Hola! Tengo TLP. Las personas con TLP somos difíciles para todo el mundo, muchas de las características del trastorno nos convierten en personas muy difíciles de sobrellevar y no nos entienden ni nosotros los entendemos.
Como ya te dijeron, es raro que un TLP llegue a terapia por voluntad propia, entonces además de la personalidad especialmente difícil la persona seguramente no quiera cooperar. También hay muchísimos prejuicios, de que todos somos el estereotipo del peor borderline existente: que vamos a llamar a toda hora, que vamos a gritar y pelear, que vamos a insultar al terapeuta, que vamos a cuestionar todo y poner trabas a todo y demás. No siempre es así pero tampoco está tan lejos de la realidad.
Hay que aceptar que no es nuestra culpa tener esta preciosidad de trastorno, pero tampoco es la de los demás y aunque nos duela y sea injusto, no tienen obligación de quedarse con nosotros. Muchos borderlines se quedan solos porque no hay quien pueda lidiar con ellos. Es muy triste y muy cruel, pero la vida es así.
También está el mito de que el TLP es incurable o intratable.
Me parece mal que un médico psiquiatra o un psicólogo que se supone que está ahí porque eligió dedicar su vida a ayudar a los enfermos mentales le cierre la puerta a un paciente porque es difícil. Como profesional, me parece mal. Pero también son personas, y lo entiendo.
¿Respuesta corta? Creen que no tenemos arreglo y que somos demasiado problemáticos e insoportables.
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