La valoración de las condiciones hidromorfológicas de los ríos relativas al régimen de caudales, a la morfología del cauce y a las condiciones riparias permite conocer el grado de naturalidad o de alteración de los principales factores que determinan la calidad del hábitat fluvial y la composición y estructura de las comunidades biológicas. Esta valoración es indispensable para abordar la restauración del ecosistema fluvial.