¿Existieron personas que le dejaron dinero en sus testamentos a celebridades?

Sí, Charles Bronson.
En 1999, una fan de Kentucky, que nunca había conocido a Bronson, le dejó toda su fortuna: $300 mil dólares. Los familiares pelearon esta cláusula del testamento en los tribunales de justicia.

¿Que pasó?

El documento fue escrito a mano y, los familiares, como suelen hacer en casos de este tipo, afirmaron que Audrey Knauer, la fan, no estaba en su sano juicio cuando lo hizo.

Knauer estaba obsesionada con Charles Bronson. Iba regularmente a la Biblioteca Pública de Louisville para pedir prestado material de lectura sobre el actor, y videos de sus películas que a menudo veía una y otra vez, especialmente la serie de películas Death Wish (Traducida como El Vengador Anónimo o El Justiciero de la Ciudad, según la región).

¿Qué pasó con el caso? Bueno, los familiares, que la fan odiaba, lo perdieron.

Charles Bronson recibió el dinero.

Al haberse cumplido el último deseo de la fan, Bronson donó el dinero a la biblioteca favorita de ella: la Biblioteca Pública de Louisville.

Me gustan las películas de Charles Bronson y me gusta el tipo de hombre que era.

Fue un héroe de la Segunda Guerra Mundial. Recibió un Corazón Púrpura por las heridas que recibió durante sus 25 misiones como artillero aéreo.

Fue uno de los pocos actores exitosos sin pretensiones y sin problemas sobre su profesión. En su trabajo como actor, aseguró:

"Llego al set filmográfico y simplemente hago mis líneas del guión, tal como quieren que lo haga".

Con esa gran actitud de trabajo simple y sin muchas complicaciones, se convirtió en el actor mejor pagado del planeta a principios de la década del 1970, recibiendo 1 millón de dólares por película sumado a un gran porcentaje bruto de ganancias por su imagen.

Después de una seria enfermedad, murió años más tarde, en el 2003 con 81 años, dejando una fortuna de $65 millones y, tal como el dinero dejado por su fan Audrey Knauer, éste también fue disputado en los tribunales por diversos familiares.

Siempre recordaré a Charles Bronson por una historia contada por Kurt Russell.

Russell comenzó su carrera como actor infantil, y coprotagonizó con Bronson la serie de televisión The Travels of Jaimie McPheeters[1], muy famosa de los años 1964-65.

Russell, de 12 años en la época, recordó que escuchó que pronto iba a ser el cumpleaños de Charlie, por lo que compró un avión a control remoto como regalo para el actor.

Cuando vio a Charlie el día de su cumpleaños, lo saludó con un "feliz cumpleaños" y le ofreció el regalo.

Dijo que Charlie pareció sorprendido, mirándolo a él y al suelo sucesivamente. Luego, sin aceptar su regalo, se alejó.

El elenco y el equipo de sus series de televisión, que presenciaron el incidente, inmediatamente se le acercaron a Russel para decirle: "Está bien, tranquilo…".

Después de un tiempo, le dijeron a Russell que Bronson lo estaba llamando a su habitación. Fue a verlo a Charlie y, con la cabeza bien baja, Bronson, un hombre que provenía de una familia muy muy pobre de un pueblo minero de Pensilvania, se disculpó y dijo:

"Nadie nunca me había dado un regalo antes".

Así es como siempre recordaré a Charles Bronson. No como el justiciero en Death Wish, ni como uno de los pistoleros en The Magnificent Seven, ni como ese duro detective de The Stone Killer. Ni siquiera como ese asesino a sueldo experto en The Mechanic, sino como un hombre asombrado al saber que alguien le estaba dando su primer regalo de cumpleaños.

Así es como lo recordaré, porque ese era el verdadero Charles Bronson.

Gracias por su lectura.

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