El empleo en las lecturas de la lengua vulgar del país no era raro en la liturgia romana de los primeros tiempos. En el siglo IX los propagadores d...
El empleo en las lecturas de la lengua vulgar del país no era raro en la liturgia romana de los primeros tiempos. En el siglo IX los propagadores de la lengua eslava, los santos Cirilo y Metodio, emplearon en sus actividades misioneras en Moravia, una traducción en eslavo del evangelario latino -hecha por ellos mismos. En la misma Roma, por lo menos en ciertos días, las lecturas se hacían, en griego para la parte del pueblo que hablaba esta lengua, permaneciendo esta costumbre hasta el corazón de la edad media.
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