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LITERATURA HISPANOAMERICANA: HERRAMIENTA DE ACERCAMIENTO CULTURAL EN LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL COMO LENGUA EXTRANJERA ROSALIE SUMAN E IVONNE LERNER Una mirada restrospectiva al estudio de lenguas extranjeras nos revela que, mucho tiempo atrás, el objetivo de aprender un idioma extranjero consistía en que el alumno fuera capaz de leer las grandes obras de la literatura de la len- gua en cuestión en su idioma original. Más adelante, cuando el audiolingualis- mo se volvió dominante, la literatura fue extraída del programa de estudios de lenguas extranjeras pues se la consideraba superflua en el proceso de la adqui- sición de un idioma. Actualmente, con la preeminencia de las posturas comunicativas, continúa la polémica en cuanto al uso o no de la literatura en la clase de idiomas. Conviene examinar los argumentos en contra y a favor de la inclusión de la literatura en el curriculum. En primer lugar, se sostiene que, como el principal objetivo del profesor es enseñar la gramática del idioma, la literatura contribu- ye de modo muy limitado al cumplimiento del mismo debido a su complejidad estructural y al uso particular que hace del lenguaje. Pero, de hecho, la litera- tura es un medio ideal para desarrollar la conciencia y la apreciación del uso del lenguaje en sus distintas manifestaciones, ya que aquélla presenta el len- guaje en un contexto auténtico, en registros y dialectos variados, encuadrado dentro de un marco social [McKay 1982]. En segundo lugar, se argumenta que el estudio de la literatura escasamente ayudará a los alumnos a alcanzar sus objetivos profesionales o académicos. En realidad, si los textos literarios son bien elegidos, pueden despertar en los alumnos la motivación para leer e incluso mejorar sus destrezas de compren- sión lectora, elementos que, definitivamente, contribuirán a su desempeño como lectores de todo tipo de textos [ibíd.]. Por último, se afirma que la literatura refleja una perspectiva cultural deter- minada, lo que podría resultar demasiado complejo para los estudiantes. Sin embargo, la inmersión en una cultura extranjera a través de la literatura puede aumentar la comprensión que los estudiantes tienen de la misma [ibíd.] y ayu- darles a desarrollar una "conciencia cultural" más amplia que les permita apro- ximarse a cualquier tipo de texto e identificar y captar pistas que remitan a un •227- ROSALIE SITMAN E IVONNE LERNER marco cultural diferente al suyo. Todo esto también contribuye a estimular la imaginación e incluso puede llevar a la creación de textos propios. En resumen, el reconocimiento de la importancia del contexto y del estímulo lingüístico y cultural auténtico ha llevado a muchos profesores de idiomas a revalorizar el papel de la literatura en la enseñanza de lenguas, y a considerarla como un recurso sumamente rico para sus estudiantes. En esta comunicación nos proponemos destacar el potencial del texto literario en la clase de ELE, ya sean sus objetivos comunicativos o académicos. Abordamos el estudio de la literatu- ra en relación a sus dos componentes básicos: la forma (estructura de la obra, procedimientos y recursos expresivos, sintaxis y léxico) y el contenido (núcleos temáticos engarzados con alusiones y elementos culturales explícitos e implíci- tos). Subrayamos la doble importancia del contenido de la obra como herra- mienta de acercamiento cultural y, al mismo tiempo, como vehículo para el desa- rrollo de la interlengua. Es decir, el texto literario funciona como estímulo que incita al lector a usar la lengua meta para explorar, descifrar e interpretar el con- tenido y las estructuras lingüísticas del mismo, evitándose así el vacío temático y la ejercitación del idioma en contextos artificiales. Por lo demás, si bien en los últimos años se ha escrito bastante acerca de la inclusión de la literatura en la clase de idiomas (en gran medida con respecto al inglés y menos en relación al español), reiteramos que, a nuestro parecer, no se la ha enfocado suficientemente desde la perspectiva de la enseñanza del español como lengua extranjera. Existe cierta diferencia entre incluir la litera- tura en la enseñanza de