Si los programas de equidad social involucran enseñar a pescar en lugar de regalar el pescado, no creo que nadie se oponga. A lo que muchos se oponen es a los programas que pretenden igualar quitando a los que sí saben pescar para regalar a los que no saben. Esta oposición tiene doble carácter. A nadie le gusta, incluyendo a quienes promueven esos programas de regalar pescados, que les quiten los pescados que son de su propiedad, que pescaron ellos mismos para dárselos a otros que no han pescado nunca y que no saben pescar. Por otro lado, el programa nunca funciona, no acaba con la pobreza sino que la multiplica. Ese mismo enfoque de regalar comida se conoce cuando se aplica a pájaros silvestres. Se les hace un daño irreparable porque pierden su capacidad natural de procurar por sí mismos su alimento, llegando a depender de otros para su alimentación, caso contrario SE MORIRÍAN DE HAMBRE. Los programas de equilibrio social que muchos predican es como dar a comer a los pájaros silvestres. Programas que no funcionan, nunca han funcionado y nunca funcionarán.
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