paraguay. Mu- chas de las creencias de este pueblo siguen estando presentes en- tre nosotros. Llegan al Chaco con los primeros criollos correntinos que vinieron a trabajar como hacheros en los montes. Una característica especial de sus mitos es que la mayoría está relacionada con el cuidado de la naturaleza, de los recursos que ella nos da: los peces, los pájaros, los árboles, la tierra. Parece que esta clase de duendes es un poco traviesa, tiene un lado bueno y otro no tanto. Se los conoce como seres “malos”; algunos dicen que son como demonios. Se cree que al temer sobre el poder que tienen vamos a cuidar de no hacerlos enojar. Les presentamos nueve de ellos, que son aquellos que pueden conocer y disfrutar un poco más visitando el Museo del Hombre Chaqueño, porque su fundador Ertivio Acosta investigó y dio a conocer las características de estos seres especiales en la pro- vincia del Chaco. ¿Quiénes son los guaraníes? 04 - Mitología Guaraní Es uno de los duendes más viejos y malvados del mundo gua- raní. Su nombre significa “cuero de sapo”. Tiene un cuerpo deforme y puede cambiar de apariencia. Di- cen que posee una fuerza muy poderosa y suele estar armado con un hacha de piedra. Vive escondido en huecos de troncos en medio de la selva o del monte. Algunos dicen que persigue a todos los que depredan y des- truyen la selva, y otros creen que es un protector de los enamo- rados y de las embarazadas. Pero también lo acusan de ser muy enamoradizo y perseguir a las chicas solteras y bonitas. KURUPÍ o cuero de sapo 06 - Mitología Guaraní Kurupí o cuero de sapo ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 07 Es un duende que se hace parecido a un niño pequeño, pero en realidad es un anciano. Los que lo vieron cuentan que tiene el pelo de color rojizo y brillante y que lleva con él un bastoncito de oro que le da todo el poder. Le gusta asustar a los que andan de viaje y robarles miel o ta- baco, pero sobre todo atrapa a los niños, los invita a jugar con ri- sas, y si lo siguen seguro logra perderlos y alejarlos de los padres, porque pierden la memoria y no saben cómo regresar a su casa. YASHI YATERE o pedacito de luna 08 - Mitología Guaraní Yashi Yatere o pedacito de luna ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 09 Es un duende que anda a la siesta por el campo, el río, y las ciudades también. Es petiso, tiene una barba muy larga y una boca muy pequeña y usa un sombrero de paja muy grande para cuidarse del sol (un sombrerudo). Tiene un pie humano y otro que termina en pezuñas. Tiene una vara blanca, que es la que usa para cambiar las cosas. Se aparece a las personas que andan a la siesta cazando paja- ritos o lastimando a las plantas, o pescando mucho. Suelen es- cucharse primero sus silbidos, pero uno mira para todos lados y no ve a nadie... es el Pombero, que así empieza a perseguirte. Para que no se enoje, no hay que hacer ruido a la siesta, ni perseguir animales, ni pájaros ni peces. Tampoco le gusta que se diga su nombre con voz fuerte. Cuentan que le gustan mucho la miel, el tabaco y la caña, así que algunos para quedar bien con él si se van pescar o a cazar le llevan eso de regalo. POMBERO o señor de la siesta 10 - Mitología Guaraní Pombero o señor de la siesta ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 11 Es un Pombero al que cuando le gusta una chica hace de todo para enamorarla, sin importarle si es casada o soltera. Dicen que aunque es muy feo, puede convertirse por un rato en un mucha- cho muy apuesto y con dinero. Las chicas que se dejan atrapar serán sus novias y no podrán li- brarse de su encantamiento. Ni los padres ni los maridos de esas chicas pueden atraparlo porque usa en la patas botitas hechas de cuero con lana de oveja para que no lo escuchen ni llegar ni irse... por eso dicen “Cuidado con el pata de lana, que te puede robar la novia”. PATA DE LANA otra versión del Pombero 12 - Mitología Guaraní Pata de Lana otra versión del pombero ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 13 Es otra forma de Pombero. Es de muy baja estatura y lo que se ve es un gran sombrero de paja, pero no se sabe qué hay debajo porque el sombrero cubre casi todo el cuerpo. Se ven las piernas, que no terminan en pies sino en dos talones encontrados. Esto lo ayuda a acercarse y escaparse después de hacer sus picardías, sacando comida a los viajeros o asustando a los desprevenidos. Como al mirar sus huellas no se sabe de dónde viene o hacia dónde se fue, nadie puede seguirlo. TALÓN YOBAY otra versión del Pombero 14 - Mitología Guaraní Talón Yobay otra versión del pombero ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 15 Dicen que es parecido al Pombero. Es como un viejito petiso, fortachón y con la panza cubierta de pelos. Tiene también mu- cha barba y un sombrero enorme. Se lo conoce como el Señor de la Miseria. ¿Saben por qué? Porque sale todos los 1º de octubre a recorrer las casas y ver quiénes tienen suficiente comida. Es un duende inspector que va mirando si la gente sembró y trabajó durante el año y supo guardar para los meses en que no hay cosecha. Ese día, al pa- sar por las casas, debe ver que hay suficiente comida hasta para convidar a los vecinos. A quienes no cuidaron los castiga con miseria hasta fin de año, y a los que tienen para convidar los premia con abundancias. KARAÍ OCTUBRE o señor de la miseria 16 - Mitología Guaraní Karaí Octubre o señor de la miseria ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 17 No tiene forma humana. Es el cuidador de los animales del monte o la selva. Puede aparece en el monte con la forma de perro o de cerdo. También a veces aparece con forma de tronco de árbol con par- tes humanas: brazos y muchos ojos. No le gusta que los cazadores atrapen animales sin cuidarlos. Cuentan que los persigue y los confunde, los marea hasta que se desmayan y logra así que los animales se pongan a salvo.Si su enojo es muy grande puede llegar a echar fuego por la boca, o se come la gente si está muy enojado. CAÁ PORA que significa Espíritu del monte 18 - Mitología Guaraní Caá Pora o espíritu del monte ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 19 Es otro de los cuidadores de la naturaleza. Puede tomar la forma de un pájaro rojo brillante. Cuando vuela, desde sus alas lanza colores brillantes como el arco iris. Esa luz encandila a las personas y las aturde. Cuando baja a la tierra toma algunos rasgos de un hombre alto y delgado, manteniendo su enorme pico. Suele aparecer durante la siesta. También usa un sombrero de paja y en su mano derecha una larga caña que le da poder. KUARAHÍ YARA o duende del sol 20 - Mitología Guaraní Kuarahí Yara o duende del sol ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 21 La creencia en que el hombre se puede transformar en lobizón llega desde Europa. Cuenta que el séptimo hijo varón, los martes y viernes de luna llena busca un lugar solitario para convertirse en perro flaco y alto que recorre los cementerios y zonas cercanas dando aullidos, asustando y lastimando a la gente y a los perros que se acercan. Se lo puede ahuyentar mostrándole una cruz y echándole agua bendita. Para librarse de él hay que matarlo, pero esto solo se logra tirándole con balas bendecidas. LOBIZÓN u hombre lobo 22 - Mitología Guaraní Lobizón u hombre lobo ilus. Freddy Filete Mitología Guaraní - 23