A la muerte de Lotario, su hijo Luis III tuvo que enfrentarse a sus tíos Luis el Germánico y Carlos el Calvo, nuevamente unidos para repartirse el ...
A la muerte de Lotario, su hijo Luis III tuvo que enfrentarse a sus tíos Luis el Germánico y Carlos el Calvo, nuevamente unidos para repartirse el antiguo reino de Lotario (Tratado de Mersen). A la muerte de Luis II, Carlos el Calvo se hizo dueño de su reino, haciéndose proclamar Emperador de Roma (871) a excepción de Alemania. Logró retener los territorios del Imperio Carolingio pero, después de su muerte, su hijo Luis el Testarudo fue incapaz de mantener su poder, imponerse y declararse protector de la unidad cristiana en Occidente.
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