una segunda lengua o de una lengua extranjera. En el primer caso, tomando en cuenta que la literatura refleja la cultura nacional, la lectura de obras literarias escritas por autores del país donde los alumnos extranjeros están estudiando el idioma puede familiarizarlos con los valores estéticos, morales y espirituales del país, así como con la reglas de su sistema social [Spack 1985]. Es decir, puede llevarlos a una mayor comprensión de la cultura en la que fueron producidos los textos literarios. En cambio, en el caso de una lengua extranjera -y del español más especí- ficamente-, el referente cultural se amplía de manera significativa puesto que se trata del ámbito hispanoamericano en su totalidad. Prueba de ello es el hecho de que América Latina y su literatura están apareciendo cada vez más en los manuales de estudio de ELE (por ejemplo, en Intercambio 1 y 2 y en Ven 1, 2 y 3), tal como señalara Dolores Soler-Espiauba en su ponencia en el Congreso de ÁSELE en 1993. Estando este mundo hispanoamericano "com- puesto por un verdadero mosaico de dialectos y subculturas" [Martínez-Vidal 1993, 82], y siendo la lengua española patrimonio de tantos países y pueblos [ibíd.], la literatura como recurso se vuelve mucho más útil pues, dadas las cir- •228- LITERATURA HISPANOAMERICANA: HERRAMIENTA DE ACERCAMIENTO... cunstancias, el profesor de ELE se convierte tanto en un mediador idiomático como cultural, y no solamente de un país, sino que se desempeña como una suerte de "embajador" del mundo hispanoamericano en general. El texto como estímulo literario. El texto literario difiere de textos informativos o expositivos al crear un mundo de contenido propio, una realidad distinta, un ámbito sensorial y afec- tivo que involucra al lector en una experiencia directa y arranca de él una res- puesta que puede ser emocional e intelectual a la vez, en ocasiones incluso física. Al mismo tiempo, se trata de una obra con una alta carga cultural [Gajdusek 1988] pues, en tanto el texto transmite valores humanos universa- les, comunica otros propios de la cultura a la cual pertenece. Aquí yace el atractivo para el estudiante de idiomas extranjeros: aun careciendo de una buena competencia lingüística, éste tiene el placer de distinguir en el texto valores que le son conocidos, con los que puede identificarse, de tal modo que no se siente abrumado ante la presencia de tantos otros que no compren- de por ser típicos de la cultura de la lengua meta y que hasta pueden pasarle desapercibidos. Es en este momento que el profesor asume su papel de mediador cultural e interviene para explicitar todos aquellos detalles, tan obvios para un lector nativo, y también desmenuzar las estructuras sintácti- cas y léxicas que hayqn resultado difíciles. Al efectuarse este acercamiento cultural a través de la comprensión de un texto en la lengua meta, vemos rea- lizado uno de los cometidos del aprendizaje de idiomas extranjeros. Se trata, entonces, de un proceso interactivo entre el lector y el texto, mediatizado por el profesor. El texto literario como vehículo. La selección de textos literarios adecuados para la clase de idiomas es un elemento clave pues determinará en gran medida la explotación pedagógica de los mismos y también los beneficios que se han de derivar del uso de la litera- tura como vehículo para el aprendizaje de lenguas extranjeras. Siendo, en la mayoría de los casos, el profesor quien elige los textos, el proceso es indiscu- tiblemente subjetivo, pero de todas maneras es posible identificar ciertas pau- tas generales que sirvan de guía en la selección. En ningún momento debe per- derse de vista quién es el público receptor, cuyas preferencias por fuerza han de variar de país en país. El profesor debe estar consciente de esto y ser lo sufi- cientemente flexible para ajustar su selección en la medida que le sea posible a los gustos locales. Almismo tiempo, la selección de textos ha de ser repre- sentativa de distintas tendencias y géneros literarios en la lengua meta y ofre- •229- ROSALIE SITMAN E IVONNE LERNER cer un panorama lo más amplio posible en cuanto a variedad regional, temáti- ca, dialectal, estilística y cultural. Por último, pero no menos importante, el profesor