Te voy a dar un tip que me salvó a mí, pero requiere de cierta disciplina. Sé que en éste momento no tienes energía, porque te la robó toda el narcisista; pero invoca la poca que te queda y haz lo siguiente.
Compra un cuaderno y una pluma, déjalos a la mano. En cuanto te despiertes, antes de hacer cualquier otra cosa, siéntate 45 minutos y escribe en el cuaderno. No importa lo que escribas, lo importante es que escribas sin parar, a mano. No veas el celular.
Durante los primeros 45 minutos después de despertar, la mente consciente ó el ego no se han establecido todavía, sigue operando la mente inconsciente. Eventos que has reprimido, co-relaciones que no has visto y respuestas previamente ocultas salen a la luz.
No leas lo que escribiste hasta que hayan pasado por lo menos 2 meses. El chiste es "drenar" a la mente de pensamientos obsesivos, no tanto regresar a los textos. Pero cuando pasa el tiempo y por fin los lees, te sorprendes de la claridad que tienes realmente con respecto a lo que hay que hacer.
Yo lo comencé a hacer antes de terminar con mi ex. Lo primero que sucedió es que comencé a escribir pesadillas sobre él en las que le cortaba las patas a nuestra perra. Debido a eso decidí quedármela siendo que se la iba a dejar.
Después empecé a hacer inventarios larguísimos de las cosas que me había hecho pero que tenía bloqueadas. Pude ver mis recuerdos en una luz más clara, y mucho menos benevolente. Ya que ví los hechos no los pude des-ver. Salieron voces de mí que me suplicaban que lo terminara, que las protegiera de él. Decían que lo odiaban, era peligroso.
Los co-dependientes solemos necesitar que alguien nos escuche. Recupera el sentido de intimidad y misterio que seguramente te robaron de niña. No necesitas que el narcisista te escuche, no necesitas que sepa lo que vives, que sepa que lo amas o lo extrañas. Esa compulsión por ser escuchados y comprendidos nos mantiene amarrados a ellos. Él nunca te va a comprender, no te va a escuchar. Pregunta que quieres que te dé al querer llamarlo y date eso mismo tú.
Ah! y NO le cuentes a nadie que estás haciendo esto. El chiste es recuperar tu autonomía, ejercitar la costumbre de tener un diálogo interno y dejar poco a poco de buscar que alguien externo (en este caso el narcisista) te valide todo el tiempo.
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