¿Se puede hacer turismo espacial?
Sí. Viajar el espacio ya no es cosa de astronautas. Existen numerosas iniciativas encaminadas a que personas (e...
¿Se puede hacer turismo espacial?
Sí. Viajar el espacio ya no es cosa de astronautas. Existen numerosas iniciativas encaminadas a que personas (eso sí, con un altísimo poder adquisitivo) puedan conseguir este sueño. El primero fue Dennis Tito, quien el 28 de abril de 2001, visitó la Estación Espacial Internacional, gracias al abono de 20 millones de dólares y un contrato firmado con la empresa holandesa MirCop. Pero no ha sido el único. Mark Shuttleworth, Gregory Olsen, Charles Simonyi y la estadounidense Anousheh Ansari, han sido otros viajeros espaciales. A partir de este mismo año, la empresa Virgin Galactic ofrece vuelos espaciales por unos 140.000 euros. Doce españoles han formalizado ya su reserva para realizar un vuelo suborbital y disfrutar de cuatro inolvidables minutos de ingravidez a 110 kilómetros de la Tierra. Lo harán a bordo del simulador SpaceShipTwo (SS2), que despegará del desierto de Mojave, en California (Estados Unidos), destino a la ingravidez. El viaje, que durará 45 minutos, se completará con la llegada de la nave a unos 15 kilómetros de altitud. Después, la SS2 se separará de la nave nodriza, la WhiteKnightTwo, y caerá al vacío hasta que se produzca la ignición del motor y la propulse hacia el espacio a la velocidad supersónica de 4.000 kilómetros por hora. En apenas un minuto y medio, la nave alcanzará una altitud de 110 kilómetros.
Compartir