debe escoger textos con los que se sienta cómodo y que sirvan de pro- pulsor de ricas y variadas discusiones en clase. Está de más señalar que la con- dición sine qua non para implementar la literatura en la clase de idiomas es que por lo menos al profesor, si no a los estudiantes, le guste leer. En nuestra opinión, el género del cuento corto es uno de los que más se pres- ta para la explotación en la clase de idiomas, principalmente por su brevedad, la cual no desalienta al estudiante, quien ya tiene que lidiar con un texto en una len- gua extranjera. Por otra parte, la trama pica la curiosidad del alumno y le ayuda a sobrellevar escollos estructurales o dificultades de léxico, asegurando por lo menos una comprensión parcial del relato. En tercer lugar, por virtud de constituir una unidad independiente, el cuento corto invita a una segunda lectura, lo que per- mite apreciar sutilezas de lenguaje y de significado que quizás pasaron desaper- cibidas en una primera lectura [CoUie y Slater 1987]. Por último, el cuento corto ofrece una mayor variedad temática y estilística que las novelas por ejemplo, de modo que el profesor siempre podrá encontrar algo que enseñar y que atraiga o interese a sus alumnos (por ello es importante, dentro de lo posible, escoger cuen- tos con una apertura cautivante [Spack 1985]). Más importante aún es la sensación de logro que experimenta el estudian- te, y no menos el profesor, por haber comenzado, terminado, comprendido e incluso disfrutado de un texto literario en la lengua meta. También pequeños poemas, rimas, especialmente para niños, cartas y biografías cortas, al igual que ciertas piezas dramáticas, han obtenido buenos resultados en la clase de idiomas extranjeros. El mundo hispanoamericano en la clase de ELE. Como mencionáramos anteriormente, "la lengua que enseñamos no es el patrimonio de un solo país sino de muchos" [Martínez-Vidal 1993, 82] y por ello, al seleccionar los textos literarios a trabajar con los estudiantes, procura- mos no descuidar a ninguno de los integrantes del mosaico lingüístico-cultural hispanoamericano e intentamos cubrir la mayor gama posible de textos de dis- tintos autores procedentes de diferentes países de habla hispana: América Latina y España. Esto nos permite desvelar a ojos del estudiante de ELE el heterogéneo y variado mundo hispanoamericano a través de su literatura. De este modo, el estudiante se ve expuesto a diversas variedades dialecta- les, distintos registros, diferencias léxicas y sintácticas regionales, particulari- dades idiosincráticas, todo un repertorio surgido de una herencia cultural .230- LITERATURA HISPANOAMERICANA: HERRAMIENTA DE ACERCAMIENTO... común que comprende lo hispano y lo indígena a la vez. Al explicitarle esta heterogeneidad al estudiante, contribuimos -esperamos- a disolver el prejuicio tan difundido que considera al mundo hispanoparlante como un bloque homo- géneo. Insistimos, se trata de demostrar la relación dialéctica entre los distin- tos caminos que han adoptado los países de Hispanoamérica a partir de una misma raíz histórico-cultural común, que les sigue uniendo y, en gran medida, continúa gravitando sobre su identidad a pesar de la diversidad. Nuestro público. En líneas generales, los estudiantes israelíes de español manifiestan de antemano una cierta inclinación por la cultura hispanoamericana. A esto con- tribuye el hecho de que hay muchas obras literarias en lengua española que se han traducido al hebreo, prueba del interés por ese mundo cultural en la socie- dad en general. Más aún, pueden observarse afinidades de idiosincrasia entré el israelí y el hispanoamericano, cosa que no sucede con el anglosajón, por ejemplo. A nuestro parecer, todo esto incita un mayor interés por la literatura y justifica, una vez más, el uso de la misma en los cursos de español. Por últi- mo, el perfil multiétnico del país determina que el estudiante esté más predis- puesto a aceptar y a apreciar el valor de culturas diferentes a la suya. Conclusión. Para resumir, reiteramos que la enseñanza de idiomas extranjeros a través de la literatura en la lengua meta constituye, ante todo, un proceso interactivo de comunicación (entre el autor, el texto, el lector y