Las teorías objetivistas cometen el mismo error que el subjetivismo al exagerar los aspectos contrarios de la cuestión axiológica. Sostienen que lo...
Las teorías objetivistas cometen el mismo error que el subjetivismo al exagerar los aspectos contrarios de la cuestión axiológica. Sostienen que los valores existen con independencia de las personas y de los depositarios; son absolutos y, en consecuencia, no pueden cambiar con el paso del tiempo ni con las influencias sociales o psicofísicas. Pero las ideas centrales en las que se basan estas teorías no están sustentadas por la experiencia, como uno de los criterios de validación filosófica, lo cual constituye un elemento indiscutible de crítica (Garcés, 1988). De cualquier modo, las aportaciones de estas teorías, y en especial las de Scheler, han sido de gran utilidad en el ámbito de la pedagogía de los valores, y han constituido el punto de partida de otros estudios e investigaciones sobre el tema. Qué duda cabe que sus ideas sobre el absolutismo de determinados valores son una aportación fundamental que ha contribuido a sentar las bases del universalismo frente al relativismo.
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