el profesor como media- dor) que puede contribuir al desarrollo de la interlengua y asimismo conducir al acercamiento cultural. Si partimos desde la premisa que la enseñanza de la literatura es funda- mentalmente un estudio del uso y manejo del lenguaje, podemos concluir que el aprendizaje del lenguaje y la literatura son dos aspectos de una misma acti- vidad, la cual, por naturaleza, es esencialmente comparativa: a) cómo el sis- tema lingüístico funciona para la comunicación en general; b) cómo se emplea el mismo en distintas manifestaciones del discurso literario para trans- mitir y comunicar un significado [Widdowson 1975]. Hemos comprobado que el texto sirve de estímulo y vehículo para enseñar y practicar las estruc- turas y el léxico del idioma en un contexto auténtico y variado, y para apren- der cómo este lenguaje -en nuestro caso el español- es hábilmente empleado, manipulado, maniobrado, por distintos autores para comunicar mensajes y explorar y expresar realidades diferentes, característicos de sus culturas [Widdowson 1975]. •231- ROSAUE SITMAN E IVONNE LERNER Se trata, pues, de un proceso conjunto de exploración, identificación, negocia- ción, interpretación, descubrimiento, aplicación, goce y continuación. Profesores y alumnos, juntos y por separado, explorando los textos, identificando símbolos, grafías, sonidos, vocablos familiares o negociando escollos contextúales, sintácti- cos o léxicos; interpretando el significado y la función de cada elemento dentro del contexto, descubriendo nuevos horizontes y descartando viejas o equivocadas preconcepciones; aplicando también el uso de las estructuras y vocablos aprendi- dos, pero, sobre todo, enriqueciéndose compartiendo el goce de la lectura y sabo- reando el triunfo que experimentamos al comprender, ya sea parcialmente, textos de otra cultura, con y gracias a la lengua meta. No proponemos aquí la enseñanza de la literatura como tal en la clase de lenguas extranjeras; el foco de la instrucción en la clase de idiomas debe cen- trarse en cómo el lenguaje escrito es usado para explorar y comunicar signi- ficado y, más específicamente para nosotros, cómo las estructuras sintácticas y el léxico del español son usados para la comunicación. Si bien la interpre- tación del significado dependerá en gran medida del lector y el mundo cog- nitivo-afectivo que traiga consigo al proceso de la lectura, no cabe duda que la enseñanza de la literatura ayuda a desarrollar la capacidad de apreciar y responder al uso y manejo del idioma, tanto más si se lo emplea al mismo tiempo para discusiones en la clase o en asignaturas escritas. El estudiante aprende a pensar críticamente y a captar los distintos usos del lenguaje en textos diferentes con y gracias a la lengua meta. Más aún, la exploración de textos con lectores de otra cultura puede llevarles a desarrollar una "con- ciencia cultural" que a su vez les permita juzgar la nueva cultura en términos de la suya, es decir, un verdadero ejercicio de relatividad cultural [Gajdusek 1988]. En muchos casos, la enseñanza de idiomas como segunda lengua se lleva a cabo desde una perspectiva lingüístico-estilística o cultural exclusivamente [Widdowson 1975]. Nuestra gran ventaja como profesores de ELE es que, dadas las circunstancias (el hecho de encontrarnos precisamente en un país extranjero), podemos -quizás, incluso, debamos- integrar ambos propósitos para asegurar el mejor logro de nuestros objetivos: por un lado, enseñarcómo usar la lengua española para explorar y transmitir significado (perspectiva lin- güístico-estilística); por el otro, dar a conocer a los estudiantes distintos modos de encarar el mundo que caracterizan a las naciones y pueblos hispanohablan- tes (perspectiva cultural). De cualquier manera, los profesores de idiomas seguiremos aspirando a desarrollar y ampliar el repertorio lingüístico, intelec- tual y cultural de nuestros estudiantes; aquí hemos intentando presentar un posible modo de llevar esto a cabo. -232' LITERATURA HISPANOAMERICANA: HERRAMIENTA DE ACERCAMIENTO... BIBLIOGRAFÍA. COLLIE, J. Y S. SLATER, 1987, Literature in the Language Classroom, Cambridge, Cambridge University Press. 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